Jueves Santo

“... y nos vinculan en comunidad de

hermanos.”
 Jueves Santo
4,30 - INTRODUCCIÓN

ORACIÓN EN COMÚN:
Solo quiero cantar a tantos hombres
que trabajan por un mundo mejor.
Solo quiero tejer en mil colores
la vida con mil voces en canción.
Una canción que anime la esperanza
de un camino surcado por dolor
una canción que devuelva confianza
a la gente sin manos y sin voz.
Somos muchos caminando por la vida
juntando nuestra fe y corazón,
el camino recorrido es solidario
porque juntos soñamos el futuro,
el camino recorrido es solidario
porque juntos tejemos el amor.
CANTO
COMO EL PADRE ME AMÓ, YO OS HE AMADO
PERMANECED EN MI AMOR, PERMANECED EN MI AMOR.
Y si quieres sentir el gozo inmenso
del que sabe estar cerca del sol
hazte hermano y camina sonriendo
tiñendo la amargura con color.
Y si quieres sentir el gozo inmenso
del que sabe estar cerca del sol
hazte hermano y camina sonriendo
tiñendo la amargura con color.
Y si quieres gozar la vida buena
conseguir para tu vida una razón
camina solidario por las calles
atento al que te pide el corazón,
atento al que te pide el corazón y dáselo.
Y si quieres soñar algo distinto
tus manos únelas en rededor
y tu voz lánzala a los vientos
y denuncia y anuncia por el mundo

Si guardáis mis palabras y como hermanos os amáis No veréis amor tan grande cómo aquel que os mostré.
compartiréis con alegría el don de la fraternidad. Yo doy la vida por vosotros. Amad cómo yo os amé.
Si os ponéis en camino sirviendo siempre la verdad, Si hacéis lo que os mando y os queréis de corazón,
fruto daréis en abundancia, mi amor se manifestará. compartiréis mi pleno gozo, de amar como El me amó.

LECTURA: Juan 15, 9-15

PRESENTACIÓN E INTRODUCCIÓN A LA PASCUA

SALMO PARA “DAR LA VIDA”

Nadie tiene amor mayor que este
Señor, danos la valentía de arriesgar la vida por ti, de dar la vida por sus amigos.
el gozo desbordante de gastarnos en tu servicio. (Jn 15, 13)
Danos, Señor, alas para volar y pies para caminar
al paso de los hombres.

Entrega, Señor, entrega, para “dar la vida”

desde la vida, la de cada día.
Infúndenos, Señor, el deseo de darnos y entregarnos,
de dejar la vida en el servicio a los débiles.

Señor, haznos constructores de tu vida,

propagadores de tu reino,
ayúdanos a poner la tienda en medio de los hombres
para llevarles el tesoro de tu amor salvifico.

Haznos, Señor, dóciles a tu Espíritu

para ser conducidos a dar la vida desde la cruz,
desde la vida que brota
cuando el grano muere en el surco. Amen.
“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

CANTO:

Felices somos en la pobreza

si en nuestras manos hay amor de Dios,
si no abrimos a la esperanza,
si trabajamos por hacer el bien.
Felices somos en la humildad,
si cómo niños sabemos vivir.
Será nuestra heredad la tierra, la tierra.

SI EL GRANO DE TRIGO NO MUERE EN LA TIERRA

ES IMPOSIBLE QUE NAZCA FRUTO.
AQUEL QUE DA SU VIDA PARA LOS DEMÁS
TENDRÁ SIEMPRE AL SEÑOR.

Felices somos si compartimos

si nuestro tiempo es para los demás,
para quien vive en la tristeza
y para quien camina en soledad.
Felices somos si damos amor,
si en nuestras manos hay sinceridad,
podremos siempre mirar y ver a Dios, y ver a Dios.

PRESENTACIÓN DEL JUEVES SANTO

ORACIÓN Y REFLEXIÓN PERSONAL

Busca un lugar retirado, silencioso, piensa en que quieres encontrarte con Jesús, que está sentado a tu lado.
Salúdale con esta oración:

Quiero callar un momento Quiero ver tu rostro

y acallar el torbellino de mis ideas y y darte la mano.
sentimientos Quiero conocerte por dentro,
para estar ante ti con todo mi cuerpo no sólo con mi cabeza,
de tú a tú. sino también con mi corazón.
Quiero vaciar mi casa Quiero conocer tu corazón con mi corazón
y hacer un silencio profundo y darte la mano de la confianza total.
para apartarme de todo Quiero caminar hacia ti,
y tenerte a tí con todo mi ser y contigo hacia todos los hombres,
de tú a tú. con todo mi cuerpo,
Quiero estar sólo contigo con toda mi cabeza,
para marchar luego al encuentro de todo con todo mi corazón.
y comprometerme todo entero Quiero que seas el centro de mi vida,
con todos para alcanzar la verdadera vida.
de tú a tú.

