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Jean Carlos Guzmán

Basado en los Santos Evangelios.

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1- Jesús de Nazaret
2- María joven
3- María Mayor
4- María Dolorosa
5- Arcángel Gabriel
6- Isabel
7- San José
8- Simeón
9- Jesús de 12 años.
10- Sacerdotes del templo (Varios)
11- Soldados del templo (serán 2)
12- Sacerdote 1
13- Sacerdote 2
14- Caifás
15- Nicodemo
16- Arimatea
17- Discípulos (12)
18- Pedro
19- Juan
20- Santiago
21- Judas
22- Centurión
23- Soldados romanos (Varios)
24- Pilatos
25- Lucius (Asistente romano)
26- Sirviente 1 de Pilatos
27- Sirviente 2 de Pilatos
28- Sirviente 1 de Herodes
29- Sirviente 2 de Herodes
30- Rey Herodes
31- Reina Herodías
32- Salome
33- Odaliscas (Bailarinas)
34- Barrabas
35- Verónica
36- Mujeres de Jerusalén (Varias)

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: Señoras y señores, no queremos que interpreten esta representación
como una simple obra de teatro. Este trabajo no es para detallar la vestimenta, las
expresiones, el escenario, sino para que en nuestro interior, meditemos seriamente
sobre nuestro comportamiento, con el prójimo y traer a memoria el compromiso con
el Cristo Salvador y la importancia de su madre la Virgen María. Para que podamos
recordar el sufrimiento de Cristo y a través de él el sufrimiento de nuestros
hermanos ya que muchos de ellos viven la cruz del dolor y dejamos que pasen ante
nuestros ojos y no hacemos nada por ellos. Recuerda que Jesús dijo todo lo que
hagas a uno de mis pequeñitos me lo hacéis a mí.

: Y el Padre Celestial desde su trono ideó el plan de salvación, enviar a su


propio hijo amado para borrar los pecados y la iniquidad de los hombres a través del
sacrificio del cordero. Así pues de una multitud de mujeres el Señor escogió una, la
más pura, la más virtuosa, la de corazón más limpio, a María de Nazaret.

Dios te salve María, llena eres de gracia el señor está contigo. Eres
bienaventurada entre dotas las mujeres. He aquí que darás a luz a un varón y le
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pondrás por nombre Jesús, el Dios que salva. Él vendrá para liberar a los hombres de la
esclavitud de sus abominaciones y de sus pecados.

: ¿Pero cómo puede ser posible? Soy doncella. ¡Ningún hombre me ha tocado!

El Espíritu Santo vendrá sobre ti María, y por medio de su poder concebirás la


esperanza de los hombres y el hijo que has de tener será llamado SANTO por todas las
naciones y será rey de reyes y su reino no tendrá fin. ¿Estás dispuesta María?

: Si ¡Yo soy la sierva del Señor!...que sus planes se cumplan en mi.

: ¡Bendita tu eres entre todas las mujeres! Y bendito será el fruto de tu vientre ¡JESÚS!

: ¡Shalom Isabel! La paz sea contigo y los tuyos.

Mujer. Bendita tus eres entre todas las mujeres y bendito


sea el fruto de tu vientre. ¿Por qué se me concede la gracia que la madre del elegido me
visite? desde el momento que tu saludo llego a mis oídos, la
criatura que está en mis entrañas saltó de alegría.

: Mi espíritu se alegra en Dios… mi rey y mi señor.

: Santo es su nombre y su misericordia es de generación en generación.

: Hizo grandes cosas con su mano.

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: destruyó a los soberbios y a los altivos.

: Quitó de los tronos a los poderoso.

Y exaltó a los humildes.

: A los hambrientos colmó de bienes.

: Y a los ricos dejó vacíos.

: Mi hijo Juan pronto nacerá.

: Y Jesús el mío después.

y Dios se hizo verbo y el verbo se hizo niño. hoy os ha


nacido en la ciudad de David un salvador. Que es Dios. Gloria a Dios en las Altura y
paz en la tierra a los hombres de buena voluntad.

