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MATERIALES DE CONSTRUCCIÓN

1. Propiedades de los materiales de construcción.


Hablar de materiales de construcción es como entrar en un mundo lleno de
cosas geniales que se usan para construir todo tipo de cosas. Algunos de
estos materiales han estado con nosotros desde siempre, como las rocas
que son fuertes, la madera tan utilizada, y la cerámica que le da estilo a
todo. Pero ahora, también hemos recurrido a los materiales modernos,
como los plásticos y otros materiales con fibras que hacen que las
construcciones sean aún más completas.

¿Sabes que hay diferentes tipos de materiales?

Hay algunos que son como las rocas, como el granito (que es muy fuerte), y
el elegante mármol.
Luego están los que actúan como
pegamento, como el cemento y el
yeso, que mantienen todo unido.
También hay materiales que son una
mezcla de otros materiales, como el
hormigón y el asfalto, que se utilizan
en carreteras y edificios.
Y, por supuesto, no podemos olvidar
los ladrillos y los cristales bonitos,
que son cerámicos y vidrios, respectivamente, y le dan ese toque estético
especial a las construcciones.

Hay materiales muy fuertes, como el acero y el


aluminio que es ligero.
Otros son muy versátiles; los plásticos, como el
PVC y el poliuretano, que pueden ser moldeados
en muchas formas diferentes.
Y, por supuesto, están las maderas, como el pino
que es confiable, la haya que es elegante, y el
roble que es esencial en la construcción.
Cuando hablamos de cómo son estos materiales, hay cosas importantes a
tener en cuenta.

La densidad, la relación entre la masa y el volumen, es decir, el peso de un


material en comparación con lo grande que es.
Algunos son pesados, como el
acero, que es muy denso, y
otros son menos densos, como
el corcho y los plásticos.
También miramos si pueden
resistir la compresión o la
tracción. Algunos son súper
fuertes, como el vidrio que es
más resistente que el acero, aunque parezca increíble. Mientras tanto
otros no son tan resistentes, como el hormigón.

Pero no solo se trata de eso. También


pensamos en otras cosas cuando elegimos
estos materiales. ¿Son duros? ¿Pueden
aguantar contra la lluvia o productos de
limpieza? ¿Aislan bien el calor o el ruido?
¿Resisten al fuego? ¿Se queman fácil? ¿Cómo
se ven? ¿Brillan o tienen una textura
interesante? Todas estas cosas son como las
habilidades especiales de cada material cuando construimos algo. ¡Es como
elegir a los mejores jugadores de un equipo para construir algo increíble!

2. Materiales pétreos naturales. Rocas compactas y disgregadas.

Dentro del ámbito de la construcción, es esencial comprender la relevancia


de los materiales pétreos, divididos principalmente en dos categorías: las
rocas compactas y las rocas disgregadas.
Las rocas compactas, como sillares, mampuestos y adoquines, representan
bloques labrados de distintos tamaños y formas que desempeñan roles
específicos en la construcción. Por otro lado, las rocas disgregadas,
incluyendo arcillas y áridos, aportan fragmentos de piedra con
propiedades particulares, como la capacidad de absorber agua en el caso
de las arcillas o la utilización de áridos gruesos y finos para la elaboración
de materiales como mortero y hormigón.
Los materiales
pétreos, extraídos
de canteras en forma
de bloques o granos,
abarcan diversas
variedades. El
granito, una roca
dura y polivalente, se
emplea en la
construcción de
pavimentos y zócalos.
El mármol, con su
estructura cristalina y variados colores, encuentra aplicación en la
fabricación de baldosas y encimeras de cocina. La pizarra, conocida por su
dureza y estructura laminar, se utiliza en la construcción de tejados,
revestimientos y paredes.
En este conjunto, también se encuentra la piedra caliza, menos resistente
pero aún así valiosa en la construcción de muros y en la producción de
cemento. Los áridos, como la arena y la grava, desempeñan un papel crucial
en la elaboración de materiales como mortero, hormigón y asfalto, gracias
a su versatilidad en distintos grosores.
En resumen, estos materiales pétreos, extraídos y utilizados de diversas
formas, constituyen elementos fundamentales en la construcción,
aportando no solo resistencia y durabilidad, sino también una amplia gama
de aplicaciones funcionales y estéticas.