Piensa que Jesús “veía la cosas muy negras”, estaba casi seguro de que en la Pascua Judía, en Jerusalem, era
posible que pasara algo; ya le buscaban desde hacia tiempo. Si acudía allí, era como meterse “en la boca del
lobo”. Pero ya no hay vuelta atrás. Jesús es consecuente con su vida, seguirá anunciando y denunciando ...
 Jueves Santo
Lee estos tres testimonios, tratando de ver, al igual que Jesús, que sienten, que “mueve” a estos hombres y
mujeres, ...

MARTÍN LUTHER KING

“... Me gustaría que alguien contase, en el día de mi muerte, que Martín Luther King trato de
vivir en el servicio a su prójimo. Me gustaría que alguien dijera aquel día que Martín Luther
King trato de amar a alguien.

Ese día quiero que podáis decir que trate de ser justo y que quise caminar junto a los que
actuaban en justicia, que puse mi empeño en dar de comer al hambriento, que siempre traté de
vestir al desnudo. Quiero que digáis ese día que dedique mi vida a visitar a los que sufrían en las
cárceles. Y quiero que digáis que intente amar y servir a los hombres.

Si, y ... si queréis también que fui un heraldo. Decid que fui un heraldo de la justicia. Decid que
fui un heraldo de la paz. Que fui un heraldo de la equidad.Y todas las otras cosas superficiales no
tendrán importancia.

No tendré dinero para dejar cuando me vaya. No dejare tampoco las comodidades y los lujos de
la vida. Porque todo lo que quiero dejar a mi partida es una vida de entrega.

Y eso es lo que os tengo que decir: Si a alguien pude ayudar al encontrarnos a lo largo del
sendero, si a alguien pude alegrar con una canción, si a alguien pude hacerle ver que había
cogido el mal camino, entonces mi vida no habrá sido en vano. Si consigo cumplir mis deberes
tal como debe cumplirlos un cristiano, si consigo llevar la salvación al mundo, si consigo
difundir el mensaje que enseño el Maestro, entonces mi vida no habrá sido en vano”.

MONSEÑOR OSCAR ROMERO

“ He sido frecuentemente amenazado de muerte. Debo decirle que, como cristiano, no creo en la muerte sin
resurrección: Si me matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño. Se lo digo sin ninguna jactancia, con la mas
grande humildad.

Como pastor, estoy obligado por mandato divino a dar la vida por quienes amo, que son todos los
salvadoreños, aún por aquellos que vayan a asesinarme. Si llegaran a cumplirse las amenazas, desde ahora
mismo ofrezco a Dios mi sangre por la redención y por la resurrección de El Salvador. El martirio es una
gracia de Dios que no creo merecer. Pero si Dios acepta el sacrificio de mi vida, que mi sangre sea semilla de
libertad y la señal de que la esperanza será pronto una realidad.

Mi muerte, si es aceptada por Dios, sea por la liberación de mi pueblo y como un testimonio de esperanza en
el futuro. Puede usted decir, si llegasen a matarme, que perdono y bendigo a quienes lo hagan.

Ojalá, así, se convencieran de que pierden su tiempo. Un Obispo morirá, pero la Iglesia de Dios, que es el
pueblo, no perecerá jamás”.

MADRE TERESA DE CALCUTA

“Muy a menudo en las calles de Calcuta recogemos a los enfermos y a los moribundos abandonados. Lo
hacemos todos los días y, a lo largo de estos 25 años, hemos recogido a mas de 36.000 en las calles. Mas de
18.000 han muerto con nosotros una muerte hermosa. Cuando les recogemos en la calle, moribundos, les
damos un plato de arroz y pronto se sienten mejores. Hace unas pocas noches (las Hermanas trabajan de noche
también), recogimos a cuatro personas en la calle. Una de las personas estaba en una condición terrible. Estaba
cubierta de llagas y el cuerpo lo tenia lleno de gusanos. Dije a las Hermanas que yo me cuidaría de ella; que se
ocuparan ellas de las otras tres. Hice verdaderamente por ella todo lo que mi amor me inspiraba. Le puse en la
cama y ella me tomo de la mano. ¡Tenía una sonrisa tan hermosa!. Sólo me dijo una palabra: “¡Gracias!”, y
murió. ¡Había tanta grandeza en el amor!. Tenia hambre de amor y ella recibió este amor antes de morir. Y la
única palabra, su amor, un amor tan comprensivo, se expreso en aquella palabra”.

“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

Jesús entregó su vida, todo lo que tenia, todo lo que era, por las personas que se cruzaron en su camino.
Muchas otras personas que no conocemos, en muchos rincones del mundo, también.

