Hoy en día la actitud que adoptamos en la toma de decisiones es fundamental

para nuestra vida, hay decisiones que son más sencillas que otras, como por
ejemplo, elegir qué color de ropa utilizar o una decisión más complicada como
¿debería montar una empresa? Entonces, independientemente del grado de
complejidad de las decisiones la actitud que tomamos frente a ellas puede ser
elemental para el resultado que deseamos obtener de estas. A continuación, se
desarrollaran algunos puntos acerca de la actitud y la toma de decisiones y
previamente mi opinión acerca de los mismos. Ahora bien, se define la toma de
decisiones como “la selección de un curso de acciones entre alternativas, es
decir que existe un plan un compromiso de recursos de dirección o reputación.
Un aspecto verdaderamente importante en la toma de decisiones es el grado
de comunicación y la aplicación del arte de escuchar.”
https://www.gestiopolis.com/toma-decisiones-solucion-problemas-administracion/. En
este sentido, la forma en la que nos relacionamos con las otras personas para
expresar nuestras ideas es fundamental para facilitar el proceso de la toma de
decisiones. Del mismo modo, veremos de qué forma podemos afrontar la toma
de decisiones “Lo primero que hay que hacer, es pensar de una forma positiva
acerca de nuestra capacidad para decidir. Pensar de una manera positiva nos
ayudará a: Ver las cosas como retos, como desafíos, Saber que siempre se
puede hacer algo ante los problemas, buscar soluciones (solos o con ayuda),
Sentirnos mejor con nosotros mismos, más capaces, más seguros.”
https://www.segg.es/media/descargas/Tomar_decisiones.pdf Esto quiere decir, que
en ocasiones como personas nos sentimos limitados o estresados por alguna
decisión que debamos tomar, si vemos las cosas como desafíos y nos
mentalizamos que podemos conseguirlo los resultados pueden ser eficaces,
tener una actitud positiva puede ser la clave del éxito. Continuando, ¿Qué
podemos hacer para tomar decisiones? “Ser lo más concreto posible. Hay que
analizar y encontrar cuáles son las cuestiones importantes y cuáles no, Buscar
soluciones. Se trata de ver todas las posibilidades existentes en relación con la
cuestión que hemos de resolver, Elegir la solución que más nos convenga para
lograr el resultado que buscamos, Pasar a la práctica. Hasta ahora hemos
pensado, ahora hay que poner en marcha nuestra decisión, Comprobar cómo
nos ha ido, para rectificar en caso de que los resultados no hayan sido los
esperados.” https://www.segg.es/media/descargas/Tomar_decisiones.pdf Entonces,
con el fin de tomar una o varias decisiones es esencial que tengamos como
prioridad los aspectos más importantes que engloban nuestra decisión de
manera que sea más fácil alcanzar nuestros objetivos. Así como también,
seleccionar la opción más conveniente para obtener resultados positivos, poner
el plan en acción y comprobar que los resultados hayan sido los esperados y
en caso de que no, tomar una actitud positiva y volver a buscar las opciones
más convenientes. Para finalizar podemos decir que a lo largo de nuestras
vidas nos vamos a encontrar con retos y decisiones que no son para nada
fáciles, podemos encontrarnos en medio de situaciones estresantes y para
nada agradables. Aunque, sea cual sea nuestra situación la forma en la que
nos comunicamos con otros individuos y la manera en la que vemos las cosas
puede agilizar todo el proceso que conlleva tomar una decisión. En ocasiones
es necesario tomarnos un tiempo para pensar las cosas de una mejor forma y
buscar las soluciones pertinentes en caso de que haya algún problema. No
olvidemos que centrarnos en la solución es más importante que centrarnos en
el problema.