3. Materiales Aglutinantes.
Adentrándonos en el mundo de los materiales aglutinantes, nos
encontramos con sustancias que, al mezclarse con agua, adquieren una
consistencia pastosa y moldeable, solidificando con el tiempo y obteniendo
una notable rigidez. Su función principal radica en servir como medio de
unión entre otros materiales, y el proceso de solidificación al secarse se
denomina fraguado. Entre los aglutinantes más destacados se encuentran
el yeso, la cal y el cemento.
Comencemos por el yeso, un material obtenido a partir de piedras
naturales que, tras triturarse y convertirse en polvo, se cuece para
eliminar el agua que contiene. El yeso, resistente al fuego aunque corrosivo
para el hierro y el acero, presenta distintas variantes comerciales como el
yeso negro, utilizado para levantar tabiques, y el yeso blanco, empleado en
recubrimientos de paredes y techos. La escayola, la variedad más fina y de
alta calidad, se destina a la fabricación de molduras y revestimientos.
También existe la perliescayola, una mezcla de yeso y perlita, que ofrece
un acabado más duro, aislamiento térmico y acústico, y se utiliza en el
enlucido de paredes y techos.
Siguiendo con el cemento, este se obtiene
mediante la mezcla triturada y cocida de caliza y
arcilla, seguida de un proceso de molienda para
convertir la mezcla en un polvo fino. Los
cementos más comunes son del tipo Portland, y la
pasta de cemento y agua comienza a adquirir
consistencia a partir de las dos horas del inicio
del fraguado. Este proceso se extiende durante
28 días, alcanzando una resistencia cercana al
100%. Los cementos tipo Portland son versátiles,
fraguan y endurecen incluso bajo el agua, y se utilizan en morteros y
hormigones. Existen diversas variantes comerciales, desde los grises, los
más resistentes, hasta los blancos, utilizados principalmente como
material de acabado.
Finalmente, la cal, obtenida mediante la cocción de piedra caliza a
temperaturas superiores a 900 °C, se presenta en dos tipos: la cal aérea o
cal viva, que requiere añadir agua para su hidratación y se utiliza en
morteros mezclada con otros materiales, y la cal hidráulica, que contiene
un 5% de arcilla y tiene la propiedad de endurecerse en lugares húmedos o
bajo el agua. La cal hidráulica, ampliamente utilizada, encuentra aplicación
como pintura de exteriores en fachadas y muros.
4. Materiales compuestos.

Adentrándonos en la categoría de materiales compuestos, destacamos dos


elementos esenciales: el mortero y el hormigón.
El mortero, una mezcla cuidadosa de arena, agua y aglutinantes básicos
como cemento, cal o yeso, cumple un rol crucial en la unión de piezas de
construcción como ladrillos, bloques o azulejos, así como en el
revestimiento de paredes. Las proporciones y el tipo de aglutinante base
varían según el uso previsto. Por ejemplo, la combinación común de
cemento y arena se emplea en morteros, reduciendo la porosidad con una
proporción de arena significativamente mayor que la de aglutinante. La
preparación de mortero implica un proceso meticuloso, desde la formación
de una montaña con arena y cemento hasta la adición controlada de agua,
seguida de una mezcla uniforme con la paleta. Este material versátil se
utiliza en diversas aplicaciones de construcción.
Pasemos al hormigón, una mezcla de áridos, cemento y agua. La reacción
entre el cemento y el agua forma una pasta aglutinadora que envuelve
partículas de arena y grava, y con la humedad, el hormigón se endurece
con el tiempo. Este material es moldeable antes de fraguar, lo que permite
verterlo en moldes llamados encofrados. Ofrece resistencia a los
esfuerzos de compresión, siendo ideal para construcciones como columnas
y cimentaciones.
Existen diversos tipos
de hormigones, como el
en masa, armado y
celular. El hormigón
reforzado con fibras,
que incorpora fibras
de acero, poliméricas o de vidrio, mejora propiedades mecánicas o
resistencia ante el fuego y se emplea en fachadas exteriores o paneles
prefabricados.
Otros materiales compuestos incluyen el terrazo, formado por guijarros
de piedra aglomerados con cemento blanco, y el asfalto, una mezcla de
alquitrán y grava utilizado en pavimentos de carreteras y recubrimientos
impermeabilizantes de cubiertas. El asfalto puede enriquecerse con vidrio
reciclado o fibra de vidrio para mejorar sus propiedades. Estos materiales
compuestos demuestran la versatilidad y adaptabilidad requeridas en el
mundo de la construcción.

