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María Parado de Bellido

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Este aviso fue puesto el 31 de diciembre de 2020.

María Parado de Bellido

Maria Prado de Bellido.jpg

Información personal

Otros nombres María Andrea Parado de Bellido (nombre de casada)

Nacimiento 5 de julio de 1761 o 1777

Bandera del Imperio español Huamanga o Paras?, Corregimiento de Huamanga, Virreinato del
Perú

Fallecimiento 1 de mayo de 1822

Plazuela del Arco

Flag of Peru (1822).svg Huamanga, Departamento de Ayacucho, Perú

Causa de la muerte Fusilamiento Ver y modificar los datos en Wikidata

Familia

Padres Fernando Parado y Jacinta Jayo

Cónyuge Mariano Bellido

Hijos Gregoria, Andrea, Mariano, Tomás, María, Leandra y Bartola

Información profesional

Ocupación Médica Ver y modificar los datos en Wikidata

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María Andrea Bellido Parado (Huamanga o Paras, 5 de julio de 1761 o 1777 - Huamanga, 1 de
mayo de 1822), más conocida como María Parado de Bellido, fue una heroína peruana y mártir
de la Independencia del Perú. Aunque a veces se le califica de “precursora” de la
independencia, en realidad su actuación se dio durante la fase sanmartiniana de aquella
guerra, es decir ya iniciado el proceso final de la Emancipación. Fue una mujer mestiza y
quechua hablante, que exponiendo su bienestar y el de su familia, sacrificó su vida antes de
delatar a otros patriotas que como ella, servían a la causa de la Patria.

Índice
1 Biografía

1.1 Nacimiento y sus primeros años

1.2 Casamiento e hijos

1.3 Labor por la causa libertadora

1.3.1 Contexto

1.3.2 Informante de los patriotas

1.3.3 Apresamiento

1.3.4 Martirio

2 Semblanzas

3 Notas

4 Referencias

5 Bibliografía

Biografía

Se sabe mucho de ella sobre la mayoría de héroes populares, tantas veces anónimos. Ejemplo
de ello, son las trayectorias biográfica de José Olaya y María Andrea Parado. Este anonimato
resulta aún más cierto en el caso de las mujeres, ya que su participación en el proceso
independentista se encuentra invisibilizada.1 De esta heroína se conocen pocos detalles de su
extensa vida, si se tiene en cuenta que al momento de su sacrificio tenía más de 50 años.

Nacimiento y sus primeros años

Diversos historiadores concuerdan en que María Parado nació en huamanga-Paras, luego


denominada Ayacucho, en la sierra sur del Perú. Sin embargo, el sacerdote Carlos Cárdenas
afirmó haber descubierto su partida de bautizo en la parroquia de Cangallo, donde habría
nacido, para ser más exactos, en el actual distrito de Paras. Tampoco hay consenso en cuanto
al año de su nacimiento. Unas fuentes lo sitúan en el año de 1777 y otras en 1761. Pero todas
coinciden en la misma fecha: 5 de julio.

Sus padres fueron Fernando Parado, criollo de ascendencia alto peruana, y Jacinta Jayo, mujer
indígena.

Su infancia fue como la de todas las niñas de su tiempo, que no recibían instrucción y solo se
preparaban para las tareas conyugales.

Casamiento e hijos
Se casó, a la edad de 15 años, con Mariano Bellido, de oficio negociante, y quien hacia 1820
trabajaba en la sección de correos del distrito de Paras en la provincia de Cangallo, donde la
familia tenía su residencia, aunque radicaban temporalmente en Huamanga. De esa unión tuvo
siete hijos: Gregoria, Andrea, Mariano, Tomás, María, Leandra y Bartola. Tanto su esposo como
sus hijos varones colaboraron desde 1820 con las fuerzas patriotas.

Tomás se enroló en las filas patriotas del general Juan Antonio Álvarez de Arenales cuando
éste pasó por Huamanga en 1820, y luego se sumó a los montoneros patriotas acaudillados
por Quiroz Lazón,Nota 1 que se hallaban en actividad en Cangallo. Su esposo y su otro hijo
varón, Mariano, empezaron también a colaborar con aquellos montoneros que actuaban en
coordinación con las fuerzas regulares del general José de San Martín.

