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El Síndrome del Ovario Poliquístico

Alumnes: Héctor Daniel Vásquez Calderón, Carlota Viguer de Amador, Dónovan Muñoz
Alós, Marc Domingo Niño

Assignatura: Psicoendocrinologia
Curso: 4ºVM
Profesora: Sandra Montagud Romero
CAS 2. Efecte no desitjat: Síndrome de l’ovari poliquístic i anticonceptius hormonals

Una jove de 21 anys decideix acudir a la consulta del ginecòleg perquè els seus cicles
menstruals són irregulars. Les últimes menstruacions han sigut breus i amb poca secreció. En
els últims mesos ha experimentat un excessiu acne que li deixa marques a la pell de la cara i
l’esquena per primera vegada després de l’adolescència. També descriu que en l’últim any ha
desenvolupat pèl facial obscur i més abundant que l’habitual. Amb menor densitat, també
presenta abundant pèl al pit i l’abdomen. El seu pes corporal s’ha incrementat lleugerament.
Amb la sospita de síndrome de l’ovari poliquístic (SOP) i el metge demana proves
bioquímiques per a determinar si hi ha un cas de hiperandrogenisme.

El Síndrome del Ovario Poliquístico (SOP) es el síndrome endocrino más común entre las
mujeres en edad reproductiva y la principal causa de infertilidad debido a la anovulación
(Bellver et al., 2017). En algunos estudios se ha descrito como una enfermedad ovárica
caracteriza por la producción excesiva de andrógenos (Delitala et al., 2017). Sin embargo, es
un síndrome que abarca diversos fenotipos, consecuencias y tratamientos además de una gran
complejidad a nivel metabólico. Esto hace que el SOP tenga unos criterios diagnósticos
complejos.
Durante unos años se propuso la oligo-anovulación como el criterio preferente, no
obstante, esto se ha visto insuficiente. El criterio de la morfología del ovario poliquístico
también ha quedado obsoleto. Actualmente, uno de los criterios que es más utilizado es el
hiperandrogenismo biológico, pero aún no se encuentra del todo establecido (Bellver et al.,
2018).
Respecto a su patofisiología, se destaca que el SOP está caracterizado por gran
diversidad de presentaciones clínicas. Se ha podido estudiar que entre los principales factores
que determinan su expresión se hallan la genética, el metabolismo, el entorno endocrino y
factores dependientes del estilo de vida. El curso del síndrome y sus manifestaciones clínicas
se completan y aparecen con predominancia durante la adolescencia ya que es en este periodo
cuando el eje hipotálamo - hipofisario - ovárico se activa.
Es en la pubertad, por tanto, cuando observamos un incremento de los niveles de
insulina y el incremento de los niveles de andrógenos libres lo cual se relaciona con la
sintomatología del SOP. A su vez, esto resulta en la alteración del correcto desarrollo

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folicular y la producción de ovocitos maduros lo cual aumenta la posibilidad de infertilidad
en mujeres con SOP. No obstante, durante esta etapa resulta también complicado el correcto
diagnóstico del síndrome ya que la sintomatología puede confundirse muchas veces con las
fluctuaciones e irregularidades que son comunes en la pubertad. En este sentido, resulta
importante atender a la oligomenorrea persistente, la amenorrea secundaria o la amenorrea
primaria (Bellver et al., 2018)
Del mismo modo, encontraríamos una explicación endocrina a los síntomas del acné y
hirsutismo, y es que, el acné y el hirsutismo son manifestaciones del SOP durante la
adolescencia y pubertad. En este sentido, la hiperandrogenia se entiende como uno de los
factores fundamentales que explican el acné persistente y la aparición de vello en cara, pecho
y/o espalda. Sin embargo, la variabilidad y falta de resultados concluyentes, además de las
fluctuaciones comunes de los andrógenos (como la testosterona) durante la adolescencia
impiden que se establezca un nivel basal de Testosterona a partir del cual lo podemos
considerar como una alteración (Bellver et al., 2017). De hecho, el SOP es bastante
prevalente en mujeres que no tienen hiperandrogenia. Ahora bien, como norma general, se ha
establecido una concentración mayor a 55 ng/dl como indicativo de hiperandrogenia.
Por tanto, resultaría interesante y necesario describir los tratamiensots disponibles
para este síndrome.
Para el caso de la adolescencia el tratamiento del SOP se estructura en torno a la
restauración de un ciclo ovulatorio y menstrual normal y, paralelamente, reducir o eliminar el
hirsutismo y el acné. Para tratar el sobrepeso los tratamientos se centran también en tratar la
hiperlipidemia y la hiperglucemia.
En específico, los tratamientos para el hirsutismo integran farmacología,
procedimientos cosméticos y apoyo psicológico. Para esto, se hace uso del afeitado y
depilación láser, principalmente. Se usan también agentes tópicos como cremas.