: ¡Yo soy la sierva del Señor!...que sus planes se cumplan en mi. Consagro mi vida a
servirte Señor.

: Había por ese entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón; este


hombre era justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel, y el Espíritu Santo
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estaba con él, y le revelo que no moriría antes de ver al Cristo.

: Ahora, Señor, ya puedes dejar que tu siervo se muera en paz, según tu


palabra, porque mis ojos han visto tu salvación, la que has preparado ante la faz de
todos los pueblos, luz para revelación de los gentiles y gloria de tu pueblo, Israel.
Este es el rey de Israel.

Mujer. Y a ti te digo, una espada te atravesará el corazón, para que se


descubran los pensamientos de muchos corazones.

He aquí padre mío, que los cielos y los cielos


de los cielos no te pueden contener, cuánto menos esta casa que yo he edificado.
Pero, ¿morará verdaderamente Dios sobre la tierra? Si los cielos y los cielos de los
cielos no Te pueden contener, cuánto menos esta casa que yo he edificado. Y que
llevara tu nombre.

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: Jesús, hijo mío. ¿Por qué nos has hecho esto? Estábamos muy angustiados. Te
buscamos por todas partes.

Madre ¿Por qué me habéis buscado por todas partes? No


sabéis que en los asuntos de mi padre me conviene estar.

¿y que de tus promesas señor? Ya me hago viejo. ¿Verán mis ojos la


promesa que has hecho a tu pueblo Israel?

Cuando venga el rey mesías, llegará a la gran ciudad y subirá a lo alto del templo y
gritara: “Jerusalén tu cautiverio a terminado, el día de la libertad ha llegado, Israel
nacerá de nuevo”.

. Alégrate mucho,
hija de Sión; da voces de júbilo, hija de Jerusalén: he aquí, tu Rey vendrá a
ti, humilde y manso. Él es justo y humilde. Mirad he aquí que tu rey ha
llegado.

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(

): ¡Hosanna, Hosanna, Hosanna al hijo de David! ¡Bendito el que


viene en el nombre del Señor! ¡Hosanna, Hosanna, Hosanna.

: Bienvenido Señor. Bienvenido a Jerusalén.

: Bendito sea el descendiente de David.

¡Hosanna, Hosanna, Hosanna al hijo de David! ¡Bendito el que viene en el


nombre del Señor!

¿Con que autoridad o poder haces esto?

¿Quién te crees que eres Jesús? Ordena a esta multitud que calle.
Están cometiendo blasfemia y tú eres el responsable.

: de cierto de cierto te digo, que si estos benditos callan, las piedras gritaran
de alegría y de júbilo.

Ya basta. Silencio. Jesús, el pueblo está perdiendo la cabeza y tú eres


el culpable.

¿Cómo te atreves a manchar este santo lugar con tus herejías? Vete, sal
de aquí con tus mendigos y pecadores.

tú y tus discípulos han corrompido al pueblo con sus doctrinas,


predicas la traición y la sedición ¿Ahora pretendes deshonrar este santo templo? Sal
de aquí ahora mismo.

:(

: Ay de vosotros escribas y fariseos hipócritas todos, que cierran el reino de los

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cielos a los hombres, de forma que no entráis vosotros ni dejáis que otros entren.
Guías ciegos. Os coláis al mosquito, pero os tragáis al camello. Allá dentro, en el
templo os inclináis ante la letra de la ley y violáis el corazón mismo de la ley, se
olvidaron de la justicia, la misericordia y la buena fe. Todos ustedes fariseos, son
como sepulcros blanqueados, por fueran se muestran bellos y hermosos, pero por
dentro están llenos de huesos de muerto, y de toda suciedad. ¿Ves este templo? ¿Lo
veis acaso? Pues os digo que de él no quedara piedra sobre piedra. La vuestra es la
casa de la desolación, el hogar donde habitan los lagartos y las arañas. Serpientes,
generación de víboras. ¿Como podréis escapar del castigo del infierno?
aquí no volverán a verme, no hasta que aprendáis a decir, bendito el que
viene en el nombre del señor, ya que mi padre y yo somos uno y el mismo.