5. Materiales cerámicos.
Explorando el universo de los materiales cerámicos, nos sumergimos en
piezas fabricadas con arcilla moldeada y cocida en hornos. El proceso de
creación se divide en dos fases: mezclado y moldeo, donde máquinas
amasadoras combinan arcilla y agua, y cocción en hornos continuos, donde
el material circula a diferentes temperaturas para evitar agrietamientos y
roturas.
Entre los productos cerámicos destacan los ladrillos, piezas prismáticas
de arcilla cocida utilizadas en construcción. Los ladrillos finos, con
atractivo aspecto y color, encuentran aplicación en fachadas, mientras que
los ordinarios, más bastos, rugosos y de menor resistencia, se emplean en
paredes que luego se enyesan o
estucan. También se encuentran
los ladrillos refractarios, con
gran resistencia al calor, ideales
para calderas y chimeneas.
Las tejas, otra creación
cerámica, sirven para cubiertas
de edificios y pueden ser curvas,
planas o mixtas, con acabados
porosos o vitrificados en diversos colores. Las bovedillas, ya sean
cerámicas o de hormigón, desempeñan un papel crucial en la construcción
de forjados, aligerando el peso con amplios huecos.
Los azulejos, compuestos por dos capas de arcilla y esmalte vitrificado, se
someten a dos cocciones para lograr un acabado resistente al desgaste.
Por otro lado, el gres, mezcla de arcilla, cuarzo y feldespatos, se utiliza en
la fabricación de baldosas y tuberías, gracias a su resistencia al desgaste.
Destacando la loza sanitaria, elaborada con arcillas especiales y sometida
a tratamientos de vidriado y esmaltado, que proporcionan gran dureza.
Este tipo de cerámica se emplea en la fabricación de accesorios de baño.
En el proceso de fabricación de materiales cerámicos, desde el mezclado y
amasado hasta la cocción en hornos continuos, se revela su versatilidad y
resistencia a altas temperaturas, corrosión y agentes químicos,
destacando su papel esencial en la construcción y diseño de diversos
elementos arquitectónicos.

6. El vidrio.
Adentrándonos en el fascinante mundo del vidrio, este material se obtiene
mediante la fusión a unos 1500 °C de arena de sílice, álcalis (caliza y
carbonato sódico) y su posterior enfriamiento a temperatura ambiente.
Puede incorporar óxidos metálicos para color y estabilidad. Aunque
transparente o translúcido, impermeable y resistente a la mayoría de
agentes químicos, el vidrio es duro pero muy frágil.
La diversidad de tipos de vidrio incluye el vidrio impreso para decoración,
el vidrio armado con varillas metálicas, el vidrio de seguridad en
automoción y el vidrio refractario en utensilios de cocina. En construcción,
se utiliza principalmente como vidrio plano para ventanas y fachadas, como
lana de vidrio para
aislamiento térmico, y
como fibra de vidrio
en combinación con
resinas para
impermeabilización.
El vidrio plano se
produce mediante el
método de vidrio
flotado, fundiendo el
material en un horno a
unos 1500 °C,
vertiéndose sobre
estaño líquido para formar una lámina plana y homogénea. La superficie se
pule para eliminar imperfecciones, y la lámina se enfría gradualmente en
un horno de templado para evitar rupturas.
La lana de fibra de vidrio, utilizada como aislante térmico y acústico, se
obtiene al pasar finos hilos de vidrio fundido por un horno de aire frío,
uniendo las fibras con resinas formando un fieltro. Por otro lado, la fibra
de vidrio refuerza materiales plásticos (resinas) y se emplea en la
impermeabilización de piscinas y construcción de tanques, a veces
mezclada con fibra de carbono, requiriendo precauciones como el uso de
mascarillas durante su manipulación para evitar la inhalación de fibras
desprendidas.