También sería importante destacar cómo actuan los anticonceptivos orales sobre el
ciclo menstrual. De hecho, existen diferentes métodos anticonceptivos hormonales, entre los
cuales encontramos uno de los tipos más comunes, los anticonceptivos orales combinados.
Los AOC están compuestos por una forma sintética de estrógeno (Etinilestradiol) combinada
con alguna forma sintética de progesterona (conocidas como progestinas), e influyen en la
ovulación debido a una inhibición hipotalámica causada por la retroalimentación negativa
(Elliot-Sale et al., 2013; Levin et al., 2018), es decir, el aumento de las hormonas sexuales se
traduce en una mayor retroalimentación negativa, tanto hacia la hipófisis como hacia el

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hipotálamo, así pues la señal que llegue a la hipofisi hará que ésta reduzca el nivel de LH y
FSH producidas, y la señal que llegue al hipotálamo se traducirá en una disminución de la
GnRH, lo que a su vez hará que la hipófisis disminuya la liberación de gonadotropinas (LH y
FSH). Mediante este mecanismo de acción, los AOC producirán efectos como el
adelgazamiento del endometrio, el espesamiento del moco cervical y no permitirán el
correcto desarrollo/estimulación de la ovulación.
Siguiendo con la misma línea, según la investigación que realizaron Borenstein et al.
(2003), los anticonceptivos orales que contienen etinilestradiol y drospirenona, comunes en la
mayoría de anticonceptivos orales, actúan en el ciclo menstrual de varias maneras:
1. Supresión de la ovulación: Estos anticonceptivos evitan la liberación mensual del
óvulo por los ovarios. El etinilestradiol y la drospirenona, al administrarse en dosis
constantes, inhiben el aumento de ciertas hormonas, como la hormona estimulante del
folículo (FSH) y la hormona luteinizante (LH), que normalmente desencadenan la
ovulación.
2. Modificación del endometrio: El endometrio es el revestimiento interno del útero que
se engrosa durante el ciclo menstrual para prepararse para la posible implantación del
óvulo fertilizado. Estos anticonceptivos modifican el endometrio, haciéndolo menos
receptivo para la implantación, lo que disminuye la probabilidad de que un óvulo
fertilizado se adhiera y se desarrolle.
3. Cambio en el moco cervical: La drospirenona también afecta al moco cervical,
haciéndolo más denso y menos permeable para los espermatozoides. Esto dificulta el
paso de los espermatozoides hacia el útero y las trompas de Falopio, reduciendo así la
posibilidad de fertilización.
4. Regulación hormonal: Estos anticonceptivos estabilizan los niveles hormonales en el
cuerpo, manteniendo niveles constantes de estrógeno y progesterona a lo largo del
ciclo menstrual. Esta estabilidad hormonal puede ayudar a reducir los síntomas
premenstruales, como los cambios de humor, los dolores menstruales y la sensibilidad
mamaria.
En resumen, estos anticonceptivos actúan en el ciclo menstrual previniendo la
ovulación, modificando las condiciones para la fertilización y alterando el revestimiento
uterino, lo que en conjunto reduce las posibilidades de embarazo y también puede ayudar a
mitigar los síntomas premenstruales en algunas mujeres.

