Harley - La vida es genial.

Estoy sano y feliz, disfrutando cada día

con mi dulce y atrevido Finn a mi lado. Jake se está graduando de la
universidad y está comenzando su nueva carrera, y en unas pocas
semanas, Finn y yo nos uniremos como esposos.
Pero nunca falla que justo cuando menos lo esperas, la vida te 2
arrojará una bola curva. Sin embargo, no importa a lo que nos
enfrentemos: encuentros incómodos con familiares separados,
recuerdos dolorosos, discriminación, estoy seguro de que Finn y yo
podemos superar la locura juntos y encontrar el camino hacia nuestro
feliz para siempre.
03/2020
 3

03/2020

Jayda Marx

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Head over heels or head over heels in love - Si estás enamorado o enamorado, estás
muy enamorado. Juego con Wheels (ruedas) por la silla. Loco enamorado sobre ruedas,
Locamente enamorado sobre ruedas
 Nota del Autor

Todos sabemos que nada puede interponerse entre el adorable

Harley y su gran corazón, Finn. Este es un libro libre de angustia, se
siente bien siguiendo a Finn y Harley durante su boda y luna de miel. 4
Contiene risas, descaro, dulzura, y por supuesto muchos momentos
sexys entre una de mis parejas favoritas. Incluso hay algunas
sorpresas de sus familiares y amigos. Espero que disfrutes leyendo
esto tanto como yo disfruté escribirlo.

03/2020
 Capítulo Uno

Desperté y estiré mis brazos sobre mi cabeza antes de alcanzar a

Finn, solo para sentir un montón de mantas frías a mi lado. Apreté los
oídos y escuché el leve ruido de sartenes en la cocina y sonreí; mi 5
dulce hombre estaba preparando el desayuno para mí otra vez. La
mayoría de las mañanas comenzaron cuando Finn me traía el
desayuno a la cama. Nunca tomé las comidas por sentado; sabía lo
malcriado que estaba.
Me incorporé para sentarme contra la cabecera y sonreí al ver el
gran retrato que Finn y yo habíamos encargado el mes pasado 03/2020
colgado en la pared opuesta. Finn originalmente quería mostrarlo en
nuestra sala de estar para que todos nuestros visitantes lo disfruten.
Bueno, 'todos nuestros visitantes' solo equivalían a mi primo Jake,
que estaba menos que extasiado por tener un ojo en el culo de Finn
cada vez que venía, por lo que la pintura terminó en nuestra
habitación.
Solo puedo imaginar cómo reaccionaría Jake al retrato si el artista,
Jason, hubiera seguido la visión original de Finn; básicamente una
impresión pornográfica de nosotros a mitad de la cogida. Mi
prometido insistió en llevar el anillo de pollas que llevaba durante el
sexo al estudio de Jason, e incluso le preguntó al artista si le
importaría entrar a otra habitación mientras Finn me 'volvía a
levantar' si era necesario durante las largas horas de modelaje.
 Una vez que la mirada de puro terror abandonó los ojos de Jason y
el enrojecimiento desapareció de su rostro, sugirió una pose
diferente. Aceptó la desnudez total, lo que apaciguó a Finn, pero dijo
que no quería que un acto sexual fuera el foco de la pieza; más bien,
quería capturar el amor entre nosotros. Finn lloró durante diez
minutos sobre lo hermoso que sonó. Luego se quitó la ropa sin
vergüenza, listo para comenzar.
Pero Jason no estaba listo. Tuvo que ajustar la iluminación,
configurar su caballete y recoger pinturas. Entonces, Finn lo siguió y le 6
hizo cientos de preguntas sobre él y su arte; todo mientras estaba con
el desnudo-culo-desnudo. Jason no parecía desanimado por la
desnudez de mi prometido. Probablemente había pintado a cientos
de personas desnudas, y su actitud despreocupada mantuvo a raya
mis celos y nervios por mi propia desnudez. Sin embargo, esperé
hasta que Jason estaba listo para comenzar antes de quitarme la 03/2020
ropa.
Cuando todo estuvo dicho y hecho, terminamos con una hermosa
pintura mía sentado en una silla de madera con Finn a horcajadas
sobre mi regazo. Sus dedos estaban enterrados en mi cabello en
cascada y nuestras frentes apenas se tocaban mientras nos
mirábamos a los ojos. Jason pudo capturar el intenso amor que
sentimos el uno por el otro en el lienzo. Y aunque no estábamos a
medio coito, la pintura era increíblemente sexy. En más de una
ocasión, entré en la habitación y encontré a Finn mirando el lienzo
con la polla en la mano. Por supuesto, eso siempre nos llevó a
momentos sexys para los dos. Básicamente, ese retrato fue la mejor
compra que hice; atado solo con el anillo de compromiso de Finn.
Me llamó la atención la vista de la puerta del dormitorio abriéndose
y un desnudo y sonriente Finn entrando en la habitación. Estaba
desnudo la mayor parte del tiempo en estos días, solo se vestía si
salíamos o si tenía que ir a trabajar al salón. Él había reducido sus días
a tres días a la semana porque estábamos muy ocupados con nuestro
trabajo desde nuestra oficina en casa para diseños inspirados y la
campaña publicitaria para el sitio web de citas que habíamos creado.
Finn todavía amaba su trabajo en la peluquería, pero ahora que
tenía un segundo trabajo, no estaba estresado por construir clientes o
trabajar hasta la muerte para llegar a fin de mes. Pudo relajarse más y
disfrutar de su carrera. Y quedarse en casa y más desnudo conmigo, 7
así todos fueron ganadores. Bueno, excepto el pobre Jake, que había
pisado a Finn muchas veces mientras bailaba para mí, me hizo volar, o
simplemente estaba tumbado sobre el sofá. Jake siempre llama antes
de visitarnos ahora.
—Buenos días, bebé, —dijo Finn alegremente mientras entraba a la
habitación y se dejaba caer en la cama a mi lado. —¿Cómo has 03/2020
dormido?
—Genial—. Robé un beso antes de tomar el plato que me ofreció,
que estaba lleno de panqueques cubiertos de almíbar y... algo más. —
¿Eso es mantequilla de maní?
Finn asintió con la cabeza.
—Pensé que podrías necesitar un aumento de proteínas después
de anoche—. Él levantó las cejas hacia mí y una sonrisa cálida
apareció en mis labios cuando recordé los acontecimientos de la
noche anterior; Finn me chupó en la ducha antes de acostarse, y
luego me despertó alrededor de la una de la mañana porque había
tenido un sueño sexy y estaba muy nervioso. Me montó como un
rodeo hasta que ambos explotamos y nos desmayamos.
Finn resopló una carcajada y empujó su hombro contra el mío.
 —Me encanta esa sonrisa, muchacho sucio, pero será mejor que
comas antes de que se enfríe.
Le di un mordisco y gemí con aprobación. El sabor de la mantequilla
de maní se mezclaba perfectamente con la dulzura del jarabe.
—Esto es delicioso, —le dije antes de meter otro bocado en mi
boca. —Gracias, cariño. Me malcrías, muchísimo.
—Es mi derecho como tu prometido, —respondió, dándome una
mirada que me desafió a estar en desacuerdo con él. Lo sabía mejor
que eso. 8
—Bueno, aprecio todo lo que haces por mí. Nunca espero que
hagas nada, pero espero que sepas cuánto significa todo para mí.
—Y es por eso que te mimo—. Me dio un beso almibarado en los
labios y nos acomodamos en un cómodo silencio mientras
terminamos nuestro desayuno. Justo cuando nos tragábamos
nuestros últimos bocados, sonó el teléfono de Finn. Lo tomó de su 03/2020
mesita de noche y jadeó. —¡Es la panadería de Lola! ¿Recuerdas para
la que dejé un mensaje el otro día?
¿Cómo podría olvidarlo? Finn había estado planeando nuestra boda
sin parar desde que me propuse, y estaba especialmente emocionado
por organizar una degustación de pasteles con Lola. Había escuchado
de alguien en el salón que era la panadería principal dentro de cien
millas de nosotros, así que estaba decidido a pedirles nuestro pastel
de bodas.
Finn apresuradamente colocó nuestros platos en la mesita de
noche y agarró mi mano con la suya mientras contestaba la llamada
por el altavoz.
—¿Hola?
—Hola, soy Maggie de Lola's Bakery. ¿Es este el señor Becker?
 —Lo es, —respondió Finn, rebotando de emoción en el colchón a
mi lado.
—Genial, solo estaba llamando para organizar una degustación de
pastel contigo y tu prometido. Tenemos algunas vacantes la próxima
semana; ¿jueves y tarde a las cuatro te funciona?
Finn me miró con los ojos muy abiertos. No podía pensar en nada
más que tuviéramos, así que asentí.
—¡Eso es perfecto! —Él movió su trasero contra las mantas,
haciéndome reír. 9
—Está bien, te tengo en nuestro libro. Sabes, es bueno que un
novio llame para cambiar. Tu prometida debe estar feliz de que estés
tan involucrado.
—Mi Harley me deja tomar la iniciativa en la planificación, —
explicó, dándome una dulce sonrisa. —Compruebo con él para
asegurarme de que está contento con todo antes de que yo decida, 03/2020
pero ha sido maravilloso al dejarme tener lo que quiera—. Me dio
otro beso y descansó su cabeza sobre mi hombro.
—Oh—. La voz de Maggie de repente no fue tan agradable como lo
fue hace un momento. —¿Dijiste 'él'? ¿Como en... dos novios?
—Sí, —respondió Finn alegremente. —Pero no queremos un pastel
de novios ni nada de eso. Solo un jodido pastel de bodas increíble.
—Voy a tener que cancelar su cita, Sr. Becker, —insistió Maggie
severamente.
Finn jadeó y levantó la cabeza rápidamente.
—Oh Dios, ¿es porque dije “jodido”? Lo siento, mi boca se escapa
de mí a veces. Cuidaré mi lenguaje.
—No, es porque Lola's Bakery no aprueba los matrimonios del
mismo sexo.
 La expresión de Finn se transformó de preocupación a furia en un
segundo piso.
—¿Qué quieres decir con que no apruebas nuestro matrimonio? No
necesito tu permiso para amar a un hombre, y hay una ley vigente
que hace que mi matrimonio sea tan legal y respaldado como
cualquier pareja heterosexual en el matrimonio del país. Así que tu
opinión significa, precisamente, una idiotez. —Tomé la mano de mi
hombre con orgullo.
—Tenemos derecho a negar el servicio a las parejas del mismo sexo 10
porque no reconocemos sus uniones deplorables, —respondió
Maggie.
—Si tu exterior es tan feo como tu interior, apuesto a que tampoco
distingues tu cara de tu culo, —espetó Finn, haciendo que Maggie
jadeara. —¿Sabes qué? Me alegra que canceles nuestro servicio. No
me quedaría con un pastel de bodas de una fanática tan grande, 03/2020
aunque me pagaras.
—¿Cómo te atreves a llamarme perra? —Rugió ella.
—No lo hice, Margaret, —dijo Finn con una sacudida en la cabeza.
—Te llamé fanática; búscalo, pero creo que el zapato de perra
también te queda bien, así que adelante, átate esa mierda y úsala. —
Cerró la llamada y arrojó su teléfono hacia el final de la cama.
Después de algunas respiraciones profundas y enojadas, Finn se
volvió hacia mí con ojos llorosos. —Lo siento mucho, bebé. Quería
que tuvieras el mejor pastel de bodas.
—Oh, Finn—. Lo envolví en mis brazos y acuné su cabeza en mi
cuello mientras él sollozaba. —Cualquier pastel que consigamos será
el mejor porque será nuestro—. Él asintió contra mí y froté círculos
sobre su espalda. —Siento lo que te dijo, cariño.
 —Nos lo dijo a los dos—. Finn levantó la cabeza y me dio una
sonrisa triste. —Simplemente no entiendo. El que nosotros seamos
gay no hace daño a nadie. El hecho de que nos casemos no hará que
otros matrimonios sean menos importantes o válidos. Te amo tanto
como cualquier esposa podría amar a un esposo o viceversa. —Él se
encogió de hombros. —Probablemente más porque soy un poco
obsesivo.
Me reí entre dientes y besé su frente.
—Y no te tendría de ninguna otra manera. 11
Finn lanzó un suspiro.
—Iré a lavar los platos para que podamos prepararnos.
Hoy fue un gran día; Jake se estaba graduando de la escuela de
paramédicos. Había trabajado duro durante dos años mientras se
preparaba para la universidad, sin mencionar que también trabajó
todo ese tiempo en la fábrica. Finn y yo estábamos extremadamente 03/2020
orgullosos de él y no podíamos esperar para celebrar su éxito. Solo
desearía que este desastre de la panadería no hubiera deprimido a
Finn.
—Te ayudaré a limpiar la cocina, —le ofrecí, pero Finn sacudió la
cabeza.
—Está bien; limpié mientras cocinaba, así que solo son nuestros
platos. Además, sé que debes ir a cagar de todos modos.
Hace tres meses, esa frase me habría mortificado. Finn no tardó
mucho en mudarse conmigo para conocer mi horario, y eso incluía el
mantenimiento urinario e intestinal. La primera vez que lo mencionó,
pensé que moriría de vergüenza. Fue entonces cuando Finn me
recordó:
—Todos cagan; incluso escribieron un libro para niños al respecto.
Entonces, ¿por qué un hombre adulto se avergüenza de las funciones
corporales naturales? ¿Es porque involucra a un agujero? Porque te
recordaré lo que le haces al mío si me necesitas.
Desde entonces, he estado en paz con Finn sabiendo algo y todo
sobre mí; horarios y todo. Además, saber que todo va por buen
camino le ayuda a no preocuparse por mí después de mi incidente
con el cálculo renal y la infección. Me sorprende cómo me quitó todas
mis inseguridades en tan poco tiempo. Probablemente ayude que
nada avergüence a Finn. En cualquier caso, me siento tan relajado,
libre y natural a su alrededor. Sinceramente, no sé cómo sobreviví 12
tanto tiempo sin él en mi vida.
Me ocupé de mi negocio, pero Finn todavía estaba atado en la
cocina, así que empecé a ducharme, esperando que se uniera a mí.
Me trasladé al banco de la ducha y esperé unos minutos. Cuando él
no apareció, seguí adelante, limpié mi cuerpo y cerré el agua. Me
sequé (lo que fue mucho menos divertido que cuando Finn me seca 03/2020
después de cada ducha) y volví a mi silla de ruedas. Estaba
empezando a preocuparme, así que doblé mi toalla sobre mi regazo y
me dirigí a la cocina.
Encontré a Finn apoyado contra el mostrador de la cocina,
encorvado sobre su teléfono. Sus labios se aplastaron a un lado en el
pensamiento mientras se desplazaba, y ni siquiera se dio cuenta de
que entraba.
—¿Estás bien?
Sus ojos se volvieron hacia mí y una amplia sonrisa cruzó su rostro.
—Esto es ahora. Maldición, nunca me canso de ver este cuerpo
sexy—. Quitó mi toalla de mi regazo y se acomodó en su lugar. —Mm,
eres tan cálido y hueles tan bien—. Tomó un gran suspiro de mi cuello
y se acurrucó más profundamente en mi regazo. —Lo siento, me
perdí la ducha, no me di cuenta de que había estado aquí tanto
tiempo. Terminé los platos y luego encontré algo interesante. —
Volteó su teléfono para que pudiera ver la pantalla.
—¿Los pasteles de Anthony? —Pregunté, leyendo el título en la
página web.
—Sí, estaba bastante molesto por lo de Lola, así que recurrí a las
redes sociales y pedí sugerencias para un buen panadero. Algunas
personas recomendaron a este tipo, así que estaba mirando la página
de su panadería. Es un pequeño negocio local, pero todos dicen que
sus pasteles son deliciosos. 13
—¿Por qué no lo llamas, cariño? —Esperaba recibir buenas noticias
y una pista sobre un pastel de bodas lo animaría. Por supuesto, si el
tipo fuera un imbécil, mi dulce hombre estaría aún más molesto, por
lo que fue una especie de disparate.
Finn respiró hondo y asintió.
—Está bien—. Golpeó el número en el sitio web y una vez más 03/2020
encendió el altavoz del teléfono.
—Los pasteles de Anthony, este es Anthony, —sonó una voz alegre
sobre la línea. —¿Cómo puedo ayudarte?
—Hola, Anthony. Mi nombre es Finn y estaba llamando para ver
cómo organizar una degustación de pastel de bodas para mí y mi
prometido.
—¡Ok, genial! ¿Cuándo querías entrar?
—Tan pronto como sea posible.
—Veamos aquí... —Un susurro sonó antes de que Anthony hablara
de nuevo. —Está bien, estoy lleno mañana, pero tengo una apertura
para el lunes a las seis de la tarde. ¿Cómo suena eso?
Finn me miró y asentí.
—Suena genial. Pero antes de reservar, necesito preguntarte algo.
—¿Qué es?
 —Mi prometido y yo tenemos pollas. ¿Será un problema para ti? —
Preguntó Finn sin rodeos. Me tapé la boca para no reírme.
—Mientras no las saquen en la cita, creo que estaremos bien, —
respondió Anthony. No pude contener la carcajada y una gran sonrisa
se extendió por el rostro de Finn. —Mi esposo se enojará si tengo
clientes agitando sus pollas. Y confía en mí, no quieres ver a mi
hombre enojarse.
—Oh, me gustas, Anthony, —dijo Finn, sonriendo aún más. Y
aparentemente a Anthony le gustaban los hombres descarados ya 14
que estaba casado con uno, así que tuve la sensación de que él y mi
petardo se llevarían bien. —Tengo una pregunta más.
—No puedo esperar, —dijo Anthony con una sonrisa.
—Busqué en tu sitio web, pero no vi una foto de tu panadería. ¿Es
accesible para discapacitados? Mi prometido es un usuario de silla de
ruedas. —El orgullo y el amor se hincharon en mi pecho por la forma 03/2020
en que Finn dijo las palabras tan casualmente y se aseguró de que mis
necesidades fueran satisfechas.
—Lo siento, pero no, —respondió Anthony con tristeza. —Estoy
empezando, así que estoy trabajando fuera de mi casa y dando los
primeros pasos—. El cuerpo de Finn se desinfló y su rostro cayó. —
Pero tengo una idea si funciona para ti; ¿qué pasa si nos vemos en
algún lugar y traigo una variedad de sabores de pasteles y glaseado
que ofrezco? Voy también con mi cartera llena de fotos de las últimas
tortas que he hecho y las listas de precios.
—Anthony, cuando nos encontremos, te estaré dando el abrazo de
tu vida, —dijo Finn con seriedad, y el panadero se echó a reír de
nuevo. —En serio, gracias por esto. No quisiera hacerlo sin mi Harley,
por lo que significa mucho que estés dispuesto a trabajar con
nosotros.
 —No es problema. Gracias a ti por permitirme la oportunidad de
trabajar con ustedes a pesar de que mi negocio no es conveniente.
Espero tener el dinero ahorrado pronto para un pago inicial en un
nuevo espacio para hornear, y quiero asegurarme de que sea
accesible para todos.
—¿Tu marido se enojará si te doy un beso en la mejilla? —Anthony
y yo nos reímos de la seria pregunta de Finn y abracé a mi amante
con fuerza por la mitad.
—Él no necesita saber, —susurró Anthony, y Finn se unió a nuestra 15
risa.
Los dos decidieron los detalles de la hora y el lugar de reunión, y
Finn y yo reservamos. Cuando Finn colgó, chilló y lanzó sus brazos
alrededor de mi cuello, casi me quitó la vida.
—¡Estoy tan feliz! —Exclamó, meciéndome y apretándome con
tanta fuerza que pensé que mis ojos podrían salirse. 03/2020
—Yo también, —le dije una vez que me soltó y pude respirar de
nuevo. Principalmente estaba feliz de que Finn estuviera feliz, pero la
amabilidad de Anthony definitivamente no dolió.
Finn acarició su suave mejilla contra la mía barbuda. Me encantó lo
táctil y cómodo que era; especialmente cuando estábamos en
público. Me hizo sentir tan malditamente especial tener a un hombre
tan sexy colgando sobre mí y reclamándome frente a todos.
—Esta es la última gran cosa que tenemos que resolver, —dijo sin
tomarse un descanso de sus caricias. Finn había planeado cualquier
otro detalle con bastante rapidez. Dijo que las flores eran las más
fáciles, yendo con margaritas rojas de Gerbera. Tenían un significado
especial para los dos; eran las flores que le traje en nuestra primera
cita, y ahora cada uno tenía un tatuaje en los brazos como símbolo de
nuestro amor.
 Ya habíamos ido a un esmoquin también. Finn me dijo que eligiera
lo que quisiera y que él haría lo mismo, pero ninguno de nosotros vio
lo que el otro eligió. Quería que fuera una sorpresa en el gran día.
Dijo que los novios deben sorprender a sus esposos con su elección
de vestimenta, por lo que ambos deberíamos tener esa oportunidad
con nuestra elección de traje. Además, dijo que el drama del
momento produciría las mejores imágenes.
En cuanto a la ubicación, Finn tuvo la gran idea de usar el gimnasio
donde jugaba mi equipo de baloncesto. Invitamos a todo el equipo, 16
por lo que el edificio fue fácilmente accesible para todos. Mi pequeño
genio malvado apareció en el gimnasio con una caja de donas cuando
el dueño y su secretaria estaban allí. Después de un buen momento y
recordatorios de cuánto dinero trajo la liga de baloncesto en silla de
ruedas con la venta de entradas, acordaron dejarnos usar el espacio
para nuestra boda. Gratis. Finn podría vender aserrín a un aserradero, 03/2020
y nunca entenderé cómo lo hace.
Todos disfrutamos la cena en el asador después de que ganamos
tanto el campeonato que decidimos tener nuestra recepción allí. Con
el dinero que ahorramos en la ubicación de la ceremonia, pudimos
alquilar todo el restaurante por la noche para tener suficiente espacio
para nuestros invitados, pasteles y regalos. Incluso apartaríamos
algunas mesas si alguien quisiera bailar. Quizás no éramos las
personas más originales del mundo, pero sabíamos lo que funcionaba
y lo que les gustaba a nuestros amigos, así que eso era lo que era
importante para nosotros.
—¿Has pensado en qué estilo de pastel te gustaría? —Le pregunté,
uniéndome al frotamiento de las mejillas.
—En realidad, me voy a hacer una idea de lo que creo que sería lo
mejor. Mañana, ¿podrías ayudarme a dibujarlo para que podamos
mostrarle a Anthony el lunes? Tus dibujos son magníficos y estoy
seguro de que lo ayudarán a comprender lo que estoy imaginando.
Esa es solo otra forma en que Finn me hizo sentir especial. Siempre
se entusiasmó con el gran artista que era y me pidió ayuda con
cualquier proyecto en el que estuviera trabajando. Me incluyó en
todo y se entusiasmó con mis habilidades.
—Por supuesto, cariño.
—Gracias—. Me dio un beso largo y húmedo antes de
desafortunadamente retroceder y ponerse de pie. —Iré a ducharme 17
ahora y me prepararé para el gran día de Jake—. Suspiré mientras
veía su pequeño trasero perfecto moverse de un lado a otro en su
camino hacia el baño.

03/2020
 Capítulo Dos

—¡Maaaldicióónnnn! —Exclamó Finn cuando entró en nuestra

habitación después de la ducha. Su piel era rosada y bonita por el
agua caliente y llevaba una gran sonrisa mientras me miraba de arriba 18
a abajo. —¡Eres un maldito espectáculo caliente!
Los cumplidos malhumorados de mi hombre siempre me hacían
sonreír.
—¿Realmente lo crees? —Miré mi atuendo; jeans oscuros, botas
marrones, un suéter gris y un blazer azul marino. Quería disfrazarme,
pero no demasiado bien demasiado exagerado. Además, las capas me 03/2020
mantendrían caliente contra el frío de enero.
—¡Dime! —Finn golpeó su toalla en el suelo y golpeó su pesada
polla de un lado a otro contra sus muslos. —Lo juro, eres tan caliente
que haces que mi sangre pase todo su tiempo en mi polla y lejos de
mi cerebro. Estoy sorprendido, que todavía recuerdo mi nombre. —
Me reí cuando los labios de mi amante se curvaron en una sonrisa
traviesa. —¿Cuánto tiempo tenemos antes de la ceremonia?
—Comienza en una hora, —respondí con una sonrisa triste.
—Bueno, mierda—. Apoyó las manos en las caderas y suspiró. —
Supongo que eso significa que necesito vestirme para poder
encontrar un buen lugar en la multitud.
—Confía en mí, estoy tan decepcionado como tú, —prometí.
Especialmente con la forma en que su polla ahora estaba
completamente dura y me estaba molestando. Tuvimos actividad
sexual de algún tipo todos los días, y aun así no fue suficiente para
ninguno de nosotros.
—¿Más tarde, entonces? —Preguntó, moviendo las cejas.
—Absolutamente—. Me reí de nuevo mientras Finn marchaba
triunfante hacia el armario.
Una vez que se vistió y lucía espléndido con un par de jeans negros
ajustados, una camisa blanca y un largo cárdigan verde oliva, subimos
a su auto y nos pusimos en camino.
19
*****

—Odiaría ver este lugar en la gran ceremonia de graduación, —dijo

Finn mientras daba la vuelta al estacionamiento de la universidad por
tercera vez en busca de un espacio vacío. Como la clase de Jake se
graduó en el invierno, el servicio de hoy sería mucho más pequeño 03/2020
que el que se llevaría a cabo en los meses de verano, pero el lugar
aún estaba lleno.
—No es broma. Tendrán que poner un segundo lote—. Jake
mencionó que el colegio comunitario había estado recibiendo cada
vez más estudiantes a medida que las tasas de matrícula en las
universidades más grandes seguían aumentando, y se notaba.
—¿Te importa si estacionamos en un lugar al frente? Simplemente
no quiero llegar tarde.
Finn sabía que no solía estacionar en los espacios accesibles para
discapacitados. Me moví con bastante facilidad y me gustó dejar los
lugares para las personas mayores y aquellos que necesitaban ayuda
adicional para cargar / descargar, pero me condenaría si iba a perder
el gran momento de Jake.
 —Está bien, cariño—. Cogí el cartel de su guantera y lo colgué en el
espejo retrovisor mientras él se metía en una de las dos ranuras para
discapacitados. Finn se apresuró a saltar de su asiento y recuperar mi
silla del baúl. Su puerta ancha en la parte trasera facilitaba mantener
la silla ensamblada en lugar de que yo la desarmara cada vez que
entraba en su automóvil.
—Aquí vamos, —anunció Finn cuando abrió mi puerta para mí y
sostuvo mi silla mientras me transfería. No me ayudó por lástima o
porque pensó que lo necesitaba. Simplemente le gustaba cuidarme, y 20
eso significaba mucho. Agarré su camisa y lo bajé para un beso
hambriento. Sus ojos estaban oscuros y desenfocados cuando me
aparté. —Bebé, mis pantalones son demasiado ajustados para que
me beses así.
Me reí de sus palabras y de la forma en que se ajustó los
pantalones antes de cerrar la puerta y bloquear el auto. También 03/2020
supongo que, debido a sus jeans ajustados, colocó sus llaves en la
pequeña mochila con cordón que mantenía estirada en el respaldo de
mi silla que siempre sostenía mi billetera.
—Chico, apuesto a que te alegra que lo hayas traído, —dijo una voz
detrás de nosotros. Miré por encima de mi hombro para encontrar a
un hombre de mediana edad que resoplaba por el estacionamiento y
sonreía a la parte posterior de la cabeza de Finn. —Tienes un gran
lugar. Tuve que estacionar en el estacionamiento al otro lado de la
calle y caminar hasta el final. Tienes suerte de que nunca tengas que
preocuparte por eso siempre y cuando mantengas eso cerca.
Finn se encogió visiblemente antes de girar lentamente la cabeza
para mirar detrás de él. Me estremecí al ver la furia desenfrenada en
su rostro. Dios ayude a ese hombre. Agradecí mentalmente al señor y
a todos sus ángeles que esa mirada nunca me hubiera sido dirigida.
Finn se rompió el cuello antes de sonreírme dulcemente. La velocidad
a la que podía cambiar entre expresiones era desconcertante.
—Bebé, ¿por qué no entras y nos encuentras un lugar? Solo tardaré
un minuto.
¿Y perderme este espectáculo? ¿Habla en serio? Aun así, la
ceremonia comenzaría pronto, y tuve la sensación de que sería difícil
encontrar buenos lugares. Asentí con la cabeza y me dirigí hacia la
puerta de entrada más despacio de lo habitual, esperando atrapar un
poco del culo masticado que el hombre sin duda iba a recibir. 21
Ni siquiera tuve que esforzarme para escuchar el grito de Finn de —
¡Hijo de puta ignorante! — Mientras me arrastraba hacia el paseo.
Noté que algunas personas a mi alrededor movían la cabeza hacia el
sonido y también bajaban el ritmo.
—Ese es mi prometido y es una jodida persona; ¡no es un pase de
estacionamiento, idiota! ¿Cómo te pusiste la camisa hoy cuando 03/2020
tienes la cabeza tan alta en el culo?
Desafortunadamente, eso es todo lo que escuché antes de entrar
por la puerta principal. Hice todo lo posible para no toparme con
nadie o atropellar pies mientras me abría paso entre la multitud y en
el bullicioso auditorio. El escenario en la parte delantera de la sala
estaba forrado con sillas plegables donde los graduados se sentarían
pronto, pero casi todos los demás asientos estaban llenos.
Sonreí cuando vi una fila cerca del frente con una silla faltante en el
extremo y rodé en el lugar vacío. El asiento a mi lado estaba
sorprendentemente desocupado también, así que saqué mi bolso del
respaldo de mi silla y lo puse sobre el cojín para salvar el asiento de
Finn. Luego miré hacia la entrada de la habitación para mirar a mi
hombre.
 Sin embargo, la primera persona a la que vi arrastrar los pies fue el
hombre del estacionamiento. Parecía bastante sudoroso mientras sus
ojos escaneaban la habitación en busca de un asiento. Cuando su
mirada se encontró con la mía, sus ojos se abrieron en una mirada de
terror. Rápidamente corrió una fila fuera de mi línea de visión. Fue
entonces cuando vi a Finn, que había entrado detrás del hombre y
miraba con dagas en la dirección en que desapareció.
Finn finalmente se apartó de él y echó un vistazo al otro lado de la
habitación. Cuando me encontró, una hermosa sonrisa se apoderó de 22
su rostro y saludó antes de correr por la sala inclinada hacia mí.
—¿Todo bien? —Le pregunté mientras volvía a poner mi bolso en
mi silla y se dejaba caer en el asiento vacío.
—Todo es genial—. Él picoteó mis labios y agarró mi mano entre las
suyas. —Se disculpó, por cierto. Dijo que se dio cuenta de que su cojo
intento de broma era terrible y que lamentaba haberte ofendido. — 03/2020
Bueno, que me condenen. —También me agradeció por llamarlo por
su mierda para que fuera más cuidadoso en el futuro y mantuviera la
boca cerrada.
—Eso fue grande de su parte, —le dije y Finn asintió con la cabeza
con una sonrisa. —Cuando los vi entrar, parecía que todavía estaban
enojados y pensé que tal vez trató de causarte problemas.
—Nah. Como dijiste, se necesita una gran persona para admitir que
están equivocados y disculparse. Puedo perdonarlo, pero eso no
significa que tenga que olvidar lo que hizo.
Me reí de mi pequeño cabeza caliente y su habilidad para guardar
rencor.
—Te amo, cariño.
—Yo también te amo—. Me dio otro beso y apoyó la cabeza en mi
hombro mientras esperábamos a que comenzara la ceremonia.
 Poco después, un hombre de cabello gris con una larga túnica negra
subió al escenario y se detuvo en el podio en el centro.
—Buenas tardes. Soy el Dr. Collin Yates, Decano de Westbrook
Community College. Les pido que todos se pongan de pie y se unan a
mí para dar la bienvenida a nuestra clase de graduados al escenario.
Todos se pusieron de pie y aplaudieron mientras los estudiantes
entraban desde el costado del escenario. Desafortunadamente, todo
lo que pude ver fue el trasero de la mujer frente a mí. Traté de mirar
alrededor, pero era un trasero bastante grande. Miré a Finn para 23
encontrar que tenía problemas similares; él era un buen pie más bajo
que el hombre frente a él e intentaba echar un vistazo al escenario a
su alrededor.
Cuando Finn se encogió de hombros y puso el pie en el asiento de
su silla para subir, puse una mano sobre su brazo para detenerlo. No
quería que se lastimara. 03/2020
—Pasemos al pasillo por un minuto, —sugerí en su lugar. Me siguió
unos metros hacia el pasillo y se paró detrás de mí.
—Buena idea, —dijo, inclinándose para hablar en mi oído. —Juro
que debería haber iones de restricción de altura en las primeras
filas—. Me reí entre dientes y ambos aplaudimos mientras veíamos a
los estudiantes entrar orgullosamente desde los costados. Todos
estaban vestidos con túnicas y sombreros de color verde cazador,
junto con sonrisas orgullosas. Cuando Jake apareció detrás de la
cortina, Finn gritó muy fuerte y en voz alta antes de gritar: —¡Ahí está
nuestro Jakey!
Jake nos sonrió ampliamente y le devolvió el saludo a Finn, que
agitaba salvajemente los brazos sobre su cabeza.
—Aw, se ve tan feliz, —Finn me susurró al oído. Realmente lo hizo,
y me alegré por él. Quería capturar el momento, así que saqué mi
teléfono del bolsillo delantero y tomé varias fotos de mi primo, quien
posó lo mejor que pudo hasta que el chico detrás de él lo empujó
para seguir caminando.
Una vez que Jake estaba parado frente a su silla y otros estudiantes
se alinearon frente a él, lo que nos dificultaba verlo, Finn y yo
volvimos a nuestros lugares. Las palabras resopladas de Finn de “Oh,
no, no” llamaron mi atención a su asiento, que ahora estaba lleno de
otro hombre. Aparentemente había visto una oportunidad y se coló
en el último asiento disponible mientras estaba vacante. 24
No queriendo ser expulsado de la graduación de Jake cuando Finn
volteó su mierda, agarré a mi amante por la cintura y lo jalé a mi
regazo antes de girar los últimos pies hacia la ranura de mi silla. Finn
tarareó alegremente y se acurrucó más profundamente en mi abrazo.
Crisis evitada.
El Dr. Yates siguió penosamente hablando para siempre sobre la 03/2020
responsabilidad, la oportunidad y cualquier otra cosa en la que me
separé durante casi una hora. Todos los ojos de los estudiantes
estaban vidriosos, y escuché suaves ronquidos provenientes de algún
lugar detrás de mí en la audiencia.
—Podría haber envuelto esta mierda en diez minutos, —Finn me
susurró al oído.
—Desearía que te hubiera dejado, —le susurré. Pagaría un buen
dinero para escuchar el discurso de graduación profano de Finn que
indudablemente tendría a todos de puntillas. Seguramente vencería a
este monótono discurso.
—Y así, en conclusión, —concluyó el Dr. Yates, agradecido, —les
deseo a cada uno de ustedes éxito en sus esfuerzos. En este
momento, llamaré tu nombre y te pediré que vengas al frente del
escenario para aceptar tu diploma.
 Los graduados y la audiencia se animaron mientras el Dr. Yates
recitaba el nombre de cada estudiante. Le quitaron su diploma y
posaron para fotos mientras los flashes de la cámara parpadeaban
por todo el auditorio.
Cuando el Dr. Yates anunció:
—Jacob Woods, —Finn perdió la cabeza. Saltó de mi regazo,
silbando y gritando por mi primo. Varios miembros de la audiencia se
rieron a nuestro alrededor, y el Decano mostró una sonrisa aún más
grande mientras posaba para fotos con Jake. Mi primo no parecía 25
avergonzado en lo más mínimo ante la exhibición de Finn; más bien,
se hinchó de orgullo y sonrió de oreja a oreja cuando mi hombre y yo
tomamos una docena de fotos. Mi corazón se derritió cuando Finn se
recostó en mi regazo. Él aceptó a mi familia como propia y amaba a
Jake como a un hermano, y mi primo sentía igual de fuerte por Finn.
Una vez que todos los graduados fueron anunciados y movieron sus 03/2020
borlas a un lado, el Dr. Yates cerró la ceremonia y los soltó. El
auditorio se convirtió en un manicomio cuando los graduados
inundaron el piso en busca de sus seres queridos. Cuando Jake
apareció, Finn una vez más se levantó de mi regazo y saltó a los
brazos de mi primo. Jake lo hizo girar en círculo y se echó a reír
mientras Finn salpicaba sus mejillas con besos. Jake tomó con calma
el afecto de mi hombre y supe que no tendría reparos en noquear a
cualquiera que tuviera algo desagradable que decir al respecto.
—Los dos estamos muy orgullosos de ti, —dijo Finn una vez que
estuvo de pie de nuevo.
—Gracias, —respondió Jake antes de inclinarse para envolverme en
un abrazo también. —Y muchas gracias a los dos por venir.
Finn apoyó las manos en las caderas y resopló.
 —¿Y en qué otro lugar crees que estaríamos? Por supuesto,
estamos aquí para ver a nuestro primo favorito graduarse.
Jake resopló y sacudió la cabeza.
—Por supuesto. ¿Entonces ya no soy tu primo aún no legal
favorito?
—No me importa una mierda las leyes o los títulos legales, —
respondió Finn con seriedad. —Eres mi familia, Jake. Estoy bastante
seguro de que mi primo y yo nos fundimos en un charco en el mismo
momento. 26
—Tú también eres mío, Finn, —respondió Jake mientras envolvía a
mi amante en un abrazo más.
Me aclaré la garganta para evitar que las lágrimas me cubrieran en
el hermoso momento.
—Entonces Jake, ¿tu gente bajó a ver la ceremonia? —Mi tía Carol
y mi tío Jeff se mudaron fuera del estado hace unos años cuando Jeff 03/2020
recibió una oferta de ascenso en su carrera si estaba dispuesto a
cambiar de lugar.
—No, estuvieron unas semanas atrás en Navidad, así que les dije
que no se preocuparan por hacer otro viaje. La escuela en vivo
transmitió la ceremonia, por lo que aún pudieron ver todo.
—Me alegra que hayan podido ver, pero es una pena que no estén
aquí, —dijo Finn con una sonrisa triste. —Me gustaría volver a
verlos—. Finn conoció a mi tío y tía durante las vacaciones y todos se
llevaron muy bien. Finn ayudó a Carol a preparar la cena de Navidad y
pensó que era la “cosita más dulce del mundo”. Luego, él y su tío Jeff
se unieron durante un partido de fútbol en la televisión. Finn no sabía
mucho sobre el deporte, pero a Jeff le encantaron los insultos que le
ocurrieron a mi hombre sobre el equipo rival.
 —Estoy seguro de que a ellos también les encantaría verte, —
sonrió Jake. —Creo que les gustas más que a mí.
—Oh cariño, todos lo hacen, —bromeó Finn, haciéndonos reír a
Jake y a mí.
—Bueno, como no están aquí, supongo que eso significa que
podemos llevarte a cenar, —le ofrecí y Finn asintió con la cabeza. —
Elige donde quieras.
—Me encantaría muchachos, pero tengo que trabajar en la fábrica
esta noche—. Me sorprendió; Jake aceptó un trabajo a principios de 27
semana de nuestro escuadrón paramédico local. Mi confusión debe
haberse manifestado en mi rostro porque explicó: —Es mi último
turno. Me están organizando una pequeña fiesta de despedida y
empiezo mi nuevo trabajo el lunes.
—Eso es muy agradable, —sonrió Finn. —Creo que tendremos que
celebrar otra noche, porque vamos a celebrar. Te lo mereces. —Jake 03/2020
sonrió y asintió con la cabeza.
—Te veías bien allí, Jake, —agregó una cuarta voz. Me estremecí
ante el sonido familiar, que no escapó a la atención de Finn. Se acercó
a mí y tomó mi mano entre las suyas. No sabía cuál era el problema,
pero se apresuró a brindar apoyo y lo amé por ello.
—Oh, —Jake parpadeó, luciendo sorprendido. —Gracias, Dwayne.
No sabía que vendrías.
—Hablé con Jeff el otro día y escuché que él y Carol no iban a
lograrlo, así que quería salir y apoyarte. No te importa, ¿verdad?
—No, por supuesto que no, —respondió Jake con una sonrisa
forzada. —Aprecio que hayas venido—. Los ojos de mi primo se
abrieron ligeramente cuando la figura me rodeó para envolver a Jake
en sus brazos. Jake articuló lo que reconstruí para decir “Lo siento” y
le devolví una sonrisa tensa. No fue su culpa que me pusiera en esta
incómoda posición de ver a mi padre abrazar y apoyar a mi primo
cuando ni siquiera me había reconocido.
Una avalancha de emociones me atravesó al verlo. Estaba herido y
celoso de que mi padre le estuviera dando cariño a Jake y, sin
embargo, de alguna manera me alegraba que me dejara en paz.
Estaba enojado porque él estaba aquí para apoyar a mi primo cuando
ni siquiera había recibido una llamada telefónica de él en años. Y me
sentí culpable de no haberlo llamado tanto tiempo. No sabía qué
hacer o cómo procesar todo, así que apreté más fuerte la mano de 28
Finn. Me devolvió el apretón y me miró con tanta confusión que me
rompió el corazón.
No había hablado con Finn sobre mi padre mucho más allá de lo
que le dije en nuestra primera cita; que nos habíamos separado
después de la muerte de mi madre y que nuestra relación tensa se
disolvió en una inexistente. Ni siquiera había mencionado su nombre, 03/2020
razón por la cual el pobre Finn parecía tan perdido. Antes de que
pudiera explicarle algo, mi padre soltó a Jake y se volvió para
mirarme.
El tiempo había sido bueno para mi papá. Se veía en forma y
saludable; su cuerpo delgado estaba a solo un par de pulgadas menos
del marco de seis y tres pies de Jake. Su cabello castaño estaba
veteado de más canas que la última vez que lo había visto, y las
arrugas cubrían su frente y se arrugaron alrededor de sus ojos que
eran del mismo color verde que el mío. Pero en general, se veía
genial. Esperaba seguir su genética y lucir tan bien cuando tuviera
cincuenta y cuatro años.
—También te ves bien, Harley, —ofreció papá con una sonrisa
incómoda. —¿Cómo has estado?
 No sabía por dónde empezar con mi respuesta, así que tomé el
camino fácil y respondí:
—Estoy bien. ¿Tú?
—Bien, bien. —Bien, esta es oficialmente la conversación más
incómoda de mi vida. Papá miró de mí a Finn y viceversa. —¿Quién es
éste?
Apreté la mano de mi amante otra vez y le sonreí. Aunque mi
mundo estaba de lado, Finn era mi verdadera constante y mi fuerza.
Estaba orgulloso de presumirlo ante todos, incluido mi padre 29
separado.
—Este es mi prometido Finn, —anuncié con una mirada a mi padre.
—Cariño, este es mi papá Dwayne—. Finn jadeó en silencio mientras
la comprensión pintaba sus rasgos.
—¿Prometido? —Papá repitió en estado de shock. Parpadeó
mientras nos miraba repetidamente entre nosotros dos. —Eso es 03/2020
genial, Harley—. Papá nunca se molestó en que yo fuera gay, y se veía
realmente feliz (si no sorprendido) de haber encontrado a alguien con
quien pasar mi vida. A pesar de que había tanta distancia entre
nosotros, no pude evitar el cálido cosquilleo en mi estómago que vino
con la aceptación de mi padre, sin mencionar el orgullo que sentía
por tener a Finn en mi brazo.
—Es genial, —respondió Finn. Soltó mi mano para pasar su brazo
sobre mis hombros. —Tu hijo es el hombre más increíble que he
conocido—. Finn parecía ser el único de nosotros que no sufría de
molestia o incomodidad extrema. Besó la parte superior de mi cabeza
antes de levantarse y empujar su barbilla hacia Jake. —También
tienes un sobrino muy bueno—. Jake sonrió ante el cumplido muy
Finn.
 —Soy un hombre con suerte, —respondió mi padre. La tristeza
nadaba en sus ojos mientras me miraba de arriba a abajo. —Harley, lo
siento, ha pasado tanto tiempo. He cogido ese teléfono cientos de
veces, pero... —sus palabras murieron en su garganta y sus hombros
cayeron.
—Creo que esta es mi señal para irme, —ofreció Jake.
—No, no, lo siento; no quise pisar tu momento, —respondió papá
rápidamente. —Yo me iré.
—No lo hiciste, y tengo que ir a casa de todos modos para 30
prepararme para el trabajo, —aseguró Jake, despidiéndolo. —Fue
bueno verte—. Dio una palmada en la espalda a mi padre antes de
envolver a Finn en sus brazos.
—Felicitaciones de nuevo, —le dijo Finn a Jake antes de besar su
mejilla. —Piensa en cómo quieres celebrar y ten cuidado de ir a
trabajar esta noche; se supone que tenemos algo de nieve. 03/2020
—Sí, papi —bromeó Jake.
—Solo a Harley se le permite llamarme papi, —dijo Finn. Jake y yo
nos reímos, mientras los ojos de mi padre se abrieron y sus mejillas se
tiñeron de rosa. Me alegré de que mi amante no ocultara su gran
personalidad para nadie.
—Tendré cuidado, —prometió Jake una vez que dejó de reírse.
—Y me llamarás cuando llegues a casa a salvo, —agregó Finn y Jake
asintió con un resoplido. —Oye, solo soy insistente porque te amo
mucho.
—Lo sé. También te amo, Finn. —Mi padre tuvo que marearse por
la forma en que le daban vueltas los ojos cuando vio a Finn besar la
mejilla de Jake una vez más. —También te amo, primo, —dijo Jake,
inclinándose para darme un abrazo. —Buena suerte, —me susurró al
oído. —Llámame cuando sea más tarde, ¿de acuerdo? —Asentí y él se
alejó con una sonrisa. —Los veré a todos más tarde—. Con un gesto,
nos dejó a los tres solos.
Mi padre cambió de pie a pie y tamborileé con mis dedos sobre mis
muslos. Finn llenó el incómodo silencio con:
—Entonces, ¿qué hace, señor Woods?
—Llámame Dwayne, —ofreció papá y Finn asintió con una media
sonrisa. —Y yo trabajo para el Departamento de Transporte.
—Así que esta es tu temporada alta, —supuso Finn. —Con la sal de
las carreteras y todo. 31
—Sí—. Mi papá se rascó la parte posterior de la cabeza. —Creo que
Harley no habla mucho de mí, ¿eh? —Finn abrió la boca para
responder, pero papá lo rechazó. —Está bien. Sé que es mi culpa. No
fue todo culpa suya, pero no pude encontrar las palabras para
admitirlo. —Suspiró y me dio una sonrisa triste. —Ha pasado mucho
tiempo. Tal vez podríamos... No sé, ¿reunirnos alguna vez y hablar? 03/2020
—Sí, tal vez, —respondí. Ninguno de nosotros ofreció un lugar o un
momento, ni se movió para sugerir algo más concreto que “tal vez” o
“en algún momento”.
—Está bien—. Me dio una sonrisa tensa y se volvió hacia mi
prometido. —Fue un placer conocerte, Finn—. Extendió la mano, que
Finn agarró y sacudió.
—Estoy encantado de conocerte también.
Cuando Finn soltó la mano de papá, me la tendió.
—Fue bueno verte, Harley—. Mi corazón se hundió cuando
estreché la mano de mi padre, y luego cuando lo vi darse la vuelta y
desaparecer sin decir una palabra más.
Me preguntaba qué diría Finn; si bromeaba sobre la tensión de la
situación, decía algo sucio para alegrarme o hablaba de algo al azar
para distraerme de las cosas. En cambio, se inclinó y me dio un beso
en la sien antes de decir en voz baja:
—Vamos, bebé; vamos a casa.