7. Otros materiales (nuevos materiales).


Adentrándonos en el mundo de los plásticos en la construcción, se destaca
el PVC (Policloruro de vinilo), un termoplástico ampliamente utilizado. Con
una vida útil que oscila entre 50 y 100 años, el PVC posee buenas
propiedades mecánicas, baja inflamabilidad, resistencia a la humedad y a
los rayos ultravioletas, bajo peso y es fácilmente reciclable.
Este versátil material se emplea en diversos aspectos constructivos, como
tubos y accesorios para conducciones de agua y alcantarillado, marcos de
ventanas y puertas, así como suelos y revestimientos de fachadas. Además
del PVC, otros plásticos como la espuma de poliuretano y de poliestireno
extruido encuentran
aplicación en la
construcción, sirviendo
como selladores,
aislantes térmicos y
acústicos, o en
revestimientos de
suelos continuos.
En el amplio panorama
de materiales
empleados en
construcción, los metales también juegan un papel crucial. El acero,
presente en las armaduras de hormigón y utilizado en vigas, pilares y
armaduras de cubiertas, destaca en este contexto. El aluminio se emplea
en perfiles para marcos de puertas, ventanas, barandas y cerramientos,
mientras que el cobre encuentra aplicación en instalaciones de agua, gas y
calefacción.
Aunque en menor medida, las maderas aún son materiales habituales en
tejados, puertas, ventanas y recubrimientos de paredes y suelos.
Asimismo, el vidrio desempeña un papel esencial, utilizado en ventanas,
puertas, decoración y cerramientos, siendo obtenido a partir de la fusión
de una mezcla de sílice, sosa, cal y otras sustancias. En síntesis, la
diversidad de materiales utilizados en la construcción refleja la riqueza y
complejidad de este campo.

8. Construcción de edificios, fases.


La construcción de un edificio se desenvuelve en un proceso complejo que
abarca diversas fases y requiere la colaboración de numerosos
profesionales. Estas etapas se resumen en:

1. Preparación del terreno: Incluye operaciones como demolición,


desescombro y nivelación, llevadas a cabo con maquinaria pesada.
2. Cimentación: Implica la colocación de elementos como zapatas,
zampeados o pilotes, formando la base del edificio. Los componentes de la
cimentación, generalmente de hormigón armado, se sitúan bajo tierra.
3. Elevación de la estructura: Construcción de pilares y placas que
conforman las plantas del edificio. Si bien algunas estructuras son
metálicas, la mayoría se erige con hormigón armado.
4. Cubrimiento de aguas: Comprende la instalación de la cubierta del
edificio, cuyas características varían según el clima. En áreas con nevadas
frecuentes, se construyen con una fuerte inclinación. Los materiales
empleados incluyen tejas, losas de pizarra o planchas de cinc.
5. Colocación de pavimentos: Se colocan materiales como mármol, gres,
madera, etc., sobre la placa de cada planta del edificio.
6. Alzamiento de muros: Construcción de paredes y tabiques que cierran
y dividen las plantas del edificio. Pueden estar hechos con ladrillos
ordinarios recubiertos de diversos materiales, y los interiores pueden ser
paneles prefabricados.
7. Colocación de instalaciones: Se instalan sistemas para agua, gas,
electricidad, recepción de televisión y radio, climatización, aire
acondicionado y redes informáticas. Cada instalación es llevada a cabo por
equipos especializados.
8. Trabajos de acabado: En la fase final, el edificio se ajusta a su uso
definitivo (vivienda, oficinas, industria, etc.). Diferentes profesionales,
como albañiles, carpinteros y pintores, utilizan diversos materiales como
pinturas, maderas y materiales pétreos y cerámicos ornamentales. Este
proceso culmina en la preparación del edificio para su función específica.
9. Herramientas de construcción.
En las distintas fases de construcción de edificios, se llevan a cabo
movimientos de tierras, demoliciones, trabajos de albañilería, mediciones
y verificaciones, para lo cual se emplea una variada gama de herramientas.