: (

Hermanos. Hermanos. Calma Silencio. Calma.


Ya Viene el sumo sacerdote.

Caifás. Te hemos llamado a esta asamblea


extraordinaria, porque tenemos que poner fin y dar solución definitiva a las herejías
de ese Jesús de Nazaret.

: ¿Cuáles son los cargos? ¿De qué se le acusa? ¿Acaso hay testigos?

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Caifás ese hombre sacrílego, hizo una entrada triunfal a Jerusalén y las
multitudes lo proclamaban como el rey mesías. Le permitimos predicar en las
sinagogas y en las plazas de todo el país. Después arrojo a los mercaderes del
templo y a los que venden las bestias del sacrifico y no hicimos nada.

: ¿Cuántas veces hemos protestado y nos hemos quejado por la presencia


de los mercaderes en los atrios del templo?

Ese blasfemo se proclama el mesías. El hijo de


Dios, deja que las multitudes lo saluden como el rey mesías y en ningún momento
Caifás, en ningún momento, ese impostor reconoció tu autoridad, ni mostro su
misión a los dignatarios de Israel.

: Debemos denunciarlo en nombre del pueblo de Israel.

no estoy seguro de que tengamos ese derecho. No olvidemos hermanos


los acontecimientos de no hace muchos años, cuando millones de nuestro
hermanos fueron clavados hasta en los muros de Jerusalén solo por saciar la sed de
sangre de los romanos. No creo que debamos entregar más víctimas a Poncio
Pilatos.

Caifás, es nuestro deber y por el bienestar de la nación, exterminar a


Jesús de Nazaret. Si sigue el alboroto y la intranquilidad los romanos acabaran con
nosotros. Jesús de Nazaret debe morir.

Pero no olvidemos hermanos, que por la ocupación Romana, tenemos


derecho a dar muerte a una cabra pero no a un hombre.

Entonces, debe ser hallado culpable por los romanos. Ellos deben
condenarlo a muerte.

: Pero Caifás. Ni siquiera nosotros lo hemos hallado culpable. No


podemos condenarlo sin que se celebre un juico ante los ancianos de Israel.

es verdad, no podemos entregar a uno de nuestros hermanos a los


romanos.

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: hermanos. Hermanos. Silencio. Estoy de acuerdo, daremos a ese Jesús de
Nazaret toda la oportunidad de defenderse. Después de la pascua hablare con él y lo
interrogare, quiero saber que hay en su corazón cuando se proclama rey de los
judíos y cuando dice que es el hijo de Dios.

De ninguna manera Caifás, debe ser apresado esta noche. No podemos


dejar que este mal siga contaminado a nuestro pueblo.

: Hermanos. Hermanos. Silencio. Me parece bien. Averiguad donde se


esconde el galileo con sus discípulos y traedlo esta noche ante mí. Pero en secreto,
con discreción y cautela. Vamos, marchaos ahora mismo.

: Faltaba muy poco para que empezara la fiesta de la Pascua, y Jesús


sabía que se acercaba el momento en que dejaría este mundo para ir a reunirse con
Dios, su Padre. Él siempre había amado a sus seguidores que estaban en el mundo, y
los amó de la misma manera hasta el fin. Cuando llegó el día de la fiesta de los
panes sin levadura, que es cuando se mata el cordero para la cena de la Pascua, Al
anochecer, Jesús y los doce discípulos fueron al salón. Cuando llegó la hora, Jesús y
sus discípulos se sentaron a la mesa.

: Shalom. La paz sea con ustedes. He deseado muchísimo comer con ustedes
en esta Pascua, antes de que yo sufra y muera y se cumpla mi propósito. Porque les
aseguro que ya no celebraré más esta cena, hasta el día en que comamos todos
juntos en el gran banquete del reino de Dios. Por esta pascua naci y vine al mundo.

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: Pedro, amigo mío, ven, acércate.

: Señor, no creo que tú debas lavarme los pies. Yo no soy digno.

Pedro, ahora no entiendes lo que estoy haciendo, pero después lo


entenderás.

