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MUJER DE VALENTÍA, PERUANA DE VALOR

Hablemos de este gran personaje representativo de la historia del Perú y de


una mujer modelo a seguir: María Parado de Bellido. Nace en Huamanga
(Ayacucho) en 1761, sus raíces son indígenas y además es quechua hablante;
sin embargo se convierte en una pieza clave para evitar la muerte de muchos
hombres que en defensa de su tierra, salieron a batallar.
Ella, apenas se entera que el general Carratalá atacaría a Quiroz y a su
batallón, no lo pensó dos veces y a pesar de ser iletrada, hizo escribir una
carta, donde mencionaba estos acontecimientos; este escrito llega a las manos
de Quiroz, quien hace retirar sus tropas un 29 de marzo de 1822. Se logró el
objetivo principal; pero luego llegaron las malas consecuencias, por desgracia
esta carta también llega a manos equivocadas el 30 de marzo de 1822, y
nuestra heroína es capturada y apresada en Huamanga.
María es sometida a maltratos por parte de los realistas, pero ella no traiciona a
nadie, a cambio encuentra la muerte, pero lo hace por una causa justa, porque
tiene ideales independentistas.
Es admirable su valentía para enfrentar la situación, porque ella sabe que
morirá, pero morirá por la tierra que la vio nacer y eso es suficiente para
hacerla feliz, no se deja intimidar por el enemigo, soportando los chantajes y
castigos físicos; tuvo un valor muy grande para defender sus principios e
ideales a cualquier costo; supo priorizar su Perú antes que a sus siete hijos a
quienes dejaría huérfanos de madre; lamentablemente el costo es alto: la
fusilaron un 11 de mayo de 1822.
Quiero destacar en ella su lealtad, lealtad que tuvo soportando los peores
castigos a manos de los españoles, guardando silencio sin delatar a nadie,
pues ella sabía que muchos tenían que morir para poder ver a un Perú libre, un
Perú independiente, cuya gente no tenga ataduras y nunca más vuelva a ser
sometida a los abusos de otros.
La fidelidad que mantiene a su patria y a sus compatriotas es digna de
admiración, de su boca no sale ningún nombre, y hasta sus últimos instantes el
silencio es su única respuesta. A pesar de que le ofrecieron el indulto, ella se
mantuvo firme y con dignidad, no pidió perdón ni confesó algún dato que ella
sabía.
Recordemos a esta mujer por su gran aporte a la Independencia, porque así
como ella, las mujeres también podemos sacar adelante al Perú. Son actitudes
como estas las que debemos tener en cuenta; que sea María Parado el
prototipo de toda joven peruana; ella no tuvo límites en su desprendimiento y
nosotras tampoco debemos tenerlo; ella es una pequeña muestra del potencial
que tenemos guardado en nuestro interior y el que debemos exteriorizar, así
creceremos como íntegras personas y cambiaremos el ahora por un futuro
mejor para nuestro querido Perú.

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