Está en la página 1de 188

A.

RRELACIONADCONIOLOSNCANPOSICEERCOS
y

DEV VTarisley DC
OTROS TITULOS PUBLICADOS

LA ATLANTIDA, SU EXISTENCIA Y DESAPARICIÓN


Hermes Trimegistro
TRATADO DE COSMOGONIA
E. Schure
EL DIABLO, SU VIDA Y SU PODER
R. Urbano
¿QUE ES EL ESPIRITISMO?
A. Kardec |
LA MISTICA DIABLOLICA |
Gúrres
DOMINE SU FUERZA MENTAL
EN BENEFICIO DE SU SALUD
Robin Fletcher
SORPRENDENTES CASOS
DE MANIFESTACIONES DEL MAS ALLA
Robin Fletcher
SORPRENDENTES CASOS DE TELEPATIA,
ALUCINACIONES, DESDOBLAMIENTO DE
PERSONALIDAD Y MATERIALIZACIONES
Robin Fletcher
AUTO-SUGESTION (Educadora y Curativa)
Herbert A. Parkyn
LA SABANA SANTA DE TURIN
M. Hernández Villaescusa
LA PRACTICA DE LA HOMEOPATIA
Espanet
DE ARTE MAGICA
Aleister Crowley
RITUAL CREATIVO
(Instrucciones para Crear sus propios Rituales Mágicos)
Thomas Healki
CROMOTERAPIA (Curar con losColores)
R.B.Amber
SISTEMA HINDU YOGUI DE LA CURA POR EL AGUA
Ramacharaka, Yogui
BHAGAVAD GUITA
Ramacharaka, Yogui
INQUISICION (Lo que fué y lo que hizo)
Edward Mann
LIBRO DE RITUAL DE ALQUIMIA
Thomas Norton |
ARITMETICA TEORICA DE LOS PITAGORICOS
Thomas Norton
ne
A ón
avY.
¿Tansiey, DO
,
Ñ

- Na

ul

a a
MS y
414%

> -

A AA
e

ye

md
David V. Tansley, D.C.

RADIONICA
Relación con los Campos Etéricos

A TORA HANS
Título del original en Inglés: "RADIONICS INTERFACE
WITH THE ETHER FIELDS"
Autor: David V. Tansley, D.C.
ODavid V. Tansley
Opara la lengua española y todos los países
de habla hispana: Editorial Humanitas, S.L.
Primera edición 1992
Traducción al castellano: Francisco García Llorens
Ode la traducción: Editorial Humanitas, S.L.
ISBN: 84-7910-116-4
Depósito legal: B-21764-1992

Reservados todos los derechos. Ninguna parte de este libro


puede ser reproducida en cualquier forma o por cualquier
medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopiadoras,
cassettes, etc., sin permiso escrito de la editorial.

Impreso por Editorial Humanitas, S.L.


Centro Industrial Santiga
c/ Puig dels Tudons, s/n
Talleres 8, Nave 17
Telf. (93) 718 51 18
08210 Barberá del Valles
Barcelona
ESPAÑA
AGRADECIMIENTOS

Quiero dejar constancia de mi reconocimiento y


sincera gratitud a las instituciones y personas siguientes
por permitirme citar varios de sus trabajos:
The Lucis Press: Treatise on Cosmic Fire, Tele-
pathy and the Etheric Vehicle, A Treatise on White Magic,
Esoteric Healing, todos escritos por Alice Bailly. The Agni
Yoga Press: Brotherhood y Aum. Main Currents in Modern
Though (Corrientes principales del pensamiento moderno)
por permitirme hacer citas de sus números de Septiembre-
Octubre, Vol. 19, Número 1 y de Mayo-Junio, Vol. 24,
Número 5.
The British Society of Doesers: Principles of
Perception in Radiesthesia. Número de junio de 1970 del
BSD Journal, donde apareció como candidato al Bell Essay
Award. The Radionic Association: What is Radionics?,
Radionics and the Electric Patterns of Life and Boi-
Dynamic Rhythm. Neville Sepearman: Blueprint for
Immortality by Dr S. Burr.
Mrs. Marjorie De la Warr y los Laboratorios De la
Warr por permitirme citar de Mind and Matter y de su
boletín y también por facilitarme y permitirme realizar dos
fotografías radiónicas.
Me gustaría reconocer también la deuda que tengo
con Mr. Malcolm Rae por la ayuda que me ha dado y por
sus conocimientos de radiónica, especialmente en el campo
de la simulación de potencia, que ha compartido generosa-
mente conmigo y por permitirme citar de su artículo sobre
Potency Simulatiom que apareció en el número de marzo
de 1973 del Radionic Quarterly. También por facilitarme
los esquemas del simulador de potencia y del preparador
de potencia.
Agradezco también al Dr. y a Mrs. A. Westlake por
la ayuda y el estímulo que me han dado durante años y
por permitirme usar la ilustración de la gráfica psiónica.
Estoy muy agradecido también a la Doctora
Cynthia Drown Chatfield, DC, por permitirme citar de los
escritos de su madre la Doctora Ruth Drown y por facili-
tarme amablemente la fotografía radiónica de la glándula
pineal y por permitirme utilizarla en éste libro.
Me gustaría dar las gracias, también, a mis
colegas de la asociación de radiónica. Su entusiasmo y su
continua fuente de inspiración y, especialmente, a Miss
Elisabeth Baerlein y Mrs. Lavender Dower por permitirme
usar sus fotografías radiónicas.
CONTENIDO

AO e ta Pl co Dd le AAA A 9

AS RADICAL dea liso: 13


a RN AAA
il e ol ds ARO 19
Capítulo Uno. — .
UN CAMPO DE ETER ESOTÉRICO ........... 23

Capítulo Dos.
EL TEJIDO CONECTIVO DEL ESPACIO ....... 35

Capítulo Tres. — y
EL VÍNCULO ETERICO GEOMETRICO ....... 53

Capítulo Cuatro. »
FOTOGRAFIA ETERICA RADIÓNICA ......... 79

Capítulo Cinco. ;
POTENCIACIÓN RADIONICA. REMEDIOS DES-
DE EL CAMPO DEL ETER ............ 109

Capítulo Seis.
EXPLORANDO EL AURA DE LA SALUD ...... 133

Capítulo Siete. ;
LA COLUMNA Y LA TERAPIA RADIONICA .... 145
x

Capítulo Ocho.
RIFMO BIO-DINÁMICO an add a. 157

Capítulo Nueve. :
ALGUNOS ASPECTOS ESOTÉRICOS DE LA RA-
DIÓNICA O A Da 0 163

Apéndices. Para los Practicantes de Radiónica


APÉNDICE A. FRECUENCIAS DE DROWN PA-
RA UTILIZAR EN LA POTENCIACION
CON CUALQUIER INSTRUMENTO RA-
ta" ¿DIONICO DE O AMO 173
APENDICE B. FRECUENCIAS DE DROWN PARA
USAR CON EL INSTRUMENTO
PEGGOTY CUANDO SE TRATEN PRO-
BLEMAS DE LA COLUMNA O DE OTRAS
ZONAS DEL'ESQUELETO. 0 175
APÉNDICE C. EL CONCEPTO DE UNA FRE-
CUENCIA TERAPEUTICA DE CONJUN-
VO A AOS 177

LISTA*DE ILUSTRACIONES orcas


o e 181

LECTURAS SUGERIDAS. 00. alaea ae 183


PROLOGO

Es un gran placer escribir el prólogo a éste, el más


oportuno de los libros, ya que aparece en un momento en
el que es evidente que debe darse una nueva dimensión a
la medicina sí se quiere progresar en el entendimiento de
las causas reales y fundamentales de los trastornos y las
enfermedades.
Durante este siglo, la ciencia médica moderna ha
explorado en profundidad la estructura material y física y
el funcionamiento del cuerpo humano, adentrándose en la
estructura celular y, más allá, en los dominios de la
biología molecular y las fuerzas telúricas que actúan. Pero,
a pesar de estos vastos conocimientos, se ha progresado
muy poco en el entendimiento o detección de lo que Sir
James Mackenzie llamó "el estadio de predisposición a la
enfermedad", ese estadio en que el todavía no se ha
dañado a tejidos o células y no hay cambios patológicos,
histológicos o morfológicos.
El resultado de esta falta de conocimiento esencial
es que la medicina moderna normalmente trata los
trastornos cuando éstos ya han avanzado mucho en el
dominio de la patología. Llegados aquí, el tratamiento de
los síntomas es todo lo que se puede hacer y esto aplica
particularmente a las enfermedades nónicas; o, en otras
palabras, los factores básicos causantes de estos cambios
patológicos son por completo desconocidos y la naturaleza
real de la salud es un enigma.
Este estado de cosas ha dado origen al deseo de
llegar a una curación más fundamental; de aquí el adveni-
miento de lo que se ha dado en llamar medicina marginal
o alternativa, que consiste principalmente en terapias poco
ortodoxas que dan resultado pero que a menudo no
parecen tener una razón de ser científica y por eso no son
aceptables para la medicina ortodoxa y que, sin embargo,
especialmente en enfermedades crónicas, producen curacio-
nes que no pueden conseguirse por los métodos ortodoxos.
Esto es particularmente cierto de las técnicas y
terapias más modernas de medicina radiestésica o prospec-
ción médica y su aliada cercana la radiónica, las cuales
utilizan un sentido supersensible, la facultad radiestésica,
para diagnosticar y curar y para tratar los estados de
predisposición en su raíz. Esto puede hacerse, si es
necesario, a distancia y con remedios en los que no hay
sustancia material, sólo fuerza curativa.
Para explicar los fundamentos de tales técnicas y
terapias es obvio que debemos remitirnos a una nueva
dimensión, ya que estas no pueden explicarse en los
términos corrientes de la ciencia materialista moderna,
pero sí pueden explicarse, al menos tentativamente, si
adoptamos la hipótesis de una fuerza o campo vital
llamado el Etérico, la materia de formación viviendo de los
patrones cósmicos.
Este, por el momento, es un vasto e inexplorado
campo de estudio y práctica, pero el autor de este libro es
un pionero bien cualificado para investigar en tal campo
y en este trabajo ha explorado con un buen propósito. Creo
que los lectores estarán de acuerdo en que el autor es un
excelente guía en estos difíciles y misteriosos senderos y en
que, aunque maneja temas relativamente intangibles, sus
hipótesis y teorías tienen sentido científico y el Etérico es
algo real y activo, y convincente en la explicación de los
fenómenos envueltos en esta nueva dimensión de la
curación.
Por lo que yo sé, no se ha escrito ningún libro de
esta naturaleza, pero estoy seguro de que constituirá un
hito en el proceso de desenmarañamiento de estos nuevos
campos espirituales científicos de estudio, y proveerá una
base sólida para posteriores investigaciones de otros
buscadores tras la verdad y el conocimiento, produciendo

10
finalmente la verdadera integración del arte y ciencia de
la salud y la curación.

AUBREY T. WESTLAKE
BA, MB, B Chir., MRCS, LRCP.

¡dl
fc v cana ques A 78

E go Pa
Re Ú Ñ S

AE
ses

=;
to aA y
_.

yy, dsd A o
e rd
A Adi AT
le
l q
e PR V 1 NN

pa o anE e ij L N
AMA NA
a
se
ada LS ne Y)

cda mo ir A
ro J 5 49 d
at la a

EE EN :y b
para Al >

ud + PSX"
A
Td, MA 02. ÓN
Y "EA '
DABA VAL yr
A ES

3 Par apar? + AMAS O


LIDO AR NÓ ADA, LA Ah Ve
turrón
a qqs ena dy O apo e
dimeneida, ES '
rorriontes Ce Ea ze surta
ermines
PRO. ri: VAGO 9 Pat a e con Y - 8
Mo:
deptraas lo hipicos de ea Pueria 9 AN
Papi Varo, dem sio de Soravacila s cite n de e a
ha o á
Pb 4 AA
pis d e o) e 9 A
Pto,
qero. saradn
q tds y padre.
MinEnto es 1 mid e 2A e r i
Y 34 po o EN
Apr al» da +2

qu. la Aj o y pad pse me


Er '
, : yO d A "

O NE
¿QUE ES LA RADIONICA?

¿QUE ES LA RADIONICA?
Es un método de curación a distancia a través de
un instrumento o cualquier otro medio, que utiliza las
facultades de percepción extra-sensorial. De este modo, un
practicante entrenado y competente puede descubrir la
causa de enfermedad de cualquier sistema viviendo, sea
éste humano, animal, planta o la tierra misma. Entonces
se pueden aplicar al paciente o sujeto las energías terapéu-
ticas apropiadas para ayudarle a restaurar su salud a un
nivel óptimo.

ORIGENES Y DESARROLLO DE LA RADIONICA


El doctor Albert Abrams, distinguido médico
americano nacido en San Francisco en 1.863, fue quien dio
origen a la radiónica. Sus padres habían planeado que
completaría su educación en el Balliol College, Oxford,
pero una visita a Heidelberg lo decidió a continuar sus
estudios en la Universidad de esa ciudad. Allí se graduó
como Doctor en Medicina con matrícula de honor y la
medalla de oro de la Universidad, con lo que demostró
estar tan altamente cualificado como cualquier médico de
su tiempo. En América, Abrams ejerció como Profesor de
Patología y fue Director del Cooper Medical College (Dept.
de Medicina, Universidad Leland Stanford de California);
ocupó también el cargo de Presidente de la Sociedad
Quirúrgica Médica de San Francisco. Escribió varios libros
de textos médicos —uno de ellos, que trataba de los
reflejos espinales, tuvo cinco ediciones en cuatro años— y,
gradualmente, ganó por sí mismo una gran reputación

13
nacional como especialista en enfermedades del sistema
nervioso.
En el curso de sus investigaciones, Abrams ideó un
instrumento con indicadores graduados que le permitía
medir las reacciones e intensidad de las enfermedades de
sus pacientes. De este proyecto, que Abrams llamó ERA o
Reacción Electrónica de Abrams, surgió la Radiónica tal y
como hoy la conocemos. La labor pionera de Abrams
obtuvo la crítica de sus colegas de profesión, que hicieron
todo lo posible por desacreditarlo. Con el tiempo, sus
instrumentos llegaron a Inglaterra y en 1.924, año de la
muerte de Abrams, una Comisión bajo la Presidencia de
Sir Thomas (más tarde Lord) investigó sus hallazgos. Para
asombro de la profesión médica, la Comisión tuvo que
admitir, a regañadientes y después de llevar a cabo
pruebas exhaustivas, que las afirmaciones de Abrams
sobre el valor diagnóstico de su método estaban probadas.
Más tarde, Lord Horder dijo: "La proposición fundamental,
definida originalmente por Abrams, debe tenerse como
altamente probable".
Médicos perspicaces adoptaron la técnica de
Abrams y entre ellos, no por último menos importante, Sir
James Barr, quien escribió un libro que trataba sobre los
trabajos de Abrams y su gran contribución a la medicina,
En los Estados Unidos, una Quiropráctica llamada
Ruth Drown añadió nuevas perspectivas a la Radiónica
con el desarrollo de nuevos y más sofisticados instrumen-
tos y nuevas técnicas de diagnóstico y tratamiento. En el
curso de sus investigaciones, la Doctora Drown descubrió
que no sólo era posible diagnosticar la enfermedad del
paciente a distancia, sino que también podía tratársele a
distancia usando una muestra de sangre del individuo en
cuestión.
En los años 40 se inició en los Laboratorios De la
Warr de Inglaterra una gran labor de investigación. De
nuevo los instrumentos y las técnicas se refinaron y
mejoraron y se emprendieron investigaciones en el campo
de la fotografía radiónica. Hoy en día, la radiónica se
mantiene al paso de los recientes progresos científicos y el

14
moderno practicante, sin perder de vista el axioma científi-
co de que "Todo es Energía", considera a sus pacientes no
sólo en términos físicos sino como un serie de campos de
energía compenetrados. Encuentra conceptos en filosofías
antiguas que definen al hombre como un sistema de
energía multi-concéntrico, conceptos que concuerdan con
hallazgos modernos, por lo cual puede decirse que lo
radiónica es un acampo de actividad donde la física y la
para-física, la ciencia y la religión confluyen y se funden.

ALGUNOS CONCEPTOS
FUNDAMENTALES DE LA RADIONICA
Básico para la teoría de la radiónica es el concepto
de que el hombre y todas las formas de vida comparten un
substrato común que los'sumerge en el campo de energía
electromagnética de la tierra; y, además, cada forma de
vida tiene su propio campo electromagnético que, si se
distorsiona suficientemente, resulta finalmente en una
enfermedad del organismo.
Aceptando que "Todo es Energía", la Radiónica
contempla los órganos, las enfermedades y los remedios
como poseedores de una frecuencia o vibración particular
a cada uno de ellos. Estos factores pueden expresarse en
valores numéricos y se conocen en Radiónica como "Indi-
ces"; de aquí los indicadores graduados de los instrumentos
radiónicos en los que se miden las funciones o "Indices"
para hacer diagnósticos o tratamientos.
Un concepto final e importante en la Radiónica es
que el campo electromagnético o campo de la tierra, con
una variedad de frecuencias más sutil que va más allá del
espectro electro-magnético, constituye el nexo de unión
entre el paciente y el practicante durante el análisis y
tratamiento. Es un axioma antiguo que "La energía sigue
al Pensamiento" y que el pensamiento se trasmite a través
del campo de energía de la tierra; de esta manera el
practicante puede armonizar con el paciente.

LA TECNICA DE LA RADIONICA
Para hacer sus análisis, el practicante de radiónica

15
utiliza los principios de la prospección por medio de aplicar
sus facultades de percepción extra-sensorial (PES) al
problema de detectar la enfermedad, de la misma manera
en que el zahorí detecta la localización de agua, petróleo o
depósitos minerales. La forma particular de PES que se
usa en Radiónica es, a menudo, la facultad radiestésica por
medio de la cual el practicante, a través de una serie de
preguntas formuladas mentalmente, obtiene información
relativa a la salud de su paciente a la que la mente
consciente y pensante no tiene acceso directo.
En los primeros tiempos de la Radiónica normal-
mente era necesario que el paciente estuviera presente
cuando se hacía el análisis y se administraba el tratamien-
to. Actualmente no es así, ya que se ha descubierto que
una gota de sangre o un poco de pelo son suficientes para
establecer la conexión necesaria con el paciente a través
del campo de energía de la tierra.
De este modo, la práctica generalizada cuando se
consulta a un practicante de Radiónica es que el paciente
envíe al practicante una gota de sangre o una muestra de
pelo acompañados por un historial clínico y una descrip-
ción completa de los síntomas. De todas maneras, algunos
practicantes creen conveniente ver personalmente a sus
pacientes en la consulta inicial. Para hacer el análisis, el
practicante coloca la muestra del paciente en su instru-
mento radiónico, entonces sintoniza su mente con el
paciente y ajusta su instrumento de una forma análoga a
como se ajusta o sintoniza una radio para recibir una
transmisión distante. Una vez hecho esto, el practicante,
ayudado por sus conocimientos de anatomía, fisiología y
naturaleza del campo de fuerza humano, procede a
formular, en un orden metódico y predeterminado, una
serie de preguntas relativas a la naturaleza de la enferme-
dad del paciente y a los factores causantes envueltos.
Un análisis radiónico no es un diagnóstico médico
sino un medio para identificar y evaluar las causas
subyacentes que originan estados patológicos y sus sínto-
mas. Estas pueden coincidir o no coincidir con la opinión
médica corriente, pero esto debe esperarse cuando la

16
aproximación del practicante se haga por líneas para-
físicas y cuando los factores de causa con los que se
encuentre no puedan ser clínicamente identificados o
calibrados.

TRATAMIENTO RADIONICO
Cuando el análisis radiónico se ha completado y el
paciente ha averiguado las causas principales de la
enfermedad del paciente, determinará qué tratamiento
requiere el paciente para eliminar tales causas. En vistas
de que todos los estados patológicos y sus causas tienen en
propia frecuencia o vibración particular, él selecciona
aquellas "Frecuencias" que compensarán el desequilibrio
o enfermedad en el sistema del paciente. Estas "Frecuen-
cias" se proyectan o trasmiten del practicante al paciente
mediante un aparato de tratamiento radiónico, usando de
nuevo la gota de sangre o la muestra de pelo como cone-
xión. Algunos practicantes utilizan, como adición a la
influencia curativa de la "Frecuencia", homeopatía, Bach
(flor) u otros remedios similares. Estos se colocan en el
instrumento junto a la muestra del paciente.
Puede que sea difícil de aceptar que tal tratamien-
to pueda ser efectivo a distancia. Sin embargo, el peso de
la evidencia clínica muestra que es muy efectivo en un
número significativo de casos. La "Acción a Distancia", que
así se llama este fenómeno, no es nueva para la ciencia;
hoy en día se están llevando a cabo muchos trabajos de
investigación en este campo por instituciones científicas y
se ha descubierto que tanto los humanos como las plantas
responden a patrones mentales proyectados y que este
fenómeno se da sin importar la distancia que haya entre
los sujetos bajo investigación. Estos hallazgos confirman la
racionalidad de la Radiónica.
De forma adicional o alternativamente, el practi-
cante de radiónica puede recomendar otras formas de
tratamiento, como cambios en la dieta del paciente,
osteopatía, quiropraxia, homeopatía o remedios de hierbas;
o, si la naturaleza del caso justifica la atención médica,
puede enviar al paciente a su médico, asegurándose sin

17
embargo de que el paciente recibe aquel tratamiento que
restaurará la armonía a su ser.
Una de las ventajas de los análisis radiónicos es
que, a menudo, es posible descubrir con él estados graves
en potencia en un estadio temprano y, mediante un
tratamiento adecuado, evitar que se desarrollen hasta el
punto en que pueden ser identificados clínicamente.
Además, como el tratamiento radiónico se efectúa en un
nivel no físico no puede dañar ningún tejido vivo o produ-
cir efectos secundarios no naturales.

RADIONICA. UNA APROXIMACION


ENTELEQUICA A LA CURACION
La entelequia se define en el diccionario médico
como "terminación; completo desarrollo o realización; la
completa expresión de una función. Un principio vital
operativo en las criaturas vivientes como un espíritu
directivo". La Radiónica, en su naturaleza pura, es una
aproximación enteléquica u "holística" a la curación;
engloba todo lo concerniente al hombre total, su mente,
sus emociones y los sutiles campos de fuerza que gobier-
nan el funcionamiento y bienestar de sus sistemas orgáni-
cos visibles. La ciencia ortodoxa ha consagrado su atención
casi exclusivamente a las diferentes enfermedades y, en el
proceso, parece haber perdido de vista al individuo. A la
inversa, la Radiónica se interesa en la curación del hombre
completo, en el patrón de salud o entelequia del individuo.
El patrón de salud es una fuerza singular y unitaria
dentro de las estructuras del hombre, que asegura el
adecuado y óptimo funcionamiento de los sistemas de su
cuerpo. El propósito de la terapia radiónica es ayudar al
individuo a recuperar su patrón de salud óptimo.

18
INTRODUCCION

Escribí mi primer libro "Radionics and The Subtle


Anatomy of Man” (La Radiónica y la Anatomía Sutil del
Hombre) principalmente para los practicante de radiónica
porque sentía la necesidad de llamar la atención sobre
aquellos aspectos del hombre que están más allá de los
mecanismos físicos. Resultaba evidente que las enseñanzas
de la Antigua Sabiduría tenían una aplicación directa y
práctica a la radiónica y que incrementarían su valor como
técnica de diagnosis y terapéutica.
La respuesta al libro por los practicantes de
radiónica ha sido muy satisfactoria. Muchos han incorpora-
do las técnicas que se describían en él a su práctica diaria
con buenos resultados, y la Escuela de Radiónica incluye
ahora la asignatura de Anatomía del Hombre y los princi-
pios básicos de la terapia de Centro en su programa de
enseñanza.
A juzgar por el número de cartas, e incluso llama-
das telefónicas, que he recibido desde países tan lejanos
como América, Australia, Nueva Zelanda, Malasia y
Sudáfrica, este libro tocó una cuerda sensible en otros
campos. Médicos, osteópatas, masajistas, fisioterapéutas,
sanadores y profanos han contactado conmigo, algunos
buscando más conocimiento sobre el tema, otros queriendo
compartir sus conocimientos, ideas y experiencias y otros
queriendo ayudar en temas de salud.
El tema central en la respuesta a "La Radiónica y
la Anatomía Sutil del Hombre" ha sido bastante singular.
Los lectores dicen que toma un tema muy complicado,
como es el de los cuerpos sutiles del hombre y lo presenta

19
de una forma simple y, sin embargo, práctica e informati-
va. Muchos practicantes, especialmente aquellos que
tienen contacto físico con sus pacientes, como los masajis-
tas, fisioterapeutas, osteópatas y quiroprácticos, se han
dado cuenta al leer el libro de que los cuerpos sutiles del
hombre son una realidad inmediata y que ellos han venido
tratando con estos aspectos sutiles, a menudo sin ser cons-
cientes de ello, en su trabajo diario. De alguna manera, los
conceptos contenidos en el libro han ampliado su entera
concepción de la salud y la curación en el marco de sus
disciplinas particulares. Creo que esto ha ocurrido así
porque el conocimiento de estos temas es básico para
cualquier arte de la curación, sea ésta radiónica, homeopá-
tica, quiropraxia o cualquier otro método.
En este libro, el tema central será la Radiónica y
su practica en relación con el campo de fuerza en el que
vivimos y nos movemos, en el que existimos; por eso, será
de interés otra vez para los practicantes de otras disci-
plinas y para los estudiantes de las Enseñanzas de la
Sabiduría. Creo firmemente que en el entendimiento de
unos amplios principios básicos, especialmente aquellos
conectados con el Campo Vital en el que vivimos, reside un
lazo común de armonía que debe ser compartido por todas
las artes curativas.
Con el campo de energía en el que vivimos como
telón de fondo, voy a exponer una teoría que intenta
explicar cómo el practicante de radiónica conecta con su
paciente a distancias de miles de kilómetros para la
diagnosis y el tratamiento. Esta teoría plantea considera-
ciones metafísicas y las relaciona directamente con
análogos orgánicos y celulares.
Es incluso más remarcable, si cabe, el hecho de
que una cámara radiónica, unida a una gota de sangre,
puede fotografiar los órganos internos del donante a
cualquier distancia. O ¿es realmente remarcable?. La
Doctora Drown no parece creerlo así y ella fue la primera
en el mundo en descubrir esta técnica. Exploraré algunas
facetas de este tema, que exige un esfuerzo importante de
la imaginación, con la esperanza de que quizá ello estimule

20
a alguien a investigar este fenómeno e incremente en otros
el reconocimiento de que todos compartimos un campo de
energía común, un conocimiento útil para cualquiera que
ejerza las artes curativas.
Ruth Drown no sólo fue pionera de la fotografía
radiónica, sino que también tuvo la idea de que si uno
podía obtener fotografías de éter, porqué no obtener
también remedios homeopáticos. Como veremos, hoy en día
esta idea se ha convertido en una técnica completa y la
simulación de potencia radiónica está aquí para quedarse;
podría añadirse que un número creciente de médicos,
osteópatas y practicantes de radiónica de todo el mundo lo
utilizan.
Este volumen cubrirá otros aspectos prácticos que
tienen que ver con el diagnóstico radiónico y técnicas
terapéuticas para el practicante. Pero, es sólo la intro-
ducción a un vasto tema. Se ha escrito con una idea en
mente, la de estimular al lector a mirar más allá, a
considerar sin prejuicios ideas y conceptos que a primera
vista pueden parecer erróneos, pero que después y con un
poco de estudio empiezan a tener sentido y abren nuevas
perspectivas, nuevas áreas de pensamiento y niveles de
conciencia no considerados hasta ahora.
Por supuesto, la Radiónica no es una materia
científica en la acepción común de la palabra, pero esto no
invalida de ninguna manera su profundo valor para
aquellos que la practican ni para aquellos que se benefi-
cian del tratamiento. La gente se está desengañando
rápidamente de los métodos de curación más ortodoxos, no
porque estos carezcan de valor, sino porque tienden a
despojar al hombre de su dignidad y a aniquilar cualquier
sentimiento de pertenencia a un esquema de cosas univer-
sal que pueda tener. Carl Jung probablemente resumió
esto mejor que nadie cuando dijo: "La gente se ha cansado
de la especialización científica y el intelectualismo raciona-
lista. Quiere oír verdades que no estrechen sus miras sino
que las amplíen, que no los suman en la oscuridad sino
que los iluminen, que no pasen por ellos como el agua sino
que penetren en ellos hasta el tuétano".

21
En realidad, hay un número cada vez mayor de
científicos y médicos que se interesan por la radiónica;
entre ellos está el profesor Willian Tiller de la Universidad
de Stanford, California, que ha estudiado el tema y ha
escrito sobre él. No hay duda de que otros le seguirán y,
un día, la ciencia dedicará tiempo a estudiar seriamente la
radiónica y la reconocerá como un campo valioso de
investigación y estudio.
La Radiónica, como cualquier otro cuerpo de
conocimiento, puede asemejarse a un cristal, en el que
cada faceta representa un aspecto determinado. Cuando
esas facetas entran en contacto con otro cuerpo de conoci-
miento se produce una interfase y a través de la interfase
puede establecerse una conexión común de armonía y
puede producirse un intercambio de energía en forma de
información, y las actitudes aisladas pueden disiparse. La
Radiónica establece numerosas interfases con muchos otros
cuerpos de conocimiento, particularmente la medicina, la
física, la curación y el estudio del pensamiento humano en
acción. La Radiónica es única también porque tiene el
potencial de unir conceptos espirituales y ortodoxos, espe-
cialmente en el campo de la curación, un área donde éstos
se necesitan desesperadamente.
Hoy en día el interés por la radiónica crece rápida-
mente. La demanda de literatura sobre el tema nunca ha
sido tan grande porque la gente está reconociendo el valor
intrínseco de la radiónica, desde un punto de vista filosófi-
co y como un arte de curación que busca los factores
causantes de la enfermedad. Muchos han visto cómo
problemas crónicos de salud que los han atormentado
durante años y han resistido a cualquier intento de
curación, ceden y desaparecen de una forma suave y sin
efectos secundarios. Vuelven a gozar de buena salud otra
vez, lo cual dice mucho en favor de este tratamiento a
distancia, Puede que no haya estadísticas científicas que
muestren los éxitos de la radiónica, pero muchas personas
se sienten mejor por su causa.

22
Capítulo Uno

UN CAMPO DE ETER
ESOTERICO
"La aceptación de la realidad de un cuerpo etérico que se
compenetra con el estado material es el sine qua non de
todo operador radiónico. Este cuerpo eiérico parece fun-
cionar en un mar de energía vital etérica, que es en
realidad fundamental para las fuerzas materiales del
magnetismo y la electricidad".
Boletín de Radiónica (primavera 1986)
George De la Warr.

Para una real comprensión de la radiónica es esen-


cial entender el concepto de que vivimos en un vasto
campo de energía, y que en este campo se dan continua-
mente acciones e interacciones que influyen en nuestro
bienestar y en nuestros procesos de desarrollo interno.
Cada acción, cada pensamiento que uno tiene, se refleja a
través de este campo de energía y, según su naturaleza,
puede retardar o ayudar al proceso de evolución del
individuo y, finalmente, de su Ser interior.
Obviamente, podemos utilizar mejor el campo de
energía en el que vivimos si tenemos algunos conocimien-
tos básicos de su estructura y función. Esto es particular-
mente cierto si se practica la terapia radiónica, porque en
la radiónica se utiliza este campo día tras día con propósi-
tos curativos. El conocimiento, como indicó Meister
Eckhart una vez, es poder, y un claro conocimiento de los
campos etéricos da al practicante de radiónica el poder de
diagnosticar y tratar de una manera más esotérica y sutil.
Lo que sigue es breve y va al grano. Es simplemen-
te un bosquejo de los campos etéricos en los que el hombre
vive y tiene su existencia, de acuerdo con las enseñanzas

23
de la sabiduría antigua. Como practicantes de la radiónica,
podemos utilizar este bosquejo como una hipótesis de
trabajo para la teoría y práctica de la radiónica. Este
bosquejo, como ya he dicho, es muy básico y es cosa del
individuo que, una vez lo haya entendido, añada detalles
de otras fuentes. De esta forma, un conocimiento creciente
de los campos etéricos llevará a un entendimiento cada vez
mayor y, finalmente, a una gran pericia en la identifica-
ción y manipulación de las energías curativas presentes en
ello. Esto no solo se aplica a los practicantes de radiónica,
sino a todo aquel que ejerce alguna forma de curación.
Creo que vale la pena mencionar que gráficos
similares a estos se usan en círculos científicos. El Doctor
Elmer Green, Director del Laboratorio Psicofisiológico de
la Fundación Menninger y Director del Instituto de
Psicosíntesis, usó una gráfica similar para ilustrar su
conferencia "Cómo hacer uso de la teoría del campo
mental", como se puede ver en la Transcripción de las
Dimensiones de la Curación, que tuvo lugar en la Univer-
sidad de Stanford, California, en septiembre de 1972. En
el mismo simposio, el profesor William Tiller habla de usar
un modelo similar en su conferencia "Conciencia, Radia-
ción y desarrollo del Sistema Sensorial". El profesor Tiller
es jefe del Departamento de Ciencias Materiales de la
Universidad de Stanford y Consejero de Industria del
Gobierno Americano en metalurgia y física del estado
sólido. También es una autoridad mundial en ciencias de
la cristalización. El Profesor Tiller y el Doctor Green han
tomado información de los escritos de Alice Bailey; el
primero llega incluso a hablar de los chakras y se refiere
a ellos como transmisores/convertidores mayores de
energía. Así, las enseñanzas esotéricas ya están siendo
utilizadas y, gradualmente, tendrán aceptación en estos
niveles.
Aunque el gráfico muestra detalles de la anatomía
sutil del hombre, quizá seria bueno resumirlos brevemen-
te.
El hombre como reflejo del macrocosmos está
formado por la trinidad Espíritu, Alma y Cuerpo. El Espí-

24
LOS CUERPOS SUTILES DEL HOMBRE EN LOS CAMPOS DE ETER

I
DIVINO
1% Eter Cósmico

já Voluntad
MONADICO
2% Eter Cósmico LA MONADA

Inteligencia Amor
Sabiduría

"
ESPIRITUAL
3% Eter Cósmico

Iv
INTUITIVO LA TRIADA ESPIRITUAL
4% Eter Cósmico

Átomo permanente Búdico

v Atomo permanente Mental:


MENTAL
Abstracto
Antehkarana EL ALMA

MENTAL
Concreto
W/ Unidad Mental

vi
EMOCIONAL permanente Astral

LA PERSONALIDAD

LESS
vil o Atomo permanente físico

A A A OT A
CUERPO ETERICO 19 Eter

ai yA MA E 49 Eter

As ia sa 10
CUERPO MATERIAL Gaseoso

AAA A a

ritu del hombre, al que se hace referencia frecuentemente


como Mónada, tiene una naturaleza triple también,
compuesta por la tríada unificada de Voluntad, Amor,
Sabiduría e Inteligencia Activa; en otras palabras, tenemos
la Trinidad de Padre, Hijo y Espíritu Santo por utilizar la
terminología cristiana. O la tríada puede ser Determina-

25
ción, Amor e Inteligencia, de forma más abstracta, Energía
positiva, Energía equilibrada y Energía negativa.
La mónada es la parte inmortal del hombre,
aquella que se reencarna, es el Espíritu germinal que
contiene las potencialidades de la Divinidad. No tiene
nada que ver con el término espiritualista espíritu, que
puede significar cualquier cosa, desde una entidad incorpó-
rea a una zona vaga de la que emanan mensajes. El
Espíritu puede simbolizarse con un triángulo (o una cruz
de brazos iguales).
Para encarnar la Mónada o Espiritual, el hombre
tiene seis centros de fuerza estables; alrededor de ellos se
disponen los cuerpos sutiles. Estos centros de fuerza se
conocen como átomos permanentes, de los cuales hay cinco
más, lo que se conoce como unidad mental. Los átomos
permanentes son aquellos átomos que han venido por el
poder atrayente del segundo componente de la Mónada, el
componente Hijo o Cristo.
Los átomos corrientes de nuestros cuerpos son
vivificados por el tercer componente o Madre. Estos átomos
permanentes son los depósitos del Karma, a menudo se les
denomina "Arbitros del destino". Ellos son, si se prefiere,
los bancos de memoria de datos que determinan la natura-
leza y calidad de nuestros cuerpos.
Ahora, el componente Voluntad de la Mónada
enlaza con lo que se conoce como átomo permanente
átmico. El componente Sabiduría enlaza con el átomo
permanente búdico y el tercer componente, Inteligencia o
Mente, con el átomo permanente manásico. Así que la
Mónada expresa el primer paso hacia la encarnación a
través de un triángulo de energía.
La reacción de cada uno de estos tres puntos del
triángulo produce actividad en el llamado plano mental
superior, y esta actividad consiste en doce pétalos que
rodean un punto latente de fuego.
Esto puede simbolizarse con un círculo dividido en
doce secciones. Estas son los doce signos del zodíaco, las
doce puertas y las doce piedras de fundamento de la
ciudad de Jerusalén, los doce discípulos en la Ultima Cena.

