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FACULTAD DE PSICOLOGÍA
LIC. EN PSICOLOGÍA
Lenina Crown
El controlador
Bernard Marx
Helmholtz Watson
John
Linda
Todo empieza cuando Ford se da cuenta de que el mundo estaba mal por lo que
decide crear modelos de humanos iguales que por medio de un método o
enseñanza llamada “hipnopedia” condiciona a las personas a ser felices, a que se
sientan satisfechos con lo que tienen a no pedir más, no tienen sentimiento
alguno, no sufren, cuando una persona fallece lo toman como algo ligero, no se
enamoran, tienen relaciones sexuales en orgias y no les importa nada.
Con el cual da paso a un futuro, en el que el hecho de poder nacer debe ser
contemplado por procesos químicos realizados por científicos, en el que se lava y
se controla el celebro a todas sus creaciones. A la gente se le hace pensar de una
forma cuando son jóvenes para prepararlos a ser felices y a disfrutar la vida que
los imponen; en esta gran civilización no se permite la religión, el arte ni muchos
menos el poder amar, es una sociedad donde la familia es dejada de lado, sin
embargo, los que dirigen esta gran civilización incitan a que las relaciones
sexuales sean tomadas como algo del día a día, que se debe dar por diferentes
personas como un juego o una diversión.
Todos los habitantes no tenían el derecho de expresar ningún otro sentimiento que
no fuera la felicidad, las ideas de nuestro mundo actual de enamorarse, contraer
matrimonio y formar un núcleo familiar eran inexistentes, el consumo del soma,
una droga obligada rigurosa y estrictamente a ingerirse todo el tiempo como
escape de la realidad y mantener a la población en un estado de felicidad cegada.
Cualquier tipo de arte u actividad relacionada era castigada ya que cualquier tema
relacionado al amor o al cambio, podía reformar el pensar y creer en ello por lo
que la historia no estaba permitida, porque al conocer los acontecimientos del
pasado, podía modificar lo vivido en el presente y futuro.
Para poder realizar todos estos procesos contaban con laboratorios en grandes
ciudades de Europa en los cuales se trabajaba en nuevas investigaciones para
poder lograr nuevas creaciones con mejores características y buscaban el poder
reproducirlos en porciones más grandes de las que ya lo habían logrado.
Comenzaban con la creación de las aphas que son los más inteligentes de todas
las castas a los cuales les daban mejores condiciones de desarrollo para que ellos
pueden ser las encargados de gobernar y seguir con dicho proceso evolutivo
masivo, les hacían creer que el vestirse de gris era lo mejor para ellos, con el gran
condicionamiento de pensar en que ellos son mejores que todos y que la casta
más importante dentro de dicha población eran ellos por lo que la creación de más
pobladores de dicha nación estaría a cargo de ellos.
La segunda clase social o casta se encuentran los Betas, el color que vestían era
de blanco ellos son los encargados de hacer los trabajos que los alphas le
impongan por lo cual ellos son los encargados de hacer las labores de cuidado de
la producción bajo el ordenamiento de los alphas. Realizaban actividades
administrativas y profesionales, eran inteligentes, pero no intelectuales como los
alphas
La tercera clase social pertenece a los Gamma a ellos se les impuso vestirse de
color verde y hacían labores que no involucren mucho el esfuerzo ya que ellos
eran encargados de labores un poco menos de complejidad que los Betas.
La cuarta clase social pertenece a los Deltas a los cuales se les impuso vestirse
de color caqui, los cuales son encargados de las labores de conducción de
vehículos de transportación en los edificios como los ascensores.
La clase social más baja pertenece a la casta de los Elipsones los cuales visten de
negro y no pueden escribir ni leer por lo cual la labor que desempeñan ellos es la
de lavar y encargarse de la limpieza de los laboratorios en los cuales se creaban a
los nuevos brotes, no tenían demasiada importancia en el mundo.
La familia en la población de Ford no existe porque todos son creados por una
reproducción química en la cual todos son iguales dependiendo de sus castas por
lo que el hablar de una familia es un terrible tema de conversación.
