Maitines

Maitines del 24 de Marzo de 2024
1er Domingo de la Gran Cuaresma (Domingo de la Ortodoxia); Venerable Zacarías el

Recluso y Artemon, Obispo de Seleucia
Sacerdote: Bendito sea nuestro Dios  perpetuamente, ahora y siempre y por los siglos
de los siglos.
Todos: Amén.
Sacerdote: Gloria a ti Dios nuestro, gloria a ti.
Rey celestial, Consolador, Espíritu de verdad, que estás en todo lugar llenándolo todo,
tesoro de bienes y dador de vida, ven a habitar en nosotros, purifícanos de toda mancha
y salva, Tú que eres bueno, nuestras almas.
Todos: Santo Dios, Santo Poderoso… (3 veces)
 Gloria al Padre y al Hijo …Ahora y siempre…
Santísima Trinidad…
Señor ten piedad (3 veces)
 Gloria al Padre y al Hijo… Ahora y siempre…
Padre Nuestro que estas en el cielo, santificado sea tu Nombre, venga a nosotros tu Reino,
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona
nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes
caer en la tentación y líbranos del mal.
Sacerdote: Porque tuyos son el Reino, el poder y la gloria,  oh Padre, Hijo y Espíritu
Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.”
Coro: Amén.
Lector: Salva oh Señor a tu pueblo y bendice a tu heredad; concede a los fieles la victoria
sobre el enemigo, y que les sea tu auxilio un arma de paz y triunfo invencible.
 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo
Oh Tú que voluntariamente sobre la Cruz fuiste levantado ten misericordia del nuevo
pueblo llamado por tu Nombre; alegra con tu poder a los creyentes, oh Cristo Dios,
otorgándoles victoria sobre el enemigo, y que les sea tu auxilio un arma de paz y triunfo
invencible.
Ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen
Oh protectora formidable e indesairable, no desprecies nuestras suplicas, oh bondadosa y

alabadísima Madre de Dios, fortalece la vida de los cristianos ortodoxos, salva a tu pueblo
y, por tu intercesión, dale la ayuda del cielo, puesto que eres la única y bendita Madre de
Dios.
1
Letanía
Sacerdote: Ten piedad de nosotros, oh Señor, según tu gran misericordia; te suplicamos que
nos escuches y tengas piedad.
Todos: Señor ten piedad (3 veces)
Sacerdote: De nuevo te suplicamos por nuestro Padre y Metropolita Ignacio y por toda
nuestra hermandad en Cristo.
Sacerdote: De nuevo te suplicamos por los piadosos cristianos ortodoxos.
Sacerdote: Porque eres un Dios misericordioso que amas a la humanidad, y a ti rendimos

gloria,  oh Padre, Hijo y Espíritu Santo, ahora y siempre y por los siglos de los siglos.
Todos: Amén. En el nombre del Señor bendice padre.
Ahora el lector lee los seis salmos, mientras el Sacerdote reza en silencio las seis oraciones matinales.
Sacerdote:  Gloria a la Santísima Trinidad, consubstancial vivificadora e indivisible,

ahora y siempre y por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Mientras tanto, el superior o el lector designado por él dice con reverencia y temor de Dios los
hexasalmos; los demás escuchan con compunción y en silencio total:
Lector: ¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz y buena voluntad para los hombres! (3 veces)
Abre, Señor, mis labios y proclamará mi boca tu alabanza. (2 veces)
SALMO 3
Señor, ¿por qué se han multiplicado los que me afligen?
Muchos se levantan contra mí.
Muchos dicen a mi alma: No hay salvación para él en su Dios.
Pero Tú, señor, eres mi protector, mi gloria y el que exalta mi cabeza.
Con mi voz he clamado al Señor y Él me ha escuchado desde su monte santo.
Yo me acosté y me dormí y desperté, porque el Señor me ampara.
No temeré ante miríadas de pueblos, los que en contorno me asedian.
Levántate, oh Señor; sálvame, Dios mío; pues Tú has golpeado a todos los que sin causa me aborrecen;
has quebrantado los dientes de los pecadores.
Tuya Señor, es la salvación y sobre tu pueblo esté tu bendición.
Nuevamente:
Yo me acosté y me dormí y desperté, porque el Señor me ampara.
2
SALMO 37
Señor, no me increpes en tu furor ni me corrijas en tu ira. Porque tus saetas se han clavado
en mí y has afirmado sobre mí tu mano;
no hay sanidad en mi carne ante tu ira; no hay paz para mis huesos ante mis pecados.
Porque mis iniquidades han sobrepasado mi cabeza; cual carga agobiante han pesado sobre
mí.
Mis heridas han hedido y se han corrompido ante mi insensatez;
me he fatigado y encorvado hasta el fin: todo el día me he contristado;
porque mis lomos se han llenado de mofas y no hay sanidad en mi carne.
Maltratado y humillado he sido sobremanera, he rugido por el gemido de mi corazón.
Delante de ti está todo mi deseo, y mi gemido no está oculto a ti.
Mi corazón se conturbó; me abandonó mi fuerza; ni siquiera la luz de mis ojos estaba
conmigo.
Mis amigos y parientes se han acercado y se han colocado contra mí; y los más allegados se
han puesto a distancia;
me violentaron los que buscan mi alma, y los que procuran mal para mí han hablado
vanidades y han tramado engaños todo el día.
Yo, empero, como sordo que no oye y como mudo que no abre su boca;
me he vuelto como un hombre que no oye y que no tiene réplicas en sus labios.
Porque en ti he esperado, Señor, Tú escucharás, Señor, Dios mío.
Porque dije: No sea que se regocijen por mí mis enemigos. Y, al vacilar mis pies, se jactaron
sobre mí.
Porque yo para la flagelación estoy presto y mi dolor está siempre ante mí.
Porque yo anunciaré mi iniquidad y me cuidaré de mi pecado.
Pero mis enemigos viven y se han fortalecido sobre mí; se han multiplicado los que
injustamente me aborrecen;
los que me devolvieron mal por bien me calumniaban, porque yo aspiraba a la bondad.
No me abandones, Señor, Dios mío, no te apartes de mí; ven en mi ayuda, Señor de mi
salvación.
Nuevamente:
No me abandones, Señor, Dios mío, no te apartes de mí; ven en mi ayuda, Señor de mi
salvación.
3
SALMO 62
Oh Dios, Dios mío, a ti madrugo; mi alma ha tenido sed de ti. ¡Cuántas veces también mi
carne! En tierra desierta, intransitable y sin agua,
así en el santuario me he presentado ante ti, para ver tu poderío y tu gloria.
Porque mejor es tu misericordia que los sacrificios, mis labios te alabarán.
Así te bendeciré en mi vida, en tu nombre elevaré mis manos;
se saciará mi alma como de médula y grosura, y con labios de júbilo te alabará mi boca.
Cuando me acordaba de ti sobre mi lecho, por las mañanas meditaba en ti,
porque te has hecho mi auxiliador, y bajo la sombra de tus alas me regocijaré.
Mi alma se adhirió a ti; tu diestra me acogió.
En cambio, ellos en vano han buscado mi alma; entrarán en lo más profundo de la tierra,
serán entregados bajo poder de la espada y quedarán cual presas de los chacales.
Pero el rey en Dios se alegrará, y todo el que jura por Él será alabado,
porque ha sido obstruida la boca de los que hablan injusticias.
Nuevamente:
Por las mañanas meditaba en ti,
porque te has hecho mi auxiliador, y bajo la sombra de tus alas me regocijaré.
Mi alma se adhirió a ti; tu diestra me acogió.
El texto siguiente se dice sin inclinaciones y sin hacer el signo de la Cruz. El sacerdote sale del
santuario por la puerta norte y continúa las oraciones en silencio ante el icono de Cristo en el
iconostasio:
 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre y por los siglos de los siglos
Amén.
Aleluya, Aleluya, Aleluya, Gloria a ti, oh Dios

