Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Como bien sabemos, la SCM es un modo de adquirir el dominio tan complejo como lleno de
ficciones, y el modo más abundante en regulación, al punto que tiene dedicado todo un libro
dentro del C. Civil.
1. Entonces, hay que empezar por saber qué es lo que un heredero o sucesor recibe del
causante.
En otras palabras, siendo la SCM un modo de adquirir el dominio (a.603, a.2398 C. Civil),
surge la pregunta... ¿qué clase de dominio se adquiere?
Esta es la principal incógnita y fuente de confusión, que por mucho dificulta la comprensión de
todo el subsistema de sucesiones y asuntos relacionados (administración, rendición de cuentas,
acciones protectoras, prescripción entre herederos).
Veamos…
2. El a.993 y a.996 del C. Civil dicen que el heredero sucede al causante a título universal.
3. Entonces, el heredero o cada uno de los varios herederos, sucede o es continuador por igual
de la totalidad de bienes, derechos y obligaciones que pertenecieron al causante (a.583, a.584,
a.594, a.595, a.596, a.597 C. Civil).
Pero no se tiene el dominio personal ni directo sobre cada uno de los bienes individualmente
considerados. Para llegar a eso, es necesario repartir los dichos bienes (a.1338 C. Civil).
Ello implica decir que los bienes que integran la sucesión, herencia o acervo hereditario no
pertenecen al o los herederos, hasta que no sean adjudicados o entregados a cada sucesor. Esto
es, los bienes de la sucesión pro indivisa le son ajenos a los herederos (a.1254, a.1360 inc.2 C.
Civil).
Precisamente, las sentencias de adjudicación en juicios divisorios y los actos legales de
partición son títulos translaticios del dominio (a.718 inc.4 C. Civil).
Luego, ese título ha de inscribirse para que se produzca la adquisición del dominio sobre los
bienes en cuestión (a.703 inc.3, a.704 n.3, a.1358 inc.1 C. Civil).
4. En este punto nos encontramos con otra ficción, pues si bien en cuanto tales los bienes del
acervo hereditario pro indiviso no pertenecían ni parcialmente al heredero hasta la adjudicación
(a.1359 C. Civil), y así lo ha ratificado la Corte (G.J. S.XIV, No.6 p.1405), el inciso primero
del a.1360 dice que una vez adjudicados los bienes, se entenderá que el heredero adjudicatario
recibió lo suyo de manos del difunto.
Eso porque cada (ex)heredero es sucesor del causante. Entonces, se entiende que aquel
“entregó” a su sucesor un bien viciado, y los (ex)herederos son sucesores en esa
responsabilidad. Otro “ajuste” del legislador para la funcionalidad del sistema.
Veamos, en resumen:
Sin mejora, la cuota es de $333.333 cada heredero ($1'000.000 de acervo imaginario para 3,
incluyendo el bien donado, como si estuviera aun dentro de la herencia).
Con la mejora a un heredero, la cuota es de $325.000 cada heredero, con uno de ellos
"recibiendo" $350.000 (bien donado en vida), esto es $325.000 (cuota) + $16.667 (imputable a
mejora)