26
En el plano físico tenemos los doce nervios craneanos. Uno
de ellos, es el "Vagus", que une la cabeza y el corazón, la
vía de paso del hálito del Espíritu Santo.
Cuando uno penetra en el significado de la anato-
mía sutil del hombre, no se puede evitar tener un punto de
vista diferente sobre la patología; por ejemplo, la neuralgia
del trigémino, llamada comúnmente "tic doloroso", se
identifica no solamente como un estado inflamatorio de
uno de los nervios craneanos sino como un malestar
profundo que existe entre el alma y sus vehículos de
expresión en los tres mundos. El alma es, entonces, el
vehículo de manifestación del Espíritu y a través de ella el
Espíritu finalmente recupera el control de la materia en
los niveles bajo el alma.
Estos niveles o "tres mundos", que así se llaman
en la filosofía india, son el mental, el emocional o astral y
el físico, que incluye también los niveles etéricos. Para
penetrar profundamente en la materia, el alma emite su
nota, que activa los átomos permanentes del bajo-yo, y en
una profunda meditación elabora una forma pensada que
finalmente se precipita en el plano físico como un ser
humano. Si el alma distrae su atención del trabajo de
formación de la forma pensada, esto resulta en el naci-
miento de un niño muerto.
Una forma pensada viable consiste en un cuerpo
mental, un cuerpo astral o emocional y un cuerpo etérico,
que es el arquetipo para la forma física. El bajo-yo es
también una tríada de formas, pero el etérico y el físico
deben considerarse como cuerpos separados y esto nos da
la Ciudad que está situada en cuadro y que, de hecho, se
representa como un cuadro. Así, tenemos la Nueva Jerusa-
lén del Libro de la Revelación en la que el Cuadrado del
bajo-yo y el Círculo del alma son conciliados por la Cruz de
brazos iguales del Espíritu.
Estoy seguro de que a todos nos resulta familiar la
expresión "no seas cuadrado", que fue parte de la jerga
moderna de los años 50 y primeros 60. Curiosamente esa
jerga es una expresión inconsciente de una verdad esotéri-
ca. Uno no debería ser un cuadrado o, en otras palabras,

21
Xx

no debería dedicarse solamente a su bajo-yo. Probablemen-


te recordarán que los últimos 60 nos trajeron el Poder de
las Flores, en el que el ideal era el amor y la paz, ambos
atributos del alma o "Flor esencial" como Miguel Serrano
la llama en su libro del mismo título.
El Poder de las Flores fue rápidamente minado por
las drogas que las agencias de las fuerzas de Ahriman
hicieron disponibles. Muchos jóvenes fueron rápidamente
desviados al mundo de los fenómenos astrales y psicodé-
licos, de vuelta a los dominios del Cuadrado, una forma a
través de la que las fuerzas espirituales no fluyen libre-
mente y en la que abundan las formas ilusorias.
La Revelación a San Juan es un excelente tratado
sobre la anatomía sutil del hombre y en ella se presta
particular atención a los chakras y al flujo de fuerzas
espirituales a través de esas puertas. Cuando Juan
escribe:

"Y vi en la mano derecha de aquel que estaba sentado


sobre el trono un libro escrito por dentro y por el rever-
so, sellado con siete sellos".

Está hablando de los siete chakras principales que


gobiernan al hombre y sus acciones. Siguen detalles sobre
las interacciones de estos centros a medida que el hombre
descubre su naturaleza espiritual; hay mucho que apren-
der de su visión en Patmos.
No es mi intención entrar en detalles referentes a
la acción de un chakra sobre otro y las alteraciones de los
estados de conciencia que se dan en tales casos. Simple-
mente he tratado de dar una descripción, lo más breve
posible, de la anatomía sutil del hombre para mostrarles
que no es algo vago, sino una forma definida constituida
por varios grados de materia y que en cada aspecto de su
naturaleza y forma revela la Naturaleza del hombre
Divino en el que vivimos, nos movemos y existimos.
A aquellos que han prestado atención al mandato
délfico "Conócete a tí mismo" y conscientemente ha tratado
de trazar el mapa de los niveles internos de su ser, les
resultará familiar lo que he descrito. Ahora ¿por qué

28
deberían interesarnos la constitución esotérica del hombre
y los campos etéricos?
Bien, para empezar adelantaría, como tanteo, la
sugerencia de que cualquier sanador, médico o practicante
de radiónica que activa y conscientemente trata de
trabajar según las líneas de la Nueva Era debe tener un
conocimiento amplio y profundo de la anatomía sutil del
hombre y un siempre creciente conocimiento de las fuerzas
que penetran en su estructura y las energías que lo
recorren a medida que el hombre busca la expresión de sí
mismo. Igualmente, debe ser capaz de determinar los
desequilibrios en el flujo de energía relacionados con la
patología manifestada en su paciente.
En otras palabras, deberá buscar la causa de la
enfermedad más bien que tratar el estado patológico en sí
mismo. Por encima de todo deberá ser plenamente cons-
ciente del tipo de energía que necesita escoger para
realizar el tratamiento. y
Cuando buscamos la ayuda de un médico, espera-
mos que éste se haya sometido a un riguroso entrena-
miento y disciplina para aprender su arte, y que tenga un
conocimiento detallado de la anatomía y fisiología huma-
nas y de las enfermedades que aquejan a las formas
humanas. Asimismo, esperamos que conozca las medicinas
o remedios que se necesitan para ayudarnos a librar
nuestro cuerpo de la enfermedad.
Yo les digo que, en un futuro no muy lejano, se
exigirá lo mismo de un sanador. Este deberá pasar un
riguroso entrenamiento, que incluirá un conocimiento
detallado de la constitución esotérica del hombre y deberá
ser consciente de la calidad de las energías que maneja
cuando trata de ayudar a sus pacientes. Más exactamente,
tendrá que funcionar conscientemente como un alma,
asumiendo la total responsabilidad de lo que hace.
Ya no será suficiente que su práctica se base en el
deseo de ayudar a otros; tendrá que basarse en una
percepción y conocimiento directos de los niveles internos
de la vida. Los días en que los sanadores tenían poco o
ningún conocimiento de los cuerpos sutiles del hombre y

29
no sabían casi nada del tipo y la intensidad de las energías
que ejercen y dirigen a través de sus pacientes habrán
pasado. La responsabilidad reemplazará la actitud de que
"algo allá arriba" desconecta el poder por ellos una vez se
ha hecho la curación.
Pero volvamos al gráfico. Estos siete planos de
energía representan el plano físico de la Entidad Solar en
la que vivimos y nos movemos y existimos. Ellos son, en
realidad, sus cuerpos etérico y físico. La gráfica muestra
claramente estos niveles y debería notarse que, de hecho,
estos no aparecen uno sobre otro como se ilustra sino como
una serie de campos de energía que se compenetran.
Los cuatro éteres son los descritos en los escritos
de Rudolg Steiner de la siguiente manera. El primer éter
es llamado éter del calor y su fuerza formativa produce las
formas esféricas que vemos en la Naturaleza. Es el éter de
la electricidad.
El segundo éter es el llamado éter de la luz y su
acción formativa da origen a las formas triangulares.
Como su nombre sugiere es el éter de la luz.
El tercer éter es el llamado éter químico y de su
actividad surgen formas de media luna. Este es el éter del
sonido y los números.
El cuarto éter se conoce como éter de vida y
origina formas cuadradas y formas rectangulares alarga-
das. Este es el éter del color.

Plano I Divino Primer éter cósmico

Plano II Monádico Segundo éter cósmico. Nivel


donde el Espíritu del hombre
existe.

Plano III Espiritual Tercer éter cósmico.

Plano IV Intuitivo Cuarto éter cósmico.

Plano V Mental Plano gaseoso cósmico. Está


dividido en dos aspectos. El
primero es el nivel mental abs-
tracto en el que el alma del

30
hombre aparece. El segundo es
la mente concreta baja, que es
el aparato pensante del hom-
bre y forma el primer vehículo
del bajo-yo o personalidad. El
cuerpo mental está hecho de
materia gaseosa cósmica.

Plano VI Astral Plano líquido cósmico. Aquí se


forma el cuerpo astral o emo-
cional del hombre a partir de
materia líquida cósmica dis-
puesta alrededor del átomo
permanente astral.

Plano VII Físico-éterico. El nivel físico-éterico se com-


pone de cuatro éteres, que for-
man el cuerpo éterico del hom-
bre, y otros tres niveles de
materia que son el gaseoso,
líquido y sólido, que forman el
cuerpo físico. De aquí. que el
hombre como microcosmos es,
físicamente, un reflejo del ma-
Crocosmos.

Aunque la ciencia no reconoce estos éteres, ellos


son, realmente, una parte del campo electro-magnético que
sí tiene el reconocimiento ortodoxo. En el curso de sus
investigaciones, Georges De la Warr llegó a la conclusión
de que el estado pre-físico de la energía etérica, podía
considerarse como complementario de la energía electro-
magnética. Las enseñanzas esotéricas siempre han
afirmado que TODA vida tiene una naturaleza electromag-
nética y puede ayudarnos a entender mejor estos campos
de fuerza y que nos libremos del hábito de separar en
nuestra mente lo esotérico y lo científico. Tratemos de
verlos como un todo.
Cada uno de estos elementos, la fuerza electromag-
nética, la luz, el sonido, los números y el color, atañen al
practicante de radiónica porque son factores que utiliza
conjuntamente con el poder del pensamiento dirigido y la

31
visualización para proyectar frecuencias curativas a través
de esas bandas de éter al paciente.
En el "Tratado de Magia Blanca" de Alice Bailey
se señalan a los estudiantes de las enseñanzas esotéricas
tres razones para hacerse con el entendimiento del cuerpo
etérico. Las he anotado aquí porque se aplican igualmente
a los practicantes de radiónica, ya que contienen las bases
para una comprensión más profunda de la teoría y práctica
de la radiónica.

1. El cuerpo etérico es el siguiente aspecto de la


sustancia del mundo a estudiar por científicos
investigadores. El tiempo para ello puede adelantar-
se si hombres y mujeres que piensan, formulan
ideas inteligentes sobre esta materia. Podemos
contribuir a la revelación de la verdad teniendo las
ideas claras y, desde el punto de partida de lo ya
dicho sobre el éter, los científicos llegarán, con el
tiempo, a la comprensión de las formas o cuerpos
etéricos.
2. El cuerpo éterico se compone de corrientes de fuerza
y en él hay centros vitales que se relacionan unos
con otros y con el sistema nervioso del hombre físico
mediante líneas de fuerza. A través de esas líneas
de fuerza se conecta también con el cuerpo éterico
del sistema que lo rodea. Nótese que en esto residen
las bases de la creencia en la inmortalidad, de la ley
de hermandad o unidad y de la verdad astrológica.
3. Es necesario darse cuenta de que el cuerpo éterico
es vivificado y controlado por el pensamiento y
puede (a través del pensamiento) ponerse en funcio-
namiento activo.

Si podemos captar todo lo que implica lo expresado


en estas tres afirmaciones, si nos damos cuenta de que su
significado esencial es que no existe ninguna separación
entre objetos en el plano físico-éterico, que vosotros y yo y
todo el mundo y todas las cosas están interconectadas y
que esta interconexión puede utilizarse, a través de

32
patrones mentales claramente formulados y de visualiza-
ción, para curar a distancia, nuestra capacidad para
trabajar a esos niveles aumentará considerablemente.
En su libro "Telepathy and the Etheric Vehicle"
Alice Bailey escribe:

«La fuerza de la mente. Está es la energía luminosa que


"ilumina el camino" para que una idea o forma se
transmita o se reciba. No olvidéis que la luz es una
sustancia sutil. La energía de la mente puede materiali-
zarse en rayo de luz».

Debemos ver que este concepto descansa en el


corazón de la transmisión de energías curativas a través
de la radiónica y Ruth Drown va incluso más lejos al
escribir qué "este rayo de luz" interviene en la fotografía
radiónica. No hay duda de que el conocimiento de los
campos del éier es de vital importancia para que todo
practicante de radiónica pueda progresar más profunda-
mente en los arcanos de su arte curativo.

33
mia ob sel rar adora
eN mope o
RAE rt
PA O! qe Pl Ea
Es ES ys db
a E mi y Ñ
sc)De caña bl] re E
E
La
y? Pri PTA
aire ria eta
] KA NE

Ed
ven
có Pe 6

eicia
| 4

A F a
e de e e)
e ++,

Capítulo Dos

EL TEJIDO CONECTIVO
ESPACIAL
«...debe tenerse muy en mente que el cuerpo éterico de
forma de la naturaleza es una parte integrante de la
forma sustancial de Dios Mismo, no de la forma física
sólida sino de lo que los esotéricos tienen como sustancia
formativa» k
Telepathy and the Etheric Vehicle.AAB.

En septiembre de 1962 una revista americana


llamada Main Currents in Modern Thought dejó de lado su
habitual labor de presentación para concentrarse en un
tema que sus editores consideraban como uno de los más
importantes y críticos de todos los problemas filosóficos y
educativos de nuestro tiempo, a saber, la realidad del
cosmos no material y su relación con el mundo percibido
en la experiencia diaria. En otras palabras, trataron en
profundidad la teoría electro-dinámica de la vida, los
campos de energía electromagnética en los que toda vida
se mueve y existe.
El individuo medio tiende a equiparar el espacio
con los espacios que existen entre los objetos físicos, como
algo que está vacío. Por otro lado, los antiguos videntes
definían al espacio como una matriz formativa, como un
campo de energía que daba origen a la materia. Lo
consideraban como la verdadera esencia de la naturaleza,
sin forma e intemporal, subyacente a todas las formas,
cualidades y sucesos.
El concepto de campo de fuerzas sutiles subyacen-
tes a todas las formas físicas tiene un origen muy antiguo.
Los Vedas de la India hace miles de años plantearon la

35
pregunta. «¿Cuál es el origen de este mundo?» y contesta-
ron: «El éter... porque todos estos seres surgen del éter
solamente y vuelven al éter. El éter es más grande que
ellos, el éter es su reposo».
Platón hablaba de una esencia arquetípica que él
creía que contenía las imágenes predeterminantes del
mundo que vemos a nuestro alrededor. De forma similar,
los alquimistas hablaban del Nous y Paracelsus de el
Archeus para referirse a la luz o energía que subyacía bajo
el mundo de la sombra o forma en el que vivimos. El
énfasis estuvo siempre en la esencia subyacente, en los
vastos campos de fuerza que dan origen en la materia.
Más recientemente, en 1675 Newton presentó su
«Segundo estudio sobre la luz y los colores» en la Royal
Society, en el que hablaba de algo electromagnético,
similar a un «medio sutil... vibrante... eléctrico y elástico»,
como base inorgánica de la vida. En 1704 Mead hablaba de
mareas atmosféricas, las cuales, proponía él, actuaban
como una «ayuda externa a las causas internas predomi-
nantes en los cuerpos animales...» y equiparaba el «fluido
nervioso», como era llamado, con la electricidad. Dos
hombres, Nollet y Freke, publicaron teorías similares en
1747 y 1752. El siguiente fue Mesmer, que tomó la noción
de mareas atmosféricas de Mead y le añadió el espíritu
«vibrante... eléctrico y elástico» de Newton.
Al principio Mesmer llamó a su concepto
«gravitación animal», pero en 1775 lo cambió por el más
familiar de «magnetismo animal». Se creía que este medio,
que llenaba el espacio celestial, actuaba sobre los sistemas
nerviosos de las formas animales directamente, dependien-
do de las mareas de resonancia individuales su actuación
sobre los cuerpos humanos. Tales armonías se adoptaban
a configuraciones astronómicas específicas.
En 1783 Bertholon publicó sus experimentos, en
los que daba evidencia de la influencia de la electricidad
atmosférica en la vegetación. En 1883 un hombre llamado
Stewart reformuló la teoría de Mead proponiendo la
conductividad eléctrica de la atmósfera alta de la tierra.
El año 1913 vió al Doctor Albert Abrams, padre de

36
la radiónica moderna, hacer la primera demostración
pública del reconocimiento y medición del campo de
energía humano en la salud y la enfermedad. Habló de
electropatología y también utilizó la palabra electrónica
mucho antes de que llegará a ser la palabra familiar que
es hoy en día. A través de sus aparatos utilizó corrientes
electromagnéticas débiles y vibrantes para restaurar la
salud de los cuerpos enfermos.
Todo esto nos lleva a 1935, cuando Northrupp y
Burr actualizaron la teoría de Mead y mostraron que lo
que era válido para la materia inorgánica, debería ser
válido en el terreno biológico. En otras palabras, ellos
postulaban que las formas orgánicas están relacionadas
con campos de fuerza electromagnética subyacentes. Así,
desde los tiempos antiguos, el hombre ha completado el
círculo y, desde las profundidades de una ciencia materia-
lista, se ha esforzado en afrontar lo intangible, pero con
una gran diferencia; hoy en día posee instrumentos
electrónicos que pueden medir con completa precisión los
campos electromagnéticos, o campos de vida, como se les
llama y esto tiene implicaciones de largo alcance en otros
campos de búsqueda humanos, especialmente en los de la
curación y la filosofía.
La física moderna es una materia técnica y
complicada para el especialista; sin embargo, soy de la
opinión de que los practicantes de la radiónica deben
tener, por muchas razones, un conocimiento básico de la
teoría electro-dinámica de la vida. En primer lugar, en
radiónica nosotros tratamos con camposde fuerza de uno
u otro tipo y con acciones a distancia que presuponen un
campo de fuerza en el que esa acción tiene lugar. El
practicante de radiónica, acepta que, de una manera u
otra, utiliza el campo electro-magnético cuando diagnostica
y trata pacientes a distancia, pero no duda tampoco de que
también usa otros campos, campos con una naturaleza
mucho más sutil y que están mucho más allá de la identi-
ficación y medición científicamente aceptadas. De esta
manera aúna en su forma de pensar los conceptos de la
Antigua Sabiduría con los hallazgos de la ciencia.

37
Por el momento, esto coloca al practicante de
radiónica en un posición cómoda. Por un lado, tiene un
horizonte filosófico amplio y por el otro no tiene la obliga-
ción de probarse a sí mismo como hace el científico. De ese
modo, puede utilizar sus habilidades con el satisfactorio
propósito de poner a la gente bien; gente que, a menudo,
la ciencia moderna, con sus drogas maravillosas y su
tecnología, no ha podido curar.
El trabajo del Doctor Saxton Burr es, sin duda,
uno de los pasos adelante más significativos que la ciencia
ha dado; en él, el énfasis se ha desplazado de lo físico a lo
sutil, y lo intangible se está haciendo tangible mediante
experimentación científica controlada y repetida.
Por ahora, examinemos más detenidamente la
teoría de la vida. Este material se ha tomado, en su mayor
parte, del último libro de Burr Blueprint for Immortality,
un libro incidental, escrito con tal sencillez que cualquier
lego en la materia puede comprenderlo y beneficiarse de su
contenido. Para empezar, me gustaría reseñar algo que el
Doctor Burr dice en el prólogo de su libro:

«El Universo en el que nos encontramos, y del que no


podemos separarnos, es un lugar de Ley y Orden. No es
un accidente ni tampoco el caos. Se organiza y mantiene
a través de un Campo electro-dinámico capaz de deter-
minar la posición y movimiento de todas las partículas
cargadas. Durante casi medio siglo, las consecuencias
lógicas de ésta teoría han sido sometidas a un riguroso
control experimental y no se las ha hallado contradicto-
rias».

No es sorprendente que el primer capítulo del


Doctor Burr tenga una vena filosófica. El habla de los
tiempos difíciles en los que vivimos, en los que el crimen,
la guerra y el desorden están en continua erupción y más
y más personas se ven forzadas a preguntarse si la vida
tiene algún sentido o propósito. Muchos, dice él, están
tentados de creer que el hombre es un accidente, abando-
nado a su suerte en este insignificante planeta, en un
universo hostil y sin ley. El materialismo y la era científica

38
hacen difícil que mantenga sus creencias religiosas y pide
alguna prueba científica de su relación con la vida y el
universo.
El Doctor Burr cree que esta demanda ya ha sido
satisfecha y que la ciencia puede mostrar al hombre que
tiene un lugar en el universo y que su estructura está
ordenada y controlada por campos electro-dinámicos.
Continua diciendo que organización y dirección, directa-
mente opuestos a la casualidad, implican un propósito. Así,
los campos de vida ofrecen una evidencia puramente
electrónica e instrumental de que el hombre no es un
accidente. Por el contrario, es una parte integrante del
cosmos, inmerso en sus campos poderosos, sujeto a sus
leyes inflexibles y partícipe del destino y propósito del
universo. ,
Los campos electro-dinámicos son invisibles e
intangibles, pero su acción, dice el Doctor Burr, puede
visualizarse de forma tosca colocando un imán bajo el
cuadrante de una brújula y espaciando limaduras de
hierro sobre él. Las limaduras se ordenan siguiendo las
pautas de las líneas de fuerza del campo magnético. Si se
cambian las limaduras por otras diferentes, las nuevas
vuelven a adoptar la disposición de las otras. Algo pareci-
do, aunque mucho más complicado, ocurre con el cuerpo
humano. Sus moléculas y células se destruyen y reconstru-
yen constantemente a partir de la materia nueva que
extraemos de los alimentos que comemos y, sin duda
alguna, de otras energías que absorbemos. Gracias al
control del Campo Vital, las nuevas moléculas y células se
reconstruyen como antes y se disponen siguiendo la misma
pauta. De esta manera, un cuerpo físico retiene su figura
familiar y reconocible.
Las investigaciones modernas han demostrado que
la materia de nuestro cuerpo se renueva muy frecuente-
mente. Por ejemplo, la proteína del cuerpo se «cambia»
cada seis meses y en algunos órganos, como el hígado, la
proteína se renueva más frecuentemente aún. Si nos
encontramos a alguien a quien no hemos visto hace seis
meses, no hay ni una sola molécula de su cara que estuvie-

39
ra allí la última vez que lo vimos. Pero, gracias al control
del Campo Vital, (L-field) las nuevas moléculas han
adoptado la misma disposición que nos es familiar y lo
reconocemos.
El Doctor Burr compara el Campo Vital con un
molde de gelatina que dará lugar a una figura determina-
da. El Campo Vital (L-field) puede medirse de la misma
forma; así, por ejemplo, si se examina un huevo de rana en
su estado inicial con un aparato electrónico, podrá verse la
futura localización de su sistema nervioso. Se ha lanzado
una teoría científica que dice que el sistema nervioso
humano se forma como resultado de las fuerzas dinámicas
aplicadas sobre grupos de células siguiendo la pauta global
del campo. Además, la evolución vertical de la organiza-
ción nerviosa y los cambios de estado correlacionados con
el campo dan evidencia de la función de «dínamo» de los
ganglios basales y núcleos asociados; son como un almacén
de depósito, antiguo e intermedio, para el suministro de
energía, que debe alcanzar un cierto nivel antes de que
resulte en actividad neocortical. Más allá de toda duda,
esto encaja con la teoría chakra de que vórtices de
energía dan origen a los ganglios y plexos nerviosos del
cuerpo.
El aparato que se usa para medir los Campos
Vitales es un voltímetro de tubo vacío, que es lo suficiente-
mente sensible como para captar los cambios que se dan
en el campo electro-dinámico. En los humanos, el Campo
Vital puede medirse colocando un electrodo en la frente y
otro en el pecho o la mano y hallando entonces el voltaje
diferencial entre ambos puntos. En su investigación y
práctica de la radiónica, el Doctor Abrams hizo exactamen-
te lo mismo con instrumentos mucho más rudimentarios.
Uno se pregunta qué grandes pasos se habrían dado en el
diagnóstico y el tratamiento si el ingenio de Abrams se
hubiera unido a la electrónica moderna. Incluso en su
tiempo diseñó y construyó un instrumento que, automáti-
camente, daba una nota o sonido diferente para cada una
de las tres enfermedades principales cuando se introducían
gotas de sangre diferentes en ella. Su problema era el

40
material disponible, ya que las válvulas se fundían tan a
menudo y rápidamente que hicieron el instrumento
impracticable y hubo de ser abandonado. Con todo, indicó
las posibilidades que había.
Los maestros antiguos decían que toda vida
comparte una base vasta y común cuya manifestación más
baja es lo que ellos llamaban niveles etéricos. Cuando el
individuo comprende todo lo que esto implica y lo fija en
su conciencia, su actitud hacia otras formas de vida
cambia. Si lo prefieres, reconoce que él está en ellas y ellas
están en él. Lo que le perjudica o beneficia a él repercute
en otras formas de vida, en y más allá del tiempo y el
espacio, de una forma que no es inmediatamente evidente
debido a la aparente separación del nivel físico.
Con el advenimiento de las investigaciones del
Doctor Burr se anunciaba el primer paso científico en los
campos sutiles de fuerza de la vida. Aunque esto era
ciencia en acción, la aplicaciones inmediatas eran filosófi-
cas y esto, como hemos visto, estaba plenamente expresado
en su capítulo de apertura. El descubrimiento de los
Campos Vitales ha tenido, por supuesto, efecto en la
medicina, tanto en las áreas de investigación y práctica
física como en las psicológicas. Se ha descubierto que la
salud está inextricablemente relacionada con los estados
del campo. El estado de vuestro Campo-Vital y vuestra
vitalidad tiene una relación directa con el estado del
campo electromagnético de la tierra y las fluctuaciones que
éste sufre debidas a las influencias que recibe del espacio.
Esto se ilustra bastante bien en el siguiente extracto del
libro Studies of Man in the Life Field del Doctor L. Ravitz.
El escribe:

«En una cálida y húmeda tarde de Junio, próxima a la


luna nueva, dos camareras se olvidan de servir a sus
clientes. El servicio de oficinas es apático y descuidado.
Las personas mayores se quejan de un profundo cansan-
cio. Hay una nueva afluencia de nuevos ingresos en
todos los servicios de hospital, con un gran aumento en
los índices de nacimientos y muertes —las últimas
notablemente pronunciadas durante la tarde— y los

41
pacientes empiezan a mostrar un marcado aumento de
los síntomas somáticos. Casi la mitad de los pacientes de
psiquiatría requieren mayor control y tres se suicidan.
Algunos alcohólicos abstemios empiezan a beber otra vez
y el crimen se extiende.
Dos semanas más tarde, las camareras contestan con
brusquedad, irritadas, a los clientes. Gran parte del
personal de oficinas se siente inusualmente energético
y el resto igualmente irritable. Las personas mayores
sienten "que han recobrado el aliento". Vuelve a haber
un aumento en los ingresos en los hospitales, pero los
pacientes, médicos y quirúrgicos parecen tener síntomas
menos intensos. Un grupo diferente de pacientes de
psiquiatría "se pone en órbita” pero ninguno se muestra
propenso al suicidio. Las quejas por insomnio son
generales ya que se habla de sueños "inusualmente
vividos".

Considérese ahora la directa correlación que tiene


con los siguientes pasajes de los libros de Agni Yoga que,
por cierto, son una mina de información para aquellos que
quieran relacionar las enseñanzas esotéricas con el
pensamiento moderno. El primer pasaje pertenece a
Brotherhood.

«Es imposible no sentir la tensión de las corrientes


cósmicas que absorben la energía física. Puede mani-
festarse distracción, o como si la hubiera, puede mani-
festarse una irritabilidad involuntaria. Es instructivo
observar estos signos, que acompañan la absorción de
energía. La gente se inclina a atribuirlos a su propia
indisposición, pero no olvidemos las causas externas».

El segundo pasaje se ha extraído del libro Aum.

«Un gran número de sensaciones dolorosas son causadas


por las tensiones psico-atmosféricas. No estamos hablan-
do de presiones atmosféricas solamente sino de ondas
psíquicas reales que no sólo pueden crear estados de
ánimo sino que también pueden reflejarse en los centros
nerviosos. Uno no puede imaginarse hasta qué punto la
atmósfera está saturada de energías psíquicas; dichas
emanaciones no sólo afectan a los animales sino también

42
a las plantas. Luego es imposible atribuir frívolamente
todas estas manifestaciones a condiciones físicas puras
sólamente... »

Estos pasajes deben sonar familiares para muchos


practicantes de radiónica, ya que la mayoría ha experi-
mentado el repentino e inexplicable aumento en el número
de llamadas telefónicas de pacientes que no se sentían
bien sin que hayan podido decir con seguridad cuál era el
problema o, de repente, han recibido una serie de llamadas
de pacientes con un malestar similar que ha aparecido
recientemente. En la radiónica uno tiene la oportunidad de
observar este fenómeno, que estoy seguro de que tiene una
relación directa con la interacción entre el Campo Vital del
paciente y el Campo Vital del planeta y el sistema;
claramente, las fluctuaciones geo-magnéticas deben ser
consideradas por la radiónica.
Médicamente, se ha trabajado mucho para estable-
cer correlaciones entre los períodos de intensificación de la
fuerza de los campos electro-magnéticos y el aumento de
ingresos en la sección de psiquiatría de los hospitales. Las
reacciones del paciente al campo que nos rodea, con el que
nos compenetramos y en el que vivimos pueden predecirse
con precisión con una antelación que va de seis horas
hasta doce meses. De esta manera pueden prepararse para
las predecibles acciones futuras y, por consiguiente, para
las necesidades de sus pacientes. Por ejemplo, los ciclos de
fiebre del heno y la úlcera péptica pueden relacionarse de
forma parecida con dichos cambios de polaridad.
Por ejemplo, los individuos que presentan síntomas
periódicos de úlcera péptica tienden a mostrar un patrón
de campo fijo en el punto mínimo del espectro de polaridad
durante todo el año, con una exacerbación de los síntomas
en aquellos períodos estacionales, quincenales o diurnos en
los que el voltaje cae hasta los valores más bajos. Ya que
las reacciones de miedo súbito o sobresalto se asocian de
forma típica a las excursiones del campo en dirección
positiva, se deduce que las personas que sufren síntomas
de nivel mínimo podrían sentir un alivio temporal si la
acción del miedo fuera evocada. Esto se ha comprobado

43
N

experimentalmente y en situaciones de la vida real. Por


ejemplo, tal individuo podría salir de un accidente de coche
con un sentimiento de alegría, como si estuviera
«colocado», y no experimentar en ningún momento shock
alguno fuera de las contusiones físicas que pudiera haber
sufrido.
El descubrimiento de la dirección del campo, sea
ésta positiva o negativa, como una variable crucial en el
envejecimiento y los trastornos somáticos tiene unas
implicaciones importantes en la epidemiología de las
enfermedades infecciosas. En sus estudios sobre la difteria
en los años 20 y 30, Frost observó que la proporción de
infección por caso podía variar mucho con el tiempo en un
área determinada; entonces sugirió que la infección se
mantenía relativamente constante y que el flujo y reflujo
de la epidemia representaban la consecuencia de las
variaciones en la proporción de infección por caso. Contro-
les recientes de los campos electro-magnéticos muestran
que existe una relación entre el flujo y la fuerza del campo
y el movimiento y la intensidad de las epidemias. El
Doctor Burr predijo que llegaría el día en que el voltímetro
de tubo de vacío sería de uso común en la consulta de cada
médico y que la salud o enfermedad del paciente se
discutirían en términos de potencial de energía.
El estudio cuidadoso de las perturbaciones previs-
tas en el campo electromagnético terrestre muestra una
coincidencia frecuente con fenómenos observables. Por
ejemplo, el día del terremoto del parque Yellowstone en
USA., que empezó cerca de la media noche del 17 de
agosto de 1959, la previsión del tiempo mostraba señales
de amenaza de tormenta de alta intensidad. Cerca del
medio día del mismo día, doce millas al oeste del parque,
en el lago Hegben, lugar favorito de descanso de las aves
acuáticas migratorias, se observó un éxodo súbito y
general de las aves. Parece que notaron la perturbación
del campo electromagnético terrestre once horas antes del
terremoto. En la misma fecha la perturbación del campo
causó un importante corte de las emisiones de radio que
tuvo un alcance mundial. El sistema de trasmisión por

44
cable de la Consolidated Edison de Nueva York fue
afectado de modo que el servicio estuvo cortado muchas
horas. Y ese día fracasó el lanzamiento del misil Nike Asp.
Es un hecho conocido que algunas operaciones de los
zahorís, como la búsqueda de agua, a veces pueden verse
obstaculizadas si hay alguna perturbación inusual en el
campo electromagnético terrestre.
Existe un grupo en América conocido como Geo-
magnetics Research (Investigaciones Geomagnéticas).
Alrededor de 1940, a raíz del descubrimiento de un índice
de predicción basado en una franja astronómica de referen-
cia, empezó un estudio para el cálculo anticipado de los
períodos de perturbación del campo que coincidían con
cortes de las emisiones de radio y con tormentas solares.
En 1962 el grupo se vió luchando con un parámetro de
tiempo demostrado cuyas previsiones de tormenta no solo
coincidían con las tormentas geomagnéticas sino también
con los grandes terremotos, erupciones volcánicas y, desde
1957 con los fallos en los lanzamientos de misiles. El
desastroso fallo del lanzamiento de la sonda espacial U.S.
Venus el 22 de Julio de 1962 coincidió con señales de
proximidad de tormenta de alto potencial en la previsión.
Si el lanzamiento de un cohete, un objeto que
normalmente consideramos como un trozo de chatarra
inerte y mecánico, puede verse afectado, no cuesta mucho
imaginar hasta que punto nos afectan esas perturbaciones
en el campo electromagnético terrestre.
Esto nos lleva de nuevo al concepto de las ense-
ñanzas antiguas de que toda vida está inextricablemente
unida en un substrato común y que todo afecta a ese
campo de vida y que nosotros podemos corromper o
armonizar ese campo a través de los pensamientos y
acciones que expresemos en él. Como dice el Doctor Ravitz
en unos términos no muy científicos:

«Las perturbaciones locales del campo están condicio-


nadas por el estado del campo global y el estado del
campo global está recíprocamente condicionado por sus
perturbaciones locales».