Aleluya, Aleluya, Aleluya, Gloria a ti oh Dios
Aleluya, Aleluya, Aleluya, Gloria a ti oh Dios
Señor ten piedad, Señor ten piedad, Señor ten piedad.
 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre y por los siglos de los siglos
Amén.
4
SALMO 87
Señor, Dios de mi salvación, día y noche he clamado ante ti; entre a tu presencia mi oración, inclina tu oído a mi
súplica.
Porque mi alma está hastiada de males y mi vida se ha aproximado al Hades.
He sido contado entre los que descienden a la fosa; he venido a ser como un hombre desamparado, libre entre
los muertos;
como los heridos que yacen en el sepulcro, de los que no te acuerdas ya, que han sido apartados de tu mano;
Me han puesto en una fosa profunda, en las tinieblas y en la sombra de la muerte.
Sobre mí se ha establecido tu furor, has traído en mi contra todas tus tormentas.
Has alejado de mí a mis conocidos, me han puesto por abominación para ellos;
fui entregado y no salía, mis ojos languidecieron de miseria.
He clamado a ti, Señor; todo el día a ti he extendido mis manos:
¿acaso a los muertos harás maravillas?, ¿o los resucitarán los médicos, y te confesarán?
¿Acaso narrará alguno en el sepulcro tu misericordia y tu verdad en el lugar de la perdición?
¿Acaso se conocerán en las tinieblas tus maravillas y tu justicia en la tierra olvidada?
Mas yo a ti he clamado, Señor; al despuntar el alba, te llegará mi oración.
¿Por qué, Señor, rechazas mi alma y apartas de mí tu rostro?
Pobre soy yo, y he estado en fatigas desde mi juventud; y una vez exaltado, he sido humillado y confundido.
Sobre mi han pasado tus iras y tus terrores me han turbado;
me han cercado cual agua, todo el día me han rodeado a una.
Has alejado de mí al amigo y al prójimo y a mis conocidos por mi miseria.
Nuevamente:
Señor, Dios de mi salvación, día y noche he clamado ante ti;
entre a tu presencia mi oración, inclina tu oído a mi súplica.
SALMO 102
Bendice, alma mía, al Señor, y todo dentro de mí su santo nombre. Bendice, alma mía, al Señor, y no olvides
todos sus beneficios,
el que perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias,
el que redime a tu alma de la corrupción, el que te corona con misericordia y compasión,
el que coma de bienes tu deseo. Bendícelo y tu juventud se renovará como la del águila.
El Señor hace misericordia y juicio a todos los agraviados.
Manifestó sus caminos a Moisés y su voluntad a los hijos de Israel.
Compasivo y misericordioso es el Señor, tardo para la ira y de mucha piedad; no hasta el fin se airará ni para
siempre se enfurecerá.
No ha hecho con nosotros según nuestras iniquidades ni según nuestros pecados nos ha retribuido.
Cuanto se alza el cielo de la tierra, tanto ha fortalecido el Señor su misericordia sobre los que le temen.
Cuanto dista el oriente del occidente, tanto ha alejado de nosotros nuestras iniquidades.
Como se conmisera el padre de los hijos, así se ha compadecido el Señor de los que le temen; porque Él conoció
nuestra hechura, se acordó de que somos polvo;
el hombre, como heno son sus días, como flor de campo florecerá;
que si un viento pasa por ella, ya no existirá ni volverá a conocer su lugar.
Pero la misericordia del Señor es desde siempre y para siempre sobre los que le temen,
y su justicia sobre los hijos de los hijos, los que guardan su Alianza y se acuerdan de sus mandamientos para
cumplirlos.
El Señor en el cielo ha dispuesto su trono y su reino sobre todos señorea.
Bendecid al Señor todos sus ángeles, poderosos en fuerza, que ejecutan su palabra al oír la voz de su mandato.
Bendecid al Señor todas sus potestades, servidores suyos que hacen su voluntad.
Bendecid al señor todas sus obras. En todo lugar de su dominio, bendice, alma mía, al Señor.
Nuevamente:
En todo lugar de su dominio, bendice, alma mía, al Señor.
5
SALMO 142
Señor, escucha mi oración, advierte mi súplica en tu verdad, atiéndeme con tu justicia.
Y no entres en juicio con tu siervo porque no será justificado ante ti ningún viviente.
Porque el enemigo ha perseguido a mi alma, ha humillado hasta el suelo mi vida;
me ha sentado en tinieblas como a muerto desde hace siglos; se ha desalentado mi espíritu;
mi corazón se ha turbado dentro de mí.
Recordé los días de antaño, medité en todas tus obras, las hechuras de tus manos contemplé.
Extendí mis manos hacia ti, mi alma es como tierra sedienta de ti.
Escúchame pronto, Señor, ha desfallecido mi espíritu.
No apartes de mí tu rostro, pues me asemejaría a los que descienden a la fosa.
Hazme oír, al despuntar el alba, tu misericordia, porque en ti he esperado.
Hazme conocer el camino en que he de andar porque hacia ti he levantado mi alma.
Arráncame de mis enemigos, Señor, que en ti me he refugiado; enséñame a cumplir tu
voluntad porque tú eres mi Dios.
Tu Espíritu, que es bondadoso, me guía en tierra recta. Por tu nombre, Señor me vivificarás.
Con tu justicia sacarás a mi alma de la tribulación y con tu misericordia exterminarás a mis
enemigos.
Y perderás a todos los que atribulan mi alma porque yo soy tu siervo.
Nuevamente:
Atiéndeme en tu justicia y no entres en juicio con tu siervo. (Dos veces).
Tu espíritu, que es bondadoso, me guía en tierra recta.
 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos
Amén.
Aleluya, Aleluya, Aleluya. Gloria a ti, oh Dios.
Aleluya, Aleluya, Aleluya. Gloria a ti oh Dios
Aleluya, Aleluya, Aleluya, Gloria a ti, oh Dios. Oh Señor nuestra esperanza gloria a ti
Gran Letanía
Diácono: En Paz roguemos al Señor.
Todos: Señor ten piedad.
Diácono: Por la paz que de lo alto viene y por la salvación de nuestras almas, roguemos al
Señor.
Diácono: Por la paz del mundo entero, por la estabilidad de las Santas Iglesias de Dios, y
por la unión de todas, roguemos al Señor.
Diácono: Por esta Santa Morada, y por los que en ella entran con fe, devoción y temor de
Dios, roguemos al Señor.
6
Diácono: Por nuestro Padre y Metropolita Ignacio, por el honorable presbiterado y