32

03/2020
 Capítulo Tres

Finn estaba callado en el camino a casa. Sospeché que me estaba

dando tiempo para analizar mis pensamientos. Lástima que ni
siquiera sabía por dónde empezar. Entonces, en cambio, miré por la 33
ventana mientras los copos de nieve comenzaban a caer. Era
temprano en la noche, pero las nubes y el frío le daban al cielo un
tono gris y proyectaban todo en la oscuridad. Se ajustaba a cómo me
sentía por dentro.
No fue hasta que Finn se estacionó frente a nuestra casa y me
siguió adentro que me dijo: 03/2020
—Ponte cómodo en el sofá y estaré allí—. No estaba seguro de lo
que estaba planeando, pero sabía que lo que fuera me ayudaría, y
aprecié que tomara el control.
Entré en la sala de estar y me trasladé al sofá. Unos minutos más
tarde, Finn entró en la habitación con un montón de artículos. Vi
cómo él colocaba dos refrescos en la mesa de café, junto con una
gran vela en el centro. Sacó un encendedor del bolsillo y encendió la
vela antes de girarse hacia mí y sonreír.
—Deslízate hacia el medio, —solicitó, acariciando el cojín central
del sofá.
Hice lo que me pidió y Finn apagó las luces antes de arrodillarse
frente a mí para agarrarme los tobillos. Él los tomó, los levantó y me
dio vuelta hasta que estaba sentado de lado con los pies apoyados en
el brazo del sofá. Tomó la manta de la parte posterior del sofá y me
cubrió antes de sentarse en el extremo opuesto. Tiró suavemente de
mis hombros y yo me recosté, acurrucando mi cabeza en su regazo.
—Pedí la entrega de pizza para la cena, —dijo Finn con una voz
suave y gentil mientras enterraba sus dedos en mi cabello,
peinándolo. —Hasta que llegue aquí, solo quiero que te relajes.
Podemos ver una película esta noche si lo deseas, o simplemente
podemos sentarnos en silencio. O si quieres hablar, estoy aquí.
Mi corazón se hinchó ante la consideración de Finn. Se dio cuenta
de que la reunión con mi padre me había sacudido, estaba haciendo 34
todo lo que podía pensar para apoyarme y me pidió que me relajara.
Nunca sabré lo que hice para merecer a un hombre tan increíble,
pero siempre estaría agradecido.
Por mucho que quisiera acostarme allí mientras Finn jugaba con mi
cabello o ignorar mis problemas mientras veíamos una película,
también sabía que no encontraría paz hasta que hablara de todo lo 03/2020
que sentía. Tenía que recordar que ahora tenía a alguien en quien
apoyarme y que me ayudara.
—No esperaba verlo allí, —comencé. Finn me rascó el cuero
cabelludo, pero permaneció en silencio, dejándome tomar la
iniciativa. —Tiene sentido que haya estado allí, pero ha pasado tanto
tiempo que ya ni siquiera pienso en toparme con él.
—¿Cuánto tiempo ha pasado desde que lo viste antes de esta
noche?
Pensé de nuevo y me estremecí al darme cuenta de cuánto tiempo
había pasado.
—Supongo que han pasado dos años desde que hablé con él, y más
cerca de tres desde que lo vi en realidad—. Miré a los ojos tristes de
Finn. —¿Eso me hace una persona terrible?
 —Oh, Harley, no—. Peinó mi cabello y no apartó su mirada de mí.
—Eres una persona increíble que nunca haría nada para lastimar
intencionalmente a nadie. Es la situación lo que es terrible; el dolor y
el trauma pueden destrozar incluso a las familias más amorosas.
Amor. Sus palabras fueron como un puñetazo en el intestino.
—Fue difícil ver lo cómodo que estaba mi padre con Jake, —admití;
sin mencionar lo cariñoso. —Pero luego me estrechó la mano como si
fuera un extraño.
—No conozco a tu papá, pero tampoco creo que él intentara 35
lastimarte intencionalmente, —ofreció Finn. —Es el tío de Jake, por lo
que su relación es más fácil; él puede ser su amigo sin responsabilidad
parental. Y estoy seguro de que Jake nunca intentará lastimarte. No
estás molesto con él, ¿verdad?
—No, por supuesto que no, —respondí. —Estaba tan sorprendido
como yo. Él nunca me pondría en una posición como esa a propósito. 03/2020
Además, todavía quiero que tengan una buena relación.
—Por eso eres tan increíble, —insistió Finn antes de picotear mis
labios. —¿Cómo te sientes acerca de juntarte con tu papá como él te
preguntó?
—No estoy seguro de que realmente quiera, —me encogí de
hombros. —Creo que es algo que sintió que tenía que decir. No se
esforzó mucho por preparar algo.
—No creo que lo hubiera dicho si no fuera en serio, —argumentó
Finn. —Creo que está nervioso, como tú. Tal vez tiene miedo de
empujar o que lo rechaces, así que está poniendo la pelota en tu
cancha.
—No había pensado en eso—. Papá y yo estábamos igualmente
vacilantes e incómodos el uno con el otro; tal vez solo estaba
nervioso. Estoy seguro como el infierno. Vernos significaba traer
recuerdos dolorosos. ¿Podríamos pasar por delante de ellos? ¿Qué
pasa si las cosas entre nosotros empeoran en lugar de mejorar?
Suspiré y miré a Finn. —¿Qué tengo que hacer?
Mi amante me dio una sonrisa triste y me rascó suavemente la
cabeza.
—No puedo responder eso por ti, bebé. Solo tú sabes lo que se
siente bien—. Aunque era ardiente e incluso discreto con todos los
demás en la Tierra, Finn nunca trataría de controlarme o intervenir.
Sin embargo, fue increíblemente perspicaz y quería su opinión. 36
—¿Qué es lo que harías tú?
Finn se tomó un momento para ordenar sus pensamientos antes de
responder:
—Cuando mis padres me dieron la espalda, fue uno de los peores
días de mi vida. Me miraron a los ojos y me dijeron que odiaban quién
y qué era; que no podían ensuciar sus vidas justas aceptando a 03/2020
alguien tan sucio y pecaminoso—. Sus ojos se llenaron de lágrimas no
derramadas y sacudió la cabeza. —No hay nada que pueda hacer para
arreglar a mi familia. Incluso si pudiera cambiar, no lo haría. No
quiero. Amarte me hace más feliz de lo que nunca soñé que podría
ser.
—Oh, cariño—. Alcé la mano para limpiar una lágrima mientras se
deslizaba por la mejilla de Finn.
Soltó un largo suspiro.
—Verlos a ti y a tu padre juntos esta noche fue difícil porque
realmente siento que hay esperanza para su relación. El tiempo y el
dolor los han separado, pero no creo que las cosas sean irreparables.
Ambos perdieron a una mujer maravillosa y lamento que hayan
pasado por eso, pero no tienen que perderse el uno al otro también.
Si es posible reparar su relación, lo quiero para ti. Te mereces un
padre que te cuide y te ame; demonios, es solo ser un amigo.
Limpié más lágrimas cuando mis ojos se miraron con los suyos.
—Entonces, si fuera yo, daría el primer paso para llegar. Espero que
ustedes dos puedan sanar y seguir adelante. Si no, al menos no te
arrepentirías o pensarías 'qué pasaría si'. Es un riesgo, pero vale la
pena tomarlo. —Finn rascó mi barba. —Pero Harley, te apoyaré en lo
que sea que hagas. Si no estás listo para esto, lo respetaré y estaré
aquí para ti cuando lo estés. 37
Estaba sin palabras.
—¿Cómo diablos puede alguien ser tan perfecto? —Está bien, tal
vez no se quede sin palabras, pero se estremeció. Finn siempre tuvo
mi mejor interés en el fondo y sabía exactamente qué decir. —Dime,
—respondió con un guiño.
Solté una carcajada y sacudí la cabeza. Estaba lejos de ser perfecto, 03/2020
pero así fue como me vio mi hombre. Su fuerza y creencia en mí me
hicieron creer en mí mismo. Me hizo sentir que todo era posible. El
amor detrás de sus cálidos ojos marrones me dijo que siempre estaría
allí para alentarme y apoyarme.
—¿Vendrás conmigo? —Pregunté, aunque ya sabía la respuesta.
—Si me quieres allí, no estaría en ningún otro lugar—. Estiré el
cuello para recibir un tierno beso. Los ojos de Finn se abrieron cuando
saqué mi teléfono de mi bolsillo. —Oh mierda, ¿lo estás haciendo
ahora?
—Quiero llamarlo antes de perder el valor, —le expliqué. Finn
asintió y agarró mi mano, apretando suavemente mientras marcaba
el número de mi padre con la otra mano. Contuve el aliento cuando
sonaron dos tonos a través de la línea y la llamada se conectó.
 —¿Harley? —Preguntó mi padre con voz sorprendida. —¿Está todo
bien?
Me estremecí al pensar que él pensaba que tenía que haber algo
mal para llamar. Ya era hora de hacer esto.
—Sí, todo está bien. ¿Puedes hablar?
—Espera un momento—. Entrecerré los ojos, tratando de distinguir
el crujido y el sonido que cruzó el altavoz antes de que mi padre
volviera a hablar. —Lo siento, salí a las carreteras y tuve que parar.
Mierda. No estaba pensando que estaría trabajando. La nieve era 38
ligera y débil, pero aún necesitaba mantener las carreteras seguras.
—No quise molestarte. Puedo llamar más tarde, o mañana, o en
otro momento, o... —Mis palabras murieron en mi garganta y la cara
de Finn se puso triste.
—No me estás molestando, —insistió papá. —Solo tenía que
subirme a la cuneta. ¿Qué hay en tu mente? 03/2020
Finn me apretó la mano con más fuerza y me dio un asentimiento
alentador. Respiré hondo y respondí:
—Estaba pensando en lo que dijiste esta noche... sobre reunirnos.
Yo... yo quiero.
La línea permaneció en silencio durante varios momentos antes de
que papá respondiera:
—¿En serio?
—Si tú quieres. No sabía si ofrecías seriamente o no. Si no quieres,
está bien. Sólo estaba-
—Quiero, —interrumpió rápidamente. —Harley, yo... —se aclaró la
garganta. —Realmente quiero.
La sonrisa de Finn casi le resquebrajó la cara y respondí:
—Está bien—. Mi amante estiró el cuello y me instó a continuar. —
Entonces, um... ¿cuándo funciona para ti?
 —Probablemente estaré ocupado con estos caminos por un
tiempo, así que mañana podría no ser el mejor. ¿Qué tal el lunes por
la noche?
—Finn y yo tenemos planes para el lunes—. No estaba dispuesto a
cancelar la degustación del pastel que tanto entusiasmaba a mi
prometido. —¿Y el martes?
—Tengo una reunión sindical esa noche. Me la saltaría, pero
estamos teniendo una votación importante.
—No, no quiero que te la saltes—. Pero su oferta calienta mi 39
corazón y me da esperanza. —¿Estás ocupado el miércoles?
—No, estoy libre el miércoles. ¿Te gustaría encontrarte en algún
lado o...?
—Supongo que podríamos encontrarnos para cenar. ¿Adónde te
gusta comer?
—Me gusta cualquier cosa. ¿Dónde te gusta? 03/2020
—No me importa. Tú eliges.
Finn puso los ojos en blanco y señaló el teléfono. Lo pasé y él
colocó la llamada en el altavoz.
—Hola Dwayne, este es Finn. Lamento interrumpir, pero se me
estaba haciendo un poco doloroso escuchar a escondidas—. Desearía
poder ver la reacción de papá ante mi hombrecito. —¿Te gustaría
venir a nuestra casa el miércoles por la noche? Me encantaría
cocinar, y tú y Harley pueden tomarse su tiempo para volver a
familiarizarse sin que los camareros se enojen porque están atando
una mesa.
Solté una carcajada y mi papá soltó una risita sorprendida.
—Claro, eso suena bien, Finn, —respondió. —¿Así que supongo que
tú y Harley viven juntos?
 —Sí, —respondió mi prometido con orgullo. —Pero no te
preocupes; pronto me convertirá en un hombre honesto—. Papá
volvió a reírse y agradecí la habilidad de Finn para romper la tensión.
—¿Cómo suenan las siete en punto?
—Perfecto. ¿Debo llevar algo?
—No diría que no a una botella de tu vino favorito.
—Lo tienes. ¿Puedes enviarme la dirección? —Las pocas veces que
papá y yo nos juntamos durante el año siempre estaba en un lugar
público; fue demasiado doloroso para mí ir a la casa donde crecí con 40
mi madre, y no estaba seguro de cómo reaccionaría papá al ver mi
casa y mis necesidades. Saber que Finn estaría aquí conmigo esta vez
me hizo sentir más valiente al respecto.
—Por supuesto, —respondió Finn con una sonrisa. —Espero verte
de nuevo, Dwayne. Te devolveré a tu chico. —Me entregó el teléfono
con un guiño. 03/2020
—Parece un buen hombre, —dijo papá. Finn sonrió ante el
cumplido y asentí, aunque no pudo verlo.
—Él es el mejor, —le respondí con seriedad. Finn pasó sus dedos
por mi cabello nuevamente y los tres nos quedamos en silencio por
un momento. —Bueno, supongo que mejor te dejo volver al trabajo.
—Sí, necesito volver a eso—. Papá dejó escapar un largo suspiro. —
Te veré el miércoles. ¿Y Harley?
—¿Sí?
—Gracias por llamar.
—Hasta pronto, —respondí, sin saber qué más decir. Tan pronto
como terminé la llamada, Finn atacó mis labios con un beso largo y
húmedo.
—Estoy tan orgulloso de ti, —dijo una vez que me soltó. —Y espero
no haberte molestado. No quise entrometerme; solo quería ayudar.
 —Nunca podrías molestarme, cariño—. Todo lo que Finn hizo fue
mejorar las cosas para mí. —Agradezco la ayuda.
Finn me besó de nuevo antes de aplaudir.
—Esto es muy emocionante. ¿Qué quieres que cocine, bebé?
Quiero que todo sea perfecto para ti.
—Todo será perfecto porque estarás aquí conmigo, —insistí. Finn
podría convertirme en un idiota honestamente, pero mi dulce
hombre desterró esa mierda de inmediato.
—Aw, bebé—. Se inclinó para besarme otra vez, pero se detuvo 41
cuando llamaron a la puerta. —Sostén ese pensamiento; nuestra cena
está aquí. —Finn me ayudó a sentarme antes de correr hacia la
puerta principal para recoger nuestra pizza.
Mientras comíamos, Finn y yo hablamos sobre la próxima visita de
mi padre. Le pedí que hiciera su lasaña que amaba (ganándome un
beso húmedo por apreciar su cocina), y se ofreció a hacer una tarta 03/2020
de queso después de preguntar cuál era el postre favorito de mi
padre. Finn estaba obligado y decidido a causar una buena impresión
y darnos la mejor noche posible.
Poco después de que termináramos de comer, Jake llamó para
decirle a Finn que había llegado a casa a salvo. Dijo que era porque no
quería quejarse, pero sabía que apreciaba a Finn que lo cuidaba.
Llené a mi primo en mi conversación con mi papá y Jake no podría
haber estado más feliz o más emocionado.
Finn se ofreció para limpiar la cena mientras yo hacía mi rutina
nocturna. Luego se unió a mí en nuestra habitación, se desnudó y se
metió en la cama a mi lado. Apoyó su cabeza en mi pecho y me frotó
el estómago mientras hablábamos de todo, desde nuestra boda hasta
nuestra luna de miel (que Finn estaba planeando; le dije que a donde
fuéramos sería perfecto porque estaríamos juntos, como dije, un
idiota), a mi padre. Era una rara ocasión que pasáramos una noche en
la cama hablando en lugar de devastarnos, pero no era menos íntimo.
Siempre fuimos abiertos y honestos el uno con el otro acerca de
nuestros pensamientos y sentimientos. Nos unió de una manera tan
significativa como cuando nuestros cuerpos estaban unidos.
En poco tiempo, noté que la respiración de mi hombre se
ralentizaba y sus golpes en mi vientre se volvían más flojos.
—Buenas noches, cariño, —le susurré.
Besó mi pecho y acarició su mejilla contra mi piel antes de susurrar: 42
—Buenas noches, bebé—. En unos momentos, Finn estaba
profundamente dormido.