45
En un artículo titulado "The wings of Hermes"
(Las alas de Hermes) Muriel Hasbrouck escribe:

«Todas las criaturas vivientes, incluyendo el hombre,


parecen responder orgánica e inconscientemente a una
realidad que el hombre quizá conoció conscientemente
una vez, pero que luego olvidó. Porque parece que tanto
tiempo atrás como 3.200 años a. de C. el hombre era
consciente de la realidad de los ritmos del cosmos y de
su posible relación con las leyes que gobernaban la vida
en la tierra. En aquel tiempo, los sacerdotes sumerios
trazaron, inductiva y empíricamente, las órbitas de cinco
planetas visibles "que seguían una trayectoria estableci-
da, de acuerdo con unas leyes establecidas, por los
caminos seguidos por el sol y la luna entre las estrellas
fijas"...»

No fue hasta el siglo XIX que el fisicalismo


finalmente redujo al hombre a otro simple agregado de
constituyentes materiales y fuerzas mecánicas. Tanto
prevaleció esta idea que, pocos años antes de su muerte,
Jung escribió.

«La provechosa idea de que el hombre es un microcos-


mos, un reflejo del gran cosmos en miniatura hace
mucho tiempo que se alejó de él».

A través de sus trabajos, Jung demostró la profun-


da influencia curativa inherente al concepto de que el
hombre es una parte del universo. Avivaba la imaginación
de sus pacientes y los hacía visualizarse a sí mismos
unidos al macrocosmos. Tal proceso puede crear una
sensación de seguridad interna y externa, ya que entonces
el individuo ya no se siente nunca más solo y aislado sino
que se siente como una parte integrante de una realidad
continua y unificada.
El Doctor Burr ha mostrado que tal concepto es un
hecho demostrable; por supuesto, el hombre suspira por
expresiones de unidad más sutiles y no hay duda de que,
a su tiempo, éstas serán expresadas y se mostrarán
demostrables.

46
La sugestión, como la imaginación, tiene un
marcado efecto en el campo electromagnético humano. El
Doctor Abrams habla de los tejidos del cuerpo como
condensadores que almacenan el excedente de energía.
Esta puede hacerse disponible mediante la sugestión, de la
cual es un componente esencial el ánimo. Hasta ahora,
dice él, nuestros conocimientos eran incapaces de explicar
la influencia de la mente en el cuerpo. Expresamos
numéricamente y, por tanto, sin equivocación cuanta
energía puede suplir la esperanza. El continúa:

«Un paciente deprimido viene a mi consulta y encuentro


que la salida de energía de las puntas de los dedos de la
mano izquierda y el área psicomotora es de 1/25 de un
Ohm. Se le asegura.su completa recuperación y cuando
acepta esta sugestión la salida de energía de las puntas
de sus dedos es de 1 Ohm (25 veces superior) y la del
área psicomotora izquierda de 15/25 de un Ohm».

La fe y el entusiasmo del sanador o médico hacen


mucho para aumentar la efectividad del tratamiento que
éste da; tal actitud genera un poderoso suministro de
energía que, de algún modo, parece transmitirse al
paciente. Esto es cierto en cualquier ciencia curativa,
incluso en la medicina. Hay un ejemplo interesante de esto
en una de las charlas sobre la meditación y la terapia
contra el cáncer del Doctor Carl Simonton, que demuestra
este punto. Un doctor que había ideado un tratamiento con
medicamentos para unos malestares particulares obtuvo
buenos resultados con él. Entonces experimentó y dió al
paciente un placebo; tal como él esperaba, el paciente
empeoró. El médico pidió entonces más medicamentos, los
administró al paciente y éste mejoró otra vez pero, en
realidad, la compañía farmacéutica había suministrado al
doctor otro lote de placebos, así que parece que su confian-
za en lo que estaba dando había anulado el hecho de que
no había medicina en las pastillas. Pueden darse ejemplos
similares en otros campos de curación que demuestran
que, prácticamente, no hay ningún sustituto de la confian-
za en lo que uno hace, y esta sólo puede basarse en un

47
xXx

conocimiento interno real de los campos de energía en los


que vivimos cuando uno trabaja en la radiónica.
Si, como los experimentos del Doctor Burr han
mostrado, recibimos la influencia de fuerzas que vienen del
espacio, es razonable suponer que hay alguna base para la
astrología. En 1916 Abrams hizo comentarios sobre el
tema en el apéndice de su libro New Concepts in Diagnosis
and Treatment cuando dijo.

«La decadencia de la Astrología empezó en el Renaci-


miento, pero su restablecimiento puede anunciarse en
términos de ciencia física. La atracción del hombre por
el sol y la rotación de la tierra, la presión atmosférica,
las variaciones de temperatura, la lluvia y el viento, los
temblores de la tierra y el potencial electrico de billones
de voltios reflejan la influencia del macrocosmos sobre
el microcosmos... la máquina del mundo».

Podría parecer que Abrams había hecho una


observación muy astuta allá en 1916, ya que hoy en día no
hay ninguna duda de que las investigaciones en el campo
de la astronomía y los estudios y experimentos sobre los
campos vitales electromagnéticos confirman lo que él
predijo y, es más, sin duda un día confirmarán las verda-
des antiguas que el hombre ha evitado en sus exploracio-
nes de los mundos materiales.
Con relación a esto, me gustaría citar el párrafo de
conclusión del número de 1962 de Main Currents citado
anteriormente. Dice lo siguiente:

«... La cuestión es que la investigación que nos lleva


hacia la comprensión de la vida tiene una importancia
incomparable. En una época en la que todas las formas
de vida están bajo amenaza de extinción, y cuando el
clima de pensamiento se caracteriza por la complejidad
y la confusión, hemos recorrido un largo camino desde el
Pentagrama de Pitágoras, el símbolo de la vida, o el
prana de la teoría india. Es hora de invertir la dirección
y dirigirnos hacia la vida más bien que hacia la muerte».

Claramente hoy en día es un poderoso movimiento

48
que se encamina al reconocimiento de que el hombre es
una parte del universo y tiene un papel que jugar, un
papel de una profunda responsabilidad creativa.
Pues bien ¿cómo encaja la radiónica en el momento
presente?. Si volvemos al principio de este siglo y observa-
mos el trabajo de Abrams veremos que él hablaba de los
seres humanos y su patología en términos de campos de
energía electromagnética y que trataba a los pacientes,
según esta base, conectándolos a un instrumento que
utilizaba una débil corriente electromagnética. Para
entendernos, se adelantó en 25 años a los trabajos experi-
mentales del Doctor Burr. Pero, en 1933, cuando el Doctor
Burr empezaba a trabajar en la expresión en los niveles
físicos, la Doctora Ruth Drown llega y demuestra que es
posible diagnosticar y tratar a distancia y que existe una
conexión entre el practicante y el paciente en la que no
interviene ningún cable de conexión sino que se usa el
campo de energía de la tierra. Esto vuelve a colocar la
radiónica en cabeza aunque utilizaba técnicas que no eran
demostrables científicamente. Entonces, en los sesenta
Cleve Backster pudo mostrar, con la ayuda de un bolígra-
fo, que un cuerpo puede actuar sobre otro a distancia. Su
labor de provocar respuestas enlaza, hasta donde podemos
decir, con las técnicas de transmisión de la radiónica. La
técnica radiónica de selección de frecuencias curativas
genera una forma pensada de curación que se proyecta al
paciente a través de un campo de energía, de acuerdo con
el principio de que la energía sigue al pensamiento.
El siguiente paso en radiónica se ha dado al
sugerir que el hombre no es simplemente un campo
electromagnético a secas, sino que en ese campo hay
centros de fuerza que gobiernan los diversos órganos del
cuerpo y que es equilibrando esos centros que la salud
puede restaurarse; es un pase que nos lleva de la actual
complejidad a la sencillez, al prana de la teoría india y a
un enfoque más holístico de la curación si se prefiere.
En una vena más esotérica, las enseñanzas
antiguas dicen que el hombre es una chispa de la Mente
Universal y que la Mente Universal, hasta donde podemos

49
comprender, consiste en siete vastos planos de energía. Por
conveniencia de expresión, estos planos forman las líneas
de latitud del sistema. El hombre se encuentra, en su
totalidad, en el más bajo de ellos, a saber, el plano físico
cósmico.
A través de esas siete bandas latitudinales de
energía o consciencia fluyen siete corrientes de energía,
que forman las líneas de longitud del sistema. En los
escritos de Alice Bailey se hace referencia a esas siete
líneas longitudinales de energía como los Siete Rayos. En
la Biblia se les llama los Siete Espíritus delante del trono
de Dios. Cada uno de ellos tiene sus propias cualidades y
características que los expresan en y a través del hombre
y el sistema solar en el que éste vive.
Cada uno de estos vastos campos de energía forma
esferas una dentro de la otra, bastante parecidas al estilo
de las intrincadas tallas chinas en las que una serie de
esferas de marfil se mueven libremente unas dentro de las
otras. Visualizad, si podéis, siete grandes esferas de
energía rotando en dirección este-oeste y, dentro de cada
una de ellas, siete grandes esferas de color rotando en
dirección norte-sur y tendréis una idea del Campo de
Mente en el que vivimos, nos movemos y existimos.
Esto está, por supuesto, extremadamente simplifi-
cado y es muy teórico pero hay mucha literatura sobre la
materia de la que el practicante puede extraer conocimien-
tos que encontrará útiles en la práctica de la radiónica. Es
esencial comprender que la mente es materia y que la
materia es mente. No hay duda de que tal comprensión
llevó a Madame Blavatsky a declarar que la materia era
Espíritu en su nivel más bajo y que el Espíritu era materia
en su nivel más alto.
A partir de la evidencia disponible, las antiguas
enseñanzas equipararon el campo electromagnético con el
cuerpo etérico del planeta y del hombre, y de todas las
formas de vida. A través de este cuerpo, decían ellos, el
hombre está conectado con la fuente de la vida. Sostiene
su organismo físico y lo integra en el campo electrodinámi-
co del sistema solar. Ahora bien, mientras la ciencia

50
acepta lo que el Doctor Burr tiene que decir sobre el
Campo Vital, podría negar la existencia del cuerpo etérico
tal como lo define el pensamiento oriental. Pero es un
hecho curioso que si uno lee Blueprint for Immortality a la
luz de las enseñanzas orientales sobre el cuerpo etérico,
uno se da cuenta inmediatamente de que el Doctor Burr y
los maestros indios hablan el mismo idioma, que los
paralelismos son constantes e idénticos y que ambos tienen
fuertes implicaciones filosóficas.
La comunidad científica lleva ya muchos años
trabajando experimentalmente en la exploración de los
campos vitales. En los últimos años se ha hecho obvio que
había una directa correlación entre sus descubrimientos y
el pensamiento oriental, tan directa que algunos científicos
se han sentido incómodos y han hecho lo posible por
librarse de esa incomodidad; de hecho se dieron pasos para
repudiar el trabajo de Burr. Atrapado con una mancha de
"carmín esotérico" en los cuellos de sus camisas, ¿qué
mejor manera había de afrontar la situación que deshacer-
se de la camisa?. Afortunadamente, las teorías de Burr se
mantienen firmes y muchos de los que trataron de oponer-
se a ellas concuerdan ahora en que hay más de una
posibilidad de que la teoría de una matriz de formación
etérica sea una realidad después de todo.
Con el tiempo, no hay duda de que la ciencia final-
mente reconocerá y confirmará lo que las enseñanzas
orientales han dicho durante miles de años. Entonces
veremos muchos cambios, entre ellos una nueva medicina
que se basará en la comprensión de estos campos etéricos
de energía vital y las leyes naturales que los gobiernan.
Sir James Mackenzie dijo una vez: "El hecho de que la
medicina se esté convirtiendo en algo tan complejo implica
que su estudio se está llevando a cabo de forma errónea;
pues una materia que se basa en leyes naturales resulta
más fácil de comprender cuando las leyes se conocen
mejor".
La radiónica, por supuesto, se basa en las leyes
naturales y, como resultado de ello, es una técnica de
curación relativamente simple que utiliza la red etérica o

51
el tejido conectivo espacial con propósitos de diagnóstico y
terapéutica. En los capítulos que siguen quiero explorar
con detalle cómo los practicantes de radiónica pueden
hacer y hacen uso de los campos de energía que nos
rodean, y mostrar que en la radiónica yace la semilla de
una ciencia curativa de la Nueva Era.

52
Capítulo Tres

EL VINCULO ETERICO
GEOMETRICO
«Esta química molecular espacial (de Pasteur) es el
antecedente directo de la hélice de ácido desoxirribonu-
cleico (ADN) de Watson y Crick, una de las estructuras
genéticas vitales de la vida biológica, que es en esencia
una fuerza de formación genética con cualidades que
recuerdan a aquellas atribuidas por los antiguos a las
diversas esencias espaciales que los formaban».
Nueva evidencia de un campo biofísico.
Doctores G. Barnard y J. Stephenson.

El contenido de este capítulo se deriva de las expe-


riencias obtenidas del uso continuado de una tabla radies-
tésica en el diagnóstico a distancia. Los mismos conceptos
se aplican al uso de instrumentos radiónicos y lo que sigue
es una revisión ligeramente modificada y actualizada de
un ensayo que apareció en el número de junio de 1970 del
Journal of the British Society of Dowsers bajo el título "El
principio de la percepción en la radiestésia". La Radiónica
es, básicamente, una forma instrumentada de la radies-
tésia; en ambos casos el practicante busca los desequili-
brios o alteraciones en los campos energéticos del paciente
como lo haría un zahorí.
Una de las eternas preguntas familiar a todo
practicante de radiónica o radiestesista inquisitivo es cómo
puede él registrar y percibir las impresiones emitidas por
el paciente a distancia. Es una pregunta que ha obtenido,
y todavía continua obteniendo, una amplia gama de
respuestas especulativas y polémicas. De éstas han surgido
las escuelas de pensamiento físicas y mentales que
estudian el fenómeno de los zahoríes.

53
Ya por naturaleza, la percepción es un fenómeno
difícil de explicar. Es tan sencilla que la damos por
sentada; es tan universal que toda forma de vida la posee
en mayor o menor grado y, sin embargo, a pesar de su
inmediatez, filósofos y científicos de todos los tiempos han
escrito sus trabajos más discutidos tratando de explicar
qué es la percepción.
Es importante darse cuenta primero de que la
percepción tiene dos facetas principales, la subjetiva y la
objetiva. Los factores objetivos son fáciles de comprender
ya que envuelven el habla, la vista, el tacto y así sucesiva-
mente. Las cosas comunes de experiencia diaria se derivan
del mundo objetivo.
Debido a que las facultades de percepción conscien-
te de los cinco sentidos se han sintonizado dentro de unos
márgenes estrechos, el hombre comprende un espectro
singularmente estrecho de lo que le rodea. Aquello que
escapa a su percepción inmediata lo clasifica ignorante-
mente como metafísica.
Naturalmente, el aspecto subjetivo de la percep-
ción es lo difícil de discutir. No existe una terminología
reconocida que exprese las cualidades particulares de este
aspecto de la percepción. Además, estamos lastrados por
una herencia de pensamiento mecanicista que ha consegui-
do eliminar muchos análogos orgánicos y humanos del
discurso científico y divorciar las teorías científicas sobre
la materia y la acción de la metafísica y la teología.
Afortunadamente, hoy en día hay signos que
indican que algunos científicos se ven poderosamente
impelidos a filosofar sobre las implicaciones de sus traba-
jos, y estamos viendo la primera y bienvenida chispa de
reconciliación entre la ciencia y la verdadera metafísica de
la teología. Arthur Koestler ha dicho: "ningún científico
honesto puede publicar ahora un libro sobre cuestiones
físicas sin epílogo de metafísica".
En la radiónica nos interesa principalmente el lado
subjetivo del proceso de percepción, de modo que empeza-
mos con una clara desventaja siempre que tratamos de
teorizar sobre su naturaleza.

54
Cualquiera que haya tratado seriamente de
teorizar en este campo comprueba rápidamente que las
conclusiones basadas en teorías estrictamente objetivas o
subjetivas dejan mucho que desear. Obviamente se
necesitan nuevos conceptos aclaratorios. Pero los nuevos
conceptos se toman, por analogía, de otros sistemas
conceptuales, de modo que nos apoyamos con fuerza en la
física para conseguir un marco amplio para nuestras
explicaciones objetivas o físicas y buscamos en muchas
filosofías para el modus operandi más esotérico.
Personalmente no creo que pueda encontrarse una
explicación satisfactoria del fenómeno radiónico en ningu-
na teoría basada en la dicotomía mental-física. Por
necesidad, la radiónica es una expresión de la interacción
de los dominios de lo objetivo y lo subjetivo y, por esta
razón, cualquier teoría sobre su naturaleza debe tomar el
camino central y extraer de ambos aquellos factores que,
por analogía, puedan configurar como una explicación
holística del fenómeno.
La pregunta original sobre la percepción de
impresiones de objetos distantes, plantea inmediatamente
otros factores, que deben encajar en el mosaico de la
respuesta, si queremos tener una visión completa.
Por ejemplo, ¿cuál es la naturaleza del campo de
fuerza en el que trabaja el practicante de radiónica?. ¿Es
simplemente un campo electromagnético o debemos buscar
más allá del concepto de campo físico para encontrar la
respuesta?. Y ¿tiene alguna analogía ese campo con el
campo de fuerza humano, el cual, según hemos visto, en
ciertos aspectos tiene una naturaleza electromagnética?. Y,
si es así, ¿podemos trazar un reflejo de la pauta de esa
analogía en la conexión que una al practicante de radióni-
ca con el objeto de su estudio y, de esa forma, arrojar
alguna luz sobre el fenómeno de la acción a distancia?.
Naturalmente una pregunta lleva a otra porque la radies-
tesia en sus múltiples aspectos es una cualidad intrínseca
de la vida.
Mi propia teoría sobre el fenómeno de conexión
entre el paciente y el practicante se deriva de una serie de

55
hechos observados mientras utilizaba la gráfica psiónica.
A principios de 1967 el Doctor Aubrey Westlake, autor de

90 90

LA GRAFICA PSIONICA

The Pattern of Health, que es un libro excelente sobre el


tema del sentido radiestésico, me dio una copia de su
gráfica, que yo empecé a utilizar como método de diagnós-
tico.
Cuando se hace un diagnóstico con esta gráfica, la
gota de sangre del paciente se coloca en el vértice derecho
del triángulo, y el testigo de Turenne, que es una sustan-
cia inerte impregnada con las frecuencias de la enferme-
dad se lee como grados de desviación del péndulo desde la
línea central que marca cero.
En el proceso de selección del similimum homeopá-
tico apropiado para el paciente bajo análisis, el practicante

56
coloca el remedio o remedios en el vértice del triángulo que
apunta hacia abajo. Si el similimum es el correcto, el
péndulo se desplaza de los grados que marcaban la
enfermedad hasta la línea vertical central de la gráfica,
mostrando de esa manera que la resonancia de la enferme-
dad ha sido suprimida y se ha establecido un equilibrio de
fuerzas entre la gota de sangre, el testigo de Turenne y el
similimum en el interior del triángulo.
Entonces se le da el similimum al paciente y, si
éste funciona lo suficientemente bien como para eliminar
la enfermedad de sistema, entonces el paciente, haciendo
una prueba similar a la anterior, obtendrá una lectura de
cero en la línea central de la gráfica.
Inmediatamente me vi asaltado por la idea de que
si el similimum colocado en el triángulo de la gráfica
equilibraba las fuerzas en su interior y se podía obtener la
misma reacción después de que el paciente ingiriera la
medicina, entonces debía haber un triángulo de fuerza que
conectaba al paciente con la gráfica durante el análisis.
¿De que otra manera podría obtenerse una lectura de
cero?. E
Espero que esto quede claro, ya que mi entera
teoría ha surgido de esta sola observación. Por consiguien-
te, he utilizado el símbolo del triángulo como clave para
tener acceso a ciertos análogos orgánicos que creo relacio-
nados con el fenómeno de la búsqueda de los zahoríes o la
radiestesia. Platón dijo una vez: "Establece el triángulo y
el problema está resuelto en sus dos tercios". Creo firme-
mente que este axioma puede aplicarse a la naturaleza de
la percepción en el diagnóstico radiónico y, por extensión,
a la acción de curación a distancia por medios radiónicos.
Hay tres factores que nos interesan de manera
inmediata: el practicante de radiónica o, si se usa una
gráfica, el radiestesista; el objeto estudiado, que para
nuestros propósitos es un paciente que pasa por un
examen de salud; por último, el medio o campo de fuerza
que ellos comparten con toda vida.
Primero el practicante. Piénsese en este individuo
en términos de energía, como un campo de energía o

57
fuerza sujeto a impresiones, alguna de ellas registradas
por los cinco sentidos y otras que impartan de una forma
más sutil pero, no obstante, envuelven el sistema nervioso,
que está inextricablemente conectado con el campo de
fuerza subyacente.
El campo de fuerza humano presenta, como ya he
mencionado, varios aspectos. Las enseñanzas filosóficas del
Este proponen la teoría de que las formas objetivas no son
más que la manifestación externa de las energías subjeti-
vas interiores... que no hay nada más que energía y que
ésta funciona a través de una sustancia que se compenetra
y activa todas las formas. Ellos se refieren a este campo de
energía como el cuerpo etérico y afirman que éste actúa
positivamente con respecto a la forma física negativa, que
la galvaniza hacia la actividad y actúa como una fuerza de
cohesión que la mantiene unida. A través de él, el cuerpo
físico recibe TODAS las sensaciones.
Después vienen, por supuesto, los aspectos electro-
dinámicos como se definen los trabajos del Doctor Burr.
Debe recordarse, también, que los trabajos experimentales
han mostrado que el campo vital puede ser modificado y
alterado por el P o Campo de Pensamiento, lo cual es
significativo por lo que al practicante de radiónica concier-
ne.
Otro aspecto, más sutil incluso que el campo
electro-dinámico del hombre, es el campo psi. El campo psi
fue propuesto para formar teorías sobre los fenómenos de
premonición y percepción extrasensorial. Estos fenómenos
son ahora el centro de una investigación intensiva y deben
atraer la atención de los practicantes, ya que en la com-
prensión del campo psi y su posible relación con el cuerpo
etérico del pensamiento especulativo oriental bien podemos
encontrar pistas que nos lleven a una explicación del
fenómeno radiónico.
Aunque los campos electromagnéticos pueden ser
relevantes en algunos aspectos de la radiónica, mi propia
teoría se centra en los elementos más especulativos, los
campos etéricos y psi. Ciertos experimentos con plantas en
América han mostrado de forma concluyente que las

58
señales que están más allá del espectro electromagnético
salvan las distancias sin tener en cuenta los campos
físicos. Trataré éste tema detalladamente más adelante en
este capítulo.
Bien, sabemos que el practicante de radiónica
puede percibir, lo que significa que consciente o inconscien-
temente registra el impacto de diferentes energías en su
sistema. Esta percepción envuelve un principio básico de
la vida, a saber, el feedback (retroalimentación). El
feedback es aquél fenómeno por el que los estados de los
objetos están conectados de modo que un objeto influye al
otro.
El principio del feedback puede aplicarse al
proceso radiónico. Por ejemplo, la frecuencia de desequili-
brio o enfermedad de un paciente influye en el sistema
nervioso del practicante. Esta inducción de perturbación a
través del campo psi reverbera por el sistema nervioso y
altera temporalmente su propia frecuencia.
Anatómicamente existe un mecanismo de entrada
sensorial. A través del arco reflejo simple los receptores del
sistema nervioso pasan el impacto de energía registrado a
través del sistema nervioso central a los transmisores. La
respuesta motora activa los músculos y el péndulo se ve
impelido al movimiento. Esta es, por supuesto, una
explicación, pero hay otras. Wilhelm Reich, por ejemplo,
propone la teoría de que la reacción que se da en la
búsqueda de los zahoríes ocurre cuando el campo orgánico
del zahorí reacciona al campo orgánico del agua u objeto
buscado. Claramente, ocurre algo de esta naturaleza
cuando se busca agua de ésta manera; frecuentemente, si
el zahorí trata de evitar que la vara de sauce o avellano se
doble hacia arriba o hacia abajo, según sea el caso, la vara
sigue moviéndose en sus manos con tal fuerza que pueden
llegar a desgarrar la corteza de la vara. Aquí hay una
evidencia firme que nos sugiere que un campo de fuerza
actúa sobre el otro. Cuando diagnosticamos mediante
métodos radiónicos parece que los sistemas nervioso y
muscular están directamente implicados.
Sin entrar en detalles sobre la transmisión de los

59
impulsos nerviosos, es importante que la modulación y
control precisos de los impulsos nerviosos está gobernado
por una hueste de ARN (ácido ribonucleico), proteínas y
sustancias transmisoras, todo ello bajo la dirección del
ADN (ácido desoxirribonucleico), y que el ADN, el almacén
de la información genética puede actuar finalmente como
el modelista de la percepción, la memoria y el pensamien-
to. Tres factores importantes en los procesos radiónicos.
Les llamo la atención sobre el hecho de que el
ADN juega un papel en la modulación de las estructuras
nerviosas, en primer lugar porque la configuración molecu-
lar en doble hélice del ADN está peculiarmente relaciona-
da con el símbolo del triángulo y, en segundo lugar, porque
tengo la intención de utilizar las estructuras proteínicas
análogas y relevantes del ADN para elaborar un patrón
geométrico funcional del campo psi.
Cuando el practicante hace las preguntas en el
curso de una diagnosis, podemos suponer que el cerebro
actúa como un transformador de aumento del impulso
recibido. Es posible que el cerebro actue como un sistema
de amplificación con sus neuronas funcionando como
transistores. En términos de electrónica, podría haber una
amplificación de la impresión con una distorsión mínima
del contenido original de la señal. Químicamente esto
estaría condicionado por los átomos de oxígeno del ami-
noácido acetilcolina esterásica, que regula los movimientos
de los átomos con carga eléctrica en las membranas de las
fibras nerviosas que, a su vez, trasmiten las corrientes de
comunicación eléctrica de las células nerviosas activadas,
creando, como se ha dicho antes, una respuesta muscular
y el movimiento del péndulo.
La teoría de Marshall sobre la PES como una
resonancia holística está relacionada con la del cerebro
visto como un amplificador. El dice que la transmisión de
información entre dos puntos separados en el espacio sin
la intervención de señales físicas implica la reproducción
de una frecuencia particular de actividad nerviosa en un
humano análoga a la de otro humano.
Algo similar ocurre durante una diagnosis radióni-

60
ca o radiestésica. El practicante establece una frecuencia
de actividad nerviosa formulando mentalmente la pregun-
ta: ¿tal o cual enfermedad está presente en el paciente?. El
estabiliza esta frecuencia por la presencia del testigo de
Turenne o, en el caso de radiónica, colocando un valor
numérico, conocido como "índice" o "proporción", en el dial
de su instrumento.
Si la frecuencia de enfermedad está presente en el
paciente, entonces, no importa a qué distancia del practi-
cante se encuentre el paciente, se establece una resonancia
entre su cualidad vibratoria y la cualidad vibratoria de la
pregunta del practicante y éste recibe una respuesta
positiva del péndulo. Incidentalmente, este factor señala
la necesidad de formular preguntas absolutamente claras
y concisas cuando se trabaja en el campo de la radiestesia
o radiónica.
Si la pregunta no se formula y dirige claramente
parece que ocurre un cortocircuito en el proceso de feed-
back y algo en el interior del practicante emite una
respuesta positiva a la imagen contenida en su propia
mente, y obtiene, en muchos casos, una reacción incorrec-
ta. Esto puede ocurrir fácilmente cuando hay fatiga o
cuando influencias externas dificultan la formulación y
proyección concisa de la imagen de resonancia imaginada.
En relación al efecto del campo sobre el concepto de campo,
tenemos la experiencia del abate Mermet, uno de los
zahoríes más experimentados del mundo en su tiempo.
Una vez decidió enseñar a algunos escolares cómo buscar
agua con aquella técnica, pero, por mucho que lo intentó,
no pudo obtener ninguna reacción de su péndulo. El
comentó que debía haber una gran perturbación en el
campo magnético terrestre, para que aquello hubiera
ocurrido. Al día siguiente se recibieron noticias de que, a
aquella misma hora, una ola oceánica inmensa azotó el
Japón.
En 1661 Joseph Glanville comparó la comunicación
de dos mentes a la comunicación de un sonido entre
cuerdas resonantes y concluyó que las señales del cerebro
pueden trasmitirse a través del éter como los sonidos por

61
el aire. Su concepto guarda una notable semejanza con la
teoría, más moderna, de Marshall.
Existe un axioma antiguo que dice que "la energía
sigue al pensamiento". Paracelso nunca se mostró remiso
a expresar que el cuerpo humano puede actuar a distancia
mientras está descansando en un lugar y que nada debe
atribuirse al cuerpo en sí mismo, sino a las fuerzas que
fluyen de él.
En una artículo titulado The Human Body when
Dowsing, publicado en el número de diciembre de 1967 de
la BSD Journal, el Doctor Borchard escribió: "Creo que en
la búsqueda con varilla algo sale del zahorí". Yo sugeriría
que lo que sale del zahorí es, de hecho, la imagen de
resonancia con la resonancia del objeto buscado que
consigue llevar la percepción de ese objeto o cualidad al
practicante por vía de una incursión en su campo psi,
seguida de una respuesta nerviosa automática.
El efecto del pensamiento a distancia ha sido
demostrado por Cleve Backster, director del Backster
Research Foundation de Nueva York. A casi todo el mundo
le resulta ahora familiar el hecho de que él ha descubierto
que, empleando un polígrafo, normalmente utilizado para
estudiar la estimulación emocional en sujetos humanos, las
plantas registran aprensión, miedo, placer y alivio. Se
llevaron a cabo una serie de experimentos que revelaron
que las plantas respondían, no sólo a las amenazas
abiertas a su bienestar, sino que, de forma incluso más
remarcable, respondían a los sentimientos e intenciones de
las criaturas vivas, animales así como humanos, con los
que estaban estrechamente asociadas.
En condiciones experimentales, Backster empleó el
test estándar de los poligrafistas "amenaza el bienestar".
En su mente decidió quemar la planta; la reacción de la
planta a su pensamiento fue tan fuerte que la plumilla de
trazado saltó sobre la gráfica. De forma similar, las
plantas han reaccionado a la tensión de personas estresa-
das y han registrado células que estaban muriendo en la
sangre seca a causa de un corte accidental en el dedo. Y lo
que es más, ellas pueden recibir señales desde una

62
distancia considerable, ya que han registrado la intención
del Doctor Backster de volver a su oficina desde una
distancia de más de 15 millas. Backster informa que trató
de bloquear, sin éxito, cualesquiera que fueran las señales
que las plantas recibían utilizando una jaula de Faraday
y recipientes recubiertos con plomo. La comunicación conti-
nuó, de modo que parece que las señales pueden no caer
dentro del espectro electrodinámico conocido.
Después he tenido el placer de conversar muchas
veces con Cleve Backster con relación a su trabajo y en él
hay evidencia clara que puede utilizarse para explicar
algunos fenómenos radiónicos. También he pasado muchas
horas trabajando con el Doctor Marcel Vogel, químico
superior de investigación para IBM en San José, Califor-
nia. Sus investigaciones sobre métodos de comunicación
hombre-planta tienen un mérito excepcional y muestran
claramente los efectos del pensamiento salvando grandes
distancias. He aquí un ejemplo.
En 1973, el Doctor Vogel participó en el Primer
Congreso Internacional de Parapsicología y Psicotrónica,
que se celebró en Praga. Aprovechó la ocasión para llevar
a cabo un experimento que envolvía el impacto del pensa-
miento a distancia. A unas seis mil millas de distancia, en
San José, el Doctor Ward Lamb estuvo sintonizando,
durante quince minutos, en dos noches consecutivas, a una
hora acordada, con la planta y el equipo electrónico
conectado a ella. En Praga, el Doctor Vogel se concentró
durante el mismo período y a intervalos proyectó potentes
estallidos de pensamiento en el chakra del corazón del
Doctor Lamb. La primera noche, la gráfica mostró tres
respuestas distintas a esas proyecciones de pensamiento.
La segunda noche no hubo ninguna respuesta en San José
y el Doctor Lamb tenía la impresión de que el experimento
había fracasado. En realidad, lo que había ocurrido es que,
después de un agotador día de discursos. el Doctor Vogel
se había quedado dormido y, de hecho, no había proyectado
ningún pensamiento al Doctor Lamb. El experimento
había resultado un gran éxito y es uno de los más signifi-
cativos para la radiónica.