Labor por la causa libertadora

Contexto

Ocupada la Ciudad de los Reyes por el Ejército Libertador comandado por el general José de
San Martín y proclamada la independencia del Perú en la Plaza Mayor de Lima en 1821, los
realistas, al mando del virrey José de la Serna, se replegaron a la sierra, mientras que la
mayoría de las ciudades de la costa se sumaban a la causa patriota. También en la sierra
central crecía la adhesión a la causa de la libertad, representada por las guerrillas o
montoneras. La Serna se estableció en el Cusco, en la sierra sur, que se convirtió en el bastión
de los realistas, cuyas fuerzas estaban mayormente formadas por indígenas reclutados a la
fuerza. Desde el Cusco, La Serna envió a sus fuerzas hacia la sierra central, para que
sometieran a los “insurgentes”, como denominaba a los patriotas. Estas fuerzas de represión
estaban comandadas por el general José Carratalá y el coronel Juan Loriga. Carratalá se
encargó de la represión en las actuales provincias de Parinacochas, Lucanas y Huamanga, labor
que realizó de una manera despiadada. Pueblos enteros fueron incendiados y arrasados, y sus
pobladores masacrados. Uno de esos pueblos fue Cangallo.[cita requerida]

Carratalá estableció su cuartel en la ciudad de Huamanga. Uno de sus objetivos era enlazar con
las fuerzas realistas que combatían a las fuerzas patriotas en Ica (costa central), pero enterado
de la derrota de estos en la batalla de La Macacona (cerca de Ica), permaneció en Huamanga y
concentró todos sus esfuerzos en exterminar a las guerrillas de Quirós, en las que militaban el
esposo y los hijos de María Parado.

Informante de los patriotas

Seguramente fue el ejemplo del esposo y sus hijos lo que impulsó a María Andrea a trabajar
también por la causa libertadora, desde la ciudad de Huamanga. Como ella no sabía escribir, le
dictaba a un amigo de confianza, llamado Matías Madrid, las cartas que remitía a su marido
con la finalidad de informarles de los movimientos y los planes del enemigo; información que
Mariano comunicaba de inmediato al patriota Quirós. Así, por ejemplo, gracias a una de esas
misivas, los guerrilleros patriotas pudieron abandonar el pueblo de Quilcamachay, el 29 de
marzo de 1822; al día siguiente el pueblo fue ocupado por los realistas, y allí se encontró la
misiva, olvidada por descuido en la chamarra de un guerrillero.

Este era el texto de dicha carta:

Huamanga, Marzo 26 de 1822

Idolatrado Mariano:

Mañana marcha la fuerza que de esta ciudad a tomar la que existe allí, y a otras personas, que
defienden la causa de la libertad. Avísale al Jefe de esa fuerza, señor Quirós, y trata tu de huir
inmediatamente a Huancavelica, donde nuestras primas las Negretes; porque si te sucediese
una desgracia (que Dios no lo permita) sería un dolor para tu familia, y en especial para tu
esposa.

Andrea.

Apresamiento

Aunque la misiva descubierta solo estaba firmada con el segundo nombre de la heroína, los
realistas pronto identificaron quien era la remitente. Descubierta entonces, María fue
apresada el 30 de marzo en Huamanga y sometida a intenso interrogatorio para que delatara a
los patriotas comprometidos. Carratalá no dudó incluso en aplicarle la tortura. Pero ella se
negó rotundamente a dar nombres y dio reiteradamente la misma respuesta: «¡Yo la escribí!»
Finalmente, Carratalá ordenó su fusilamiento.

Martirio

Fusilamiento de María Parado.

Custodiada por fuerzas de la guarnición realista, María fue llevada en procesión en torno a la
plaza huamanguina y en cada esquina un oficial leyó el bando de la sentencia dictada por
Carratalá, justificando su acción «para escarmiento y ejemplo de los posteriores por haberse
rebelado contra el rey y señor del Perú». Luego fue conducida a la pampa o plazuela del Arco
donde le esperaba el pelotón de fusilamiento. Después de ser amonestada por última vez, para
que revelara el secreto, prometiéndosele la vida, rechazó la proposición sin vacilar. Y resignada
a sufrir el último suplicio, se arrodilló y esperó la muerte con la mirada dirigida al cielo. Al
momento de su martirio tenía más de 60 años.