03/2020
 Capítulo Cuatro

—¿Qué demonios le está tomando tanto tiempo? ¿Está peinando

sus pendejos o algo así?
La pregunta aleatoria de Finn casi me hizo resoplar por la nariz. 43
Estábamos estacionados a lo largo de la acera afuera del
departamento de Jake, esperando que él bajara y se uniera a
nosotros. Solo habíamos esperado unos dos minutos, pero Finn
estaba preparado y listo para partir.
Agoté el último trago de mi pop y puse la taza vacía en el soporte.
Finn estaba tan emocionado de salir de casa que comimos una cena 03/2020
de comida rápida camino a recoger a Jake.
—Estoy seguro de que estará bien, cariño, —tranquilicé. Finn
parecía menos que convencido mientras tocaba el volante y volvía a
mirar el reloj.
—Gracias por invitarlo a que nos acompañe a la degustación. Está
realmente emocionado de ser mi padrino y quiere ser parte de
todo—. Fue agradable que mi primo estuviera tan involucrado;
Además, pensé que tener una opinión adicional ayudaría si Finn y yo
teníamos problemas para decidir.
—Estoy feliz de tenerlo, —respondió Finn antes de entrecerrar los
ojos en el edificio de Jake. —Si se apurara al infierno—. Bufé de
nuevo; estábamos en camino de llegar casi una hora antes para la
degustación, pero no estaba dispuesto a señalarlo. Amaba a mi
primo, pero no lo suficiente como para sacrificarme por el huracán
Finn. —Además, estoy seguro de que Miles estará muy feliz de que
Jake venga.
Finn eligió a Miles, su amigo que trabajaba en la cafetería cerca del
salón, para ser su padrino y también se unió a nosotros hoy. Finn dijo
que Miles era la única persona además de Jake y yo, a quien le
gustaba lo suficiente como para pasar más de una hora. Le creí, pero
también sabía que él y el joven barista eran amigos muy cercanos.
Pasaron mucho tiempo charlando mientras Finn estaba en sus
muchos cafés durante sus turnos en el salón, y también se reunían 44
para almorzar o para ver una película de vez en cuando. Realmente
me gustó Miles; era un niño dulce, y siempre había sido respetuoso y
servicial conmigo. Finn no le habría dado la hora del día si no fuera
así.
—Sí, parecen llevarse muy bien—. Jake y Miles se conocieron por
primera vez en la parrillada cuando le pedí a Finn que se casara 03/2020
conmigo. Se unieron a los deportes y la escuela. Salimos todos juntos
a cenar un par de veces, y los dos siempre hablaron y pasaron un
buen rato juntos. Fue muy agradable tener un círculo estrecho de
amigos; era algo que nunca había tenido antes de que Finn entrara en
mi vida.
—Quise decir porque Miles está enamorado de Jake, —Finn se
encogió de hombros, revisando la hora nuevamente.
—¿Qué? —Grité demasiado fuerte. La sorpresa del momento me
quitó el control de volumen.
Finn volvió los ojos entrecerrados hacia mí.
—¿No lo sabías?
—¡No, no lo sabía! ¿Por qué no me lo dijiste?
Finn apoyó su mano sobre mi muslo.
—Lo siento bebé, pensé que era obvio.
 —Obvio? ¡Ni siquiera sabía que Miles era gay!
Mi amante me miró con los ojos muy abiertos.
—¿De verdad? Tiene una bandera del orgullo gay tatuada en su
muñeca.
—¿Lo hace?
Finn me sorprendió al lanzarme a través de la consola y tomar mis
labios en un beso acalorado.
—Dios, me pone tan duro que ni siquiera notas a otros hombres, —
jadeó entre su ataque en mi boca. 45
—¿Por qué iba a hacerlo? Tengo al hombre más sexy y perfecto
aquí.
—Si supiera que Jake tardaría cinco minutos más, te chuparía la
polla ahora mismo.
—Sigue hablando así y solo necesitarás tres minutos—. Finn metió
la lengua en mi garganta y me besó con fuerza hasta que mi ventana 03/2020
quedó completamente atrapada por el calor que generaban nuestros
cuerpos.
Lamentablemente me quité a Finn de encima. Sabía que, si íbamos
mucho más tiempo, cumpliría su promesa y me chuparía en ese
momento, y no pensé que eso fuera algo que Jake quisiera
interrumpir nuevamente.
Una vez que Finn estaba de vuelta en su propio asiento y mi sangre
regresó al norte a mi cerebro, mis pensamientos volvieron a nuestra
conversación anterior.
—Miles sabe que Jake es recto, ¿verdad? —No quería que le
rompieran el corazón al niño.
—Él sabe que Jake nunca ha estado con un hombre, —asintió Finn.
Ladeé la cabeza ante su elección de palabras, pero él la ignoró y
continuó: —Pero no puede evitarlo. El corazón quiere lo que quiere.
 —¿Crees que Jake lo sabe?
—Por favor, él es tan ajeno como tú, —sonrió. Ni siquiera podía
ofenderme porque era muy cierto.
—No creo que debamos decirle—. Miles solo tenía diecinueve
años; seguramente su enamoramiento se desvanecería rápidamente.
No tenía sentido crear tensión o incomodidad entre los dos,
especialmente porque todos pasaríamos mucho tiempo juntos con mi
boda y de Finn.
—Estoy de acuerdo. Simplemente les dejaremos resolverlo por sí 46
mismos.
En ese momento, la puerta trasera del auto de Finn se abrió y Jake
se dejó caer en el asiento trasero.
—Dios, muchachos, todo está nublado aquí. ¿Qué demonios han
estado haciendo?
—Sabes lo que hemos estado haciendo, —bromeó Finn. —Adivina 03/2020
en qué asiento lo hicimos.
—Bueno, no estoy pegado a la silla, así que supongo que no fue
aquí.
Finn se rio a carcajadas.
—Está bien, eso fue lo suficientemente divertido como para
perdonarte por tomar tanto tiempo.
—Lo siento, —ofreció Jake. —Yo tenía que ir a la ducha después de
mi turno con el equipo, tenía tres fluidos corporales diferentes en mí
y ninguno de ellos era mío.
—Si fuera un hombre soltero, estaría celoso, —respondió Finn,
haciendo que Jake resoplara.
—Confía en mí, no querrías esos fluidos. Dos eran sangre y uno era
el vómito de una viejita.
—Ew, —respondió Finn simplemente mientras salía a la carretera.
 —Entonces, aparte de los fluidos corporales, ¿cómo estuvo tu
primer día? —Pregunté con curiosidad. Jake trabajó muy duro para su
educación, y esperaba que disfrutara de su nueva carrera.
—Fue genial. De ritmo rápido y un poco abrumador, pero me
encantó.
Miré por encima del hombro para sonreír a mi primo.
—Estoy muy contento, Jake. Y estoy muy orgulloso de ti.
—Gracias, primo —le devolvió la sonrisa.
—Oh, Dios mío, ustedes dos son tan jodidamente adorables, — 47
intervino Finn.
Jake nos contó más sobre su primer día, entrando en detalles sobre
cómo los fluidos terminaron en él hasta que Finn dijo que iba a
proporcionar otra muestra de vómito si Jake no suavizaba las
descripciones.
—Aquí vamos, —anunció Finn mientras estacionaba junto a la 03/2020
acera fuera de la cafetería. —Última parada antes de la hora del
pastel.
Pocos minutos después, Miles apareció por la puerta principal,
sonriendo y sosteniendo un porta bebidas. Agitó su cabeza y corrió
hacia el auto, trepando rápidamente al lado de Jake.
—¡Hola, chicos! —Saludó alegremente, y todos lo recibimos a
cambio. —Traje bebidas para todos—. Su mano apareció entre los
dos asientos delanteros sosteniendo una taza. —Un café con leche
moca para Finn...
Mi amante tomó su bebida y giró la cabeza hacia el asiento trasero.
—Ven aquí, tú—. La cara de Miles apareció en la grieta y Finn le dio
un beso en la mejilla. —El mejor padrino de todos los tiempos.
Miles se rio y desapareció. Un momento después, su mano estaba
frente a mí, sosteniendo otra taza.
 —Sé que no eres fanático del café, así que te compré un chocolate
caliente, Harley.
—Vas a tener que intensificarlo, Jake, —bromeé. —Miles te está
ganando en el departamento de padrinos—. Finn gimió su acuerdo
alrededor de un bocado de moca antes de regresar a la carretera.
—Tómatelo con calma, —cortó Jake. —¿Necesito recordarte que
antes estaba cubierto de sangre y vómito?
—Oh, Dios, ¿estás bien? —Preguntó Miles. Miré hacia atrás para
encontrar sus rasgos pintados con preocupación y su mano 48
descansando sobre el hombro de Jake. Finn me dio un codazo y alzó
las cejas cuando lo miré. Me pasé una mano por la boca para no
reírme. ¿Cómo no me di cuenta de esto?
—No era mío, —aseguró Jake. Llenó a Miles en su primer día de
trabajo mientras el joven escuchaba con gran atención.
—Eres increíble, —dijo Miles cuando Jake terminó su historia. Jake 03/2020
hizo un ruido de pedo con la boca en desacuerdo, pero Miles siguió
adelante.
—Sí, lo eres. Lo que haces es muy importante; salvas vidas, Jake. —
Miré por el espejo retrovisor para ver a Miles mirando a Jake como si
colgara la maldita luna. Sus ojos marrones oscuros eran realmente
brillantes mientras miraba a mi primo, quien parecía, como lo dijo
Finn, ajeno al afecto del joven.
—Gracias, —respondió Jake con una sonrisa. —Simplemente me
gusta ayudar.
—Increíble, —repitió Miles en un susurro. Sacudió la cabeza como
si estuviera saliendo de un aturdimiento y miró el porta bebidas en su
regazo. —Oh, yo también te traje algo. Sé que tampoco eres fanático
del café, así que te hice una sidra de manzana con caramelo. Caliente
y dulce; igual que tú. —Finn dejó de reírse mientras tomaba otro
trago de café con leche.
—Gracias, amigo, —sonrió Jake mientras tomaba la taza. —Me
encanta el caramelo—. Supongo que se perdió la parte 'caliente y
dulce'.
Finn se inclinó lentamente hacia mí y susurró:
—Disfrutando el show?
Me di cuenta de que todavía estaba mirando el espejo retrovisor
como un acosador. 49
—Ahora que soy consciente de ello, no puedo evitarlo, —le susurré.
—¡Jake no tiene ni idea!
—Debe correr en la familia, —respondió con una sonrisa burlona.
—¿De qué están susurrando ustedes dos allá adelante? —Preguntó
mi primo.
—Le estaba diciendo a Harley que deberíamos llevar cualquier 03/2020
glaseado de pastel extra a casa con nosotros para que pueda comerlo
de mi trasero más tarde, —se encogió de hombros Finn.
—¡Jesús, Finn! —Jake ladró, y el resto del auto estalló en
carcajadas. —¡La próxima vez dime que no es asunto mío!
Hablamos, reímos y bromeamos mientras Finn conducía el resto del
camino hacia la ciudad. Aparcó en el estacionamiento del centro
comercial donde había quedado con Anthony. La razón es que
podríamos sentarnos en el patio de comidas y tomarnos nuestro
tiempo sin tener que pedir nada o preocuparnos por un personal que
intenta acelerarnos.
Una vez que estuvimos adentro, Jake y Miles juntaron un par de
mesas y Finn alejó una silla del extremo para que yo pudiera rodar
hacia la mesa. Los cuatro nos sentamos a un lado, esperando a que
Anthony apareciera.
 —¿Deberíamos extendernos un poco? —Preguntó Miles mientras
señalaba hacia los comedores vacíos en el lado opuesto de la mesa.
—Supongo que esto parece un poco amenazante, —estuvo de
acuerdo Finn.
Jake miró a lo largo de la mesa con los ojos muy abiertos.
—¿Te preocupa amenazar a alguien?
La mandíbula de Finn cayó y sus cejas se fruncieron.
—Te haré saber que soy amable con todos hasta que me cabreen,
muchas gracias. No amenazo a nadie hasta que se lo ganen. 50
Jake se rió con un movimiento de cabeza y golpeó el hombro de
Miles con el suyo.
—Vamos, avancemos—. Miles saltó rápidamente de su asiento,
siguiendo a Jake como un perrito perdido. Se sentó en la silla frente a
mí y Jake ocupó el lugar frente a Finn.
—¡Hola, ahí está! —Exclamó Finn. Saltó de su asiento y agitó ambos 03/2020
brazos sobre su cabeza. Un hombre que supuse que era Anthony le
devolvió el saludo desde el pasillo. Finn solo me había mostrado fotos
de pastel del sitio web de Anthony, pero aparentemente había
investigado más por su cuenta desde que reconoció al hombre de
vista.
Anthony era un hombre afroamericano alto y regordete con una
cabeza suave y afeitada y una amplia sonrisa. Sus dientes brillaron
contra su piel de cacao mientras se acercaba a nuestra mesa. En el
momento en que dejó el libro y los contenedores de comida, Finn se
abalanzó, envolviéndolo en un fuerte abrazo de oso y sacudiéndose
sobre los dedos de los pies para presionar un beso en su mejilla.
—Está bien, eso responde a mi primera pregunta, —dijo Anthony
con una sonrisa. —Supongo que eres Finn.
 —Sí, y este es mi prometido Harley, —respondió Finn mientras
caminaba a mi lado y me pasaba el brazo por los hombros.
—Encantado de conocerte, —ofreció Anthony, tendiéndole la
mano. La sacudí con una sonrisa y le devolví el saludo.
—Y estos son nuestros mejores hombres, Jake y Miles, —señaló
Finn.
—Encantado de conocerlos a los dos, —dijo Anthony, sacudiendo
cada una de sus manos también. —¿Ustedes dos son una pareja
también? 51
—No, solo amigos, —respondió Jake con una sonrisa amable.
—Maldición, esperaba hacer más negocios, —respondió Anthony
con un chasquido de dedos. Todos se rieron, incluido Miles, que se
había desinflado un poco ante la respuesta de Jake. —Déjame tomar
algunos tenedores y estaré contigo—. Se acercó a un vendedor de
comida y regresó con cuatro utensilios de plástico en la mano. —Lo 03/2020
siento; por lo general, tengo configuraciones de lugar elegantes para
degustaciones en la tienda. ¿Está bien?
—No te atrevas a disculparte, —afirmó Finn y Anthony abrió mucho
los ojos. —Estás siendo tan amable de pasar por el problema extra
por nosotros y realmente lo apreciamos—. Tomó un tenedor con una
sonrisa amistosa. —Esto es maravilloso.
—Pensé que solo mi esposo podía regañarme y ser dulce al mismo
tiempo, —dijo Anthony con una sonrisa.
—Es un regalo, —Finn se encogió de hombros. —Y creo que
realmente necesito conocer a tu esposo.
—Cariño, si te ponemos a ti y a Marshall en la misma habitación
juntos, el lugar puede explotar. No puede retener tanta azúcar. —Mi
amante le dio una sonrisa orgullosa y Jake resopló. Anthony pasó el
resto de los tenedores y se sentó junto a Finn; obviamente podía
decir quién era no solo el alfa en este grupo, sino el que complacía. —
Está bien, así que antes de llegar a las cosas divertidas, necesito
hacerte algunas preguntas—. Finn y yo asentimos. —¿Cuándo es tu
boda?
—Tres semanas, —respondió Finn, y Anthony abrió mucho los ojos.
—¿Tres semanas?
—Sé que es con poca antelación, pero fue el único momento en
que pudimos obtener nuestro lugar. ¿Es demasiado tarde para
ordenar? —La tristeza en los ojos de mi amante casi me partió el 52
corazón en dos.
Anthony dejó escapar un largo suspiro y le dio a Finn una sonrisa.
—Por lo general, pido un aviso de tres meses, pero esta es mi
temporada lenta, por lo que deberíamos estar bien. Además, me
agradan, muchachos—. Se rió entre dientes cuando Finn le dio otro
abrazo. —Entonces, ¿tienes un diseño en mente? 03/2020
—¡Sí! —Finn lo soltó y aplaudió emocionado mientras recuperaba
el boceto de mi bolso. —Gracias, bebé, —dijo mientras se lo
entregaba. Me dio un beso en los labios y deslizó el papel hacia
Anthony.
—Wow, esto es hermoso, —exclamó el panadero mientras miraba
el dibujo. Había esbozado la visión de Finn de un pastel de tres niveles
en blanco con una línea de margaritas rojas en cascada de arriba a
abajo.
—Mi Harley lo dibujó, —dijo Finn. Tomó mi mano y besó
suavemente mis nudillos. —Tiene mucho talento—. Hundió los dedos
en mi barba. —Y sexy. Ven aquí, bebé. Te quiero mucho.
—Lo- —No pude terminar mi oración antes de que Finn se
enganchara en mis labios. Esto siempre sucedía cuando trabajábamos
en algo relacionado con la boda. Finn quedó tan enamorado y
excitado cuando planeó nuestra ceremonia y nuestro futuro.
—Necesito algo de eso en mi vida, —dijo Miles con un suspiro.
—Finn nunca me da lengua, así que no creo que él te dé nada
tampoco, —bromeó Jake. Abrí los ojos para darle a mi primo una
mirada irritada y vi a Finn alejarlo sin siquiera romper su ritmo.
—Eso está de moda y todo, pero me prometieron que las pollas no
saldrían durante esta cita, y siento que nos estamos acercando
peligrosamente, —bromeó Anthony. Jake y Miles se rieron cuando 53
Finn me picoteó los labios y se apartó.
—Lo siento, no puedo evitar rodearme de él, —ofreció Finn,
aunque no parecía muy apenado.
—No hay problema, —aseguró Anthony. —Confía en mí, es
agradable ver parejas que realmente se aman. He tenido clientes que
lucharon durante toda la degustación. Incluso presencié que una 03/2020
dama abofeteara la cara de su prometido y saliera de mi tienda
porque no probaría un bocado de pastel de fresa. Resulta que el tipo
era alérgico.
—Bueno, ¡espero que no se casara con ella! —Exclamó Miles.
—Oh, lo hizo totalmente, pero se divorciaron menos de seis meses
después.
—Sorpresa, —respondió Finn con un giro de ojos.
—Pero ya basta de ellos, —continuó Anthony. —Volvamos a este
dibujo. Puedo garantizar este diseño, además, será fácil hacer que el
pastel sea más grande o más pequeño agregando o quitando niveles
según la cantidad de invitados que esperen.
—Estamos esperando alrededor de cuarenta personas, —respondí.
La mayoría del número era mi equipo de baloncesto; los otros eran
familiares y algunos compañeros de trabajo y clientes que Finn invitó
del salón. No sería una gran multitud, pero todos los que vinieron
fueron importantes para nosotros.
—Bueno, entonces, sugeriría mantener el pastel en tres capas. Por
supuesto, pueden guardar el nivel superior para su primer
aniversario, e incluso con solo servir a los otros dos, deberían tener
sobras.
—Realmente conoces tu mierda, —respondió Finn, haciendo que
Anthony respirara. —Suena perfecto—. Se volvió hacia mí y me dio
una sonrisa soñadora. —Todo se está uniendo, bebé. No puedo 54
esperar. —Él atacó mis labios otra vez y Anthony se rió entre dientes.
—Aquí, tengo algo más para que puedas mordisquear—. Finn
parecía un poco perturbado por ser interrumpido hasta que Anthony
abrió el recipiente de plástico que traía, revelando muchos pequeños
cuadrados de pastel. Entonces sus ojos brillaron de alegría.
—Ahora estamos hablando, —dijo Jake con una expresión 03/2020
hambrienta.
—Hoy traje una variedad de mis sabores más vendidos; vainilla,
limón, zanahoria y moca.
—Oh, Dios, soy una puta de moca, —gimió Finn.
Anthony volvió a reírse cuando levantó una bandeja del contenedor
y la colocó en el centro de la mesa donde todos pudiéramos
alcanzarla.
—Aquí están todas las muestras de pasteles, además de mi
glaseado casero de crema de mantequilla y una selección de rellenos.
Siéntanse libre de excavar y díganme qué le gusta.
—Probemos todos al mismo tiempo, —sugirió Finn, y todos
asentimos y recogimos nuestros tenedores. —¿Cuál deberíamos
probar primero, bebé?
 —¿Por qué no comenzamos de manera simple con vainilla y vamos
desde allí?
—Mm, belleza y cerebro, —respondió antes de robar otro beso.
Tomé un bocado de pastel de vainilla en mi tenedor y lo sumergí en
relleno de caramelo. —¡Espera! Tenemos que practicar. —Finn
consiguió un mordisco similar en su propio utensilio y me lo acercó a
los labios. Tomé la pieza y tarareé cuando su dulce sabor golpeó mi
lengua. Le di un mordisco a Finn y él cerró los ojos y asintió con
aprobación. 55
—Supongo que tenemos que alimentarnos, —bromeó Miles,
sacando juguetonamente su labio inferior.
—Aquí, no quiero que te sientas excluido—. Jake apuñaló un
mordisco y lo acercó a Miles, cuyos ojos se abrieron. Se lamió los
labios antes de inclinarse y lentamente envolvió su boca alrededor del
pastel y lo quitó del tenedor de Jake, mirándolo a los ojos todo el 03/2020
tiempo.
No sabía cómo reaccionar ante la escena que tenía delante. Miré a
Finn, que estaba mirando a la pareja con los ojos muy abiertos,
aparentemente tan aturdido como yo. Anthony tenía la cabeza
ladeada y el ceño fruncido, como si tratara de descubrir la situación.
—Bueno, no me dejes colgado, —dijo Jake antes de abrir la boca de
par en par. Miles jugueteó con su tenedor mientras tomaba un
bocado con una mano temblorosa. Cuidadosamente alimentó a Jake,
quien echó la cabeza hacia atrás y gimió. Miles volvió a lamerse los
labios, sin apartar la mirada de mi primo.
Finn se inclinó y me susurró al oído:
—Diez dólares a que Miles acaba de venirse en sus pantalones—.
Ladré una risa sorprendida, pero traté de taparla con una tos. Miles
salió de su trance y sus mejillas se sonrojaron.
 Mi primo despistado solo sonrió al grupo y preguntó:
—¿Qué intentamos después?
Cada pastel era tan delicioso como el último, y todos estuvimos de
acuerdo en que nos encantó el pastel de limón con relleno de
frambuesa, el pastel de zanahoria con crema de praliné y el pastel de
vainilla con caramelo.
—Tengo la sensación de que guardamos lo mejor para el final, —
dijo Finn mientras señalaba con entusiasmo el pastel de moca. Tan
pronto como resbalé, la golosina pasó por sus labios, echó la cabeza 56
hacia atrás y gritó: —¡Oh, joder, sí! Harley, dame otro bocado
mientras me pellizcas el pezón y juro por Dios que me vendré en los
jeans.
El resto de la mesa estalló en carcajadas mientras parpadeaba mi
lujuria. Yo realmente quería probar su afirmación, pero no quiero a
nadie más presenciando la belleza que era Finn en la agonía de la 03/2020
pasión.
—Necesito un bocado después de esa crítica entusiasta, —se rió
Miles.
—Está bien, pero si te estoy pellizcando el pezón, necesito que te
des la vuelta; estoy en la zona de chapoteo, —respondió Jake. Con la
forma en que cayó la mandíbula de Miles, me pregunté si el pellizco
sería necesario. Jake aprovechó la oportunidad para darle de comer a
Miles el pastel mientras tenía la boca abierta. El joven asintió con una
sonrisa. —Eso es delicioso para nosotros.
Finn rápidamente me dio una muestra.
—¿Qué opinas, bebé? ¿Quieres este sabor para nuestra capa
superior?
No me encantó. El pastel en sí estaba húmedo y perfectamente
preparado, pero había un fuerte sabor a café mezclado con el
chocolate que me apagaba. Probablemente fue lo que Finn disfrutó al
respecto.
—Si eso es lo que quieres, —le respondí una vez que me atraganté.
Sufriría si hiciera feliz a mi hombre.
Finn me entrecerró los ojos.
—No te gusta, ¿verdad? —No había nada oculto de Finn; podía
leerme como un maldito libro.
—Es un buen pastel, —respondí rápidamente, mirando a Anthony.
No quería herir sus sentimientos. —Simplemente no soy un gran 57
fanático del café.
El panadero se echó a reír.
—Está bien, Harley; tienes permitido que no te guste.
—Estoy con Harley en este caso, —agregó Jake. —El chocolate es
bueno, pero tampoco me gusta el café—. Dirigió su mirada a
Anthony. —Pero a Finn y Miles sí, y les encanta. 03/2020
Anthony sacudió la cabeza con una sonrisa brillante.
—Ustedes son demasiado dulces.
—Sí, lo son, —respondió Finn amorosamente, pasando sus dedos
por mi cabello, —Pero esta es tu boda también y quiero que seas feliz
con todo. Si no te gusta el sabor, no lo conseguiremos.
—Pero obviamente te encanta y quiero que tengas todo lo que
quieras, —discutí.
—Eres tan sexy cuando eres desinteresado. Estoy tan duro como un
ladrillo en este momento, —respondió Finn sin vergüenza. —Siéntelo.
—¡Maldición, Finn! —Exclamó Jake mientras Miles se reía entre
dientes. —Harley, mantén tus manos sobre la mesa. He entrado con
suficiente mierda estos últimos meses; verlo ahora me manchará el
pastel para siempre.
Miles resopló una carcajada.
 —Mancha.
—Esta es la degustación favorita que he organizado, —respondió
Anthony con seriedad, y todos nos disolvimos en risas. —Y tengo una
idea; ¿por qué no vas con los otros tres sabores para tu pastel de
bodas, y también puedo hacer un par de docenas de pastelitos de
moca? Puedo decorar cada uno de ellos con una pequeña margarita
roja para que coincida con el pastel.
—¡Eres un genio! —Exclamó Finn antes de salir de su silla para
envolver a Anthony en un abrazo. 58
—Yo no diría eso. Yo solo... oh wow, no estabas bromeando sobre
ese ladrillo, ¿verdad? —Jake y Miles rieron a carcajadas cuando
alcancé la silla vacía de Finn y lo aparté de Anthony.
—Lo siento bebé, no estaba pensando, —Finn se tranquilizó
mientras se acurrucaba a mi lado. —Sabes que es solo para ti.
—Pero déjame decirte felicitaciones, —Anthony me dijo con una 03/2020
mirada impresionada. Me hinché de orgullo y asentí con las gracias.
Pronto lo resolvimos todo, desde el diseño hasta el tamaño de la
capa y los sabores al precio. Anthony hizo todo sin esfuerzo de
nuestra parte y mi hombre casi vibraba de felicidad.
—Ha sido un placer trabajar con todos ustedes, y espero con ansias
su boda, —dijo Anthony mientras se reunía. No solo estaba haciendo
nuestro pastel, Finn insistió en que él y su esposo también vinieran a
la ceremonia y la recepción.
—Muchas gracias por reunirte con nosotros aquí, —le respondí.
Significó mucho para mi Finn y quería agradecerle al panadero por
su tiempo y amabilidad.
—Y por ayudarnos con todo. Tuvimos una experiencia negativa con
otra panadería que fue... menos complaciente.
—Eran perras, eso es lo que eran, —refunfuñó Finn.
 Anthony entrecerró los ojos.
—¿Sus nombres riman con Cola? —Finn asintió con la cabeza
vigorosamente y Anthony resopló con disgusto. —Cariño, déjame
decirte cómo me metí en el negocio de la panadería; cuando Marshall
y yo nos comprometimos por primera vez hace casi diez años, nos
enteramos de Lola's Bakery y ahorramos durante meses para pedir
uno de sus pasteles de boda. No teníamos mucho dinero en ese
momento, pero queríamos derrochar un pastel especial para celebrar
nuestro gran día. Era algo que todos nuestros invitados podían 59
disfrutar y que podíamos recordar a través de las fotos.
Anthony cruzó los brazos sobre su grueso pecho y continuó:
—Así que puedes imaginar lo afligidos que estábamos cuando
finalmente ahorramos suficiente dinero para ordenar, pero nos
dijeron que no atenderían a un par de maricones—. Jake y Miles
jadearon desde el otro lado de la mesa. 03/2020
Finn tomó la mano de Anthony.
—Lo siento mucho. Más o menos nos dijeron lo mismo. Sin
embargo, no habíamos escatimado ni salvado; no puedo imaginar lo
difícil que fue para ti.
Anthony le dio a mi amante una sonrisa de adoración antes de
continuar:
—Fue más difícil para Marshall. Es un luchador que pondrá a una
perra en su lugar, pero eso lo aplastó. Quería hacerlo sentir mejor, así
que busqué en línea recetas de pasteles y diseños fáciles. Tenía un
pastel de dos niveles con glaseado azul esperándolo un día después
del trabajo, y cuando lo probó, dijo que era el pastel más delicioso
que había probado jamás. Entonces, seguí practicando y terminé
haciendo nuestro pastel de bodas solo. Nuestros invitados dijeron
que era la cosa más deliciosa que habían probado también.
 —En pocas palabras, pasé años construyendo clientes y
perfeccionando mi oficio mientras trabajaba en mi trabajo principal
para pagar las cuentas. Marshall retrocedió la mayor parte de su
sueldo como pudo para ayudar a construir mi sueño, y el año pasado
finalmente pude hacer de esto mi carrera a tiempo completo. Todavía
estoy trabajando en comprar un lugar más grande, pero no podría
estar más feliz.
—Eso es hermoso, —susurró Finn mientras abrazaba a Anthony. Mi
dulce hombre estaba de espaldas a mí, pero por su voz temblorosa 60
me di cuenta de que estaba llorando, así que froté círculos
reconfortantes en su espalda.
—Bien por ti, —agregó Miles. —Estoy feliz de que hayas podido
convertir tu situación en algo positivo y darle un gran 'jódete' a Lola's.
Es desgarrador que hoy en día todavía haya tanto odio hacia
nosotros. 03/2020
Jake giró la cabeza para mirar a Miles.
—¿Nosotros?
Miles entrecerró los ojos y dijo:
—¿Sí? —Cuando mi primo todavía parecía desconcertado, explicó:
—Soy gay, Jake.
Jake parpadeó con fuerza.
—¿Lo eres?
Anthony empujó lentamente a Finn y se inclinó más sobre la mesa
para tener una mejor vista de Miles y mi primo amable pero simple.
Finn ya no tenía los ojos llorosos, sino que también miraba al dúo con
extremo interés.
—¿No lo sabías? —Miles preguntó seriamente y Jake sacudió
lentamente la cabeza. —¿Nunca te diste cuenta de esto? —Se
arremangó la manga para revelar la bandera del arcoiris que yo
tampoco conocía, pero que no estaba dispuesto a hablar.
—Lo hice, pero um... —Las mejillas de Jake se tiñeron de rojo
cuando respondió: —Pensé que era la bandera italiana. Ya sabes,
porque tu apellido es Romano.
Finn soltó una carcajada, pero rápidamente se tapó la boca con la
mano. Gruñí y Anthony susurró:
—Buen señor.
—Jake, te acabas de graduar de la universidad, —le dije 61
rotundamente, y Finn resopló otra carcajada detrás de su mano.
—¡No para la geografía! —Jake discutió. —¡No soy un experto en
banderas! Además, solo recibí miradas de su tatuaje; ¡está en el
interior de su brazo! Ahora que puedo ver que es un arcoiris,
obviamente sé lo que significa; soy un padrino en la boda gay de mi
primo por el amor de Dios. 03/2020
—¿Esto hace que las cosas sean extrañas entre nosotros? —
Preguntó Miles suavemente, mirando a Jake con tristeza en sus ojos.
—Si no supieras que era gay cuando... —Sus palabras se extinguieron,
pero hizo un gesto hacia la bandeja de pastel en su mayoría vacía,
obviamente hablando de alimentarse mutuamente. —¿Eso te hace
sentir incómodo? —Él tragó saliva. —¿Te hago sentir incómodo? —
Todos sentados a mi lado de la mesa miraban a mi primo con miradas
con los ojos muy abiertos.
—Por supuesto que no, —respondió Jake, luciendo un poco
ofendido. —Miles, me gustaste antes, entonces ¿por qué demonios
no me gustarías ahora? Somos amigos y me divierto saliendo contigo.
Eso no va a cambiar por el agujero en el que metes la polla.
 Puse los ojos en blanco ante lo idiota que era, pero me detuve
cuando me di cuenta; esa es toda la diferencia que vio Jake. No juzgó
ni asumió ni compró los estereotipos.
Finn se sorbió a mi lado y pronunció:
—Eso es lo más hermoso que he escuchado—. Supuse que alguna
vez se había dicho de una declaración sobre pollas y agujeros.
Miré a Anthony, encontrándolo sonriendo y asintiendo con la
cabeza.
—El mundo necesita más gente como tú, Jake. 62
Miles suspiró y miró a mi primo, luciendo aún más enamorado que
nunca. Jake simplemente agarró el último trozo de pastel de la
bandeja y se lo metió en la boca, totalmente a gusto y como si sus
palabras no se vieran como un gran problema. Maldita sea si eso no
me hizo amar al chico más.
03/2020
*****

Después de dejar a Jake en su casa y a Miles en el café, Finn

prácticamente flotó en nuestra casa. Todavía estaba en la nube nueve
después de la degustación.
—Me encanta verte tan feliz, cariño.
—¿Cómo puedo no estarlo? —Se sentó en mi regazo y se acurrucó
en mi abrazo. —Todo está listo para nuestra boda y en tres semanas,
me casaré con el hombre más asombroso del mundo.
—Me caso con el hombre más asombroso del mundo, —discutí.
—Aw, bebé, eres tan lindo cuando te equivocas, —bromeó. Me reí
entre dientes mientras él se movía en su asiento hasta que se sentó a
horcajadas sobre mis muslos. —Eres increíble y perfecto y te amo
mucho.
 Ni siquiera tuve tiempo de responder a sus dulces palabras antes de
que Finn tomara mis labios con los suyos. Me mordió el labio inferior
antes de arrancarlo entre sus dientes y tirar hacia atrás. Cuando
jadeé, hundió su lengua en mi boca.
Nuestras lenguas se arremolinaban y se enredaban juntas,
saboreando cada centímetro de la otra. Tarareaba el dulce sabor de la
crema de mantequilla que se aferraba a la carne de Finn. Un
escalofrío me sacudió cuando me lamió y me hizo cosquillas en el
paladar. 63
Mi amante devoró mis labios hasta que ambos respiramos sin
aliento. Su polla dura presionó contra la mía mientras se mecía contra
mí. Finn agarró la parte inferior de mi camisa y despegó la tela de mi
pecho, solo separó nuestros labios el tiempo suficiente para tirar de
la parte superior por mi cabeza.
Le quité la camisa y gemí en su boca cuando la suave piel de su 03/2020
pecho tocó la mía. Su latido era salvaje detrás de sus costillas y
coincidía con el mío.
Finn elevó mis labios y descansó su frente sobre la mía, mirándome
profundamente a los ojos.
—Bebé, hay algo que he fantaseado contigo por un tiempo ahora.
¿Crees que podríamos intentarlo?
No tenía idea de lo que podría ser, pero sabía que lo que mi
hombre sexy había preparado iba a ser bueno.
—Lo que sea, Finn, —respiré.
Me dedicó una sonrisa maliciosa antes de bajarse de mí y quitarse
los zapatos y los calcetines antes de quitarse los pantalones y la ropa
interior. Tragué saliva mientras miraba fijamente su larga y gorda
polla que estaba atenta.
—Ven conmigo.
 Me condujo a nuestra habitación y a la silla sexual que usábamos
con tanta frecuencia que ni siquiera la guardamos. Finn dio unas
palmaditas en el asiento y me transferí. Pensé que ya habíamos
intentado todas las posiciones posibles con eso, así que esperaba
descubrir la fantasía de mi hombre.
Finn apartó el catre y se puso de rodillas delante de mí. Me quitó
las zapatillas de deporte y apoyé el trasero de la silla con las manos
para que pudiera quitarme los jeans y los boxers. Tenía la piel de
gallina porque estaba completamente desnudo, Finn se levantó y 64
recogió mi anillo de la polla de la mesita de noche. Cuando regresó a
mí, cayó de rodillas nuevamente y deslizó la goma por mi longitud.
—Voy a envolver mis labios alrededor de esta gran y hermosa polla
y quiero que me folles la garganta hasta que explotes. Luego voy a
beber cada gota de tu semen.
Me estremecí de nuevo ante su sugerencia traviesa. Finn me había 03/2020
chupado docenas de veces, pero nunca había estado a cargo de la
experiencia. Una preocupación me atravesó.
—No quiero lastimarte.
Finn acarició sus manos arriba y abajo de mis muslos.
—Nunca podrías lastimarme, bebé—. Aparentemente pudo sentir
mi inquietud, porque agregó: —Si necesito que pares, levantaré mi
mano, ¿de acuerdo? —Asentí con la cabeza y Finn sonrió de nuevo. —
Gracias. No sabes cuánto tiempo he querido esto.
Me sorprendió que uno, Finn esperó tanto tiempo para hablarme
de su deseo y dos, que me estaba dando las gracias a mí por el placer
que él estaba, sin duda, a punto de darme.
Finn presionó un suave beso en mi punta y se lamió los labios,
recogiendo la gota de pre-semen que se aferró a su piel mientras
retrocedía. Me dio un guiño sensual antes de abrir su mandíbula y
tomar mi corona en su boca. Luego se calmó, y supe que esa era mi
señal.
Me di la vuelta a mi estómago, empujando suavemente las caderas
hacia delante. Gemí cuando mi polla se deslizó lentamente entre los
labios de Finn y a lo largo de su lengua. Mantuve un ritmo lento,
empujando cautelosamente dentro y fuera de la succión caliente de
la boca de mi amante.
Finn levantó la mano y yo inmediatamente detuve mis
movimientos. 65
—Lo siento mucho, cariño. ¿Te lastimé?
Finn me sacó la polla con un pop y me dio una dulce sonrisa.
—No, cariño. Quería que vieras lo fácil que es para mí hacerte saber
si necesito que pares. No quiero que te detengas. Fóllame la garganta
como si me golpearas el culo.
—Maldición, esa boca sucia me atrapa cada vez—. Finn volvió a 03/2020
guiñar un ojo y envolvió sus labios alrededor de mi polla,
manteniendo sus ojos en los míos. Respiré hondo y di otra vuelta más
firme de mis abdominales, empujando mi polla aún más en su boca.
Empujo una y otra vez, cada vez un poco más fuerte y hundiéndome
un poco más. Los ojos de Finn se giraron antes de cerrarse.
—Oh, Dios, Finn, te sientes tan bien, —gemí mientras chasqueaba
las caderas hacia adelante, pasando la punta por la parte posterior de
su garganta. Mi amante levantó mis manos de mis rodillas y las colocó
en la parte posterior de su cabeza. Sabía lo que quería y quería hacer
todo lo posible para hacer realidad su fantasía.
Cuando me metí en la boca de Finn, jalé su cabeza hacia mi
estómago, enterrando mi longitud en su garganta. Sentí la sensación
de terciopelo cálido que envolvía mi carne sensible. Cuando me
aparté, Finn me miró con cruda necesidad en sus ojos.
 Estallé. Agarré su suave cabello entre mis dedos y jalé su cabeza
hacia mí mientras le follaba la cara. Su frente chocó contra mi
estómago cuando me estrellé contra él, y sus gemidos codiciosos se
cortaron cada vez que mi longitud se deslizó por su garganta.
Me dolían los ojos por cerrarlos con el éxtasis, pero luché por
mantenerlos abiertos por si Finn me daba la señal de parar. Y porque
no quería perderme la vista de mi amante agachándose para acariciar
su propio pene al mismo tiempo que mis empujes.
—Finn, eres tan sexy, —gruñí con los dientes apretados. —Tan 66
hermoso con mi polla en tu boca—. Se bombeó más rápido mientras
yo golpeaba mi peso hacia adelante, gimiendo y maldiciendo
mientras veía desaparecer mi carne entre sus labios carnosos. —
Cariño, voy a venirme, —jadeé. —¡Oh, mierda, ya voy! —Tiré de su
rostro hacia mí hasta que sus labios se acurrucaron en mi escaso vello
púbico y grité cuando el esperma salió de mí y entró en la ansiosa 03/2020
boca de Finn. Se tragó todo y giró su lengua alrededor de mi punta,
lamiéndome y limpiándome.
Tan pronto como lo liberé de mi agarre, Finn se puso de pie de un
salto y acarició su polla goteando a un ritmo frenético.
—Es tan caliente cuando tomas el control, —dijo entre fuertes
respiraciones. —Mira lo que me haces, bebé. Tan jodidamente duro
para ti—. Simplemente lo miré tontamente, demasiado feliz y
fascinado por sus movimientos para hablar.
Me lamí los labios mientras veía una gran gota de pre-semen caer
al suelo.
—¿Quieres probar, bebé? —Asentí y abrí la boca. —Joder, eres
perfecto—. Se levantó febrilmente mientras su respiración se
aceleraba y una cadena de palabras sucias brotaba de sus labios. —
Voy a venirme, Harley. ¡Voy a venirme por ti! —Tan pronto como las
palabras salieron de su boca, Finn estalló. Gruesas gotas de esperma
caliente salpicaron mi lengua y mejillas, pintando mi barba con gotas
nacaradas. Recogí un poco del líquido rebelde en mi pulgar y lo chupé
limpio.
—Esa es la cosa más caliente que he visto, —insistió Finn antes de
arrodillarse de nuevo. Apoyó su cabeza sobre mi muslo mientras
recuperaba el aliento. —Oye, mi voz es un poco sexy como es, ¿no te
parece? —Era áspera y brusca, presumiblemente por tener mi polla
metida en su garganta. 67
—Muy sexy, —estuve de acuerdo, aunque pensé que su voz era
sexy todo el tiempo.
—Supongo que tendrás que follarme la cara todas las mañanas
para que pueda seguir así, —se encogió de hombros. Me reí entre
dientes y pasé mis dedos por su cabello. —Eso fue increíble, Harley.
Gracias. 03/2020
—Todo es increíble contigo, Finn, —insistí. Aparté su cabello de su
frente. —Ven aquí, cariño; quiero sostenerte.
Finn me sonrió.
—Realmente eres perfecto, ¿verdad?
—Apenas, —me burlé.
Se puso de pie y se sentó a horcajadas sobre mi regazo, hundiendo
sus dedos en mi cabello.
—Eres perfecto para mí.
Envolví mis brazos alrededor de su cintura y acaricié mis dedos
sobre su espalda.
—Y tú eres perfecto para mí—. Finn me besó tierna y
profundamente, sin importarle que mi barba estuviera húmeda y
pegajosa. —Te amo, Finn.
Mi amante me dio un dulce beso en la punta de la nariz.
—Yo te amo más.

68

03/2020
 Capítulo Cinco

—¿Cómo me veo? —Le pregunté por quinta vez en veinte minutos.