63
Nx

Backster y Vogel han demostrado en sus experi-


mentos que las plantas son sensibles y que responden
definitivamente y por simpatía a lo que les ocurre a otras
formas vivientes de su entorno. En segundo lugar, indican
que la acción a distancia, largo tiempo adscrita a las
fuerzas de gravitación que originan las plantas, es de
hecho un rasgo de un campo no material. Estos hallazgos
fuerzan a los científicos a aceptar la existencia de otro
campo de energía universal, exclusivo de la vida, en el cual
la sensibilidad es un rasgo. Esto ciertamente concuerda
con la red etérica de la tierra y con el tejido conectivo
etérico del espacio.
Para el practicante de radiónica, que usa técnicas
de transmisión, la acción a distancia es un fenómeno
cotidiano. Para los pensadores más ortodoxos estas
técnicas pueden parecer bastante sospechosas y, sin
embargo, en los siglos XVI y XVII la curación de heridas
por simpatía era un hecho auténtico.
En su Sylva Sylvarum, publicado en 1672, Francis
Bacon escribe: "Constantemente se admite y reconoce que
el ungimiento del arma que ocasionó la herida curará la
herida misma". Continúa con la descripción de la prepara-
ción de un ungúento y con las pruebas diversas a que se
ha sometido la práctica, todas las cuales parecen mostrar
que la curación sólo se obtiene cuando se aplica el un-
gúento al arma y no a la herida, que el arma debe estar a
gran distancia y que la curación no depende de que el
paciente conozca la unción.
Sir Kenelm Digby tiene una versión de la curación
en la que una tela cubierta de sangre de la herida se
empapa en una solución de "Polvo de simpatía" (sulfato de
hierro preparado especialmente). Glanville asegura que la
curación de heridas a distancia había sido puesta fuera de
duda por el noble Sir Digby.
Los científicos de hoy en día no son tan fáciles de
convencer pero también se hace mención de una curación
en la History of the Royal Society de Spratt's. El escritor
observa que lo que se ha informado acerca del efecto de
cierto veneno, proveniente de Macassar, sobre las heridas

64
(éste alcanza la sangre desde la herida) no resulta extraño
para aquellos que estudian la simpatía.
La diagnosis y el tratamiento a distancia están
inevitablemente relacionados con el pensamiento; de
hecho, afirmo que sin el poder directivo del pensamiento
no se podría efectuar ninguna curación. Es la energía que
sigue al pensamiento la que da el poder curativo al
remedio o frecuencia seleccionado para aplicar al paciente.
Si el pensamiento no interviniera, entonces cualquier
mechón de pelo dejado en el suelo de la peluquería nos
expondría a una amplia gama de influencias y nos encon-
traríamos a nosotros mismos reaccionando a un bombardeo
fortuito de sensaciones desagradables. Afortunadamente
para nosotros, esto no sucede.
Habiendo considerado al practicante como un
complejo de campos de energía que se integran en el
campo de energía terrestre y habiendo teorizado sobre el
papel del pensamiento y las imágenes de resonancia en el
fenómeno del feedback entre el practicante y el paciente,
podemos proceder ahora a explorar y explicar la naturale-
za del vínculo entre ellos, definiendo la interacción recípro-
ca de energías y construyendo un modelo de la naturaleza
geométrica funcional del campo psi.
Nuestro conocimiento de la relación entre el
hombre y el espectro de fuerzas que nos rodean y con las
que nos compenetramos, pequeño como es, exige que
cuando postulemos un campo de fuerza a través del que el
practicante trabaja, dicho campo deba de ser apropiado a
la naturaleza y al comportamiento de la célula protoplás-
mica.
De acuerdo con el profesor Oliver Reiser de la
Universidad de Pittsburgh, el diseño arquetípico de la
doble hélice del ADN es una expresión del campo de
energía cósmico que, de alguna manera, es la guía de la
evolución biológica. Rudolf Steiner habla de las fuerzas
formativas etéricas en este papel y está claro que uno
puede encontrar pistas en cuanto a la naturaleza del
campo de fuerza invisible subyacente a la materia estu-
diando la geometría de las formas precipitadas, particular-

65
mente la estructura del ADN y ciertas proteínas comple-
jas.
La gráfica psiónica nos da una pista. El mérito de
cualquier gráfica utilizada para el diagnóstico en la radies-
tesia médica reside en la inherente conformación de su
estructura a las frecuencias y leyes del campo de energía
para el que ha sido diseñada. La gráfica psiónica es un
ejemplo gráfico de formas geométricas simbólicas y combi-
nadas que se armonizan a sí mismas con las frecuencias
que emergen de las fuerzas formativas etéricas.
Esa conformación a las expresiones estructurales
fundamentales de los niveles para-físicos de la materia
hace esta gráfica irrepetiblemente apropiada para el
trabajo en la radiestesia médica, proveyendo un punto
central en el que puede manifestarse una interacción de
energías, revelando incluso las más sutiles huellas de
enfermedad en el Campo Vital humano.
Carlyle escribió una vez: "En un símbolo reside el
escondite de la revelación". Esta ha sido la opinión de los
sabios durante muchos siglos en el pasado y estamos
viendo el siempre creciente uso de símbolos en la tecnocra-
cia de nuestros días por la sencilla razón de que un solo
símbolo tiene la capacidad de representar una gran
cantidad de información, de contenerla en el espacio más
reducido posible y de hacerla disponible en un momento.
El símbolo es, de hecho, la expresión de economía y
efectividad de la naturaleza; comprendido y aplicado
correctamente dotará al practicante de radiónica de una
profunda perspicacia en su trabajo.
La gráfica psiónica, tal como la podemos ver, se
compone de tres símbolos geométricos básicos de dimensio-
nes específicas. Desde un punto de vista simbólico, el
cuadrado puede decirse que representa la personalidad
(bajo-yo) o "la ciudad que se extiende en cuadro". En otras
palabras, las energías combinadas de los campos de fuerza
físico, etérico, emocional y mental.
El círculo siempre ha sido el Símbolo de los centros
de poder de los campos etéricos y está contenido en el
triángulo que apunta hacia abajo y representa la actividad

66
material e involutiva. No hay duda de que tal combinación
de símbolos geométricos hace de la gráfica psiónica una
excelente herramienta para explorar las relaciones de
energía en la salud y la enfermedad.
De los símbolos que incorpora la gráfica, el trián-
gulo es quizás el más revelador. Como se ha mencionado
previamente, en el triángulo se produce un equilibro de
fuerzas cuando se ha encontrado el similimum correcto
para el paciente. Este fenómeno y las siguientes lecturas
de cero que suceden a la eliminación de la enfermedad
después de la ingestión del remedio oral sugieren podero-
samente que el paciente está subjetivamente vinculado a
la gráfica mediante un simbólico triángulo de energía. Más
adelante veremos que el triángulo que apunta hacia abajo
es, de hecho, eclipsado por aún otro triángulo subjetivo,
completándose de esta manera el símbolo del vínculo
existente entre el paciente y el practicante.
Habiendo formulado la hipótesis de que el paciente
y el practicante están geométricamente vinculados durante
un diagnóstico radiestésico, me gustaría explorar ahora la
posible interacción recíproca de energías entre ellos, que
en el análisis final da un resumen penetrante del estado
de salud del paciente.
Para empezar, describiré el hipotético intercambio
de energía en los confines del símbolo y después los que se
dan en el entero campo psi.
Primero, debemos entender que cada triángulo es,
básicamente, la expresión de una energía fundamental y
dos fuerzas secundarias. La energía fundamental en el
vértice de cada triángulo es emanativa por naturaleza y
los dos puntos secundarios, uno a cada extremo de la línea
base común, son receptivos. Estrictamente hablando, todos
los puntos se desplazan de lo emanativo a lo receptivo y
atrás otra vez durante el proceso de diagnosis. Todos
tienen varias cualidades pero para mantener la claridad
cada punto se designará de cierta manera.
Consideremos ahora cada punto más de cerca. El
punto del vértice del triángulo que apunta hacia arriba
representa al paciente, que actúa como un centro energía

67
EMANATIVO que vierte una corriente de energías compe-
tentes en el campo psi que lo rodea, por energías compe-
tentes me refiero a aquellas energías que reflejan el estado
mental, emocional y físico del paciente bajo estudio.
El segundo punto, situado en el extremo izquierdo
de línea de la base, es un centro de fuerza receptivo que es
EVOCATIVO por naturaleza. Este se representa en el
nivel físico por cualquiera de los testigos de enfermedad u
órgano de Turenne.
El tercer punto, en el extremo derecho de la línea
de base, es un centro de fuerza MAGNÉTICO en el que se
completa el asentamiento de la energía emanativa del
paciente. Esto se representa con la muestra del paciente,
sea ésta una gota de sangre o un mechón de pelo.
El cuarto y más bajo punto se designa como un
centro DISTRIBUTIVO y es, de hecho, uno de los centros
positivos de fuerzas o un chakra en el Campo Vital del
practicante.

PACIENTE
Un punto de energía emanativo

TESTIGO O INDICE GOTA DE SANGRE


un centro de fuerza un centro de fuerza
evocativo magnético

PRACTICANTE
un centro de fuerza distributivo

Así que ahora tenemos el siguiente símbolo con


forma de diamante que representa el vínculo entre el
paciente y el practicante.

68
El practicante, por medio de preguntar mental-
mente si cierta enfermedad está presente en el paciente,
se vincula a sí mismo, a través del testigo de Turenne y la
gota de sangre,al paciente, emitiendo la siguiente corrien-
te de energía pautada.

PACIENTE

PRACTICANTE

Si la enfermedad como la representa el testigo (o,


en radiónica, el índice o proporción) y la imagen de
resonancia en la mente del que busca está realmente
presente en el paciente, el proceso de feedback a través del -
campo psi mediador es instantáneo.
Se produce una síntesis entre la fuerza vibratoria
emanada de la enfermedad y la fuerza evocatoria del
testigo. Se mezclan para formar un punto de energía
competente. Este punto de energía competente reacciona
ahora a la gota de sangre o centro magnético, que es
vitalmente sensible a la fuerza evocativa del testigo de
Turenne. Esto establece una interacción de fuerzas entre
los dos puntos de la línea de base. Esta interacción de
fuerzas se registra en el campo psi del practicante y se
distribuye a través de su sistema nervioso, creando un
desequilibrio que resulta en movimientos musculares
involuntarios que impelen al péndulo a la actividad,
midiéndose de esta manera el grado de enfermedad

69
presente en el paciente. En un diagrama esto daría la
siguiente pauta de corriente de energía.

PACIENTE

TESTIGO O INDICE GOTA DE SANGRE

PRACTICANTE

Combinando las dos frecuencias de corriente de


energía, se configura un símbolo con forma de diamante
formado por dos triángulos como representación del
vínculo entre el paciente y practicante.

PACIENTE

TESTIGO O INDICE - === GOTA DE SANGRE

PRACTICANTE

70
Con relación a esto, me gustaría citar un párrafo
de Esoteric Astrology de Alice Bailey:

«La configuración con forma de diamante de las energías


interrelacionadas es el prototipo de frecuencia que se
esconde tras la red etérica y su influencia condicionante
final por lo que concierne a la tierra».

El símbolo del diamante es, entonces, una unidad


simple del campo psi. Tomando esta pauta y extendiéndola
en una red multidimensional forma, al menos en teoría, un
vasto campo de fuerza geométricamente estructurado que
penetra el espacio.
Cada línea es potencialmente positiva o negativa,
y Cada confluencia de líneas contiene el potencial de
cualidades emanativas, evocativas, magnéticas y distribu-
tivas. La ilustración se ha dibujado en un plano simple
para hacerla lo más sencilla posible pero debe visualizarse
extendiéndose en todas las dimensiones y direcciones para
formar un campo que rodea y se compenetra con la tierra
y todas las formas en ella.

DETALLE DE UN MODELO DE CAMPO DE PSI

71
Un área en la que este diseño energético se ha
utilizado de forma práctica es la arquitectura. Buckmins-
ter Fuller ha hecho completo uso de este hecho de la
naturaleza para desarrollar una de las unidades estructu-
rales más fuertes y económicas conocidas por el hombre, a
saber, las secciones triangulares de la cúpula geodésica.
Como puede observarse, el diseño de los campos psi
coinciden con el de la cúpula geodésica.
Fuller dice que el diseño matemático e inter-
transformable de las estructuras geométricas de la natura-
leza son la única realidad del universo y que en cualquier
estructura las cargas de energía altas se niegan a dar un
rodeo para alcanzar su polo opuesto sino que tienden a
abrirse paso por el espacio de separación. De esta manera,
la energía se triangula automáticamente a través de la
diagonal del cuadrado o a través de las diagonales de
triangulación de cualquier otro polígono al que se aplique
la fuerza. Los sistemas triangulares, dice él, es con mucho
la estructura energética más económica. Considérese cuán
cerca está esto de la red etérica de la tierra y su uso en el
diagnóstico y tratamiento radiónicos.
Si proponemos un campo psi estructurado triangu-
larmente, la teoría puede acomodarse en el marco del
lenguaje y pensamiento físicos existentes y, al mismo
tiempo, encajar en las teorías especulativas de la Antigua
India relativas al campo de fuerza etérico que subyace a
toda la creación.
En 1965 en el CIBA Foundation Symposium on
Extrasensory Perception (Simposio sobre la Percepción
Extrasensorial de la Fundación CIBA), G.D. Wassermann,
en su ponencia titulada "Un bosquejo de la teoría de
campo de las formas y comportamiento orgánicos", hizo
algunas sugerencias sobre la naturaleza del campo psi,
utilizando una teoría de campo cuántica. Afirmaba haber
superado algunas de las dificultades de una interpretación
de campo del fenómeno psi construyendo un proceso de
cascadas de campos en el que no se daba ninguna atenua-
ción por la distancia y, aunque asumía que los campos psi
necesitaban energía, su interacción con los campos ordina-

72
rios de materia era nula o extremadamente pequeña, de
modo que los campos psi podían propagarse a través de
grandes distancias sin que se diera absorción.
Teorías más recientes de los científicos rusos y la
evidencia de las investigaciones de Cleve Backster y
Marcel Vogel sobre la percepción de las plantas apuntan
al hecho de que cualquiera que trata con fenómenos psi y
teoriza sobre la transmisión y recepción de información a
distancia, como ocurre en la práctica de la radiónica,
tendrá que buscar más allá de los campos electromagnéti-
cos conocidos si quiere encontrar respuestas a los proble-
mas que estos fenómenos plantean.
Las dificultades para comprender los problemas de
los emisores y receptores pueden superarse si se acepta
que hay ciertas funciones neurológicas y fisiológicas con
las que los campos psi interactúan y que el pensamiento
juega un importante papel en esa acción recíproca.
El hombre es un complejo campo de energías
inmerso en el campo de energía de la tierra. En su concep-
ción y durante toda su vida los átomos de su cuerpo
provienen de la tierra y, de acuerdo con el pensamiento
oriental, la sustancia de su campo de fuerza etérico se
deriva del cuerpo etérico del planeta. En la célula física
debemos ver, entonces, un reflejo de la pauta arquetípica
de la red etérica que constituye su Campo Vital y que, a su
vez, debe reflejar la pauta del campo de energía en el que
está totalmente inmerso.
El axioma hermético: "Como arriba, así es abajo"
indica claramente que los antiguos eran de la opinión de
que el microcosmos (hombre) contenía las pautas del
macrocosmos (hombre cósmico). Hoy en día quizá encon-
tremos un poco difícil de entender el velado simbolismo y
las técnicas de investigación de aquella gente, pero es
posible encontrar análogos orgánicos remarcables en el
cuerpo humano que reflejan el diseño de los campo de
fuerza subyacentes.
Por ejemplo, el colágeno, la principal proteína de :
soporte del tejido conectivo, se encuentra en todo el reino
animal. La naturaleza, como C.Smith señala en su libro

73
Molecular Biology, habiendo encontrado los medios que le
confieren fuerza tensora, no ha sido capaz de mejorarla. El
colágeno, entonces, impregna todas las formas animales,
de la misma forma que el tejido etérico impregna el
universo como un tejido conectivo espacial. Este tiene,
como ya se ha mencionado, una tremenda fuerza tensora,
igual que las cúpulas geodésicas diseñadas por Buckmins-
ter Fuller.
Una forma de estudiar la estructura del colágeno,
que tiene una constitución de aminoácido simple compues-
ta principalmente de glicina y prolina, es estudiando los
poli-péptidos sintéticos como la poliglicina y la poliprolina.
La estructura de la poliglicina exhibe la estructuración en
forma de diamante del modelo del campo psi encajando con
facilidad en el diseño como se muestra a continuación.

ESQUEMA DE LA POLIGLICINA 2 (Vista frontal)


Se han omitido los símbolos químicos simplificar el esquema.

74
También se muestra una modificación de esta
estructura arquetípica con forma de diamante en la
configuración en doble hélice de la molécula de ADN. Una
vez más es el patrón común a todas las cosas vivientes,
desde los organismos unicelulares hasta el hombre.

ADN CADENA PSI CADENA PSI


DOBLE HELICE EXTENDIDA

A primera vista podría decirse que el diseño de la


cadena no coincide con la doble hélice de ADN pero, puesto
que podemos aceptar la analogía en términos más amplios
y no somos excesivamente mecanicistas en nuestro pensa-
miento, podemos ver que sí coinciden. Más que intentar
alguna forma de gimnasia mental, es más sencillo hacer
un modelo de papel de la cadena, de forma que si se sujeta
por los extremos pueda formar una configuración en doble
hélice al estirarla.
Actualmente hay suficiente evidencia como para
que los científicos aseguren que las dos bandas de la doble
hélice tienen un polaridad opuesta. La secuencia de
átomos de una banda circula en dirección opuesta a la de
la otra cadena. De manera similar, la corriente de energía
en las cadenas de los campos psi se imagina circulando en
direcciones opuestas y, si uno puede escoger, diría que
tienen una polaridad opuesta. Esto se aplica también a las
cadenas paralelas de los enlaces por todo el campo. Son ya
muchas similitudes casuales.
La estructura de la cadena también aparece en la

75
N

división meiótica de las células, los cromosomas se ordenan


a sí mismos en hélices. Más remarcable aún es la estructu-
ra que se forma cuando las fibras en forma de uso conec-
tan los centrómeros con los centriolos. En este estadio, los
centrómeros se han dividido y los cromosomas se colocan
en los polos opuestos de la célula. La ilustración siguiente
muestra la gran similitud que guarda con la estructura de
la cadena psi.

SEXTO ESTADIO DE LA DIVISION MEIOTICA

Vuelvo a citar de nuevo el artículo de la Doctora


Borchard sobre el cuerpo humano cuando practica la
búsqueda con varilla. Si consideramos una vez más el
símbolo de la cadena psi y el juego de fuerzas en la línea
base común de ambos triángulos, es evidente que esto
demuestra la "fuerza central" de polaridad entre dos polos
opuestos, entre el practicante y el paciente.
Espero haber mostrado que es esencial formular
un teoría de campo basada en fenómenos observables si
queremos conseguir una profunda comprensión de nuestro
trabajo con relación a la percepción en la radiónica y la
radiestesia. Por analogía con la configuración molecular de
ciertas sustancias proteínicas y del ADN, es posible formar
una teoría relativa a la estructuración geométrica del
campo psi, una teoría que relacione el diseño de la célula
con el diseño de las fuerzas formativas del cosmos.
El principio de la percepción en la radiestesia y la

76
radiónica reside, sencillamente, en la polarización del
campo psi por la introducción en ese campo de una pauta
de pensamiento de resonancia clara y concisa. El enlace a
distancia de esa frecuencia con otra frecuencia similar en
el paciente lleva la percepción de esa enfermedad particu-
lar al practicante.
Si parece que me he extendido excesivamente en
la estructura del campo psi es porque no creo que la fuerza
radiónica atraviese el espacio de alguna manera indeter-
minada, sino que lo hace de acuerdo con ciertos principios
y leyes que pertenecen a la acción del pensamiento en el
cuerpo etérico de la tierra. Esos hilos etéricos, esos rayos
de luz, pueden activarse con el pensamiento y usarse como
vínculos de conexión entre el practicante y su paciente; son
ultra-microscópicamente pequeños, su estructura triangu-
lar presenta una analogía directa con la estructura en
doble hélice del ADN, ellos son el campo formativo en el
que vivimos. Los sacerdotes Kahuma de Polinesia utilizan
esa líneas de energía para curar personas a distancia, se
refieren a ellas como los hilos aka y dicen que mediante un
acto de voluntad del sanador, las energías de naturaleza
curativa pueden ser dirigidas a través de los hilos aka al
paciente, de modo que, por lo que vemos, la idea de un
vínculo entre el sanador y el paciente no es de ninguna
manera un concepto nuevo. De todas maneras, a la luz de
los conocimientos modernos en el campo de la fisiología es
posible teorizar acerca de la formación estructural de esos
hilos, y quizá de esto surjan nuevas ideas.
Ciertamente, la comprensión de los campos de
energía, sean éstos electromagnéticos, biofísicos, campos
vitales, campos de pensamiento, campos etéricos o psi, es
esencial para el practicante de radiónica para alcanzar
una completa y profunda comprensión de su trabajo.

17
se E TINO

y dos palon re=raosr dad tdo. e la -....


mstmanayicorre abi
atieo
vi catsbrqriblior
ap >

eesndtakesp 0er) onsuproq »olog oqorso lobmute ml


sosobal moases aria eb oinsqus lo sasivasia maiabibaa
- egigiaaing soswolo roo obreras ab ensd ol sup onia ehanico ME 3
ló-«ó otasimacios lab nóinos ni n oup ta
aovÓ s08s aos solid. yin eb roinids oqusito era
>.
omo sais yabaaámestr] $6000 sauévitos asbouq sab
ans aro vaysjemnitorq lo attas aviasco sbmolunalw:
5 _ a mp ad

lo ay ovitemnól ogro lr gte a


svosiicia apsadoT sb sy deaR e

A PT
: bp con ralación a 44 Sar pción 1
o 2 Foracalogio y la cunda y
ps Ares tall y del ¿215,0
: raiativn
EAN
adaetracurasión quedadas
A
is ld etrmotirasi. ninio
da
E
Capítulo Cuatro

FOTOGRAFIA ETERICA
RADIONICA
«¿Significa algo para ti, que yo te diga que la electrici-
dad y la fotografía están estrechamente relacionadas
porque el ser humano es eléctrico en origen y en natura-
leza? Esto debe ser demostrado en el plano físico con la
ayuda de los aparatos sensibles que se precisen».
Esoteric Healing.
Alice A. Bailey (Feb. 1944).

En vista de la evidencia disponible es claramente


posible fotografiar los campos de fuerza y energías que se
utilizan en la radiónica. La quiropráctica Doctora Ruth
Drown fue la primera en hacerlo, obteniendo unas fotogra-
fías muy notables con lo que ella llamaba su instrumento
de Radio-Visión; la mayor parte de esta investigación se
llevó a cabo en California en los años 30.
Ruth Drown decía que existe una Fuerza Vital,
parecida a un fluido, que fluye por el entero universo,
dando energía y expresándose a través de todas las
formas, cada una con un grado diferente de vibración,
dando origen, de esta manera, a ciertos elementos y
sustancias a partir de los cuales se formó el mundo
material. Ella habló de un fluido en el tálamo que se dice
que establece el equilibrio en la cabeza, bastante parecido
a la burbuja en un nivel espiritual. Ese fluido, afirmaba
ella, era también una forma de luz líquida, una condensa-
ción de la Fuerza Vital que anima la vida. Continuaba
diciendo que podía encontrarse en el plasma sanguíneo y
bañando todo el sistema nervioso y que entraba por la
glándula pineal y terminaba en el nódulo aurículo-ventri-
cular del corazón.

79
Las fotografías tomadas con su instrumento de
Radio-Visión se obtenían conectando directamente al
individuo con el instrumento mediante cables o colocando
una gota de sangre en un punto del circuito. Entonces, la
energía del paciente fluía hacia el instrumento, se gradua-
ban los diales para seleccionar el área a fotografiar y
entonces la energía seleccionada del paciente fluía a través
de la emulsión de la película. Por lo que entendemos,
ninguna luz incidió en la placa fotográfica, solamente la
luz de la Fuerza Vital. Una fotografía del núcleo de los
nervios craneanos tomada con el instrumento reveló la
figura de una hoja de loto en el interior de la corteza del
cerebro.
Ella no podía entender porqué la gente no podía
comprender que la Luz invisible era el principio activo que
producía las fotografías. Para ella estaba muy claro y
expresó lo que ella entendía con estas palabras:

«El hecho de que algunas de nuestras fotografías de


Radio-Visión se tomen utilizando la sangre como una
"corriente de electrones” se explica de esta manera:
cuando colocamos la sangre en un papel secante ésta se
cristaliza, del mismo modo que el hielo es vapor cristali-
zado y cada pequeño átomo es el final cristalizado
precipitado de una línea invisible que se interna en los
éteres. Esta línea invisible pasa a través del cuerpo por
los nervios y a través de los vasos sanguíneos y los
electrones del aire, el agua y la tierra forman la estruc-
tura del cuerpo, adhiriéndose a esa línea, que mantiene
la forma del cuerpo.
Esta línea invisible es, por lo tanto, la Fuerza Vital del
cuerpo. Toma también la forma de líquidos y gases
cuando la corriente de electrones se acelera lo suficiente
como para producir calor. Cuando el cuerpo deja de ser
animado por esta Fuerza Vital, en otras palabras,
cuando llega la muerte, no podemos sintonizarnos con
ella con nuestros instrumentos. La Fuerza Vital o
"corriente de electrones” se ha retirado.
Ya que la sangre es luz cristalizada, actúa como la luz
y tiene la velocidad de la luz. Así, su energía viaja
alrededor del mundo siete veces y tres cuartos por
segundo, si no más. Esto suprime la idea de la distancia

80
y muestra que la vibración de todo en el mundo está
donde nosotros estamos; nosotros sólo tenemos que
tomar esa vibración de los éteres y pasarla a través de
nuestro instrumento, bien para tratar al paciente a
distancia, bien para hacer una foto de alguna parte de
su cuerpo».

Continua diciendo:

«En nuestro trabajo, somos incapaces de tomar una


fotografía de alguien bajo anestesia. La razón de esto es
que cuando un paciente está bajo anestesia el cuerpo
mental se arranca del físico (esa es la razón de que el
cuerpo físico no sienta nada en esas ocasiones) y perma-
nece a un lado. Para recuperar el cuerpo mental lo
suficiente como para que pueda esbozar la fotografía,
debemos usar un cierto tipo de remedio homeopático con
la vibración del paciente».

La explicación de la Doctora Drown sobre cómo se


obtienen las fotografías radiónicas está lejos de ser
científica, pero algunas de sus afirmaciones dan que
pensar. Por ejemplo, las implicaciones de que una gota de
sangre contenga el diseño de las frecuencias de cualquier
parte del cuerpo humano y de que esas frecuencias de
energía están presentes siempre en cualquier parte de la
tierra y pueden ser identificadas y fotografiadas simple-
mente sintonizando con ellas mediante los instrumentos
radiónicos adecuados. También es interesante el hecho de
que ella no pudo obtener fotografías de una persona bajo
anestesia, a menos que se usara un cierto remedio homeo-
pático (sin especificar) para crear algún vínculo entre los
cuerpos separados por la anestesia. Los remedios homeopá-
ticos son energía pura, particularmente por encima de una
potencia de 12c, Quizás el remedio actuaba como la
"corriente de electrones" que se necesitaba para obtener
fotografías en casos como este.
Tengo la gran suerte de poseer unas cuantas
fotografías de Radio-Visión tomadas personalmente por la
Doctora Drown en los años 30. Cuando las conseguí hace
algunos años, debo confesar que les eché una mirada y leí

81
la interpretación diagnóstica de cada una que, desgracia-
damente no tenía ningún sentido para mí, así que estuvie-
ron en los archivos hasta que conocí al Doctor Dennis
Milner de la Universidad de Birmingham y tuve la
oportunidad de oírle discursar y de ver sus notables
diapositivas de las fuerzas formativas etéreas que él, Ted
Smart y su asistente Brian Meredith habían tomado.
Inmediatamente vi un paralelo con las fotografías de
Drown, era una simple cuestión de interpretarlas en
términos de fuerzas etéricas en vez de hacerlo como si
fueran fotografías de condiciones patológicas. Estoy seguro
de que las fotografías de Drown pueden interpretarse como
partes del cuerpo que evidencian cambios patológicos; es
sólo que si no le han enseñado a uno qué debe buscar,
como ocurre con la interpretación de los rayos X, entonces
no hay manera de saber qué es lo que uno está mirando.
Esto está en completa oposición a las fotografías radiónicas
tomadas en los Laboratorios De la Warr: en ellas los
órganos se distinguen claramente.
Evidentemente Ruth Drown recibió esta crítica, ya
que escribió:

«Se ha dicho que en nuestras fotografías la estructura


celular no se parece a nada de lo que muestran las
preparaciones histológicas bajo el microscopio. Estas
fotografías se han tomado de verdaderos tejidos vivos del
cuerpo, que son diferentes de aquellos que se han sacado
del cuerpo, como los que se observan en el microscopio.
Las células en el cuerpo vivo tienen un tono y una
actividad vital que no existe en la misma estructura una
vez que se ha sacado a ésta del cuerpo.
Es verdad que nuestra aproximación a esta materia
difiere de los métodos usados hasta ahora; sin embargo,
ha llegado el momento en el que el médico debe apren-
der más sobre la Fuerza Vital del paciente, que lo
anima, y sus muchas variantes a cerca de las meras
funciones del cuerpo».

Su contestación a la crítica es suficiente; nosotros


podemos saber realmente qué aspecto tienen los tejidos
humanos cuando funcionan sin interferencias ajenas al

82
cuerpo; los tejidos extirpados han perdido su Fuerza Vital
así que no pueden representar verdaderamente la forma
viva. El aspecto remarcable, y esto no lo podía saber Ruth
Drown cuando hacía sus fotografías allá por los años 30, es
que las fotografías histológicas tomadas con microscopios
electrónicos en los modernos laboratorios de hoy en día
tienen una sorprendente y directa semejanza con sus
fotografías. Ciertas fotografías que ella tomó de los campos
de energía del cerebro son literalmente idénticas a moder-
nos estudios microscópicos.
Ciertamente el último párrafo de su declaración
tiene unas resonancias penetrantes y, esperamos, proféti-
cas. No hay duda de que cuando la medicina ortodoxa
reconozca estos Campos Vitales etéricos, se producirá una
revolución que transformará la práctica médica y la hará
más efectiva. El uso indiscriminado de drogas toscas se irá
al traste y las causas de la enfermedad se buscarán en las
áreas pre-físicas de la materia y se tratarán constructiva-
mente en vez de sólo suprimir los síntomas con drogas o
cirugía.
Unas cuantas fotografías de Radio-Visión tomadas
por Ruth Drown se incluyen aquí junto con la interpre-
tación diagnóstica. Vale la pena compararlas con las
fotografías histológicas de cualquier buen libro que trate
sobre el estudio de las células. Pueden contemplarse
también como expresión de los diseños de las fuerzas
formativas etéricas: mira las vastas extensiones de energía
a través de la emulsión, nota las formas circulares como
discos del cálido éter que incluso parecen proyectar
sombras. Estas son evidencia remarcable de las fuerzas
que están más allá del alcance de nuestros cinco sentidos,
y confirman el hecho de que es posible fotografiarlas con
un instrumento radiónico que no utiliza luz para impresio-
nar la imagen en la película sino la energía de la Fuerza
Vital misma que contiene luz de otro tipo.
Muchas de las fotografías de Drown se tomaron
ante grupos de eminentes doctores médicos, que vieron en
ellas la realización de uno de los sueños de la ciencia
médica... la evidencia visual en la película de muestras de

83
delicadas estructuras de tejido tal como existen en el
cuerpo viviente. Con los años, muchos de los hallazgos de
las fotografías de Radio-Visión han sido verificadas por la
cirugía post-morten, probándose así la eficacia de la
técnica que las produjo.
Drown dijo que los científicos fuera del campo
médico reconocerían el gran potencial que encerraba esta
técnica radiónica. Que podría ser usada en los campos de
prospección de minerales, agricultura, física nuclear y
tecnología espacial. Se recuerda que ella tomó una fotogra-
fía de los astronautas en el espacio con su instrumento
radiónico, usando la fotografía de ellos de un periódico
como un testigo en vez de cristales de sangre.
Ruth Drown escribió:

«Nuevas investigaciones están llevando este trabajo a un


nivel de logros superior, sin fin posible a la vista de todo
lo que puede registrarse con estos métodos. Nuevos
diseños en el instrumental, que se mueven constante-
mente hacia disposiciones cada vez más sencillas y
revelan formas de adentrarse en las leyes y secretos
cósmicos que no habían sido accesibles al hombre hasta
ahora. Aparatos y materiales especialmente sensibiliza-
dos abren nuevas e increíbles vistas a la raza humana».

Entonces añade esta idea:

«Todo está aquí, ahora. Todo lo que tenemos que hacer


es sintonizarlo».

Aunque Abrams no utilizó ninguna forma de


instrumentación en sus intentos de fotografiar lo que él
llamaba energías psíquicas, consiguió obtener imágenes en
película. El dice, sin embargo, que eran tan débiles que no
podían ser reproducidas.
En sus experimentos descubrió que individuos con
la capacidad de descargar grandes cantidades de energía
espontáneamente podían grabar una imagen en película de
esa descarga. Se mantenía película sensible envuelta en
papel negro cerca de la frente del sujeto por un período de
30 segundos a 5 minutos. La descarga de energía aumen-

84
taba colocando una banda de material rojo alrededor de la
cabeza y se intensificaba la acción de los rayos psíquicos
interponiendo una banda de aluminio entre la placa y la
frente del individuo. Se observó que una capa de laca o de
cinta aislante obstruía el flujo de energía.
Abrams dijo que sus experimentos no se referían
a formas pensadas y que sus fotografías, que él llamó
psicogramas, eran simplemente las imágenes grabadas de
descargas de energía.
Uno no puede evitar preguntarse si tal vez no
había conseguido mejores fotografías si hubiera pedido a
sus sujetos que proyectaran mentalmente una forma
pensada clara y concentrada. Es evidente que ellos estaban
descargando energía a través del ajna o chakra de la
frente en la película que se sostenía cerca de sus frentes.
Ahora bien, este chakra, cuando funciona adecuadamente,
tiene la capacidad de descargar, proyectar y dirigir formas
pensadas a cualquier distancia que, ciertamente, puede
usarse para impresionar una imagen en la película
sensible, y creo que uno puede ver un ejemplo de esa
actividad expresada en las fotografías tomadas por Ted
Serios. Vale la pena añadir, también que el chakra ajna es
el centro del bajo-yo o personalidad y que si se usa o
estimula excesivamente, por ejemplo, en repetidos intentos
de impresionar imágenes en película, se puede predecir
con bastante precisión que se experimentarán transtornos
de la personalidad como resultado de esta sobre-estimula-
ción; se puede decir que fotografiar mediante una cámara
radiónica amortigua los efectos perjudiciales.
Por último, George De la Warr, su esposa Marjorie
y su asistente Leonard Corte reanudaron la investigación
en fotografía radiónica en los Laboratorios De la Warr, en
Oxford, durante los años 50. Se idearon y desarrollaron
nuevas cámaras y se obtuvieron fotografías de una natura-
leza completamente diferente. Los órganos estaban
claramente definidos, las áreas de patología resaltaban
violentamente. En resumen, las fotografías eran reconoci-
bles como estructuras físicas y mucho más fáciles de
interpretar.

85
De la Warr escribió en un boletín sobre sus
trabajos diciendo:

«En mi experiencia con nuestra cámara radiónica la


presencia de un campo magnético indica la presencia de
energía etérica. Los campos magnéticos de la naturaleza
están completamente cubiertos de frecuencias de energía
de su réplica etérica. Si consideramos una simple planta,
por ejemplo, sabemos que está cubierta por una réplica
etérica de la planta apropiada al estadio de su ciclo
vital».

