Cada 5 de diciembre se celebra El Día Mundial del Suelo como un medio
para centrar la atención en la importancia de un suelo sano y abogar por la gestión sostenible de los recursos del suelo. Este año El Día Mundial del Suelo tiene como tema: Suelo y agua, fuente de vida. El objetivo es crear conciencia sobre la importancia y la relación entre el suelo y el agua para lograr sistemas agroalimentarios sostenibles y resilientes. La supervivencia de nuestro planeta depende del precioso vínculo entre el suelo y el agua. Más del 95 por ciento de nuestros alimentos proviene de estos dos recursos fundamentales. El agua del suelo, vital para la absorción de nutrientes por las plantas, une nuestros ecosistemas. Esta relación simbiótica es la base de nuestros sistemas agrícolas. Sin embargo, ante el cambio climático y la actividad humana, nuestros suelos se están degradando. Entre las causas antropogénicas más habituales de la contaminación del suelo, se destacan la industria, la minería, las actividades militares, la gestión de desechos —aquí entra la basura tecnológica— y aguas residuales, la agricultura, la ganadería y la construcción de infraestructuras urbanas y de transportes. lo que ejerce una presión excesiva sobre nuestro suelo y los recursos hídricos. La erosión altera el equilibrio natural, reduciendo la infiltración de agua y su disponibilidad para todas las formas de vida. Los suelos contaminados afectan los alimentos, el agua, al aire que respiramos, nuestra salud y la de todos los organismos del planeta. Sin suelos sanos no podríamos producir nuestros alimentos. Las prácticas sostenibles de manejo del suelo, como la labranza mínima, la rotación de cultivos, la adición de materia orgánica y los cultivos de cobertura, mejoran la salud del suelo, reducen la erosión y la contaminación y mejoran la infiltración y el almacenamiento del agua. Estas prácticas también preservan la biodiversidad del suelo, mejoran la fertilidad y contribuyen al secuestro de carbono, desempeñando un papel crucial en la lucha contra el cambio climático. Concluyo esta reseña con la siguiente frase: «Olvidar cómo cavar la tierra y cuidar el suelo es olvidarnos de nosotros mismos». Mahatma Gandhi.