Las habilidades soft, también conocidas como habilidades blandas o competencias
transversales, se refieren a una serie de aptitudes personales, sociales y emocionales que influyen en la forma en que interactuamos con otros y afrontamos diversas situaciones. Estas habilidades son difíciles de medir objetivamente y no se centran en conocimientos técnicos o especializados. En cambio, están relacionadas con aspectos más subjetivos y se enfocan en el desarrollo de rasgos y cualidades que contribuyen al éxito personal y profesional. En resumen, las habilidades soft se definen como características y capacidades personales que engloban desde la empatía, la comunicación efectiva y la inteligencia emocional, hasta la resolución de problemas, la adaptabilidad, el trabajo en equipo y la capacidad de liderazgo, entre otros atributos fundamentales para prosperar en distintos ámbitos de la vida.
SELECCIÓN POR COMPETENCIAS
La selección por competencias es un enfoque en el proceso de contratación y
selección de personal que se basa en evaluar y valorar las habilidades, capacidades, conocimientos y comportamientos específicos que son relevantes y necesarios para el desempeño exitoso en un puesto de trabajo determinado. En lugar de centrarse únicamente en la experiencia laboral o la formación académica, este enfoque pone énfasis en las competencias individuales que son clave para alcanzar los objetivos y cumplir con las responsabilidades del cargo. En resumen, la selección por competencias busca identificar y elegir a los candidatos que poseen las habilidades y cualidades concretas requeridas para sobresalir en un puesto de trabajo, lo que aumenta las probabilidades de encontrar a los profesionales más adecuados y con mayor potencial para el éxito en la organización.