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La leyenda de La loica

Hace mucho tiempo en el rio Chillan, existía un pájaro llamado loica que era
completamente negro. Esta ave acostumbraba a volar por todo el rio Chillan
mientras de lo alto miraba a sus huevos en el nido, pero sucedió que un día ella
fue por comida y se paró en la rama de un árbol, cuando de repente la
atraparon unos cazadores, la pusieron en una jaula, la subieron a un bote
y se la llevaron al pueblo Tirúa, que ella desconocía.

Luego de intentar salir de la jaula 10 veces, se rindió. Uno de los cazadores


sacó a la loica de la jaula y la metió en un porta pájaros, ella se
preguntaba:¿Cómo estarán mis huevos?, sin saber ni entender qué hacía allí,
en ese lugar tan extraño. Más tarde escuchó a las personas decir que
dentro de 5 días iba a ver una pelea de pájaros. La loica tenía miedo, no
quería ninguna pelea. Se puso triste porque en 15 días más nacerían sus
polluelos y no sabía qué hacer.

Llegó el día de la pelea, luchó, luchó pero no ganó, solo consiguió romperse el
pecho del que le salía mucha sangre, manchándose cada vez más y más sus
negras plumas. Los cazadores no se dieron cuenta de aquello porque estaban
esperando preocupados del dinero de las apuestas de las peleas, no les
importaba nada más. La loica a pesar de estar herida en un descuido logró
escapar pero no sabía el camino de regreso a casa y no le quedó más que
volver con los cazadores. Los hombres notaron su tristeza y su intento de huída
sin éxito y decidieron que tenían que devolver a esa pobre ave de donde la
sacaron. La curaron y trataron de limpiar sus plumas pero su pecho quedo
manchado de rojo por la sangre de su herida.

Finalmente regresó a su hogar y volvió con sus huevos, cuando rompieron


los polluelos el cascarón, salieron con la mancha roja en el pecho ,igual que su
madre. Desde ese momento las loicas tienen el pecho rojo para simbolizar la
esperanza y el amor de las aves madres por sus hijos polluelos.

Fin.

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