: He dicho que no, nunca dejaré que me laves los pies!

lo siento Pedro, pero si no te lavo los pies, ya no podrás ser mi seguidor.

: Mi Señor, entonces no me laves solamente los pies, sino lávame también las
manos y la cabeza!

Hijo mío, el que está recién bañado está totalmente limpio, y no necesita
lavarse más que los pies. Y ustedes están limpios aunque no
todos. ¿Entienden ustedes lo que acabo de hacer?

Pues. Ustedes me llaman Maestro y Señor, y tienen razón, porque soy su


Maestro y su Señor. Ahora bien, aprendan esto de mi, debemos ser humildes y
sencillos. Pues si yo, su Señor y Maestro, les he lavado los pies, también ustedes
deben lavarse los pies unos a otros. Yo les he dado el ejemplo, para que ustedes
hagan lo mismo. Ustedes saben que ningún esclavo es más importante que su amo,
y que ningún mensajero es más importante que quien lo envía. Si entienden estas
cosas, háganlas, y así Dios los bendecirá. No estoy hablando de todos ustedes. Yo
sé a quiénes elegí. Pero tiene que cumplirse esto que las Escrituras han dicho de
mí “Aquel con quien compartía mi pan, se ha levantado en su contra”. Les digo esto,
desde ahora para que cuando suceda, ustedes crean que Yo Soy el que Soy.

: de verdad les digo, que uno de ustedes me va a entregar a mis enemigos.

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El que ha mojado su pan en el
mismo plato en que yo estoy comiendo, es el que va a traicionarme. La escritura
dice claramente que yo, el Hijo del hombre, tengo que morir. Sin embargo, al que me
traiciona le acontecerá algo muy terrible. ¡Más le valdría no haber nacido!

Maestro, ¿hablas de mí? Soy yo.

: Tú lo has dicho. Ve, apresúrate, lo que has de hacer hazlo pronto.

Maestro, aunque otros te traicionen, yo te defenderé, yo daré mi vida por ti.

Pedro, el diablo te ha pedido para estremecerte. He orado mucho por ti, para
que tengas fuerzas. Ciertamente te digo, que esta noche antes de que el gallo cante
tres veces, negaras tres veces que me conoces.

Maestro yo. Jamás ¡!!

Todos perderéis la fe. El pastor será herido y el rebaño será disperso. Por eso
debéis ser fuertes. Sentaos.

Bendito seas Señor, Dios nuestro. Que nos has dado tus
leyes y el pan que brota de la tierra. Mirad, este es el pan de la vida. Esta pascua
este pan representa para vosotros el paso de la muerte a la libertad de una nueva
vida. Yo soy el pan de vida, quien coma de este pan vivirá eternamente. Tomad y
comed todos de él, este es mi cuerpo, que por vosotros es entregado. Haced esto en
memoria de mí. Comedlo. Comedlo todos, ya que este es mi cuerpo.

Señor, esta copa representa la sangre del el nuevo pacto, de un nuevo inicio.
Esta es mi sangre. Tomad y bebed todos del él, esta es mi sangre, sangre del nuevo
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pacto que será derramada por muchos para el perdón de los pecados, desde ahora
no beberé más del fruto de la vid, hasta el día que lo beba de nuevo con vosotros en
el reino de mi padre en las bodas del cordero.

Un nuevo mandamiento os doy, que se amen unos a los otros así como yo los he
amado, nadie tiene un amor tan grande como un hombre que da la vida por sus
amigos. Y si os amáis unos a otros, todos los hombres sabrán que ustedes son mis
discípulos. Dad el ejemplo. Y den testimonio de mi con sus buenas acciones.

Padre, ha llegado la hora. Glorifica señor a tu hijo para que tu hijo te glorifique,
guarda padre a los me has dado y líbralos de todo mal, no te pido solo por ellos, sino
por aquellos que creerán en mi por medio de su testimonio. Hijos míos. Yo soy el
camino, la verdad y la vida Vámonos de aquí, que mi hora se acerca.

Querido Judas. Bienvenido. Gracias por atender a nuestro llamado.