diaconado en Cristo, por todo el clero y todo el pueblo, roguemos al Señor.
Diácono: Por nuestros gobernantes para que les asista en toda buena obra, roguemos al
Señor.
Diácono: Por esta ciudad y esta casa hogar (este rancho), por toda ciudad y país; y por todos
los fieles que en ellos habitan, roguemos al Señor.
Diácono: Por la templanza de los aires, la abundancia de los frutos de la tierra y por climas
benévolos, roguemos al Señor.
Diácono: Por los viajeros por tierra, mar y aire, por los enfermos, afligidos y cautivos y por
su salvación, roguemos al Señor.
Diácono: Para que seamos liberados de toda aflicción, ira, peligro y necesidad, roguemos al
Señor.
Diácono: Ampáranos, sálvanos, ten misericordia y protégenos, oh Dios, por tu gracia.

Diácono:  Conmemorando a nuestra santísima, purísima, bendita y gloriosa Señora

(Theotokos) Madre de Dios y siempre Virgen María junto con todos los Santos
encomendémonos a nosotros mismos, los unos a los otros y nuestra vida entera a Cristo
nuestro Dios.
Todos: A ti, Señor.
Sacerdote: Porque a ti se debe toda gloria, honor y adoración,  oh Padre, Hijo y Espíritu
Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
Todos: Amén
Tono 1
“Dios es el Señor, y se nos ha revelado; bendito el que viene en el nombre del Señor”
• (Stijo 1) Confesad al Señor e invocad su nombre santo.

• (Stijo 2) Todos los pueblos me cercaron en el nombre del Señor los vencí.
• (Stijo 3) Fue el Señor quien lo hizo y eso es maravilloso a nuestros ojos.
Inmediatamente, se dicen el tropario y el theotoquio correspondientes, según e domingo indicado. En
caso de una festividad, se dirá el que corresponda (si cae en domingo, el theotoquio será en el tono del
último tropario que se haya cantado):
7
Tropario de Resurrección / Tono 1
 Cuando la piedra fue sellada por los judíos y tu purísimo cuerpo fue custodiado por los guardias,
resucitaste al tercer día, oh Salvador, concediendo al mundo la vida. Por lo tanto, los poderes celestiales
clamaron a ti, oh Dador de Vida: «¡Gloria a tu Resurrección, oh Cristo! ¡Gloria a tu Reino! ¡Gloria a tu
plan de salvación, oh único que amas a la humanidad!
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
Tropario del Primer Domingo de Cuaresma / Tono 2

 Nos prosternamos ante Tu Purísima Imagen ¡Oh Bondadoso! Suplicándote el perdón de
nuestros pecados, ¡Oh Cristo Dios! Porque, por Tu propia Voluntad, aceptaste ascender por
el cuerpo, a la Cruz, para salvar de la esclavitud del enemigo a los que Tú habías formado.
Por consiguiente, con agradecimiento, Te exclamamos: “Habías llenando a todos de alegría,
¡Oh Salvador! Porque Tú has venido para salvar al mundo.”
Ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén
Teotoquio / Tono 2
 Tus misterios, oh Madre de Dios, superan toda reflexión y toda gloria. Aun siendo sellada
en la pureza y conservada en la virginidad, has sido celebrada como Madre sin duda alguna,
por dar a luz al verdadero Dios. A Él suplícale que salve nuestras almas.
Letanía Menor
Diácono: Más y más, en paz roguemos al Señor.

Coro: Señor ten piedad.