Finn me dio la misma dulce sonrisa que tenía las primeras cuatro
veces que pregunté mientras miraba mi atuendo de jeans oscuros y 69
un suéter negro.
—Hermoso.
—Gracias. —Respiré hondo y un rayo de culpa me atravesó. —Te
ves hermoso también—. Era hermoso, en realidad, con un par de
pantalones caqui y un suéter de color salmón. —Lamento no haberte
dicho ya. Estoy tan nervioso y mi mente está en todas partes—. Me 03/2020
pasé una mano por la frente y el dolor que se estaba formando allí.
—Hey —respondió Finn en voz baja, tomando mi mano de mi
cabeza y apretándola suavemente. —Está bien estar nervioso. Estoy
seguro de que tu papá también está cagando ladrillos. Pero todo
estará bien; ¿sabes por qué? —Alcé las cejas en cuestión. —Porque tú
y yo estamos aquí el uno para el otro sin importar lo que pase. Pero
tengo fe de que todo va a estar bien. Hice tu cena favorita y todos
vamos a disfrutarla juntos, hablar y pasar un buen rato. Y si las cosas
se van al sur, esta es nuestra casa y se le puede expulsar derecho a la
mierda.
Sonreí ante su confianza y su marca única de encanto.
—Tienes razón. Pero creo que aún podría usar un beso para la
suerte.
 —Solo uno rápido. No quiero saludar a tu papá con una erección—.
Me reí entre dientes cuando Finn se inclinó para picotear mis labios.
Su sola presencia fue suficiente para calmar mis nervios. Hasta que
sonó el timbre.
—Voy a vomitar.
Finn me apretó la mano otra vez.
—Tenemos esto. Vamos, respondamos juntos.
Respiré profundamente y le di un asentimiento. Me giré hacia la
puerta principal y esperé junto a Finn mientras él abría la puerta. Allí 70
estaba mi padre vestido con un traje gris oscuro y parecía que
también podría vomitar en cualquier momento.
Su mirada se cruzó entre Finn y yo, mientras que la mía rebotó
entre él y Finn. Mi amante era el único de nosotros que no parecía un
maldito gato rastreando una luz láser.
—Hola, Dwayne, —ofreció Finn con una sonrisa, probablemente 03/2020
pensando que, si no hablaba, nadie lo haría. —Te ves muy bien esta
noche.
Papá echó un vistazo rápido por su frente.
—Oh, gracias. Ambos también se ven bien.
—Gracias. Entra y sal del frío—. Finn se hizo a un lado, permitiendo
que mi padre entrara a nuestra casa antes de cerrar la puerta detrás
de él.
—Traje esto, —anunció papá, sosteniendo rígidamente una botella
de vino.
—Mm, Moscato; ese es mi favorito también, —dijo Finn con un
guiño mientras tomaba el vino.
—Y estos son para ti—. Papá le tendió un ramo de rosas rojas a
Finn de la misma manera rígida. —Porque cocinaste, —dijo
rápidamente, mirándome. Me pregunté si estaba tratando de
suavizar el golpe de mí sin recibir flores, pero me di cuenta de que ese
no era el caso cuando continuó: —No porque piense que te gustaría
más—. Miró a Finn. —No es que piense que eres la mujer en la
relación ni nada.
Oh. Mi. Dios. Deja de hablar. Él no lo hizo.
—No es que haya nada de malo en eso, si así es como funcionan
estas cosas. Solo quería que supieras que no asumí que eras porque
eres más pequeño o femenino o algo así. Harley podría ser la mujer...
tal vez. Es decir, no estoy seguro de si eso es posible con su condición 71
o si ustedes son capaces de hacer las cosas sexualmente. ¡No es que
la gente no pueda tener una gran relación sin ella! Yo, um... creo que,
me callaré ahora. —Gracias a Dios. —¿Debería irme? —Preguntó con
seriedad.
Finn lo miró por un momento antes de estallar en carcajadas.
—Lo siento, —dijo mientras se limpiaba los ojos, —no debería 03/2020
reírme. Eres tan malditamente lindo—. Tomó el ramo de rosas y le
dio a mi padre un beso en la mejilla. —Gracias por las flores. Son
hermosas—. Papá suspiró aliviado y le sonrió a mi dulce hombre. —Y
no tengas miedo de hacer preguntas; confía en mí, no soy tímido, —
continuó Finn. —Básicamente, somos como cualquier otra pareja.
Nos cuidamos el uno al otro y hacemos todo lo posible para hacer
feliz al otro. Somos socios en todo y no tenemos roles masculinos /
femenino, pero estoy también orgulloso de llamarme la esposa trofeo
de Harley, —agregó con un guiño juguetón. —Y no te preocupes por
el aspecto sexual. Harley me mantiene más que satisfecho en ese
frente, aunque estaría tan feliz y enamorado de él si no pudiéramos
hacer nada. Ahora, entra a la cocina y nos traeré una bebida a todos.
Finn se alejó y mi padre parpadeó hacia mí.
 —Realmente no es tímido, ¿verdad? —Me reí entre dientes y
negué con la cabeza. —Puedo decir que se preocupa mucho por ti, —
dijo con una suave sonrisa en sus labios. —Me alegra haber podido
conocerlo.
Sentí el significado detrás de sus palabras; Papá se alegró de estar
aquí. Estaba feliz de ser recibido en mi hogar y echar un vistazo a mi
vida. Le devolví una sonrisa.
—Yo también. —Nos miramos, sonriéndonos tontamente el uno al
otro hasta que lo empujé con el codo. —Vamos, vamos por esa 72
bebida.
Entré en la cocina con mi papá justo detrás de mí. Sonreí al ver a
Finn colocando sus rosas, ahora en un hermoso florero de vidrio, en el
centro de la mesa.
—Creo que esto es justo lo que necesitaba esta habitación—. Sus
palabras hicieron que mi papá se hinchara visiblemente y se pusiera 03/2020
más derecho.
Finn fue al armario y sacó dos copas de vino antes de volverse hacia
mí.
—Bebé, ¿te gustaría una copa de vino también, o preferirías tomar
una cerveza?
—Me encantaría una cerveza si tenemos alguna.
—Ayer te compré un paquete de seis, —sonrió Finn. —Creo que ha
sido suficiente tiempo como para que de vez en cuando no duela.
—¿Lo suficiente desde qué? —Papá preguntó con curiosidad
mientras Finn sacaba un Bud Light del refrigerador.
—Tuve un pequeño problema de salud hace un par de meses, —me
encogí de hombros y los ojos de mi padre se abrieron de par en par.
 —Fue más serio de lo que parece, —insistió Finn mientras traía las
bebidas a la mesa. —Tenía una infección renal grave y tuvo que
someterse a una cirugía para extraer un cálculo.
—¿Cirugía? —Los ojos de papá estaban tristes cuando cayeron
sobre mí. —Lamento no haber estado aquí.
—Hey —interrumpió Finn, colocando su mano sobre el hombro de
mi padre. —Estás aquí ahora—. Papá le dirigió una sonrisa tensa y
Finn empujó la botella de vino y un sacacorchos sobre la mesa hacia
mí. —¿Harás los honores? Sabes que me encanta ver esos músculos 73
grandes en acción—. Me reí y saqué el corcho de la botella.
—Siempre has sido fuerte, pero debo admitir que estoy
sorprendido de lo fuerte que eres, —ofreció papá.
Finn suspiró.
—¿No es fabuloso?
Papá y yo nos reímos y le expliqué: 03/2020
—Hacer ejercicio hace que moverse sea más fácil. Además, jugar a
la pelota me mantiene en forma.
La cara de papá se iluminó.
—¿Qué tipo de juego de pelota juegas?
—Harley es un jugador de baloncesto increíble, —respondió Finn.
—Lideró a su equipo para ganar el campeonato la temporada pasada
y fue el MVP—. Mi liga no otorgó títulos de MVP, pero Finn insistió en
que era cierto. Incluso tenía una placa hecha para mí que ahora
colgaba en nuestra habitación.
—Eso es genial, —sonrió papá. —Me encantaría verte jugar. Parece
que estoy demasiado tarde para esta temporada, pero estaré allí para
la próxima—. Su promesa hizo que mi corazón se saltara un latido.
—Me gustaría. Además, verás a Finn en acción también; él es
nuestro entrenador asistente.
 —Bueno, eso es genial, —respondió papá. —¿También practicas
deportes, Finn?
—¿Por favor, con este cuerpo? No estoy tratando de morir. Y,
sinceramente, soy más un animador que un entrenador.
—No lo escuches; es un gran entrenador. Nuestro equipo no lo
habría hecho tan bien como lo hicimos sin él.
—Eres dulce, bebé—. Finn me dio un beso en los labios mientras
papá miraba con cariño. —Ahora creo que necesitamos un brindis—.
Me deslizó la cerveza y me sirvió una copa de vino para mi padre y 74
para él. —Por nuevos comienzos.
Mi padre y yo sonreímos y chocamos nuestras bebidas con las
suyas, repitiendo sus palabras. Todos tomamos un trago y nuestra
atención fue captada por el ruido del horno.
—Esa es la cena, —anunció Finn. —Dwayne, espero que te guste la
lasaña. 03/2020
—Me encanta. Me encanta toda la comida italiana, en realidad.
—Al igual que mi Harley, —Finn sonrió mientras se ponía un par de
guantes de cocina. Sacó la lasaña y el pan de ajo del horno,
colocándolos sobre la encimera. Sirvió un poco en tres platos y los
sirvió alrededor de la mesa. Finn acercó su silla hasta el final para que
se sentara entre mi papá y yo.
—Esto se ve delicioso, —dijo papá, sacando una gran mordida.
—Sabe aún mejor, —dije con la boca llena, haciendo reír a Finn.
—Ustedes muchachos me van a hacer sonrojar—. Conocía a mi
hombre, y el sonrojo no iba a suceder. —Harley también es un gran
cocinero. Su pollo y sus albóndigas me hacen babear—. Me dio un
guiño coqueto. —Y se me hace agua la boca.
 Resoplé cuando papá se atragantó con un bocado de pasta y tomó
un largo trago de vino para calmarse. Una vez que tuvo el control
nuevamente, dijo:
—Debes haber adquirido esa habilidad de tu madre. Ella era la
maestra de cocina; no puedo cocinar nada más complicado que fideos
Ramen o huevos revueltos.
—Lo que más me gustó fue la tostada francesa de fresa que
cocinaba todos los domingos por la mañana, —respondí con una
sonrisa. —¿Te acuerdas? 75
—¡Por supuesto que sí! Fue el punto culminante de mi semana
todas las semanas; la de ella también. Ella dijo que era su forma
especial de unir a la familia antes de la locura de la escuela y la
semana laboral—. Bajó la vista hacia su cena y la puso alrededor de su
plato. —Ella hizo que todo pareciera tan malditamente especial.
Mierda. Lo último que quería hacer era reducir el estado de ánimo 03/2020
cuando las cosas iban tan bien. Finn me sorprendió acercándose a mi
padre y tomando su mano.
—¿Me hablarás de ella?
Papá le dedicó una sonrisa de adoración y respondió:
—Lauren era única en su clase. Era la mujer más dulce que había
conocido y podía animarme sin importar lo que me deprimiera. Su
sonrisa era contagiosa.
—Lo siento, nunca la conocí, —ofreció Finn. —Ella suena como una
mujer notable.
—Lo era. Y te hubiera amado—. Palmeó la mano de Finn y me miró.
—Ella te amaba más que a nada en esta tierra. Eras su orgullo y
alegría.
 —La extraño, —dije antes de aclararme la garganta, tratando de
contener la ola de emociones que me invadía. Finn tomó mi mano
también, y sus ojos brillaban mientras me miraba.
—Yo también, —estuvo de acuerdo papá. —Harley, lo siento por la
forma en que las cosas pasaron entre nosotros. Tu madre era mi vida,
y cuando la perdí, me sentí aplastado. Algunos días me costó todo
salir de la cama y enfrentar el mundo sin ella. Sé que no estaría allí
para ti como necesitabas que estuviera—. Abrí la boca para protestar,
pero él levantó su mano libre para detenerme. —No lo estaba, y no 76
puedo disculparme lo suficiente. Estaba tan abrumado por el dolor
que no pude consolarte. Incluso si pudiera, no habría sabido cómo. Tu
madre siempre supo qué decir y qué hacer. Siempre tomé su
liderazgo en todas las cosas de crianza y sin ella... —sus palabras
murieron y sus ojos nadaban. Parecía perdido de nuevo.
—Lo entiendo, —aseguré. —Mamá era mi mejor amiga y yo 03/2020
también estaba mal sin ella. No solo estaba llorando por ella, sino que
estaba sufriendo y tratando de lidiar con mi lesión. Me sentía tan
egoísta por preocuparme por mis piernas cuando perdió la vida.
—Oh, cariño, —susurró Finn. Dirigí mi atención a él y encontré
lágrimas en su rostro. Besé sus nudillos y me volví hacia mi padre.
—Y me sentí tan culpable; culpable por quitártela, culpable por
sobrevivir... —Parpadeé hacia el techo para no llorar.
—Nunca te culpé, —dijo papá con firmeza. —Fue un accidente. No
fue tu culpa y debería haber hecho más para ayudarte a entender
eso. Creo que parte de mí pensó que estaba ayudando al
distanciarme de ti; pensé que si no veías cuánto era difícil, no serías
tan duro contigo mismo.
—También me dolía, pero mi culpa me impedía llegar. Debería
haber estado allí para ti también, papá. Me dolía mucho estar cerca
de ti sin ella. Era obvio que algo faltaba, y sentí que como yo fui quien
lo causó. Lo siento mucho.
Estiró el brazo sobre la mesa para tomar mi otra mano.
—Soy yo quien lo lamenta. Me perdí mucho tiempo precioso
contigo porque estaba herido y asustado. Debería haber sido un
mejor padre.
Finn me apretó la mano y, por la forma en que la cabeza de mi
padre se volvió hacia él, supuse que también la apretó.
—No se castiguen, —suplicó, las lágrimas aún corrían por sus 77
mejillas. —Los dos estaban atravesando un dolor inimaginable, y todo
el mundo se lamenta de manera diferente. No se puede cambiar el
pasado, pero se puede avanzar. ¿Brindamos por nuevos comienzos y
sabes qué? Creo que eso es exactamente lo que querría Lauren.
Apuesto a que está mirándonos ahora mismo con la sonrisa más
grande en su rostro. No digo que ignoren el pasado, pero recuerden 03/2020
las partes buenas. Hablen juntos y revivan sus recuerdos. Recuerden
la tostada francesa de fresa y sus películas favoritas y lo que la hizo
reír. Estén el uno para el otro y Lauren siempre estará con ustedes.
Papá y yo lo perdimos al mismo tiempo. No pude detener mis
lágrimas y las suyas fluyeron libremente también. Éramos tres
hombres crecidos que lloraban durante nuestra cena, pero se sentía
bien. Fue limpieza y liberación; estaba dejando ir el pasado y mirando
hacia el futuro con un corazón esperanzado.
Nos tomó un buen tiempo a los tres para tranquilizarnos. Cuando
Finn se secó la cara y su respiración bajo control, se volvió hacia mi
papá.
—En cuanto a usted, Sr. Man, no lo tendré viviendo con huevos y
Ramen. Y sacarla no es mejor, —agregó cuando papá comenzó a decir
algo. —Así que necesito que me prometas que vendrás a cenar con
nosotros al menos una vez a la semana.
Papá me miró para pedir permiso; obviamente no conocía a Finn lo
suficiente como para saber que las cosas ya estaban decididas, así
que le asentí.
—Lo prometo.
—Gracias, —sonrió Finn. —Ahora, acabemos esta comida antes de
que se enfríe.
El ambiente durante el resto de la comida fue más ligero y feliz. 78
Finn y yo le contamos a mi papá todo sobre nuestros trabajos, con mi
hombre haciendo reír a mi padre hasta el punto de llorar mientras
describía a algunos de sus clientes más difíciles.
Me preocupaba que el estado de ánimo empeorara cuando papá le
preguntó a Finn sobre su familia, pero mi amante contó su historia sin
emoción. Había revivido la situación tantas veces, que la había 03/2020
reducido a un cálculo limpio. Finn se había lamentado de su pérdida y
siguió adelante, pero aun así me rompió el corazón escuchar la forma
en que su familia lo maltrató y lo negó. La tristeza brilló en los ojos de
mi padre también mientras escuchaba, pero una vez que Finn le
contó todo, volvió a cambiar el estado de ánimo y nos tenía a todos
ansiosos cuando comimos pastel de queso.
Cuando terminamos con el postre, Finn recogió nuestros platos y
rechazó mi oferta para ayudar a limpiar.
—Está bien, bebé, lo tengo. ¿Por qué ustedes dos no se relajan en
la sala de estar? Estaré allí en un momento.
Sabía lo que estaba haciendo. Nos estaba ofreciendo a mi papá y a
mí algo de tiempo para nosotros de una manera no obvia; una que
podría rechazar fácilmente si estuviera incómodo. Lo que no sabía era
cómo demonios Finn siempre sabía qué hacer.
 —Gracias, —le respondí seriamente. Finn sonrió y picoteó mis
labios antes de ocuparse del fregadero.
Papá me siguió a la sala y sonrió mientras miraba a su alrededor.
—Tienes un lugar realmente agradable aquí.
—Gracias—. Pensé por un momento en darle un recorrido
completo, hasta que recordé la pintura muy grande y muy desnuda
de Finn y yo colgando en la pared de la habitación. Sin mencionar la
silla sexual en el medio de la habitación. No pensé que papá estaba
bastante preparado para eso. —Toma asiento, —le dije, señalando 79
hacia el sofá. Papá se acomodó en el sofá, pero yo me quedé en mi
silla de ruedas; sabía que Finn se uniría a nosotros pronto, y quería
mantener algo de espacio para respirar entre nosotros para que nadie
se sintiera incómodo.
—Odiaba saber sobre la familia de Finn, —comentó mi padre con
tristeza. 03/2020
—También lo odio por él, pero dice que está mejor sin una familia
que no lo quiera; que Jake y yo somos toda la familia que necesita.
—Es un hombre fuerte, —ofreció papá, y asentí con la cabeza. —No
puedo imaginar cómo se sintió ser rechazado solo por quién ama.
Espero que sepas que es algo que nunca me importó. Todo lo que
siempre quise fue que fueras feliz.
—Soy feliz, —prometí.
—Lo sé—. Él me sonrió y extendió la mano para acariciarme la
rodilla.
Tuvimos una conversación fácil sobre algunos de mis próximos
proyectos de diseño e historias divertidas sobre algunos de los
hombres con los que papá trabajó. Me sorprendió la forma en que
estábamos pasando el rato sin la incomodidad esperada entre
nosotros. También me avergonzaba cuánto tiempo dejamos pasar esa
incomodidad, y agradecía a Finn por habernos reunido.
Justo cuando mi hombre cruzó mi mente, apareció en la puerta
fuera de la vista de mi padre. Finn levantó un grueso sobre blanco y
me lanzó una mirada inquisitiva. Asentí y él sonrió a cambio.
—Dwayne, —se dirigió Finn mientras se acercaba al frente del sofá,
—Harley y yo quisiéramos que tuvieras esto—. Papá frunció el ceño
mientras tomaba el sobre. —Ábrelo, —instó Finn mientras se sentaba
a mi lado y tomaba mi mano. Mi padre rompió el sello y sacó una 80
invitación de boda. Una lenta sonrisa cruzó sus labios mientras leía la
información. —Sé que es con poca antelación, pero nos encantaría
que pudieras lograrlo.
Papá colocó la invitación en la chaqueta de su traje y nos dirigió su
sonrisa.
—No me lo perdería por nada del mundo—. Finn me apretó la 03/2020
mano y se inclinó para besarla. —Entonces, ahora que te casas
pronto, eso significa que puedo empezar a preguntar por los nietos,
¿verdad?
Finn echó la cabeza hacia atrás y se echó a reír.
—Harley y yo hemos hablado mucho sobre eso, y no estamos
interesados en tener hijos. Contamos con ser los tíos geniales para los
hijos de Jake. Sin embargo, vamos a tener un perro después de que
regresemos de nuestra luna de miel—. Finn me dio una sonrisa
emocionada. Había estado hablando de adoptar una mascota durante
semanas. Decidimos esperar hasta después de nuestras vacaciones
para no tener que dejarlo pronto después de adoptarlo. Mi dulce
hombre estaba preocupado de que el perro pensara que lo
estábamos abandonando.
 —Un gran perro, ¿eh? —Papá sonrió. —Me encanta. Pueden tener
citas para jugar con mi Millie.
Finn jadeó.
—¿Tienes un perro? ¿Tienes fotos?
Papá se rió entre dientes mientras sacaba su teléfono.
—Por supuesto. —Picoteó su pantalla y le pasó su teléfono a Finn.
—¡Es hermosa! Oh, mira, bebé—. Finn giró la pantalla para
mirarme, mostrando una foto de mi padre abrazando a un bonito
golden retriever. —¿Cómo te sientes acerca de un perro grande? 81
—Creo que cualquier perro que quieras será perfecto para
nosotros.
—Oh, Harley—. Finn me envolvió en un fuerte abrazo, haciendo
que mi papá se riera de nuevo.
Cuando Finn me liberó, golpeó a mi padre con preguntas sobre
alimentación, tiempo de juego, mudarse, dentición y pidió consejos 03/2020
sobre cómo ser un buen padre perro. Mi hombre era como una
esponja adorable, absorbiendo todo lo que mi padre decía con toda
su atención.
Una vez que cubrimos todos los temas de perros imaginables,
nuestra conversación se centró en otras cosas al azar. Hablamos
nosotros hasta que Finn bostezó ampliamente.
—Oh, wow, es casi medianoche, —anunció papá con un vistazo a su
reloj. —Mejor me voy.
—Por favor, no te vayas por mi culpa, —declaró Finn.
—No lo hago, —aseguró papá con una sonrisa. —Necesito
levantarme temprano para trabajar mañana, así que mejor me voy—.
Se levantó del sofá y nos dio a ambos una cálida sonrisa. —Muchas
gracias a los dos por invitarme.
 —Espera solo un segundo—. Finn se levantó y corrió hacia la
cocina, regresando con un recipiente de plástico lleno de lasaña. —
Quiero asegurarme de que vayas a preparar comidas caseras. Y no
olvides que vendrás a cenar con nosotros el domingo y el próximo
jueves.
Mi padre le dio a Finn una mirada que sugería que su corazón se
estaba derritiendo. Conocía bien la mirada porque la usaba a menudo
cuando se trataba de mi hombre.
—No lo olvidaré. Gracias, Finn—. Extendió los brazos y Finn se 82
apresuró a abrazarlo. Cuando lo soltó, papá apoyó su mano sobre el
hombro de Finn. Se aclaró la garganta y dijo en voz baja: —Sé que
legalmente vamos a ser familia en unas pocas semanas, pero incluso
si no lo fuera, te querría en la mía. Amas a mi hijo y eres un buen
hombre. Sé que no hice la mejor primera impresión porque no estaba
allí para Harley, y sé que no me conoces mejor, pero si me quieres... 03/2020
—Oh, Dwayne, —interrumpió Finn, golpeando a mi padre por otro
abrazo. —El pasado ha terminado. Ahora estás aquí y obviamente
también amas a Harley y eso es todo lo que necesito saber. Estoy
orgulloso de tenerte como mi familia—. Mis ojos picaron mientras
veía la escena delante de mí. Era mejor que cualquier cosa que
pudiera haber imaginado para la noche. —Solo prepárate; soy
obsesivo y me apego rápidamente. Espero que no te enojes si
empiezo a llamarte papá.
Papá se echó a reír y miró cálidamente a Finn.
—Creo que puedo manejar eso, hijo.
Finn resopló ruidosamente y alejó a mi papá.
—¡Maldición, Dwayne! ¡Esto es dos veces en una noche ahora! —
Se secó los ojos y mi padre volvió a reírse, caminando hacia mí.
 —Gracias por esta oportunidad, Harley. No te defraudaré—. Se
inclinó y, por primera vez en años, me envolvió en un cálido abrazo.
—Te amo. Lo sabes, ¿verdad? He sido una mierda mostrándolo, pero
nunca me he detenido—. Si intentaba hablar, sabía que sería un
desastre como Finn, así que asentí contra el cuello de mi padre.
Esperaba que lo entendiera. —Lo haremos, me quitaré de su cabello
ahora, —dijo mientras me soltaba. —No duden en llamar en cualquier
momento, y los veré a los dos el domingo.
—Ooh, el domingo traerás a Millie? —Finn preguntó esperanzado. 83
—Lo tienes. —Esa promesa le dio a mi papá un beso en la mejilla.
—Chao. —Con una última ola, se mostró fuera de nuestra casa.
—¡Mierda! ¡Eso fue increíble! —Finn exclamó. Se apresuró hacia mí
y se sentó a horcajadas sobre mis muslos, besando cada superficie de
mi cara y haciéndome reír. —¿Cómo te sientes, bebé?
—Increíble. Yo solo... no puedo creer lo bien que salió eso. 03/2020
Finn me besó de nuevo.
—¡Estoy tan feliz por ti! Y por mí también. ¡Tengo un papá que no
odia mis entrañas!
—Finn... —Mi corazón se rompió por él, pero él lo despidió.
—¡No, es algo bueno! No estés triste, amor—. Metió mi largo
cabello detrás de mis orejas. —Me diste una familia—. Me tomó los
labios en un beso largo y lento. —Me siento todo cálido y
hormigueante. ¿Qué dices de subir a la cama y disfrutarlo juntos? —
Una sonrisa arrogante iluminó su rostro y le devolví una.
—Y aquí pensé que esta noche no podría mejorar.
 Capítulo Seis

Miré el reloj otra vez para encontrar que eran las 2:05 AM. No
podía dormir; estaba demasiado emocionado y nervioso por el hecho
de que en catorce horas me casaría con el amor de mi vida. Tampoco 84
podía dormir porque el amor de mi vida no estaba en la cama a mi
lado. Finn insistió en que se suponía que no debíamos vernos el día
de la boda, por lo que se estaba estrellando en el apartamento de
Jake por la noche. Era la primera noche que habíamos estado
separados desde que se mudó. Incluso cuando estaba en el hospital,
Finn no se apartó de mi lado. Había dormido solo muy bien durante 03/2020
veintiséis años, pero ahora no podía guiñar un ojo sin mi hombre a mi
lado.
Estaba un poco caliente, así que tiré las mantas. En cuestión de
minutos, tenía frío y estaba cubierto de nuevo. Traté de esponjar mi
almohada y rodar sobre mi espalda. No podía ponerme cómodo y
estaba a punto de decir a la mierda e ir a ver la televisión en la sala
cuando mi teléfono golpeó la mesita de noche. Lo desconecté del
cargador y me lo llevé a la cara, sonriendo al nombre de Finn en la
pantalla.
Finn: ¿Estás dormido, bebé?
2:10 AM: No. No puedo dormir sin ti. Te extraño.
Finn: Aw, yo también te extraño. Tomé el sofá porque Jake es
demasiado alto para dormir en él, pero no puedo ponerme cómodo. Y
extraño tu cálido cuerpo a mi lado. Me colé en la cama de Jake con él
por un tiempo, pero no fue lo mismo. Además, ronca, así que estoy de
vuelta aquí.
Me reí al pensar en Finn tratando de acurrucarse con Jake mientras
dormía y lo molesto que seguramente se ponía cuando mi primo
roncaba. Había escuchado al hombre cuando dormía; sonaba como
una bocina que guiaba barcos al puerto.
2:12 AM: Lo siento cariño. Podrías venir a casa y acurrucarte
conmigo.
Eso sonaba como una gran idea, en realidad. No creía en las 85
supersticiones de todos modos. Nada podría romper nuestra relación;
especialmente viéndonos en nuestro día especial.
Finn: Confía en mí, estoy tentado, pero estar apartado es tradición.
Sin embargo, tengo una idea divertida.
Eché un vistazo a mi pantalla, preguntándome en qué demonios
podría estar pensando cuando estábamos tan separados. 03/2020
2:13 AM: ¿Qué es eso?
Finn: Tengamos sexo por teléfono.
Parpadeé ante sus palabras. Obviamente nunca había hecho algo
así porque toda mi experiencia fue con Finn. Ni siquiera estaba seguro
de cómo funcionaba, pero definitivamente estaba intrigado. Y estaba
seguro de que Finn me ayudaría. Me encogí de hombros. Si esto fuera
lo más cerca posible de estar con Finn esta noche, lo tomaría.
2:14 AM: De acuerdo.
Puse los ojos en blanco por lo poco sexy que era. Un momento
después, mi teléfono sonó en mi mano. Pasé la pantalla para
responder, pero antes de que pudiera saludar, escuché la voz de Finn.
—Mierda, esto es tan caliente.
—Todo es caliente contigo—. Allí, eso no sonaba demasiado
despistado.
 —Mm, Harley, me estoy frotando la polla y me estoy poniendo tan
duro.
Oh. Mierda. Correcto. Puse mi mano sobre mi pene y mis bolas y
apreté suavemente, masajeando mi carne y sintiéndola hinchada bajo
mi toque.
—Yo también.
—Estoy fingiendo que es tu mano la que rueda y tira de mis bolas.
Dios, amo cuando haces eso.
Cerré los ojos e imaginé la mano de Finn en lugar de la mía, 86
tocándome con ternura mientras mis dedos trazaban una línea sobre
mi saco peludo.
—Yo también—. ¡Dios mío, Harley, compórtate! ¡Suenas como un
cantante de respaldo!
—Estoy agradable y duro para ti ahora. ¿Estás duro para mí, bebé?
—Sí—. Sobre todo. Me tomó un poco más de tiempo ponerme 03/2020
completamente rígido, especialmente bajo mi propio toque. Finn lo
tenía en una ciencia; él sabía exactamente cómo tocarme para que mi
sangre bombeara hacia el sur y mi polla se pusiera rígida en solo unos
momentos. Yo, por otro lado (¡ja!), fui más lento. Uno pensaría que
sabría cómo mover mi propio pene, pero, sinceramente, era más de
Finn que mío. No me había tocado en mucho tiempo, y ni siquiera lo
había pensado desde que nos habíamos juntado. El hombre me dio
tanto sexo que me sorprendió que aún pudiera caminar. Je, me
follará tanto que necesitaré una silla de ruedas. Eso es gracioso. A
Finn le encantaría esa broma. Probablemente no sea el momento de
decirlo, pero se lo diré más tarde. Sacudí la cabeza para volver a
entrar en el campo y me froté la carne hasta que estuve
completamente duro.
—¿Estás usando tu anillo para mí?
 —Todavía no—. Abrí el cajón de mi mesita de noche y saqué el
anillo de goma.
—Descríbelo cuando te lo pongas.
Mierda. De acuerdo, Harley, puedes hacer esto. Sé sexy. Metí mi
teléfono entre la oreja y el hombro y tomé el anillo con ambas manos.
—Lo estoy estirando para ponerlo sobre mi polla—. De acuerdo, un
poco más instructivo que sexy, pero no está mal.
—Tienes que estirarlo porque tú polla es muy grande y gruesa. Me
encanta la forma en que estira mis mandíbulas cuando te chupo. Y 87
esa vena jugosa que corre por debajo es jodidamente deliciosa.
¿Cómo demonios hace eso?
—Desearía que estuvieras aquí chupándome ahora mismo.
—Oh, Dios, Harley, me encanta cuando me hablas sucio—. ¡Lo hice!
Solo estaba expresando mis pensamientos, pero me iba a ensuciar. —
Agarra tu polla, bebé. Vamos a acariciarlas juntos. —Envolví mi mano 03/2020
alrededor de mi base y esperé más instrucciones. —Bombea bien y
despacio; desde la raíz hasta la punta, hacia arriba y hacia abajo,
agradable y lento. —La respiración de Finn ya se estaba acelerando.
Sacudí mi polla lentamente como él pidió, sintiendo la vena gruesa
que tanto le gustaba bajo mis dedos. Gemí al pensar en él haciéndole
cosquillas con la lengua.
—Sí, gime para mí bebé. ¿Se siente bien?
—Sí, —jadeé, aun moviendo mi mano tortuosamente lento. —Por
favor, vamos más rápido.
—Tan codicioso por mí. Me encanta. Bombea más rápido, bebé. —
Me acaricié con la mano más rápido, apretando más fuerte mientras
bombeaba mi carne caliente. Podía escuchar el puño de Finn
golpeándose contra su piel mientras se sacudía, y me volvía loco. —
Oh, Dios, me estás haciendo perder todo en mi mano. ¿Estás
goteando?
Forcé mis ojos a abrir para ver una cuenta brillante balanceándose
sobre mi raja.
—Hay una gran caída esperándote.
—Joder, desearía poder lamerlo. Sabes tan bien; tan salado y
picante.
Sus palabras traviesas me empujaron más fuerte y me bombeé más
rápido. 88
—Finn, no voy a durar mucho más.
—Bueno. Quiero que te vengas por mí. Déjame escucharlo.
Sacudí mi polla lo más rápido que pude y sentí mis bolas rodar por
sí mismas. Apreté mis pies y gruñí el nombre de Finn cuando un
pequeño chorro salió de mí y cayó sobre mi estómago.
—Tan jodidamente sexy, —jadeó Finn. —Ya casi estoy allí—. Las 03/2020
bofetadas se aceleraron. —Oh, Harley... ¡Joder! —Gritó Finn cuando
llegó. —Oh dios, hay mucho. Siempre me haces venir mucho, cariño.
Tan jodidamente bueno. —La respiración pesada sonó sobre la línea
por un minuto. —Está sobre mis dedos y mi estómago. Desearía que
estuvieras aquí para lamerlo de mí.
Antes de que pudiera expresar mi acuerdo, una voz diferente sonó
sobre la línea. Una voz que reconocí como la de Jake.
—Hola Finn, ¿estás bien? Te escuché hablar y, ¡oh, Dios mío! —Finn
resopló, aparentemente no avergonzado de ser atrapado de nuevo—.
—¡Creo que me cegaste!
—¿Con mi belleza? —Preguntó Finn con una voz dulce y
almibarada.
—Maldita sea, Finn, ¡veo tu polla más que la mía!
 —Bueno, ¿de quién es la culpa? Tienes acceso 24/7 a tu barra de
placer.
Me reí de lo de 'barra de placer' y aparentemente Jake me escuchó.
—¿Estás hablando por teléfono con Harley? ¡Dios, ustedes dos son
como un par de conejos! ¡Ya ni siquiera estoy a salvo en mi propia
casa!
—Lo siento, Jakey, —respondió Finn. —Pero no puse nada en el
sofá.
Jake dejó escapar un largo suspiro. 89
—Voy a volver a la cama. Espero que mi mente lo atribuya a una
pesadilla.
—¿Me conseguirías una toalla antes de irte? —Preguntó Finn
esperanzado.
—Jódete, Finn.
Mi amante se echó a reír y escuché un portazo. 03/2020
—Me encanta cuando se pone nervioso, —se rió entre dientes. —
Bueno, supongo que es mejor que me limpie y trate de dormir al
menos un poco mi sueño de belleza. Quiero lucir hermoso para ti.
—Siempre eres hermoso para mí, pase lo que pase, —le respondí
con seriedad.
—Aw, gracias bebé. Siempre eres hermoso para mí también. —
Suspiró feliz. —Solo piensa, en unas pocas horas, seremos maridos.
Me encantó la forma en que sonaba.
—No puedo esperar. Buenas noches, cariño. Te amo.
—Te amo más—. Finn hizo un ruido de beso en el teléfono antes de
que se cortara la llamada.
Tomé unos pañuelos de la mesita de noche y me limpié. Los tiré y el
anillo sobre la mesa; lo limpiaría todo por la mañana. Mi cara se estiró
con un enorme bostezo. Estaba satisfecho y sorprendentemente
somnoliento. Escuchar la voz de Finn y compartir algo tan maravilloso
con él me relajó y me hizo creer que finalmente podría descansar. Me
puse las mantas a mi alrededor y pronto me quedé profundamente
dormido.

90

03/2020
 Capítulo Siete

—Deja de jugar con eso, —gruñó Jake, alejando mis manos de mi

corbata.
—¿Está correcto? 91
—Eso fue antes de que tú te hayas metido con ella. —Él apretó el
nudo y le pasó la mano por la tela. —Ahora no la toques.
Jake me estaba ayudando a prepararme para mi boda en el
vestuario del gimnasio. Se sentía extraño estar aquí con ropa más
elegante que pantalones cortos deportivos y una camiseta. Ahora
estaba vestido con un esmoquin negro, camisa de vestir blanca, 03/2020
corbata negra y zapatos negros brillantes. Opté por un look clásico
para mi traje. Me encantó cómo se veía, además pensé que se
combinaría bien con lo que Finn eligiera.
—¿Has visto a Finn? —Yo como que, estaba esperando obtener una
pista sobre lo que llevaba puesto.
—No desde que salió de mi casa esta mañana, pero lo vi mucho
anoche, —gruñó.
Me mordí la mejilla para no reírme.
—Lo siento por eso.
Jake me entrecerró los ojos.
—No tú, no lo sientes.
—Tienes razón, no lo siento—. Él solo sacudió la cabeza. —
Entonces, ¿cómo me veo? —Extendí mis brazos a un lado para que él
pudiera ver la imagen completa.
 —Te ves genial, primo. Y creo que fue una buena decisión
mantener el pelo suelto.
Había debatido sobre levantar mi cabello en un moño desordenado
como Finn amaba, pero no podía arreglarlo tan bien como él.
Además, Jake argumentó que dejarlo abajo parecía más elegante y
formal.
—Estoy de acuerdo, y gracias. Te ves genial también. —Su
esmoquin era negro como el mío, y lo completó muy bien. El color
oscuro hizo que sus ojos azules resaltaran, y tenía su cabello rubio 92
oscuro peinado a un lado. —No podrás mantener a las damas lejos de
ti.
Jake se rascó la nuca.
—Sí, sobre eso... —Me incliné hacia adelante en mi silla, ansioso
por escuchar lo que tenía que decir. Me preguntaba si tenía una novia
de la que aún no había oído hablar. Siempre decía que estaba soltero 03/2020
porque estaba demasiado ocupado con el trabajo y la escuela; tal vez
ahora que se graduó, había conocido a alguien. Tal vez incluso era
alguien en su nuevo trabajo.
Desafortunadamente, no terminó su pensamiento, ya que llamaron
a la puerta del vestuario. Una voz familiar llamó:
—¿Puedo entrar? —No fue hasta que Miles asomó la cabeza por el
marco de la puerta que puse el sonido.
—Entra, Miles, —le ofrecí.
—Y puedes abrir los ojos, —agregó Jake con una sonrisa. —Todos
están decentes.
El joven abrió los ojos y sonrió mientras me miraba.
—Harley, te ves muy bien.
 —Gracias, tú también—. Su esmoquin hacía juego con el mío y el
de Jake, y el grueso cabello negro de Miles estaba recogido en un alto
copete.
—Y Jake, te ves... wow, —agregó Miles, mirando hambrientamente
la forma de mi primo.
—Te ves muy wow —respondió Jake con una sonrisa brillante. —
Venga.
—Oh, cierto—. Miles finalmente salió de la puerta y entró en el
vestuario. —Vine a entregar estas—. Levantó dos cajas de plástico 93
transparente, cada una de ellas con un ramo de margaritas rojas.
—Gracias. Oye, estas resultaron geniales, —dije mientras admiraba
las flores.
—Sí, son perfectas ahora, —asintió Miles.
Jake entrecerró los ojos.
—¿Qué quieres decir con 'ahora’? 03/2020
Miles sonrió ampliamente.
—Aparentemente, cuando Finn fue a recogerlas, el florista le dio
margaritas amarillas.
—Oh, mierda, —exclamó Jake, con los ojos abiertos de nuevo.
Miles asintió y se echó a reír.
—No estoy seguro de qué ocurrió exactamente, pero él apareció
aquí con tres boutonnieres adicionales y un ramo, todo en margaritas
rojas.
—Ese es mi Finn, —le dije con una sonrisa soñadora.
—Oh, —agregó Miles, sacando su corbata del bolsillo, —¿Podría
alguno de ustedes ayudarme con esto? Finn dijo que lo haría cuando
volviera, pero como estoy aquí...
—¿Finn se ha ido? —Lo interrumpí nerviosamente.
 —No del edificio, —calmó Miles. —Acaba de salir del otro vestuario
donde nos preparamos, diciendo que tenía que ir a buscar a tu papá.
—¿Dijo por qué? —Miles sacudió la cabeza.
—Quizás quería darle una flor, —sugirió Jake. Me relajé en mi silla.
Eso es probablemente eso. —Te ayudaré con eso, —ofreció Jake,
señalando la corbata de Miles. —En realidad, si te acercas al espejo,
puedes mirar mis manos y te enseñaré cómo atarlo.
—¿De verdad? Gracias, Jake. Nunca he usado una de estas antes.
—¿Ni siquiera en el baile de graduación? —Preguntó Jake, 94
ladeando la cabeza.
—Oh, yo... no fui al baile de graduación, —respondió Miles con
tristeza. Jake debe haber recogido el mismo aire que yo; que había
más en la historia, porque su expresión cayó.
—No hay problema, la arreglaremos. Vamos. —Jake colocó su
brazo sobre los hombros de Miles e inmediatamente animó al joven. 03/2020
Lo llevó a un espejo y se paró detrás de él. Pasó unos diez minutos
sólidos mostrando a Miles una y otra vez cómo enrollar la tela en un
nudo Windsor. Miles no estaba prestando ni un poco de atención,
sino que miraba y sonreía a Jake en el espejo.
—Eres realmente bueno en esto. ¿Te vistes mucho?
—No, solo he usado una corbata varias veces, —Jake se encogió de
hombros. —Yo tampoco sabría cómo atar una si no fuera por
YouTube.
—Ni siquiera pensé en YouTube. No habría tenido que molestarte.
—No es una molestia, —prometió Jake. Alisó la corbata de Miles. —
Ahí tienes; muy guapo. —Observé cómo las mejillas de Miles se
tornaban de un rosado oscuro en el espejo.
—Gracias, —respondió en un susurro. —Oh, aquí... —Miles trotó y
agarró la caja de flores de Jake del banco frente a mí. —Lo menos que
puedo hacer es ayudarte con esto. Es más fácil si alguien te la pone.
Me saqué la mierda del dedo haciendo lo mío. —Jake sonrió mientras
veía a Miles clavar su flor en la solapa. —Tu colonia huele muy bien,
—felicitó Miles. Su rostro era apenas el nivel del pecho de mi primo y
probablemente estaba llenándose la nariz.
—Gracias, —sonrió Jake.
Me preguntaba si incluso recordaban que estaba en la puta
habitación. Aquí estaba, un novio el día de su boda, esperando y
observando cómo los dos mejores hombres del grupo se cuidaban 95
uno a otro y me ignoraban. No es que me importara, necesariamente;
verlos a los dos juntos era mejor que cualquier reality show que
hubiera visto. Seguí esperando el momento en que Jake descubrió
que Miles estaba coqueteando, y lo que sucedería después. Todo lo
que necesitaba era una tina de palomitas de maíz.
—¿Quieres que te ayude con la tuya? —Ofreció Miles cuando 03/2020
finalmente apartó su atención de Jake.
—Claro—. Levanté la caja y Miles retiró la flor antes de sujetarla
hábilmente a mi pecho. —Gracias.
—De nada—. Suspiró felizmente. —Bueno, supongo que mejor
vuelvo a Finn. Será hora de alinearse pronto. —Mi corazón se aceleró
ante sus palabras. —Buena suerte, Harley—. Miles me palmeó el
hombro y nos dejó a mí y a Jake solos.
Jake sacó su teléfono de su bolsillo.
—Cinco minutos más, —anunció antes de deslizarlo. —¿Estás
nervioso?
—No, —respondí con firmeza. —Solo emocionado—. Jake me
sonrió y estaba a punto de preguntarle acerca de su supuesta novia
cuando llamaron a la puerta. —Adelante.
Papá entró en el vestuario y sonrió al vernos.
 —Wow, miren a los dos; ¡ambos se ven increíbles!
—Gracias, —respondí mientras me envolvía en un fuerte abrazo.
Me soltó y abrazó a Jake también. —Tú también. —Estaba vestido
con un bonito traje gris carbón, corbata roja y una margarita roja
clavada en su pecho. —¿Supongo que Finn te encontró?
—Sí, por eso vine a buscarte; para asegurarme de que estabas bien
con eso.
Estreché mis ojos.
—¿Bien con qué? —Verificar mi permiso sobre una flor no parecía 96
plausible.
—Oh, pensé que tal vez te lo había mencionado... —dejó de hablar
y se mordió por el labio inferior.
—¿Debería irme? —Ofreció Jake.
—No, no, está bien, —insistió papá. Se aclaró la garganta y volvió a
mirarme. —Finn me preguntó si lo acompañaría hasta el pasillo. Dijo 03/2020
que significaría mucho tener a su padre... —resopló ante la palabra:
—Siendo parte de la ceremonia. Le dije que me encantaría; no solo
porque son ustedes dos, sino porque nunca tendré la oportunidad de
entregar un novio u otro novio. Pero primero quería consultar
contigo.
No sabía cómo Finn lograba hacer algo todos los días que me hizo
enamorarme más de él. No me sorprendió que le preguntara esto a
mi padre; los dos se habían acercado increíblemente en las últimas
semanas. Papá nos acompañó a cenar a menudo, y Finn incluso le
estaba enseñando a cocinar algunos platos sencillos. Además, a papá
le encantaba anotar puntos de brownie al traer a su perro Millie
cuando lo visitó. Me encantó que los dos estuvieran tan unidos, y que
Finn tuviera una figura paterna en su vida que se preocupara por él.
 —Creo que es maravilloso, —le dije seriamente. Papá suspiró
aliviado y me envolvió en otro cálido abrazo.
—Gracias, —susurró en mi oído. —No sabes lo que esto significa
para mí—. Después de un último buen apretón, me soltó y se puso
alto. —Creo que mejor voy a buscar mi lugar—. El hombre casi salió
flotando de la habitación.
Jake me dio la sonrisa más grande y tonta que pude imaginar.
—Eso es asombroso, amigo. Nunca pensé que vería el día.
—Yo tampoco, —le respondí honestamente. —Probablemente 97
tampoco lo habríamos hecho, si no fuera por Finn.
—Es un buen hombre. Eso casi compensa que me estés mostrando
tu polla todo el tiempo maldito idiota. —Antes de que pudiera
responder, Jake me dio una palmada en la espalda. —Vamos, primo;
es la hora.
03/2020
*****