¿Qué queréis de mí?

Al parecer tu eres el mas inteligente de los seguidores de Jesús. El más


letrado e instruido. Por el bien tu maestro, debes decirnos donde estará esta noche.
Queremos hablar con él. Si me lo dices, serás bien recompensado.

Que así sea maestro. Los llevare a su presencia.

Así me gusta querido Judas. Obediente, toma, recibe 30 piezas de


plata, como recompensa y claro nuestra gratitud. Ahora, guíanos ante él.

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Venid y ved.

esperad aquí y orad, permanezcan despiertos, para que no entren en


tentación. Pedro, Juan, Santiago, acompáñenme.

: esperan, velen y oren conmigo, para que no entren en tentación.

: Me muero de tristeza. Padre, padre mío, si es posible pasa de mi esta copa,


pero que se haga tu voluntad y no la mía, padre tú lo puedes todo, Líbrame de la
muerte. Pero que no sea lo que yo quiero, sino lo que tú quieres.

: levantaos y rezad conmigo.

Padre, padre mío, si es posible pasa de mí esta copa, pero que se haga tu
voluntad y no la mía.

: levantaos y rezad conmigo, por favor no me dejen solo, estén alertas.

: padre Ha llegado la hora. Si es posible pasa de mí esta copa, pero que se


haga tu voluntad y no la mía.

: Jesús, la voluntad de Dios se cumplirá, y sus escrituras también, la profecía


hoy se hará realidad. Tu vencerás el mal y vencerás sobre el pecado.

: Apártate de mi Satanás.

Maestro. Mi maestro

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señor, presentamos ante usted y su máxima autoridad al acusado, su
nombre: Jesús de Nazaret, proveniente de Galilea y capturado en el huerto de
Getsemaní.

hacedle entrar de inmediato.

Guardias. Traed al acusado.

Basta. Silencio. Jesús ¿Qué es todo esto que declaran en contra tuya?
Necesito que me expliques, cual es el significado de todas tus palabras.
¿No te defenderás? ¿Por qué no hablas como lo hacías ante las multitudes y
tus seguidores. ¿Donde están ellos ahora? ¿Qué era lo que le enseñabas?

Yo he hablado abiertamente al pueblo, he enseñado en la casa oración y en el


templo, en los lugares donde se reúnen todos los judíos. No he dicho nada en
secreto. ¿Por qué entonces me preguntas a mí? Pregúntaselo a los que me han
escuchado, pues ellos son mis testigos.

- Arrogante!! ¿Esa es la manera de contestar al sumo sacerdote? (

-Si he hablado mal dime en qué, pero si he hablado bien ¿porqué me pegas?
Cállate escoria. Que hablen los testigos.

Señor Caifás, Yo escuché decir a este hombre, que él puede destruir el


templo de Dios y reconstruirlo en tres días!

Este impostor hizo una entrada Triunfal a Jerusalén, haciéndose llamar el


mesías, el hijo de Dios.

Aún mas, curaba a los enfermos en sábado, violando el día de reposo.

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¿Y bien, no dirás nada. No piensas defenderte de estas acusaciones?

: Caifás, espera, Jesús es un hombre recto, todo lo que ha dicho está


basado en las santas escrituras. Ha hecho caridad y ha mostrado amor por los
pobres y necesitados.

: Es verdad Caifás, no condenes a Jesús. Piensa bien lo que vas a hacer,


este hombre traerá la paz a Israel.

la chusma se ha emocionado con las palabras de Jesús y por eso lo


han seguido. No podemos permitir que este mendigo asqueroso destruya las
enseñanzas de Moisés y los profetas.

Mátalo Caifás. Condénalo a muerte. Firma la sentencia de muerte.

: No Caifás. Este hombre es descendiente del linaje del rey David. No


puedes destruirlo. Déjalo vivir.

Silencio. Respóndeme. En el nombre de Jehová ¿Eres tu el Cristo,


el hijo de Dios, a quien llaman el Mesías, el Rey de los Judíos?
¡En el nombre del Dios
viviente! Te ordeno que me respondas ¿Eres tú el Mesías? El hijo de Dios.