Me pregunto ¿Doy mi vida: dedico tiempo, inteligencia, y capacidades a hacer algo por los demás? ¿que
puedo aportar? ¿me acuerdo de que hay personas que sufren? ¿me pregunto qué puedo hacer por las personas
que tengo cerca: amigos, familia, compañeros de grupo, personas con quien convivo?.

Doy gracias por todas las personas que aman desinteresadamente; yo también me siento llamado/a a contribuir
con ellos. Reza esta oración:

Mantener siempre atentos los oídos

al grito del dolor de los demás
y escuchar su llamada de socorro,
es solidaridad.
Mantener la mirada siempre alerta
y los ojos tendidos sobre el mar
en busca de algún naufrago en peligro,
es solidaridad.
Sentir como algo propio el sufrimiento
del hermano de aquí y de allá,
hacer propia la angustia de los pobres,
es solidaridad.
Llegar a ser la voz de los humildes,
descubrir la injusticia y la maldad,
denunciar al injusto y al malvado,
es solidaridad.
Dejarse transportar por un mensaje
cargado de esperanza, amor y paz,
hasta apretar la mano del hermano,
es solidaridad.
Convertirse uno mismo en mensajero
del abrazo sincero y fraternal
que unos pueblos envían a otro pueblos,
es solidaridad.
Compartir los peligros en la lucha
por vivir en justicia y libertad
arriesgando en amor hasta la vida,
es solidaridad.
Entregar por amor hasta la vida
es la prueba mayor de amistad
es vivir y morir con Jesucristo,
es solidaridad.

Jesús, a veces sentimos que no sabemos que hacer, como ayudar o aportar; pero eso no te importa, lo que
cuenta es echar a andar, querer caminar al lado de los demás, compartir lo que somos... como Tu caminaste
por tantos lugares, encontrando a tantos al borde de los caminos ... como caminabas hacia Jerusalem ...

Lee este texto, haciendo referencia a cómo puedes vivirlo tu en lo concreto ...

