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Introducción

La génesis de los Estados Unidos, forjada en el fervor revolucionario, lleva la marca


indeleble de sus visionarios arquitectos: los Padres Fundadores. En esta exploración
académica se profundizará en las vidas de estas eminentes figuras y la relevancia e
impacto del capítulo 10 de “The Federalist Papers”

Al hablar sobre la revolución americana resulta imperativo desentrañar las capas de


pensamiento político entretejidas en los cimientos de Estados Unidos. Este capitulo es
un testimonio de la riqueza intelectual que impregnó el discurso en torno a la formación
de la República Americana.

Los objetivos de este trabajo académico son dobles. En primer lugar, se pretende
iluminar y las contribuciones de los Padres Fundadores, arrojando luz sobre los
fundamentos intelectuales de la Revolución Americana. En segundo lugar, se emprende
un análisis meticuloso de las profundas ideas encapsuladas en el capítulo 10,
discerniendo sus implicaciones en el panorama político de la época y su perdurable
relevancia en la gobernanza contemporánea.

Marco Teórico

El marco teórico de esta investigación se basa en la profunda comprensión de la vida y


legado de algunos de los más prominentes Padres Fundadores de los Estados Unidos.
Estos visionarios líderes desempeñaron roles fundamentales en la gestación y
consolidación de la nación, contribuyendo no solo en la lucha por la independencia, sino
también en la configuración de sus fundamentos políticos y sociales.

George Washington:
Líder Militar y Político: La figura de George Washington, el primer presidente de los
Estados Unidos, se destaca por su papel crucial en la Guerra de la Independencia y su
liderazgo en la Convención Constitucional de 1787.

Fundación Constitucional: Washington presidió la Convención Constitucional, donde se


forjó la Constitución de Estados Unidos, estableciendo los cimientos del gobierno
nacional.

John Adams:

Defensor de la Independencia: Como parte clave en la redacción de la Declaración de


Independencia, John Adams desempeñó un papel vital en los primeros años de la
República.

Polémicas Presidenciales: La presidencia de Adams, marcada por la aprobación de las


Leyes de Extranjería y Sedición, proporciona un terreno fértil para analizar las tensiones
políticas y las controversias en el incipiente gobierno estadounidense.

Thomas Jefferson:

Autor de la Declaración de Independencia: Jefferson, el tercer presidente, es reconocido


por ser el principal redactor de la Declaración de Independencia, personificando los
ideales de libertad e igualdad.

Desafíos Morales: La dualidad entre sus principios proclamados y la propiedad de


personas esclavizadas plantea preguntas cruciales sobre la complejidad moral de los
Padres Fundadores.

James Madison:
Padre de la Constitución: Madison, el cuarto presidente, desempeñó un papel central en
la redacción de la Constitución y la Carta de Derechos.

Desafíos en la Guerra de 1812: La presidencia de Madison se caracterizó por desafíos


como la Guerra de 1812, ofreciendo una perspectiva única sobre la construcción de la
identidad nacional en medio de conflictos.

Alexander Hamilton:

Arquitecto Financiero: Hamilton, padre fundador y primer Secretario del Tesoro, dejó
una marca indeleble en el sistema financiero de Estados Unidos, influyendo en su
desarrollo económico.

Defensor de la Constitución: Su participación en la redacción de los Federalist Papers


proporciona una visión clave de los argumentos a favor de la ratificación de la
Constitución.

Benjamin Franklin:

Polimatía y Contribuciones Fundacionales: Franklin, a través de sus contribuciones en


escritura, invención y ciencia, desempeñó un papel vital en la formación de la
Declaración de Independencia y la Constitución.

Compromiso Cívico: Su legado de curiosidad intelectual y compromiso cívico destaca la


importancia de la participación ciudadana en la construcción de una república sólida.

John Jay:
Negociador Diplomático: Jay, el primer presidente del Tribunal Supremo, fue un actor
clave en la negociación del Tratado de París de 1783, poniendo fin a la Guerra de la
Independencia.

Coautor de los Federalist Papers: Su participación en la redacción de los Federalist


Papers ofrece una perspectiva sobre los argumentos en favor de la nueva Constitución.

El periodo posterior a la Guerra de los Siete Años (1756-1763) marcó un punto de


inflexión en la relación entre Gran Bretaña y sus colonias americanas. La victoria
británica en el conflicto global otorgó a la metrópoli vastos territorios en Asia, África y
América. Sin embargo, esta expansión territorial también conllevó una carga financiera
significativa para el gobierno británico, al borde de la bancarrota con una deuda de 130
millones de libras.

Desafíos Financieros Post-Guerra:

Imperial Extensión y Bancarrota: La victoria en la Guerra de los Siete Años no solo


amplió el imperio británico sino que también dejó a la nación al borde de la quiebra. La
deuda acumulada y los costos de administrar las nuevas posesiones impusieron una
presión económica considerable al gobierno británico.