Me senté en la parte delantera del gimnasio, recordándome que

respirara. En cualquier momento, Finn estaría caminando hacia mí;
para casarse conmigo, y la idea era suficiente para quitarme el
aliento. Jake seguía dándome palmaditas de apoyo en la espalda
desde donde estaba parado detrás de mí, y de vez en cuando, Miles
me mostraba un pulgar desde el otro lado del pasillo.
Miré a la multitud y vi muchas caras familiares. Todos los miembros
de mi equipo de baloncesto aparecieron, incluido el entrenador Kline,
y todos estaban vestidos con trajes o camisas de vestir. Tabby, la
esposa de Alex, ya se estaba limpiando los ojos con un pañuelo. Capté
la mirada de Damon y él me lanzó una sonrisa perlada. Me sorprendió
tener tantos amigos que vinieron a apoyarnos a Finn y a mí.
 También tenía familia en la multitud. El tío Jeff y la tía Carol
hicieron el viaje para la boda, y estaban sonriendo dulcemente
mientras miraban. Me reí para mis adentros, pensando en lo que dijo
Jake acerca de que a sus padres les gustaba más Finn que él,
especialmente porque fueron a nuestra boda y no a la graduación de
Jake. No era cierto, obviamente, pero era divertido pensar en eso.
Aparté los ojos de la multitud para mirar al oficiante. Era una mujer
agradablemente regordeta con cabello castaño cortado a lo
duendecillo y ojos brillantes. Llevaba un vestido largo azul marino y 98
sostenía una carpeta contra su pecho. Ella sonrió y me guiñó un ojo y
yo le devolví la sonrisa.
De repente, Etta James “At Last” comenzó a tocar por los altavoces
y todo mi cuerpo se tensó. Escuché el sonido de las sillas raspando el
piso y la gente arrastrando los pies mientras escuchaban la canción
que Finn eligió para su entrada. Tragué saliva y giré la cabeza para 03/2020
mirar por el pasillo. Cuando vi por primera vez a Finn, mi corazón
saltó a mi garganta.
Era hermoso con pantalones de esmoquin negros y zapatos
brillantes. Su chaqueta era blanca con solapas negras, y un corbatín
negro alrededor de su cuello. No solo llevaba una flor roja en el
pecho, también llevaba un ramo de ellas; el ramo que el florista dio
con la esperanza de apaciguarlo. El brazo de Finn estaba acunado en
el de mi padre mientras caminaban juntos por el pasillo. Sus ojos
brillaron mientras me miraba, y su sonrisa se tambaleó.
Cuando los dos llegaron al final del pasillo, papá le dio un fuerte
abrazo a Finn y recibió un beso en la mejilla antes de tomar asiento.
Finn le entregó sus flores a Miles y se volvió hacia mí, agarrando mis
dos manos.
 —Eres impresionante, —susurró, y su barbilla se tambaleó un poco
más.
—¿Yo? ¡Finn, mírate! —Mi cerebro zumbó cuando traté de
encontrar una palabra que representara lo hermoso que se veía. —Tú
eres impresionante.
Finn se inclinó y enterró sus dedos en mi cabello mientras me
besaba profundamente. Los silbidos estallaron entre la multitud y las
cámaras se dispararon como locas; no solo las de nuestros invitados,
sino que nuestro fotógrafo también capturó el dulce momento. No 99
me importaba que no siguiéramos un guión exacto; esta era nuestra
boda y podíamos hacer lo que quisiéramos. Además, nunca
rechazaría un beso de mi hombre.
Finn soltó mis labios y presionó un suave beso en la punta de mi
nariz. Pasó sus dedos por mi barba y bajó por mi pecho hasta que
volvió a tomar mis dos manos. Mi corazón atrapó la hermosa sonrisa 03/2020
que me dio.
—Ya puedo decir que esta boda será buena, —bromeó la oficiante,
y la multitud se echó a reír. —Damas y caballeros, nos reunimos hoy
para celebrar el amor entre estos dos hombres. Estos hombres han
enfrentado y superado muchos obstáculos por separado, pero han
descubierto el mayor tesoro de la vida; esos problemas se resuelven
más fácilmente cuando nosotros tenemos a alguien que nos ayude a
superarlos, así como las victorias son más dulces cuando tenemos a
alguien a nuestro lado para compartir su alegría.
Finn me apretó las manos y asintió con la cabeza cuando una
lágrima se deslizó por su mejilla.
—Es algo hermoso cuando una pareja se complementa entre sí,
cada uno de ellos saca a la luz las fortalezas del otro mientras
proporciona fuerza y apoyo propio, —continuó la oficiante. —Ese es
el caso con Finn y Harley. Ha sido un placer extremo conocer a estos
dos hombres las últimas semanas a través de la planificación y el
asesoramiento. Se completan el uno al otro. Se apoyan mutuamente.
Y lo más importante, comparten un amor tan puro y profundo, que de
verdad creo que resistirá la prueba del tiempo y cualquier obstáculo
que la vida ponga en su camino. La pareja ha optado por escribir sus
propios votos el uno al otro, y en este momento, le pido a Finn que
recite sus votos a Harley.
Finn cerró los ojos por un momento y respiró hondo. 100
—Harley, antes de compartir mis promesas, tengo que
agradecerte—. Ladeé la cabeza mientras escuchaba, y mi amante me
acarició los nudillos con los pulgares. —Eres la primera persona que
me acepta por lo que soy. Me han dicho que soy demasiado ruidoso,
demasiado pegajoso, demasiado bobo... que no merezco la molestia,
y ciertamente no vale la pena amarme. 03/2020
—Oh, Finn, —susurré, apretando sus manos temblorosas en las
mías.
—Pero luego te conocí y todo cambió. Me haces sentir que soy
suficiente. Aceptas las cosas sobre mí que han vuelto locos a los
demás y me haces sentir digno de tu amor. Tu amor lo es todo para
mí. Eres todo para mí; mi fuerza, mis esperanzas, mi felicidad. Gracias
a ti, tengo una familia. —Finn se tomó un momento para mirar
alrededor de la habitación a Jake, mi padre, y tía Carol y tío Jeff. —
Tengo amigos y tengo un propósito—. Asintió a los miembros
sonrientes de mi equipo de baloncesto antes de mirarme.
—Siempre te digo que te amo más. No quiero decir que te amo más
de lo que tú me amas; nunca te faltaría al respeto así, y sé que la
magnitud de tus sentimientos coincide con la mía. Quiero decir que te
amo más de lo que pensé que era posible amar a alguien. Hoy te amo
más que ayer, y mañana vendrá y te amaré aún más que eso. Te
apoyaré, te protegeré, te empujaré, te levantaré, te haré sonreír, te
respetaré, te seré fiel y te amaré siempre. Esa es mi promesa para ti;
que nunca dejaré de amarte con todo lo que soy hasta que mi último
aliento y mi Señor lo deseen, mucho más que eso.
Levanté sus manos hacia mi boca y besé sus nudillos mientras la
humedad se deslizaba por mis mejillas y sobre su piel. Se escucharon
sollozos entre la multitud y no me estaba yendo mejor. Las dulces
palabras de Finn tocaron mi corazón y calentaron mi alma. 101
La oficiante se aclaró la garganta varias veces antes de anunciar con
voz temblorosa:
—Harley, por favor recita los votos que has preparado para Finn.
—No estoy seguro de poder seguir eso, —dije seriamente, y varias
personas en la audiencia se rieron. Finn me sonrió y dejó caer mis
manos, enterrando las suyas en mi cabello y rascándome el cuero 03/2020
cabelludo. El movimiento siempre me calmaba. Me limpié los ojos y
dejé escapar un largo suspiro.
—Finn, la primera vez que te vi, me sorprendió tu belleza. Cuando
me hablaste por primera vez, supe que eras igual de hermoso por
dentro. Miraste más allá de mi discapacidad y te tomaste el tiempo
de conocerme. Y cuando te conocí, me encantó lo que encontré; eres
atrevido, luchador, hilarante, protector y todo lo que necesito en mi
vida. Haces que mi vida valga la pena llenándola de luz, risas y amor.
Prometo pasar mi vida haciéndote tan feliz como me has hecho a mí.
Te honraré, te respetaré, te apoyaré y te amaré leal, fiel y
plenamente por el resto del tiempo.
—Mi Harley... —Finn se subió a mi regazo y enterró su rostro en mi
cuello mientras lloraba. La multitud dejó escapar una mezcla de risas
y sollozos mientras observaban a mi dulce hombre acurrucarse en mi
abrazo. Besé la parte superior de la cabeza de Finn y asentí para que
la oficiante continuara. Sabía que Finn no se movería por el resto de
la ceremonia, y no lo haría de otra manera.
—Ahora les pido a cada uno de ustedes que preparen los anillos
que han elegido presentar—. Ante las palabras, Jake apareció a mi
lado y me entregó el anillo de Finn. Miles tocó el hombro de Finn y mi
hombre extendió la mano sin levantar la cabeza. Miles colocó mi
anillo en la palma de Finn y retrocedió nuevamente.
—Finn, por favor repite después de mí; Con este anillo, yo sellaré 102
mis votos y te prometo mi amor y lealtad mientras ambos vivamos.
Finn levantó su cabeza de mi hombro y me puso el pelo detrás de
las orejas. Me miró a los ojos mientras repetía las palabras y deslizó el
anillo de metal trenzado en mi dedo. Besó el anillo donde estaba
sentado y me dio una sonrisa acuosa. Recité el verso a continuación y
coloqué el anillo de Finn en su dedo, justo donde pertenecía. 03/2020
—Y así, —anunció con orgullo la oficiante, —Finn y Harley se han
comprometido con su amor y lealtad el uno al otro, y han declarado
lo mismo al dar los anillos. Por el poder conferido en mí, y como lo
atestiguan amigos y familiares, ahora los declaro maridos. Por favor
celebren con un beso.
Las palabras apenas salieron de sus labios antes de que Finn
atacara los míos. Me besó profunda y completamente, hundiendo su
lengua en mi boca sin importarle quién estaba mirando. Le devolví el
beso con igual vigor y la audiencia se volvió loca. Todos vitorearon y
silbaron, y las sillas rasparon el piso otra vez, ya que aquellos que
podían pararse lo hicieron.
Despegué mis labios de los de Finn y él apoyó su frente sobre la
mía.
—Te amo, Harley Woods.
 —Yo también te amo, Finn Woods—. Finn decidió tomar mi
nombre; no le interesaba mantener el nombre de su familia ni
siquiera agregarlo al mío después de la forma en que lo trataban.
—Joder, eso es perfecto, —respondió y yo eché la cabeza hacia
atrás y me reí. Finn fue perfecto. Miles volvió a picotear el hombro de
Finn para ofrecerle su ramo. Finn lo tomó y le dio un fuerte abrazo a
su padrino antes de volver a ponerse en mi contra. —¿Tengo que
levantarme para caminar de regreso por el pasillo?
—Nop. Te quiero justo donde estás. —Finn envolvió sus brazos 103
alrededor de mi cuello mientras yo nos llevaba por el pasillo a través
de las filas de nuestra familia y amigos. Todos aplaudieron más fuerte
y gritaron buenos deseos mientras Finn salpicaba mis mejillas y mi
cuello con besos. Nunca había estado más orgulloso o más feliz en
toda mi vida.
03/2020
 Capítulo Ocho

Después de una hora de tomar fotos en cada pose imaginable y un

corto viaje en automóvil por la ciudad, Finn y yo nos encontramos con
otra ronda de aplausos cuando entramos en el restaurante de carnes 104
para nuestra recepción. Saludamos a cada huésped personalmente
antes de dirigirnos a la mesa que nos habían preparado.
Jake y Miles ya estaban sentados en cada extremo de la mesa. Me
giré hacia la mesa junto a Jake, y Finn se acomodó junto a Miles. La
mesa estaba colocada de modo que miramos a la multitud, dispersos
en sus propios asientos. Al otro lado de la habitación había dos mesas 03/2020
desocupadas, una que contenía el pastel y la otra que estaba cubierta
de regalos. Más allá había una habitación que estaba casi vacía, ya
que las mesas habían sido empujadas hacia las paredes para hacer
espacio en caso de que alguien quisiera bailar más tarde.
—Entonces, ¿cómo se siente ser un hombre casado? —Preguntó
Jake, golpeando su hombro con el mío.
—Increíble, —suspiré. —Tendré a mi mejor amigo y amante a mi
lado para siempre—. Finn me dio una mirada de adoración y me
envolvió en un fuerte abrazo.
—Eso es muy romántico, —agregó Miles con una sonrisa soñadora.
—Espero encontrar a alguien que se sienta así por mí algún día.
—Lo harás, —sonrió Jake. —Cualquier chico sería afortunado de
tenerte.
Miles sonrió ampliamente mientras sus mejillas se sonrojaban.
 —Gracias, Jake—. Mi primo le guiñó un ojo y dirigió su atención a la
camarera que apareció junto a nuestra mesa para tomar nuestros
pedidos.
Todos disfrutaron de una deliciosa cena de bistec, costillas o pollo.
Les dijimos a nuestros invitados que ordenaran lo que quisieran; Finn
dijo que quería que nuestra boda y la recepción avergonzaran a todos
los demás. No estoy seguro de con quién lo estaba comparando, pero
por mi parte pensé que era bastante perfecto.
Después de que todos terminaron de comer y los camareros 105
limpiaron los platos de nuestras mesas, Jake se levantó y solicitó la
atención de todos. Decenas de pares de ojos cayeron sobre él.
—Hola a todos. Para aquellos de ustedes que no me conocen, soy
el primo de Harley, Jake. También soy su padrino, por eso estoy
dando este discurso. Finn me dijo que mejor lo hiciera llorar, así que
Haré lo mejor que pueda—. Mi amante se rió y se acurrucó más cerca 03/2020
de mí mientras escuchamos.
—De todos modos, Harley no es mi primo, es mi mejor amigo.
Hemos estado cerca desde que éramos niños. Lo he visto pasar por
cosas difíciles, y honestamente puedo decir que es la persona más
fuerte que conozco—. Finn asintió su acuerdo contra mi hombro y le
sonreí a Jake.
—Lo que apesta es que no mucha gente llegó a conocer a Harley de
la forma en que yo lo conozco. Lo juzgarían o simplemente lo
evitarían solo porque el tipo estaba sentado y nunca pudieron ver
cuán genial era. Comenzó a evitarlos a ellos también, y pasó la mayor
parte de su tiempo en casa. Así que, siendo el primo increíble que
soy, lo arrastré fuera de su casa.
 Varios de los miembros de la audiencia se rieron entre dientes.
Probablemente no se dieron cuenta de cuán literal era Jake cuando
dijo 'arrastrar'.
—Estoy bastante seguro de que odiaba cada segundo, —continuó
mi primo. —Hasta el día en que lo llevé a que le arreglaran el pelo
desaliñado. Allí conoció a un pequeño y lindo estilista. Sabía por la
estúpida sonrisa en su rostro que Harley estaba completamente
perdido por el tipo.
—No me veía tan estúpido, ¿verdad? —Le susurré a Finn. 106
—Eras hermoso, —susurró en respuesta y besé su frente en
agradecimiento.
—Pero él no fue el único, —agregó Jake. —Finn tenía los ojos
saltones sobre Harley. Animé a mi primo a que lo invitara a salir, y el
resto es historia. Así que, básicamente, soy el héroe de esta historia y
el que hizo posible esta boda—. La multitud volvió a reírse. 03/2020
—Y también eres tan humilde, —bromeó Finn, y todos se rieron
más fuerte.
—Dejando de lado todas las bromas, estoy tan feliz de que se hayan
encontrado. Fue difícil ver que la personalidad de Harley se cerraba, y
oírlo decir que esperaba pasar su vida solo, todo por la ignorancia de
los demás. Yo traté de estar ahí para él en todos los sentidos, pero
siempre le faltaba algo. Algo que estaba perdiendo la esperanza de
encontrar—. Jake se aclaró la garganta y parpadeó hacia el techo por
un momento antes de mirarnos.
—Hasta que te conoció, Finn. Dejaste en claro desde el principio
que no te importaban dos mierdas su condición. Lo ves por quién es y
lo amas como merece ser amado. Nunca lo he visto tan feliz como
cuando está contigo. Lo cuidas y lo proteges y nunca puedo
agradecerte lo suficiente por eso—. Él agarro el vaso de la mesa. —
Por Harley y Finn, los mejores hombres que conozco. Los amo a los
dos.
Todos vitorearon y levantaron sus copas. Finn levantó su cabeza de
mi hombro y ahuecó mis mejillas en sus manos. Las lágrimas cayeron
en cascada por su rostro y no pude evitar sonreír ante el hecho de
que obtuvo su deseo de Jake.
—Juro por mi vida que nunca más te sentirás solo, —susurró, y mi
sonrisa se desvaneció cuando mis propios ojos se llenaron de
lágrimas. Siempre supo qué decir para tirar de mi corazón. El calor 107
floreció en mi pecho cuando presionó un suave beso en mis labios.
Finn se echó hacia atrás y me puso el cabello detrás de la oreja
antes de pararse e ir hacia Jake. Envolvió a mi primo en un abrazo y le
dio un beso en la mejilla. Para mi sorpresa, Jake le devolvió el beso.
Aparentemente, el día estaba poniendo a todos de humor. Mi primo
vino a mí y me dio un abrazo también. No recibí un beso de él y 03/2020
estaba bien con eso.
—Como Finn ya está llorando, voy a seguir adelante y saltar en mi
brindis en caso de que sea menos impresionante, —dijo Miles
mientras estaba parado en el otro extremo de la mesa. Todos se
rieron y Finn y Jake rápidamente tomaron asiento y le prestaron
atención. —Me llamo Miles y soy el padrino de Finn. Finn es mi mejor
amigo; uno de mis únicos amigos, en realidad, además de estos otros
dos tipos aquí arriba. —Finn le lanzó un beso a Miles y recibió una
sonrisa a cambio. Me sorprendió escuchar que Miles no tenía muchos
amigos; era un tipo muy simpático.
—Nunca olvidaré el día que conocí a Finn. Me acababa de mudar a
la ciudad y no conocía a nadie. Era mi primer día trabajando en el café
y fue una locura; la cola era enorme, la gente estaba de mal humor y
mi compañero de trabajo me gritaba que fuera más rápido, a pesar
de que no estaba completamente seguro de qué demonios estaba
haciendo. Estaba abrumado y a punto de dejar de luchar y salir
corriendo de la tienda llorando cuando Finn se acercó al mostrador.
Me miró, me agarró de la mano y me preguntó si estaba bien.
—De todos modos, lo perdí, —continuó Miles. —Pasaron muchas
cosas en mi vida y ese día fue el punto de quiebre. Finn me indicó el
final del mostrador y una vez que lo rodeé, me tomó en sus brazos.
Dejó que un completo extraño gotee sobre él mientras me abrazaba y
escuchaba mis problemas, diciéndome que todo iba a estar bien. — 108
Miles le dio a mi amante otra sonrisa cariñosa y apreté el hombro de
Finn. No me sorprendió lo más mínimo que extendió la mano e
intentó ayudar a alguien a quien vio que estaba sufriendo.
—Mi compañero de trabajo apareció unos minutos después y me
preguntó cuál era mi problema y por qué lo dejé solo para hacer todo
el trabajo. Fue entonces cuando Finn me sorprendió diciéndole a 03/2020
“Coño Pete” que si no retrocedía... um... explícito, vendría detrás del
mostrador y le daría un problema—. Todos en la multitud se rieron y
vitoreó a mi luchador hombre. —Mi compañero de trabajo de seis
pies de altura se asustó y retrocedió rápidamente. Una vez que se
perdió de vista, no pude dejar de reír. Era algo que no había hecho en
mucho tiempo, y se sintió increíble. Una vez que me acomodé, Finn
besó mi mejilla y comprobó si estaba bien antes de dejarme ir a
trabajar.
—Volvió a la fila y cuando volvió al mostrador, ordenó un moca.
Bueno, terminé por error haciéndole un café con leche moca. Mi
compañero de trabajo volvió a cerrar la tapa y después de que Finn
tomó un sorbo, pidió hablar con el gerente. Pensé: 'Oh señor, ya lo
hice. Lo cabreé...” —Miles se estremeció y miró a Finn para susurrar:
—¿Puedo decir “cabrear”?
 —Lo digo todo el tiempo, —Finn se encogió de hombros y la
multitud volvió a reír.
—Está bien, —sonrió Miles. —Pensé: “He cabreado a este pequeño
petardo y me van a despedir”, y me estaba destrozando el cerebro
por lo que iba a hacer sin un trabajo. Bueno, cuando mi gerente salió
de la habitación de atrás, Finn procedió a decirle qué imbécil era mi
compañero de trabajo y lo bien que me estaba yendo en mi primer
día. Incluso le dijo que le había hecho su nueva bebida favorita, y que
iba a venir todos los días solo por mi moca lattes. —Juro que escuché 109
cuarenta corazones estallando, junto con el colectivo 'aww' de la
multitud.
—Luego me deslizó un billete de veinte y me dijo que mantuviera el
cambio—. Miles sacudió la cabeza y miró a Finn. —No creo que te des
cuenta de cuánto ese día cambió mi vida; cómo tu amabilidad me
ayudó tanto. Me alegro de haberte conocido y de poder llamarte mi 03/2020
mejor amigo. Espero que sepas cuánto te amo.
Finn saltó de su asiento y abrazó a Miles con fuerza.
—Yo también te amo, cariño, —se las arregló para chillar antes de
sollozar sobre el hombro de Miles. Sonreí ante la dulce exhibición y
me pregunté por qué habría pasado el joven. Tal vez no le gustaría
hablar de eso. Seguramente no era asunto mío. Fuera lo que fuese,
estaba orgulloso de mi hombre por ayudarlo a superarlo.
Miles mantuvo su brazo sobre los hombros de Finn mientras me
miraba.
—Y Harley, estoy muy contento de llamarte amigo también. Es
divertido pasar el rato y es una de las personas más agradables que
he conocido. Te admiro mucho; eres tan fuerte y nunca dejas que
nada te deprima. Tú y Finn son la pareja perfecta; una relación como
la suya es la que espero encontrar algún día. Les deseo a ambos una
larga vida de salud y felicidad. —Levantó la copa. —¡Por Finn y
Harley!
Todos repitieron las palabras mientras levantaban sus bebidas. Finn
volvió a sentarse a mi lado, secándose los ojos con las mangas de su
esmoquin. Jake se inclinó a nuestro alrededor para llamar la atención
de Miles.
—Tu discurso sopló el mío fuera del agua, —insistió, pero Miles lo
rechazó.
—Pensé que ambos eran perfectos, —dijo Finn cuando terminó de 110
secarse la cara.
—¿Alguien más tiene algo que les gustaría decir? —Jake preguntó a
la habitación.
—¡No! —Exclamó Finn, levantando las manos. —¡No más discursos!
Estoy llorando tanto que me deshidrataré, y quiero guardar todos los
fluidos que me quedan para mi Harley más tarde. 03/2020
La sala estalló en risas y gemidos afables. Unos cuantos camareros
de la sala jadearon y miraron a mi hombre con los ojos muy abiertos.
Me reí y acerqué a Finn para darle un beso en la sien.
—En esa nota, ¿quién quiere pastel? —Le pregunté a la multitud y
ellos lo vitorearon nuevamente.
Finn me siguió mientras cruzaba la habitación, consiguiendo
palmaditas y felicitaciones de las personas sentadas en las mesas por
las que pasé. El pastel era impresionante de cerca. El glaseado era
suave y uniforme, y las margaritas de fondant hechas a mano
parecían flores reales.
—Es hermoso, ¿no? —Preguntó Finn mientras lo admiraba
también.
—Casi odio comerlo.
 —Estoy seguro de que el fotógrafo tomó muchas fotos de él, pero
por si acaso... —Finn sacó su teléfono de su bolsillo y tomó varias
fotos del pastel. —Ahí vamos—. Se volvió para mirar a la multitud. —
Este hermoso pastel fue hecho por Anthony's Cakes aquí en el
remolque. Anthony está aquí con nosotros esta noche. Levántate,
cariño. —Anthony se levantó de su mesa y saludó a la multitud
mientras aplaudían. Ninguno con más entusiasmo que su esposo
Marshall, que estaba sentado a su lado.
—Fue increíble trabajar con Anthony y verás en un minuto lo 111
increíbles que son sus pasteles. Si alguien necesita un pastel en el
futuro, lo recomiendo al cien por cien. Yo no recomiendo la panadería
de Lola; son personas terribles. —La mayoría de los invitados parecían
confundidos, pero Marshall volvió a aplaudir casualmente e incluso
lanzó un 'Amén' por las palabras de Finn.
Finn y yo pusimos una mano sobre un cuchillo largo y cortamos un 03/2020
triángulo de pastel de limón. Era el favorito de mi hombre de los tres
que probamos, así que, por supuesto, lo elegimos para la capa
superior que congelaríamos y mantendríamos. Colocamos la
rebanada en un plato y volvimos a colocar el cuchillo sobre la mesa.
Le ofrecí a Finn un tenedor, pero él negó con la cabeza. En su lugar,
arrancó un pedazo de pastel y me lo dio con los dedos. La multitud
lanzó sus aww de nuevo y cámaras estallaron todo a nuestro
alrededor como copiando sus acciones.
—Vamos, bebé, vamos a terminar esto en nuestra mesa—. Antes
de irnos, Finn cortó una rebanada de cada una de las otras capas y las
dejó caer en nuestro plato, junto con un pastelito de moca. —Ahí, eso
es mejor—. Me reí entre dientes por su diente dulce, pero no estaba
dispuesto a discutir; también me encantaron todos los sabores y
quería disfrutarlos. A excepción de la magdalena; eso era todo de
Finn.
Dos camareros se acercaron a la mesa y comenzaron a cortar y
colocar el pastel. Mientras Finn y yo volvíamos a nuestra mesa, una
camarera recogió varios platos y recorrió la sala entregando el postre
a nuestros invitados. Me alegré de haber elegido este lugar para
nuestra recepción; todo iba muy bien y nos estaban cuidando muy
bien.
Cuando llegamos a nuestra mesa, Finn se acomodó de lado en mi 112
regazo en lugar de en su propio asiento. Nos turnamos para
alimentarnos mutuamente con los deliciosos pasteles mientras Jake
se reía y rodaba los ojos hacia nosotros, y Miles nos miraba con una
sonrisa melancólica.
—Bien, ¿qué sabor te gustaría, zanahoria o vainilla? —Preguntó la
camarera mientras se paraba frente a Jake. 03/2020
—¿Puedo tener ambos?
—Un hombre según mi propio corazón, —respondió ella con un
guiño coqueto, y Jake sonrió mientras colocaba dos platos frente a él.
Por el rabillo del ojo, vi que la mirada de Miles se movía hacia la mesa
frente a él. Esto es lo que me preocupaba por el pobre hombre. —¿Y
qué hay de ti? —Le preguntó a Miles.
—Zanahoria por favor.
—Lo tienes. Vuelvo enseguida. —Se fue y regresó unos momentos
más tarde con una gran porción para Miles. —¿Hay algo más que
pueda conseguirles ahora mismo?
—En realidad, sí, —respondió Finn mientras se movía para mirarla.
—¿Podrían traer a los otros camareros aquí cuando terminen con el
pastel?
 —Por supuesto, —respondió ella con una sonrisa incómoda. —
¿Está todo bien, señor?
—Oh, es maravilloso, —le aseguró Finn. Ella dio un suspiro de alivio
y dio una sonrisa legítima antes de asentir y alejarse.
Casi todos guardaron silencio mientras devoramos nuestro pastel.
Mi madre siempre decía que se notaba lo buena que era la comida
por lo tranquila que estaba la habitación y, en este caso, tenía toda la
razón. A nadie le preocupaba hablar cuando comíamos deliciosas
golosinas. 113
Las conversaciones comenzaron a retomarse cuando la gente
terminó su postre. Todos le estaban dando críticas favorables a
Anthony y la promesa de ordenar a través de él la próxima vez que
necesitaran un pastel, y Marshall parecía tan orgulloso que podía
explotar. Pronto, los camareros limpiaron todo y se reunieron frente
a Finn. 03/2020
—Solo quería agradecerles a todos ustedes por todo lo que han
hecho esta noche, —les dijo Finn con una sonrisa. —¿Todos
obtuvieron algo de comer y lo agregaron a nuestra factura?
—Sí, señor, y gracias —respondió uno de los camareros.
—¿Y todos obtuvieron un pedazo de pastel? —Los tres asintieron.
—Excelente. Nosotros tenemos un poco de algo para cada uno de
ustedes. —Metió la mano en su chaqueta y sacó tres sobres, que
sabía estaban llenos de doscientos dólares cada uno desde que Finn
los había preparado en casa hace unos días.
Los entregó y la camarera se calmó cuando ella abrió el sello y vio
lo que había dentro.
—¡Muchas gracias! —Le tendió los brazos a Finn, quien se rió entre
dientes y se levantó para abrazarla sobre la mesa.
 —De nada. También es de mi Harley. —No podía alcanzar para
abrazarme en mi posición sentado, así que estrechó mi mano con
entusiasmo y también me dio las gracias.
—Whoa, —dijo uno de los camareros mientras miraba su regalo. —
Señor, todos en las mesas ya nos dieron propina.
—Bien, —respondió Finn con un movimiento de cabeza. —Esto es
algo extra para decir gracias. —Para mi sorpresa, el joven extendió la
mano sobre la mesa y abrazó a Finn también. El otro camarero sonrió
ampliamente y nos estrechó la mano. —¿Puedo pedirte un favor 114
más?
—Por supuesto, —respondió la camarera cuando los dos hombres
asintieron con la cabeza.
—¿Pueden tocar algunas canciones lentas por los parlantes? Me
encantaría bailar con mi esposo—. Mi corazón se hinchó por lo
maravillosa que sonaba la palabra 'esposo' en sus labios. Finn me 03/2020
miró y sonrió. —Joder, me encanta decir eso.
La camarera se rió y asintió con la cabeza.
—Estaría feliz de hacerlo. Vamos, chicos —les dijo a los camareros a
ambos lados de ella, —Vengan a ayudarme a elegir algunas buenas
canciones—. Asintieron y se apresuraron juntos hacia la cocina.
Unos minutos más tarde, Bless the Broken Road sonó por los
altavoces y Finn me sonrió ampliamente.
—¿Bailarás conmigo, bebé?
Era otra cosa que nunca hubiera hecho antes de que Finn entrara
en mi vida.
—Me encantaría.
Finn me llevó a la habitación contigua que estaba libre de mesas. Se
detuvo justo en el medio y envolvió sus brazos alrededor de mi
cuello. Lo agarré por las caderas y nos balanceamos lentamente de un
lado a otro al ritmo de la canción. Las cámaras volvieron a centellear a
nuestro alrededor, pero no les hicimos caso. Toda nuestra atención se
dirigió el uno al otro mientras nos mirábamos a los ojos.
—Este ha sido el mejor día de mi vida, —le dije a Finn, acercándolo
a mí.
—Y solo piensa; ni siquiera hemos llegado a las partes traviesas
todavía, —guiñó Finn. —Esta noche, te voy a dar el paseo de tu vida.
Parpadeé y tragué fuerte.
—¿Podemos irnos ahora? 115
Finn se rio y me apretó más fuerte.
—Aún no. Me encanta bailar contigo, bebé. —No le importaba que
no pudiera bailar el vals con él o hacer algo más elegante que
balancearse desde las caderas hacia arriba; simplemente amaba estar
conmigo y disfrutar el momento juntos.
—Te amo mucho, Finn. Me encanta todo sobre ti y todo lo que 03/2020
hacemos juntos.
—Mi dulce y perfecto Harley, —susurró, peinando sus dedos a
través de mi largo cabello, —me lo muestras todos los días.
—Y te lo seguiré mostrando todos los días de mi vida, —prometí.
Finn se inclinó y tomó mis labios en un beso suave y tierno. No los
soltó hasta que la canción terminó.
Cuando I Don’t Want to Miss a Thing, otras parejas se unieron a
nosotros en la pista de baile improvisada. Los primeros en llegar
fueron Anthony y Marshall, seguidos de Jeff y Carol, Tabby y Alex, y
luego Lindsay, la compañera de trabajo de Finn, y la cita que trajo.
Finn y yo nos balanceamos juntos con varias canciones, perdidos en
nuestro pequeño mundo hasta que sentí un golpecito en mi hombro.
Levanté la vista para ver a papá parado allí sonriéndome.
 —¿Puedo interrumpir? —Preguntó, señalando a Finn. No quería
dejar ir a mi hombre, pero significaba mucho que mi padre quisiera
compartir este momento con mi esposo.
—Por supuesto—. Agarré mis ruedas para dar marcha atrás, pero
Finn se aferró a mis hombros.
—¿A dónde crees que vas sin un beso? —Me reí entre dientes y
apreté los labios para recibir un dulce beso antes de que Finn me
permitiera retroceder. —Ven aquí, tú, —le dijo a mi padre antes de
abrazarlo. 116
Me reí de nuevo y volví a mi mesa y junto a un sonriente Jake.
—Eso es genial como el infierno, —dijo con un movimiento de
cabeza hacia Finn y mi padre, que estaban hablando y riendo
mientras bailaban juntos.
—Sí, lo es —respondí con un suspiro. Los observé a los dos con una
sonrisa tonta en la cara hasta que alguien atrapó mi atención frente a 03/2020
mí. Miré hacia arriba para ver a Miles parado frente a Jake, más
pálido de lo que lo había visto y como si pudiera vomitar en cualquier
momento.
—Oye, ¿estás bien? —Preguntó Jake, sonando tan preocupado
como yo cuando lo miré.
—Sí, estoy bien, —respondió Miles, aunque no fue muy
convincente. —Yo, um... solo quería preguntarte algo—. Se pasó una
mano temblorosa por el cabello y se lamió los labios secos. —Está
bien si no quieres, lo entenderé por completo, pero... —Miles se
aclaró la garganta y preguntó en voz baja: —¿Bailarás conmigo?
Una lenta sonrisa se extendió por los labios de Jake.
—Claro—. Los ojos de Miles se abrieron de par en par y no
parpadeó cuando Jake se levantó y rodeó la mesa hacia él. Mi primo
le tendió el codo y Miles lo agarró tan rápido que me preocupaba que
pudiera sacarle el hombro de lugar. —Vamos a mostrarles cómo se
hace—. Miles asintió rápidamente y todo su cuerpo vibró mientras se
alejaba del brazo de Jake.
No pude apartar mis ojos de la pareja cuando tomaron su lugar en
la pista de baile. Miles puso sus manos sobre los hombros de Jake, mi
primo colocó la suya en las caderas de Miles y se mecieron
lentamente de lado a lado. No me sorprendió que Jake aceptara
bailar con él; él y Miles son buenos amigos, y mi primo siempre había
sido extremadamente tranquilo cuando se trataba de la 117
homosexualidad. Demonios, Finn lo besó, lo acurrucó y se sentó en su
regazo todo el tiempo y Jake nunca pestañeó.
Hablando de Finn, mi amante llamó mi atención moviendo su mano
detrás de la cabeza de mi padre. Asintió subrepticiamente con la
cabeza hacia la pareja e hizo un gesto detrás del cabello de papá con
una mano como un círculo y un dedo de su otra mano metiéndolo, 03/2020
todo sin romper su conversación con mi padre. Solté una carcajada y
sacudí la cabeza.
—Hola, vamos a salir, —sonó frente a mí y busqué a Damon,
Hunter y Vic de mi equipo de baloncesto.
—Bueno. Gracias por venir, muchachos.
—Gracias por la invitación, —respondió Damon. —Llámame cuando
regreses de tu luna de miel y nos reuniremos.
—Suena bien—. Golpeé a cada uno de ellos mientras felicitaban
antes de girar hacia la puerta principal.
—También necesito llegar a casa, —dijo el entrenador Kline
mientras se acercaba a mí. —Estoy muy feliz por ti, Woods.
—Gracias, entrenador—. Me estrechó la mano con una sonrisa y
también salió del edificio.
 Uno por uno, nuestros invitados salieron y pronto quedaron solo
unas pocas parejas en la pista de baile. Me giré hacia el espacio y me
quedé boquiabierto cuando vi a Jake y Miles. En algún momento,
mientras me despedía de todos, los dos se habían acercado. Ahora,
los brazos de Miles se deslizaron por completo alrededor del cuello
de Jake, y su cabeza estaba acurrucada contra su pecho. Jake abrazó a
Miles con fuerza por la mitad y apoyó la mejilla sobre la cabeza de
Miles. Ambos ojos estaban cerrados mientras lentamente se mecían
juntos. 118
Mi mente dio vueltas; ¿Sigue siendo Jake cortés? ¿Es algo más?
¿Estoy fuera de lugar porque Jake tiene novia? ¿Estoy soplando esto
fuera de proporción? Todo lo que sabía era que cuando volviera de mi
luna de miel, estaría haciendo muchas preguntas.
La yema de un dedo tocó mi barbilla y cerró la boca. Parpadeé y
aparté la mirada del dúo para encontrar a Finn sonriéndome. 03/2020
—Tu papá se ofreció a tomar nuestros regalos y traerlos cuando
venga a cenar la próxima semana.
Miré a mi padre, que estaba junto a Finn.
—¿De verdad? Eso sería genial, gracias.
—No es problema, —se encogió de hombros. —Estoy seguro de
que ustedes dos están emocionados de salir de aquí—. Solté una
carcajada cuando Finn me alzó las cejas. —Entonces, ¿alguna vez te
dijo a dónde vas para la luna de miel?
Papá sabía que Finn había planeado todo y, hasta hace unos días, lo
había mantenido todo en secreto. Terminó diciéndome para que
pudiera empacar y reunir todos mis documentos de viaje.
—Sí. Me está llevando al sur de Florida.
—Ooh, diversión al sol. Estoy celoso.
Finn jadeó.
 —¿Sabes lo que sería genial? ¡Todos deberíamos tomar unas
vacaciones familiares juntos! Quiero decir, obviamente, no compartir
una habitación a menos que quieras estar marcado para siempre por
las cosas que me oirías hacerle a tu hijo... —Papá y yo ladramos
sorprendidos por lo casualmente que lo dijo, —Pero deberíamos
totalmente ¡hacerlo! Con Jake también, por supuesto.
—Eso suena muy divertido, —sonrió papá.
—¡Hurra! Está decidido entonces. Esperaré y se lo diré a Jake más
tarde, —Finn sonrió. —Se ve un poco ocupado en este momento. 119
—¿Hay algo entre ellos? —Preguntó papá en voz baja, señalando a
Jake y Miles. —Jeff y Carol me preguntaron sobre ellos antes de irse y
les dije que no lo sabía.
Finn se encogió de hombros.
—Hasta donde sabemos, solo son buenos amigos. ¿Jeff y Carol
tendrían problemas con eso? —Preguntó con una mirada triste. 03/2020
—Diablos no, —respondió papá, sacudiendo la cabeza. —Carol solo
quería saber si eran una pareja para poder comenzar a molestarlos
por los nietos.
Finn echó la cabeza hacia atrás y se echó a reír.
—Dios, amo a esta familia.
—También te amamos, —respondió papá con seriedad y volvió sus
ojos hacia mí. —A ustedes dos.
—Aw, Dwayne—. Mi padre se echó a reír cuando Finn lo envolvió
en un dominio absoluto. Finn le dio un fuerte beso en la mejilla
cuando lo soltó, y papá se apresuró a abrazarme.
—Está bien, salgan de aquí, chicos locos, —bromeó papá mientras
me soltaba.
Al salir, Finn se detuvo al lado de Jake y Miles.
 —Hola, chicos —susurró para no romper su momento. Ambos
levantaron la cabeza y abrieron los ojos, pero no se alejaron el uno
del otro. —Solo quería decir gracias por todo. Nos vamos, pero
llamaremos tan pronto como estemos en casa después de las
vacaciones para informarles que regresamos de manera segura.
—Gracias, Finn, —respondió Miles en voz baja.
Finn le dio a cada uno un beso en la mejilla.
—Los amo, muchachos.
—También te amamos, —respondieron. Jake soltó a Miles solo el 120
tiempo suficiente para darme un abrazo, y luego envolvió al hombre
en sus brazos nuevamente. Me asomé por encima del hombro
cuando llegamos a la puerta principal para encontrar que estaba
descansando su mejilla sobre la cabeza de Miles nuevamente,
acurrucándolo cerca. Definitivamente había muchas preguntas que
hacer. 03/2020
 Capítulo Nueve