Coro: Señor ten piedad.
Diácono: Conmemorando a nuestra santísima, purísima, bendita y gloriosa Señora, Madre

de Dios (Theotokos) y siempre Virgen María, junto con todos los santos, encomendémonos
a nosotros mismos, los unos a los otros y nuestra vida entera, a Cristo nuestro Dios.
Coro: A ti Señor.
Sacerdote: Porque tuyo es el poder y tuyos son el Reino, la fuerza y la gloria,  oh Padre,
Hijo y Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Kathisma I / Tono 1
 Oh Salvador, los soldados que vigilaban tu sepulcro quedaron como muertos por el
resplandor del ángel que anunció las mujeres tu resurrección. Te glorificamos a ti, oh
Resucitado del sepulcro, único Dios nuestro.
 Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
8
Tono 1
 Oh Piadoso, fuiste clavado sobre la cruz por tu propia voluntad y fuiste colocado en el
sepulcro como muerto, oh Dador de la Vida, Tú que destruiste la muerte con tu muerte. Oh
Poderoso, ante ti temblaron los guardianes del Hades cuando resucitaste a los muertos con
tu Resurrección, oh único que amas a la humanidad.
Ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
Tono 1
 Con la voz de Gabriel que se dirigió a ti, oh Virgen, al decir «¡Alégrate!», el Soberano de
todos se encarnó en ti, oh Arca Santa, como dijo el justo David. Te mostraste más amplia
que los cielos cargando a tu Creador. ¡Gloria al que ha morado en ti! ¡Gloria al que ha venido
de ti! ¡Gloria al que nos ha liberado por tu alumbramiento!
Katisma II / Tono 1
 Las mujeres, que vinieron muy temprano a tu sepulcro, al ver la imagen angelical,
temblaron; al surgir la Vida del sepulcro, quedaron asombradas; por eso, se dirigieron a los
discípulos para anunciarles tu resurrección, diciendo: Cristo ha sometido al Hades, porque
es el único Omnipotente, y junto con Él ha resucitado a todos los muertos, y con la fuerza
de su santa Cruz ha disuelto el temor al juicio.
 Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
Tono 1
 Oh Vida de todos, fuiste clavado en la cruz y contado entre los muertos, oh Señor
inmortal, resucitaste al tercer día, oh salvador, y libaste a Adán de la corrupción. Por eso, lo
poderes angelicales te exclamaron, oh Dador de Vida: ¡Gloria a tu Pasión, oh cristo! ¡Gloria
a tu Resurrección! ¡Gloria a tu condescendencia, oh único que amas a la humanidad!
Ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén
Tono 1
 Oh María, Venerable Morada del Señor, levántanos a nosotros los caídos en el fondo de
la desesperación, de la tristeza y del pecado, poque te has mostrado como salvación y auxilio
de los pecadores, oh poderosa intercesora que salvas a tus siervos.
EULOGITARIA / Plagal 1 / Tono 5

¡Bendito eres, oh Señor! Enséñame tus mandamientos.
Todos los coros celestiales se estremecieron al verte contado entre los muertos, oh Salvador,
derrotando el poder de la muerte, resucitando contigo a Adán y librándonos a todos del
Hades.
9
El ángel brillante, de pie ante el sepulcro, habló a las miróforas, diciendo: «¿Por qué, oh
discípulas, mezcláis los perfumes con las lágrimas? ¡Mirad al sepulcro y regocijaos!, porque
el Salvador se ha levantado de la tumba».
Muy de mañana, las miróforas corrieron al sepulcro llorando; mas el ángel ante ellas dijo:
«Ha pasado el tiempo de las lágrimas. ¡No lloréis, mas anunciad a los Apóstoles la
Resurrección!»
Oh Salvador, las miróforas llegaron a tu sepulcro y escucharon al ángel que cantando les
dijo: «¿Por qué contáis al vivo entre los muertos? Resucitó del sepulcro como Dios».
 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Nos prosternamos ante el Padre, su Hijo y el Espíritu Santo, Trinidad Santísima y

Consubstancial, exclamando con los Serafines: «¡Santo, santo, santo eres, oh Señor!»
Ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.
Oh Virgen, tu diste a luz al Dador de la Vida, salvaste a Adán del pecado y otorgaste a Eva
gozo en vez de tristeza, porque el Dios y hombre que por ti fue engendrado, guio a la vida
a los que habían caído.
Aleluya, aleluya, aleluya. Gloria a ti, oh Dios.

Aleluya, aleluya, aleluya. Gloria a ti, oh Dios.
Aleluya, aleluya, aleluya. Gloria a ti, oh Dios, esperanza nuestra, gloria a ti.
Letanía Menor

Coro: Señor, ten piedad

Coro: Señor ten piedad

Coro: A ti, Señor
Sacerdote: Porque bendito es tu Nombre, y glorificado es tu Reino,  oh Padre, Hijo y

Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
10
Todos: Amén.
Ipakoí / Tono 1
El arrepentimiento del ladrón logró el Paraíso y las lágrimas de las miróforas anunciaron
con alegría que has resucitado, oh Cristo Dios, otorgando al mundo la gran misericordia.
Anavathmoi / Antífona I / Tono 1

Oh Señor, a ti clamo en mi pena, escucha mi dolor.
El anhelo divino acompaña siempre a los habitantes del desierto por su alejamiento de lo
efímero.
 Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Ahora y siempre, y por los siglos de los
siglos. Amén
La gloria y el honor son dignos del Espíritu Santo como del Padre y del Hijo; por eso,
alabamos a la Trinidad, igual en el poder.
Antífona II / Tono 1
Dios mío, elévame a la montaña de tus leyes e ilumíname con el esplendor de las virtudes
para alabarte.
Oh Verbo, sostenme en tu diestra, consérvame y protégeme para que no me queme el fuego

del pecado.
siglos. Amén
Por el Espíritu Santo, toda la creación se renueva y vuelve a su primer ser, porque Él es igual
en poder al Padre y al Hijo.
Antífona III / Tono 1

Mi alma se alegra con los que me han dicho: vamos a la casa de Dios, y mi corazón se ha
llenado de gozo.
Gran temor hay en la casa de David, donde están colocados los tronos para juzgar a todas
las tribus y las lenguas de la tierra.
siglos. Amén
El ofrecimiento de la gloria, del poder, del honor y de la adoración es debido al Espíritu