Yo no he caminado mucho en mi vida. Siempre he

Cuando pienso en los pobres, la primera imagen
que me viene a la mente es la de hombre y mujeres
avanzando por el borde de la carretera y cargados
con pesados fardos. Recuerdo haberles visto
dirigiéndose, a primera horas de la mañana, hacia
el mercado o hacia alguna aldea, esperando poder
vender o comprar algo, encontrar trabajo o, tal
vez, encontrarse con alguien que les diera lo
suficiente para poder salir adelante un días mas.
Recuerdo también haberme sentido culpable de ir
en coche mientras tantas personas caminaban
penosamente, unas veces descalzas, otras con unas
míseras sandalias.
He visto a tales personas por los polvorientos
caminos de Bolivia, Perú y Guatemala, y aun sigo
viéndolas en mi interior. Los pobres caminan por
los bordes de las carreteras de nuestro mundo,
llevando pesadas cargas y tratando de sobrevivir.
dispuesto de aviones, trenes, coches y autobuses
para ir de un lado a otro. Mis pies no han tenido
demasiado contacto con el polvo de la tierra;
siempre ha habido ruedas que me han hecho la
vida mas fácil. Tampoco en mi mundo hay
demasiadas personas que se vean obligadas a
caminar; ni siguiera es fácil encontrarse a alguien
a quien preguntarle por una dirección. En mi
mundo, la gente se traslada de un lugar a otro
encerrada en sus cubiculos móviles mientras
escucha su “cassette” favorita, y sólo de vez en
cuando se encuentra con otra gente en los
aparcamientos, en los supermercados o a la salida
del restaurante.
Pero Jesús caminaba, y todavía sigue haciéndolo.
Jesús camina de pueblo en pueblo y, mientras lo
hace, se encuentra con los pobres, con los
mendigos, con los ciegos, con los enfermos, con
los que lloran y con los que han perdido la
esperanza. Sigue estando muy cerca de la tierra.
Sigue sintiendo el calor del
Jueves Santo
día y el frío de la noche. Sabe como la hierba se
agosta y se marchita, conoce los suelos
pedregosos, los arbustos espinosos, los arboles
resecos ..., y también las flores del campo y las
cosechas abundantes. Lo conoce porque camina
mucho y siente en su propio cuerpo la severidad y
el esplendor de las estaciones. Escucha
atentamente a aquellos junto a quienes camina, y
les habla con la autoridad de un verdadero
compañero de viaje. Es austero y, sin embargo,
sumamente compasivo; claro y directo y, sin
embargo, dulce y gentil; exigente y, sin embargo,
misericordioso; inquisitivo y, sin embargo,
enormemente respetuoso. Su bisturí
es incisivo, pero él lo maneja con mano experta y
delicada; si corta, es únicamente para sanar; si
extirpa, es solo para hacer posible la regeneración.
Jesús esta profundamente conectado con la tierra
sobre la que camina. Observa las fuerzas de la
naturaleza, aprende de ellas, las aprovecha para
enseñar, y revela que el Dios de la Creación es el
mismo Dios que le envío a él a anunciar la Buena
Nueva a los pobres y a devolver la vista a los
ciegos y la libertad a los cautivos.
Los pobres que caminan por el borde de las
carreteras, los desiertos y los lugares inhóspitos de
este mundo me invitan a la humildad (derivado del
latín “humus”, que significa tierra o suelo). Yo
suelo contemplar las nubes y soñar despierto con
un mundo mejor. Pero mis sueños nunca darán
fruto, a no ser que sepa volver mis ojos una y otra
vez a la
Yo también quiero poner la suficiente sencillez como para arrodillarme y lavar los pies; para ser cercano y
compartir lo que soy en mi compromiso, para cuidar de los que tengo cerca ...
... y también para reconocer que necesito de mis compañeros de grupo, de mis amigos, de mi familia, de mis
hermanos con los que convivo ... les necesito ... quiero lavarles los pies y necesito que laven los míos ... quiero
hacer, pero primero he de aprender a dejarme cuidar por ellos ... Reza esta oración:
Cuando tuve hambre me diste comida.
Cuando tuve ser me diste de beber.
Cuando estaba intranquilo calmaste mis penas.
Cuando era niño me enseñaste a leer.
Cuando estaba sin casa abriste tus puertas.
Cuando estaba desnudo me diste tu manto.
Cuando estaba cansado me ofreciste reposo.
Cuanto estaba solo me trajiste el amor.
TU SIEMPRE SERÁS MI HERMANO,
TU SERÁS MI HERMANO.
tierra y a quienes caminan y se fatigan sobre ella y
me invitan a acompañarles. Pero ¿que significa
caminar con los pobres? Significa reconocer la
propia pobreza: la propia y profunda imperfección,
la propia fatiga, la propia impotencia, la propia
mortalidad. Solo así estaré conectado con la tierra
y seré verdaderamente humilde. Sólo así podré
hacerme solidario de todos cuantos caminan por la
tierra y descubrir que también yo soy amado como
una persona frágil y, sin embargo, de inmenso
valor.
Antes de que se iniciara su pasión, Jesús,
“sabiendo que había salida de Dios y a Dios volvía
..., tomando una toalla... se puso a lavar los pies de
los discípulos” (Jn 13, 3-5). La Palabra se hizo
carne para lavar mis pies cansados. Me toca
precisamente en aquella parte de mi cuerpo con la
que yo toco el suelo, donde la tierra entra en
contacto con mi cuerpo, que ansia el cielo. Se
arrodilla, toma con sus manos mis pies y los lava.
Luego me mira, sus ojos se encuentran con los
míos, y me dice: ¿Comprendes lo que he hecho
contigo? Si yo, tu Señor y Maestro, te he lavado
los pies, también tu debes lavar los pies a tus
hermanos y hermanas” (Jn 13, 12-14).
Mientras recorro el largo y duro trayecto hacia la
cruz, debo hacer un alto en el camino para lavar
los pies de mis prójimos. Y cuando me arrodillo
ante mis hermanos y hermanas, lavo sus pies y
miro a sus ojos, descubro que es únicamente por
causa de ellos, mis hermanos y hermanas que
caminan conmigo, por quienes puedo recorrer el
camino.
TE LO DICE JESÚS.
Cuando estaba en la cárcel viniste a mi celda.
Cuando yo estaba en cama tu me cuidaste.
En país extranjero, tu me acogiste.
Cuando fui torturado, tu llevaste mi cruz.
Cuando estaba parado me encontraste trabajo.
Fui herido en combate, vendaste mis heridas.
Yo buscaba bondad, me tendiste la mano.
Fuera negro o blanco, eso nunca importo.
(Madre Teresa de Calcuta)
“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

Piensa en tu grupo, tu comunidad, aquellos con quienes compartes la fe, quienes te conocer y cuidan de ti; sois
el grupo de los doce, seguís a Jesús, queréis seguirle juntos: sois amigos y hermanos en El.

Lee este texto, y medita si has tenido experiencia de ellos, si deseas que sea así ...

AMIGOS Y HERMANOS EN JESUCRISTO

Hoy, en este contesto de la Pascua, quisiera adentrarme en el tema de la amistad; de la amistad

que nos une en cuanto a ser hermanos, discípulos de Jesús. Que significa ser amigos-hermanos
en la fe de Jesucristo.

Veo ante todo, tres rasgos importantes:

 La amistad es una relación.

