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Pontificia Universidad Católica del Ecuador

Facultad de Jurisprudencia
Comunicación Oral y Escritas

Andriey Zavala
05/06/2021

La Subjetividad del Desarrollo Económico

En economía, 2 términos cobran bastante trascendencia, el incremento y el desarrollo


económicos; el primero se refiere al crecimiento de la producción en una economía, y este podría
ser medido en términos de Producto Interno Bruto; el segundo término, objeto de este ensayo es
el desarrollo económico, esto hace referencia al crecimiento persistente de la calidad de vida
poblacional. Los dos conceptos tienen que laborar mancomunadamente con el propósito de
mejorar tanto económicamente como socialmente. Empero hay una gran inquietud en relación
con ello, y es que entra en juego otro termino y este es el capitalismo, que paralelamente lo sigue
un adjetivo “salvaje”, al capitalismo salvaje no le importa el sentir de los pueblos y el
sufrimiento de dichos, por esto las economías tienen que seguir hacia unas subjetividades que
procuren la paz de la sociedad. Sin embargo, además debemos comprender qué sentido tiene el
termino subjetividad, este se refiere a los anhelos, sentimientos, proyecciones de cada individuo,
y a convivir este en una sociedad, esta subjetividad se hace colectivo, sin embargo, un criterio
más claro nos lo da (Güell, 2012),
Subjetividad es aquel argumento de percepciones, aspiraciones, memorias, saberes y
sentimientos que nos empuja y nos brinda una orientación para actuar en el mundo. La
subjetividad social es un mismo argumento cuando es compartida por un colectivo. Esta
le da apertura para edificar sus relaciones, percibirse pluralmente y actuar colectivamente.
La subjetividad es un rasgo cultural imprescindible, pero es aquella parte que es
inseparable de las personas concretas. Por esto, es la parte más dinámica y débil de ella.
Hoy, cuando las culturas se fragmentan y se diversifican, la subjetividad individual y
colectiva sale como nunca a la superficie de la vida social y queda por lo mismo más
expuesta. (p.2)

El desarrollo económico nos lleva a pensar en confort, como para la persona como para el grupo
en sí mismo, entonces la paz es en escasas palabras, lograr sanear las necesidades simples y esas
que nos generen felicidad, y es que el termino felicidad es el más relevante, pues todos los
humanos, o la gran mayor parte viven año tras año, en averiguación de la tan anhelada felicidad.
A esto último puede sumarse el producido de que tengan la posibilidad de conjugarse los
términos desarrollo e incremento, ciertos piensan que dichos términos se han separado, para
(Razeto, 2001) el crecimiento, es decir el mercado ha tomado otra ruta al desarrollo:
Efectivamente, la teoría del desarrollo se dividió de la teoría del mercado, constituyendo
un cuerpo teórico aparte, porque la teoría del equilibrio general del mercado supone que
éste está constituido exclusivamente de in-ter-cambios entre oferentes, intermediarios y
demandantes, dejando afuera del análisis otras relaciones y flujos económicos en que
participan ampliamente los sectores público y solidario. (p.11)

Empero además estima la probabilidad de interrelacionar ambos puntos, sin embargo, para eso
habría que intentar por políticas públicas eficaces, el perfeccionamiento del consumo, del confort
social. Se necesita comprender que los individuos y sus vínculos sociales son el centro del
desarrollo, una vez que suplen las necesidades más primordiales, y gradualmente se optimización
la calidad de vida de las sociedades, puede decirse que el desarrollo está en funcionamiento.
La sociedad presente está cambiando su forma de tener relación, cada vez más, se hace
primordial saber el efecto de nuestras propias ocupaciones en las sociedades, atrás permanecen
quedado esos modelos de avance, donde se lucraban unos pocos y varios carecían de toda clase
de servicios básicos. Han progresado esos modelos de economía cooperativa, las empresas
mutuales, que buscan el beneficio común, donde los recursos se reparten de forma equitativa, en
donde lo cual prima es saciar las necesidades de todas las personas de la sociedad. Sumado a lo
antes descrito, creo es de gran importancia, nuevamente, la opinión de (Güell, 2012), cuando
establece que:
(…) entendemos el reto del desarrollo humanitario para el nuevo milenio como la
potenciación de la capacidad de reflexión, conversación y decisión de los sujetos sociales
respecto de sus propios vínculos y de sus vínculos con los sistemas. Esto para fortificar su
capacidad de amoldarlos y comandarlos, pues lo que importa finalmente es crear entornos
para la realización de las personas y para la profundización de sus vínculos. (p.13)
Referencias
Güell, P. (23 de noviembre de 2012). Subjetividad social: desafío para el nuevo siglo.
Polis(2), 2. Recuperado el 5 de junio de 2021, de
http://journals.openedition.org/polis/7853
Razeto, L (2001). Desarrollo económico y economía de solidaridad. Polis. Recuperado el
5 de junio de 2021, de http://journal.openedition.org/polis/8185

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