Santo, al igual que al Padre y al Hijo, porque la Trinidad es una en su naturaleza y no en sus
Personas.
El Prokímenon / Tono 1
Ahora me levanto, dice el Señor, realizo la salvación y la proclamo. (2 Veces)
11
(Stíjo) La Palabra de Dios es palabra pura.
Ahora me levanto, dice el Señor, realizo la salvación y la proclamo.
Diácono: Roguemos al Señor
Sacerdote: Porque eres Santo, oh Dios nuestro, y descansas entre tus santos, y a ti
rendimos gloria, oh Padre, Hijo y Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los
siglos.
Todos: Amén.
Tono 2
Coro: Todo lo que respira alabe al Señor (3 veces)
Diácono: Para que merezcamos escuchar el Santo Evangelio, roguemos al Señor.
Todos: Señor, ten piedad (3 veces)
Diácono: ¡Sabiduría! Levantémonos y escuchemos el Santo Evangelio.
Sacerdote: La Paz sea con ustedes.
Todos: Y con tu espíritu
Eothina 9
Sacerdote: Lectura del Santo Evangelio según San Juan (Jn 20, 19-31)
Todos: ¡Gloria a ti, Señor, gloria a ti!
Diácono: Estemos atentos
Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, y estando cerradas
las puertas de la casa donde se hallaban reunidos los discípulos por miedo a los judíos, se
presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: «¡La paz sea con ustedes!» Dicho esto, les mostró
las manos y el costado. Los discípulos se llenaron de gozo al ver al Señor, el cual les repitió:
«¡La paz sea con ustedes! Como el Padre me envió, así los envío también a ustedes.» Dichas
estas palabras, sopló sobre ellos y les dijo: «Reciban el Espíritu Santo: a quienes perdonen
sus pecados, les serán liberados, y a quienes se los retengan, les serán retenidos.» Tomás,
uno de los doce, llamado el mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Le dijeron
después los otros discípulos: «Hemos visto al Señor.» Mas él les respondió: «Si no veo en
sus manos la señal de los clavos, y no meto mi dedo en el agujero de los clavos, y mi mano
en la llaga de su costado, no lo creeré.» Ocho días después, estaban otra vez los discípulos
12
reunidos y Tomás con ellos; vino Jesús estando cerradas las puertas, y se puso en medio y
dijo: «¡La paz sea con ustedes!» Luego dijo a Tomás: «Acerca aquí tu dedo y examina mis
manos, luego trae tu mano y métela en mi costado, y no seas incrédulo, sino creyente.»
Tomás exclamó: «¡Señor mío y Dios mío!» Jesús replicó: «Porque me has visto has creído.
Bienaventurados aquellos que sin haberme visto han creído.» Muchas otras señales hizo
también Jesús en presencia de sus discípulos, que no están escritas en este libro. Pero éstas
se han escrito para que crean que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios; y para que, creyendo,
tengan vida en su Nombre.
Todos: ¡Gloria a ti, Señor, gloria a ti!
El lector dice la siguiente oración:
Habiendo visto la Resurrección de Cristo, prosternémonos ante el Santo Señor Jesús, el

único exento del pecado. Ante tu Cruz, oh Cristo, nos prosternamos. Alabamos y
glorificamos a tu santa Resurrección, porque tú eres nuestro Dios, a ningún otro conocemos
y tu Nombre invocamos. Fieles, acudid todos y prosternémonos ante la Santa Resurrección
de Cristo, porque por la Cruz llegó el júbilo al mundo entero. Bendigamos al Señor en todo
tiempo y alabemos su Resurrección, porque habiendo padecido la Cruz por nosotros,
destruyó la muerte con su muerte.
Luego el lector recita el siguiente salmo.
Salmo 50 / Tono 2 o el de la semana

Ten piedad de mí, oh Dios, según tu gran misericordia; y según la abundancia de tu
compasión, borra mi iniquidad.
Lávame aún más de mi injusticia y de mi pecado purifícame.
Porque yo reconozco mi trasgresión y mi pecado está siempre ante mí.
Contra ti solo he pecado y lo malo he hecho ante ti, para que seas justo en tus palabras
e irreprochable cuando juzgas.
He aquí, fui concebido en iniquidades y en pecado me dio a luz mi madre.
He aquí, Tú amas la vedad, y lo desconocido y oculto de tu sabiduría me has
manifestado.
Me rociarás con hisopo y seré purificado; me lavarás y quedaré más blanco que la
nieve.
Me enseñarás gozo y alegría, y mis huesos humillados se regocijarán.
Aparta tu faz de mis pecados y borra todas mis iniquidades.
Crea en mí, oh Dios un corazón puro, y un espíritu recto renueva en mis entrañas.
No me arrojes de tu faz ni quites de mí tu Santo Espíritu.
Devuélveme el gozo de tu salvación y con espíritu conducente afiánzame.
Enseñaré a los transgresores tus sendas y los impíos se convertirán a ti.
Líbrame de sangre, oh Dios, Dios de mi salvación, y exaltará mi lengua tu justicia.
Abre, Señor, mis labios y publicará mi boca tu alabanza.
Porque si hubieras deseado sacrificio, te lo daría, pero en holocaustos no te
complaces.
El sacrificio a Dios es un espíritu contrito; un corazón contrito y humillado Dios no
desprecia.
13
Favorece, Señor, en tu beneplácito a Sión y sean edificados los muros de Jerusalén.
Entonces te complacerás en sacrificio de justicia, oblación y holocaustos.
Entonces ofrecerán becerros sobre tu altar.
Durante la cuaresma, se cantan los siguientes idiomelos:
Coro:  Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Idomela para el Triodión / Tono 8