—Aquí estamos; 724, —anunció Finn cuando llegamos a nuestra

habitación de hotel. Nos había alquilado una habitación cerca del
aeropuerto para no tener prisa por la mañana. Además, podríamos 121
dejar nuestro automóvil aquí en el estacionamiento del hotel de
forma gratuita mientras estábamos fuera y un servicio de transporte
nos llevaría hacia y desde el aeropuerto, ahorrándonos mucho dinero.
—¿Te gustaría hacer los honores? —Preguntó, sosteniendo la tarjeta
para mí.
—No, gracias, —respondí, sacudiendo la cabeza. —Quiero llevar a 03/2020
mi esposo por encima del umbral.
—Aw, bebé—. Finn puso su mano sobre su corazón. —Eres tan
romántico—. Se dejó caer en mi regazo y colocó nuestra bolsa en sus
muslos. Dejamos la mayor parte de nuestro equipaje en el maletero,
y solo trajimos una pequeña bolsa con artículos de tocador y ropa
para el día siguiente.
Finn presionó la tarjeta de acceso al lector y abrió la puerta unos
centímetros. Me di la vuelta hacia adelante, pillando la puerta de mi
reposapiés y guiándola por el resto del camino abierta mientras
atravesábamos el umbral. La puerta se cerró detrás de nosotros
cuando pasé por el baño y entramos en la parte de la habitación. Era
simple, contenía solo una cama, dos mesitas de noche con lámparas y
un televisor colgado en la pared.
 —¿Está bien? —Preguntó Finn mientras miraba a su alrededor. —
No me gustó nada demasiado porque pensé que no saldríamos de la
cama de todos modos—. Me alzó las cejas y me dio una sonrisa
traviesa.
—Es perfecto, cariño. Y no salir de la cama suena perfecto; creo que
me habías prometido el paseo de mi vida. —Cada vez que estaba con
Finn fue el paseo de mi vida, pero algo en compartirlo como esposos
lo hacía parecer aún más especial.
—Mm, y lo conseguirás, —prometió Finn antes de tomar mis labios 122
con los suyos. Hundió sus dedos en mi cabello y me besó
profundamente, hundiendo lentamente su lengua dentro y fuera de
mi boca antes de retroceder. —Y me duché cuando nos detuvimos en
el gimnasio, así que estoy listo para ir.
Me reí de lo abierto que era Finn conmigo; no porque me
avergonzara, sino porque lo apreciaba y me hacía feliz. Nos 03/2020
detuvimos en el gimnasio después de nuestra recepción para
cambiarnos los trajes de etiqueta. Los dejamos colgados en el
vestuario porque Jake se ofreció a recuperarlos y llevarlos de regreso
al lugar de alquiler mañana para que no nos cobren por un alquiler
más largo. El dinero no era escaso para nosotros, pero tampoco
estábamos a punto de tirarlo.
—Bueno, entonces, ¿qué estamos esperando? —Pregunté en lo
que esperaba que fuera una voz sensual.
—Eres tan jodidamente sexy, —insistió Finn antes de besarme de
nuevo. ¡Justo en el clavo!
Finn arrojó nuestra bolsa al suelo y se movió hasta quedar a
horcajadas sobre mí. Me besó ferozmente, gimiendo en mi boca
mientras lo atacaba. Envolvió sus labios alrededor de mi lengua y
movió su cabeza de un lado a otro, sacando un gemido largo y gutural
de mí.
Los labios de Finn se arrastraron por mi mandíbula hasta mi cuello.
Me mordió la carne y me chupó la piel en la boca, tragando contra
ella para chupar un mordisco de amor.
—Eso se siente tan bien, —gemí mientras chupaba otro chupetón
en mi cuello. Envolví mis brazos alrededor de él y agarré dos puñados
de sus deliciosas mejillas. —Me encanta este trasero, —gemí,
dándole un fuerte apretón. 123
—¿Quieres estar dentro? —Finn susurró en mi oído antes de lamer
una línea húmeda a lo largo de su caparazón, haciéndome temblar.
—Por favor—. Finn me mordió el lóbulo de la oreja, dejándome
jadeando antes de saltar de mi regazo. Rápidamente se quitó los
zapatos y los calcetines y se dejó caer al suelo para ayudarme con los
míos. Obviamente podría desnudarme, pero fue mucho más divertido 03/2020
cuando Finn lo hizo.
Ambos nos desnudábamos en un tiempo récord, y me tomé un
momento para admirar el increíble cuerpo de mi esposo. Cada vez
que lo veía, se ponía más hermoso. Pasé mis dedos por su abdomen,
saboreando la sensación de su piel suave debajo de ellos. Mi boca se
hizo agua al ver su firme y gruesa polla apuntando directamente hacia
mí.
Antes de que pudiera ponerla en mis manos, Finn se alejó y acarició
la cama.
—Ponte cómodo, bebé; tengo algo para ti. —Tenía curiosidad por
saber qué estaba haciendo mi hombre, pero hice lo que me pidió,
transfiriéndome a la cama y apoyando la cabeza sobre la almohada.
 Finn buscó en nuestra bolsa hasta que encontró lo que buscaba;
una pequeña caja cubierta con papel de regalo plateado. Se sentó al
borde de la cama y me ofreció el regalo con una sonrisa.
—Cariño, no tenías que conseguirme nada.
—Yo sé que no tengo qué; pero quería. Además, es para los dos. —
Puso la caja en mis manos. —Ábrela.
Le quité la envoltura y levanté la tapa para encontrar un anillo de
polla negro cubierto de pequeñas protuberancias de goma y un gran
óvalo a cada lado. Levanté el anillo de goma de la caja y noté lo 124
mucho más pesado que era del original.
—Compruébalo, —dijo Fin mientras presionaba un botón en uno de
los óvalos, y la goma vibraba intensamente en mi mano. —Uno más
—Empujó el otro óvalo y éste también vibró. Fue tan fuerte que el
anillo bailó en mi palma. —¿Qué piensas? ¿Quieres probarlo?
—Oh, sí. 03/2020
Finn se rió y tiró la caja al suelo. Apagó los vibradores y colocó el
anillo al lado de mi cadera.
—Yo también. Pero primero, quiero amar tu hermoso cuerpo. —Se
subió al colchón y se sentó a horcajadas sobre mis caderas. —Creo
que me fui bien... —Finn se inclinó y presionó sus labios contra la
concha de mi oreja. —Aquí.
Me mordisqueó el lóbulo de la oreja y volví a masajear los globos
carnosos de su trasero. Pronto ambos respiramos profundamente
mientras el placer y la lujuria nos atravesaban. Finn soltó mi lóbulo y
arrastró besos con la boca abierta por mi garganta hasta mi pecho. Él
lavó cada uno de mis pezones, moviendo su lengua sobre los picos
puntiagudos y chupando suavemente mi carne hasta que mi cuerpo
tembló.
 Gimoteé en protesta mientras él retrocedía de mis pezones
sensibles, pero gimió mientras besaba mi abdomen hacia mi firme y
llorosa polla. Finn besó mi punta mojada, pero luego se apartó.
Estaba a punto de rogarle por contacto cuando lamió mi saco.
Gemí cuando Finn tomó una esfera peluda en su boca. Rodeó su
lengua contra mi piel y la usó para sacar mi testículo dentro y fuera
de sus labios fruncidos.
—Joder, me encanta chuparte las bolas, bebé, —jadeó cuando soltó
mi carne. La mejor respuesta que pude dar fue un gemido confuso 125
mientras volvía a tragarme el saco. Lamió y mordió cada centímetro
de mis bolas hasta que mi pecho se agitó con el aliento y el sudor se
acumuló en mi frente.
Finn besó mi polla de nuevo y me guiñó un ojo antes de saltar de la
cama. Tomó una botella de lubricante de la bolsa y se colocó encima
de mí en cuestión de segundos. Abrió la tapa y le tendí la mano, 03/2020
esperando que me cubriera los dedos con el líquido resbaladizo, pero
Finn sacudió la cabeza.
—No quiero que me prepares, bebé. Quiero que tu gorda polla me
abra.
—Jesús, Finn—. Agarré las mantas a mis costados mientras él vertía
una gota de lubricante sobre mi punta y colocaba el nuevo anillo de
pene alrededor de mi base.
—¿Listo? —Asentí y Finn presionó ambos botones al mismo
tiempo.
—¡Joder! —Apreté las mantas y miré los ojos de Finn.
—¿Estás bien? —Asentí rápidamente. —¿No es demasiado? —
Golpeé mi cabeza de un lado a otro. Una sonrisa malvada cruzó los
labios de mi amante. —Se siente bien, ¿no?
 'Bien' no comenzó a describirlo. Era como si cada terminación
nerviosa temblara de éxtasis. Ondas de choque rebotaban en las
paredes internas de mi polla y hormigueaban en mis bolas. Mi boca
no estaba trabajando para describir la sensación, así que solo asentí
de nuevo.
—Voy a hacerte sentir aún mejor, —prometió Finn. Colocó sus
caderas de modo que su agujero se cernía sobre mi punta vibrante.
Presionó mi carne contra su frunce y se sentó lentamente. Finn gritó
cuando sus músculos se estiraron alrededor de mi circunferencia. Su 126
canal me agarró con fuerza mientras se deslizaba por mi longitud.
Cuando estuvo completamente asentado y sus bolas rozaron la
goma vibrante, el cuerpo de Finn se tensó y abrió mucho los ojos.
—Mierda, eso es intenso.
—Podemos apagarlo.
—Como el infierno que podemos, —respondió Finn y me reí entre 03/2020
dientes. Mi risa se convirtió en un gemido cuando mi amante se puso
de rodillas y se hundió de nuevo, enterrando mi polla en el fuerte
calor de su trasero.
—Eso se siente increíble, —jadeé. —Rebota en mi polla, cariño.
—Mierda, —dijo Finn arrastrando las palabras mientras caía en un
ritmo constante de ascenso y descenso. Se levantó hasta que solo la
punta de mi polla estaba dentro de él y luego se estrelló contra mí. —
Te sientes tan bien dentro de mí, bebé. Tu polla es tan perfecta.
Empuja justo en mi punto dulce.
Finn rebotó más rápido, golpeando sus nalgas contra mis muslos
mientras me montaba duro y rápido.
—Tócame, Harley. Por favor, tócame—. Envolví mi mano alrededor
de la base de su polla. Finn cambió la dirección de sus caderas para
que volviera a mi polla y luego se metiera en mi puño. —Ohhh, Dios.
 Los ojos de Finn se volvieron hacia su cabeza mientras chasqueaba
las caderas más rápido, empalándose y luego follando mi mano.
—Oh Harley, voy a venirme. ¿Quieres que me venga sobre ti, bebé?
—¡Sí! Rocíame, Finn.
—¡Mierda! —Se movía a un ritmo febril, el sudor le caía por la cara
y el cuello mientras maldecía. Volvió a golpearme la polla y gritó mi
nombre cuando estalló, salpicando mi estómago con gotas de lluvia
blancas.
Su agujero se apretó a mi alrededor, amenazando con ordeñarme 127
en seco.
—No te detengas, —le rogué mientras movía mi mano de su polla
hipersensible a su cadera. Finn continuó balanceándose contra mí,
gritando y estremeciéndose cada vez que sus bolas rebotaban contra
la vibración. Mis propias bolas se erizaron y rodaron, levantándose
hacia mi cuerpo. —¡Ya voy, Finn! 03/2020
—Joder, sí, bebé, ¡lléname! —Gruñí con los dientes apretados y
liberé una corriente de semen en mi ansioso amante. —Eres tan
hermoso cuando te vienes, —canturreó Finn, masajeando sus manos
sobre mi pecho. —Tan hermoso para mí.
Finn detuvo sus caderas y levantó su trasero hasta que mi polla se
deslizó de su agujero y golpeó mi pelvis. Apagó las vibraciones y retiró
suavemente el anillo de alrededor de mi circunferencia.
Arrojó el anillo de goma sobre la mesita de noche y se acostó a mi
lado, acurrucándose a mi lado y descansando su cabeza sobre mi
pecho.
—Eso fue increíble.
Tarareé mi acuerdo y besé la parte superior de su cabeza.
 —Todo es increíble contigo, Finn; yacer aquí juntos, acurrucados en
la noche, conduciendo por la ciudad escuchando música y tomados
de la mano... todo.
Finn apoyó su barbilla en mi hombro para que me mirara a los ojos.
—Eres el hombre más romántico del mundo. Estaría llorando de
nuevo si no te hubiera echado el último líquido sobre ti—. Me reí
entre dientes y Finn me guiñó un ojo. —Hablando de eso, ¿te gustaría
tomar una ducha conmigo?
—Cariño, nunca diré que no a eso. 128
Nos turnamos para frotarnos suavemente en la ducha y robar besos
mientras nos enjuagamos. Después de secarnos mutuamente y
completar nuestra rutina nocturna, Finn bajó las mantas sobre la
cama y se subió.
Me deslicé sobre el colchón y coloqué las piernas de modo que me
acostara de lado. 03/2020
—¿Estás cómodo? —Preguntó Finn mientras acomodaba las
mantas a mi alrededor.
Sacudí mi cabeza en negativa.
—Estás demasiado lejos, —me quejé, haciéndole pasar las manos.
Él se rió mientras se acostaba y se acurrucó más cerca de mí.
Envolví mi brazo alrededor de su cintura y él apoyó su culo desnudo
contra mi ingle.
—¿Mejor?
—Mm, mucho—. Besé la parte posterior de su cuello y lo hice
temblar.
—Duerme bien, bebé.
—Tú también, cariño. Te amo.
—Yo también te amo. —Finn se acurrucó aún más cerca de mí. —
Siempre.
 Capítulo Diez

Gemí cuando la alarma sonó a mi lado al anochecer, pero Finn se

sentó de golpe en la cama.
—¡Florida! —Él arrojó las mantas y saltó sobre sus pies en la cama, 129
sacudiendo su trasero y golpeando su polla dura de la mañana contra
sus muslos.
Me reí en voz alta mientras lo veía celebrar.
—Bueno, desearía que estuvieras un poco más emocionado, —
bromeé. Apagué la alarma, ahora completamente despierto después
de la actuación de Finn. 03/2020
Finn se dejó caer sobre su trasero, rebotando un par de veces antes
de acomodarse.
—Estoy tan emocionado; nunca he volado antes, y nunca he visto el
océano. Tengo las dos cosas en un viaje con mi sexy marido. No hay
nada mejor que esto.
Sonreí ante su entusiasmo. Estaba tan emocionado de compartir
estas novedades con él. Había volado antes, pero había pasado
mucho tiempo. Afortunadamente fue después de mi accidente, así
que supe qué esperar del proceso. No quería preocuparme por nada
ni hacer que Finn se preocupara por nada. Solo quería pasar un buen
rato con mi esposo y disfrutar de nuestro viaje.
—Estoy esperando el clima cálido—. El lugar donde vivíamos estaba
helado y cubierto de nieve a principios de febrero, pero el pronóstico
para nuestra visita en el sur de Florida mostraba sol y temperaturas
en los bajos 80 grados.
—Solo quieres verme en mi Speedo, —dijo Finn sonriendo.
—Ahí le has dado. —Al principio, pensé que Finn estaba
bromeando cuando me dijo que había comprado un Speedo para
nuestro viaje, pero luego procedió a modelarlo alrededor de la casa
para mí. No pude evitarlo y se lo quité y traté de succionarle el alma
por la polla.
—Y no puedo esperar para ponérmelo; produjo excelentes 130
resultados la última vez—. Me reí entre dientes y Finn besó mi
mejilla. —Pero por ahora, tenemos que ponernos en marcha. Quiero
llegar muy temprano para nuestro vuelo para que podamos revisar el
aeropuerto.
En solo unos minutos, Finn y yo estábamos vestidos, empacamos
nuestra pequeña bolsa y comimos un desayuno continental rápido. 03/2020
Finn era todo sonrisas cuando nos acercamos al mostrador para salir
de nuestra habitación.
—Parece que alguien está de buen humor esta mañana, —saludó
alegremente la señora de la recepción.
—Sí, señora, —respondió Finn con orgullo. —Ayer me casé con el
hombre más maravilloso del mundo y hoy volamos a Florida para
nuestra luna de miel.
—Wow, felicidades, —le devolvió la sonrisa. —¿Asumo que vas a
tomar el transporte al aeropuerto? —Finn y yo asentimos. —Viene
cada treinta minutos y el próximo pasa en aproximadamente cinco—.
Tomó nuestras tarjetas llave e imprimió un recibo. —Está listo.
Tengan un vuelo seguro y una gran luna de miel—. Le agradecimos y
salimos a la calle.
 —Sacaré nuestro equipaje del auto, —ofreció Finn. —Ya vuelvo—.
Me dio un beso rápido y desapareció, regresando unos minutos más
tarde enrollando dos maletas grandes detrás de él, una maleta para
nuestra silla de amor atada a su pecho y mi equipaje de mano sobre
su hombro.
—¿Estás bien con eso, cariño?
—Oh, sí. Quienquiera que pusiera ruedas en el equipaje era un
jodido genio—. Estacionó las bolsas a mi lado. —Aquí, tomaré nuestra
bolsa de viaje y la meteré en esta—. Pasé la bolsa pequeña y Finn la 131
guardó.
—¿Puedo tener el equipaje de mano? —Quería ayudar, pero
también tuve una sorpresa para mi esposo escondida dentro.
—Por supuesto. —Coloqué la bolsa en mis muslos y el transporte se
detuvo en la acera unos momentos más tarde.
—Buenos días, —saludó alegremente el conductor mientras bajaba 03/2020
a la acera. —Las tomaré por usted, señor—. Finn le agradeció al
hombre mientras tomaba nuestro equipaje. —Déjame poner esto
adentro y volveré enseguida para dejar caer la rampa—. Él guardó
nuestras bolsas adentro y salió nuevamente, cerrando la puerta del
transporte detrás de él. —Aquí vamos.
Presionó un botón y el transporte emitió un pitido fuerte mientras
bajaba lentamente su lado derecho a la acera. Había una segunda
puerta más grande a mitad de camino del transporte que se abriría
una vez que el vehículo se bajara al suelo. Una rampa bajaría por sí
sola o el conductor colocaría una desmontable entre la acera y la
lanzadera, lo que me permitiría rodar fácilmente dentro sin tener que
trasladarme de la silla. Fue un diseño ingenioso que facilitó las cosas
para todos.
 —¡Tienes que estar bromeando! —Sonó desde el frente del
edificio. Seguí la voz disgustada para encontrar a un hombre que salía
del hotel, vestido con un traje y llevando un maletín y una pequeña
bolsa sobre su hombro. —¡No te tengo para esto!
—Señor, necesito que este caballero aborde de manera segura, y
luego podrá cargar en solo unos minutos, —prometió el conductor.
—¡No tengo unos minutos! ¡Mi vuelo sale en menos de una hora!
—Levantó su mano libre y se volvió hacia mí. —¿No puedes esperar al
siguiente? 132
No estaba dispuesto a esperar media hora extra para el próximo
transporte solo porque a este tonto le estaba dando un ataque. Finn
tampoco tenía nada de eso. Se cruzó de brazos desafiante y dio un
paso hacia el hombre.
—No es nuestra culpa que seas un planificador de mierda. Si tu
vuelo sale en menos de una hora, ¡tú trasero debería haber estado 03/2020
aquí hace dos horas!
—Bueno, no estaba planeando este inconveniente para
detenerme—. El hombre hizo un gesto hacia el transporte y hacia mí.
Finn descruzó los brazos y señaló con el dedo la cara del hombre.
—Escucha, hijo de puta; puedes tener un sentido hinchado de
autoestima, pero no eres más importante que mi esposo. Sus
necesidades no son un inconveniente; el único agravante aquí es tu
actitud de mierda. Así que vete, cállate tu boca y espera cinco
malditos minutos para que suba al transporte.
El hombre resopló con los ojos en blanco, pero permaneció en
silencio. Finn no dejó de mirarlo, como si lo desafiara a hablar. El
conductor del transporte luchó una sonrisa cuando el transporte
completó su caída y colocó una rampa extraíble desde la acera hasta
el interior del transporte.
 —¿Está bien si te ayudo a subir la rampa?
Aprecié que el conductor preguntara en lugar de solo agarrarme y
tirar de mí; obviamente lo había hecho una o dos veces.
—Seguro.
Agarró el respaldo de mi silla y me hizo retroceder por la rampa.
—También puedes subir, —le dijo a Finn, quien le dio al hombre de
negocios un último gesto que no podía ver desde atrás, pero asumió
que era un dedo del medio (si no dos), antes de subir la rampa hacia
el transporte. El conductor retiró la rampa y la metió en una ranura al 133
costado del transporte sobre una fila de asientos. Cerró la puerta y se
volvió hacia nosotros con una sonrisa.
—Gracias por lo que dijiste, —le dijo a Finn. Mi esposo nunca
dejaba que nadie hablara de mí o de mi discapacidad, especialmente
cuando se trataba de mis necesidades, pero tenía curiosidad por
saber por qué el conductor le estaba agradeciendo. Finn también 03/2020
parecía confundido, ladeando la cabeza.
El conductor sonrió y explicó:
—Mi hija es una usuaria de silla de ruedas; ella nació con espina
bífida. Escucho comentarios como ese casi cada maldito día y se me
ponen debajo de la piel, pero no puedo decir nada si quiero mantener
mi trabajo; que necesito para mi seguro. —Mi corazón se rompió por
él y su hija, y la forma en que Finn puso su mano sobre su pecho y sus
ojos brillaron, sintió lo mismo. —Esa es ella—. El conductor asintió
con la cabeza hacia la parte delantera del transporte, donde se
mostraba una imagen con orgullo.
—Ella es hermosa, —le ofrecí. La niña parecía tener alrededor de
ocho años, con coletas rubias y una gran sonrisa con varios dientes
perdidos. Era linda como un botón, acurrucando un unicornio gigante
de peluche mientras estaba sentada en su silla de ruedas rosa.
 —Gracias. Obviamente, su madre y yo también lo pensamos, pero
desearía que Izzy sintiera lo mismo. Por mucha mierda que escuche
en el trabajo, ella recibe el doble de silencio en la escuela. Los niños la
critican por ser diferente, e incluso los maestros se agravan a veces
por la atención especial que necesita. Ella es una chica dura, pero a
veces la afecta y se siente deprimida. —Me dolía el corazón por Izzy;
las cosas eran demasiado difíciles para mí como adulto, y no podía
imaginar cómo manejaba todo a tan temprana edad.
Finn puso su mano sobre el hombro del conductor y le dedicó una 134
sonrisa triste.
—Le dices a Izzy que la única fealdad está en las palabras de esos
otros niños; que ella es más fuerte de lo que jamás podrían soñar
ser—. Chasqueó los dedos y sacó la billetera del bolsillo trasero. —
Quiero darte algo, —el conductor comenzó a protestar, pero Finn
insistió: —Creo que estábamos destinados a encontrarnos hoy—. 03/2020
Sacó un trozo de papel de su billetera y se lo entregó. —Esta es mi
tarjeta; soy estilista en una pequeña tienda al otro lado de la ciudad.
Si deseas traer a Izzy, le daré un cambio de imagen completo y la haré
sentir como una princesa; yo invito.
El conductor (cuyo nombre era Ted, según su placa de
identificación) parpadeó hacia la tarjeta en su mano y luego hacia
Finn.
—No sé qué decir... esto es... gracias—. Él soltó una carcajada. —
Creo que estábamos destinados a encontrarnos. A Izzy le encantará
esto. Harás que ella y mi esposa sean tan felices.
—Es un placer, —Finn sonrió. De alguna manera me enamoré aún
más de mi hombre perfecto.
De repente, un fuerte golpe sonó en la puerta principal del
transporte.
 —¿Cuál es el atraco? —Ladró el hombre de afuera.
—Vamos a dejarlo, —sugerí, y Finn sonrió mientras asentía.
—Ojalá pudiera, —suspiró Ted. Se guardó la tarjeta de Finn y se
volvió hacia mí. —¿Puedo ayudar a asegurar tu silla?
—Por supuesto—. Una vez que estuve en mi lugar asignado,
bloqueé las ruedas de mi silla. Ted agarró las correas que colgaban de
la pared delante y detrás de mí, y las sujetó a mi alrededor como un
cinturón de seguridad. Era norma para él hacerlo en lugar de mí para
garantizar la seguridad de los pasajeros. —Gracias. 135
—De nada. —Sonriendo me dirigió un momento, pero puso los ojos
en blanco cuando el Señor Negocios volvió a golpear la puerta. —
Supongo que no podemos posponer esto por más tiempo—. Se sentó
en la silla del conductor y abrió la puerta principal después de que la
lanzadera volviera a estar en posición vertical.
—Bueno, ya era hora, —gruñó mientras subía a bordo. Comenzó a 03/2020
dirigirse hacia nosotros en la parte trasera del transporte, pero se
detuvo en seco cuando vio la mirada fulminante de Finn.
Rápidamente se sentó en un asiento hacia el frente y mantuvo sus
ojos en el piso. Aspiré la risa y tomó la mano de mi amante cuando
llegamos a la carretera.
El viaje al aeropuerto no fue largo, pero los minutos parecieron
extenderse cuando Finn se quedó callado y mantuvo su mirada en el
hombre. Quería volver a ponerlo de buen humor cuando estaba
despierto, así que apreté su mano para llamar su atención.
—Tengo algo para ti, cariño.
Los ojos de Finn se posaron en los míos y finalmente, su hermosa
sonrisa regresó.
—¿De verdad?
 —Sí—. Abrí la cremallera de mi equipaje de mano y saqué una
pequeña bolsa de papel. —Te lo iba a dar para el día de San Valentín,
pero quiero que lo tengas ahora—. Todavía estaríamos en nuestra
luna de miel cuando llegara el día de San Valentín, y había empacado
el regalo por adelantado para dárselo a Finn, pero no podía esperar
más.
—¡Oh, Harley, eres tan dulce! —Exclamó Finn mientras tomaba la
bolsa. —Pero bebé, no empaqué un regalo para San Valentín, —
agregó con tristeza. 136
—¿No recuerdas el terremoto de goma que me diste anoche? —Le
pregunté seriamente.
Finn resopló.
—Esa fue tu noche de bodas, no un regalo de San Valentín. Oh, lo
sé; en la noche de San Valentín, te chuparé la polla hasta que te
vengas dos veces. 03/2020
—Yo... —Me lamí los labios y asentí rápidamente.
—Sí.
Finn se rio.
—Es un plan—. Sacudió la bolsa y sonrió con entusiasmo. —¿Puedo
abrirlo ahora? —Con mi cabeceada, metió la mano y sacó un trozo de
tela azul marino. Lo desdobló para revelar una camiseta que decía
Trophy Wife en su frente en escritura dorada. Finn chilló. —¡Mierda,
esto es lo mejor que he visto! —Antes de que supiera lo que estaba
sucediendo, se quitó la sudadera, la metió en mi equipaje de mano y
sacó su regalo. —¡Gracias bebé, me encanta! —Atacó mi cara con
besos mientras yo reía. —¡Iba a cambiarme a algo más fresco una vez
que aterrizáramos en Florida, pero quiero mostrar esto ahora!
—Me alegra que te guste—. Besé su sien y me llamó la atención
cuando el Sr. Negocios gimió.
 Finn giró la cabeza y miró de nuevo al hombre.
—¿Tienes algo que decir? —El hombre apartó la mirada
rápidamente y Finn dio un respingo. —Pensé que no—. Por suerte, el
rápido encuentro no volvió a deprimir el humor de mi hombre, y
habló y saltó alegremente los últimos minutos al aeropuerto.
Cuando llegamos a la terminal, el hombre de negocios saltó del
transporte sin siquiera darle las gracias (mucho menos una propina) a
Ted. El transporte bajó nuevamente a un lado mientras Ted caminaba
por el pasillo hacia nosotros. Desató mis restricciones de seguridad y 137
abrí las ruedas cuando abrió las puertas y colocó la rampa. Finn me
siguió cuesta abajo y Ted nos recibió en la acera con nuestro
equipaje.
—Gracias por todo, —dijo Finn con una sonrisa.
—Eres muy bienvenido. Me encanta la camisa, por cierto, —guiñó
Ted. Extendí la mano hacia la bolsa detrás de mi espalda y agarré un 03/2020
billete de veinte dólares de mi billetera y se lo tendí a Ted, pero él me
saludó. —No puedo. Fue un placer conocerlos a ambos. Además, —
agregó, sacando la tarjeta de Finn de su bolsillo, —tengo que esperar
la cita de la señorita Izzy.
—Esto también es para Izzy, —insistí. —Quiero que le compres un
juguete por nosotros—. Agité mi mano entre Finn y yo. —A veces el
mundo puede ser difícil, y sé cuánto puede significar un acto de
bondad, incluso si es pequeño como este—. No conocía a su hija,
pero quería alegrarle el día si pudiera. Ted sonrió gentilmente
mientras tomaba el dinero.
—Gracias, —respondió. —Gracias a los dos. Ustedes dos me han
dado algo de esperanza para este mundo loco, y espero que tengan
un viaje maravilloso—. Ted recibió nuestro agradecimiento y, por
supuesto, un fuerte abrazo de Finn. Una vez que regresó a la
transporte y se alejó de la acera, mi esposo se plantó en mi regazo y
me rodeó el cuello con los brazos.
—Eres el hombre más notable del mundo.
—Siento lo mismo por ti, cariño—. Finn suspiró feliz y besó mis
labios. —Vamos, vamos a registrarnos para nuestro vuelo—. Saltó de
mi regazo y recogió nuestro equipaje para seguirme a la terminal.

138

03/2020
 Capítulo Once

Después de una corta espera en la fila, Finn y yo fuimos llamados al

escritorio por una mujer que parecía estar en sus treintas con una
cara severa y un elegante pulpo de cabello negro conducido a un 139
moño apretado.
—Necesito sus pases de abordar e identificaciones, —dijo en breve.
Sacamos los documentos y ella los analizó por un momento antes de
agregar: —Parece que han pagado por adelantado una bolsa cada
uno. Tendré que pesarlas ahora. —Finn colocó una bolsa en la báscula
y la mujer la etiquetó antes de colocarla en una cinta transportadora 03/2020
detrás de ella. Hicieron el mismo proceso para nuestra segunda pieza
de equipaje.
—No estaba seguro acerca de este, —dijo Finn mientras alzaba el
estuche sobre el mostrador. —Dado que el sitio web decía que los
dispositivos de movilidad eran gratuitos.
La mujer me miró.
—Su silla será revisada gratis en la puerta—. Ella agarró el asa de la
caja y la miró. —¿Qué dispositivo de movilidad hay dentro?
—Es una silla sexual, —respondió Finn sin vergüenza. La dama soltó
el mango y retrocedió su mano. —Está limpia, —insistió. —No
frotamos nuestras pollas sobre el estuche ni nada—. Me tapé la boca
para no reírme cuando la mujer volvió los ojos hacia mi marido.
—Dado que no se utiliza para el transporte primario, deberá pagar
cincuenta dólares adicionales para verificarlo, —explicó.
 Finn se encogió de hombros y pasó su tarjeta de débito.
—Vale la pena cada maldito centavo.
Una vez que revisamos todo nuestro equipaje y seguramente
asustamos al asistente, Finn y yo fuimos a seguridad. Una vez que
estuvimos en el puesto de control, se quitó los zapatos y se volvió
hacia mí.
—¿Quieres que tome los tuyos?
—Está bien, en realidad mantengo los míos. Sin embargo, ¿te
importaría enviar esto? —Pregunté, entregando mi equipaje de 140
mano. —Tengo que ir a esa línea de allí—. Asentí con la cabeza hacia
una pequeña puerta con un letrero azul accesible para
discapacitados, y un agente de la TSA me indicó que se acercara.
—Por supuesto. Te veré al otro lado. —Finn me dio un beso rápido
y puso la bolsa en el cinturón antes de entrar en el escáner corporal.
Me volví hacia el área acordonada y un hombre corpulento con gafas 03/2020
me dejó entrar. Hizo algunas preguntas sobre mi silla e inspeccionó
mis zapatos antes de ponerse de pie. Finn se acercó al otro lado de la
puerta, ya había pasado por la seguridad y estaba esperando que
terminara.
—Necesitaré realizar un cacheo en su cuerpo, —explicó el agente
de la TSA. Estaba familiarizado con el procedimiento y asentí con la
cabeza.
—Bueno, espero que estés planeando invitarlo a cenar primero, —
bromeó Finn desde detrás de la puerta. Solté una carcajada, pero el
agente parecía menos impresionado.
—Por favor, gira tus bolsillos al revés—. Hice lo que me pidió,
mostrando que mis jeans estaban vacíos. El hombre pasó sus manos
sobre mi pecho y luego entre mi espalda y mi silla. Dio unos
golpecitos sobre mis muslos y las espinillas. —Necesito inspeccionar
su asiento y realizar una prueba de residuos en el material. ¿Eres
capaz de levantarte?
—No puedo soportar, pero puedo levantar la parte inferior de mi
cuerpo unos centímetros.
—Eso estará bien—. Se hizo a un lado y recogió lo que parecían dos
tiras de papel de una caja. —Cuando estés listo—. Apoyé mi peso en
mis antebrazos y levanté mi trasero del asiento. El hombre pasó el
papel sobre la tela y asintió para que me relajara. Observó el papel
por un momento y me dio otro asentimiento. —Eres bueno para ir. 141
—Gracias—. El hombre fue minucioso e hizo un buen trabajo al
explicar todo sin ser degradante o condescendiente. Abrió la puerta
del fondo y me di la vuelta, encontrándome con un sonriente Finn. —
Puedo tomar esa bolsa si quieres, —le ofrecí, señalando el equipaje
de mano sobre su hombro.
—No, está bien; lo tengo. ¡Vamos bebé, vamos a explorar! 03/2020
Explorar lo hicimos; Finn insistió en entrar en todas las tiendas de la
terminal. Me divertí viendo lo emocionado que se sobrepuso a las
cosas más simples. Me dijo que era un genio cuando sugerí que
deberíamos comprar un chicle o un Starburst para ayudar a que sus
oídos no exploten durante nuestro vuelo, y una vez más por
recomendación de tomar algunas revistas para revisarlas.
Acabábamos de salir de una pequeña tienda cuando Finn jadeó.
—¡Malditamente caliente! ¡Siempre quise hacer eso! —Estaba
confundido hasta que mi esposo corrió por el pasillo hasta una
estación de lustrado de zapatos. Llegué justo a tiempo para escuchar
a Finn preguntarle al caballero que trabajaba en el puesto si podía
hacer brillar sus zapatillas.
 —¿Por qué no? —Dijo el hombre con una sonrisa. —Súbete,
amigo—. Dio unas palmaditas en la silla alta y Finn subió, pareciendo
que estaba a punto de estallar de emoción.
—Esto es increíble, —dijo Finn con seriedad. —Toma mi foto, bebé;
Me siento tan elegante—. El lustrabotas se unió a mí en una
carcajada cuando Finn hizo varias poses reales y me alejé con la
cámara de mi teléfono. Mi esposo observó con asombro cómo el
hombre pulía meticulosamente sus zapatillas. —Se ven mejor que
cuando las compré, —dijo Finn cuando el hombre terminó. — 142
Gracias—. Le entregó una propina generosa y se bajó de la silla. —
¿Quieres que los tuyos brillen, bebé?
—No, —le respondí encogiéndome de hombros. —Por alguna
razón, ninguno de mis zapatos se desgastan mucho—. Finn se echó a
reír ante mi tonto chiste, pero el hombre que trabajaba en la estación
nos miró con los ojos muy abiertos, aparentemente inseguro de cómo 03/2020
reaccionar. Nunca quise hacer que nadie se sintiera incómodo con mi
extraño sentido del humor, pero tampoco iba a sofocarme por miedo;
especialmente cuando hizo reír a mi esposo. Una de las muchas
razones por las que amaba a Finn era que estaba lo suficientemente
cómodo con mi situación como para reírse de mis bromas al respecto,
y que sabía que no me ofendería al hacerlo.
—¿Hemos visto todo? —Preguntó Finn mientras nos dirigíamos
hacia nuestra puerta.
—Creo que sí; aparte de unos pocos puestos de comida. ¿Quieres ir
a buscar un asiento y relajarte hasta nuestro vuelo?
—Buena idea.
Conduje junto a una fila de sillas en nuestra puerta y Finn se sentó a
mi lado. Él acarició su cabeza con mi hombro y miramos juntos una de
nuestras revistas. Una vez que terminamos, mi enérgico amor estaba
inquieto en su asiento. Descomprimió mi equipaje de mano y miró su
contenido.
—¡Ah, ja! —Levantó un cepillo que tenía varias bandas alrededor
del mango. —¿Puedo arreglarte el pelo, bebé?
—Por supuesto—. A Finn le encantaba jugar con mi cabello; nos
relajó a los dos y se sintió increíble. Además, siempre tenía un estilo
increíble.
Finn saltó de su asiento y rodeó mi silla. Durante varios minutos,
simplemente pasó el cepillo por mis largos cabellos. Cerré los ojos y 143
absorbí el sentimiento; los golpes rítmicos casi me ponen a dormir
hasta que todo se detuvo. Escuché el ruido de las bandas cuando Finn
las transfirió a su muñeca y luego arrojó el cepillo sobre mi bolso. Solo
le tomó unos minutos trenzar mi cabello en el desordenado estilo de
moño que ambos amamos.
—Precioso, —insistió mientras tomaba su asiento a mi lado otra 03/2020
vez.
—Gracias, cariño—. Besé sus labios y Finn volvió a colocar su
cabeza en mi hombro. Un momento después, una mujer apareció
frente a nosotros sosteniendo la mano de una pequeña niña pelirroja
que parecía no tener más de cuatro o cinco años.
—Pregúntale, mamá, —suplicó la niña en voz baja, tirando de la
mano de su madre.
—Está bien, está bien, —respondió la mujer antes de darle a Finn
una sonrisa incómoda. —Lamento molestarlo señor, pero mi hija lo
vio arreglando su... —sus ojos se posaron en la camisa de Finn, —el
cabello de su esposo y ella realmente lo ama. Apenas puedo hacer
una trenza normal, y mucho menos algo así. No se calmaría hasta que
te preguntara si también te importaría trenzar el de ella. De nuevo,
siento mucho molestarte...
 —No es una molestia, —prometió Finn con una sonrisa mientras
levantaba su cabeza de mí. —Me encantaría—. Se inclinó hacia
delante y le preguntó a la joven: —¿Cómo te llamas, cariño?
—Ella.
—Encantado de conocerte, Ella. Soy Finn. —Él extendió la mano y
Ella la sacudió con una risita. —¿Por qué no te sientas aquí y te
arreglaré toda? —Se puso de pie y Ella se apresuró a tomar asiento
mientras volvía a sentarse detrás de las sillas.
—Gracias por hacer esto, —le ofreció la madre de Ella. 144
—Es un placer—. Finn pasó los dedos por el cabello de la niña. —
Entonces Ella, ¿quieres exactamente el mismo estilo, o deberíamos
mezclarlo un poco?
Ella vitoreó:
—¡Mézclalo! —Haciendo reír a Finn mientras separaba el cabello de
la niña por la mitad. La madre de Ella se sentó en una silla frente a 03/2020
nosotros y Ella volvió la cabeza para mirarme. —¿Por qué estás en
una silla de ruedas?
—¡Ella! —Gritó su madre, luciendo mortificada. —Señor, lo siento
mucho.
Me reí entre dientes y sacudí la cabeza.
—Está bien—. Los niños eran naturalmente curiosos y sus
preguntas no me molestaron. Demonios, deseé que los adultos
simplemente preguntaran en lugar de mirarme o susurrar sobre mí.
Miré a Ella. —Tuve un accidente cuando era más joven y ahora no
puedo caminar, así que necesito una silla de ruedas para
desplazarme.
—Oh—. Ella me miró por otro momento. —¿Por qué estás casado
con un niño?
 —Oh, Dios mío—. Miré a la madre de Ella para encontrarla con la
cara roja y cubriéndose la boca en estado de shock. Me reí de nuevo y
escuché a Finn haciendo lo mismo.
—Porque lo amo, —respondí simplemente.
Ella asintió con la cabeza.
—Está bien—. Volvió a mirar hacia adelante y eso fue todo. Lástima
que el mundo no pudiera tener la aceptación de un niño.
—Y... hecho, —anunció Finn mientras enrollaba la última banda
alrededor del cabello de Ella. Él había arreglado el suyo en un estilo 145
similar al mío, aunque en lugar de un moño en medio de dos trenzas
francesas trenzó dos filas con un moño pequeño en la parte superior
de cada lado de su cabeza; como dos lindas orejitas de panda. Tomó
fotos de la parte posterior y frontal con su teléfono y se las mostró a
Ella. Ella chilló y se puso de pie en su silla, se dio la vuelta y se lanzó
hacia Finn. 03/2020
—¡Gracias! ¡Estoy tan bonita!
Mi esposo se echó a reír y le dio un buen apretón.
—Sí, tú lo estás.
—Mami, ¿ves lo bonita que soy? —Preguntó Ella una vez que Finn
la dejó en el suelo y corrió hacia su madre.
—Eres hermosa, —respondió ella con una amplia sonrisa. —¿Qué
te debo? —Le preguntó a Finn mientras buscaba su bolso.
—Absolutamente nada, —respondió, apoyando las manos en las
caderas. —Como dije, fue un placer.
—Me gustaría hacer algo por ti. ¿Qué tal una taza de café? —La
madre de Ella me miró. —¿Qué le gusta beber?
Me di cuenta de que era importante para ella pagar la amabilidad
de mi hombre, así que le respondí:
—Moca lattes.
 La mujer sonrió triunfante.
—Vuelvo enseguida—. Regresó unos minutos más tarde con una
taza que le entregó a Finn. —Y Ella dijo que también necesitabas una
galleta, —explicó, sosteniendo una pequeña bolsa de papel.
—Gracias, Ella —respondió Finn con una sonrisa mientras tomaba
la golosina. —Me encantan las galletas—. Ella se rió y le dio un pulgar
hacia arriba.
—Ten un vuelo seguro, —ofreció la madre antes de que ella y Ella
nos saludaran y volvieran a sus asientos originales. 146
Le di a mi esposo una sonrisa soñadora.
—Eres increíble—. Era un pensamiento que tenía constantemente,
pero especialmente cuando lo vi interactuando con niños. Lo
discutimos en profundidad y ambos decidimos que no queríamos
hijos propios, pero Finn sería un maldito buen padre; si por ninguna
otra razón que él era un maldito buen hombre. 03/2020
—Aw, gracias, bebé —canturreó antes de picotear mis labios. —
Solo por eso, obtienes la mitad de mi galleta—. Justo cuando
terminamos el convite, otra madre con una sonrisa suplicante y una
hija emocionada estaban frente a nosotros.
Cuarenta minutos después, Finn había trenzado el cabello de seis
chicas y bebió dos lattes. También había partido dos galletas, tres
donas y un panecillo de queso crema conmigo, y ambos estábamos a
punto de estallar. Mi estómago se alivió cuando un empleado de la
aerolínea se detuvo frente a mí con una silla de ruedas en el pasillo.
—Buenos días, —saludó la señora mayor con una sonrisa. —Mi
nombre es Garnet y voy a hacer que te suban a bordo y revisen tu
silla de ruedas. ¿Necesitas ayuda para trasladar las sillas? —La dama
parecía una pequeña mamá feliz y no pude evitar devolverle la
sonrisa.
 —No señora, puedo transferirme por mi cuenta.
—Oki, doky, solo voy a mantener a esta agradable y aún aquí- —
ella agarró el respaldo de la silla del pasillo y puso una mirada
determinada en su rostro. Vi a Finn radiante por el rabillo del ojo;
encontró a la dulce señora tan linda como yo. Me estabilicé con mis
brazos y me deslicé en la nueva silla, que era más estrecha y no tan
cómoda, pero solo estaría allí por un par de minutos. —Dios mío, eres
fuerte, ¿verdad? —Finn se rió entre dientes a mi lado y le di a Garnet
una sonrisa de agradecimiento. —Tomaré tu silla para que te 147
etiqueten y carguen y volveré enseguida para que te embarquen.
Ella desapareció, arrastrando los pies y empujando mi silla hacia el
escritorio frente a nuestra puerta de vuelo.
—Ella es adorable, —dijo Finn en voz baja. Asentí con la cabeza y
Garnet reapareció solo un minuto después.
—Está bien, ¿tienes a alguien que viaje contigo hoy? 03/2020
—Sí—. Extendí la mano y tomé la mano de Finn. —Mi marido—.
Todavía me ponía la piel de gallina cada vez que decía la palabra.
—Dios mío, también eres un vista, —Garnet se quedó boquiabierta.
—Una pareja muy guapa.
—Acabas de alegrarme la mañana, —respondió Finn con un guiño,
haciendo que Garnet sonriera.
—Puedes seguirnos; nos detendremos en el escritorio para que
escaneen sus pases de abordar. —Finn se arrastró hacia atrás
mientras Garnet me empujaba hacia el escritorio, donde ambos
escanearon nuestros pases y nos saludaron con la mano. Recorrimos
un largo corredor y Garnet le pidió a Finn que nos llevara al avión.
Nos había reservado dos asientos en la primera fila, y se hundió en el
asiento de la ventana, metiendo el equipaje de mano debajo de la
silla. Garnet me hizo un refuerzo para estar al nivel del asiento del
pasillo y me deslicé junto a Finn. —Estás listo. Que tengan un buen
vuelo, —ofreció antes de regresar del avión.
Finn y yo nos abrochamos los cinturones de seguridad y tomé su
mano en la mía.
—¿Listo?
—Tan listo.