Si. Tu lo has dicho, lo soy, y en adelante verán al hijo del hombre sentado a la
derecha del Dios Todopoderoso y viniendo sobre las nubes del cielo.

Blasfemia! Blasfemia! Ustedes mismos acaban de


oír estas palabras escandalosas ¿Para qué necesitamos más testigos? Jesús de
Nazaret. Estas condenado a muerte por el delito de blasfemia, según la Ley de
Moisés y de Israel.

¡Merece la muerte!

si, que muera, que muera el Nazareno.

: llévenlo ante el gobernador Poncio Pilatos. Para que dicte la sentencia final.

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el magnífico, el procurador, administrador de la justicia de roma en la
provincia de Judea el representante del Emperador de toda roma, su excelencia, el
Gobernador Poncio Pilatos.

Ave Cesar en Roma y Bienvenido Procurador a Jerusalén.

: Lucius, solicito que inmediatamente me presentes el informe


de la Provincia.

Como usted ordene Procurador.

Aquí esta su excelencia, es el informe mensual de toda la provincia.

: Bien, me contenta saber que todo marcha en orden.


Me retiro a mis Aposentos. El viaje ha sido muy largo y agotador. Estoy
muy cansado

: Pero ¿Qué escándalo es ese? Lucios ve a ver qué sucede.

: Enseguida Señor.

: Procurador, excelencia, Procurador. Solicito una audiencia de


inmediato. Procurador. Por favor.
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: ¿Qué ocurre? ¿Qué es lo que sucede?

: Necesitamos una audiencia con el procurador, le hemos traído a un


traidor, que está violando las leyes de nuestro templo.

: Procurador, los sacerdotes del Sanedrín solicitan


verte, te traen a un hombre que según ellos es un traidor.

: Esta bien. Que nación tan difícil de gobernar es


esta. Más les vale que sea importante. Centurión ordénales que los dejen pasar

Guardias, déjenlos pasar.

: Su excelencia, le hemos traído a este criminal, Jesús de


Nazaret, el hombre que ha blasfemado en contra la ley de Moisés.

-¿De qué acusan a este hombre? Acaso estoy yo para resolver sus problemas
religiosos?

-¡Pilatos, si no fuese un malhechor no lo habríamos traído ante Ti! Te lo


hemos traído para que le juzgues y lo condenes a muerte.

-¡Ya te he dicho que no me involucro con sus problemas religiosos, así que
vayan y júzguenlo según su Ley, no me meto en cosas de ustedes! Nada tengo que
ver con su religión.

-¡No tenemos autoridad para aplicar la pena de muerte!, pues es Roma


quien gobierna nuestra nación, no podemos decidir sobre este asunto procurador.

-¡Y qué es lo que ha hecho este hombre para merecer tal castigo!

-¡Hemos comprobado que es un agitador! Un blasfemo

¡Un agitador!; a mi me parece un pobre diablo! ¿Cómo pueden


tener miedo a alguien como Él? Se ve mas como un pordiosero que como un
subversivo.

-Señor gobernador, es amigo de pecadores y ladrones, y les prohíbe que


paguen los impuestos al Cesar y los ínsita a que se que se levanten en contra Roma.

-Además se proclama rey de Judea, enviado por Dios! Y eso es una


blasfemia y una traición a roma procurador.

- Dime, infeliz ¿Eres tú el rey de los Judíos?

-¿Esta pregunta viene de ti o repites lo que otros han dicho de mí?

-Los jefes de los sacerdotes te han entregado a mí ¿no sabes que está en
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mis manos condenarte o dejarte en libertad?, así que si aprecias tu vida colabora
conmigo y respóndeme ¿qué has hecho?

-Mi poder no procede de este mundo; si fuese rey como los de este mundo,
mis seguidores habrían luchado por mi libertad, pero mi reino no es de acá.

-entonces eres el rey?

-tu lo has dicho...Lo soy.

-Yo no veo delito en este hombre!, parece ser que es un pobre


delirante; como tantos locos.

Pero está alborotando al pueblo y difunde su doctrina por todo el país


desde Galilea a Jerusalén.