 Que supone un compromiso común
 Y una fe compartida

La amistad es, ante todo, una relación

Es una relación de afinidad y un encuentro que, para nosotros creyentes, hunde su raíz en un
Amigo y en un proyecto común. Este horizonte común es muy importante, pues es el que nos
lleve a buscar juntos, crear juntos y compartir una misma experiencia, capaz de unirnos mas
allá de nuestra diferencias. De esta Amistad con mayúsculas deduzco dos cosas:

- Jesús nos ha querido agrupar alrededor suyo.

- El encuentro entre nosotros nos libera, nos ayuda a crecer como personas (como personas de
fe)

Los discípulos que acompañan en estos días a Jesús, le siguen juntos; juntos se decepcionan de
este Jesús que no responde a lo que esperaban de él; juntos también le buscaran y le descubrirán
resucitado. El Señor es quien les une en todo ello, quien les da una nueva oportunidad, ...

Ser amigos en la fe de Jesús supone no solo una amistad de empatía, ... hay un contenido más
profundo ... un contenido liberador. La amistad a la que Jesús nos llama hunde su raíz en El;
supone una relación que nace desde el evangelio y que es capaz de dar luz a los que tenemos
cerca.

Crecer en sensibilidad, en acogida, en transparencia, en donación y en fraternidad; ayudarnos

mutuamente a crecer en todo ello -lo que aparece en el evangelio como ser amigos- ... “Os
llamo amigos”, dice el Señor; en vuestros corazones esta la Buena Nueva, y tenéis en común
conmigo una misma voluntad y una misma pasión: trabajar por el Reino y su justicia, ...

La amistad supone un compromiso común

En estos tiempos de fuerte individualismo, para salvar la amistad, es preciso trabajar juntos con
un compromiso común. Los valores de la amistad (la confianza, la comprensión, la escucha y la
comunicación, la preocupación por el otro mas que si mismo, ...) aportan en nuestra sociedad
luz a situaciones concretas de injusticia y de pecado. La amistad es el soporte humano de la
lucha y el sufrimiento en nuestro compromiso. El sufrimiento compartido ayuda, en muchos
casos, a crear una firme amistad. También los que seguían a Jesús sufrieron mucho juntos ...
Habían luchado por cambias las cosas, pero todo parecía seguir igual; la vida y el proyecto de
Jesús es la historia de un fracaso. El
 Jueves Santo
sufrimiento de aquellos amigos-seguidores de Jesús los unía en la dificultad y, asimismo, les
unía al sufrimiento y dificultad de tantos pobres de su tierra.

En medio de la decepción, todavía les quedaba una chispa de fe, de la que el Señor se
aprovecha para mostrarles el verdadero sentido de su tarea juntos; Jesús les enseña a dar la vida;
sólo el que ama hasta el final, puede resucitar en la Pascua. Solo en el amor entregado crece y
se hace sólida la amistad cristiana.

El Espíritu de Jesús los hace Amigos, para poder salir a los caminos a anunciar el Reino y crear
grupos de seguidores de Jesús. Aunque se separen, el tiempo o la distancia no hace pequeña su
amistad. Cada uno trabajara en su lugar, y el fuego encendido en el corazón los unirá para
siempre.

La Amistad supone una fe compartida

Jesús nos hace Amigos, nos hace hermanos suyos, con un Padre común. Hemos de volver
siempre nuestro corazón y nuestro afecto a este Jesús; solo así podremos seguir siéndolo.

Sólo desde la especial relación con Jesús, una relación intima; solo el Señor puede garantizar
nuestra Amistad.

Sólo así buscamos el bien del Amigo que tenemos cerca y el bien común para todos.

Jesús está allí donde los Amigos-seguidores de Jesús acogen, escuchan, comparten y aman. El
compartir la Palabra y contrastarnos con ella; el compartir la mesa de la Eucaristía; todo ellos
nos une; Jesús nos une.

También los discípulos, unidos por la Palabra de Jesús y el recuerdo de la ultima cena, tienen el
recuerdo VIVO de Jesús en el corazón. Jesús PERMANECE con ellos.

Para crecer en Amistad Verdadera, es preciso compartir nuestra relación personal con Jesús.
Cada uno somos responsables de que los que tenemos al lado hagan crecer a Jesús en su
corazón. De la mano de Jesús todo se vuelve entrañable, ya no existen el miedo ni la duda.

Oremos juntos, compartamos nuestra experiencia de Jesús, para ayudarnos y sostenernos unos a
otros, para crecer juntos desde nuestro Amigo común; en nuestros grupos, en nuestras
comunidades, en nuestras parroquias, con otros creyentes ... Que el Espíritu de Jesús nos
mantenga siempre Amigos y Hermanos, para poder trabajar por crear el mundo que Dios
quiere.

Jesús es el que nos une, aun siendo tan distintos; como a los doce en aquella cena, tan diferentes unos de otros;
Jesús les hizo hermanos en el compromiso, en la dificultad y en la alegría de encontrarle y seguirle resucitado.
“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

Piensa en cada uno de tus Amigos-Hermanos del grupo, de la comunidad, de las personas con quienes
compartes tu fe en Jesús ... da Gracias a Dios por contar con ellos, porque son hoy tus compañeros de camino.
Reza esta oración:

Ayúdame, hermano a ser humilde.