Movimientos de tierras y remoción de escombros: Palas, carretillas y


capazos son utilizados en estas tareas.
Demoliciones: Herramientas de percusión,
como martillos y macetas, junto con herramientas de corte como picos,
punzones o buriles, son esenciales. Las herramientas de corte se clavan en
las estructuras a derribar y luego sirven como palancas para desprender
trozos de escombro.
Trabajos de albañilería: Paletas y paletines se emplean para levantar
paredes y muros, así como para amasar y manipular aglomerantes. En los
trabajos de enlucido y alisado de paredes y techos con recubrimientos de
yeso o escayola, se usan lanas y tratas.
Mediciones: Se realizan con metros y cintas métricas.
Verificaciones: Se llevan a cabo con escuadras, falsas escuadras y
compases. La horizontalidad de los suelos y la verticalidad de muros y
paredes se comprueban con plomadas, niveles de burbuja y gálibos. Estas
herramientas aseguran la precisión y calidad en cada etapa de
construcción.

10. Maquinaria de construcción.


En la ejecución de los diversos trabajos involucrados en la construcción de
edificios, se emplean distintas máquinas:
Excavación y movimientos de tierra:
Excavadoras y cargadoras son utilizadas para estas tareas.
Nivelación de terrenos: Se emplean bulldozers
y motoniveladoras. Posteriormente, el terreno se compacta con
apisonadoras, que comprimen el suelo mediante rodillos metálicos pesados.
Transporte de materiales: Camiones de gran
tonelaje y volquetes son utilizados para llevar los materiales.
Elevación de materiales: Se recurre a grúas,
cuya estructura básica incluye una torre
(estructura metálica vertical), una pluma (estructura metálica horizontal
que puede girar 360° y tener diversas longitudes) y un contrapeso
(estructura acoplada a la pluma en el extremo opuesto que sostiene la
carga elevada).
Preparación de morteros y hormigones: Se lleva a cabo con hormigoneras,
máquinas diseñadas para homogeneizar los materiales de manera eficiente.
Estas herramientas y máquinas desempeñan roles cruciales en cada etapa
de construcción, garantizando eficacia y precisión.

11. Representación gráfica en construcción.


En el proceso de construcción de edificaciones, cada obra se diseña y
proyecta mediante planos, dando forma y detalle a cada una de sus partes,
incluyendo vistas, secciones y esquemas.

1. Vistas y Secciones:
Las vistas en planta y secciones horizontales son empleadas en planos de
cimentación, detallando elementos de soporte y conexiones de
instalaciones.
En planos de distribución, se describen compartimentaciones internas,
ubicación de puertas, ventanas, mobiliario, etc.
Planos de situación representan la ubicación de la construcción y datos
para su localización.
2. Vistas de Alzado, Perfil y Secciones Verticales:
Planos de fachadas detallan aspectos exteriores.
Secciones verticales muestran dimensiones en altura y características de
elementos verticales, como escaleras.
3. Esquemas:
Representan instalaciones de agua, gas, electricidad, teléfono, etc.,
utilizando simbología normalizada.
Suelen situarse sobre planos, se dibujan a escala reducida y en formatos
grandes (A0 o A1).
Todos los elementos gráficos deben seguir normativas de normalización.
4. Aplicaciones CAD:
Herramientas informáticas CAD (Computer- Aided Design) se usan para
elaborar planos de distribución.
Estas aplicaciones disponen de bibliotecas con símbolos normalizados.
Facilitan la visualización y manipulación tridimensional de los objetos
dibujados.
Reducen el espacio requerido en estudios de diseño al eliminar la
necesidad de grandes archivos.
Es común el uso de programas de diseño en tres dimensiones en
publicidad, aunque en este caso, sus elementos de representación no
suelen estar normalizados.

12. Bibliografía.

● Libro de texto, tema 3.


● Archivos adjuntos a la tarea.

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