Así que estaba claro que las fotografías radiónicas


que se estaban obteniendo eran de naturaleza etérica.
Se tomaron unas 12.000 fotografías radiónicas en
los laboratorios. Los científicos investigaron las afirmacio-
nes de De la Warr. Algunos se mostraron favorables pero
muchos no y se descubrió que si una persona que era
hostil a los conceptos de la fotografía radiónica estaba
presente en una sesión fotográfica, no se podían obtener
imágenes. Imagine el deleite de los escépticos y la conster-
nación del equipo del laboratorio. Este aspecto tempera-
mental de la cámara llevó a muchos científicos a rechazar
cualquier evidencia que produjera. Por supuesto también
hubo aquellos que se mostraron favorables y que pudieron
obtener fotografías con la cámara. Debe producir una
sensación de asombro en el individuo de mente abierta
intentar fotografiar el campo de energía de píldoras que
contienen una potencia homeopática de acónito y ver
entonces una fotografía de las flores de esa planta clara-
mente impresionadas en la emulsión de la placa. Yo he
visto esas placas y no contienen solamente imágenes, sino
que esas imágenes están grabadas en la emulsión como si
hubieran sido talladas por una fuerza invisible.
No hay duda de que un día las técnicas de fotogra-
fía radiónica jugarán un papel importante en muchos
campos del esfuerzo humano, especialmente en el campo
de la curación. El inconveniente actual es que sólo ciertas
personas pueden obtener imágenes en la película mientras
usan la cámara radiónica. El porqué no está enteramente

86
claro todavía, pero la teoría es que aquellos que pueden
obtener imágenes tienen una cierta cualidad en su propio
Campo Vital que sensibiliza y carga la placa con un tipo
indeterminado de energía. Cuando esto ocurre, que suele
ser bastante espontáneamente, se obtienen las imágenes.
Recientemente, llevé con nosotros al Doctor Marcel
Vogel, que había venido a visitarnos desde California, a
Burford, en Oxfordshire, a casa de Miss Elisabeth Baerlein
y Mrs. Lavender Dower. Ellos tenían una cámara radióni-
ca que hacía quince años había producido varios miles de
fotografías pues en aquella época trabajaban con una
persona que podía sensibilizar las placas.
Desde entonces, ellos han hecho muchos intentos
para obtener fotografías pero sin ningún resultado. Yo
mismo he tratado de hacerlo pero no lo he conseguido. El
Doctor Vogel, después de familiarizarse con el equipo, les
enseñó una técnica para cargar las placas. Hicieron unos
cuantos intentos con curiosos resultados; algunas de las
placas mostraban la demasiado familiar falta de exposi-
ción, otras no habían recibido exposición de luz y salieron
completamente negras. Después de una mañana de trabajo
dos placas mostraban una imagen discernible y eran las
placas en las que Mrs. Dower y Miss Baerlein se habían
esforzado
por fotografiar el chakra del corazón del Doctor
Vogel. Las imágenes estaban allí pero parecían idénticas
a las fotografías de Radio Visión de Ruth Drown; parecía
un respingo para los libros conseguir imágenes como las de
Drown en una cámara de De la Warr.
Debe enfatizarse que esas placas fueron cargadas
y sensibilizadas con un método que les dio a conocer el
Doctor Vogel. El no cargó las placas él mismo, sino que
impartió el método para que en futuras sesiones se pudie-
ran tomar fotos sin que él estuviera presente. Era una
perspectiva excitante porque si ese método funcionaba
para todo el mundo, entonces se podrían conseguir nuevas
series de fotografías radiónicas. Las sesiones posteriores
han resultado en blanco, no se han obtenido exposiciones
a pesar de que esta nueva técnica prometía mucho. Es
obvio ahora que la mera presencia del Doctor Vogel fue

87
suficiente para sensibilizar las placas, aunque él no las
tocó ni hizo ningún esfuerzo consciente para cargarlas. De
modo que ahora la cámara está de nuevo en un rincón
esperando que aparezca un operador capaz de cargar y
sensibilizar las placas lo suficiente como para obtener
fotos.
En mi colección de fotografías radiónicas hay una
original. Detrás está escrito: ...Fotografía radiestésica de
una fístula rectal, tomada por Miss E. Maxwell-Moore y
Mrs. E. Shippard en la cámara diseñada y construida por
ellos en 1956. Acompañando la fotografía está la siguiente
descripción.
Explicación de esta fotografía radiónica:

«Este paciente era un hombre mayor que había sido


operado de hemorroides algunos años atrás. Se quejaba
a su cirujano de gran dolor y pensaba que era una recu-
rrencia de la condición original. El cirujano le informó
que no había nada mal excepto una magulladura debida
a que montaba a caballo. Un practicante de radiónica
analizó la condición como un fístula rectal. El análisis se
confirmó con esta fotografía. El músculo rectal podía
verse claramente en la fotografía. La fístula podía apre-
ciarse como una pequeña bola blanca y las radiaciones
que emitía indicaban que estaba causando inflamación.
La bola de aparente luz que se ve rodeando la condición
es, en realidad, una fotografía de la fuerza radiestésica
atacando la parte enferma para efectuar una cura. Es
interesante notar que también se puede ver claramente
la hebilla del cinturón del paciente. El paciente estaba
a unos 200 Km. de la cámara cuando se tomó la fotogra-
fía. El paciente se recuperó por completo rápidamente.
El aparato consiste en una buena cámara empotrada en
un aparato que ideó el practicante y la fotografía se
tomó en película Kodak. Para el revelado y positivado la
película se envió a una firma fotográfica de Hastings por
correo y fueron devueltas después del procesado. La
cámara funcionó igual para otro practicante, que trajo la
película, cargó la cámara, tomó sus propias fotografías
y las reveló con una firma comercial. La cámara fue
desmantelada cuando se descubrió que ya no tenía
ningún valor práctico».

88
He dado la descripción completa porque realmente
es un trozo de la historia de la radiónica que habría
pasado desapercibido si no hubiera caído en mis manos la
fotografía. Aunque la fotografía no es demasiado clara,
coincide exactamente con la descripción dada; la parte baja
de las nalgas puede verse detrás de los muslos. Suspendi-
da en el glúteo izquierdo está la bola de luz, que rodea una
luz más brillante y alargada. Sobre esta, a la izquierda,
está la hebilla del cinturón. El tono casual de la descrip-
ción que dan esas dos intrépidas damas, que obtuvieron
fotografías radiónicas de lo que debe haber sido un equipo
sencillo y barato, me sorprende. Lo que me desconcierta es
porqué no le veían valor práctico y me duele pensar que lo
desmontaran. Quién sabe lo que podía haber resultado de
este esfuerzo si se hubiera estudiado en profundidad.
Hoy en día, con los grandes pasos que se han dado
en la fotografía del campo de energía, de la que fue pionero
Kirlians en Rusia, muchas personas se están viendo
obligadas a reconocer la evidencia de que el aura o descar-
ga de la corona, como a veces se la llama, existe. Obvia-
mente, el aura tal como la ven los clarividentes todavía no
ha sido fotografíada con estas nuevas técnicas, pero los
primeros pasos ya se han dado y sólo es cuestión de tiempo
que se consiga. Dónde encajará la fotografía radiónica en
esta exploración de las dimensiones bio-psíquicas del
hombre, aún está por ver. Hay muchos imponderables que
necesitan ser aclarados, no es el menor de ellos el proble-
ma de conseguir reacciones consistentes entre el operador,
la película y la cámara radiónica. Por el momento, los
resultados inconsistentes han sido fuente de algún desa-
liento y tampoco hay duda de que la ciencia puede volver
su espalda a doce mil fotografías notables y desestimarlas
como fraudulentas porque no encajan en la estrecha
estructura del conocimiento científico de nuestros días.
Con el tiempo, con el dinero, con un programa de
investigación debidamente estructurado y un grupo de
personas que tengan la capacidad de sensibilizar la
película y que puedan trabajar combinando bases esotéri-
cas y científicas, creo que la fotografía radiónica como

89
herramienta para explorar los campos de éter y, como un
explorador scanner diagnóstico del aura humana, se hará
notar. Sus posibilidades y alcance son virtualmente
ilimitados. Seguramente, un programa de esas caracterís-
ticas se materializará un día y veremos nuevas fotografías
que ni siquiera la ciencia podrá ignorar.

90
FOTOGRAFIAS RADIONICAS
LAMINA UNO

LA REGIÓN DEL PLEXO SACRO

La fotografía representa una sección vertical de la zona


baja abdominal. La masa curvada oscura en la esquina
inferior izquierda es una sección transversal del sacro.
Sobre éste, se ven los cuerpos vertebrales lumbares. Las
tres vías oscuras que emergen de esta zona y convergen en
la parte superior derecha son las venas en estado de
diapédesio. La infección del coco de la meningitis sobre la
que se ha sintonizado la cámara de Radio-Visión aparece
como miríadas de puntitos blancos que pueden verse
claramente frente a las vértebras lumbares y por otras
zonas de la fotografía. La estructura del músculo glúteo
aparece como la zona arremolinada frente al sacro.
La infección se detectó primero con el instrumento
de diagnóstico radiónico de Drown. Entonces se sintonizó
la cámara con la infección, usando la frecuencia estableci-
da por el procedimiento de diagnóstico. El paciente se
encontraba a más de una milla de distancia de la cámara
cuando se tomó la fotografía.

. Laboratorios Drown
Departamento de Radio-Visión.
LAMINA DOS

QUISTE HIDATICO EN HIGADO

Sección transversal del hígado del paciente, foto realizada


de una gota de sangre. Diagnóstico radiónico del Doctor
Drow que registró un quiste Hidático en el hígado. La
cámara de Radio-Visión fue sintonizada hacia el quiste que
aparece como la zona oscura a mitad de camino en el borde
derecho de la fotografía. Los numerosos discos blancos son
secciones transversales de los conductos biliares y de los
vasos sanguíneos.
La estructura del tejido en la fotografía podría ser
comparado con la fotografía mostrada en la LAMINA
TRES, también una fotografía del hígado.

Laboratorios Drown
Departamento de Radio-Visión
LAMINA TRES

CÁNCER DE HÍGADO

Esta sección de hígado muestra cráteres cancerosos a lo


largo de la cadena oscura que recorre desde el área
superior izquierda de la foto, hasta medio camino hacia
abajo a la derecha. Los cráteres aparecen como masas
luminosas en esta cadena.
Lo que aparece realizando un cráter vertical con
un punto de luz en parte más baja, es en realidad donde
la aguja de la biopsia fue insertada en el hígado para
recoger una muestra con propósito diagnóstico en un
laboratorio médico, la estructura del tejido es similar al de
la lámina anterior.
La fotografía fue tomada en Hollywood, California,
de una gota de sangre de un paciente en Indiana.

Laboratorios Drown
Departamento de Radio-Visión
LAMINA CUATRO

FOTOGRAFIA POST QUIRÚRGICA— ABDOMEN

La línea de la incisión quirúrgica recorre desde el centro,


abajo de la fotografía y ascendiendo hasta el rincón
superior derecho. Los efectos blanquecinos a lo largo de la
línea de incisión son por la inflamación.
Las áreas rectangulares oscuras, claramente
definidas, recorriendo a la izquierda de la incisión son
vasos sanguíneos cortados durante la operación.

Laboratorios Drown
Departamento Radio-Visión
LAMINA CINCO

INSTRUMENTOS QUIRÚRGICOS FOTOGRAFIADOS


A 6000 MILLAS DE DISTANCIA

El paciente un amigo inglés del Doctor Drown le escribió


en 1950, pues iba a ser sometido a una operación de
absceso ischio-rectal. Le pidió al Doctor Drown de tomar
un fotografía de Radio-Visión antes de la operación, al día
siguiente de la recepción del Doctor Drown de su carta.
A la 1 a.m. la siguiente mañana, el Doctor Drown
sintonizó la cámara hacía el absceso del hombre y las
fotografías resultaron. El contorno de dos instrumentos
quirúrgicos aparecen dos tercios hacia arriba en la parte
izquierda de la foto. Sobre el área más oscura están los
retractores y debajo de ellos un par de tijeras, la pinza
sujetando las tijeras está claramente visible en la región
cercana al absceso.
Posterior comparación en el tiempo mostró que el
paciente estaba actualmente bajo cirugía cuando la
fotografía se empezó a tomar.

Laboratorios Drown
Departamento Radio-Visión
LAMINA SEIS

LA GLÁNDULA PINEAL

Esta Fotografía radiónica por el Doctor Drown en la mitad


de los años 1930, de una gota de sangre de un paciente,
muestra la glándula pineal. Aparece arriba en la sección
izquierda de la fotografía como una masa blanca rodeada
de una no muy clara aura oscura. La glándula según el
Doctor Drown está vertical debido a que la fotografía fue
tomada dos semanas antes de la muerte del individuo en
cuestión. Esta posición, relató, ocurre en los bebes recién
nacidos y muy poco antes de la muerte.
A parte de la glándula pineal, la fotografía mues-
tra "la luz" en la mente de la que se habla frecuentemente
en la meditación, cuando aparece ilumina repentinamente
a través de los ventrículos de la mente. Antiguos escritores
han dicho "en el Tálamo y la glándula pineal todas las
cosas son comprendidas".
La lámina cuadrigémina y el corte transversal del
tercer y cuarto ventrículo aparecen en la fotografía.

Laboratorios Drown
Departamento Radio-Visión
La fotografía radiónica más remarcable tomada en los
laboratorios De la Warr con la cámara sintonizada a los
tres meses de embarazo. El feto está claramente visible,
sin embargo el donante de la gota de sangre de quien la
foto fue tomada se hallaba a cincuenta y cuatro millas del
laboratorio cuando la foto tomada.
Tuberculosis de los pul-
mones. Es interesante
notar que el paciente solo
tenía un pulmón cuando
la fotografía radiónica fue
tomada, sin embargo se
muestran dos pulmones
en la imagen. Esto es
quizás que aunque la
Futura evidencia que
estos sean los pulmones
etéricos que se hallan
filmado.

Fotografía radiónica de
un tumor maligno en el
cerebro.

Cortesía de Miss Baerlein y


Mrs. L. Dowwer.
Fotografía radiónica de
endocarditis.

Congestión de intestino
grueso.

Cortesía de Miss Baerlein y


Mrs. L. Dowwer.
Fotografía radiónica de fístula rectal.
Fotografia radiónica de De la Warr del modelo de energía
eterea de Honeysuckle Remedy del Dr. Bach.
Capítulo Cinco

POTENCIACION RADIONICA
REMEDIOS DESDE
EL CAMPO DE ETER
«Esta es la característica de nuestra medicina a la que
se ha reducido el cuerpo anterior de los espíritus; que,
primero, una de sus partes teñirá diez partes de este
cuerpo perfecto, después cien, luego mil y así hasta el
infinito... de esta manera, cuanto más a menudo se
disuelva la medicina, más acrecentará su virtud».
Hermes Trismigestus.

La idea de que puede ser posible utilizar los


campos de energía en los que vivimos para impregnar o
cargar una sustancia portadora con fuerzas curativas ha
ocupado la imaginación de muchas personas. Si como
sugiere Ruth Drown las vibraciones de todas las cosas del
mundo están presentes en cualquier lugar y que nosotros
sólo tenemos que tomar esas vibraciones del campo vital
para aplicarlas en la curación, entonces es más que una
simple posibilidad que podamos obtener remedios de las
fuerzas formativas y cargarles en una sustancia portadora
para después suministrarlos a los pacientes.
Edwin Babbitt, que ganó fama mundial por sus
teorías y curaciones mediante los colores a finales del siglo
XIX, descubrió que era posible cargar agua o lactosa
granulada con las propiedades químicas curativas del
dolor. Su técnica consistía en utilizar una lente cromática,
que era un recipiente plano parecido a un matraz. Normal-
mente se hacía pasar luz a través de ellos para tratar al
paciente directamente con el color que tuviera la lente.
Para cargar agua o lactosa de azul, por ejemplo, utilizaba
una lente azul, la llenaba con la sustancia portador y la
colgaba en una ventana o la exponía a la luz del sol. Según

109
él, esto cargaba la sustancia con una cantidad inmensa de
poder medicinal; suficiente, de hecho, para formar muchas
dosis de una vez.
En su libro The Principles of Light and Color,
Babbitt hacía mención de una sustancia llamada azúcar-
Od, que había sido concebida por el Doctor von Gerhardt
de Alemania, que había tenido un éxito notable como
agente curativo. El azúcar-Od o azúcar Odo-magnético,
como a veces se le llamaba, tomaba su nombre aparente-
mente de la fuerza ódica de Reichenbach. Consistía en
lactosa que había sido cargada con ciertos rayos de sol a
través de un prisma. Babbitt, no muy contento con la
nomenclatura de estos azúcares cargados, los cambió de
"azúcar odo-magnético positivo" y "azúcar odo-magnético
negativo" a "termo-azúcar-od" y "electro-azúcar-od" respec-
tivamente. Parece que los términos positivo y negativo que
se referían a los extremos caliente y frío del espectro de la
luz solar ofendían bastante su sensibilidad.
Evidentemente Edwin Babbitt y el Doctor von Ger-
hardt fueron capaces de impregnar portadores neutrales
con energías curativas; Babbitt mismo reivindica numero-
sas curaciones obtenidas por el tratamiento con esas
medicinas. Es interesante notar que esas medicinas
absorbían el poder curativo por la acción de la luz solar y
el calor. Ambos doctores hablan de la fuerza ódica, una
energía común a todas las cosas y que tiene una relación
especial con las fuerzas que fluyen del sol, a las que los
Vedas se refieren como prana; Wilhelm Reich lo llamaría
orgona, la energía que llena el espacio y vitaliza todas las
formas.
El color y las energías curativas sostenedoras de la
vida del sol se mencionan en el Chhandogya-Upanishad.

«Naranja, azul, amarillo, rojo no son menos en las arte-


rias del hombre que en el sol.
Así como un camino largo atraviesa dos pueblos, uno a
cada extremo, así los rayos del sol atraviesan este
mundo y el mundo (sutil) más allá. Ellos fluyen del sol,
penetran en las arterias, fluyen fuera de las arterias,
penetran en el sol».

110
Aunque utiliza un lenguaje poético, la esencia de
lo que expresa merece nuestra atención y, para el caso, la
atención de todo aquel relacionado con la curación. Aquí
los sabios indios dicen que el espectro de colores o energías
curativas y dadoras de vida se encuentra en el sol y en el
hombre y que hay una corriente continua de esa energía
primaria que fluye del sol a las formas físicas, al nadis o
sistema nervioso etérico del hombre, y de nuevo de vuelta
al sol. En el extracto que he citado, el término arteria
utilizado se refiere al nadis o red etérica que subyace a la
forma humana, no a las arterias del sistema circulatorio
que conocemos. Seguramente no es demasiado ingenuo
pensar que el hombre utilice estas energías que la natura-
leza ha puesto a su disposición tan discretamente.
El Doctor A.K. Bhattacharyya de la India, que
tiene un gran dispensario de tele-terapia en Bengala
Oeste, utiliza dos métodos para transferir energías curati-
vas a las sustancias portadoras. En la India se utilizan
piedras preciosas y semi-preciosas; una forma de preparar-
las es tomar una gema, por ejemplo un rubí o una esme-
ralda, colocarla en una botella que contiene una solución
de alcohol y dejar la botella en un recipiente oscuro por
espacio de un mes. Al final de ese período, la solución está
impregnada de las radiaciones emitidas por las gemas;
entonces se preparan medicinas a partir de la solución.
Otra técnica que se utiliza en la clínica es cargar píldoras
de lactosa metiéndolas en un recipiente y exponiéndolas a
las radiaciones emitidas por gemas que vibran en el cono
de un altavoz o que giran sobre discos conectados a
pequeños motores eléctricos. A juzgar por los resultados
obtenidos con el uso de medicinas preparadas de esta
forma, es evidente que ocurre una transferencia de
energías y que esa energía puede ser asimilada por el
cuerpo del paciente para eliminar la enfermedad.
En Inglaterra los Remedios de Flores de Bach se
preparan de forma que se transfieren las cualidades
curativas vibratorias de las flores a una sustancia portador
líquida, en este caso agua pura. Hay dos métodos para
preparar estos remedios. Uno es el método solar que se

111
utiliza con las flores que florecen tarde en la primavera o
en verano, cuando el poder de las radiaciones solares
golpea la tierra con plena intensidad. Después está el
método de ebullición para el que se usan flores y ramitas
de los árboles, plantas y arbustos que florecen temprano
en el año.
Para preparar remedios con el método solar, las
flores se cogen sobre las 9 a.m. cuando las flores están
abiertas. Se colocan entonces en recipientes de cristal
llenos de agua de torrente que se sitúan cerca de las
plantas de las que provienen las flores. Las flores flotan
libremente en la superficie del agua, que debe estar
cubierto con ellas. Ninguna sombra debe pasar sobre las
flores flotantes ni debe tocarse el agua con las manos. Las
flores se dejan de esta manera al sol por tres horas. Al
final de este período, el agua está completamente impreg-
nada de las propiedades curativas de las flores. El agua
vitalizada se mete en botellas y se añade un poco de
brandy para conservar el remedio.
Para preparar remedios con el método de ebulli-
ción las flores y ramitas se recogen de la misma forma que
para el método solar, se colocan en una cacerola y se
hierven a fuego bajo por media hora. El líquido resultante
se filtra y embotella con una medida de brandy. Es obvio
que hervir la planta sirve para extraer aquellos factores
que actúan como agentes curativos; esta es una técnica
que se ha usado durante miles de años, aunque es de una
naturaleza más mecánica que el método solar de flotación,
en el que los sutiles intercambios de energía suceden de
forma natural.
En ambos casos este estadio de la preparación se
llama la Esencia. De esta Esencia se preparan botellas de
Stock (para uso) llenando una botella con una capacidad
de una onza con brandy y añadiendo dos gotas de Esencia.
Las frecuencias curativas se retienen indefinidamente en
la preparación Stock. Para preparar un remedio para el
paciente, se colocan dos gotas de la botella Stock en una
onza de agua fría a la que se añade una cucharadita de
brandy para mantener el agua clara. El remedio puede

112
usarse ahora internamente, como loción o puede ponerse
una cucharadita para usarlo en un baño. De cualquier
manera que se usen, las cualidades curativas, aunque
altamente diluidas, conservan todavía el poder para
restablecer el equilibro de las campos de fuerza humanos,
particularmente aquellos de los niveles astrales y menta-
les.
Hay otro preparado bastante inusual que utiliza
las fuerzas curativas que se encuentran en las plantas.
Esta proviene de Nairn, en Escocia, y se llama Exultación
de las Flores. Esta preparación la hace Mr. Alick McInnes,
que lo describe como "Impulsos eléctricos en suspensión
estable, obtenidos por la potenciación de las siguientes
flores con un método completamente nuevo y en armonía
con las radiaciones cósmicas". No daré la lista de las flores
utilizadas porque hay unas cincuenta y dos de ellas.
Cuando Mr. McInnes habla de potenciación no usa
el término en el sentido homeopático sino que lo utiliza
para referirse al poder o fuerza que irradian las flores.
Después de muchos trabajos experimentales, Mr. McInnes
ha descubierto que puede transferir el poder curativo de
cada planta al agua sin causar daño alguno a la planta.
Cada flor, dice, emite longitudes de onda o radiaciones que
pueden ser identificadas por cualquiera lo suficientemente
sensible como para registrar su impacto. Algunas flores
emiten radiaciones circulares, otras van de izquierda a
derecha, o de arriba a bajo o viceversa, algunas fluyen en
diagonal, algunas son frías y otras calientes.
Estas radiaciones pueden transferirse al agua
cuando están a plena potencia, la cual varía según la
planta, y bajo las condiciones adecuadas esta transferencia
es instantánea y se afirma que, de hecho, puede verse
como cambia el agua utilizada. A primera vista esta
técnica puede parecer un poco rara. He aquí a Mr. McIn-
nes, recipiente de agua en mano, moviéndolo rítmicamente
delante de las flores cuyas radiaciones curativas quiere
captar. Dice que es posible sentir en el cuerpo de uno la
sensación de la energía trasfiriéndose al agua, en la que se
conservará indefinidamente.

113
Hace un año me hubiera mostrado un poco
escéptico con respecto a sus afirmaciones pero, desde que
trabajo con el Doctor Marcel Vogel en experimentos sobre
comunicación hombre-planta, yo mismo he experimentado
este tipo de fenómenos. La planta en este caso era el
filodendro de hoja hendida. Para entrar en resonancia con
la planta para llevar a cabo la experimentación, es necesa-
rio pasar por el proceso conocido como "cargo de la planta".
Esto se hace moviendo la mano extendida sobre la hoja a
una distancia de unos pocos centímetros con un movimien-
to circular. Entonces se mueve la mano arriba y abajo
sobre la hoja hasta que se registra la energía de su campo
de fuerza. Es una sensación como de energía o fuerza que
atrae, que cuando es muy fuerte puede producir dolor en
los dedos. He visto a Marcel Vogel hacer esto con una
planta de Diffenbachia con su mano a unos treinta cm. de
distancia de la hoja, moviéndola suavemente al ritmo que
ha captado del campo de fuerza de la planta, hasta que
cada hoja se movía arriba y abajo y parecía que la planta
estuviera a punto de echarse a volar. Si yo pasaba mi
mano por el espacio entre su mano y la hoja, algo como
una sacudida eléctrica corría por las puntas de mis dedos.
Después de experiencias como esta estoy preparado para
creer que Mr. McInnes ha descubierto algo. El dice que si
más personas se tomaran el tiempo de probar y sintonizar
esas radiaciones que emiten las plantas, ellos también las
experimentarían y estoy seguro de que tiene razón.
Muchos de nosotros somos muy rápidos desestimando
cosas como esta, sin habernos tomado ni siquiera el tiempo
para comprobar la teoría.
Sólo ciertas combinaciones de radiaciones de las
flores pueden ser usadas en la Exultación de las Flores, ya
que se ha comprobado que algunas radiaciones anulan a
otras, otras alteran el tiempo de la mezcla y, además, hay
que usar exactamente la misma cantidad de cada una para
crear un equilibro armonioso.
Lo que Mr. Mcinnes dice que se esfuerza por
lograr es la "calma chicha en el centro", la calma poderosa
en el ojo del huracán. Esta fuerza es análoga a las ener-

114
gías que se hallan en la Exultacion de las Flores, que
establecen en el paciente un centro de calma que permite
a la naturaleza restaurar la salud.
En la cubierta del folleto de presentación titulado
"Exultación de las Flores", hay una fotografía en color de
un Tallo Floreciente que, habiendo sido tratado con el
preparado de flores, estaba en flor desde julio. La fotogra-
fía se tomó el día de Navidad y la planta está en plena
floración, y eso allá en Escocia. Son claramente visibles en
la fotografía, como señala Mr. McInnes, lo que parecen ser
rayos ultravioletas y otras coloraciones azuladas en las
rocas. Wilhem Reich dijo en sus escritos que esa coloración
en las fotografías era la energía orgónica y lo ilustró con
dos fotografías, una de un tubo vacío llenado de orgona en
el laboratorio, la otra de un revolcadero de osos. Ambas
tenían las tonalidades azuladas que podían apreciarse en
la fotografía del tallo. Creo que hay una estrecha conexión
entre la orgona o energías pránicas del sol y estas mezclas
potenciadas de flores.
Muchas personas han pedido a Mr. McInnes que
prepare flores individuales para ciertas enfermedades,
pero él ha declinado la petición sobre la base de que es
más provechoso trabajar desde el concepto de que todas las
enfermedades tienen una causa común y de que luchando
para conseguir un preparado que elimine esa causa el
resultado final será infinitamente más remunerador. La
Exultación de las Flores no es, por lo tanto, un específico
para el tratamiento de cualquier enfermedad diagnostica-
ble sino que aspira a equilibrar las fuerzas vitales de la
forma humana de tal manera que éstas desvíen la enfer-
medad presente. Por supuesto, no puede haber efectos
secundarios por el uso de este preparado.
La Exultación de las Flores se ha estado utilizando
durante más de dieciséis años y es igualmente efectivo en
el tratamiento de humanos, plantas o ganado. Su equilibro
y su poder para reajustar necesidades individuales, dice
Mr. McInnes es delicado, preciso e infalible. Su acción es
enteramente beneficiosa y, con el tiempo, elimina síntomas
que habían estado arraigados por largo tiempo.

115
Volviendo a principios de este siglo, apareció un
libro titulado Psychology of Botany-Minerals and Precious
Stones. Fue escrito por un famoso clarividente y astrólogo
que se llamaba a sí mismo Charubel. El afirmaba en su
libro que los árboles, plantas, musgos, piedras preciosas y
semi-preciosas y metales tenían todos propiedades curati-
vas que podían utilizarse sin necesidad de coger la planta,
piedra o metal y hacer un preparado de ellos.
La técnica consistía simplemente en pararse cerca
del árbol o planta, conectar manualmente con él y tomar
las energías curativas presentes. Estas energías podían
utilizarse en beneficio propio o podían dirigirse mental-
mente al paciente. Esta corriente de energías podía ser
vista a través de la clarividencia por Charubel, que la
describe en su libro, desgraciadamente fuera de imprenta
hoy en día. Obviamente este método tenía sus inconve-
nientes, entre ellos, el encontrar la planta, piedra o metal
y los caprichos de un tiempo inclemente. Estoy seguro de
que a pocos sanadores les gustaría estar en el bosque en
un día lluvioso trasmitiendo energías curativas a sus
pacientes. Charubel preveyó el problema y, a fuerza de
experimentar, descubrió que a través de una visualización
mental clara de un diseño geométrico y el uso de un man-
tra podía obtener la energía curativa de la planta repre-
sentada por aquel diseño y entonces dirigirla al paciente.
Pronto veremos como la potenciación radiónica moderna
utiliza el concepto de que un diseño o frecuencia pueden
representar la fuerza curativa de cualquier planta o
sustancia que se sepan tienen propiedades curativas y que
esas fuerzas curativas pueden ser impregnadas en una
sustancia portadora a través de la radiónica.
Parece que la Doctora Ruth Drown consta como la
primera practicante radiónica que preparó remedios
homeopáticos por métodos radiónicos. En los remedios
homeopáticos a una potencia superior a 12c, ya no queda
una cantidad de la sustancia original que se pueda medir,
probablemente ni siquiera un átomo. Se hace referencia a
la dilución en este punto como un ultra-Avogrado y es
energía pura liberada por la sustancia que ha estado bajo

116
preparación. Ella razonaba que, si el remedio homeopático
era en esencia una forma de energía curativa pura,
entonces ella, podría obtener aquella frecuencia de energía
de los éteres y usarla después para impregnar píldoras de
lactosa.
En su libro de instrucciones para el uso del instru-
mento radiónico "Drown Homo Vibra Ray" ella define el
siguiente método para la preparación del remedio:
METODO PARA PREPARAR REMEDIOS ESPECIFICOS
USANDO PILDORAS DE LACTOSA.
Se sugiere que el operador tome cualquier potencia
que deseé de la formación homeopática, que no contenga
alcohol si es posible, y también que se procure algunas
píldoras de lactosa seca. En el recipiente de la muestra del
instrumento coloque un frasco del remedio que se va a
usar para potenciar las píldoras de lactosa. Lleve los diales
al punto cero. Empiece con cero en el dial principal
subiendo hacia arriba hasta que se obtenga una reacción
en el detector. Proceda con el segundo dial de igual modo,
luego con el tercero y así sucesivamente hasta que se haya
hecho lo mismo con todos los diales del instrumento. Anote
la proporción en un libro seguida del remedio y consérvela
para uso futuro. Ahora coloque en la plataforma una
pequeña pieza de estaño en bloque, del tipo que se usa en
los electrodos de tratamiento, doblada en la forma de un
recipiente. En este recipiente coloque las píldoras de
lactosa y sujételas a la plataforma con la cuerda de trata-
miento. Deje el instrumento fijo en la frecuencia del
remedio y potencie hasta que las píldoras de lactosa
registren un "golpe" (reacción del detector) cuando se
saque el remedio del recipiente de la muestra.
El paciente tomará las píldoras radio-potenciadas,
seis de las pequeñas o tres de las grandes, cada dos horas
el primer día, cada cuatro horas el segundo día y así hasta
que se llegue a un intervalo de doce horas entre cada
dosis. Entonces cambie la potencia de las píldoras al grado
superior siguiente y así sucesivamente hasta que se
elimine la condición. Puede que algunas personas tengan
una carencia de ciertas vibraciones salinas en las células

117
que puede suplirse de esta manera, acelerando de este
modo la curación.
Así el concepto de que los remedios homeopáticos
pueden ser literalmente manufacturados tomando sus
frecuencias de energía de los éteres se realizó en la
práctica.
Las proporciones de Drown para las doce sales de
los tejidos son las que siguen y, por supuesto, pueden
utilizarse en cualquier instrumento radiónico que utilice
proporciones de cero a diez en los diales.

Flúor. Calc. 0-3-8-8. Sulf. Pot. 0-3-1-8


Fosf. Calc. 0-5-5-4 Fosf. Magn. 0-4-3-8
Sulf. Calc. 0-7-7-3 Nit. Mur. 0-2-8-2
Fosf. Ferr. 0-4-3-6 Fosf. Nit. 0-3-5-6
Fosf. Mur. 0-3-2-7 Sulf. Nit. 0-4-7-6
Fosf. Pot. 0-5-2-8 Sílice. 0-3-6-3

En los primeros años 50, los laboratorios De la


Warr, siguiendo la línea de las investigaciones de Abrams
y Drown, llevaron a cabo, a parte de los trabajos de diseño
de nuevos instrumentos y del desarrollo de nuevos procedi-
mientos de diagnóstico y tratamiento, algunos trabajos
experimentales en métodos de potenciación radiónica.
Plantas que fueron plantadas en sustancias inertes pero
eran regadas con líquido que había sido potenciado con las
frecuencias de varios fertilizantes, crecieron como si sus
raíces estuvieran enterradas en una buena porción de
tierra fértil. Se alimentó a ratones con una dieta carente
de vitamina C. Se formaron dos grupos. A uno de los
grupos se le dió agua que había sido radiónicamente po-
tenciada con la frecuencia de la vitamina C y a los otros se
les dió agua corriente. No es necesario decir que el grupo
que bebió agua potenciada no desarrolló escorbuto y
aquellos que no bebieron ésta, sino agua corriente contra-

118
jeron la enfermedad. También se experimentó en la
preparación radiónica de remedios homeopáticos, que se
probaron significativamente eficaces.
Hoy en día los Laboratorios De la Warr fabrican
un instrumento de diagnóstico radiónico electrificado que
se ha diseñado también para la potenciación. Este instru-
mento tiene doce diales y un detector manual y está
dotado de un oscilador que cubre una gama de frecuencias
que va de 9 Hz. a 1,1 m. Hz. El oscilador está transis-
torizado y se alimenta de una batería empotrada en su
interior, de modo que la unidad es portátil y no depende
de conexiones eléctricas exteriores. El modelo que se usa
para la potenciación está ligeramente modificado, tiene un
módulo de ampliación que acciona bobinas electro-magnéti-
cas, las cuales rodean los depósitos para las muestras del
instrumento. Para crear una potencia de un remedio
homeopático, por ejemplo, se coloca en uno de los depósitos
la tintura madre del remedio que se necesite, se coloca en
los diales la proporción que representa a la sustancia y la
frecuencia de la sustancia, determinada radiónicamente,
se dispone en el oscilador. Se colocan píldoras de lactosa,
agua o una solución de alcohol sin contenido medicinal en
el otro depósito. Se pone en marcha el instrumento y esto
permite al operador exponer cualquier sustancia, citando
la descripción del laboratorio, a débiles campos magnéticos
que no pueden imitarse con otras sustancias y esta
operación origina el fenómeno de potenciación para
producir remedios. En otras palabras, las píldoras sin
medicina se impregnan con una potenciación de la tintura
del otro depósito. Esta transferencia se completa en unos
20 minutos.
Quizá el hombre que ha avanzado más en esta
línea de investigación utilizando el equipo de De la Warr
sea el Doctor Poul Goos, doctor en Filosofía (PhD) de
Radionisk Laboratorium de Dinamarca. Walter Egger, un
ingeniero de microquímica que además es un competente
homeópata, trabaja como su asistente. Ellos creían, como
Drown, que había una afinidad entre la radiónica y la
homeopatía porque ambas se interesan más por el aspecto

119
energético de las cosas, que en el material. Pensaban que
valía la pena experimentar para ver si se podía impregnar
una solución de alcohol con las frecuencias radiónicas. El
Doctor Goos recuerda el primer experimento con estas
palabras.