Ten misericordia de mi y muéstrame
lo que Dios va haciendo con tu vida.

Te prometo acoger y escuchar

tus pasos y tus caídas, tus ternuras y tus rechazos,
tu alegría y tu dolor.

Quiero ser menos yo y mas hermano,

porque quiero descender hasta donde
se encuentra lo mas humano,
lo profundamente humano.
Me han dicho que allá se encuentra Dios.

Búscame cuando me pierda.

Te prometo volver de tu mano, cada día.
a casa para amarte sirviéndote mas,
compartiendo juntos el pan compañero.

Cuando veas brillar en mis ojos

la soberbia y la altanería
y mi boca se llene de palabras vacías,
no apartes de mi tu mirada tierna pero vigorosa,
no dejes de comunicarme la esperanza.

Confía en mi que aprenderé de ti.

¡Que Dios te lo pague, hermano!

Hoy Jesús nos une alrededor de su mesa, y agradecemos el compartir la Pascua juntos, seguidores y hermanos
de Jesús. En grupos prepararemos la eucaristía; pienso para poner en común: ¿que he rezado este rato, que es
lo que he pensado, que quiero compartir con vosotros?.

7 - PUESTA EN COMÚN POR GRUPOS Y PREPARACIÓN DE LA EUCARISTÍA

 Jueves Santo
8 - CELEBRACIÓN

INTRODUCCIÓN

CANTO
Si tu desatas los lazos que esclavizan,
si tu liberas a tu hermano encadenado,
la noche del camino será luz de mediodía,
la noche del camino será luz de mediodía.
ENTONCES DE TI BROTARA UNA FUENTE,
LA FUENTE QUE DA VIDA A LA TIERRA DE MAÑANA,
LA FUENTE QUE DA VIDA A LA TIERRA DE DIOS.

Si tu compartes el pan que Dios te da

con todo aquel que es tu propia carne
la noche de tu amor será luz del mediodía,
la noche de tu amor será luz de mediodía.
Y DE TU CORAZÓN NACERÁ AGUA VIVA,
EL AGUA QUE SACIE LA TIERRA DE MAÑANA,
EL AGUA QUE SACIE LA TIERRA DE DIOS.

LITURGIA DEL PERDÓN

LITURGIA DE LA PALABRA

1ª Lectura: Éxodo 12, 1-8, 11-14

LA BONDAD Y EL AMOR DEL SEÑOR,
DURAN POR SIEMPRE,
DURAN POR SIEMPRE.

2ª Lectura: I Corintios 11, 23-26

HOY COMIENZA UNA NUEVA ERA,

LAS LANZAS SE CONVIERTEN EN PODADERAS,
DE LAS ARMAS SE HACEN ARADOS,
Y LOS OPRIMIDOS SON LIBERADOS.

Evangelio: Juan 13, 1-15

LAVATORIO DE LOS PIES

EN ESTO CONOCERÁN
QUE SOIS MIS AMIGOS,
SI OS AMÁIS LOS UNOS A LOS OTROS
COMO YO OS HE AMADO.
HOMILÍA

“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

LITURGIA EUCARÍSTICA

Presentación de Ofrendas

Te ofrecemos este nuevo día

y el deseo inmenso de vivir,
acéptalo, Señor, nuestra vida está
puesto en nuestras manos, esperándote.
Esperando tu vuelta, Señor.

Acepta, Señor, nuestro trabajo

y esta lucha diaria por vivir,
y el fruto de la tierra que brota con amor
y este pan que ahora nos va a alimentar.
Este pan que muchos no tendrán.

Para algunos los días solo pasan,

para algunos estos días pesan
regar de sol a sol, tragando su sudor,
pobre rey del mundo, corona de sal.
Acepta, Señor, nuestro dolor.

Te ofrecemos nuestras esperanzas

por lograr un mundo donde estar,
tus pobres se levantan,
tu pueblo en lucha está.
Nadie se acomode, el Señor vendrá.

ACEPTA NUESTRO RIESGO DE VIVIR.

Plegaria Eucarística

S - Alabado seas, Dios y Señor de cuanto vive. Alabado seas también porque con nuestra sincera profesión de
fe podemos depositar nuestra confianza en Ti. Recordamos tus palabras: “Donde dos o tres se reúnen en mi
nombre allí estoy yo en medio de ellos”; y ahora te pedimos: envía tu Espíritu sobre nosotros y sobre estos
dones, un bocado de pan y una copa de vino. Que nuestros dones sean cuerpo y sangre de Jesús.