Plan de Ajuste y Control Colonial:

George Grenville y las Colonias Americanas: Para hacer frente a la crisis financiera, el
primer ministro George Grenville propuso un "plan de ajuste" que tenía como blanco
principal las colonias americanas, buscando fortalecer el control económico y político
sobre estas posesiones imperiales.
Leyes Fiscales y Control Económico:
Ley de Timbres (1765): Esta ley, que imponía gravámenes sobre sellos en documentos
legales y medios impresos, generó fuertes tensiones. En lugar de aumentar los
ingresos, la medida desencadenó la unificación de las colonias en su rechazo,
marcando el inicio de una resistencia coordinada.

Unificación de Colonias:

Respuesta a la Ley de Timbres: Representantes de nueve de las trece colonias se


reunieron en 1765, logrando la derogación de la Ley de Timbres. Este episodio
demostró la capacidad de las colonias para coordinarse y resistir medidas fiscales
impuestas por la metrópoli.
Protestas y Conflictos Posteriores:

Ley del Té (1773): La Ley del Té otorgó el monopolio de la venta de té en las colonias a
la Compañía Británica de las Indias Orientales, generando nuevas protestas. El "Boston
Tea Party" en 1773, donde colonos arrojaron cargamentos de té al mar, simbolizó la
resistencia a la imposición británica.

Represalias Británicas: La respuesta británica al "Boston Tea Party" fue un intento de


castigo ejemplar, aislando a la colonia rebelde. Este episodio acentuó las tensiones y
sentó las bases para un conflicto más amplio que culminaría en la Guerra de
Independencia de los Estados Unidos

El establecimiento y la evolución del gobierno constitucional en Estados Unidos


representan un capítulo fundamental en la historia global de los sistemas políticos. La
elaboración de la Constitución en el verano de 1787 marcó un momento transformador,
al introducir principios innovadores que han dejado una huella perdurable en las
naciones modernas. Este marco teórico pretende dilucidar los elementos clave y las
influencias que configuraron la creación de la Constitución estadounidense y sus
implicaciones posteriores.
Contexto histórico: Las secuelas de la Guerra de la Independencia

Preparando el escenario: La Guerra de la Independencia (1775-1783) contra el dominio


británico sentó las bases de las aspiraciones de autonomía y autogobierno de una
nación naciente.

Inadecuación de los Artículos de la Confederación: El intento inicial de gobierno


nacional a través de los Artículos de la Confederación reveló debilidades inherentes, lo
que provocó la necesidad de un marco constitucional más sólido.
Inicio del proceso constitucional: La visión de Alexander Hamilton

Tensión financiera y visión política: La tensión económica de la Gran Bretaña de


posguerra y la visión política de Alexander Hamilton convergieron en el verano de 1786.
Convocatoria de una Convención: La propuesta de Hamilton de celebrar una
Convención Constitucional pretendía subsanar las deficiencias de los Artículos de la
Confederación y establecer una estructura de gobierno más eficaz.

La Convención Constitucional de 1787

Reunión de Filadelfia: La Convención Constitucional, celebrada en Filadelfia de mayo a


septiembre de 1787, reunió a 55 delegados de los estados, excluido Rhode Island.
Liderazgo de George Washington: El liderazgo de George Washington, enraizado en su
experiencia en la Guerra de la Independencia, desempeñó un papel crucial a la hora de
guiar las deliberaciones y decisiones.

Debates y tensiones: Representación y equilibrio de poder

Preocupaciones por la representación: Surgieron tensiones en torno a la representación


en el Congreso, con los estados más grandes abogando por una representación
basada en la población y los estados más pequeños insistiendo en una representación
igualitaria.

Temor al poder centralizado: Los estados, influidos por las quejas del pasado contra el
dominio centralizado británico, expresaron su aprensión ante posibles abusos de poder
por parte de un nuevo gobierno central.

Los principios básicos de la Constitución: Un modelo de gobierno moderno

Concisión y complejidad: La Constitución, con poco más de 4.000 palabras, proporcionó


un plan conciso pero exhaustivo para un complejo sistema de gobierno.

Controles y equilibrios: Los artífices, motivados por el deseo de evitar la tiranía del
poder centralizado, incorporaron controles y equilibrios para distribuir la autoridad entre
los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.

Retos y garantías de la ratificación

Vacilación de los estados: Muchos estados dudaron en ratificar la Constitución sin


garantías de protección frente a posibles abusos del nuevo gobierno central.

División de poderes: El gobierno estadounidense resultante se caracteriza por una


división entre poderes y una distribución vertical de competencias entre los niveles
federal, estatal y local.

El Federalista nº 10, cuyo autor es James Madison, profundiza en la cuestión crítica del
faccionalismo dentro de una república. Madison define una facción como un grupo de
ciudadanos, minoritario o mayoritario, unido por una pasión o interés común adverso a
los derechos de los demás o a los intereses a largo plazo de la comunidad. Identifica la
diversidad de opiniones, especialmente en asuntos políticos, como la principal fuente de
facciones.

Madison afirma que la desigual distribución de la propiedad ha sido históricamente una


causa importante de las facciones, al surgir intereses distintos entre los que tienen
propiedades y los que no. Subraya la existencia de varias clases, cada una motivada
por sentimientos y opiniones diferentes. Reconociendo la inevitabilidad del
faccionalismo, Madison explora dos métodos para abordar sus efectos negativos:
eliminar las causas o controlar su impacto.