Se cuenta que su cadáver fue sepultado de limosna por los frailes mercedarios en su templo, a
pocas cuadras del lugar de fusilamiento, mientras sus hijas quedaron abandonadas a su suerte
y hallaron refugio en una iglesia. Luego surgieron varias versiones confusas sobre su familia. Lo
único verificable es que Simón Bolívar estableció una pensión de gracia para las hijas
sobrevivientes de la heroína, pero no se sabe la suerte que corrieron su esposo y sus hijos que
participaron en las montoneras.

Semblanzas

A pesar de la parquedad de los datos biográficos, su fama se ha extendido más allá de su tierra
natal. Leamos lo que ha escrito sobre ella el famoso escritor estadounidense Carleton Beals en
su libro Fuego en los Andes:

"Entre todas las ciudades peruanas destaca Ayacucho, que produjo un grupo notable de
mujeres que destacaron no sólo en las letras del tiempo colonial, sino también por su valor,
entre ellas Venturia Ccalamaqui, Pallchamascachi Ttica, María de Bellido. Madre de hijos que
luchaban por la causa de los patriotas, María de Bellido prefirió marchar al patibulo antes que
traicionar el secreto de los insurgentes. Después de haber sido paseada por las cuatro esquinas
de la plaza pública donde debía llevarse a cabo su ejecución y leída que le fue en voz alta la
sentencia que la condenaba a muerte, la noble mujer dijo, dirigiéndose altivamente a sus
verdugos: "No estoy aquí para informar a ustedes, sino para sacrificarme por la causa de la
libertad".

Carleton Beals

Por su parte, el periodista Aurelio Miró Quesada, en una visita que hizo en Ayacucho a la casa
de la heroína, escribió (en su libro Costa, sierra y montaña):

"Hay otras muchas casas en Ayacucho con tradición o con leyendas. Voy así a visitar la
residencia de la arrogante heroína ayacuchana María Parado de Bellido. Es una casa sobria,
con limpias paredes encaladas y una vid en el patio al lado de unos severos peldaños de
piedra. Allí estaba María Parado de Bellido cuando los tenientes de Carratalá la redujeron a
prisión, asaltando y saqueando la casa. A pesar de todos los esfuerzos, la heroína no quiso
confesar a quién había escrito la carta enviada por ella a las filas patriotas; y después de
habérsela hecho dar la vuelta a la Plaza, como escarmiento público, se la fusiló. [...], en la
pampa del Arco donde actualmente se levanta su estatua"

Aurelio Miró Quesada Sosa#GGC11C

Notas

No sabemos a ciencia cierta si este patriota Quiroz es el mismo guerrillero Cayetano Quirós,
que se contó entre los derrotados por los realistas en la batalla de La Macacona, Ica, el 7 de
abril de 1822.

Referencias

Rabanal, Antonela (27 de noviembre de 2020). «Mujeres en la Independencia del Perú: Una
historia que debe volver a contarse rumbo al Bicentenario». RPP. Consultado el 31 de
diciembre de 2020.

Bibliografía
Roel Pineda, Virgilio: Conatos, levantamientos, campañas e ideología de la independencia.
Incluida en Historia del Perú. Perú Republicano. Tomo VII. Cuarta edición, pág. 277. Lima,
Editorial Mejía Baca, 1982. ISBN 84-499-1611-9

Tauro del Pino, Alberto: Enciclopedia Ilustrada del Perú. Tercera Edición. Tomo 3. Lima, PEISA,
2001. ISBN 9972-40-152-5

Vargas Ugarte, Rubén: Historia General del Perú. Tomo VI. Emancipación (1816-1825). Tercera
Edición, pág. 121-122. Lima - Perú, Editorial Milla Batres, 1981. ISBN 84-499-4818-5

Vega, Juan José: Una heroína popular: María Parado de Bellido. Artículo publicado
originalmente en el diario La República de Lima-Perú, el 03/05/1999.

Varios autores: Grandes Forjadores del Perú. Lima, Lexus Editores, 2000. ISBN 9972-625-50-8

Varios autores: Gran Enciclopedia del Perú. LEXUS EDITORES, 1998. ISBN 9972-625-13-3

Varios autores: Historia del Perú. Lima, Lexus Editores, 2000. ISBN 9972-625-35-4

Gabriela Lavarello de Velaochaga, Publicación de la Carta que produjo su detención y muerte.

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