«Utilizábamos el instrumento Mark VII, fijamos los


diales radiónicos con la frecuencia de "corazón" (5238).
Entonces colocamos una pequeña botella que contenía
alcohol al 60% en el depósito situado entre los magnetos
y lo hicimos girar hasta encontrar la posición crítica.
Mediante el dial medidor, tratamos de ver si se producía
alguna reacción, pero no hubo ninguna. Después de
media hora se produjo, por supuesto, una reacción y,
moviendo el dial medidor lentamente, medimos una
reacción de 5. Habíamos obtenido una reacción de 5
unidades radiónicas (siendo 100 el máximo), que llama-
mos Unidades De la Warr, con el símbolo DLW. Segui-
mos por otra media hora y volvimos a medir pero, esta
vez la emanación detectada fue de 12 DLW. Después de
dos horas nos las arreglamos para obtener una reacción
de 30 DLW y después de esto ya no hubo ninguna reac-
ción superior».

24 horas en el instrumento, recuerda el Doctor


Goos, no alteraron esta lectura. Parece que la solución
había tomado todo lo que podía tomar de aquella frecuen-
cia particular. El Doctor Goos y su asistente efectuaron
muchos más experimentos y descubrieron que impregnan-
do una solución de alcohol con las frecuencias curativas
que necesitaba el paciente, podían administrar gotas de
este líquido por la mañana y por la noche, y que esta
ingestión oral parecía potenciar el tratamiento radiónico a
distancia. Después experimentaron con la polifarmacia,
que consiste en mezclar diferentes remedios, en su caso
frecuencias radiónicas, en una solución. Esto también
funcionó y se descubrió que si esta solución se colocaba en
un recipiente del instrumento de tratamiento radiónico
junto con la gota de sangre del paciente, se liberaba una
serie completa de frecuencias curativas en un tiempo, por
así decirlo.

120
El Doctor Goos ha desarrollado una mezcla líquida
que contiene 222 diferentes frecuencias. El llama a esta
preparación SOMAVITAL y lo usa para tratar a sus
pacientes radiónica y oralmente; por supuesto, él añade a
la mezcla base cualquier frecuencia particular que cada
paciente pueda necesitar. Otros trabajos experimentales
han mostrado que es posible tomar un remedio homeopáti-
co que se haya preparado con métodos estándar en la
farmacia y, mediante el instrumento radiónico, transferir
la frecuencia del remedio a píldoras de lactosa sin conteni-
do medicinal. Este, entonces, tiene la fuerza original de
curar por sí mismo sin mermar las frecuencias de energía
de las píldoras en la farmacia.
Si se podía impregnar una solución de alcohol con
estas frecuencias y usarla con fines curativos, entonces el
camino para la experimentación con remedios homeopáti-
cos estaba abierto. El Doctor Goos recuerda sus primeros
experimentos con estas palabras.

«La siguiente cuestión era esta: ¿Podríamos potenciar


también con las frecuencias que emanan de las diferen-
tes preparaciones homeopáticas? En mi laboratorio
tenemos 172 preparaciones diferentes pero, por supues-
to, no conocíamos las frecuencias radiónicas de cada
“remedio, por ejemplo, los números que habría que poner
en los diferentes diales del instrumento para conseguir
una frecuencia que encajara con la emanación de la
preparación homeopática. Por lo tanto, teníamos que
usar otro método para abordar el problema y lo hicimos
de la siguiente manera:
Supongamos que tenemos un paciente con una colitis
manifiesta clínicamente y que hemos medido la fuerza
radiónica de la enfermedad, que ha resultado ser, ponga-
mos 40 DLW. En nuestros libros homeopáticos encontra-
mos las preparaciones que son activas contra la enfer-
medad y, al tiempo que tenemos una muestra de sangre
del paciente en el depósito del Instrumento de Diag-
nóstico, colocamos una gota de la preparación homeo-
pática en el platillo del remedio y medimos otra vez; es
decir, que la preparación no ha hecho efecto. Entonces
probamos otra, luego una tercera y así sucesivamente;
pongamos que encontramos una o más preparaciones,

121
cada una de las cuales tiene un efecto sobre la enferme-
dad, así que obtenemos reacciones de, por ejemplo, 20
DLW con una, mientras que otra más efectiva dé una
reacción de, digamos, 10 ó 21 DLW.
Si colocamos todas esa preparaciones efectivas juntas en
el platillo del remedio, podemos reducir las reacciones de
colitis hasta un nivel tan bajo como 3 ó 4 DLW, o quizá
incluso a cero. Ahora tratamos de utilizar las prepara-
ciones que hemos obtenido de esta forma para potenciar
una botella de alcohol. Poniendo todos los diales del
instrumento a cero y colocando la botella de alcohol en
el depósito, colocamos también la nueva preparación ho-
meopática en el platillo del remedio y hacemos girar
ambos separadamente hasta que obtengamos una
reacción que indique que han alcanzado su "posición
critica". Pongamos que esto tiene efecto en la enferme-
dad y que ahora queremos utilizarla para potenciar el
alcohol. Dejamos entonces la botella y la preparación en
el instrumento durante dos horas, como es usual, y
entonces comprobamos si las frecuencias homeopáticas
han sido transferidas al alcohol.
Esto fue lo que hicimos y de la siguiente manera:
Colocamos la muestra de sangre del paciente en el
depósito, fijamos los diales para colitis y obtuvimos una
reacción de 40 DLW cuando giramos el dial medidor en
el sentido de las agujas del reloj. Colocamos, entonces,
la botella de alcohol en el platillo del remedio, encontra-
mos la posición crítica y volvimos a medir y obtuvimos
la agradable sorpresa de una reacción de colitis de 20
DLW, consiguiendo así un efecto sobre la enfermedad
exactamente igual al que habíamos obtenido cuando
escogimos las preparaciones. En otras palabras, las
frecuencias que emanaban de la preparación habían sido
transferidas al alcohol. Este fue un resultado notable y
naturalmente seguimos tratando de transferir las
frecuencias de otras preparaciones homeopáticas, que se
habían mostrado efectivas, al alcohol. El resultado final
fue que, con la muestra de sangre del paciente en el
depósito y la botella de alcohol del platillo del remedio,
logramos un efecto sobre la enfermedad de sólo 3 ó 4
DLW, igual a la lectura obtenida cuando colocamos
todas las preparaciones homeopáticas efectivas eri el
platillo del remedio. Concluimos, pues, que era posible

122
transferir la emanación de las preparaciones homeopá-
ticas al alcohol de la pequeña botella, y cada experimen-
to desde entonces, por más de un año, ha mostrado el
mismo resultado».

Más o menos por las mismas fechas en que estos


experimentos de potenciación se estaban realizando en
Dinamarca, uno de los principales investigadores ingleses
en el campo de la radiónica, Malcolm Rae, aplicaba su
cerebro a los problemas de la potenciación radiónica de los
remedios homeopáticos con vistas a simplificar y hacer el
proceso más efectivo.
En lo que concierne a los practicantes de radiónica
y a un número creciente de médicos, se na demostrado
más allá de toda duda que es posible crear remedios
efectivos por métodos radiónicos. El problema era simplifi-
car y refinar las técnicas y el instrumental. Después de un
prodigioso número de horas-hombre gastadas en experi-
mentación, comprobaciones exhaustivas en el campo,
discusiones con médicos y practicantes de radiónica, han
surgido de la mente fértil y práctica de Malcolm Rae las
respuestas para simplificar e incrementar la efectividad de
las técnicas e instrumental para la potenciación radiónica
de los remedios.
Rae sentía que el procedimiento radiónico estándar
para crear remedios homeopáticos presentaba unos
cuantos inconvenientes que debían ser salvados. En primer
lugar, el instrumento mismo es voluminoso, con un tamaño
de quizás 16 por 28 pulgadas cuando está abierto, aunque
algunos equipos son más pequeños. También está siempre
presente el problema del error humano en la indicación en
los diales de las frecuencias que representan el remedio
que se está creando. Además de esto, el factor del tiempo
que se necesita para obtener la máxima impregnación es
otro inconveniente para algunos, así como el hecho de que
no hay forma de determinar inmediatamente cuándo se ha
alcanzado una cierta potencia o fuerza en el proceso de
potenciación.

123
SIMULADOR DE POTENCIA RAE MK l1l.

Mediante la investigación persistente y cuidadosa,


Rae ha superado la lista de inconvenientes citados. En
primer lugar, el Simulador de Potencia Rae Mk TIT es muy
compacto, con unas dimensiones de 3 pulgadas de ancho y
de 2 3/4 pulgadas de profundidad. El único ajuste que
requiere es el que se precise para conseguir la potencia de
remedio necesaria y estos ajustes están claramente
marcados para las siguientes potencias 6c, 12c, 30c, 100c,
200c, M, 10M, 50M, CM, MM y 10MM. Rae ha descubierto
que el control de la potencia puede conseguirse usando un
divisor proporcional en la forma de un radio-potenciómetro
y que las graduaciones, permiten al practicante seleccionar
con precisión la potencia que necesite. Los puntos entre las
graduaciones pueden utilizarse también para crear poten-
cias intermedias.
En vez de establecer una serie de proporciones

124
para representar el remedio requerido, lo cual es de alguna
forma complicado y consume tiempo, Rae utiliza Cartas
Simuladoras. Cada carta tiene una representación geomé-
trica de una sustancia que puede usarse para hacer un
remedio homeopático; de este modo un remedio homeopáti-
co que hubiera sido representado por una proporción con
siete u ocho números con el viejo sistema, ahora se repre-
senta con un diseño o frecuencia precisos sobre una carta.
Estas cartas, que miden alrededor de 2 por 3 pulgadas,
tienen un diseño que consiste en una serie de círculos
concéntricos; hay un punto en el centro y la sustancia del
remedio se representa con una serie de radios parciales
que salen del círculo más interior hacia el punto cardinal.
Un remedio puede tener hasta seis radios parciales y,
como Rae señala que las combinaciones de seis radios
miden 1% de arco exactamente y suman hasta 467, 916,
713, 911, 200, pasará mucho, mucho tiempo antes de que
se reduzca el espacio de representación.

CORALLIUM RUBRUM LYCOPODIUM CLAVATUM

SÍ"

"ARAS

CARTAS SIMULADORAS DE REMEDIO

Las cartas se han diseñado, por supuesto, para


reproducir un sustituto de cualquier remedio preparado de
forma convencional. Para hacerlo, la carta que representa
el remedio que se precisa se inserta en la ranura que hay
en la parte superior del instrumento, señalada como Carta

125
de Remedio. El nombre del remedio siempre puede verse
claramente en el panel de superficie, de nuevo una ventaja
sobre las frecuencias señaladas en un dial. Después se
selecciona la potencia, marcada por las graduaciones,
llevando el indicador a la fuerza requerida. Frente al
selector de potencia está el depósito, que contiene una
camisa de metal fija en la que se introduce un recipiente
de plástico cristalino, que puede sacarse o dejarse dentro
según se quiera. Si uno quiere potenciar píldoras de
lactosa primero tiene que humedecerlas con una solución
de alcohol y entonces colocarlas en el depósito del instru-
mento o en una botella que pueda meterse en el depósito.
Toma seis minutos energizar las píldoras; si se introduce
en el depósito una botella con una solución de alcohol, el
tiempo para potenciar ese líquido es de un minuto,
bastante diferente de las dos horas que necesitaban los
experimentadores anteriores.
El Simulador de Potencia Rae energiza e impregna
la sustancia portadora, sea ésta lactosa, solución de alcohol
o agua, a través de la introducción del diseño, que es
energizado magnéticamente dentro del instrumento. Si se
retira el diseño, la sustancia del depósito se neutraliza
inmediatamente.
En un artículo aparecido en el Radionic Quarterly
(Trimestral de Radiónica) de marzo de 1973, Rae enumera-
ba las ventajas de la simulación de potencia de la siguien-
te forma:

1. Consistencia de los remedios: Todos los remedios


obtenidos a partir de una carta dada poseerán las
mismas características.
2. Pureza de los remedios: El diseño geométrico de la carta
de remedio se dibuja para representar el remedio
en perfecto estado; no puede resultar contaminado,
durante el proceso de fabricación, con sustancias
que se desprendan del material con el que se ha
construido el aparato, y su "perfecto estado"
excluirá, en el caso de remedios vegetales, todas
las variaciones que pudieran resultar de las

126
diferencias de suelo y otras condiciones de creci-
miento.
3. Velocidad: No toma más tiempo preparar un remedio de
potencia MM que preparar uno de 30c. En los dos
casos se necesita un minuto si es agua el medio
potenciado y seis minutos si se utiliza lactosa.
Esto presenta ventajas especiales cuando se
precisa una gran potencia de una sustancia que no
ha sido previamente preparada.
4, Economía: Si cualquier remedio puede prepararse en
cuestión de minutos, no hay ninguna razón para
que el practicante cargue con un surtido de reme-
dios grande y abarcador que supone un capital
considerable inmovilizado.
5. Versatilidad: Si una sustancia posee definición exacta,
se puede preparar una carta de la que se fabrica-
rán los remedios, sin importar si la sustancia
misma está disponible en la farmacia o no, o si
ésta no ha sido aislada nunca. Por ejemplo, se
pueden hacer potencias que representen gases y
otras sustancias que no son sensibles al método de
Succussion, aumentando así, en gran medida, la
gama de remedios.

Muchos homeópatas cargan con un surtido de


remedios, y este surtido tiende a crecer con los años al
necesitarse varias potencias de cada remedio y no ser
utilizadas todas. Hay, por supuesto, una inevitable acumu-
lación de remedios, algunos pueden agotarse y deben ser
repuestos en la farmacia, pero siempre hay una acumula-
ción creciente de remedios en aquellas potencias que no
son de uso frecuente. Este surtido representa una conside-
rable inversión de dinero que permanece, por así decirlo,
inmovilizado, mientras el remedio continue en reserva.
El último desarrollo de Rae, llamado acertada-
mente Preparador de Potencia, aplicará directamente,
según creo, a aquellos practicantes que cargan con un
surtido de remedios. '
Este instrumento es un poco más grande que el

127
Simulador de Potentia pero todavía muy compacto y fácil
de llevar. Parece similar pero la carcasa está hecha de
madera y tiene dos depósitos separados por un dial
graduado para seleccionar la potencia. Todo el aparato ha
sido energizado magnéticamente y funciona de la siguiente
manera.
El Preparador de Potencia no utiliza cartas como
el simulador, pero prepara en unos minutos cualquier
potencia deseada de cualquier muestra de materia o de
cualquier otra potencia de sustancia. La potencia del
remedio que se necesita se indica en el dial graduado, se
colocan en un depósito las píldoras de lactosa sin medicina,
el agua o la solución de alcohol y en el otro se coloca la
sustancia o remedio del que se necesita la potencia. Esto
permite preparar potencias de:

1. Sangre, orina, saliva, etc., del paciente para utilizar en


auto-terapia.
2. Muestras de drogas alopáticas cuando es aconsejable
tratar al paciente para reducir los efectos secunda-
rios.
3. Alérgenos individuales, como el pelo de un animal
determinado.
4. Gemas, minerales, colores.
5. Cualquier remedio homeopático o de hierbas.

Una vez que se ha conseguido la potencia de la


sustancia original, se puede obtener cualquier otra poten-
cia, más alta o más baja, de ella. Por tanto, puede usarse,
como se ha dicho antes, para preparar diferentes potencias
de remedios que ya están en existencia. También es una
ventaja que se pueda preparar una sola potencia a partir
de un grupo de remedios. Esas potencias deben tenerse
como sustancias cargadas de información o portadoras de
mensajes que recuerdan al cuerpo del paciente lo que
necesita para armonizarse él mismo.
De acuerdo con Rae, cuando se coloca cualquier
sustancia en el depósito del instrumento, su campo de
energía aumenta hasta la "potencia máxima". Cuando

128
alcanza este punto de energía, como si fuera agua, y
empieza a buscar su propio nivel a través del divisor pro-
porcional o el dial graduado de potencia. En otras pala-
bras, se produce una corriente de energía de la sustancia
entre el depósito que contiene "la potencia máxima" del
campo de energía y las píldoras sin medicina del otro
depósito. Esta corriente se controla, por supuesto, a través
del divisor proporcional que se gradua a la potencia
deseada; de esta manera las energías curativas de cual-
quier sustancia pueden transferirse a un material porta-
dor, para usarse finalmente con fines terapéuticos.

ZO
Ús >

PREPARADOR DE POTENCIA RAE.

Hay algunas ventajas muy marcadas de este


método de preparación de potencia. En primer lugar,

129
cualquier médico que utilice auto-terapia en su ejercicio
podrá preparar remedios en una fracción del tiempo y con
una fracción del esfuerzo que utilizaría con un método
estándar. También está la ventaja de que cualquier
sustancia puede prepararse de esta manera, rápida y
sencillamente, sin necesidad de mantener una reserva
grande de remedios de diferentes potencias a mano.
Recuerdo mi primera reacción al concepto de que
uno puede potenciar remedios literalmente de los éteres
fué de escepticismo. Esto fué hace algunos años, pero tuve
la oportunidad de tomar prestado de un amigo que se fué
de vacaciones el Simulador de Potencia Mk II de Rae y
esto me dio la oportunidad de comprobar su eficacia.
La mayor parte del tiempo el aparato estuvo sobre
mi mesa; pero yo tenía una paciente que había venido a mi
consulta por un problema de la parte baja de la espalda;
mientras formaba su historial observé que todos los
pliegues de la piel de las articulaciones de sus dedos
estaban cuarteados y algunos mostraban incluso señales
de sangre. Como puede imaginar, era una condición
dolorosa y no había respondido a ningún tratamiento en
un período de muchos meses. Antes de tomar prestado el
simulador, yo le había sugerido que probara ciertas
medicinas homeopáticas que no parecieron ayudar mucho
más que las pomadas que le había dado su farmacéutico.
Así que decidí elaborar un remedio para ella en el simula-
dor. Ella tomó las píldoras y en dos semanas sus manos
habían sanado. Meses más tarde ella me llamó para
decirme que el cuarteamiento estaba apareciendo de
nuevo; en aquel tiempo yo ya no tenía el simulador así que
recurrí a remedios farmacéuticos estándar, pero sin éxito.
Finalmente, la paciente dijo que no funcionaban, que
quería las píldoras que antes curaron sus manos. Ella no
tenía forma de saber que remedios venían del simulador
pero se refirió a ellas directamente como los que la habían
ayudado. Esto me abrió bastante los ojos.
Más o menos por el mismo tiempo, tuve a un
paciente que sufría ciática del lado derecho. Esta había
desaparecido una vez con un tratamiento convencional de

130
quiropraxia, pero el paciente, que talaba árboles, levantó
algo e hizo un mal gesto y la condición volvió agravada. La
manipulación no dio resultados así que le preparé una
potencia del Lycopondium en el simulador y en un día la
ciática desapareció. El tampoco había respondido a reme-
dios farmacéuticos.
Por supuesto, estos son dos casos aislados y
bastante dramáticos y yo no estaba todavía completamente
convencido de que el simulador podía producir remedios.
Pasaron dos años antes de que empezara a usar el simula-
dor de potencia Mk III de forma regular y durante ese
tiempo hablé con médicos y practicantes de otras discipli-
nas de curación que me contaron curaciones dramáticas,
similares a las mías, que habían observado cuando utiliza-
ban remedios simulados. Creo que vale la pena recordar
uno o dos de ellos aquí.
El primero trata de una niña de siete semanas
que, según los médicos, había nacido con un problema de
hígado e ictericia. Su estado era tan grave que no le daban
muchas esperanzas de vida. Se sugirió la cirugía explorato-
ria como única esperanza. A estas alturas, se la trató con
una combinación de los siguientes remedios hechos en el
simulador: Lycopodium, phytolacca, fósforo, zinc y cuprum
metallium en solución, que debía administrarse en gotas.
En una semana la ictericia había desaparecido y el hígado
empezó a funcionar con normalidad. La niña tiene ahora
nueve meses y es una niña normal y sana.
Un niño de diez años que sufría distrofia muscular
y que había nacido con deformidad en las caderas, rodillas
y pies. Cuando vino a la consulta sufría de una poliartritis
aguda que le ocasionaba mucho dolor. Se potenció fósforo
y cinc a 200c en un solución con el simulador y en el
período de una semana se prepararon y administraron, de
forma similar, cinco dosis de Calc, Carb. a 10mm. El dolor
cesó por completo en una semana.
Un hombre de sesenta años que sufría de angina
de pecho e hipertensión. Su presión sanguínea estaba a
240 sobre 170. Se le administró un preparado simulado de
Crataegus a 30c. tres veces al día. Después de seis meses

131
su presión sanguínea se mantenía en 146 sobre 92 y puede
caminar largas distancias, cosa que no podía hacer antes
del tratamiento.
La evidencia parece confirmar que Ruth Drown,
pionera en el campo de la simulación de potencia, tenía
razón cuando dijo que era posible, con medios radiónicos,
utilizar los campos de éter y extraer de ellos las frecuen-
cias de energía de cualquier sustancia curativa e impreg-
nar esa frecuencia en un material portador apropiado. Es
un hecho remarcable cuando todo se ha dicho y hecho y
vale la pena examinarlo cuidadosamente porque sus
implicaciones son virtualmente ilimitadas.

132
Capítulo Seis

EXPLORANDO EL AURA
DE LA SALUD

«El médico debe hablar de aquello que es invisible. Lo


que es visible debe formar parte de sus conocimientos y
debe reconocer las enfermedades del mismo modo en que
cualquiera que no es médico puede reconocer sus
síntomas. Pero esto está muy lejos de hacer de él un
médico; sólo se convertirá en médico cuando conozca
aquello que no tiene nombre, que es invisible e inmate-
rial y, sin embargo, eficaz».
Paracelso.

Cuando escribí Radionics and the Subtle Anatomy


of Man, tenía la firme convicción de que todas las prácticas
radiónicas podían basarse en los métodos de análisis y
tratamiento que yo había definido. Estaba seguro de que
podía evitarse la tediosa tarea de analizar el estado de los
sistemas orgánicos y pasar directamente a los centros de
fuerza para determinar dónde se producían desequilibrios
de la salud. Todo el trabajo que hice siguiendo aquellas
líneas tendía a apoyar ese concepto. Quizá el alto conteni-
do de energía de mi entusiasmo inicial lo trajo consigo y,
además, se vio confirmado por los buenos resultados
obtenidos por los practicantes que utilizaban estas técni-
cas.
Sin embargo, gradualmente me fui dando cuenta
de que allí donde los primeros trabajos en radiónica
habían puesto el énfasis en el sistema físico del hombre y
prestado poca atención a los aspectos sutiles, yo había sido
igualmente culpable de poner el énfasis en el lado contra-
rio, no preocupándome de nada más que de los cuerpos
sutiles y, sobre todo, de los chakras. El primer indicio que

133
S

tuve de esto fue que, de vez en cuando, los practicantes


venían y me explicaban que se encontraban con que tenían
que analizar al menos alguno de los sistemas orgánicos,
además de los chakras. Esto me sorprendía y tendía a
pensar que si incrementasen sus conocimientos sobre la
estructura y funcionamiento de la anatomía sutil, no
tendrían que preocuparse por el análisis de los sistemas
físicos.
La experiencia ha mostrado que, al menos por el
momento, resulta ventajosa la combinación de los dos tipos
de análisis, el de los cuerpos sutiles y el de los sistemas
orgánicos, a fin de obtener un cuadro claro y exacto de lo
que sucede en el interior del paciente. Probablemente haya
muchas razones para ello, pero creo que la más importante
radica en el hecho de que nos cuesta remitirnos a algo tan
abstracto como la anatomía sutil mientras que, por otro
lado, no tenemos esa dificultad con la anatomía física, ya
que es algo fundamental, visible y conocido para nosotros,
y podemos remitirnos a ella fácilmente. Esto, por supuesto,
debe intensificar cualquier relación entre paciente y practi-
cante con vistas a una curación radiónica.
Hay otro factor que uno debe tener en cuenta si
quiere comprender y es que, a pesar de que los chakras
funcionan como receptores y transmisores de energía,
también se producen en el cuerpo etérico transmisiones y
desequilibrios de energía que no envuelven necesariamente
a los centros. Para aclarar esto, voy a describir un caso
clínico que lo ilustra de un modo bastante dramático.
Se trata de un individuo que, de vez en cuando,
experimentaba períodos de molestias abdominales, acom-
pañadas a menudo de síntomas de extrema fatiga, dolor en
el pecho y dificultad para respirar, y una sensación de
entumecimiento en las manos. A veces estos síntomas eran
tan grandes que el paciente tenía que guardar cama. Se
realizaron diversos análisis de sangre y se examinó el
corazón a conciencia, todos los análisis clínicos dieron
resultados negativos.
Un análisis radiónico de los chakras reveló un
sistema bien equilibrado, con la excepción del ajna, que

134
estaba poco activo, y del chakra base, que estaba demasia-
do activo. Esto último se debía, probablemente, al esfuerzo
por aportar más energía para compensar el problema de
fatiga. Ni el desequilibrio del ajna ni el del centro base
tenían ninguna relación, ni directa ni aparente, con el
cuadro de síntomas del paciente. Si en el curso normal del
tratamiento hubiera ignorado los sistemas físicos y tratado
el centro base para curar al paciente, no hubiera encontra-
do la verdadera causa del problema (ver figura).

DESVIACIONES DE LA ESTRUCTURA Y
FUNCIONAMIENTO PERFECTO DE LOS CHAKRAS:

Alto Normal Bajo

[e] o o o o
> ”

NEZUD
PEER]
AAA EEES
OREA UBRO
UNA MIA ROSE
Ra SAA

El cuadro diagnóstico de los centros es un buen


ejemplo de cómo puede uno no entender los factores si se
enfocan excluyendo los sistemas orgánicos. No hay nada
allí que indique realmente la causa del agotamiento de
este paciente.
No obstante, si examinamos el análisis de los
sistemas de órganos empieza a aparecer un cuadro claro.
El método utilizado es el ideado por Malcolm Rae y el
gráfico ilustra muy bien un concepto que se tratará en el
capítulo siguiente, el de la expansión y contracción del
organismo. La línea del cero, cerca de la periferia del
gráfico, indica la total expansión del estado saludable. El
punto de 100 grados de desviación de la estructura y
funcionamiento perfectos indica la máxima contracción y

135
se encuentra en el borde del círculo situado en el centro
del gráfico. Cualquier parte del organismo que tenga una
desviación próxima a los 100 grados está obviamente en
mal estado.

Al fin de mantener una imagen visual clara, las


lecturas de cada sistema de órganos se han dispuesto en
forma de tabla en lugar de situarlas alrededor del exterior
del gráfico, que es como se suele hacer normalmente. En
primer lugar, los "peores puntos" indican el grado más alto
de desequilibrio en ese sistema, que puede darse sólo en
unas pocas células. Este caso es un ejemplo interesante de
esto, el "peor punto" de la piel marca 9073 pero la lectura
"promedio", que representa el desequilibrio total del
sistema visto como un todo, es de 24, muy baja, lo cual
indica que, a excepción de una zona relativamente peque-
ña, la piel del paciente está en buen estado. De hecho, en
el momento del análisis esta persona tenía un herpes
doloroso simple en el labio inferior y de ahí la alta lectura
de desequilibrio para el "peor punto". La tercera lectura es
la del "peor punto" después de un minuto de tratamiento
radiónico, utilizando el simulador de potencia conectado al
interruptor de un campo magnético. A este fin se utiliza

136
una frecuencia especial. Con este minuto de tratamiento
se consigue, como lo expresa Rae, "quitar la espuma" y
dejar al descubierto aquellas zonas que realmente deberían
preocupar al practicante. Con frecuencia, las lecturas del
sistema nervioso cambian drásticamente con este trata-
miento, lo cual resulta evidente en el caso que estamos
analizando.

Peor Lectura Peor Punto


Punto Promedio después de la 1*
Proyección
Fluidos 4,3 1,4 0,0
Células 6,2 1,4 0,0
Tejidos > 4,4 1,3 0,0
Piel 90,3 2,4 7,2
Esqueleto 50,5 2,3. 3,5
Tejido conectivo 30,5 5,4 3,2
Músculos 40,3 5,7 7,2
S.N. Central 90,4 7,3 8,7
S.N. Simpático 8,7 6,4 2,6
S.N. Parasimpático 90,4 5,5 5,6
Endocrino 90,5 40,3 60,5
Genital 3,2 2,3 0,0
Gastro Intestinal 6,3 2,3 1,6
Hígado 90,3 40,2 30,7
Urinario 6,2 1,3 2,3
Respiratorio 6,3 2,3 0,0
Cardio-vascular 60,6 4,3 6,6
Capilares 90,4 7,5 60,5
Sangre 6,5 2,7 0,0
Linfático 9,6 7,3 0,0

Si se examinan estas cifras cuidadosamente


aparece una imagen clara del problema. La proyección
durante un minuto utilizando una frecuencia especial en
el simulador muestra claramente aquellos elementos que

137
son de importancia primordial en este caso; el sistema
endocrino, el hígado y los capilares. El resto de lecturas ha
variado sustancialmente, acercándose bastante al cero o,
en algunos casos, incluso alcanzándolo. Llegados a este
punto, debe decirse que estas lecturas no representan
cambios en los sistemas físicos del paciente, sino una
alteración en los campos de energía de los sistemas
orgánicos que lleva a la salud y que indica que la frecuen-
cia utilizada es adecuada para el tratamiento general del
paciente, pero que debe hacerse un tratamiento individua-
lizado de aquellos elementos que se desprenderán de un
análisis posterior del problema.
A continuación, se anotaron los síntomas del
paciente, así como una proporción determinada que
representaba los síntomas como una totalidad.
Un cuidadoso examen de los tests endocrinológicos
reveló, que los dolores en el pecho, la dificultad respirato-
ria, la extrema fatiga y la curiosa sensación de entumeci-
miento en las manos que se producían durante estos
ataques eran todos típicos de una defunción de las para-
tiroides. De modo que teníamos un caso en el que una
infección diftérica sub-clínica estaba creando unas toxinas
que eran la causa directa de un desequilibrio en las
glándulas paratiroides. La alta lectura de desequilibrio en
el hígado se debía a los esfuerzos de este órgano para
enfrentarse con las toxinas resultantes de la invasión
bacteriana del tracto gastro-intestinal.
El tratamiento indicado fue el remedio homeopáti-
co Haemtoxylon o Logwood, tres transmisores o pastillas
orales compuestas en el simulador de potencia a una
potencia de 10mm., además de la proyección radiónica de
lo mismo y la frecuencia de tratamiento global con el
simulador.
Vale la pena decir en este punto que yo nunca
había oído nada sobre el remedio que se había indicado
radiónicamente para este paciente. Y, sin embargo, al
comprobar los resultados no pude evitar sino sentir que
confirmaban la exactitud del análisis. El Haemtoxylon se
caracteriza por una sensación de opresión, como si se

138
tuviera una pesada barra sobre el pecho; una sensación de
dolor desde el abdomen a la garganta que causa dolor en
la zona del corazón, opresión y palpitaciones. En las
mujeres se asocia, generalmente, con dolor en el hipo-
gastrio.
Nunca deja de sorprenderme la exactitud con que
concuerdan la representación de un remedio con el análisis
radiónico... en este caso incluso detalla el dolor que va del
abdomen a la garganta, que es el camino o vínculo de
energía entre el tracto intestinal y las paratiroides que la
toxina bacteriana estaba tomando; de esta manera provo-
caba dolor en el pecho y disnea.
Los tratamientos radiónicos en los que se utilizó
un simulador de potencia como proyector, junto a los tres
"transmisores orales"; hicieron que este estado mejorara
rápidamente. Que yo recuerde, el único tratamiento
ortodoxo que se había propuesto era el Librium y fue
rechazado. Creo que este caso ilustra con claridad la
necesidad de que examinemos, no sólo los chakras, sino
también los sistemas orgánicos del hombre, si es que
queremos realizar un análisis concienzudo de cualquier
problema de salud. El caso muestra claramente que un
desequilibrio energético puede provocar problemas de
salud que no afecten a los centros, sino solamente al
cuerpo etérico de modo interno.
Cuando Edward Russell, en su libro Report on
Radionics, resumió mis investigaciones y las de Malcolm
Rae sobre radiónica, dijo que creía que sería provechoso
combinar ambos enfoques. En aquel momento no estuve de
acuerdo con él; sin embargo, la sabiduría de su idea se ha
hecho evidente desde entonces y creo que la combinación
de nuestros métodos de trabajo funciona admirablemente.
La Escuela de Radiónica ha abrazado también este
concepto y, actualmente, se enseña a los estudiantes a
analizar tanto los sistemas físicos como los sistemas
sutiles del hombre y a aplicar el tratamiento sobre la base
de sus conclusiones.
El Simulador de Potencia MK III es una herra-
mienta interesante para la investigación y experimenta-

139
x

Dolores en el pecho. Sensación de opresión


Dificultades respiratorias
Fatiga acusada
Molestias abdominales

4794014011848
1
18
7
7
Se ha determinado la localización
de la causa

yc Tracto G.!.
Intestino grueso
Curva hepática
Membrana mucosa

Se ha determinado
el factor causante

F/IC Infección
Bacteriana
Tipo: Corynebacterium diphtherias

Zona afectada por F/C

Endocrina
Para-tiroides

140
ción radiónicas, como se hace patente en el caso clínico
descrito. Muchos practicantes lo incluyen en sus equipos
de diagnóstico radiónico y así pueden añadir remedios a
sus tratamientos de transmisión.
Modificado y conectado a un interruptor, este
aparato con las diferentes cartas simuladoras que repre-
sentan los diferentes sistemas de órganos del cuerpo y las
glándulas endocrinas, además de las cartas de remedio y
aquellas que representan a las hormonas, colores y
elementos atómicos, forman en conjunto un equipo radióni-
co muy compacto que puede utilizarse para el tratamiento
a distancia y puede transportarse fácilmente. Yo mismo lo
he utilizado de esta manera con muy buenos resultados.
Otro método es conectar el simulador y el interruptor a un
aparato de diagnóstico de De la Warr de nueve o doce
diales modificado o a cualquier otro aparato con diales
fabricado. De esta manera, usando el diagnóstico como
tratamiento, las frecuencias pueden sintonizarse en el
equipo de tratamiento y el remedio, hormona, color o lo
que sea que se necesite puede emitirse como pulsación
desde el simulador.
El uso de un interruptor suministra dlecampo para
varios experimentos subjetivos. Cuando se acciona el
interruptor, éste produce un chasquido similar al de un
metrómano pero más suave; la velocidad de este chasquido
puede acelerarse o reducirse manipulando el dial. Cuando
se coloca la carta apropiada en el simulador y la muestra
del paciente está en el depósito del instrumento, acciono el
interruptor de modo que se produzca un chasquido de
ritmo lento e intermitente. Entonces, sentado en silencio
y con los ojos cerrados, visualizo la "línea de luz" que
conecta al paciente con su muestra en el instrumento y veo
esta línea de luz, que circula entre el simulador y el
paciente, con una intensidad intermitente más que como
la energía que se ve en el tubo de un osciloscopio. Visuali-
zo que esa mancha intensa de luz que recorre intermiten-
temente la línea de luz contiene la frecuencia de curación
que necesita el paciente, y veo cómo alimenta sus campos
de energía con una corriente regular de pulsaciones que

141
coincide con el sonido del interruptor. Este es, por supues-
to, un experimento de tipo subjetivo, pero de él se extraen
varias cosas. Primero, creo que incrementa la efectividad
del tratamiento; en segundo lugar, creo que el ejercicio de
visualización es de gran valor para el practicante y,
finalmente, pero no por ello menos, surgen de este trata-
miento una serie de experiencias subjetivas valiosas para
cualquier practicante que trate a distancia.
Daré un ejemplo de una experiencia de este estilo
que yo he tenido. Durante el tratamiento de un paciente
seguía la técnica que he descrito arriba cuando, de repente
y espontáneamente, la carta de remedio apareció ante el
ojo de mi mente. Los siete círculos que forman parte de la
frecuencia estaban cubiertos por una luz muy brillante
pero suave que parecía barrerlos en el sentido de las
agujas del reloj; cuando en uno de los barridos la luz
alcanzaba uno de los radios parciales un estallido de luz
continuaba, literalmente, el radio con una línea de fuego
hasta el centro del diseño. Era fascinante observarlo,
especialmente porque había aparecido espontáneamente.
Esto continuó con unos cuantos barridos más y luego la
imagen desapareció.
Esto me recordó la afirmación de Rudolf Steiner de
que podía "ver" el flujo de las fuerzas de formación etéri-
cas, que esas energías fluían desde la periferia de un
círculo infinito del espacio hacia un punto central y que
volvían después a la periferia de nuevo. Ciertamente, el
poder y la velocidad con la que la luz continuaba el radio
del diseño de la carta del simulador, dentro de los límites
del experimento, parecían reflejar su observación. Uno
puede argumentar que lo que pasó fue pura imaginación
por mi parte; puede que lo fuera, pero el fenómeno ocurrió
de forma tan marcada y espontánea que me inclino a no
concordar con que fue sólo imaginación. Estoy seguro de
que uno no debe dejar de lado la poderosa influencia que
ejerce el diseño similar al mandala de la carta simuladora,
que si se visualiza claramente puede desencadenar
experiencias subjetivas como la que he relatado que, en
último término, pueden ser de utilidad para el sanador que

142
trabaja con la radiónica. Las experiencias no son las
mismas para todos y, por supuesto, ningún practicante de
radiónica puede sentarse y hacer el ejercicio de visualiza-
ción con cada paciente que vaya a tratar. De todos modos,
si ese ejercicio se practica regularmente, estoy seguro de
que finalmente resultará en un gran aumento de la
capacidad para explorar el aura de la salud del paciente y
para equilibrar las fuerzas en ella mediante el tratamiento
a distancia.
No ha sido mi intención en este capítulo entrar en
excesivos detalles sobre los métodos de análisis radiónicos,
sino simplemente exponer el hecho de que ahora creo que
es importante tomar en consideración tanto el sistema
sutil como el físico del hombre; esto resulta en una forma
equilibrada de diagnóstico que permitirá al practicante ser
de mayor ayuda y provecho a sus pacientes.