¡Ábreme las puertas del arrepentimiento, Oh Dador de la vida! Porque, de madrugada, mi
alma se apresura hacia el Templo de Tu Santidad, acercándose en el templo de mi cuerpo,
enteramente profanado. Pero, como eres Compasivo, purifícame por la compasión de Tus
Piedades.
Coro: Ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.
Tono 8
¡Facilítame los caminos de la salvación, Oh Madre de Dios! Porque, he profanado mi alma
con pecados horrendos y he consumido toda mi vida con la pereza. Pero, por Tus
Intercesiones, purifícame de toda impureza.
Idiomelon / Tono 6
Verso: Tenme piedad, Oh Dios, según Tu Amor, por Tu inmensa Ternura borra mi delito.
Cuando medito en las multitudes de mis obras malas; tiemblo, yo miserable, considerando
el temible Día del Juicio. Pero confiando en la ternura de Tu Compasión, como David a Ti
exclamo: “Tenme piedad, Oh Dios, según Tu Gran Misericordia.”
Diácono: Salva, oh Dios, a tu pueblo y bendice tu heredad. Mira a tu mundo con piedad y
compasión, acrecienta la fortaleza de los cristianos ortodoxos, y envía sobre nosotros tu
abundante piedad. Por la intercesión de la Purísima Madre de Dios (Theotokos) y siempre
Virgen María; por el poder de la venerable y vivificadora Cruz; por las súplicas de las
honorables potestades celestiales; del honorable y glorioso Profeta y Precursor Juan
Bautista; de los santos, gloriosos y alabadísimos apóstoles; de nuestros milagrosos padres,
doctores ecuménicos y jerarcas, Basilio Magno, Gregorio el Teólogo y Juan Crisóstomo; de
los santos y gloriosos mártires; de los santos y justos abuelos del Señor, Joaquín y Ana, de
San Inocencio santo patrón de este santo templo; de (del Venerable Zacarías el Recluso y San
Artemon, Obispo de Seleucia) cuya(s) memoria(s) celebramos hoy; y de todos los santos, te
suplicamos, Señor, todo misericordia, que nos escuches y que tengas piedad.
Coro: Señor, ten piedad (12 veces)
Sacerdote:  Por la misericordia, la compasión y el amor de tu Hijo Unigénito a la

humanidad, con quien eres bendito, junto con tu Santísimo Espíritu bueno y vivificador,
ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
Coro: Amén.
14
Kontakión del 1er Domingo de la Gran Cuaresma / Tono 8
 El Incontenible Verbo del Padre, habiéndose encarnado de Ti, Oh Madre de Dios, se ha
devenido en Contenible, y volvió nuestra imagen corrompida a su hermosura original y la
unió con la Belleza Divina. Por consiguiente, confesamos la Salvación y la anunciamos
difundiéndola por la palabra y obra.
Íkos
 Divinamente, los Profetas habían sido, antiguamente inspirados del misterio de esta
disposición; Pues anticiparon y nos lo anunciaron, a nosotros que en el último de los
tiempos, habíamos devenido en recibidores de su esplendor; Y por ello recibimos el
conocimiento divino. Por eso confesamos un Sólo Dios y un Sólo Señor, Glorificado en Tres
Personas, y sólo a Él adoramos, teniendo una sola fe y un sólo bautismo, por la que nos
revestimos de Cristo. Por consiguiente, confesamos la Salvación y la anunciamos
difundiéndola por la palabra y obra.
Sinaxario:
El 24 de Marzo, en la Santa Iglesia Ortodoxa, conmemoramos al venerable Zacarías el
Recluso y a Artemón, Obispo de Seleucia.
En este mismo día, primer domingo de ayuno, recordamos la restauración de los santos y
venerables iconos, que tuvo lugar a través de los siempre memorables soberanos de
Constantinopla, Miguel y su madre, Teodora, durante el patriarcado de San Metodio el
Confesor.
Versos
(1º Stíjo) Cuando veo los íconos quitados en forma abominable;
(2º Stíjo) Siendo venerados debidamente, me regocijo jubilosamente.
Esta restauración se llevó a cabo en el año 843. El marido de Teodora era iconoclasta.
Después de su muerte, Teodora veneró un icono de la Theotokos frente al patriarca Metodio.
Los demás fieles de la iglesia hicieron lo mismo, venerando todos los iconos,
considerándolos representaciones de sus elementos originales, no ídolos. Teodora oró a
Dios para que perdonara a su esposo durante la primera semana de la Gran Cuaresma; y el
primer domingo de ayuno, ella abrió el camino para colgar los íconos para adornar las
iglesias.
Oh Imagen Inalterable del Padre, por la intercesión de Tus Santos Confesores, ten piedad
de nosotros. Amén.
Katavasías del 1er Domingo de Cuaresma / Tono 4 / (KARAM) (KAZAN)

Oda I
“El antiguo Israel atravesó el fondo del Mar Rojo a pie sin mojarse, y derrotó, el poder de
Amalec en el desierto por las manos de Moisés, cuando fueron extendidas en forma de Cruz.”
Oda III
“Tu Iglesia, se regocijaría en Ti, Oh Cristo, clamándote: Oh Señor, Tú eres mi fortaleza,
firmeza y refugio.”
15
Oda IV
“Cuando la Iglesia Te vio elevado sobre la Cruz, Oh Sol de la justicia, paró en orden ataviada,
y hacia Ti, debidamente, exclamó: “Gloria a Tu Poder, Oh Señor”.
Oda V
“Como Luz Santa, Te habías venido al mundo, Oh Señor mío y Luz mío; Devolviendo a los
que Te alaban con fe, de las tinieblas de la Ignorancia y necedad.”
Oda VI
“Siendo purificada de las manchas de los demonios, por la Sangre que goteó de Tu Costado;
Con voz de alabanza, la Iglesia a Ti exclama: Te ofrezco un sacrificio por la multitud de Tu
Compasión.”
Oda VII
“Los jóvenes Abrahámicos, ardían, en e1 horno en el país de Persia, con el fervor de la buena
alabanza, más que con las llamas de fuego, exclamando: ‘Bendito eres Tú, en el Templo de
Tu Gloria, Oh Señor’.”
Alabemos, bendigamos y adoremos al Señor
Oda VIII
“Cuando extendió sus manos, en la fosa, Daniel cerro la boca de los leones feroces; Y al
ceñirse de las virtudes, los jóvenes amantes de la buena alabanza extinguieron la fuerza del
fuego, exclamando: “Oh todas la Obras del Señor, bendecid al Señor.”
Oda IX Megalynario Tono 2

Las Magnificaciones / Cántico de María (Lucas 1: 46b - 55)
1. Engrandece mi alma al Señor y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador.