¿De Galilea has dicho?

Si señor, de Galilea.

Pues, si este hombre es Galileo no pertenece a mi Jurisdicción, llévenlo con


el Rey Herodes, él es quien gobierna esa parte del país. Vamos llévenlo ante el Rey
Herodes y que él se haga cargo,

Bienvenidos todos, esta es la corte del Rey Herodes. Y hoy es la fiesta de


su cumpleaños. Recibamos a la familia real.

: Esta noche estas más bella que de costumbre mi reina. Ese olor a jazmines
me enloquece, eres tan exótica como muna rosa de Jericó, despiertas en mi lo que a
veces creo que ya está muerto jajajajaja.

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que exagerado eres rey mío jajaja me arregle para ti y solo para ti. Mi
amado Rey. Hoy es un día muy especial para el reino, pues celebramos tu
cumpleaños. Y he aquí que te he traído un regalo muy especial. Un regalo que
apreciaras y sé que disfrutaras. Que entren las cortesanas. Que comience
la música.

Felicidades su Majestad. Eres tan poderoso rey mío. Sirviente, trae vino
para su majestad. Majestad, disfrute de este maravilloso vino, que es un regalo del
faraón de Egipto.

Música. Música para celebrar a nuestro Rey. Salome, Bailad, bailad para
nuestro señor, vamos desganad el suelo de tanto balar.

Silencio, silencio, paren la música, Jesús de


Nazaret, el Galileo esta aquí Pero
¿Qué esperas imbécil? Corre hazlo pasar apresúrate Ven mi reina,
arregla mi corona, quiero estar presentable para recibir al señor de los milagros.
Jajajajajaja.

Mas vino para su majestad

Su majestad he aquí que los dirigentes del Sanedrín traen


ante usted a Jesús de Nazaret, el Galileo.

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: ¿Que es lo que veo? ¿Este es el supuesto rey de Judea? jajajaja, Jesús el
poderoso hombre de los milagros. El que pretende quitarme mi trono real jajajaja
Vamos dime, ¿De donde viene ese poder que tienes? Pues no pareces un rey.
Contesta!!

: ¿Y puede tener un rey esas fachas? Parece un pordiosero, que asco,


por esas fachas solo parece un apestoso, es que no puedo ni verlo.

: Jesús, me han dicho mis informantes del reino que haces milagros. Yo
quiero ver uno aquí en mi palacio. Si de verdad eres quien dices ser, si eres rey y
tienes poder, vamos haz un milagro para mí.

: Sirviente, rápido. Traedme una copa con agua.

: si tienes poder, convierte el agua de esta copa en un en vino delicioso


para que yo beba (Le acerca la copa a la cara)
ah nada pasa, es agua, solo agua ¿Dónde esta tu poder mentiroso?

: Te daré otra oportunidad. Sirviente, traedme una roca

Vamos muéstrame ese poder que dices tener, ahora convierte esta roca en pan, da
de comer a los mendigos que te siguen nada pasa, no hay pan, ni vino, no
hay poder, no eres Rey, rey de los mendigos y lisiados, jajajajajaja no eres rey ni eres
nada. Vamos llévense a este mentiroso de mi palacio, sáquenlo de aquí. Regrésenlo
con Pilatos. Fuera, fuera.

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Solicitamos hablar de nuevo con el gobernador, Herodes no ha
condenado a Jesús, y exigimos que sea el poder de roma quien dicte la sentencia de
muerte.

Soldados, custodiad la entrada.

¿Qué hay? ¿Qué ocurre?

: Excelencia. Sucede que el rey Herodes te regresa a Jesús, no encontró


culpa en él.

: Pues yo tampoco le voy a condenar, pues hoy mismo le dejare libre.

: Señor, ese hombre es un alborotador, no lo dejes libre, es un sedicioso,


crucifícalo.

: ya he dicho que solo es un soñador y no ha cometido ningún delito.

y bien. Los dirigentes del sanedrín insisten en que eres un alborotador y que
has corrompido al pueblo, insisten es que te auto proclamas el rey de los judíos, yo
te pregunto de nuevo. Jesús ¿Eres tú el rey de los judíos.