143
Amro + bp pulida mel,
Dor ela gar Er
pa or 24

br nia le oran di /

prep | pt. pes aEA


quieran
a
conil mbe., Gteralmenta, elzertio von una non de E
psoanon rs del disnño, Exa luneigaries. E
especial có poeque hebis-aporvaido | il y

Pete ountimaó con uuos Cusnios a a


¡A en ro ga vá

q A A
que uyo podeb A Do+ ¡y ¿de
en bl ho si í pde
A OS ao
rinde
y ere at ÓN %
m. e

porron
quo ES

tyotrvas ¡comiada os md
po
20 ENE
PRO
A: 5]y EME A
En:
a
Pol ' .s

2
E Ie pd SN
A dl Lycd
pa TA
tl
a 7 y " dE ] o e mn PA ae

a e 4 mo !
LL,
á yd
ÓN se
Capítulo Siete

LA COLUMNA Y
LA TERAPIA RADIONICA
«El tema de la terapéutica de la columna ha recibido
menos atención de la que merece por parte de la profe-
sión médica».
Spondylotherapy.
Dr A. Abrams, AM, LL D, MD, FRMS

Hablaré en este capítulo sobre la columna y


algunos de los procedimientos utilizados para tratar las
disfunciones en esta zona del cuerpo. Quizás para un
quiropráctico o un osteópata sea difícil aceptar la idea de
que pueda curarse una luxación de la columna a distancia,
ya que generalmente se necesitan procedimientos físicos
para corregirla. El hecho es que no todos los problemas de
la columna admiten un tratamiento radiónico y entonces,
por supuesto, se hace necesario un tratamiento físico; a
pesar de ello, incluso en estos casos puede utilizarse la
radiónica como complemento a la terapia de manipulación.
No trataré sobre los aspectos más generales de la
columna, con los que todos deberíamos estar ya familiari-
zados, sino de los aspectos más esotéricos de ésta, la parte
más importante de nuestra anatomía. Desde tiempo
inmemorial, la columna ha desempeñado un importante
papel en la simbología religiosa, constituyéndose en el
sendero a través del cual las energías fogosas de la
regeneración espiritual ascienden desde los dominios de la
oscuridad abajo a los de la luz arriba. Los antiguos
egipcios la consideraban como el vínculo entre el cielo
superior y el inferior, como representación de un poder
vital sustentador.

145
Reconocido como la columna central del poder, el
cuidado de la columna se convirtió de un modo natural en
el protagonista principal de las técnicas curativas aplica-
das por los sacerdotes-médicos en los templos de luz. Los
antiguos chinos, al igual que los bohemios y los griegos,
reconocieron también la importancia de la terapia de
manipulación en el restablecimiento de la salud. Pero,
bastaron los Siglos Oscuros y un decreto papal para que la
cirugía y la manipulación se prohibieran como herejías;
esta última empezó a resurgir sólo a finales del siglo XIX,
cuando Andrew Still fundó la osteopatía y Daniel Palmer,
un hombre con una profunda comprensión de los principios
subyacentes en la sabiduría antigua, fundó la quiropraxia.
La sombra del decreto papal aun hoy se cierne sobre la
ortodoxia, que a penas si reconoce la importancia de la
columna para la vida interior y exterior del hombre y para
su salud a todos los niveles.
El estado de la columna y su postura son sinóni-
mos. En los sutras de yoga de Patanjali se remarca la
importancia de una postura correcta. Los aspirantes a la
sabiduría tienen siempre presentes las implicaciones de
mantener una postura correcta y saben que en sus ejerci-
cios de meditación, la columna debe de estar erguida y
equilibrada, ya que su postura refleja el estado interior del
hombre en su aspecto mental y emocional. El primer
obstáculo para alcanzar la cognición del alma, del que
habla el Patanjali es la incapacidad física... el cuerpo debe
estar libre de dolor, equilibrado y purificado antes de
aguantar y registrar con claridad los impactos de los
estados superiores de conciencia. Muy pocos negarían que
los problemas de la columna, con los consiguientes dolores
e incapacidad, constituyen un obstáculo para la verdadera
practica de la vida interior.
Desde un punto de vista fisiológico, una mala
postura origina un círculo vicioso de oxigenación deficiente
de los tejidos y de un tono muscular bajo, los cuales
resultan en una baja resistencia a la enfermedad, predis-
posición a la escoliosis, anemia, salud frágil en general y
dolor de espalda crónico; en otras palabras, evita o dificul-

146
ta el flujo apropiado de energías a través de la anatomía
humana. Una encuesta reciente entre los niños en edad
escolar de una gran ciudad de Gran Bretaña reveló que
35.000 de ellos presentaban defectos en la mecánica de sus
cuerpos. Diez años de investigación del Canadian Memo-
rial College of Chiropractic sobre la postura han demos-
trado que menos del 0,5% de la población adulta tiene una
postura correcta. Por supuesto estas cifras son indicativas
de la gran presión interior y de la falta de equilibrio que
el hombre experimenta hoy en día.
Si uno investiga en la sabiduría antigua es posible
encontrar numerosas referencias a la columna. Por
ejemplo, en su libro La Aurora, el místico cristiano Jacobo
Boehme se refirió a la columna, o más bien, a su replica
sutil, cuando escribió:

«Ahora esta rueda tiene siete ruedas una dentro de la


otra, y una nave que encaja perfectamente con las siete
ruedas y las siete ruedas hacen funcionar la nave...».

La nave sobre la que escribió es la columna sutil


de materia etérica y la rueda son los vértices rotatorios de
energía a lo largo de la columna, que son las puertas de la
conciencia ó, según la terminología hindú, los chakras.
Cada chakra o rueda se manifiesta en el plano físico en
forma de ganglios nerviosos y plexos y, finalmente, como
una de las glándulas endocrinas. Como ya he mencionado
Juan habló sobre estos centros de fuerza en la Revelación
y se refirió a ellos como los siete sellos en el reverso del
libro de la Vida. Se dice que los siete chakras son un
reflejo de los siete grandes centros de conciencia localiza-
dos en el cerebro. Estos, según la sabiduría antigua,
actúan mediante los centros de la columna, del mismo
modo que los Siete Espíritus ante el Trono de Dios actúan
a través de cuerpos planetarios. El funcionamiento correcto
y equilibrado de estos siete chakras espirituales mayores
se refleja en una salud perfecta en todos los niveles.
La nave o columna sutil, según las antiguas
enseñanzas de la India, comprende tres corrientes de
energía; estas tres corrientes son el vínculo entre el alma

147
y su sombra, o bajo-yo, en los tres mundos. Tres caminos
recurren la columna; al primero los hindúes lo llaman
Sushumna y es el camino central, que representa el
aspecto Padre, Espíritu o Voluntad de la Divinidad; el
Pingala, a la izquierda, representa el aspecto Madre,
Materia o Inteligencia, y el Ida, a la derecha, el del Hijo,
Alma o Amor-Sabiduría. Cuando se ven en movimiento, el
Pingala y el Ida parecen intercambiar sus posiciones; este
movimiento origina dos espirales de energía que giran
alrededor de la columna central y que se representan en
las artes de la curación mediante el Caduceo. De un modo
similar, la vara de iniciación que empuña el Bodhisattva,
o maestro del mundo, consiste en una serpiente central
erguida con otras dos entrelazadas a su alrededor, simboli-
zando con ello las tres efusiones de la Deidad; los tres
mundos en los que el hombre está inmerso y la columna
vertebral con sus tres canales. También se refleja, y no de
forma inesperada, en el diseño de la doble hélice del ADN.
No se puede separar el estado de la columna de la
salud del individuo. El mismo Hipócrates amonestó a sus
estudiantes a examinar la columna del paciente cuando la
enfermedad se difundiera por su cuerpo. En A Treatise on
Cosmic Fire, de Alice Bailey, el maestro tibetano afirma
que el médico del futuro tendrá en mente dos factores
básicos cuando se enfrente a la enfermedad. Uno será la
comprobación del correcto alineamiento de la columna, lo
cual es fundamental ya que la columna constituye el
centro, no sólo del cuerpo físico del hombre, sino también
de su desarrollo espiritual. El otro factor consiste en la
descongestión del bazo, esto para conseguir que los fuegos
latentes del cuerpo físico puedan fundirse correctamente
con el fuego solar o energías pránicas del sol cuando
penetren en el cuerpo etérico. El tibetano continúa dicien-
do que se producirán revelaciones en el campo médico
cuando...

«... la profesión médica se concentre en la acción preven-


tiva, sustituyendo el actual régimen de operaciones
quirúrgicas y drogas por luz solar, una dieta vegetariana
y la aplicación de las leyes de vibración y vitalidad

148
magnéticas. Entonces llegará el día en que seres hu-
manos más sanos y mejores poblarán la tierra. Cuando
los médicos aprendan también sobre la naturaleza del
cuerpo etérico y la función del bazo como punto focal de
emanaciones pránicas, se introducirán principios y
métodos sólidos que acabarán con enfermedades como la
tuberculosis, la debilidad o la mal nutrición, o con
enfermedades de la sangre y los riñones. Cuando los
médicos comprendan la influencia de las emociones en
el sistema nervioso, volverán su atención a la mejora de
las condiciones del entorno y estudiarán los efectos de
las corrientes emocionales en los fluidos del cuerpo y,
principalmente, en los grandes centros nerviosos y en la
columna vertebral. Cuando la conexión entre el cuerpo
material y los cuerpos sutiles sea un hecho consolidado
en los círculos médicos, se conocerá entonces cuál es el
tratamiento adecuado para la locura, las obsesiones y los
desórdenes mentales, y los resultados serán mejores;
cuando se estudie la naturaleza de la fuerza del alma o
del ego y se comprenda mejor la función del cerebro
físico como transmisor de la voluntad del alma, entonces
se estudiará la coordinación de todo el ser del hombre y
la enfermedad y la debilidad se tratarán de acuerdo a
las causas y no a los efectos».

Por su propia naturaleza, la radiónica está empe-


zando a mirar al hombre según los principios arriba
sugeridos. Ve la enfermedad como un desequilibrio energé-
tico y sabe que a través de una cuidadosa selección y uso
de energías se pueden curar estos desequilibrios que
afectan los cuerpos energéticos del hombre. La radiónica
puede enfocar los problemas de columna de diversas
maneras; las que cito a continuación son una selección de
las más efectivas.
En los años 50 un ingeniero aeronáutico llamado
Darrell Butcher llegó a estar profundamente relacionado
con la radiónica. Una de las primeras cosas que descubrió
es que él no podía utilizar ni el método de diagnóstico
radiónico de la vara sobre el instrumento ni el del péndulo.
Probablemente, alguien de menos valía que él se hubiera
dado por vencido y hubiera desestimado la radiónica, pero
D. Butcher continuó firme y empezó a buscar otros

149
métodos de detección. El resultado de su investigación se
llamó "Metro", ese bien diseñado instrumento que se
componía de una carcasa de plexiglás que contenía una
aguja bien nivelada; se mantenía a la aguja en posición
mediante un pequeño imán situado encima de ella. Bajo la
aguja suspendida había un dial semicircular marcado con
números... el cero estaba en el centro; por el lado derecho
estaba dividido en tres partes -1, -2, -3, que a su vez se
dividían en diez partes; lo mismo se repetía a la izquierda,
solo que con +1, +2, +3.
Para hacer un diagnóstico se colocaba la muestra
del paciente frente al medidor..La aguja se ponía a cero.
Entonces Butcher repasaba mentalmente una lista de
enfermedades o sus frecuencias; cuando llegaba a la
enfermedad o factor de causa del paciente, la aguja se
desplazaba automáticamente desde el cero y daba una
lectura. Sólo se hicieron dos o tres "metros" como este y me
siento muy afortunado por poseer uno, aunque al mismo
tiempo frustrado porque no soy capaz de hacerlo funcionar.
Aparte del señor Butcher, todavía no he encontrado a
nadie que pueda hacer que la aguja se mueva, simplemen-
te mediante concentración, para dar un diagnóstico.
Darrell Butcher tenía la notable habilidad de moverla con
su mente. Ideó una serie de tres conos que parecían un
aparato para medir el viento y que se mantenían en equili-
brio sobre un poste. En una ocasión, a una distancia de 30
millas, consiguió mentalmente que estos conos giraran;
después los detuvo e invirtió el movimiento. Esto sucedía
hace unos veinte años, antes de que los fenómenos de este
tipo llamaran la atención de los científicos.
Habiendo ideado sus propios métodos einstrumen-
tal de diagnosis, desarrolló también una serie de instru-
mentos de tratamiento. Uno se llamaba "sombrero de paja"
y consistía en un cono bien nivelado, alrededor de cuyo
borde se situaban varias frecuencias de curación en la
forma de cartas agujereadas. La muestra del paciente se
situaba cerca del borde del cono que, enseguida empezaba
a girar y lo hacía hasta que la muestra quedaba frente a
la frecuencia de curación que el paciente necesitaba.

150
Cuando terminaba con ésta, el cono se ponía en movimien-
to otra vez hasta que la muestra del paciente se colocaba
frente a otra frecuencia. Este aparato y otro llamado
"Franja" ya no están disponibles, pero sí lo está el
"Peggoty" y es sobre él que quiero hablar en relación con
los problemas de columna. Butcher dijo que los conoci-
mientos que aplicaba a la radiónica procedían de un libro
que compró en una tienda de segunda mano por cinco
peniques. Según él, ese libro contenía la información que
cualquier persona necesitaría conocer en este campo de
curación. Nadie sabe qué libro era ese, ni su tema; es
suficiente decir que él sacó de allí la idea de que la energía
fluye hacia abajo en ángulos rectos con respecto al plano
de la tierra. De aquí salió el diseño del Peggoty. Mostraré
una imagen del Peggoty para que quede claro lo que sigue.

EL PEGGOTY

151
Consiste en un panel blanco de plexiglás de
aproximadamente 6 3/4 "por 5 1/4" dividido por líneas en
120 cuadrados. Cada cuadro tiene un pequeño agujero en
el que se puede colocar una clavija negra. Las clavijas
colocadas según una cierta disposición representan
frecuencias de curación o, como Butcher prefería llamarlas,
"mensajes curativos".
Su teoría era que la energía fluye directamente
hacia el panel y, a través de él, hacia la muestra del
paciente que flota en un soporte de metal sostenido sobre
una aguja. Si el panel no tiene clavijas, entonces no hay
"mensaje", pero con las clavijas situadas en el panel para
indicar el remedio que necesita el paciente, el flujo de
energía se ve alterado de tal manera que, a distancia,
resulta beneficioso para el paciente. El mismo Butcher
utilizó las frecuencias de De la Warr y de la Doctora Ruth
Drown en su instrumento.
Las clavijas negras insertadas en la plataforma del
instrumento representan la frecuencia curativa adecuada
para corregir una luxación vertebral. El área de delante
del panel se usa para situar la muestra del paciente; las
tres clavijas a su izquierda no se usan, excepto en los casos
en los que la frecuencia utilizada tenga más de diez
dígitos.
El aparato Peggoty se utiliza como cualquier otro
equipo de tratamiento radiónico, con la única diferencia
que las frecuencias no se han cumplimentado. He dado
estos detalles sobre el Peggoty porque, casi sin excepción,
todos los practicantes que conozco están de acuerdo en que
es el modo más eficaz de tratar un problema de columna.
Quizá sirva de ayuda en este momento la descrip-
ción de una luxación de la columna. Este estado se etique-
ta a menudo con el inapropiado nombre de "desplaza-
miento discal", ya que es anatómicamente imposible que
un disco se desplace. Puede degenerar, o puede verse
sometido a una presión anormal debido al mal alineamien-
to de una vértebra, o puede desembocar en una hernia,
pero no puede desplazarse.
Una luxación de la columna se produce cuando

152
una vértebra se queda fija en un punto determinado de su
área normal de movimiento; por supuesto, esto puede
sucederle a cualquier articulación del cuerpo, pero la
columna y la pelvis parecen ser especialmente propensas
a ello. Esta fijación de la vértebra crea un punto de
intensa irritación que desemboca en dolor e inmovilidad.
Frecuentemente, los ligamentos circundantes se vuelven
hipotónicos y, como resultado, se estiran más allá de su
longitud normal; esto estira los nervios sensoriales del
ligamento y, de nuevo, el resultado es dolor, un dolor que
a menudo se refleja en otras zonas del cuerpo. En el caso
de problemas en la zona baja de la espalda, el dolor baja
por las piernas, o se refleja en la ingle o en las zonas
abdominales bajas. Es esencial en los casos de este tipo de
problema que se compruebe el estado de los ligamentos
que pueden estar afectados porque raras veces se limitan
a una simple vértebra o articulación sacro-ilíaca luxada.
Los ligamentos pueden ser tratados radiónica-
mente, y he comprobado que ciertas combinaciones de
remedios conseguidas con el Preparador de Potencia son
excelentes para restaurar el tono del ligamento. Un méto-
do de estas características es, desde luego, muy útil en la
práctica de la osteopatía o la quiropraxia, sobre todo
cuando no se sigue una terapia radiónica. La siguiente
combinación básica me ha resultado efectiva una y otra
vez.
Lo que sigue se sitúa en el depósito de entrada del
Preparador de Potencia.
Fitato de manganeso.
Vitamina B12.

Estos dos elementos combinados causan un profun-


do efecto en los ligamentos. consiguiendo la normalización
de su tono. Añado a estos, generalmente en forma de
ampolla, potencias de los siguientes remedios homeopáti-
cos.
Glándulas suprarrenales.
Arnica.
Cartílago.

153
Xx

Disco intervertebral.
Bambú y/o disco de bambú.

Uso las glándulas suprarrenales porque cuando los


ligamentos se ven implicados en un problema de espalda,
y casi siempre lo están, estás glándulas juegan un impor-
tante papel. Debido a que la adrenalina se libera en la
corriente sanguínea cada vez que nos vemos sometidos a
presión, sea ésta física o emocional, el estrés es uno de los
factores fundamentales en los problemas de espalda. Debe-
ríamos correr o luchar para consumir esta adrenalina pero
no solemos hacerlo y por ello continúa en la sangre. Hay
ciertos elementos en la adrenalina que inhiben el creci-
miento normal de las células de mantenimiento de los
ligamentos. Cuando esto sucede, los ligamentos se estiran,
sobre todo en zonas donde han sido debilitados por caídas
o heridas en el pasado; el resultado es un problema de
espalda, a menudo muy agudo y sin causa aparente. Las
glándulas suprarrenales ayudan, al eliminar las concentra-
ciones excesivas de adrenalina en la sangre.
Este, pues, es el preparado básico; deben añadirse
a éste otros remedios que puedan resultar adecuados, como
el Rhus tox., Ruta, Bellis Perennis, Lycopodium o cual-
quier otro. También he utilizado el Simulador de Potencia
para transmitir Fitato de Manganeso B12, y lo he encon-
trado muy efectivo como complemento al tratamiento
quiropráctico para la curación de problemas de espalda.
Como dije al inicio del capítulo, a veces es difícil
aceptar que los problemas de columna puedan solucionarse
con la radiónica, sobre todo a distancia; por ello me
gustaría cerrar el capítulo con dos citas de los libros de
Agni Yoga, Brotherhood y Aum, que ilustran la sensibi-
lidad de la columna al pensamiento dirigido. Uno afirma:

«A veces uno puede sentir como contactos vibratorios en


la zona de la columna. Debe comprenderse que esta
manifestación tiene relación con la transmisión de
pensamiento, sobre todo cuando un pensamiento de gran
tensión está en camino».

154
El otro:

«El pensamiento es el relámpago. Un pensamiento reci-


bido despierta a menudo manifestaciones luminosas
dentro de nosotros; por tanto, aumenta el brillo de los
chakras. Del mismo modo, puede comprenderse que las
vibraciones de la columna están directamente conecta-
das con la recepción del pensamiento».

Por supuesto, cuando nos enfrentamos con proble-


mas de columna, siempre es mejor comprobar si al pacien-
te le convendría más la manipulación física y, si es así,
remitirlo a algún practicante competente en este campo.
Cuando tratamos problemas de la columna radiónicamen-
te, es esencial analizar cuidadosamente el estado de los
chakras base y alta-mayor, ya que ambos gobiernan la
columna desde distintos extremos y es a través de ellos
que se dirige mejor el tratamiento radiónico.

155
CUE A,des e
oarurate te iaiaóR explo

Ml AAA SE
efes AA A
A
ins Td ASEed PS
ti a O ito dla ADM, ra ALGA
"ls tr EA É Un = 4 '«|
Ea

y sr andara ayuden,elOS :
ML ela via de adracalion etde da.
sio, paa; es e! preprcado histite; deben a "
| a beteotro
E Tata PS 190
ee Ss , 00
«id Hawk a, Rute, Dultia Parent,
quie Se. También: ho tilinado «Á Sian
_ pista inams
zobir Fiámto de Nangonass 3
irado muy «ómtivo vou Pon apt
aniroprictico pare la cursción de $
Cuo Aja si inicia de «sapito)a: A

agupiar que los pr faros fsé


calpe y
era La. tión, sobry todo a 4
pernzía corcor el espliclo son des citar
Ajni Yoga, Aroibechoody a,rones
d
a: ise cola 0 paras
St sida
la o atir
a
ÑÁ vencio Erie e
re iS
Capítulo Ocho

RITMO BIODINAMICO

«Cada partícula de nuestro cuerpo puede integrarse de


un modo tan absoluto en el ritmo que nada rompa la
armonía».
Curación Espiritual.
Swami Paramananda.

Volvamos ahora sobre algunas consideraciones que


surgen de la hipótesis del Vínculo Etérico Geométrico.
Como mencioné antes, nuestro conocimiento de la relación
entre el hombre y el espectro de las fuerzas universales
que nos rodean y penetran, escaso como es, exige que, en
el postulado de un campo de fuerza a través del que actúa
el radiestésico, este campo sea el adecuado para la natura-
leza y comportamiento de la célula protoplasmática. El
hipotético vínculo etérico geométrico parecería suministrar
el símbolo de ese campo de fuerza y pediría una directa
comparación con la configuración de la doble hélice del
ADN.
Cualquier hipótesis que quiera tener validez, debe
suministrar la clave para una mejor comprensión de la
investigación de la que surgió. Inevitablemente, mediante
esa comprensión se acumulará el conocimiento de natura-
leza práctica; este conocimiento puede expresarse a través
de un diagnóstico y unas técnicas terapéuticas mejoradas.
En la Radiestesia y la Radiónica nos preocupa la restaura-
ción del equilibrio dinámico de las fuerzas interiores del
paciente y así, surge la pregunta: ¿puede proporcionarnos
la hipótesis del vínculo geométrico una pista que nos
conduzca a una aproximación más básica y eficiente a la

157
erradicación de las aberraciones biodinámicas en el cuerpo
humano?. Espero poder demostrar que así es.
Parece que entre los practicantes existe la tenden-
cia a pensar en términos de energías, radiaciones, campos
de fuerza y cosas por el estilo y, entonces, diagnosticar y
tratar sólo en términos de órganos y sistemas, lo cual
complica la naturaleza práctica de su trabajo. Olvidemos
por un momento que el hombre, en su vertiente física, es
de carne y hueso, y pensemos en él como en un campo de
energías condicionadas que residen en un vasto océano de
fuerzas cósmicas; pensemos en él como si fuera una célula
en el interior del Cuerpo del Universo. Llevemos esta
analogía aún más lejos y detengámonos a considerar la
relación de un célula física con forma humana con el
universo de células en el que se encuentra. De hecho, la
célula es como el hombre, una unidad de energía en un
campo mayor de fuerza.
La hipótesis de la conexión nos ha llevado a
considerar la existencia de un campo de fuerza universal
que contiene un patrón de energías que pueden ser
utilizadas al contactar con un paciente con miras a hacer
un diagnóstico y tratarlo; y que en este campo de fuerza se
encuentra el hombre mismo, reconocible como una comple-
jidad de energías ulterior que contiene el esquema de la
doble hélice, que en esencia es una fuerza genética de
formación. A primera vista, esto no parece aportar ningún
tipo de guía práctica, sin embargo, las palabras NATU-
RALEZA Y COMPORTAMIENTO DE LA CÉLULA
PROTO-PLASMATICA, que se hallan en el capítulo,
sirven para sintetizar diversos factores, a saber, las
CONEXIONES ETERICAS ADN/CELULA/PROTEINA. De
la relación de ideas evocada por la asociación de estas
palabras, podemos deducir algo valioso para nuestra
investigación radiónica.
El estado biológico normal de una célula protoplas-
mática sana es el de un equilibrio "pulsatorio", o sea, su
contracción y expansión dentro de unos límites definidos.
Esto se ve claramente durante las sucesivas fases de la
mitosis o división celular. La célula se expande y al

158
hacerlo reordena su contenido en varios diseños. Un diseño
interesante se produce durante la fase de la división
celular conocida como metafase. Resulta útil ilustrarlo,
sobre todo cuando uno se para a considerar que, en este
punto, la célula dobla su contenido de proteínas y ácido
nucleico.

> METAFASE

Después de un nuevo reordenamiento de los


cromosomas, la contracción se produce a lo largo del
ecuador de la célula y se efectúa la división. Es importante
recordar que la EXPANSION y la CONTRACCION
expresan la naturaleza de la célula y que estas acciones de
la célula resultan de los intercambios de energía entre ésta
y el entorno próximo y distante.
Si la pulsación biológica predomina en una de las
dos direcciones se produce una alteración del equilibrio.
Este bloqueo en la movilidad del plasma resulta en una
reducción de la función energética global del organismo, lo
cual supondrá una predisposición a la enfermedad. Por
motivos prácticos, debemos leerlo en los análisis radiónicos
como sigue:

Parasimpático + <'TFuerza Vital > Simpático +


Expansión Contracción
Relajación Tensión y ansiedad
Corrientes de energía Corrientes de energía
del centro a la periferia de la periferia al centro

La sabiduría del Doctor Guyon Richards queda

159
patente porque él ha basado sus remedios para órganos y
sistemas en los estados negativos y positivos de los
sistemas nerviosos simpático y parasimpático. Consciente
o inconscientemente, trataba con los estados de expansión
y contracción que se producen en el organismo humano y
que encuentran su expresión en tejidos dañados.
La contracción de la célula es concomitante con la
contracción de las proteínas que la constituyen y no hay
enfermedad o alteración en el cuerpo que no tenga alguna
relación con el metabolismo de las proteínas.
Existen una serie de factores que provocan la
contracción a nivel celular; la más importante de ellas es
la ansiedad, un estado en el que el individuo escapa del
mundo hacia el núcleo biológico de su ser. Le siguen en
importancia los miasmas y las toxinas, que también
desempeñan un papel importante en el bloqueo de la movi-
lidad plasmática y en la contracción de las proteínas de la
célula. Invariablemente, hay una serie de elementos
presentes en cada caso que provocan una postura celular
contraída.
Al tratar un paciente que sufre de un mínimo de
ansiedad y en el que la causa principal de la contracción
plásmica radica en la condición tóxica o miásmica, la
reacción a la expansión plásmica debida a la eliminación
del miasmo o la toxina será mínima y el paciente se
calmará para experimentar una mejora de salud. Por otra
parte, cuando haya una excesiva ansiedad, la fase hiper-
expansiva incontrolada debida a la eliminación del miasmo
puede desembocar en un estado de ansiedad de no meno-
res proporciones por lo siguiente: tan pronto como se
produce la expansión, el paciente se relaciona de un modo
más directo con el océano de fuerzas vitales en el que vive
(sus energías empiezan a fluir del centro a la periferia) y
una expansión semejante puede ser agobiante y terrible
para un neurótico. Se ha invertido su polaridad e intenta-
rá contraerse hasta un punto en el que tenga un contacto
mínimo con la desconocida inmensidad de la fuerza vital.
Esto lleva a la cuestión de quién debe ser tratado y librado
de miasmos y toxinas y a quién se debe dejar que tome su

160
propio destino bajo los límites que le impone La Ley.
Muchos de nosotros hemos escuchado la quejumbrosa
llamada de un paciente que se siente claramente peor
después de recibir tratamiento radiónico; ¿no será por lo
que he dicho arriba?.
Las proteínas son necesarias para cada célula,
tejido, órgano y función del cuerpo humano. Las moléculas
de proteínas que están en la corriente sanguínea contienen
agentes enzimáticos, grasas, minerales, azúcares, vitami-
nas y hormonas. Las suprarrenales, la pituitaria y las
gónadas unen las moléculas de proteína con otras sustan-
clas para formar hormonas esteroides. El páncreas une la
proteína al zinc, el tiroides con yodo. Las proteínas, a
través de la acción de los agentes proteolíticos, y cataliza-
dores vitamínicos y proteícos, se descomponen en aminoá-
cidos que son asimilados por la pared intestinal o trans-
portados por la circulación portal hasta el hígado. Que
sepamos, el cuerpo utiliza unos 26 aminoácidos.
Reconocer la importancia del estado de la proteína
para el correcto funcionamiento del cuerpo humano y su
papel vital en el mantenimiento de la salud nos ayudará
a detenernos y considerar qué papel debe jugar como
agente terapéutico.
_ Sabemos que el contenido de ácido nucleico de la
célula se dobla durante el estadio de la metafase en la
división mitótica; por lo tanto, debemos deducir que juega
un papel fundamental en la expansión de la célula. Esto
sugiere que, mientras la proteína de la célula se expande
después de la eliminación del miasmo o la toxina, el ADN
y ARN pueden utilizarse en potencias homeopáticas para
controlar el índice de expansión y así evitar cualquier
reacción desagradable por parte del paciente. Todas las
glándulas endocrinas usan proteínas para perfeccionar sus
secreciones y podemos observar que los aminoácidos
potenciados ejercen un efecto de regulación sobre la
jerarquía endocrina, cuyo papel principal consiste en
armonizar las fuerzas biodinámicas del cuerpo. También
la sangre depende de la correcta proporción de proteínas
si ha de ser la portadora de la fuerza vital, y de nuevo

161
aquí los aminoácidos potenciados pueden ejercer su poder
curativo para restaurar la armonía.
Creo que si la hipótesis del vínculo etérico geomé-
trico nos permite ver el cuerpo humano a la luz de los
campos de fuerza que interactúan rítmicamente uno sobre
otro, y que la salud puede concebirse como el equilibrio de
la pulsación expansiva y la contractiva de la célula proto-
plasmática, entonces el concepto ha dado ya su servicio.
La aplicación de ácidos nucleicos y aminoácidos
potenciados puede que no sea nueva para nosotros, pero
ser conscientes de su capacidad para controlar las reaccio-
nes negativas de sobre-expansión del nivel biodinámico
puede servirnos para incrementar la eficacia de aquellas
medidas que utilizamos a diario en nuestros tratamientos
radiónicos. Este es un aspecto que surge de la utilización
del vínculo como símbolo; la relación triangular de ener-
gías puede aplicarse a la anatomía esotérica del hombre,
y aquí uno entra en los dominios de la realidad tras la
forma y de formas más avanzadas y sutiles de terapia.

162
Capítulo Nueve

ALGUNOS ASPECTOS
ESOTERICOS DE
LA RADIONICA
«La presente época se maravilla ante las conquistas del
hombre sobre la naturaleza. Y sin embargo, ésta era de
energía sólo podrá triunfar cuando el hombre pueda
conocer y por tanto dirigir y controlar las fuerzas que
tiene en su interior».
Nuevos conceptos de diagnóstico tratamiento.
Dr. Albert Abrams, AM,LLD, MD, FRMS.