En este mundo todas las personas eran felices, aunque con una felicidad ficticia y
claramente manipulada. La sociedad estaba tan unida de tal manera que Todo el
mundo pertenecía a todo el mundo, en aquel mundo vivía un hombre llamado
Bernard Marx. Él era un alfa-más, pero ocurrieron una serie de acontecimientos
que lo hacían diferente a los demás como en su incubación hubo un problema y
físicamente era de estatura inferior a la de sus compañeros de casta, era más
inteligente y veía su mundo desde una perspectiva diferente, dejaba a un lado el
clasismo, pero se aparecía más a un Delta. Bernard no estaba plenamente
integrado en esa sociedad, y quizás por el rechazo que lo daban hacia él, y por
ese motivo comenzó a formar ideas diferentes de las cuales le habían enseñado
en la hipnopedia. Él se caracterizaba por ser amante de la soledad y por no utilizar
drogas como el soma por lo que él no practicaba las orgias porque le parecía algo
malo con esas razones no iba a la iba a la iglesia y, quizás en consecuencia al
rechazo de sus compañeros, comenzó a pensar por sí mismo y a formar algunas
ideas propias diferentes a las que le habían inculcado mediante hipnopedia. A él
no le gustaba obtener la felicidad mediante drogas y métodos de manipulación de
masas, y era un amante de la soledad, cosa que estaba prohibida en aquel mundo
donde la gente era obligada a relacionarse con otras personas para mantener la
población unida. Bernard comenzó a tener relaciones con Lenina, una mujer Alfa-
más. Él decidió llevarla de vacaciones a una reserva de salvajes, considerando
este un lugar diferente e instructivo, y así fue. Ellos no eran sometidos al proceso
de creaciones que se utilizaban en la sociedad de Ford por lo que ellos eran vistos
como salvajes.
- ¡Tire todo ese horrible veneno, vengo a traerles libertad!” (Aldous Huxley) En ese
instante llega Helmholtz y Bernard al lugar donde se encontraba John haciendo
disturbios, Helmholtz se une a John y juntos tiran todo el soma, Bernard solo
observa el panorama. Luego llegan los policías y se llevan a los 3 al despacho del
inspector. Plática con ellos, pero más que nada con John, intercambia puntos de
vista con él y le dice que lo envidia al poder demostrar sus sentimientos. Les dice
a Bernard y Helmholtz que los enviara a una isla, donde se encuentran las demás
personas que han alcanzado demasiada personalidad como ellos, que van a vivir
bien. Dejan solo a John y el Inspector y John empieza nuevamente a cuestionar la
forma de vida de este mundo” le dijo que se libraban de todo lo desagradable en
vez de soportarlo, que no sufrían ni luchaban, que les hacía falta algo que les
costara. “-Yo no quiero la comodidad, yo quiero a Dios, quiero la poesía, quiero el
verdadero riesgo, quiero la libertad, la bondad. Quiero el pecado- dijo John. -En
resumen- dijo el Inspector- usted reclama el derecho a ser desgraciado. - Bueno,
vaya- dijo el Salvaje- reclamo el derecho a ser desgraciado. -Sin hablar del
derecho a envejecer y volverse feo e impotente; el derecho de tener sífilis y
cáncer; el derecho a tener poco de comer; el derecho a ser piojoso; el derecho a
vivir en constante inquietud por lo que ocurrirá mañana; el derecho a pescar la
tifoidea; el derecho a ser atormentado por indecibles dolores de todas clases.
Siguió un silencio. -Los reclamo todos- dijo por último el Salvaje. El inspector se
encogió los hombros- Por nosotros, concedidos.” (Aldous Huxley) John no fue
desterrado ya que debían seguir experimentando con él, pero él hizo caso omiso y
también decide irse, a un lugar donde pudiera estar solo. Había elegido vivir en un
faro solitario cerca de Londres para vivir tranquilo y poder purificar su alma; los
primeros días rezaba y observaba el horizonte cazaba, pescaba, era un lugar muy
solo, duraba días sin mirar a una persona. Un día un grupo de trabajadores lo
miraron azotándose con unas cuerdas en la espalda, y días después empezaron a
llegar reporteros al lugar y le preguntaban porque se golpeaba con el látigo, él no
respondía nada, y así se hizo más grande la noticia de que el Salvaje estaba en
un faro y realizaba actividades “extrañas”. Hasta que un día el Salvaje amenazó a
un reportero con una vara, y lo dejaron en paz uno días.