148

03/2020
 Capítulo Doce

Finn se estremeció y apretó mi mano cuando aterrizamos en la

pista. Lo hizo muy bien con el vuelo; increíble por primera vez, pero
no disfrutaba el ruido o la sensación de despegue y aterrizaje, o los 149
golpes de turbulencia cuando estábamos en el cielo.
Afortunadamente, fue un vuelo bastante suave.
Permanecimos sentados mientras los otros pasajeros pasaban junto
a nosotros para salir del avión. Una vez que todos salieron, una
azafata apareció a mi lado con la silla de ruedas del pasillo. Me deslicé
y ella me empujó hacia el corredor mientras Finn la seguía. 03/2020
Esperamos nuevamente hasta que me entregaron mi silla de ruedas y
me transfirieron a ella. Fue agradable estar de vuelta en mi silla
personal.
—¿Te importaría sostener esto por un minuto, bebé? —Preguntó
Finn mientras tomaba el equipaje de mano de su hombro. —Necesito
usar el baño realmente rápido—. Se había negado al subir al avión,
diciendo que no era muy grande y que no quería "dejarse atrapar por
el aire" cuando se sonrojó.
—Por supuesto. Esperaré aquí—. Prefiero esperar hasta que
alcancemos la privacidad y la comodidad de nuestro hotel para usar
un catéter para drenar mi vejiga. Finn me dio un rápido beso de
agradecimiento cuando pasó por encima de la bolsa antes de correr al
baño.
Regresó un momento después con los ojos muy abiertos.
 —Juro que la diferencia en la presión del aire debe causar estragos
en los intestinos de las personas; sonaba como tubas en un desfile
allí.
Me reí a carcajadas todo el camino hasta el reclamo de equipaje,
donde Finn recogió nuestro equipaje. Luego me llevó al mostrador de
alquiler de autos. Habló en voz baja al hombre detrás del mostrador,
y luego sacudió un par de llaves con una sonrisa intensa una vez que
estuvieron en su mano.
—Tengo una sorpresa para ti. 150
—¡Mierda! —Exclamé después de que estábamos en el
estacionamiento y pude ver la sorpresa de la que Finn estaba
hablando; un descapotable negro elegante y deportivo que había
alquilado para la semana.
—Sexy, ¿verdad? —Preguntó, pasando los dedos por el capó.
—Lo único más sexy serás tú detrás del volante. 03/2020
—Ruego diferir, —respondió, y ladeé la cabeza confundida. —
Empaqué tus controles manuales en mi maleta, —explicó con una
sonrisa furtiva. —Pensé que querrías llevar a este bebé a dar una
vuelta, así serás lo único más sexy.
No tenía dudas en mi mente de que mi causa de muerte sería una
explosión cardíaca. Un día no podría manejar el cuidado y la
consideración de mi esposo y explotaría. Agradecido, hoy no fue ese
día.
—Oh, definitivamente quiero llevar a este chico malo a dar una
vuelta, pero quiero que lo conduzcas primero. Después de todo, lo
alquilaste y planeaste una gran sorpresa.
—Eres el mejor—. Finn me dio un beso largo y húmedo, y luego
cargó nuestro traje en el maletero cuando me transferí al lado del
pasajero y doble mi silla de ruedas, colocando sus piezas en el tablero
del piso trasero. —¿Listo? —Preguntó una vez que estuvo detrás del
volante.
—Demonios sí.
Viajar en el descapotable era estimulante. Finn tomó la carretera
para poder ir lo más rápido (legalmente) posible y permitirnos sentir
la brisa en nuestro cabello. Él se rió mientras yo sostenía mis brazos
hacia arriba, amando la sensación del viento deslizándose entre mis
dedos. Pusimos la radio tan fuerte que no pudimos escuchar mi
teléfono dándonos indicaciones para llegar a nuestro hotel; nos 151
perdimos dos veces, pero no nos importó. Estábamos juntos,
perdidamente enamorados y pasándonos el mejor momento de
nuestras vidas.
Una vez que finalmente llegamos al hotel, me sorprendió de nuevo.
Finn nos reservó un resort frente al mar que tenía que tener treinta
pisos de altura. 03/2020
—Cariño, esto se ve increíble, —respiré mientras miraba hacia el
imponente edificio.
—Quería lo mejor para ti, —se encogió de hombros, y volví a
preocuparme por mi corazón. —¡Espera hasta que veas el interior! —
Construí mi silla y me deslicé sobre ella mientras Finn agarraba
nuestro equipaje nuevamente. Me llevó al vestíbulo y me quedé
boquiabierto.
Justo en el medio de la habitación había una gran cascada que se
vertía en una cuenca de piedra, rodeada de plantas tropicales. En la
pared opuesta al frente, había un gran sol, completamente hecho de
conchas marinas y vidrio marino. Fue hermoso; todo era hermoso.
—Increíble, —repetí, perdido para cualquier otra palabra.
—Me alegra que te guste, —respondió Finn antes de besarme
tiernamente una vez más en la sala de estar. —¡Vamos a registrarnos
para que pueda mostrarte nuestra habitación! —Agitó el culo con
entusiasmo hasta la recepción mientras yo lo seguía, sin apartar la
mirada de la gloriosa vista.
—Hola, ¿cómo puedo ayudarte? —Preguntó la chica detrás del
mostrador.
—Reservación para Finn Woods, —respondió con orgullo,
deslizando su identificación por el escritorio.
—Está bien, veamos aquí... —la chica golpeó su teclado y frunció el
ceño. —Vaya, parece que accidentalmente reservaste una habitación 152
ADA. Tenemos vacantes, así que puedo cambiarte a una habitación
diferente.
—No, no fue un accidente, —explicó Finn. —Estoy aquí con mi
esposo—. Puso su mano sobre mi hombro y me dio un suave apretón.
—La sala ADA es perfecta para nosotros—. Perfecta para nosotros.
Bam. Mi corazón estalló, pero de alguna manera sobreviví. 03/2020
La chica me miró por encima del mostrador.
—Ohhh—. Arrugó aún más la cara y se volvió hacia Finn. —¿Cómo
manejas eso? —Preguntó, señalándome con un dedo. Su voz era un
poco más suave que antes, pero no mucho. Nunca dejó de
sorprenderme que algunas personas asumieran que, porque estaba
en una silla, tampoco podía escucharlas hablando de mí.
Finn siguió el camino de su dedo hasta mi regazo y se encogió de
hombros mientras la miraba.
—Por lo general, así—. Hizo un círculo con una mano y lo movió
hacia adelante y hacia atrás mientras usaba su otra mano en un
movimiento gracioso debajo, como si me estuviera sacudiendo y
jugando con mis bolas. Me mordí la mejilla para no reírme.
La chica parpadeó.
 —No, quiero decir... ¿eso no te molesta? —Preguntó, señalando
una vez más en las proximidades de mi regazo.
—No si usamos suficiente lubricante, —respondió Finn sin perder el
ritmo. Finalmente solté la risa que había estado conteniendo y Finn
me guiñó un ojo en mi dirección.
—Yo... no importa—. Ella sacudió la cabeza y, afortunadamente,
abandonó sus preguntas. —Éstas son tus llaves y tu identificación.
Estás en el piso 19. El ascensor está al final de ese pasillo. —Dio un
punto a medias a su izquierda y desapareció del escritorio. 153
—Estaba tan interesada en nuestra vida sexual, —bromeó Finn
mientras nos dirigíamos por el pasillo. —Pobrecita, tiene que echar
un polvo—. Bufé y sacudí la cabeza. Obviamente sabía lo que la chica
estaba implicando, pero haría todo lo que estuviera en su poder para
evitar que me avergonzara. Y no, Finn hablando de masturbarme y
usar lubricante para un extraño no me avergonzaba; me hizo sentir 03/2020
orgulloso como el infierno.
—Aquí estamos, —anunció Finn cuando nos detuvimos frente a la
puerta de nuestra habitación de hotel después de un rápido viaje en
ascensor. Pasó la tarjeta por la ranura, pero solo abrió la puerta unos
centímetros. —Cierra tus ojos. Entraré corriendo y guardaré las
maletas y luego te mostraré la habitación, ¿de acuerdo? —Asentí y
cerré los ojos. La puerta se cerró y se abrió de golpe un minuto
después. —Abre tus ojos.
Hice lo que me pidió y encontré a Finn sosteniendo la puerta
abierta con una sonrisa. Hizo clic para cerrar detrás de mí después de
que entré.
—¡Mira este baño! Es una de las principales razones por las que
elegí este complejo. —Seguí a Finn al baño e inmediatamente entendí
por qué. La habitación tenía una enorme ducha de azulejos con un
banco largo para descansar, junto con un cabezal de ducha de
cascada en el centro y boquillas verticales en cada pared.
—Ahora eso es una ducha, —deliré. —Tal vez deberíamos rehacer
el nuestro así.
Finn asintió con una risita.
—¡Ven a mirar al resto! —Lo seguí a la habitación, que estaba llena
con una cama baja de tamaño king y un televisor de pantalla grande
en la pared opuesta. —Pero este es mi favorito—. Cruzó la habitación
hacia una puerta corrediza de vidrio. Finn abrió la puerta y lo seguí a 154
un gran balcón con vistas al agua azul cristalina. —Mi primera vista
del océano—. Se acurrucó en mi regazo y suspiró. —Estoy tan
contento de poder compartirlo contigo.
—Yo también—. Le pasé los brazos por la cintura y lo apreté con
fuerza. —¿Quieres ir a mirar más de cerca?
—En solo un minuto. Necesito más acurrucarme primero—. Nunca 03/2020
rechacé acurrucarme, así que apoyé mi barbilla en el hombro de Finn
y lo sostuve cerca mientras miramos el tranquilo océano de
aguamarina. Me llamó la atención un golpe en la puerta. —Justo a
tiempo, —dijo Finn mientras se levantaba de mi regazo.
Estaba más que confundido cuando me di la vuelta y vi a Finn saltar
hacia la puerta.
—Hola. Entra, —saludó, dando un paso a un lado. Un hombre con
un polo azul claro entró en la habitación empujando una silla de
ruedas hecha de tubos de PVC, asiento y respaldo de malla azul y
neumáticos gruesos y grises. —Muchas gracias por entregar esto.
—No hay problema, —respondió el hombre con una sonrisa. —
Volveremos a recogerla a las seis—. Él asintió hacia mí y desapareció
por la puerta.
 —Es una silla para tumbarse en la arena, —explicó Finn una vez que
estuvimos solos, señalando los neumáticos todo terreno. —El quiosco
de alquiler está a la vuelta de la esquina; hablé con ellos la semana
pasada y les dije que dejaran una en nuestra habitación todos los días
y luego la recogieran nuevamente antes de que cerraran. No nos
dejaron tener una de la noche a la mañana. Pero de esta manera,
puedes dejar tu silla personal en nuestra habitación y no tendremos
que preocuparnos de que ningún enfermo la golpee ni nada. —Pasó
la mano sobre el asiento de la nueva silla. —También puede ir al 155
agua—. Finn me miró con ojos esperanzados. —¿Qué te parece?
—Creo que gané el premio gordo del marido—. Cuando Finn me
dijo a dónde íbamos para nuestra luna de miel, investigué las
opciones de sillas de ruedas y lugares de alquiler. Aunque la parte
superior de mi cuerpo era fuerte, solo podía hacer muy poco con mi
silla de ruedas normal en la arena. Además, no habría podido entrar 03/2020
al océano. Encontré dos locales de alquiler y planeé conseguir algo
una vez que estuviéramos aquí. Dejé que Finn se asegurara de que
me cuidaron y programara todo para mí; y mucho menos hablar con
la compañía para que nos entregue una silla, lo cual dudo mucho que
fuera una práctica normal. —Gracias por cuidarme, cariño.
Finn se paró frente a mí y acercó mi cabeza a su pecho. Pasé mis
brazos alrededor de sus caderas y suspiré felizmente mientras
rascaba entre mis trenzas.
—Siempre te cuidaré, —prometió. —Como sé que siempre me
cuidarás—. Asentí contra él y Finn me abrazó por unos minutos antes
de besar mi cabeza y preguntar con entusiasmo: —¿Podemos ir a la
playa ahora?
—Vamos a hacerlo.
 Diez minutos después, me había ocupado de mis necesidades del
baño y solo estaba vestido con un par de pantalones cortos grises. Ni
siquiera tuve tiempo de ser consciente de mis piernas delgadas y
desproporcionadas antes de que Finn se entusiasmara con lo
exuberante que estaba con mi cabello recogido y mis músculos y
tatuajes. La mejor parte fue que no pensé que él estaba tratando de
calmar mis nervios acerca de salir en un estado que normalmente me
haría sentir incómodo; simplemente amaba mi cuerpo y quería
decírmelo. Me apreciaba exactamente como era, y no ansiaba las 156
cosas que no era. Entonces, incluso si no estaba tratando de calmar
mis preocupaciones, lo hizo. ¿Por qué debería preocuparme por lo
que otros podrían decir o pensar acerca de mí cuando tenía a un
hombre increíble a mi lado que me hacía sentir como el chico más
guapo en la playa?
—¿Quieres probar la silla, bebé? —Preguntó Finn cuando terminó 03/2020
de empacar una bolsa de tela para llevarnos a la arena. —Quiero
asegurarme de que está bien para ti.
—Claro—. Coloqué mi silla junto a la nueva y estudié la estructura.
Tenía reposabrazos en ambos lados que desafortunadamente no eran
extraíbles y dificultarían la transferencia. Una opción sería intentar
inclinarme hacia adelante y girar mi cuerpo. También podría
transferirme a la cama, colocar mis piernas a un lado y luego volver a
la nueva silla. Pero la opción más fácil estaba mirándome a la cara,
mordiendo su labio inferior con preocupación mientras miraba por
encima de la silla de ruedas. —¿Me podrías ayudar?
—Por supuesto, —asintió Finn. —Solo dime qué hacer.
—Voy a agarrarme de los reposabrazos y levantarme para
deslizarme. Necesito que levantes mis piernas y guíes mi trasero hacia
un lado. —Él asintió de nuevo y cuando agarré los caños y me levanté,
Finn envolvió sus brazos alrededor de mis delgados muslos y me guió
hacia el nuevo asiento.
Érase una vez, me habría encogido ante la idea de mostrar mis
vulnerabilidades de esta manera, pero no me pareció extraño pedirle
ayuda a Finn o que me ayudara. Él era mi esposo; mi compañero. Él
estaba allí para mí como yo estaba allí para él. Haría cualquier cosa
por mí sin dudarlo. Ya había visto cómo mis necesidades afectaban
algo tan simple como ir de vacaciones; asegurándome de empacar
todo lo que necesitaba para el baño, tener que pagar extra para 157
revisar un asiento que nos permitió hacer el amor, necesitar
asistencia adicional en la seguridad y en el avión, tener que empacar
equipo de manejo especial, necesitar un tipo específico de habitación
de hotel y una silla para permitirme disfrutar de la playa. Pero estas
cosas eran solo una parte de la vida para mí; y ahora para Finn. No
pudimos cambiarlas; eran partes necesarias de mi vida, y Finn no me 03/2020
molestaba ni me hacía sentir como una carga. Tomó todo con calma y
con una sonrisa en su rostro. Deseé que todos pudieran encontrar
una pareja tan compasiva y amorosa como yo.
—¿Está bien? —Preguntó Finn nerviosamente una vez que me
encontraba en la nueva silla. —Era el único tipo que tenían, pero
puede haber otro lugar de alquiler con un tipo diferente.
Tomé su mano y le di una sonrisa.
—Es genial. De hecho, es realmente una silla cómoda ahora que
estoy en ella.
Finn suspiró aliviado.
—Bueno. Iré a cambiarme muy rápido y luego nos podremos ir—.
Antes de que pudiera preguntar por qué estaba saliendo de la
habitación para cambiarse, Finn desapareció en el baño. Un minuto
después, la puerta se abrió y comprendí por qué se había ido; para
que pudiera hacer una gran entrada.
Finn tarareó su propio tema musical mientras caminaba por la
habitación, pisoteando el suelo como un modelo de pasarela en nada
más que un Speedo azul eléctrico y una sonrisa. Se fue a la cama,
donde se acercó y se apoyó con las manos sobre el colchón. Volvió a
mirar por encima del hombro y me sacudió el culo apretado.
—¿Qué piensas?
Me tragué el charco de baba que se estaba formando en mi boca. 158
—Creo que la playa es básicamente tierra de fantasía; no nos
perderíamos nada especial si prefieres quedarte en nuestra
habitación todo el día.
Finn soltó una carcajada mientras se levantaba y me miraba.
—De ninguna manera, señor. Por tentador que sea amarte todo el
día, también quiero experimentar el océano contigo. ¡Vamos! 03/2020
Suciedad elegante ahora y tiempos sucios después.
—¿Cómo puedo decir que no a eso?
—No puedes, —respondió encogiéndose de hombros. Me reí entre
dientes cuando él tiró la bolsa sobre su hombro y tomó su lugar
detrás de mí.
Debido a los neumáticos bajos y gruesos de la silla, no pude
maniobrar como lo haría normalmente, así que Finn me empujó por
el pasillo y subí al elevador. Una vez que llegamos al vestíbulo,
recibimos varias miradas curiosas de las personas con las que
pasamos. No estaba seguro de si era por mi cuerpo mal emparejado o
por la vista de un hombre pequeño, casi desnudo, empujándome,
pero tampoco me importó.
—Es tan hermoso aquí, —exclamó Finn mientras salíamos.
 —Sí, lo es—. Las palmeras se mecían con la suave brisa, y la arena
blanca prístina conducía a agua azul cristalina. Volví a mirar a Finn
una vez que pisó la arena. —¿Estás bien allí?
—Oh, sí. En realidad, es realmente fácil de empujar. —Nos hizo
avanzar varios pies hacia el agua y se detuvo. Antes de que pudiera
comprobar nuevamente que estaba bien, Finn estaba a mi lado con
un puñado de arena. —Siente esto, bebé.
Pellizqué un poco la arena y la froté entre mis dedos.
—Se siente como polvo—. Él sonrió ampliamente y asintió, y me di 159
cuenta de lo que estaba haciendo. Finn seguramente disfrutaba la
sensación de la arena suave y cálida debajo de sus pies y quería que
yo también la experimentara. —Gracias, —susurré, conmovido por su
consideración. Él picoteó mis labios y sacudió la arena al suelo.
Me llevó directamente a la orilla del agua, pero me dio la vuelta
para enfrentar la línea de hoteles. 03/2020
—Quiero sacar tu foto frente al océano, —explicó, parándose
frente a mí y sacando su teléfono de la bolsa. —¡Sonríe! —Me tomó
una docena de fotos desde todos los ángulos. Lancé mis brazos al aire
para una toma e hice una mueca tonta para otra, haciéndolo reír
mientras se alejaba.
—Está bien, mi turno, —insistí. Finn empujó mi silla a unos metros
de distancia y me hizo girar para enfrentar el agua nuevamente.
Luego se convirtió en mi pequeño hombre. Hizo varias poses
sensuales, desde recostarse en la arena con la espalda arqueada
hasta ponerse de pie y pelar la parte de atrás de su traje de baño
aproximadamente una pulgada hasta que su trasero se colgó
mientras miraba por encima del hombro.
—Está bien, tenemos que parar ahora, —dijo cuando llegó a mi
lado otra vez. —Por la forma en que me miras, mi Speedo se va a
poner demasiado apretado—. Me reí mientras volvía a meter su
teléfono en la bolsa. —Además, necesito ponerte esto—. Sacó una
botella de protector solar y la sacudió.
Finn se tomó su tiempo para esparcir la loción sobre cada
centímetro de mi piel expuesta, y luego hice lo mismo por él. Su piel
clara ardía fácilmente, y quería asegurarme de que se mantuviera a
salvo al sol y no terminara sufriendo dolor más adelante.
—¿Quieres meterte al agua? —Preguntó, dejando caer la bolsa
sobre la arena. Asentí y Finn, emocionado, empujó mi silla hacia las 160
olas. Las olas eran tranquilas y pequeñas. Sonreí cuando el agua tibia
lamió suavemente mis tobillos. —Dime cuándo parar.
—Esto es bueno, —dije cuando estaba en el agua hasta los muslos.
No quería profundizar demasiado y a Finn le resultaba difícil sacarme
más tarde. —Se siente increíble.
—¡Lo sé! No esperaba que fuera tan cálido. Seguro como el infierno 03/2020
vence a la nieve. —Observé a Finn mientras chapoteaba en el agua y
buscaba conchas. Él fue un poco más profundo y trató de hacer una
parada de manos para mí, aunque no pudo levantar ambas piernas al
mismo tiempo. Todavía le di una puntuación perfecta. Se acurrucó en
mi regazo y apretó cada caparazón y roca interesante que encontró
para que yo los inspeccionara. Nos besamos y tuvimos peleas y nos
reímos por lo que parecieron horas mientras disfrutamos de la
compañía del otro.
—Oye, tengo una idea, —anunció Finn mientras se acomodaba de
nuevo en mis muslos.
—¿Qué pasa, cariño?
—¿Qué tal si me muestras tu monstruo polla-ness y yo te mostraré
mi kra-jero? —Él sonrió con orgullo y me alzó las cejas. —¿Lo
entiendes? ¿Porque estamos en el océano?
 Luché contra la sonrisa que tiró de mis labios, en cambio gimió y
rodó los ojos.
—Oh, Dios mío, eso fue malo.
—¿Qué? ¡Lo he estado cocinando todo el día! —Se quejó,
levantando los brazos en el aire. Perdí mi batalla interna y me reí por
la tonta broma de Finn. —¡Ja! Sabía que era gracioso.
—Sí, lo eres—. Apreté mis brazos alrededor de su cintura y acaricié
mi mejilla con la suya.
—Hey, ¿qué es eso? —Preguntó Finn, mirando al agua algo que no 161
podía ver. Saltó de mi regazo y se alejó unos pasos, manteniendo sus
ojos en el misterioso objeto. —Es grande—. En un abrir y cerrar de
ojos, desapareció bajo la superficie. Contuve el aliento hasta que
apareció de nuevo, sosteniendo una gran concha de color naranja-
rosado. —¡Mierda, mira esto! —Volvió a mi lado y me tendió el
caparazón para que lo viera. 03/2020
—Es hermoso—. Era el infierno de caracolas más grande que había
visto, además de los que se vendían en las tiendas. —Y se está
moviendo.
—¿Qué? —Finn levantó la concha a la cara a tiempo para ver una
criatura larga como una babosa asomando por la abertura. Levantó
un dedo. —¿Puedo tocarlo? —Me encogí de hombros y vi a Finn dejar
caer su mano lentamente. —No creo que quiera tocarlo; parece una
lengua mohosa.
—La gente come esas cosas, —le ofrecí, y Finn me miró con los ojos
muy abiertos. —He oído que son buenos fritos.
—Bueno, eso es jodidamente asqueroso—. Sacó la lengua y la
dobló en las formas que la criatura estaba moviendo. Sus ojos
volvieron a mirarme. —¿Te imaginas encontrar una de estas cosas y
pensar: 'Oh, eso es genial, lo guardaré en mi bolsillo', y luego, diez
minutos después, ¡esta cosa te lame las bolas?
Me eché a reír y sacudí la cabeza. Estaba bastante seguro de que
solo Finn pensaría en tal cosa.
—¿Qué pasaría si fuera un cangrejo adentro, y diez minutos
después te arrancó la mierda de la polla?
Finn se encogió.
—Me duele incluso pensar en eso—. Me reí de nuevo cuando él le
dio al caracol una última mirada larga. —Está bien amigo, es hora de 162
volver—. Caminó hacia donde encontró el caparazón y se agachó
nuevamente bajo el agua, reemplazando a su nuevo amigo
repugnante. —Hey, ¿adivina qué? —Preguntó mientras aparecía por
encima de la superficie.
—¿Qué? —Pregunté, preparándome para otra broma cursi.
—Me meé en el océano por primera vez. 03/2020
Me reí de nuevo, principalmente por lo emocionado y orgulloso
que se veía Finn.
—Bueno, supongo que tacha eso de tu lista de deseos—. Finn solo
asintió con seriedad mientras volvía a mí, haciéndome reír aún más
fuerte.
—¿Te gustaría secarte y sentarte al sol un rato?
—Claro, cariño. Eso suena bien.
Finn me dio un beso rápido antes de ponerse detrás de mí. Me
preparé para el movimiento, pero no pasó nada. Finn gruñó en voz
alta y miré detrás de mí para ver su rostro ponerse rojo mientras
tiraba con todas sus fuerzas, pero mi silla no se movió.
—Oh, mierda, —dijo, poniéndose delante de mí. —Estás atorado.
Lo siento mucho, Harley. Debería haber movido la silla. No debería
haberme sentado en tu regazo. Tengo los neumáticos enterrados y
atrapados en la arena. —Sus ojos se llenaron de lágrimas. —Lo siento
mucho. No soy lo suficientemente fuerte como para moverte. Yo-
—Oye, está bien, —lo interrumpí antes de que se diera un ataque al
corazón. Finn se enorgullecía de cuidarme, y fue tan duro consigo
mismo cuando pensó que me había fallado, lo cual era ridículo. Nunca
podría fallarme. —No es tu culpa. Nunca hemos usado una de estas
cosas; no lo sabíamos. Simplemente encontraremos a alguien que nos
ayude—. Era algo que no esperaba, pero como mi otra opción
eventualmente sería tragado y arrastrado por la marea, tendría que 163
lidiar con eso. Finn respiró hondo y asintió decididamente antes de
mirar a su alrededor.
—¡Sí! —Exclamó Finn y se puso de pie de un salto. Salió a mi
izquierda y me estremecí al darme cuenta de que se estaba
pavoneando frente a un grupo de hombres musculosos que estaban
lanzando una pelota de fútbol. Eran altos, marcados, y me 03/2020
preocupaba cuál sería su reacción ante mi pequeño marido, en su
mayoría desnudo. Esperaba por Dios que no se lo dijeran. Mi Finn
respondería de inmediato, y con tanta autodefensa como él sabía, no
era rival para estos muchachos. Y estaría enraizado en el lugar y
obligado a mirar. Antes de que pudiera decir la palabra 'Alto' de mi
cerebro a mi boca, Finn estaba estirando la mano y picoteando a uno
de los grandes hombres en su hombro.
El titán de un hombre se dio la vuelta y en realidad tuvo que mirar
hacia abajo para ver a Finn, que descansaba aproximadamente al
nivel de su pecho. Parpadeó con fuerza y, para mi completa sorpresa,
una sonrisa se extendió por sus labios.
—¿Qué pasa, pequeño? ¿Quieres jugar? —Preguntó, sosteniendo la
pelota de fútbol. Bueno, estaré condenado.
 —Parece divertido, pero en realidad me preguntaba si tú y tus
amigos podrían ayudarme. La silla de ruedas de mi esposo está
atrapada en la arena y no puedo sacarlo solo. —Finn me señaló y los
grandes ojos del hombre se fijaron en mi silla. Contuve el aliento por
su reacción a la palabra 'esposo'.
Sin decir una palabra, se volvió para mirar a sus amigos y silbó
ruidosamente antes de saludarlos. Mi corazón latía con fuerza en mis
oídos mientras los cuatro grandes hombres se paraban alrededor de
mi pequeño Finn. 164
—El hombre del pequeño está atrapado en la arena. Necesita
nuestra ayuda para sacarlo, —explicó simplemente antes de volver su
atención a Finn. —Lidera el camino.
Un momento después, los cinco estaban a mi lado.
—Estos muchachos nos van a ayudar, bebé, —Finn sonrió. Ninguno
de los hombres miró al cariño. Solo estaban aquí para ayudarme; sin 03/2020
juicio, sin expectativas, solo una buena acción. Me sentí como un
idiota por pensar lo peor de ellos cuando Finn se les acercó. Odiaba
ser juzgado por mi apariencia externa, y eso es exactamente lo que
les había hecho a estos hombres. Fue una experiencia humillante que
juré no repetir nunca.
—Gracias, —les dije a los cuatro chicos, mirándolos a todos.
—No hay problema, amigo, —respondió un hombre encogiéndose
de hombros. —Muy bien chicos, dejen de estar de pie con sus pollas
en sus manos; todos agarren una esquina—. Pequeño —mordió, —
haz un camino.
Finn asintió rápidamente y se deslizó detrás de mí. Lo escuché
educadamente pidiéndole a la gente que se moviera a un lado, y
luego repitió no tan cortésmente cuando no lo hicieron.
 —En tres, —ordenó el hombre musculoso. —¡Uno, dos, tres! —Los
cuatro me levantaron como si no pesara nada y me llevaron sin
esfuerzo a la arena seca, donde Finn estaba esperando.
—Muchas gracias, —dijo Finn antes de lanzar sus brazos alrededor
de la cintura del hombre al que se acercó. El hombre le dio unas
palmaditas en la espalda a Finn, sin parecer preocupado en lo más
mínimo por tener un hombre gay vestido de Speedo.
—Hola Cody, ¿es esa más acción de lo que has visto en todo el
mes? —Bromeó uno de sus amigos. 165
—A menos que cuentes a tu madre, —respondió bruscamente.
—Jódete, —dijo el tipo con los ojos en blanco, aunque no había
calor en sus palabras. Eran solo un montón de amigos que se daban
una mierda.
—Ustedes son divertidos, —Finn sonrió cuando soltó a Cody.
—Hablando de diversión, ¿querías jugar? 03/2020
—Me gustaría, pero no sé cómo.
—Te mostraremos, pequeño. ¿Por cierto cuál es tu nombre?
—Finn, pero pequeño también funciona, —sonrió. —Nunca he
tenido un apodo; es lindo—. Oh, mi dulce Finn. No tuvo reparos en
decirle a un hermano muscular que su apodo era lindo, o abrazarlo
mientras usaba solo una delgada pieza de spandex. Era quien era, y
joder a cualquiera que no lo apruebe. —Y este es mi esposo Harley.
—Encantado de conocerte, —sonrió Cody. —Soy Cody, y esos son
Brandon, Tommy y John—. Finn y yo saludamos a cada hombre
mientras hacía las presentaciones.
Cody volvió al agua para recoger su pelota, que había perdido para
ayudarme. Afortunadamente, las olas estaban tranquilas y él pudo
recuperarla fácilmente, o me habría sentido como un culo aún más
grande. Pasó los siguientes veinte minutos mostrándole a Finn cómo
lanzar una espiral perfecta. Las lecciones sobre la captura fueron
bastante divertidas. En los primeros intentos, Finn se cubrió la cabeza
y esquivó el camino del balón. Todo se redujo a que Cody tuvo que
pararse detrás de Finn, tomar sus manos y atrapar la pelota con él
cuando los otros hombres la arrojaron.
Después de eso, Finn entendió las cosas, y todos nos pusimos al
ritmo de pasar el balón de un lado a otro. Los muchachos me
incluyeron de inmediato en su juego y me calentó el corazón.
Brandon incluso me dijo que tenía un “brazo fuerte y malvado”, y se 166
rió cuando Finn le dijo que mantuviera sus ojos en sí mismo.
—¡No puedo creer que estoy haciendo deporte! —Exclamó Finn
cuando estábamos en un descanso del agua. Los otros hombres
habían bajado un poco por la playa hasta donde estaba su
refrigerador, dejándonos a mi esposo y a mí solos. —¡Tu papá estaría
muy orgulloso de mí! 03/2020
—Él ya está orgulloso de ti, —dije, —y yo también.
—Aw, mi Harley—. Enterró sus manos en mi cabello y me dio un
beso largo y húmedo. —Siempre sabes qué decir para hacerme tan
feliz—. Se inclinó para poner su frente sobre la mía y descansé mis
manos sobre sus delgadas caderas.
—Um, perdón por interrumpir, pero ¿podrían estar en un juego
real? —Preguntó Cody, una vez más a nuestro lado. Finn jadeó y me
miró esperanzado.
—Ustedes, adelante. No tengo muy buena movilidad en esto, —le
expliqué, agitando mi mano sobre la silla.
—Es demasiado malo si no tienes tu silla de baloncesto, —
respondió Finn. Miró a sus nuevos amigos con seriedad. —Él patea
traseros en esa cosa.
—Dulce, —sonrió Cody.
 —Pero no quiero jugar sin ti, bebé, —agregó Finn con tristeza.
—¿Qué tal si es árbitro? —Sugirió John, ganándose un abrazo de
Finn también. Asentí con la cabeza con una sonrisa.
—Bien entonces; Pequeño, estás conmigo, —insistió Cody. —
Estaremos en contra de estos otros tres imbéciles.
—¿Tres contra dos? —Preguntó Finn incrédulo. —¿Y uno de esos
dos soy yo?
Cody resopló y golpeó la espalda de mi esposo.
—Tenemos esto. Vamos. —Llevó a Finn a un lado, donde se 167
acurrucaron. Finn siguió mirando furtivamente al otro equipo y
asintió con la cabeza, haciéndome preguntar qué demonios estaba
planeando, y si podría llevarme a marcar una falta sobre mi propio
esposo.
Cody dibujó una línea en la arena en un extremo y Tommy dibujó
una en el otro extremo para los goles de campo. Se decidió que cada 03/2020
vez que alguien cruzara su objetivo respectivo, valdría un punto. El
primer equipo en ganar cinco puntos ganaría.
Finn y Cody tomaron su lugar en el centro del “campo”,
agachándose y enfrentándose a Tommy, John y Brandon. Mi esposo
se veía tan pequeño junto a los demás, pero maldita sea si no
aparecía el doble de decidido. Tenía el ceño fruncido y la mandíbula
apretada en una mirada ardiente como el infierno. De hecho, saqué
mi teléfono de la bolsa junto a mí y tomé varias fotos para disfrutar
más tarde.
La pelota fue rota, con el equipo contrario en posesión. John pasó a
Brandon, y Finn dejó escapar un chillido como nunca antes había
escuchado. Agitó los brazos y corrió hacia Brandon como un mono
aullador trastornado. Los ojos de Brandon se abrieron en confusión
justo cuando Finn golpeó su peso corporal contra él, tirándolo sobre
su trasero.
—¡Sí! —Cody gritó entre carcajadas. —¡De eso es de lo que estoy
hablando! —Finn marchó con orgullo hacia él y recibió un choca esos
cinco.
Las siguientes jugadas pasaron de la misma manera. Lo que Finn
carecía de fuerza, lo compensó con el elemento sorpresa. Se acercaba
sigilosamente a los jugadores e intentaba asustarlos o los hacía
tropezar (lo que fingí no ver). Una vez, Cody incluso recogió a Finn y lo 168
lanzó contra John, lo cual estaba seguro de que estaba en contra de
las reglas, pero lo dejé pasar. Realmente fui un árbitro terrible.
Al final, Brandon anotó un gol para su equipo. Sin embargo, Finn
hizo un valiente esfuerzo para detenerlo, saltando y aferrándose a su
espalda mientras corría. Su peso no fue suficiente para frenar a
Brandon, y el puntaje fue de uno a cero. 03/2020
Cuando la pelota cambió de posesión, Cody se la arrojó a Finn y
corrió campo abajo. Finn abrazó la pelota con fuerza contra su pecho
y salió corriendo como un murciélago del infierno... en un círculo. Lo
bueno fue que fue rápido; su cuerpo delgado se deslizó entre los
gruesos del otro equipo. Lo persiguieron por todo el campo arenoso,
pero no pudieron atraparlo.
Cody gritó que estaba abierto, y Finn le pasó el balón en un
hermoso lanzamiento en espiral. Su compañero de equipo atrapó el
pase en la zona final por un punto, empatando el marcador. Finn se
emocionó tanto que salió corriendo del área de juego para besarme.
Los otros hombres se rieron cuando le di unas palmaditas en el
trasero a Finn para enviarlo de vuelta al juego, pero en cambio recibí
un beso más largo y húmedo a cambio.
 Y así continuó el juego, cada equipo anotó puntos por turno. Finn
incluso anotó un touchdown y celebró haciendo twerking en la zona
final como si su vida dependiera de ello. Tomé varias fotos de eso
también. Mi sexy esposo estaba haciendo twerking en un Speedo;
¿Por qué no tomaría fotos? También grabé un video, pero dejé de
grabar cuando algunos de los otros muchachos le pidieron a Finn que
les enseñara cómo bailar así. No solo no quería una grabación de
otros hombres, sino que simplemente eran terribles.
El marcador estaba empatado cuatro a cuatro, y Brandon estaba en 169
posesión de la pelota. Justo cuando se la estaba pasando a John, Cody
lo abordó y el lanzamiento se volvió deshonesto. El balón giró y se
arremolinó, aterrizando justo en las manos extendidas de Finn.
Parpadeó con fuerza el cuero.
—Mierda, lo atrapé—. Me miró a un lado. —Pero no es nuestro
turno. 03/2020
—¡Corre, Finn! —Grité, señalando salvajemente a la zona final. —
¡Corre! —Claro, se suponía que los árbitros eran objetivos, pero a la
mierda; esto fue emocionante.
Finn agarró la pelota con ambas manos y se fue, pateando arena en
todas las direcciones. Solo les tomó un momento a John y Tommy
darse cuenta de lo que había sucedido antes de que le siguieran los
pasos. Pero mi hombre fue rápido. Zigzagueó y zigzagueó sobre el
campo, gritando '¡Serpentea!' hasta que cruzó la zona final. Cody y yo
aplaudimos a todo pulmón mientras Finn miraba con confusa
emoción.
—¡Ganaste, cariño! —Grité con las manos ahuecadas. —¡Ganaste!
—Finn jadeó y entró en otro baile sexy hasta que Cody apareció en la
zona final y levantó a mi hombre sobre sus hombros. Finn lanzó sus
puños al aire mientras Cody daba una vuelta alrededor del campo
improvisado con mi hombre subido encima de él.
Cody regresó al centro del campo y bajó a Finn a la arena. John,
Brandon y Tommy le dieron a mi hombre golpes de puño y palmadas
en la espalda, diciéndole que jugó un buen juego y los avergonzó. Él
sonrió y les agradeció sus promesas, pero luego corrió directamente
hacia mí.
—¡Ganamos! ¡Mi equipo ganó! ¡No puedo creerlo! —Me dio un
abrazo rápido y feroz antes de retirarse y extender sus manos. —Mira 170
esto; ¡me tiemblan las manos! —En realidad, todo su cuerpo
temblaba; mi dulce hombre no pudo contener su emoción.
—Estoy muy orgulloso de ti, cariño. ¿Y adivina qué más? Eres el
MVP.
Los ojos de Finn se abrieron a un tamaño que no sabía que fuera
posible. 03/2020
—¿Lo soy? ¿Estás seguro?
—Por supuesto que estoy seguro. Soy el árbitro es mi trabajo mirar
el juego y tú eres el MVP—. Honestamente, no tenía ni idea de cómo
se decidieron esas cosas, pero Finn se lo merecía. Y sabía que
significaba el mundo para mi esposo por la forma en que sus ojos
brillaban y se cubría la boca con una mano temblorosa.
—Soy el MVP, —susurró. Se abalanzó sobre mí, presionando un
beso duro y rápido en mis labios antes de girarse para mirar a los
otros hombres en el campo. Levantó los brazos y gritó: —¡Soy el
MVP! —Afortunadamente, todos lo siguieron, aullando y gritando por
mi excitado hombre. Corrieron hacia él y lo levantaron en sus brazos,
haciéndolo saltar de un lado a otro.
La vista de cuatro hombres enormes de tipo fisicoculturista
animando a mi dulce y pequeño esposo en un Speedo mientras me
lanzaba besos fue suficiente para derretir mi corazón en un charco. En
este momento, la sexualidad no importaba; no lo hizo tipo de cuerpo,
estereotipos, limitaciones físicas, o cualquier otra diferencia de
mierda. Todos estábamos disfrutando la vida juntos, ¿y qué más
importaba?
El jadeo de Finn atrajo mi atención hacia su exuberante rostro.
—Bebé, ¿podemos conseguirme una placa para la pared también?
—Por supuesto, cariño; te lo ganaste. —Me reí entre dientes ante
el chillido emocionado de mi marido. Para mantenerlo tan feliz, 171
encontraría una manera de darle todo el maldito mundo.