: Lo soy, tu lo has dicho, para eso he nacido, para ser un rey y aún más, vine al
mundo para ser testigo de la verdad.

¿Y cuál es la verdad?

No, este hombre no es peligroso, no es un agitador, es solo un loco, un


lunático con aires de grandeza. Cuarenta azotes lo harán despertar de sus fantasías.
Guardias llévenselo y azotadle.

Guardias, apliquen el castigo de 40 azotes a Jesús de Nazaret.

: sí señor.

23
: saludos al rey poderoso jajajaja, vamos rey defiéndete libérate.

este es el rey, el poderosa

: saludos majestad.

alto rufianes, la orden era castigarlo y no matarlo. Déjenlo descansar

siéntate en tu trono rey jajajaja. El rey El rey debe llevar una capa, una capa
real y un cetro ahora su
majestad necesita una corona Coronemos al rey de Judea.
salve majestad, con esta corona te ves poderoso rey.

Ya basta. Bajad al prisionero a la prisión.

Pilatos. No estamos conforme con ese castigo. Mata a Jesús,


crucifícalo.

si. Crucifícalo. Crucifícalo.

Guardias sacad de nuevo al prisionero

Hecce hommo. He aquí al hombre.

Pilatos, si lo dejas libre no eres amigo del Emperador, Cesar te destituirá.

¿Quieren entonces que mate a su rey?

Nuestro único rey es el Cesar, emperador de Roma.

He tomado mi decisión, Como estamos en vísperas a la fiesta de la Pascua,


he decidido dejar en libertad a un reo, al que el pueblo elija, a ese liberare, y tenemos
dos prisioneros, a Barrabas acusado de dar muerte a un auxiliar romano y a Jesús de

24
Nazaret acusado de traición y de proclamarse rey de los judíos. Guardias traigan a
Barrabas.

-Que muera, que muera! Libera a Barrabas.

¿Debo matar yo a su rey?

-Que muera, que muera! Libera a Barrabas.

Pero ¿qué mal ha hecho este


hombre? No encontré nada en su asunto que mereciera la muerte... por eso lo
liberare.

: Pues bien. Aquí están los dos acusados. ¿A quién debo liberar a Barrabas o
a Jesús de Nazaret?

: Barrabas, libera a Barrabas.

-si dejas en libertad a Jesús no eres amigo del Cesar, porque todo el que
se proclama rey está en contra del Cesar.

Guardias, liberen a Barrabas.

¡Si!... sí viva Barrabas y muera Jesús.


!
-¿y qué hago entonces con Jesús?

-¡crucifícalo, crucifícalo!

Que quede escrito yo no me hago


responsable de la sangre que se va a derramar, que recaiga sobre ustedes y los hijos
de ustedes! Guardias, llévenselo y crucifíquenlo.

25
: Maestro, señor, perdóname, mis manos están machadas de sangre, perdón
Jesús, perdón.

Vamos, colocad los clavos.

-¿quién quiere quedarse con el traje real de su majestad? El Rey de los


Judíos

-¡yo quiero tener su manto!

-¿porqué no lo echamos a la suerte?

-¡eso!, tiremos los dados.

-Ya que salvó a otros, que se salve a si mismo, para ver si es el Cristo
de Dios, el elegido. Bájate de la cruz Jesús.

-Si tú dices ser el rey de los judíos, sálvate a ti mismo

-Si bajas de la cruz, creeremos en ti

¡Padre, Perdónalos porque no saben lo que hacen!

-¡Madre, Madre! ¿Dónde está mi madre?

-Hijo mío.

-Madre ahí tienes a tu hijo! Juan, ahí tienes a tu madre... cuida de ella...

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-tengo sed! Dios mío tengo sed

- Eli, Eli, lama sabac tani. ¡Padre. Padre!...Porqué me has


abandonado? Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. (y muere, hay un
estruendo, es un terremoto, todos gritan y se lamentan)

-Este hombre verdaderamente era hijo de Dios.

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