¡Oh más honorable que los querubines e incomparablemente, más Gloriosa que los
serafines! Tú, que sin mancilla diste a luz al Verbo Dios, verdaderamente eres la Madre de
Dios, te engrandecemos.
2. Porque ha puesto los ojos en la humildad de su sierva; por eso, desde ahora,
todas las generaciones me llamarán bienaventurada.
3. Porque ha hecho maravillas en mi favor el Poderoso, santo es su nombre y su
misericordia alcanza, de generación en generación, a los que le temen.
4. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio
corazón.
5. Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes; a los hambrientos
colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada.
6. Acogió a Israel, su siervo, acordándose de su misericordia, como había
anunciado a nuestros padres en favor de Abraham y su linaje por los siglos.
16
Oda IX Katavasía / Tono 4 / (Karam) (Kazan)
“Oh Virgen, una piedra angular, había sido cortada, por ninguna mano, de Ti, Oh Montaña
no excavada: Cristo, Quien juntó las naturalezas separadas. Por consiguiente, por Él nos
regocijamos y gozosos Te magnificamos, Oh Madre de Dios.”
Letanía Menor
Todos: Señor, ten piedad.


Todos: A ti Señor.
Sacerdote: Porque te alaban todos los poderes celestiales, y a ti rendimos gloria,  oh

Padre, Hijo y Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos”
Todos: Amén.
Tono 2
Santo es el Señor, nuestro Dios. (2 veces)
Elevad al Señor, nuestro Dios, y prosternaos a sus pies, porque santo es el Señor, Dios
nuestro.
Se canta el exapostelario según la eotina de la semana que corresponda:
Exapostelario de la Novena Eotina / Tono 2 / (**Upon that mount in Galilee**)

 Cerradas las puertas, entraste, oh Señor, y llenaste a los apóstoles de tu Santo Espíritu
cuando soplaste; les diste la paz y les ordenaste que ataran y desataran los pecados. Ocho
días después, mostraste a Tomás tus manos y el costado. Junto con Él exclamamos: «¡Tú eres
Dios, el Señor!»
Exapostelario y Theotoquio para el 1er Domingo de Cuaresma / Tono 2 / (**Hearken, ye

women**)
 Cambiad las buenas nuevas, aplaudid y saludaos jubilosamente exclamando: “¡Qué
maravillosas y extrañas son Tus Obras, Oh Cristo! ¿Quién puede hablar de Tus Grandes
Obras, Tú que con armonía nos juntaste y uniste a Una Sola Iglesia?
17
(**Upon that mount in Galilee**)
 Ahora, las lanzas de la herejía adversaria habían sido aniquiladas y su memoria
disminuida con resonancia. Porque contemplando Tu Templo, Oh Purísima, adornado
esplendorosamente, por las gracias de los íconos venerabilísimos, nos llenamos todos de
júbilo y alegría.
Tono 8
¡Todo cuanto respira alabe al Señor! ¡Alabad al Señor desde los cielos, alabadle en las alturas!
A ti pertenece la alabanza, oh Dios.
¡Alabadle todos sus ángeles, alabadle todos sus ejércitos! A ti pertenece la alabanza, oh Dios.
Estiquera 1. Tono 1
Esta Gloria será para todos sus justos.
 Oh Cristo, alabamos tu pasión salvadora y glorificamos tu Resurrección.
Estiquera 2. Tono 1
¡Alabad a Dios en su santuario; Alabadle en la magnificencia de su firmamento!
 Tú que soportaste la crucifixión, aniquilaste la muerte y resucitaste de entre los muertos,
salva nuestra vida, oh Señor, porque eres el único Todopoderoso.
Estiquera 3. Tono 1
¡Alabadle por sus proezas, alabadle conforme a su inmensa grandeza!
 Oh Cristo, tú que vaciaste el Hades y resucitaste al hombre con tu Resurrección, haznos
dignos de alabarte y glorificarte con corazón limpio.
Estiquera 4. Tono 1
¡Alabadle a son de trompeta, alabadle con salterio y arpa!
 Oh Cristo, te alabamos, glorificando tu humildad digna de Dios. Ti, que naciste de la
Virgen sin separarte de regazo del Padre, que sufriste como hombre y soportaste la
crucifixión voluntariamente; a ti, que saliste del sepulcro como si te levantaras de un sueño,
para salvar al mundo, oh Señor, gloria a ti.
Para el 1er Domingo de la Gran Cuaresma / Tono 4 (**Unto them that fear thee**)
Estiquera 5.
¡Alabadle con pandero y danza, alabadle con cuerdas y flautas!
 ¡Oh Amante de la humanidad! En Ti se regocija ahora la Iglesia, Oh Creador y Novio suya;
Que por Tu Voluntad digna de Dios, la rescataste del error de la idolatría y por Tu Preciosa
Sangre la uniste a Ti; Y gozándose por la elevación de los íconos venerables Te alaba con fe,
glorificándote con alegría.
Estiquera 6
¡Alabadle con címbralos resonantes, alabadle con címbalos de júbilo! ¡Todo cuanto
respira alabe al Señor!
 ¡Oh Amante de la humanidad! En Ti se regocija ahora la Iglesia…
18
Estiquera 7
Levántate, Señor mío y Dios mío, que tu mano se levante y no te olvides para siempre de
tus pobres.
 Elevando la imagen de Tu Cuerpo, Oh Señor Amante de la humanidad, la abrazamos
contemplando su Esencia Original; Aclarando el gran misterio de Tu Disposición. Porque
no nos apareciste, en la ilusión e imaginación, como lo alegan los seguidores de Mani, el
enemigo de Dios, sino en realidad y en la naturaleza del cuerpo, por el cual ascendemos a
Tu Anhelo y Amor Divino.
Estiquera 8
Te confieso, Señor, con todo mi corazón y proclamo todos tus milagros.
 Se había manifestado hoy un día lleno de júbilo; Porque se resplandeciere brillando el
esplendor de la doctrina verdadera; Se presenta ahora, este día como un día lleno de júbilo;
Y la Iglesia de Cristo resplandece adornada por la elevación de los íconos de los Santos y
sus imágenes luminosas, donde se realiza la unión de los fieles, por la participación de Dios.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
Doxasticón del 1er Domingo de la Gran Cuaresma / Tono 6