La primera opción, destruir la libertad, se considera poco práctica, ya que la libertad es


esencial para la vida política, como el aire lo es para la vida animal. La segunda opción,
crear una sociedad homogénea, se considera inalcanzable debido a la diversidad
inherente a las capacidades de las personas y a la protección de los derechos de
propiedad. Madison concluye que la única solución viable es controlar los efectos de las
facciones.

Madison distingue entre facciones mayoritarias y minoritarias, expresando su


preocupación principalmente por las facciones mayoritarias. Propone dos métodos para
frenar las facciones mayoritarias: impedir que una mayoría tenga la misma pasión o
interés al mismo tiempo o incapacitar a una facción mayoritaria para actuar. Madison
sostiene que una democracia pequeña es vulnerable a las facciones mayoritarias,
mientras que una república puede mitigar este riesgo mediante la elección de
representantes.

Al abogar por una república grande frente a una pequeña, Madison presenta varios
argumentos. Una república grande ofrece un conjunto más amplio de representantes
competentes, lo que hace más difícil que los candidatos engañen a los votantes.
Además, la diversidad de intereses en una república grande dificulta la formación de
una mayoría consistente, promoviendo un proceso de toma de decisiones más
deliberativo y cauteloso.

Madison subraya que una república, a diferencia de una democracia, pone el gobierno
en manos de delegados elegidos. El área más amplia que abarca una república permite
una mayor selección de representantes capaces. Además, el papel de filtro de los
delegados evita las reclamaciones frívolas que pueden obstaculizar los gobiernos
puramente democráticos. En resumen, Madison argumenta que una gran república, con
su diversidad y amplia representación, proporciona una salvaguarda más eficaz contra
los peligros del faccionalismo.

Conclusión

En conclusión, la información presentada anteriormente proporciona una comprensión


exhaustiva del contexto, los debates y las consideraciones que rodearon la redacción
de la Constitución de los Estados Unidos, así como de las ideas ofrecidas por James
Madison en el Federalista nº 10. El marco teórico ilumina las circunstancias históricas
que condujeron a la Convención Constitucional de 1787, haciendo hincapié en la
necesidad de una estructura de gobierno más sólida tras las insuficiencias de los
Artículos de la Confederación.

La convocatoria de Alexander Hamilton de una Convención Constitucional, impulsada


por la tensión económica y la visión política, sentó las bases para un momento crucial
en la creación de la Constitución de Estados Unidos. Los debates y las tensiones que
se produjeron durante la Convención, especialmente en lo relativo a la representación y
a la posibilidad de que surgieran facciones, pusieron de manifiesto los retos que
planteaba la unión de diversos estados bajo un único documento de gobierno.

El Federalista nº 10 de James Madison profundiza en la cuestión del faccionalismo,


definiendo las facciones como grupos movidos por pasiones o intereses comunes
adversos a los derechos de los demás. El análisis de Madison de las causas y efectos
de las facciones lleva a proponer que controlar su impacto es más factible que eliminar
sus causas. Introduce el concepto de una gran república como salvaguarda contra las
facciones mayoritarias, abogando por una representación ampliada y por la diversidad
para mitigar los riesgos asociados al faccionalismo.

En general, la elaboración de la Constitución de Estados Unidos fue un proceso


complejo impulsado por el deseo de abordar los retos de la posguerra y establecer un
sistema de gobierno más eficaz. Las ideas de Madison, articuladas en el Federalista nº
10, siguen resonando, subrayando la importancia de equilibrar la representación,
proteger los derechos individuales y sortear los retos inherentes que plantean los
diversos intereses dentro de un marco democrático. La importancia duradera de la
Constitución reside en su capacidad para proporcionar un marco fundacional adaptable
a las necesidades cambiantes de la nación, al tiempo que ofrece mecanismos para
controlar los posibles efectos negativos del faccionalismo.
Bibliografía

RODRÍGUEZ VILLABONA, Andrés Abel. el derecho frente al poder surgimiento desarrollo y crítica
del constitucionalismo moderno. Bogotá, D.C.: Universidad Nacional, 2018. 893 p.

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FEDERALIST, The. The Federalist papers. Mattituck, N.Y: Amereon House. 190 p.

FATHERS, Founding Founding. Constitution of the United States of America: The Declaration of
Independence, the Bill of Rights. [s.l.]: Independently Published, 2021. 116 p. ISBN 9798507838400.

CONTRIBUTORS TO WIKIMEDIA PROJECTS. Federalist No. 10 - Wikipedia. Wikipedia, the free


encyclopedia [página web]. (14, agosto, 2005). [Consultado el 22, febrero, 2024]. Disponible en
Internet: <https://en.wikipedia.org/wiki/Federalist_No._10>.

[Consultado el 22, febrero, 2024]. Disponible en Internet:


<https://www.coursehero.com/lit/The-Federalist-Papers/>.

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