T - Señor, Dios nuestro, congregados aquí en torno tuyo recordamos la antigua historia que narramos a lo
largo de los siglos: la historia de Jesús de Nazaret, un hombre que a Ti, Señor, se atrevió a llamarte “Abba”,
Padre, y nos enseño a repetir ese nombre.
 Jueves Santo
S - Dios y Padre nuestro, te damos gracias por este hombre que transformo la faz de la tierra desvelando una
grandiosa visión: el Reino de dios que un día vendrá, un Reino de libertad, de amor y de paz, tu Reino,
plenitud de tu creación. Por eso te cantamos llenos de jubilo:

SANTO EL SEÑOR, DIOS DEL UNIVERSO,

SANTO EL SEÑOR, DIOS DEL UNIVERSO,
SANTO EL SEÑOR, DIOS DEL UNIVERSO,
SANTO ES EL SEÑOR.
HO, HO, HO, ... SANNA EN EL CIELO
HO, HO, HO, ... SANNA EN EL CIELO
HO, HO, HO, ... SANNA EN EL CIELO
HOSANNA.

BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR,

HOSANNA QUE LLEGA EL HIJO DE DAVID.
BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR,
BENDITO ES EL SEÑOR.

T - Recordamos, Señor, que por donde pasaba Jesús, los hombres descubrían su humanidad, se colmaban de
una nueva riqueza y, con el alma renovada se entregaban al servicio del prójimo.

Recordamos, Señor, como hablo a los hombres de una dracma perdida, de una oveja descarriada, de un hijo
prodigo: de los que extraviados, ya no cuentan, lejos de la mirada y del corazón; de todos los pequeños y los
pobres, sin libertad, sin nombre, sin cariño.

S - Recordamos, Señor, que El fue en busca de todos ellos, de los hartos de tristeza y hambrientos de calor;
que siempre tomo partido por ellos sin olvidarse de los demás.

T - Aquello le costo la vida, porque los poderosos de la tierra no lo toleraron. Pero, Dios bondadoso y Padre
omnipotente, El sabia que Tu lo comprendías y aceptabas, se vio confirmado por Ti en el amor. Y así llego a
ser una sola cosa contigo y pudo, liberado de si mismo, vivir para la liberación de los demás.

S - Recordamos también que El, que tanto nos amo y fue uno contigo, su Padre de bondad, en la ultima noche
de su vida en la tierra tomo el pan en sus santas manos, ...

T - Cuando comemos juntos este pan y bebemos juntos de esta copa, lo hacemos en memoria de El, tu Hijo y
hermano nuestros, el hombre libre servidor y liberador de todos nosotros, ahora y siempre, mas allá de la
muerte.

S - Por eso, recordamos también a todos los que ya no están con nosotros, a todos los que tanto hemos
amado, ... Padre Nuestro, no podemos creer que todo lo que ellos han sido para nosotros haya desaparecido sin
remedio. Tu eres su vida, ahora y siempre.

T - Y tenemos un recuerdo para el mundo, para los que amamos en la vida. También para los poderosos, los
que disponen del destino de los hombres a menudo sin contar con ellos, para los que dirigen el mundo y la
Iglesia.

S - Ayúdalos y ayúdanos, para que podamos hacer de esta tierra una morada mejor, para que reine la paz entre
nosotros y seamos una sola cosa, como Tu, Padre, lo eres en tu Hijo y El en ti.

T - Envía, pues, tu Espíritu sobre nosotros y sobre estos dones, el Espíritu de bondad que procede de Ti y de tu
Hijo para que nos anime y ayude a seguir a Jesús: ese Jesús que nos ha enseñado a ser libres de cuanto nos
aliena, a ser libres para hacer el bien.

POR CRISTO, CON EL Y EN EL ....

Padrenuestro

Abrazo de paz
“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

Comunión
El Señor Dios nos amo gano el pan con su sudor
como nadie amó jamas. y conoce la fatiga y el dolor.
El nos guía como estrella
cuando no existe la luz. El Señor Dios nos amo
El nos da todo su amor como nadie amo jamas.
mientras la fracción del pan. El reúne a los hombres
Es el pan de la amistad, el pan de Dios. y les da a vivir su amor.
Los cristianos todos ya
ES MI CUERPO: TOMAD Y COMED, miembros de su cuerpo son,
ESTA ES MI SANGRE: TOMAD Y BEBED nadie puede separarlos de su amor.
PUES YO SOY LA VIDA, YO SOY EL AMOR,
OH! SEÑOR, CONDÚCENOS HASTA TU AMOR. El Señor Dios nos amó
como nadie amó jamas.
El Señor Dios nos amó Su amor era tan grande
como nadie amo jamas. que murió en una cruz.
Sus paisanos le creían Su amor era tan fuerte
hijo de un trabajador. que de la muerte triunfó
Como todos el también y dejó la tumba libre y vencedor.