La radiónica ocupa una posición curiosa y única en


el sentido de que, como arte curativa, constituye un nexo
entre los conceptos más ortodoxos de diagnosis y trata-
miento y los dominios de la curación esotérica. Es un
hecho que algunos practicantes se inician en el campo de
la Radiónica aceptando la posibilidad de diagnosticar y
tratar a distancia, pero sin darse cuenta de las implicacio-
nes espirituales y filosóficas que ello conlleva.
Por ejemplo, un médico con una formación ortodo-
xa puede utilizar métodos standard de diagnóstico en la
radiónica, tratando sólo con los sistemas orgánicos del
hombre, y sentir aún con un mínimo esfuerzo que perma-
nece cerca de los límites de su formación médica y de sus
conocimientos ortodoxos. Si se le habla de cuerpos sutiles
y chakras, probablemente los desestimará por ser concep-
tos demasiado imaginativos e irrelevantes. Y sin embargo,
el simple hecho de aceptar alguna forma de actividad
radiónica ya indica que, aunque de un modo inconsciente,
está abrazando un más amplio y profundo planteamiento
de la curación, el cual le conducirá a su debido tiempo a
campos más esotéricos.
Pocos podrían trabajar con la radiónica por un

163
cierto tiempo sin darse cuenta del amplio potencial que
supone, no sólo en términos de ayuda a otros, sino también
en términos de un desarrollo interior acelerado y de una
igual sensibilidad. Clearly George De la Warr sentía esto
claramente cuando escribió:

«La Radiónica es una ciencia etérica y puede, de hecho,


abrir el camino hacia una moderna filosofía capaz de
correlacionar el cuerpo con la mente y, por tanto, con la
Mente Universal».

Consideremos esto más ampliamente. Si se quiere


realizar el análisis radiónico correctamente y con precisión,
el practicante debe desarrollar con la práctica la habilidad
de alinear sus cuerpos emocionales y mentales con el
vehículo etérico. Alinear los cuerpos significa llevarlos a un
estado de equilibrio inactivo en el que sus cualidades
vibratorias estén sincronizadas. Esto permite un flujo claro
y libre de información para alcanzar la conciencia y el
cerebro físico del practicante. En otras palabras, el practi-
cante está en un estado de alerta meditativa, con su mente
enfocada únicamente hacia el problema que tiene que
explorar, que es, en este caso, la naturaleza de los desequi-
librios en el aura de la salud del hombre. No hace falta
mucha imaginación para darse cuenta del efecto que esto
tiene en el practicante, ya que el contínuo alineamiento de
su bajo-yo puede conducirle a un conocimiento bastante
incrementado.
Llevemos esto un poco más lejos. Al hacer un
análisis radiónico, el practicante psicometriza una gota de
sangre o un fragmento de pelo del paciente y a través de
la concentración registra la salud del paciente en sus
propios sistemas. En otras palabras, está obteniendo un
feedback a través del campo del éter o, si prefieres decirlo
de otra manera, a través del campo de la mente, lo cual le
indica qué le ocurre al paciente. Psicometrizar significa
tocar, y si examinamos el sentido esotérico de tocar vemos
que el tacto permite al hombre tener bastante idea de la
capacidad de fijar su valor relativo mientras considera
otros cuerpos ajenos al suyo. El tacto es la innata recogni-

164
ción a través del uso de la mente, así el practicante toca
con su mente el aura del paciente a una distancia y es
capaz de determinar sus cualidades.
Si tomamos el significado de tocar y entendemos
sus naturalezas a niveles sutiles, se puede ver como
evoluciona de la siguiente manera.
En el plano físico tenemos el sentido físico del
tacto. En el astral se convierte en psicometría, en el nivel
mental evoluciona a psicometría planetaria, en el plano
búdico es curación y en el átmico, servicio. Servicio es la
liberación de flujos espontáneos de energía del alma sin las
trabas de ningún rasgo del bajo-yo o personalidad.
Diagramaticalmente tenemos esta extensión del
sentido del tacto, cuyo desarrollo se ve ampliamente
incrementado mediante la practica de la radiónica, ya que
el fin de ésta es el de servir a otros y no el de buscar un
egoísta autodesarrollo. Mediante el servicio a otros,
nuestro desarrollo interior se produce de un modo espontá-
neo y rítmico, no se fuerza por la preocupación por uno
mismo que siempre crea desequilibrios que han de ser
corregidos.

ATMICO '] Servicio


BUDICO + Curación
MENTAL í] Psicometría planetaria
ASTRAL !] Psicometría
FISICO ? Tacto

Por supuesto a la radiónica le interesan dos


elementos principales de esta lista. El primero es el
sentido psíquico del tacto o psicometría, que es astral por
naturaleza; el otro es la curación, que está relacionada con
el plano de Cristo o el plano Búdico. La radiónica es, por
tanto, una técnica de curación astral-búdica. Ahora bien,
según las enseñanzas esotéricas, el primer sistema solar,
que hace ya mucho que se disolvió, se formó para estable-
cer mente y cuerpo, era un sistema solar físico mental. El
segundo sistema solar que se formó, que es el mismo en el
que ahora vivimos, está en proceso de desarrollar los com-

165
ponentes de sentimiento y amor de su naturaleza. En otras
palabras, vivimos en un sistema solar astral-búdico. Este
es el sistema de Cristo, y en él se están desarrollando las
cualidades de amor y sentimiento y, por lo tanto, es el
segundo componente de la Deidad el que predomina.
Si vivimos en un sistema solar astral-búdico, y la
radiónica es un arte curativo astral-búdico, no puedo sino
sentir que debe de tener un profundo valor en el esquema
de las cosas. La siguiente cita de Treatise on Cosmic Fire,
si esta bien acotado, revelara precisamente lo importante
que es este trabajo.

«Vale la pena la extensión del tacto del plano físico a


otros planos y ver a dónde nos lleva. Es la facultad que
nos permite llegar a la esencia mediante el reconoci-
miento del velo encubridor. Permite al Pensador que lo
utiliza plenamente, relacionarse con la esencia de todos
sus yos en todos sus estadios y por ello lo ayuda a evolu-
cionar en su velo y a servir activamente. Un señor de
Compasión es aquel que (mediante el tacto) siente,
comprende plenamente y se da cuenta de la manera de
corregir y curar las insuficiencias de su no-yo, y de esta
manera servir activamente al plan de la evolución. Del
mismo modo, deberíamos estudiar en esta conexión el
valor del tacto en la forma que muestran los sanadores
de la raza (aquellos que vienen de la línea de Bodhisat-
tava) y el efecto de la Ley de Atracción y Repulsión que
ellos manipulan. Los estudiantes de etimología habrán
notado que el origen de la palabra tacto es algo oscuro,
pero que probablemente significa «tomado con un rápido
movimiento». Aquí radica el secreto de este sistema
solar objetivo y aquí se demostrará el aceleramiento de
la vibración mediante el tacto. Inercia, movilidad, ritmo,
son cualidades manifestadas por el no-yo. El Ritmo,
Equilibrio y vibración estables se alcanzan mediante
esta facultad del tacto o sentimiento. Lo ilustraré bre-
vemente para aclarar un poco el problema. ¿Qué resulta
de la meditación?. A fuerza de hacer un esfuerzo enérgi-
co y prestar la debida atención a las normas estableci-
das, el aspirante consigue tocar una materia de una
cualidad más rara de lo que es costumbre. Entra en
contacto con su cuerpo causal, en el momento en que

166
contacta con la materia del plano búdico. Mediante este
tacto su propia vibración se acelera breve y temporal-
mente».

Cuando se habla de velo encubridor se trata de los


bajos cuerpos de la materia mental, astral y etérica. El
Pensador es el alma a su propio nivel. Si el practicante de
radiónica lee el pasaje anterior cuidadosamente y reflexio-
na, empezará a intuir su propio papel en el esquema
evolutivo de las cosas. Creo que la práctica de la radiónica
se verá un día como un método de entrenamiento que,
llevará al individuo a actuar como parte de ciertos grupos
que tendrán un papel que desempeñar en la Era Acuaria.
La radiónica se verá como la puerta a un método de
curación mucho más profunda. Dicen que esto se aplica a
otras zonas de servicio. Pensemos, por ejemplo, en los
bomberos de nuestras ciudades. A simple vista, el suyo
parece un trabajo mundano, pero se dice que al ser
entrenados para combatir el fuego y aprenderlo todo sobre
la naturaleza del fuego, el bombero se está preparando, de
hecho, para un servicio que tendrá efecto dentro de miles
de años, cuando el hombre tenga la necesidad de controlar
los elementos de fuego de los niveles más altos de concien-
cia. En la actualidad, hay en América tribus de indios que
- se especializan en la estimación de fuegos y se lanzan en
paracaídas por zonas montañosas para desempeñar esta
función. Su capacidad para controlar el fuego con un míni-
mo equipamiento es legendaria, obviamente tienen en sí
mismos esa habilidad para controlar fuegos elementales.
Con el tiempo el hombre se dará cuenta de que puede
controlarlos desde los niveles de su mente alta. Los
radioastrónomos con todo su conocimiento matemático
abstracto, se están formando según unas directrices que
les capacitarán para trabajar con los Señores de Lipika o
Señores del Karma. Este es un tema muy abstracto y no
pretendo exponerlo aquí detalladamente, sino sólo men-
cionarlo para ilustrar que cualquier trabajo o tarea que
realicemos, aunque pueda parecer insignificante, mundana
o quizás extremadamente aburrida, es un medio de
crecimiento interior y con el tiempo desembocará en un

167
servicio de gran importancia para la humanidad. Si
estudiamos la radiónica con atención, nos indicará clara-
mente según qué directrices y en que áreas de servicio se
mueve el practicante.
Si uno se aparta de la práctica estándar de la
radiónica que, básicamente, sólo considera los elementos
más ortodoxos, tales como los sistemas orgánicos, entonces
se hace posible relacionar la radiónica con elementos más
espirituales y filosóficos. Nos conduce, por ejemplo, hacia
los dominios del pensamiento oriental y nos induce a tener
en cuenta la anatomía esotérica del hombre; he apuntado
esto en Radionics and The Subtle Anatomy of Man. Si un
practicante empieza a diagnosticar en términos de chakras
y cuerpos sutiles, el resultado será la sensibilización de sus
propios sistemas a estos niveles; debe recordarse siempre
que "la Energía sigue al Pensamiento"... si diagnosticas los
chakras y se piensa en estos términos, como ya he dicho,
se sensabilizarán en el practicante estos sistemas. Esto
tiene, por supuesto, como resultado, el impulso de su
propio desarrollo interior de un modo equilibrado. Le
capacitará prescindir de cualquier forma de instrumenta-
ción radiónica, ya que a fuerza de trabajar duro en el
servicio a otros, llegará a darse cuenta de que sus sistemas
de energía son el mejor instrumento curativo que se ha
ideado nunca; capaz de detectar el más pequeño desequili-
brio en la salud del paciente, y puede seleccionar y trans-
mitir conscientemente las energías curativas necesarias.
Esto no es sólo un concepto teórico, hay practican-
tes que han alcanzado este punto y han desechado sus
instrumentos; practicantes que pueden, por ejemplo,
formular con una acción mental precisa las características
de un medicamento homeopático y proyectarlos mental-
mente en un aguijón, de modo que el aguijón no haga
efecto en la persona que ha sido picada. En el caso en que
estoy pensando, el aguijón hizo efecto unas horas después,
cuando el tratamiento proyectado mentalmente empezó a
desaparecer. Un posterior tratamiento hizo que el efecto
desapareciera de nuevo. Como puede verse, la radiónica
desarrolla el poder de la mente al igual que la capacidad

168
de visualizar claramente; ambos son de importancia vital
para alguien que sirva en el campo de la curación.
Hay un pasaje fascinante en Psychology of Botany
—Minerals and Precious de Charubel, que ilustra el
método que seguía para localizar mentalmente una planta
que necesitara para hacer algún tratamiento a distancia.

«Un día a un amigo le dieron repentinamente unos


dolores de carácter agudo y punzante en la parte baja
del pecho, y estos se iban extendiendo hacia abajo, por
el lado izquierdo. Y fui persuadido a situarme en un
estado de tranquilidad, tal como siempre hago cuando
busco una correcta visión de cualquier persona, sujeto o
cosa, diciéndome a mí mismo: "recorreré el inmenso
campo de la naturaleza", no tengo manías ni ideas
preconcevidas que intercepten la luz del cielo, "Miraré,
sí, miraré. Debe de haber un remedio para cada enfer-
mo, la venda debe ser tan grande como la herida". Tal
era mi fe entonces, y tal es mi fe ahora; y mientras siga
avanzando, ya me ha traído hasta aquí, hay muchas
probabilidades de que en el futuro me encuentre en un
lugar mucho más avanzado del que ahora me encuentro.
No había errado ni esperado mucho, cuando vi ante mí
un arbusto cubierto de flores amarillas sobre un follaje
verde. Primero pensé que era la Retama, pero después
- de una inspección más detallada me di cuenta de que
era Tojo; tan pronto como descubrí esto vi un aura de
color marrón que emanaba del arbusto, uní este aura
con el aura que envolvía a mi paciente, y al cabo de un
cuarto de hora el dolor había desaparecido. Poco tiempo
después de este suceso, cogí un fuerte resfriado, con
dolor en el oído; el dolor se hacía cada vez más fuerte.
Busqué de la misma manera que antes, y no pasó mucho
tiempo antes de que viera un Culantrillo; manipulé el
aura igual que antes y el dolor de mi oído izquierdo
desapareció y no volvió más.
Otro caso es el de una chica que sufría de una extrema
debilidad acompañada de una tos que parecía ser una
secuela de la escarlatina. Miré igual que antes y apare-
ció el Lumilde Liquen, el aura del cual era gris y roja.
Hice esto unos pocos días, de modo que en una semana
ya estaba curada».

169
Estos casos ilustran perfectamente el tratamiento
de un paciente que estaba presente, el tratamiento de uno
mismo y el tratamiento a distancia. Está claro que Charu-
bel usaba su mente para explorar el éter en busca del
remedio necesario, y a través del campo de éter, mediante
el poder de su mente y su capacidad visualizadora, unía el
aura de la planta y la del paciente. Estoy firmemente
convencido de que cualquier tratamiento radiónico que
incorpore un acto similar de visualización será mucho más
efectivo que la apresurada sintonización de una frecuencia
en el instrumento de tratamiento. Tanto el paciente como
el practicante se beneficiarán de la aplicación de un
método así a la radiónica.
Aunque con el tiempo quizás sea posible dejar los
instrumentos radiónicos de lado, es importante utilizarlos
mientras sean necesarios, ya que proporcionan al practi-
cante un enfoque sobre el que trabajar y son medios para
alcanzar un fin. Seria inútil precipitarse hacia el final y
desechar los instrumentos prematuramente. Análogamen-
te, podríamos pensar en algún artista abstracto impresio-
nista, como Rothko o Jackson Pollock. Rothoko pintó los
más bonitos bloques de colores imprecisos, y parecían
flotar en el lienzo. Por supuesto, Pollock es bien conocido
por su estilo de pintura, en el que literalmente arrojaba la
pintura sobre lienzos enormes y la dejaba gotear; esto
daba lugar a notables trabajos que fueron después compa-
rados y encontrados, idénticos en ampliaciones de las
células cerebrales. Lo que quiero decir es que estos dos
artistas alcanzaron este grado de expresión gracias a la
dura y disciplinaría escuela de arte representativo; sin esa
formación su arte abstracto hubiera carecido de contenido
o significado. Lo mismo se puede aplicar a la radiónica, es
esencial entrenarse y trabajar en este campo utilizando la
instrumentación disponible; mediante ello, se desarrolla la
"instrumentación" interior del practicante y, finalmente,
podrá descartar, como el artista, lo convencional y pene-
trar en los dominios de la abstracción y del uso único de la
mente superior.

170
Apéndices A-B-C

PARA PRACTICANTES
DE RADIONICA
de me. e a
tujarío y el nitro de
bol yuubá 34 218
sedi
po
Nue
Cont voncie >
incorpore
ut
edectiso quede ares rei obvidnmlaa ries,
—enstimtrument de trotominao, Van X pas
él pi ieaite > Dat ds res. de la
la eel q
tubtado añil y La fadiónica
Aroa con el tiPo: guishs sena
ipatrusa caños radiónivos de lado, es mp
UieBbtra> mas unosarios, e QUe proporcionwal p a
sario y caños sobreel :pue frubejarynon e
lencar on fin Lena iotól precipilares hacia el Soy.
pr -

E se E preomatorimegta Auldagamen-
to. podr! E e pame en als ki eridañas abatrerto upresdo-
uleta, eno Puelo Jdeción Fui. Rulbacica plutb dos
más eri repo de os lepricdioss,“ypra
Dos? 1 el ero. Per ufpuentó Fillach or berga coord
por vo eto: dí prEtna en 5 que Weralmenty ar
pintuss osbea bispros eormes y la dejibo goivbr;
EAT o ncssiiss brit jos que fuer después a yn
rados y apcontrados, Méstiara un anpiedopes
cálvioe cerobrajas. Leo que puesa cd e au
estirtas olcarsaron esta grada de pub
dura y disaciglis sio oler iO
reno art st arta abutrecio Exiinra cris de € . mn e
asghitado Lo raluno ¡s4 pirado alo ve e ln endiánica, e
escucial vnirearna y tnmbajur e 20 IDO et
mbr ratación disponible; modients
“instrumentación” En cti Snalmente,
podrá desciztar, coma el avisos.Ye as nt
traer o da domaREN 2
e
Minnie mpottoz, di
EN

E
1% Ñ E MVA"

a
A ¿E SS )
Ns $

EN
APENDICE A

FRECUENCIAS DE DROWN PARA UTILIZAR EN LA


POTENCIACIÓN CON CUALQUIER INSTRUMENTO
RADIÓNICO DE 0 A 10.

Minerales
Radio 834300 Plata 8343880
Oro 834803 Platino 834109
Plomo 8341609 Cobalto 8346003
Aluminio 8349799 Azufre 834446
Antimonio 834909 Hierro 834492
Mangeneso 83455 Silicio 83467
Fósforo 834695 Estaño 8341184
Yodo 834884 Carbono 83487
Sodio 83445 Zine 8345009
Cobre 83410837 Arsénico 8344999
Uranio 8349099 Potasio 834454
Magnesio 834871 Cal 8341753

Remedios
Acónito 901558 Cocaina 901206
Belladona 901498 Cicuta 9015239
Alcanfor 90180741

Gases
Cloro 6789301 Nitrógeno 6789721
Hidrógeno 6789169 Oxígeno 6789263

173
h
pd
u
silba
sl qu
Ai

ES e

o
.- Tell

o
3

SE ¿LS
id TEMA
. Ó y
E
APENDICE B

FRECUENCIAS DE DROWN PARA USAR CON EL


INSTRUMENTO PEGGOTY CUANDO SE TRATEN
PROBLEMAS DE LA COLUMNA O DE OTRAS
ZONAS DEL ESQUELETO.

Estados
Nervios alterados 90.63 Costillas fracturadas 90.7542
Agotamiento 60.93865 Abscesos lumbares 30.2987
Compresión médula 90.192297 Trauma 10.92
Fractura columna 90.784297 Artritis (reuma) 90.2
Ciática 40.351935 Sacro-ilíaca 40.2854374
Cartílago desplazado 40.35154 Esg. Col. Vertebral 70.599279
Tronco vert. nerv. 50.11109279 Spondylitis 10.92297
Nervios cervicales 70.74694542 Lumbago 40.599193

Huesos
Codo 84115 Cadera derecha 84479
Tobillo 841893 Cadera izquierda 84439
Dedos de los pies 84422 león 84374
Dedos de las manos 84895 Rodilla 84121
Pulgares 84891 Pelvis 84525
Costillas 84542 Omoplato 84397
Esternón 84263 Periosteo 359

Vertebras
Atlas 842823 Lumbar 84193
Cervical 84692 Sacra 84854
Dorsal 84183 Coxis 84188

175
turas
Tobillo 8491892 Muñeca 84910041
Rodilla 8493343 Dedo de la mano 849950
Dedo del pie 849422 Mandíbula 8491736
Sacro-ilíaco 849923 Vértebra 849546
Cadera 8491775 Hombro 8493323
Codos 84910043 Clav-esternón 849693
Vért. costales 849902 Costal-esternón 842503
Coccígeo 849248

Estructuras Musculares
y Ligamentos
Cartílagos 154 Sistema muscular 37472
Cartílago ensiforme 2382 Músculos 599
Cartílago de las cost. 2356 Músculo inter.costal 356
Cartílago semilunar 9003 Músculo involuntario 59980
Haces 104 Músculo voluntario 59918
Sistema de ligamentos 2843 Tendones 645
Ligamentos 854

176
APENDICE C

EL CONCEPTO DE UNA FRECUENCIA


TERAPÉUTICA DE CONJUNTO
En el capítulo seis se hizo mención de una carta de
frecuencia especial. Este apéndice se ha añadido para dar
algunos detalles más sobre su uso a los practicantes de
radiónica, especialmente a aquellos que tienen un número
elevado y creciente de consultas.
Es un hecho que los procedimientos CRA de
tratamiento radiónico pueden consumir una cantidad
notoria de tiempo y, a menos que el practicante tenga un
asistente, él o ella pueden llegar a un punto en el que
tendrán que dedicar una gran cantidad de tiempo a los
casos que ya tienen y no tendrán apenas tiempo para
nuevos pacientes. Esta dificultad surge frecuentemente del
aumento de la magnitud de los casos y del incremento de
pacientes.
Esto hace surgir la pregunta: ¿es posible tratar de
forma efectiva más pacientes en menos tiempo?. Cuatro
años atrás Malcolm Rae dedicó su atención a este proble-
ma y a través de sus investigaciones formuló el concepto
de Frecuencia Terapéutica de Conjunto (CTR). La idea era
que la frecuencia expresada en una carta debería dar un
amplio espectro de tratamiento correctivo para cualquier
paciente en cualquier momento y que ésta no debería
causar, en ningún momento, efectos adversos. Esta carta
llevaría instrucciones codificadas al paciente como un
campo de energía, para que éste supiera qué hacer para
restablecer el equilibrio del campo y, por último, del
cuerpo físico.

177
Ahora bien, uno no puede sentarse e idear una
frecuencia que abarque las frecuencias correctivas para
todas las enfermedades, superficialidades o deficiencias de
un golpe. Es un proceso progresivo y laborioso y Rae lleva
ya cuatro años trabajando en su frecuencia. Esto ha
llevado literalmente cientos de horas de trabajo para
refinar la frecuencia de la carta, añadiendo continuamente
nuevos factores conforme estos salen a la luz. En las
etapas iniciales de la investigación las cartas se cambiaban
frecuentemente, hoy en día, después de desarrollar, usar
y por último desechar unas 2000 cartas se ha llegado a
una estabilización evidente, con pocas alteraciones.
Hay muchas ventajas en la utilización de este
método de tratamiento y las expondré en el orden en el
que aplican. En primer lugar, la carta se usa para proyec-
tar el tratamiento directamente después de que se hayan
hecho todas las lecturas "promedio" y "peor punto" de los
sistemas del paciente. Esto tiene el efecto, que antes men-
cioné, de "quitar la espuma” y el reanálisis siguiente de los
"peores puntos" de una clara indicación de la pauta funda-
mental del desorden en el paciente.
Usando la proyección CTR diariamente, el practi-
cante tiene más tiempo que dedicar a la búsqueda de los
específicos que cada paciente pueda necesitar, en forma de
remedios orales, medicinas homeopáticas, sales de los
tejidos, vitaminas o minerales. O buscar cualquier proyec-
ción radiónica especial que pueda necesitarse. La experien-
cia muestra, de todos modos, que una vez el paciente está
siendo tratado con el CTR raramente necesita otros
remedios o proyecciones y eso ciertamente le ahorra mucho
tiempo y energía al practicante. Los remedios orales se
prescriben de una fuente apropiada.
El Simulador de Potencia se utiliza para estas
proyecciones CTR. El Simulador puede equiparse con un
interruptor de campo magnético y un interruptor de
tiempo. Esto se une a un proyector de diapositivas automá-
tico de 33mm. Las muestras del paciente se colocan en dia-
positivas de 35mm. y se colocan en la bandeja de las
diapositivas, que preferiblemente tendrá una forma

178
circular ya que acogerá más diapositivas y volverá a la
primera automáticamente cuando todas las muestras del
paciente se hayan aproximado a la sonda que proyecta la
energía del CTR.
De esta manera, todos los pacientes recibirán
tratamiento diario de forma automática y Rae lo encuentra
un método efectivo para él y que le deja tiempo para tratar
nuevos pacientes y acudir a las emergencias que puedan
darse, por no hablar de una investigación más avanzada
en el campo expansivo de la radiónica.

179
de: pa Flu proowea ES ce
¿3 Sa ] , ee stes :
HO 1

E. exi ñ < - , pde or


iÍ NN a
abs proto e pp iran po o
MÓRA iaa, Winrar, edad 00, 10 e. >
Hreenvutaniente, hoyoiatiberal ph arica. ... Pl? +
a y par úllimo desecher unas 2000 cartes > ha Hopudo a A
> eta són evicionte, cub poble dltoraciones, e.
e Hay muchas rentas en In titUimación de orde R
% — bdo de tribamilento y los expande en el:rienpe e eN:
' qué sal sn En polmer logar, la carta se yaa para proye> ea
E tar el trotemmiento direclamenteo dinpuds, des que se has
2% hecho tores |las lactoras “promedio y "0 iumbi” de los

.
-— ctas del gocia nte Vito enoel efecto, que antes min
e?
ey
1 doné, de” qular la Sepulps elf aóbieía ajpitento de Lo
+ peores pusios" de ua elasra dicción e la parta funda. 3
j ¿premia. dál dí in el pariente,
Usando la proyección ("BR dHeriarcente, ui prueti-
4! 7
AA
"
¿tuplas Lion ó más Tiempo gut dedicas a ] ' búspued: delos >. 5,
£
, opociflcos quescda paciente par ras fer, enTocina
loci de as
*
5 y IC dios ormles mediar Lamecpd JenD, yu de Ye:e

Pido, vita RAE ser ee ep h


med niñ. O bus ee
ire
TU

ml le tueste yde todos paros ¿qué una ¿e


pete
“tiendo Era cón el STE Yeriuente máctaito,
h Los a onús y so cierre Te aho
pS "Hempo y ef Fa elpeana Ex
ñEN pesesritn de yaa fundieaproplala
% "EL Simulados de Pote 0y
d
pe E 3 yn Pata as 1 Y e, a Busulados y
el $e drupta. du caro ph maga: aP
Je Y ¿po. Entp ue bs a Ub.
; Pae de Mm. La muciras
LISTA DE ILUSTRACIONES

LOS CUERPOS SUTILES DEL HOMBRE EN LOS


CAMPOS DE ÉTER ... ¿ooo «o 25
LA GRÁFICA PSIÓNICA ....oooooccococo oo 56
SÍMBOLO DEL VÍNCULO ETÉRICO GEOMÉTRI-
CO: editado. loe ERAS EROSí e. 68
CORRIENTE DE ENERGÍA DEL PRACTICANTE
ALPACIENTE: 06 3 ERAScia 69
CORRIENTE DE ENERGÍA DEL PACIENTE AL
PRACTICANTE ........ AE 70
CORRIENTES DE ENERGÍA COMBINADAS EN-
TRE PRACTICANTE Y PACIENTE ..... 70
DETALLE DE UN MODELO DE CAMPO-PSI ... dl
ESQUEMA DE LA POLIGLICINA 2 (Vista Frontal) 74
RELACIÓN ENTRE LA DOBLE HÉLICE DEL
ADN Y EL VÍNCULO ETÉRICO GEOMÉ-
Pa A On ys > 75
SEXTO ESTADIO DE LA DIVISIÓN MEIÓTICA . 76
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DROWN (LA RE-
GIÓN DEL PLEXO SACRO) ........... 93
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DROWN (QUISTE
HIDÁTICO EN HÍGADO) ........... b.: 95
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DROWN (CÁN-
CER,DE HÍGADO) DA vadid. 0 0 es 97
FOTOGRAFÍA RADIÓNICADE DROWN (FOTO-
GRAFÍA POSTQUIRÚRGICA-ABDOMEN) 99
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DROWN (INS-
TRUMENTOS QUIRÚRGICOS FOTOGRA-
FIADOS A 6000 MILLAS DE DISTANCIA) 101
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DROWN (LA

181
GLÁNDULA PINEAD) 2
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DE LA WARR DE
UN EMBARAZO DE TRES MESES ..... 104
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE TUBERCULOSIS
DELOS PULMONES 1 dua ds 105
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE UN TUMOR CE-
REBRAL ALI 041d4. A. NL ATI. 105
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE ENDOCARDITIS 106
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE OBSTRUCCIÓN
INTESTINAL cdo taa cia 106
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE UNA FÍSTULA
RECTAL QUE SE ESTÁ TRATANDO A
DISTANCIA +... HATAAD LOTMAT.... 107
FOTOGRAFÍA RADIÓNICA DE DE LA WARR
DEL REMEDIO DE MADRESELVA DEL
DOCTOR BACH ari ad 108
INSTRUMENTO SIMULADOR DE POTENCIA
RAE «0 .10nerags AAA IA A 124
CARTAS SIMULADORAS REPRESENTANDO RE-
MEDIOS HOMEOPÁTICOS ........... 125
INSTRUMENTO PREPARADOR DE POTENCIA
RAEIVJIIAS Y ATMELQITIAR LAT... 129
TABLA ANALÍTICA DE LOS CHAKRAS ....... 135
TABLA ANALÍTICA DE LOS SISTEMAS ORGÁNI-
COSITA. INTO Al, ATT MOLA 136
EL INSTRUMENTO DE TRATAMIENTO PECG-
COTY daria id
LA METAFASE DE LA DIVISIÓN CELULAR

182
LECTURAS SUGERIDAS

The Chain of Life por Dr. GUYON RICHARDS. C. W.


Daniel.
Forces and Fields por MARY HESS, MSC., PHD. Little-
field Adams. :
Galaxies of Life editado por Dr. S. KRIPPNER € D.
RUBIN. Interface.
The Human Aura por Dr. W. J. KILNER. University
Books.
Keeley and his Discoveries por C. BLOOMFIELD MOORE.
University Books.
The Loom of Creation por Dr. DENNIS MILNER ¿: E.
SMART. C.W. Daniel.
The Odic Force por KARL VON REICHENBACH. Univer-
sity Press.
The Pattern of Health por Dr. AUBREY WESTLAKE,
Shambhala.
The Principles of Light and Colour por E. BABBITT.
University Books.
Radionics and the Subtle Anatomy of Man por DAVID V.
TANSLEY. C. W. Daniel.
Radionics, Radiesthesia and Physic por WILLIAM A.
TILLER, PHD.
Report on Radionics por EDWARD RUSSEL. C. W. Daniel.
Telepathy and the Etheric Vehicle por ALICE BAILEY.
Lucis Press.

183
UN EMPARADO DI cs
FOOG EAzÍa ALÍÓNICA pe TUN
pe pl
Al cm Ñ rán

FOTOGR

IN ESPTANAL E AA
ELA

Fa.
00 AD QUROT O > EEE
DISTANCIA +. AE, 14d

AN Ds ¡ER AAA lo |
DEL REMEDIO DE ) 7
¡de o)URNTO pa a 5 0% ES
AE HINA aL. a:
pd ¡ULADORAS RD ES p UNTAR
> clio

ai a y
EII

D
INRUMENTO -E REA
34 INRIIA Ei a
fea

TABLA ANALÍTICA DEPLOS o


ON >rd 0
Y id E Si COLA: MT TE

- MORAGA Ga a NS
ne . ei ES .- E

P..? ¿3
. IATA,
GOTY
R
eS > my mE alo PA
»)Le MERARASE Di pi
Y UIVAS og Ms «rro Sid de
di Na AO
MA MALLIW xq ag bnoa
AA
beis WI JABRUA ATA WO a
"de AAA OLÍA 104$

pe a
pA e
É pl
E Xx É j E e po:] el e

VE REA pr Bi:
5 y E
. ATA AA

h pr . ó >? pl Al ee
Ñ oa de 0 ¿O >
1' de Ñ se ae di 28
5]

A » xl
O
AN CES
pe

o Ñ 3
Ñ , 13

1 MN e '
FUTHARK. MANUAL DE MAGIA RUNA
Edred Thorsson
DESCUBRA SU FUTURO
Merlín
EL PSIQUICO PRACTICO
Friendlander-Pearson
HERMANDAD DE LA ROSA-CRUZ
A.E.Waite
CICLOS DE REENCARNACION (Espiral de Vida)
Mona Rolfe
EL LIBRO DE LOS REMEDIOS
Fray Anselmo
EL ORACULO DE SALOMON (o el Libro de los Destinos)
Radezki
GRAN ORACULO
R.G.Gelpi
TALISMANES (Su Preparación, Uso y Poderes)
Anónimo
EL LIBRO DE LA ESFERA MAGICA
(Métodos Prácticos de Comunicación con los Espíritus)
Anónimo
LA SANTA CRUZ DE CARAVACA
(Nuevo Tesoro de Oraciones)
Anónimo
ISIS SIN VELO (4 Tomos)
H.P.Blavatsky
DIOSES, MITOS Y HEROES (Orientales)
Anónimo
DIOSES, MITOS Y HEROES
(Escandinavos, Celtas, Iberos, Americanos)
Anónimo
LOS CUATRO EVANGELIOS
SEGUIDOS DE LOS MANDAMIENTOS
Los Cuatro Evangelistas
LAS CLAVICULAS DE SALOMON
Anónimo
EL LIBRO DE ORO DE SAINT GERMAIN
Conde de St. Germain
ASTROLOGIA PRACTICA
Conde de St. Germain
MISTERIOS DESVELADOS
Conde de St. Germain
EL SEPTIMO RAYO
, Conde de St. Gemain
YO SOY. (La Mágica Presencia)
Conde de St. Germain
Ñ

Este libro explora el acoplamiento que-existe entre el


campo de energía humana y el campo de energía univer-
sal en el que vivimos. Muestra como estos campos se
pueden utilizar para el diagnóstico y el tratamiento a
distancia. Ilustra también el camino más efectivo y seguro
para mejorar un defecto en cualquier sistema biológico,
modula la interacción e interdependencia de los campos
de energía por el campo de los chakras.

Los mismos campos de energía pudieron ser utilizados


para tomar fotografías de objetos distantes, en particular
la estructura energética de los tejidos vivos luminosos y
los estados patológicos que existen en ellos. Los modelos
vibratorios y la potencia de los remedios homeopáticos
también pueden ser dibujados de los campos de éter e
impregnados dentro de sustancias neutras, tanto en
solución acuosa como de alcohol, que tiene una pacta
de memoria.

La Radiónica es un arte de curación que une el mundo


físico con los mundos invisibles más allá de los sentidos
físicos. La diagnosis sondea los niveles de las causas de
la enfermedad; la terapéutica es noble y no invasiva. Las
fotografías Radiónicas, tomadas a través de miles de -
kilómetros, ilustran los descubrimientos de los prácticos.
La simulación de remedios homeopáticos proporciona un
método único de recogimiento de energía de curación que
será específico para las necesidades del paciente. La
aplicación teórica y práctica de estos conceptos está
ampliamente tratada en este volumen.

ISBN 84-7910-116-4

EDITORIAL FUMANIAS 9788479101169

También podría gustarte