 En tiempo de ayuno, Moisés recibió la Ley y guio a su pueblo; Mas al ayunarse Elías, cerró
los cielos; Y por el ayuno, los tres Jóvenes Abrahámicos vencieron al tirano transgresor de
la Ley. Pues, por él, haznos dignos, Oh Salvador, de participar de Tu Resurrección
exclamando así: “Santo Dios, Santo Poderoso, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros”.
Ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén
Theotokion Tono 6
 Bendita eres tú, oh Virgen Madre de Dios, te alabamos, pues, por el Encarnado de ti, el
Hades ha sido saqueado; Adán, de nuevo llamado; la maldición, desaparecida; Eva,
liberada; la muerte, aniquilada; y nosotros, vivificados. Por eso, alabamos diciendo: ¡bendito
eres Tú, oh Cristo Dios nuestro, que así te has complacido, gloria a ti!
Continúa la Gran Doxología / Tono 6
Gloria a ti que nos mostraste la luz…
Tono 4 (KAZAN) (EL MASSIH)

 ¡Hoy es, la salvación del mundo! Alabemos al que ha resucitado del sepulcro, esencia
de nuestra vida, porque habiendo destruido la muerta con su muerte nos ha otorgado la
victoria y la gran misericordia.
19

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Maitines del 24 de Marzo de 2024

1er Domingo de la Gran Cuaresma (Domingo de la Ortodoxia); Venerable Zacarías el

Todos: Santo Dios, Santo Poderoso… (3 veces)

 Gloria al Padre y al Hijo …Ahora y siempre…

Señor ten piedad (3 veces)

 Gloria al Padre y al Hijo… Ahora y siempre…

 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo

Ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen

Oh protectora formidable e indesairable, no desprecies nuestras suplicas, oh bondadosa y

Todos: Señor ten piedad (3 veces)

Todos: Señor ten piedad (3 veces)

Sacerdote: De nuevo te suplicamos por los piadosos cristianos ortodoxos.

Todos: Señor ten piedad (3 veces)

Sacerdote: Porque eres un Dios misericordioso que amas a la humanidad, y a ti rendimos

Todos: Amén. En el nombre del Señor bendice padre.

Sacerdote:  Gloria a la Santísima Trinidad, consubstancial vivificadora e indivisible,

Abre, Señor, mis labios y proclamará mi boca tu alabanza. (2 veces)

Aleluya, Aleluya, Aleluya, Gloria a ti, oh Dios

Señor ten piedad, Señor ten piedad, Señor ten piedad.

Aleluya, Aleluya, Aleluya. Gloria a ti, oh Dios.

Aleluya, Aleluya, Aleluya. Gloria a ti oh Dios

Diácono: Por nuestro Padre y Metropolita Ignacio, por el honorable presbiterado y

Diácono: Ampáranos, sálvanos, ten misericordia y protégenos, oh Dios, por tu gracia.

Diácono:  Conmemorando a nuestra santísima, purísima, bendita y gloriosa Señora

• (Stijo 1) Confesad al Señor e invocad su nombre santo.

Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.

Tropario del Primer Domingo de Cuaresma / Tono 2

Ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén

Diácono: Más y más, en paz roguemos al Señor.

Diácono: Ampáranos, sálvanos, ten misericordia y protégenos, oh Dios, por tu gracia.

Diácono: Conmemorando a nuestra santísima, purísima, bendita y gloriosa Señora, Madre

 Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.

Ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.

 Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.

Ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén

EULOGITARIA / Plagal 1 / Tono 5

¡Bendito eres, oh Señor! Enséñame tus mandamientos.

¡Bendito eres, oh Señor! Enséñame tus mandamientos.

¡Bendito eres, oh Señor! Enséñame tus mandamientos.

 Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.

Nos prosternamos ante el Padre, su Hijo y el Espíritu Santo, Trinidad Santísima y

Ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.

Aleluya, aleluya, aleluya. Gloria a ti, oh Dios.

Diácono: Más y más, en paz roguemos al Señor.

Diácono: Ampáranos, sálvanos, ten misericordia y protégenos, oh Dios, por tu gracia.

Diácono: Conmemorando a nuestra santísima, purísima, bendita y gloriosa Señora, Madre

Coro: A ti, Señor

Sacerdote: Porque bendito es tu Nombre, y glorificado es tu Reino,  oh Padre, Hijo y

Anavathmoi / Antífona I / Tono 1

Oh Verbo, sostenme en tu diestra, consérvame y protégeme para que no me queme el fuego

Antífona III / Tono 1

El ofrecimiento de la gloria, del poder, del honor y de la adoración es debido al Espíritu

(Stíjo) La Palabra de Dios es palabra pura.

Ahora me levanto, dice el Señor, realizo la salvación y la proclamo.

Diácono: Roguemos al Señor

Todos: Señor ten piedad.

Diácono: Para que merezcamos escuchar el Santo Evangelio, roguemos al Señor.

Todos: Señor, ten piedad (3 veces)

Diácono: ¡Sabiduría! Levantémonos y escuchemos el Santo Evangelio.

Sacerdote: La Paz sea con ustedes.

Todos: Y con tu espíritu

Todos: ¡Gloria a ti, Señor, gloria a ti!

Diácono: Estemos atentos

Todos: ¡Gloria a ti, Señor, gloria a ti!

Exapostelario de la Novena Eotina / Tono 2 / (Upon that mount in Galilee)