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Además de los efectos sobre el ciclo menstrual y la ovulación, a nivel hormonal el uso
de AOC está asociado con una disminución de la producción de progesterona y de
17β-estradiol (Elliott-Sale et al., 2013), además de una disminución en la producción de
testosterona por parte de los ovarios y las glándulas suprarrenales (Zimmerman et al., 2014).
En otras palabras, se produce una inhibición/disminución de las hormonas sexuales
endógenas debido a que se están introduciendo al cuerpo de forma exógena, y són estas
hormonas exógenas las encargadas de realizar las funciones biológicas. También se está
hipotetizando alrededor de un posible efecto de los AOC sobre el SNC, y es que la forma
sintética del estrógeno usada en estos medicamentos, el etinilestradiol, puede entrar al sistema
nervioso central (Fishman and Norton, 1977), pudiendo ejercer algún tipo de efecto, pero éste
es aún un campo muy inexplorado y que requiere de más investigación para poder llegar a
conclusiones sólidas sobre el efecto concreto que puedan llegar a tener los AOC sobre el
SNC.
Vistos los efectos que tienen los AOC sobre el ciclo menstrual, se podría pensar que
habría evidencia científica sobre el uso de AOC y los trastornos del estado de ánimo
(ansiedad y depresión principalmente). Y de hecho, si nos centráramos en los datos recabados
por Bötcher et al. (2012) obtenemos la siguiente información:
Los síntomas depresivos se dan de forma común en las mujeres que se encuentran en
edad reproductiva, las cuales pueden potencialmente estar sujetas a un tratamiento de
anticonceptivos orales. Esto nos lleva a pensar que sería relevante averiguar la relación que
existe entre los anticonceptivos orales y los trastornos del estado de ánimo. Sin embargo, pese
a que la presencia de trastornos depresivos es mencionada como posible efecto secundario del
uso de anticonceptivos hormonales, el papel de estos como detonador de la aparición de
trastornos depresivos no resulta concluyente. Según estos autores, tras el análisis de diversos
estudios, esto puede deberse a dos factores: la falta de consistencia a la hora de determinar
qué se considera como sintomatología depresiva y las diferencias existentes entre distintos
tratamientos (tanto en composición como en dosis).
Sin embargo, cabe mencionar que algunos de los datos recabados pueden sugerir que
la composición de los tratamientos es determinante en cuanto a la relación con la
sintomatología depresiva. Concretamente, los tratamientos anticonceptivos que contienen
únicamente progestágenos pueden estar asociados con una mayor probabilidad de provocar
síntomas depresivos o depresión con más frecuencia que los anticonceptivos orales
combinados.

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No obstante, la falta de conclusión en este campo de estudio, en general y respecto a
los resultados de este artículo en concreto, nos hace creer que es necesario proseguir con la
investigación en esta línea.
Por otro lado, concretando los resultados y evidencia científica a las mujeres que
padecen el síndrome de ovario poliquístico, el cual está asociado con desequilibrios
hormonales que pueden provocar hirsutismo, irregularidades menstruales y desencadenar
trastornos emocionales como ansiedad, depresión o malestar emocional, observaríamos que el
anticonceptivo oral conformado por etinilestradiol y drospirenona, estudiado por Cinar et al.
(2012) tendría un impacto positivo al reducir los síntomas de estos trastornos emocionales.
De ese modo, el uso continuado del AOC disminuyó síntomas de ansiedad, depresión
y malestar emocional en las mujeres con SOP. Esto sugiere que el tratamiento con este
anticonceptivo podría ofrecer beneficios adicionales, e indicarían que el uso del
anticonceptivo oral no solo ayuda a regular los desequilibrios hormonales característicos del
SOP, sino que también podría mejorar el bienestar emocional de las mujeres afectadas por
este trastorno. Pese a eso, aún mejorando el hirsutismo, los problemas menstruales y aspectos
emocionales de la calidad de vida, no alteró significativamente las puntuaciones de depresión
y ansiedad a pesar de mejorar la calidad de vida relacionada con la salud en general.
Por tanto, los hallazgos de este estudio sugerirían que, si bien estos anticonceptivos
orales mejoran ciertos síntomas del SOP y el bienestar general, es posible que no tengan un
impacto directo en los trastornos del estado de ánimo como la depresión y la ansiedad en
estos pacientes.
Sin embargo, como hemos dicho antes, sería necesario estudiar y comprobar la
replicabilidad de estos resultados.

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Referencias:

Bellver, J., Rodríguez-Tabernero, L., Robles, A., Muñoz, E., Martínez, F., Landeras, J.,
García-Velasco, J. A., Fontes, J. T., Alvarez, M. C. C., Álvarez, C., & Acevedo, B. (2017).
Polycystic ovary syndrome throughout a woman’s life. Journal of Assisted Reproduction and
Genetics, 35(1), 25-39. https://doi.org/10.1007/s10815-017-1047-7

Borenstein, J., Yu, H. T., Wade, S., Chiou, C. F., & Rapkin, A. (2003). Effect of an oral
contraceptive containing ethinyl estradiol and drospirenone on premenstrual symptomatology
and health-related quality of life. The Journal of reproductive medicine, 48(2), 79–85.

Böttcher, B., Radenbach, K., Wildt, L., & Hinney, B. (2012). Hormonal Contraception and
Depression: A survey of the present State of Knowledge. Archives of Gynecology and
Obstetrics, 286(1), 231-236. https://doi.org/10.1007/s00404-012-2298-2

Cinar, N., Harmanci, A., Demir, B., & Yildiz, B. O. (2012). Effect of an oral contraceptive on
emotional distress, anxiety and depression of women with polycystic ovary syndrome: a
prospective study. Human reproduction (Oxford, England), 27(6), 1840–1845.