03/2020
 Capítulo Trece

Sonreí mientras estudiaba la cara dormida de Finn, recordando

toda la diversión que habíamos tenido la semana pasada. Durante
cinco días, nos relajamos en la arena, jugamos en el agua, hicimos el 172
amor, recogimos una bolsa llena de conchas para llevar a casa
(después de que Finn las inspeccionó minuciosamente en busca de
bichos) y salimos con Cody y sus amigos.
Después de hablar con ellos más, descubrimos que también
estaban de vacaciones, y en realidad solo vivían unas tres horas lejos
de nosotros. Todos intercambiamos números de teléfono e hicimos 03/2020
un plan para reunirnos en una ubicación central el mes siguiente para
un partido de baloncesto. Esta vez me emocionó participar en el
juego y me sorprendió la forma en que Finn atraía a las personas y la
positividad a mi vida.
Lamentablemente, los otros hombres volaron a casa ayer para que
no los veamos hoy en nuestro último día de vacaciones. Pero, Finn y
yo tampoco íbamos a la playa hoy. Había hecho planes para nosotros
sobre los que estaba siendo muy reservado.
Los párpados de Finn se agitaron y se abrieron, y él me sonrió
perezosamente.
—Buenos días, hermoso, —le dije, y besé su mejilla. No quería
atacar su boca hasta que me cepillara los dientes.
—Buenos días, bebé—. Finn se dio la vuelta para mirarme y se
acurrucó cerca. —¿Estás emocionado por tu sorpresa hoy?
 —Tan emocionado. ¿Tengo una pequeña pista?
—Solo creo que te encantará.
—Bueno, por supuesto que me encantará. Estaré contigo—. Bien,
estaba tratando de darle pistas, pero aun así era cierto.
—Aw, eso es tan dulce—. Finn besó mi cuello y se acercó. —Está
bien, una pista más—. ¡Sí! —Es otra cosa en mi lista de deseos.
—Ah, pero ¿será tan emocionante como mear en el océano? —
Bromeé.
Finn resopló. 173
—Eso fue bastante bueno, pero espero que esto sea aún mejor—.
Él picoteó mis labios y se enderezó. —No más pistas. Bajemos las
escaleras y tomemos el desayuno antes de salir. Ooh, ¿deberíamos
usar nuestras camisas hoy o guardarlas para cuando volvamos a casa
mañana?
Ayer, Finn y yo cenamos en un restaurante donde sirvieron el pollo 03/2020
más delicioso. Fue sazonado y cocinado perfectamente y a los dos nos
encantó. Finn fue al baño mientras yo pagaba la cuenta y él volvió
riéndose tontamente y llevando una bolsa de compras. Cuando le
pregunté qué demonios lo tenía tan nervioso, dijo que me había
comprado un regalo de San Valentín tardío (además de chuparme dos
veces de una vez, lo que casi me mata, en el buen sentido). Metió la
mano en la bolsa y sacó dos camisetas rojas a juego que en letras
blancas decían “Me gusta mi carne sacudida”.
—Creo que deberíamos guardarlas para mañana. De esa manera,
Jake las verá cuando le dejemos sus recuerdos—. Tal vez fue malo
querer molestar a mi primo, especialmente después de todo lo que
había presenciado entre Finn y yo, pero no pude evitarlo.
—Buena idea, —respondió Finn con una sonrisa perversa. Al menos
no era el único con una racha traviesa.
 *****

—¿Vamos a dar un paseo en bote? —Pregunté cuando Finn entró

en un puerto deportivo. Nos turnamos para conducir el convertible
en los últimos días, pero Finn ni siquiera quiso que supiera la
dirección de mi sorpresa hasta que estuvimos allí.
—Eso es parte de eso, —respondió mientras se estacionaba en un
lugar. Apagó el motor y se volvió hacia mí. —Está bien, no puedo 174
esperar más; estoy demasiado emocionado—. Me tomó de la mano y
me dio una amplia sonrisa. —¡Vamos a bucear!
Parpadeé hacia él.
—Eso es... wow.
La cara de Finn cayó.
—No te gusta. 03/2020
—No es eso, cariño. Es... —Respiré profundamente. ¿Cómo puedo
decir esto sin hacerlo enojar? —Me encanta la idea y es muy especial
que quieras compartir uno de tus sueños de vida conmigo, pero no
estoy seguro de si esto es algo que puedo hacer físicamente—. La
expresión de Finn no estaba enojada; estaba herido. Mierda; eso es
aún peor. —Estar en aguas abiertas sin poder controlar la mitad
inferior de mi cuerpo es aterrador, —admití.
—Entiendo, —respondió en voz baja. —Realmente lo siento, bebé;
no quise elegir algo con lo que te sientas incómodo. Quería
sorprenderte, pero debería haberte hablado primero.
—No es necesario lamentar, Finn. Tú planeaste algo muy agradable
para nosotros. Yo lo siento que no funcionó. —Sabía que no debía
disculparme por mis limitaciones; no solo molestaría a mi esposo,
tampoco sería justo para mí. —Sin embargo, me encantaría dar un
paseo en bote contigo y puedes contarme todo lo que ves en el
agua—. No quería evitar que hiciera algo por lo que estaba tan
emocionado.
—No, está bien. No quiero ir sin ti—. Finn me dio una sonrisa triste
y puso su mano sobre mi rodilla. —Harley, eres la persona más
importante del mundo para mí. Prefiero morir antes que hacer algo
para ponerte en peligro. ¿Lo sabes?
Me estremecí sorprendido por sus palabras.
—Finn, por supuesto que sí. 175
—¿Y sabes que haría todo lo que esté en mi poder para mantenerte
a salvo?
—Sí, —respondí fácilmente. Finn asintió y movió las llaves hacia el
encendido, pero lo detuve con un toque en su mano. —Cariño, ¿de
qué se trata esto?
Finn suspiró y colocó las llaves en su rodilla. 03/2020
—Llamé a una docena de compañías diferentes antes de que
decidiera reservar con esta. Ellos tienen viajes especiales de
esnórquel una vez por semana para personas con discapacidades.
Solo sacan a unas pocas personas a la vez en lugar de una carga
completa de botes. Un guía capacitado está con los invitados en todo
momento, proporcionan dispositivos de flotación y tienen un equipo
especial para ayudar a los huéspedes a entrar y salir del agua.
Mieeeerda. Por eso Finn parecía tan herido; no porque no quisiera
ir, sino porque asumí que me iba a lanzar a una situación que podría
haber sido peligrosa. Por supuesto que investigó la mierda de esto; tal
como había hecho con el resto del viaje. Puso tanto trabajo y
probablemente dinero para encontrar una experiencia especial para
nosotros y simplemente me llevé una mierda gigante por todas
partes. Sin mencionar la forma en que aplasté a mi dulce hombre en
el proceso.
—Finn, lo siento, —ofrecí en voz baja.
—Está bien.
—No, no lo está. —Suspiré y me froté la cara con la mano. —
Siempre me cuidas y debería haber confiado en ti. Debería haberte
hablado primero en lugar de asumir que me inscribiste en algo que no
era seguro para mí.
—Lo siento también, —respondió Finn. —Reaccioné de forma 176
exagerada. Solo estabas preocupado por la actividad; no debería
haberlo hecho por mí. Debería haber explicado todo en lugar de
asumir lo peor también—. Rascó sus uñas a través de mi barba
mientras sus ojos se llenaron de lágrimas. —¿Me perdonas?
—No hay nada que perdonar, —insistí. —Acabamos de tener un
malentendido—. Quité su mano de mi mandíbula y besé sus nudillos. 03/2020
—Necesito recordar que tengo a alguien que siempre está en mi
equipo y a mi lado; alguien que siempre querrá lo mejor para mí y me
ayudará a vivir la vida al máximo.
Finn asintió rápidamente y secó una lágrima que intentaba salir de
su ojo.
—Y debo recordar que te has cuidado durante tanto tiempo que
puede ser una segunda naturaleza cuestionar las cosas, pero eso no
significa que me estés cuestionando.
—Exactamente, —sonreí. Me incliné y mordisqueé su cuello hasta
que se rió. —Te amo.
—Yo también te amo. Y escucha; si no quieres hacer esto, está
bien. Lo dije en serio cuando dije que nunca quise que hicieras algo
con lo que te sientas incómodo. Podemos simplemente pasar el rato
en la playa o algo así.
 —No, quiero hacerlo. Estaba asustado, pero después de escuchar
sobre este lugar, realmente quiero compartir esto contigo.
—¿Estás seguro?
—Lo prometo—. Lo sellé con un beso y Finn sonrió.
—Bueno. Pero si te asustas de nuevo, está bien. Simplemente
disfrutaremos del paseo en bote juntos. ¿De acuerdo?
—De acuerdo.
Nos dirigimos a un pequeño edificio, donde una señora detrás de
un escritorio escaneó los tickets en el teléfono de Finn. Ella nos dirigió 177
a través de una puerta trasera y hacia un muelle, donde un hombre
sonriente con barba blanca se paró frente a un bote con una amplia
cubierta con una línea de bancos alrededor del perímetro. Había otras
tres personas en sillas de ruedas ya subidas, y sus compañeros
estaban sentados a su lado.
—Deben ser Finn y Harley, —adivinó el hombre barbudo y 03/2020
asentimos. —Bienvenidos a bordo; soy el capitán Phil. Ustedes dos
son los últimos invitados. Siéntense cómodos y les haré saber a
nuestros guías que estamos realmente seguros.
Giré sobre una rampa hacia el bote y bloqueé las ruedas de mi silla
una vez que estaba frente al banco de madera. Finn se sentó frente a
mí y sostuvo mis dos manos entre las suyas. Unos minutos más tarde,
una mujer con una cola de caballo rubia y un hombre con un corte de
pelo marrón aparecieron en la cubierta justo cuando el bote gimió y
se alejó del muelle.
—¡Hola, chicos! Soy Jill y este es Peter; seremos sus guías hoy. Nos
dirigimos a un hermoso arrecife donde podrán ver muchos tipos de
vida silvestre colorida. ¿Alguna vez a bordo han buceado antes?
Un hombre en silla de ruedas y su compañera levantaron la mano.
 —Genial, —sonrió Peter. —Y para aquellos de ustedes que no lo
han hecho, no se preocupen. Estaremos con ustedes en cada paso del
camino. El sitio de snorkel está a solo unos quince minutos de viaje,
por lo que seguiremos adelante y repasaremos algunas reglas rápidas
y consejos de seguridad para que todos estén listos para llegar al agua
cuando lleguemos.
Jill y Peter discutieron las medidas de seguridad y demostraron
cómo funcionaba todo el equipo. Cuando terminamos de hablar, me
sentí confiado y entusiasmado con la excursión. Nos detuvimos en 178
una hermosa zona azul de agua y el capitán Phil echó el ancla. Los
guías repartieron salvavidas y se aseguraron de que todos estuvieran
bien sujetos.
—¿Cómo te sientes, bebé? —Preguntó Finn una vez que revisaron
nuestros chalecos salvavidas.
—Genial, —sonreí. —Estoy ansioso por esto. 03/2020
—Yo también—. Se inclinó hacia adelante y me robó un beso
cuando Jill y Peter terminaron con sus controles de seguridad y se
pusieron sus propios preservadores.
Uno por uno, Jill ayudó a los invitados con discapacidades a
sentarse en la silla elevadora. Peter ya estaba en el agua y una vez
que la persona se unió a él, desabrochó sus restricciones y se aseguró
de que estuvieran estables y cómodos (con la ayuda de sus
compañeros) antes de señalar el próximo.
—Está bien, cariño, tu turno, —Jill me sonrió. Fui el último en
abordar el bote, así que pensé que era justo ser el último en meterse
en el agua. Además, si soy honesto, quería ver cómo funcionaba todo.
Me transferí a una parte del banco de madera que estaba cubierto
con la gruesa tela del elevador. Estaba unido por cuerdas a una barra
de metal en el costado del barco.
 —Necesito hacerte unas preguntas antes de meterte en el agua
para asegurarnos de que te mantenemos a salvo, ¿de acuerdo? —
Preguntó Jill y asentí con la cabeza. —¿Tienes movilidad en tus
piernas? —Negué con la cabeza. —Está bien, y qué hay de la parte
superior de tu cuerpo; ¿alguna movilidad o debilidad limitada?
—No, tengo un control completo desde la cadera hacia arriba y no
tengo problemas con la debilidad en mi torso o brazos.
—Y tiene músculos grandes, —agregó Finn servicialmente desde
detrás de Jill, haciéndola sonreír. 179
—Bueno, entonces deberías estar bien, —respondió ella con un
guiño juguetón. Tomó una correa negra con una hebilla de la cubierta
y la sostuvo para que yo la viera. —¿Está bien si pongo esto alrededor
de tus piernas? Descubrimos que facilita a nuestros huéspedes
mantenerlas juntos en el agua; te ayuda a tener un mejor control de
tu dirección. 03/2020
—Claro—. Tenía sentido; aunque mis piernas eran más pequeñas
que el resto de mi cuerpo, todavía tenían peso en ellas. Si flotaban en
diferentes direcciones, podrían sacarme de la dirección que quería ir
y dificultarme mantener el control. Jill asintió y envolvió la correa
alrededor de mis pantorrillas, abrochándola en mis pantorrillas. —
Sabes, es realmente bueno que todos ofrezcan esto. Es algo que mi
esposo siempre ha querido hacer, pero me preocupaba no poder
hacerlo con él. Esto significa mucho. —Finn me dio una dulce sonrisa
y puso su mano sobre su corazón acolchado.
—Me alegra escucharlo, —respondió ella con una sonrisa. —
Comenzamos a ofrecer estos viajes hace un par de años y ha sido
increíble. El Capitán Phil es mi padre y Pete es mi esposo; entonces es
una especie de negocio familiar. Creo que rompí un poco el corazón
de mi padre cuando fui a la escuela para ser asistente de fisioterapia,
—se rió entre dientes. —Pero, hicimos una lluvia de ideas sobre esta
idea para que podamos trabajar juntos mientras brindamos una
actividad divertida y accesible. Realmente lo disfruto; creo que todos
deberían tener la oportunidad de experimentar la naturaleza y me
alegra ser parte de eso.
—Eso es hermoso, —dijo Finn, poniendo su mano sobre el hombro
de Jill. Ella le sonrió y le dio unas palmaditas en la mano.
—Gracias. De acuerdo, vamos a llevarlos a la parte divertida. —Se
puso de pie y miró a Finn. —Adelante y ponte las gafas, y luego haré 180
que te sientes en el borde del bote y balancees las piernas. Solo salta
al agua; Pete está allí para ayudar si lo necesitas.
—Está bien—. Finn colocó sus gafas sobre sus ojos y dejó caer su
trasero en la barandilla. Él colocó sus piernas en la parte exterior del
barco y me devolvió la mirada. —Nos vemos allí abajo—. Le di un
pulgar hacia arriba y vi cómo se zambullía en el océano. El agua era lo 03/2020
suficientemente clara como para que pudiera ver sus piernas patear
salvajemente mientras se balanceaba a lo largo de la superficie.
—¿Estás bien? —Preguntó Pete, nadando al lado de Finn.
—Nunca he estado en el agua donde no puedo tocar el fondo; es
un poco raro.
Pete se rio entre dientes.
—Puede llevar un poco acostumbrarse, pero lo estás haciendo muy
bien. Intenta relajarte y confiar en tu dispositivo de flotación. Aquí;
dame tus manos. —Finn hizo lo que le pidió. —Está bien, ahora deja
tus piernas quietas—. Mi esposo respiró hondo y su cuerpo se calmó
en el agua. —Ahí tienes. Voy a soltarte, pero trata de mantenerte
quieto. Estoy aquí. —Dejó caer las manos de Finn y los ojos de mi
esposo se abrieron como platos mientras flotaba perfectamente
inmóvil en el agua. —¿Ves? ¡Tú lo tienes!
 —Gracias, —Finn sonrió. —En realidad es un poco agradable ahora
que mi cuerpo no se está volviendo loco.
—No hay problema, —Pete le devolvió la sonrisa. —Voy a ayudar a
Harley a entrar, ¿de acuerdo? —Finn asintió rápidamente y observó al
guía nadar a un lado del bote.
—Aquí vamos, —anunció Jill y presionó un botón al costado del
elevador. La honda se tensó a mi alrededor cuando me levanté del
banco de madera. Había estado en un ascensor similar a este después
de que primero tuve mi accidente. Fue más fácil para las enfermeras y 181
menos doloroso para mí ser trasladado con un elevador en lugar de
manos.
Despejé el costado del bote y me sumergí lentamente en el agua.
Era un poco más fresco que en la playa porque era más profundo
aquí, pero la temperatura aún era agradable, especialmente con el sol
caliente en lo alto. 03/2020
—Está bien, Harley, si me agarras los hombros, te desengancharé,
—instruyó Pete. Hice lo que me pidió y trabajó rápidamente para
liberarme de las correas. —Estamos despejados, —llamó a Jill, quien
subió la honda y la subió al bote. —¿Cómo te sientes?
—No está mal.
—Bueno. Adelante, deja caer tus manos para mí. —Bajé mis manos
de sus hombros al agua. Mi cuerpo se inclinó un poco hacia adelante
sin el apoyo, pero estaba casi siempre erguido y el chaleco salvavidas
me mantuvo flotando cómodamente. —Buen trabajo, te ves bien, —
sonrió Pete.
Finn estuvo a mi lado un momento después.
—¡Eres tan bueno en esto, bebé! ¿Cómo te sientes? ¿Tienes
miedo? ¿Está bien?
Me reí de mi dulce hombre.
 —Estoy emocionado. Creo que esto va a ser divertido. —Finn me
tomó la mano debajo del agua y me dio un beso incómodo que
golpeó las gafas.
Jill se zambulló en el agua y nadó al lado de Pete.
—Está bien chicos, antes de comenzar, vamos a probar el equipo.
Respirar a través de un snorkel por primera vez puede ser un poco
extraño e incluso un poco abrumador, por lo que vamos a practicar.
Mantén la respiración profunda y lenta.
Todos colocamos las boquillas entre nuestros labios y practicamos 182
la respiración a través del tubo. Fue IRD2; escuchar el eco de tu propia
respiración era un poco desconcertante, y era fácil asustarse y
permitir que tu respiración se acelerara. Me tomó un momento
tomar el control y caer en un patrón lento y profundo. Una vez que
me acostumbré y me sentí cómodo, escupí la boquilla y me volví
hacia Finn. 03/2020
—¿Estás bien?
También dejó caer su boquilla.
—Lo estoy ahora. Al principio pensé que podría desmayarme.
Nunca esperé que se sintiera tan extraño. —Le sonreí, pero antes de
que pudiera responder, Jill habló de nuevo.
—Bien, luego quiero que todos inclinen sus cuerpos hacia adelante
y sumerjan sus caras en el agua como lo haremos sobre el arrecife.
Después de unos segundos, levanten de nuevo. Si no pueden, no
entren en pánico. Para eso estamos aquí; solo levanten la mano y
nosotros iremos a ayudarlos. Recuerden, tienen sus chalecos para
ayudarlos a flotar y snorkel para ayudarlon a respirar.

2
IRD Acrónimo de receptor y decodificador integrados, generalmente en referencia a un
decodificador (STB) como un receptor de satélite o decodificador de cable.
 Finn volvió a colocar su tubo y la cara plantada en el agua. Después
de un momento, se enderezó y dejó caer la boquilla.
—¡Mierda!
—¿Pasa algo malo? —Pregunté preocupado.
—¡No! Te vi bajo el agua; ¡tu largo cabello flota a tu alrededor y tus
piernas están juntas y te ves como un jodido tritón sexy!
Me reí en voz alta, y para mi sorpresa, Jill se rió a mi lado como
nosotros. Ella debió haber nadado ante la exclamación de Finn.
—Me encanta, —sonrió ella. —Creo que deberíamos poner eso en 183
el sitio web—. Finn asintió con la cabeza y Jill me dirigió su sonrisa. —
¿Puedes seguir adelante y ponerte en posición para mí?
Con la declaración de Finn, había olvidado que aún no había
practicado. Envolví mis labios alrededor de mi snorkel y me incliné
hacia adelante. Mi cuerpo se estiró cuando mis piernas aparecieron
detrás de mí. Puse mi cara en el agua, manteniendo mi respiración 03/2020
uniforme y miré a mi alrededor. Vi algunos peces nadando en la
distancia, y rocas a lo largo del fondo del océano. De acuerdo, esto es
realmente genial.
Aunque quería explorar, sabía que Jill solo quería que bajáramos un
minuto para ver nuestro nivel de habilidad y comodidad. Apreté el
estómago y levanté la cabeza y los hombros fácilmente, pero mis
piernas aún flotaban detrás de mí. Por mucho que aplasté mi núcleo,
no pude luchar contra su flotabilidad.
Antes de que pudiera levantar mi mano en busca de ayuda, Finn
colocó su mano en la parte posterior de mis muslos y empujó mis
piernas debajo de mí. Mi cuerpo se enderezó y floté verticalmente de
nuevo.
—Gracias, cariño, —le dije después de quitarme el tubo. Finn guiñó
un ojo detrás de sus gafas.
 —Parece que tienes un gran compañero allí, —sonrió Jill. —Pero
recuerda, estamos aquí si nos necesitas también—. Ella asintió a unos
metros de distancia, donde una mujer de mediana edad tenía su
mano en el aire mientras flotaba. Pete fue rápido a su lado y la ayudó
a ponerse de pie. Su profesionalismo y cuidado me tranquilizaron.
—Está bien todos, —llamó Pete. —Nos dirigiremos al lado opuesto
del bote donde encontrarán un arrecife grande y hermoso. ¡Levanten
la mano si necesitan ayuda y diviértanse! —Él, Jill y nuestros socios
nos ayudaron a aquellos que lo necesitábamos en la parte trasera del 184
bote (estoy seguro de que hay un término náutico, pero no soy un
marinero).
—¿Listo, bebé? —Preguntó Finn con una sonrisa emocionada.
Extendió su mano y la apreté en la mía.
—Listo.
Nos acurrucamos nuestros tubos y acomodamos nuestras caras en 03/2020
el agua. La vista que nos rodea casi me deja sin aliento. Enormes
rocas llenas de baches cubiertas de coral multicolor cubrían el fondo
del océano. Peces de todos los tonos y patrones nadaban felices, sin
parecer que les importara lo más mínimo que estuviéramos allí. Finn
me apretó la mano y señaló con la otra un erizo de mar de punta
colocado en el costado de una roca. Le di un pulgar hacia arriba; fue
genial que aún pudiéramos comunicarnos sin palabras.
Mis piernas aparecieron detrás de mí y floté sobre mi estómago,
permitiendo que Finn me guiara a donde quisiera ir. Me aferré
fuertemente a su mano y absorbí la belleza de la naturaleza con mi
hermoso hombre a mi lado. La vida no podría ser mejor.
Finn me apretó de nuevo y agitó su otra mano, señalando
frenéticamente algo debajo de nosotros. Seguí las instrucciones justo
a tiempo para ver pasar una raya. Agitó sus aletas lentamente,
luciendo pacífica y majestuosa en su viaje. Finn me soltó por un
momento para aplaudir y sonreí lo más posible alrededor de mi
snorkel.
No estoy seguro de cuánto tiempo pasó mientras veíamos a los
peces nadar y arremolinarse a nuestro alrededor. Vimos dos
mantarrayas más (o la misma dos veces, pero todavía hacía frío), e
incluso vi una estrella de mar con demasiadas puntas. Estaba
profundamente en mi lugar feliz cuando sentí un beso en el hombro.
Yo exprimí la mano de Finn y señaló a la superficie con la otra mano. 185
Él asintió y su rostro desapareció por encima de la parte superior y
casi de inmediato sentí su mano sobre mis muslos empujándome
hacia arriba.
—¿Cómo estuvo? —Jill preguntó a nuestro lado.
—¡Increíble! —Exclamó Finn. —¡Vimos tantas cosas geniales!
—Eso es maravilloso, —sonrió nuestra guía. 03/2020
—Fue increíble, —estuve de acuerdo. —Oh, ¿y cuántas puntas se
supone que deben tener las estrellas de mar? —Pregunté con
curiosidad. Estaba un poco preocupado por el pequeño mutante que
vi.
—Tenemos una especie por aquí que tiene nueve—. Bien, bien; no
es un mutante. —Ahora, si regresan al otro lado del bote, haremos
que todos carguen y salgan para disfrutar el resto de su día—. Fue
una forma muy cortés de decir 'se acabó el tiempo, sal de aquí'.
Finn me ayudó al lado opuesto de la nave. Cuando llegó mi turno de
abordar, se aseguró de que Pete me hubiera enganchado con
seguridad a la honda antes de subir la escalera a la cubierta. Cuando
volví a mi silla y me quedé en su lugar, Finn se sentó en mi regazo
para acurrucarse en lugar de sentarse en el banco.
 —¿Era todo lo que esperabas? —Pregunté, apretando mi agarre a
su alrededor.
—Incluso mejor, —suspiró felizmente. —Fue la cosa más mágica
que jamás haya experimentado—. Peinó sus dedos a través de mis
hebras húmedas. —Gracias por darle una oportunidad, bebé. Fue tan
especial porque estabas conmigo.
Besé su frente y le sonreí.
—Me haces querer experimentar todo juntos; vivir la vida sin
límites. Me haces sentir que puedo hacer cualquier cosa. 186
—Tú puedes hacer cualquier cosa, Harley, —respondió en serio.
Finn recibió otro beso grande y húmedo en la frente porque,
maldita sea, no pude evitar rodearme de él.
—Quiero hacerlo todo. Cuando lleguemos a casa, quiero que
escriba tu lista de deseos. Haremos un plan para hacer todo; incluso si
toma el resto de nuestras vidas, quiero que hagas todo lo que tu 03/2020
corazón desee, y quiero estar a tu lado.
—Mi Harley—. Los ojos de Finn nadaban mientras me miraba. —
Cuando lleguemos a casa, haremos nuestra lista juntos. Quiero que
tengas todo lo que tu corazón desea también. Te prometo una vida
de aventuras juntos—. Tomó mis labios en un tierno beso de promesa
y para siempre antes de acurrucarse en mi abrazo. Mientras
navegábamos suavemente por el agua cristalina, mi cabeza bailaba
con visiones de las cosas maravillosas que nos deparaba el futuro.
 Capítulo Catorce

Una vez que llegamos al puerto deportivo, Finn y yo nos cambiamos

a la ropa seca que había guardado en la cajuela del auto. Finn ató mi
cabello mojado en un moño en la parte superior de mi cabeza antes 187
de lamer sus labios y decirme que tenía un look sexy 'recién salido de
la ducha'. También me dijo que la camiseta sin mangas que llevaba
que mostraba mis tatuajes le dificultaba concentrarse en la carretera
mientras conducía. Siempre me hizo sentir tan guapo.
Estar en el agua tanto tiempo nos dio hambre, así que nos
detuvimos para almorzar en un pequeño restaurante junto a la playa 03/2020
que tenía sándwiches de barbacoa increíbles. Aún más sorprendente
fue la forma en que Finn me agarró las manos y me chupó la salsa de
barbacoa de las yemas de los dedos cuando terminé.
Cuando llegamos a nuestro hotel, estaba excitado por las palabras y
acciones sexys de mi hombre, y todavía me sentía invencible por los
acontecimientos de la mañana. Finn me había brindado una
experiencia tan maravillosa, y quería hacer algo por él a cambio de
que supiera que le encantaría. Mi esposo se levantó cuando tomé el
control. A lo largo de los meses que habíamos estado juntos, me
había vuelto más seguro sobre mi cuerpo y habilidades. Todo lo que
quería era hacer realidad sus traviesas fantasías y darle el paseo de su
vida.
—Entonces, ¿qué debemos hacer ahora? —Preguntó Finn una vez
que estábamos de vuelta en nuestra habitación. Tiró las llaves del
auto sobre una pequeña mesa y caminó hacia las grandes puertas
corredizas de vidrio para mirar hacia el océano. —Podríamos ir a la
playa o visitar algunas últimas tiendas. ¿Qué piensas? —Se giró para
mirarme y se congeló mientras miraba mi ardiente mirada.
—Creo que te quiero fuera de esa ropa. Ahora.
Finn me miró y tragó saliva. ¿Oh dios, eso fue demasiado? Mis
preocupaciones se desvanecieron rápidamente cuando mi esposo se
quitó las chanclas y se quitó la ropa más rápido de lo que nunca había
visto. Su polla estaba pesada y creciendo por segundos. 188
—Ahora quiero que me quites la mía.
Finn se arrodilló frente a mí, agarrándome las sandalias.
—Dulce misericordia, esto es tan caliente. Puedo venirme incluso
antes de que me toques.
Gracias a Dios pude contener la risa vertiginosa que casi se me
escapó; eso habría arruinado el momento seguro. Finn me quitó las 03/2020
sandalias y me hizo desnudar en segundos.
—Tócame, Finn. Hazme sentir todo duro por ti.
—Tan jodidamente caliente, —repitió en un susurro mientras ponía
una mano alrededor de mis bolas y envolvía la otra alrededor de mi
polla regordeta y medio dura. Apretó suavemente mi saco y sacudió
mi polla hasta que se mantuvo firme y lista.
—Toma el lubricante y el anillo transparente, —le dije, y Finn
rápidamente se levantó para recuperarlos. No quería el anillo
vibrante porque estaba tan alterado que me preocupaba que en el
momento en que lo encendiera, explotaría. Mientras Finn estaba
consiguiendo los suministros, me subí a la silla sexual que habíamos
traído con nosotros y ya usamos varias veces durante nuestro viaje.
Finn regresó frente a mí y una vez más cayó de rodillas. Vertió una
gota de lubricante en la punta de mi polla y estiró el anillo sobre mi
carne. Una vez que estuvo agarrado contra mi pubis, Finn me miró
con fuego en los ojos.
—¿Cómo me quieres?
Finn me estaba dando todo el control y las decisiones. Confió en mí
para cuidarlo y darle placer, y eso es exactamente lo que planeé
hacer.
—Sepárate para mí en tus manos y rodillas.
Justo cuando Finn se dio la vuelta, puse una palma en cada una de
sus mejillas y las separé, vislumbrando su bonito agujero rosado. En 189
un abrir y cerrar de ojos, me incliné hacia adelante y presioné mi
lengua contra su carne fruncida, saboreando el sabor sutil de la sal del
océano que se le pegaba.
—Oh, Dios, eso se siente bien, —gimió Finn mientras lamía su piel.
Seguí mi lengua alrededor de su borde, saboreando la sensación de
cada cresta y valle. Aparté mi lengua y soplé aire frío sobre su piel 03/2020
mojada, provocando el temblor de todo el cuerpo de Finn. Sonreí al
ver cientos de pequeñas protuberancias frías estallando sobre sus
mejillas y muslos.
Presioné la yema del dedo sobre el agujero de Finn.
—¿Quieres mi polla aquí? —Le pregunté, tocando contra su carne
fruncida.
—¡Sí! —Se empujó contra mí y gimió cuando me aparté.
—Aún no. Primero te voy a abrir. Me encanta ver tu culo engullir
mis dedos.
—Mierda, —susurró Finn. La boca de mi hombre se volvió más
sucia cuanto más agitado se ponía.
Abrí la tapa de la botella de lubricante y cubrí mis dedos con el
líquido resbaladizo. Llevé la punta de mi dedo índice a su agujero
nuevamente, y esta vez deslicé todo mi dedo dentro de él de una vez,
boquiabierto por la forma en que su piel se estiraba a mi alrededor.
Me metí el dedo dentro y fuera de Finn cuando él maldijo y gimió de
placer.
—Uno más—. Alejé mi dedo hasta que solo su punta estaba dentro
de él, y luego volví a entrar con dos. La abertura de Finn se estiró
fácilmente para dejarme entrar en su fuerte calor. Cuando
lentamente retrocedí, Finn apretó los músculos y me atrajo hacia él.
Necesitaba más y no quería esperar.
Conocía su cuerpo mejor que el mío, y lo único que le 190
proporcionaría un placer instantáneo; doblé mis dedos hacia abajo y
rocé el suave bulto de su glándula prostática y Finn gritó en la
habitación vacía.
—¡Allí! ¡Oh, jode Harley, ahí, por favor! —Se empaló nuevamente
en mis dedos mientras yo me frotaba contra su punto dulce. Le
gustaba tener el control, pero no podía evitar perseguir su placer. No 03/2020
me importaba; solo quería que se sintiera bien.
—¿Te gusta eso? —Pregunté, presionando más firmemente. —¿Te
gustan mis dedos dentro de ti haciéndote sentir bien?
—¡Sí! Oh, joder, sí, se siente increíble. —Finn se balanceó más
rápido de un lado a otro, trabajando en un frenesí mientras su
respiración se aceleraba. Sin previo aviso, saqué mis dedos de su
trasero. Finn continuó arrastrando el aire por unos momentos hasta
que sus caderas se detuvieron. —Harley, ¿por qué dejaste de hacerlo
bebé? Por favor necesito-
Sus palabras se convirtieron en un largo gemido cuando lo agarré
por las caderas, alineé mi punta con su agujero y rodé mi estómago,
enterrando mi polla dentro de él. La repentina dicha de su dulce calor
rodeándome hizo que mis ojos se cruzaran. Respiré hondo y sacudí la
cabeza, librándome de la sensación abrumadora.
 Una vez que pude ver claramente, apreté y enrosqué mi abdomen,
cayendo a un ritmo constante.
—Tan apretado para mí, —jadeé, mirando con asombro cómo el
pequeño y chico agujero de Finn se estiraba a su capacidad para
tomar mi circunferencia cada vez que me hundía dentro de él. Era
una lucha de la que nunca me cansaría de ver.
—Eres tan grande, —insistió, inflando mi ego hasta el infierno. —Te
sientes increíble.
—Estoy empezando—. Apreté con fuerza sus caderas y golpeé su 191
cuerpo contra mí mientras empujaba mis bolas dentro de él. Nuestra
piel se abofeteó mientras lo montaba lo más fuerte y rápido posible.
—Te gusta cuando soy un poco rudo, ¿no? ¿Cuando tomo el control
de este hermoso cuerpecito?
Finn solo respondió gritando la palabra “Mierda” una y otra vez
mientras golpeaba en él. Mi hombre estaba al borde y quería que él 03/2020
se lanzara. No sé qué me pasó, pero cuando me estrellé contra él una
vez más, liberé una mano de su cadera y la bajé a su mejilla con un
chasquido.
Finn echó la cabeza hacia atrás y gritó al techo y su agujero se
apretó alrededor de mi polla. La presión fue exquisita mientras
continuaba sacudiéndome.
—Me acabas de hacer venir por todo el piso sin siquiera tocar mi
polla, —anunció Finn en un tono jadeante.
Oh, joder sí. Ese conocimiento fue suficiente para llevarme al límite.
Mis bolas rodaron y se elevaron hacia mi cuerpo. Empujé una vez más
y gruñí al soltar una corriente de cálida semilla en el ansioso agujero
de mi amante.
 Más allá de respirar, ninguno de nosotros se movió por unos
minutos. De repente, Finn se derrumbó sobre su estómago, saliendo
de mi suave polla en el proceso.
—¿Estás bien? —Pregunté rápidamente.
—Nop. Fue demasiado bueno; creo que me mataste—. Se dio la
vuelta y me dio una sonrisa de satisfacción. —¿Sin embargo, está
bien; muerte por una polla es como siempre he querido ir?
Solté una carcajada y le ofrecí una mano.
—Creo que lo hace sonar como una de las maneras más agradables 192
de morir.
Finn se incorporó sobre las piernas temblorosas e inmediatamente
se sentó a horcajadas sobre mi regazo, enterrando sus manos en mi
cabello.
—Agradable no comienza a describirlo. Mierda, bebé; eso fue muy
caliente. 03/2020
No pude detener la sonrisa orgullosa que cruzó mis labios.
—Supongo que te gusta cuando me pongo un poco duro.
Finn asintió con los ojos muy abiertos.
—Me encanta—. Me reí entre dientes y su expresión se transformó
en una sonrisa. —También me encanta cuando eres lento y gentil, o
cuando nos chupamos en la ducha, o cuando me sacudes hasta que
me roció sobre ti. Me encanta todo lo que hacemos, Harley.
—A mí también, cariño—. Le di un beso suave a sus labios y envolví
mis brazos alrededor de su cintura. —Sabes, me ha encantado
nuestra luna de miel; elegiste un lugar increíble e hiciste un trabajo
asombroso al planearlo—. Finn sonrió ante mis elogios. —Pero lo que
lo hizo tan genial fue tenerte aquí conmigo. No necesito una playa
soleada o agua tibia; eres mi paraíso, Finn—. Ahí está. Eso fue todo; lo
más cursi que creo haber dicho en mi vida. Y mi marido parecía que
estaba a punto de morir de felicidad. Supongo que como no lo
terminé con mi polla, esa fue la segunda mejor opción.
—Tú también eres mi paraíso, —respondió Finn con voz
temblorosa. —Tu amor es todo lo que necesito en la vida.
—Y lo tendrás para toda tu vida, —prometí.
—También tendrás el mío para toda tu vida, —susurró Finn. —Mi
amor, mi corazón, mi cuerpo... todo de mí.
Finn presionó sus labios contra los míos y caímos en una sesión de
besos por todas las edades. Vertí todo lo que era en ese beso. Con 193
cada roce de nuestras lenguas o mordisqueando nuestros labios, mi
corazón se llenó más. Estaba más feliz de lo que jamás había soñado,
con un hombre más perfecto de lo que nunca imaginé que existía. Él
era mi paraíso, mi amante, mi protector, mi mejor amigo... y 'lo
amaría más' todos mis días.
03/2020

FIN
 SOBRE EL AUTOR

¡Gracias por leer “De Cabeza Sobre Ruedas 2”! Si te ha gustado el

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Marx. 194

03/2020
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03/2020

Es de fans para fans y no recibimos ninguna compensación

económica por las traducciones que realizamos.
Espero que les guste.
Y no olviden comprar a los autores, sin ellos no
podríamos disfrutar de estas maravillosas historias