ACCIÓN DE GRACIAS

HOY SEÑOR, TE DARÉ LAS GRACIAS POR MI VIVIR,

POR LA TIERRA Y MIS AMIGOS, PORQUE SIEMPRE FUI
FELIZ.
POR EL TRONCO EN QUE NACÍ Y LA SAVIA QUE
ENCONTRÉ
Y LOS BROTES QUE NACIERON PORTADORES DE TU
FE.
POR LAS VECES QUE CAÍ Y LAS QUE ME LEVANTÉ,
POR QUE SIEMPRE EN ELLAS VI EL AMOR DE TU
PODER,
POR LO BUENO QUE VIVÍ Y EN LO QUE SENTÍ DOLOR
SIEMPRE EN TODO YO TE VI. TE DOY GRACIAS,
SEÑOR.

DESPEDIDA
NADA NOS SEPARARÁ, NADA NOS SEPARARÁ,
NADA NOS SEPARARÁ DEL AMOR DE DIOS.

CENA FRATERNA
 Jueves Santo
HORA SANTA (ADORACIÓN)

CANTO BUSCA EL SILENCIO,

TEN ALERTA EL CORAZÓN,
CALLA Y CONTEMPLA.

INTRODUCCIÓN
ORACIÓN
Estamos delante de ti, Tu quieres, Señor,
Señor Dios nuestro, un amor sin reservas
con las manos vacías como tu has amado,
y el corazón despierto. entregándote siempre.
Sabemos por tu amor, Señor,
de tu entrega total Ahora, Señor
dándonos a tu propio Hijo. en este día
quiero decirte muchas cosas,
Tu amor es verdadero, sobre todo
es un huracán de ternura. agradecerte tu ímpetu de amor
Tu vuelves a nosotros porque realmente
cuando nos sentimos cansados tu amor a nosotros
y agobiados por vida. no terminará jamas. Amen.

SILENCIO

EVANGELIO Mateo 26, 36-39

CANTO
¿A donde vas? ¿A donde vas?.Llévame junto a Ti.
Dentro de mi ser tengo frío. ¿A donde vas?
Más allá de la eternidad, de la eternidad,
donde no pueda ver con mi mente.
Señor, llévame Tu.
Tomaré la ruta contigo, buscaré mi paz, mi paz.
Por los senderos en que tu caminarás, quiero caminar,
y por todos los senderos
nosotros iremos caminando, como podamos.
Y cuando pueda ver la luz dejaré que yo te cante así:
Gracias, Señor. Cogeré tu mano, me alegraré que estés allí.
A mi lado, ... a tu lado.
A mi lado, ... a tu lado.
A mi lado, ... a tu lado.
Y entonces el llamado Judas Iscariote
fue a los príncipes de los sacerdotes y dijo:
¿Que me dais si os lo entrego?
Le pagaron 30 monedas de plata.
 Y desde entonces lleva buscando el momento de entregarle.
A mi lado, ... a tu lado.
A mi lado, ... a tu lado.
A mi lado, ... a tu lado.

“... y nos vinculan en comunidad de hermanos.”

ORACIÓN ¿Que puedo decirte?
Nada.
Sólo mantener mi corazón abierto,
mis oídos,
todo mi yo.
Para poder oírte.
Lo que quieras.
Estoy aquí para hacer tu voluntad.
Tu me has seducido, Señor,
me has vencido
y me has dado la vida.
Habla, Señor, porque yo
sólo puedo oírte ya.
SILENCIO
EVANGELIO Mateo 26, 40-46
TESTIMONIO

CANTO Padre, me pongo en tus manos,

haz de mi lo que tu quieras.

PADRE, ME PONGO EN TU REGAZO,

COMO UN NIÑO DÉBIL Y FRÁGIL, SOY TU PEQUEÑO

Padre, tómame en tus brazos,

ten piedad, muéstrame tu rostro.

Padre, tuya es mi vida

dame a conocer tus sendas.

Padre, necesito darme

con todo el amor de que soy capaz.

Padre, te confío mis días,

quiero cumplir tu voluntad.
SILENCIO
ORACIÓN DE FIELES
PADRENUESTRO

CANTO CONFÍO EN TI, DE TI ME FIÉ,

NO ANDARÉ TUS PASOS, SI NO ES DESDE LA FE.
JUSTO HE DE VIVIR, SI EN TI CONFIÉ.
DAME, DIOS, TU ESPÍRITU,
DAME TU LA FE.

BENDICIÓN: Que su nombre sea eterno,

y su fama dure como el sol;
que él sea la bendición de todos los pueblos,
y la proclamen todas las razas de la tierra.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
 el único que hace maravillas;
bendito por siempre su nombre glorioso;
que su gloria llene la tierra.
¡Amen, amen!.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amen.