Delitala, A., Capobianco, G., Delitala, G., Cherchi, P., & Dessole, S. (2017). Polycystic ovary
syndrome, adipose tissue and metabolic syndrome. Archives of Gynecology and Obstetrics,
296(3), 405-419. https://doi.org/10.1007/s00404-017-4429-2

Dokras, A., Sarwer, D. B., Allison, K. C., Milman, L., Kris-Etherton, P. M., Kunselman, A.
R., Stetter, C., Williams, N. I., Gnatuk, C. L., Estes, S. J., Fleming, J., Coutifaris, C., &
Legro, R. S. (2016). Weight loss and lowering androgens predict improvements in
Health-Related quality of life in women with PCOS. The Journal of Clinical Endocrinology
& Metabolism, 101(8), 2966-2974. https://doi.org/10.1210/jc.2016-1896

Hampson, E. (2020). A brief guide to the menstrual cycle and oral contraceptive use for
researchers in behavioral endocrinology. Hormones and Behavior, 119, 104655.
https://doi.org/10.1016/j.yhbeh.2019.104655

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SEGONA PART. PREGUNTES ESPECÍFIQUES DE CERCA
1. Quines paraules clau has utilitzat?
➔ polycystic ovary syndrome
➔ symptoms
➔ mood
➔ treatment
➔ oral contraceptives
➔ menstrual cycle

2. Amb quins connectors (operadors booleanos)?


AND

3. En quines bases de dades?


PubMed

4. Quins artícles s’han seleccionat?


Bellver, J., Rodríguez-Tabernero, L., Robles, A., Muñoz, E., Martínez, F., Landeras, J.,
García-Velasco, J. A., Fontes, J. T., Alvarez, M. C. C., Álvarez, C., & Acevedo, B.
(2017). Polycystic ovary syndrome throughout a woman’s life. Journal of Assisted
Reproduction and Genetics, 35(1), 25-39. https://doi.org/10.1007/s10815-017-1047-7

Dokras, A., Sarwer, D. B., Allison, K. C., Milman, L., Kris-Etherton, P. M., Kunselman, A.
R., Stetter, C., Williams, N. I., Gnatuk, C. L., Estes, S. J., Fleming, J., Coutifaris, C.,
& Legro, R. S. (2016). Weight loss and lowering androgens predict improvements in
Health-Related quality of life in women with PCOS. The Journal of Clinical
Endocrinology & Metabolism, 101(8), 2966-2974.
https://doi.org/10.1210/jc.2016-1896

Hampson, E. (2020). A brief guide to the menstrual cycle and oral contraceptive use for
researchers in behavioral endocrinology. Hormones and Behavior, 119, 104655.
https://doi.org/10.1016/j.yhbeh.2019.104655.

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5. Quins han sigut els criteris d’inclusió i exclusió?
Els criteris que d’inclusió que hem establit són els següents:
- L’estudi ha d’estar publicat en els darrers 10 anys.
- La temàtica fonamental dels articles ha de ser l’ovari poliquístic o l’efecte dels
anticonceptius en les dones.
- La població d’estudi han de ser humans, femelles que tinguen una edat entre 19 i 24
anys.
- Respecte la metodologia emprada i tipologia dels articles hem inclós només els que
siguen: informe de cas, estudi clínic, assaig clínic, estudi comparatiu, estudi
observacional, estudis de RCT, revisions i revisions sistemàtiques.

6. Elabora el diagrama de la recerca.


"Polycystic Ovary Syndrome" AND symptoms AND mood AND treatment

319 → 2013: 213 → human, female, young adult→ 51 → case reports, clinical study, clinical
trial, comparative study, M-A, RCT, observational study, review, systematic review → 28

Diagrama de Flujo:

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No pudimos encontrar en la primera búsqueda algún artículo que aportase suficiente
información sobre la relación entre los anticonceptivos orales y su papel en el ciclo
menstrual, intentamos cambiar la primera búsqueda y añadir “menstrual cycle” con el
operador booleano AND, pero los resultados eran insuficientes. Es por ello que decidimos
hacer otra búsqueda para poder explicar un poco más en detalle el efecto de los
anticonceptivos sobre el ciclo, así pues la segunda búsqueda se realizó de la siguiente
manera:
"Oral contraceptives" AND "menstrual cycle"

2,712 → Límite temporal 2013-2023 → 490 → human, female, young adult → 211 → case
reports, clinical study, clinical trial, comparative study, M-A, RCT, observational study,
review, systematic review → 56

Diagrama de Flujo:

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