Andruetto y Lardone Taller de Escritura Pag.13-87

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= & LE) Construccion del taller de escritura ieee MERU eh “Un taller debe por sobre todo ser una propuesta diferenciada de la clase de literatura y de la de lengua, un sitio de creaci6n, Construlr- lo en la escuela necesita de fuerte conviccién, apertura e inventiva de parte del coordinador. (...) Busqueda, exploracién, descubrimiento son elementos de un pro- eso para el que se requiere de un esfuerzo sostenido y también de tun gufa que acerque lecturas y actividades variadas, buscando romper lo uniforme, lo preestablecido, lo oficial, lo escolarizado. (...) La construcci6n del taller de escritura sintetiza veinte afios de experiencia que cada una de nosotras ha llevado a cabo en numero- ‘sos grupos y contextos. Intenta reflexionar sobre las circunstancias en las que nace, se desarrolla y concreta su produccién un taller de eseri= tura para diferentes edades, dentro o fuera de la institucién escolar, ysse dirige a adultos mediadores entre los libros y los chicos 0 jévenes." Lilia Lardone - Maria Teresa Andruetto Im La construccién del taller de escritura Coleccion Leer y escribir Capitulo 1 éQué es un taller de escritura? * La leccién del flautista’, un ejercicio de seduccién “Hace mucho, muchisimo tiempo, la ciudad de Harnetin suftié una terrible plaga de rates. El alcalde traté de celiminarlas pero no tuvo éxito. Al final, prometié 1000 florines a quien pudiera acabar con ellas. ‘Apareci6 un extranjero vestido con brillantes ropajes y dijo que é! pooia librar a Hamelin de las ratas. Esa noche, el extranjero comenz6 a tocar una suave melodla en su flauta, atrajo a todas las ratas fuera de las casas y fas quid hacia el rio Weser, donde se ahogaron. Elalcalde se negé a pagar al Flautista “Tocar una melodia en fa flauta no vale 1000 florines. fuera de Hamelin!” ero el Flautista volvié el domingo por la mafiana, cuando la gente mayor estaba en mise, yempez6 a tocar su flute. Inmediatamente, todos los nifios fo siquieron. 1 Flautista dirigié su marcha hacia las montafias. De pronto, se abrié una cavesna yélse introdujo en ella, sequido por fos niios. Después que pasaron todos, le caverna se cerr6. Los nifios nunca volvieron a Hamelin.”2 1 lia Lardone. A partir de una ponencialefda en Congreso de Didactica de la Lan- ‘gua, Universidad Nacional de Cérdoba, 2001. 2. Traduccion libre de la version en ingles en The pied piper homepage (en Internet). B Esta leyenda surge de un hecho real, la plaga de ratas que en el affo 1294 provocé pestes y maté a gran parte de la poblacién de Ha- melin, en Alemania. No est comprobado que existiera el Alcalde, pe- ro no es dificil deducir que para un burgués de esa época la melodia del flautista no valla mil florines. Después de todo, se sabe que el arte tampoco hoy figura entre las prioridades del sistema. Ningdn docu- mento acredita la existencia del Flautista, pero ¢quién pone en duda la particular atraccion que ejercen ciertas melodias? No hay mas que re- cordar a las sirenas de Ulises, sus especiales poderes de convocatoria, la conmocién interior que produce el hecho artstico. Elfinal del cuentoesambiguo, porlo menos en estaversién, lamas antigua que se conoce, ya que mas adelante los hermanos Grimm re~ gistraron algunas variantes, e incluso la reescribié en verso el poeta in- glés Robert Browning. La Ultima frase asegura que “los nifios nunca volvieron”, y flotan varias posibilidades: ghabrén conseguido un destino mejor que el de sus insensibles mayores, disfrutando para siempre del arte del flautista? cse convertirian ellos a su vez en flautistas, capaces de modificar la realidad con sus melodias? Dejemos la leyenda para volver a le vide real. En ella el arte no actia directamente sobre las circunstancias para provocar cambios ro- tundos, pero sf ofrece un espacio Unico por el que circulan de un mo- ‘do mas intenso los sentimientos, las pasiones, los dolores. Y dentro del arte la literatura, un lugar en donde se habla de lo que importa, fren- te a los no lugares de la sociedad moderna. En medio de un mundo que tiende e producir tanta informacién como granos de arena exis- ten en el desierto, que somete a chicos y grandes a la violencia diaria sin ofrecer respuestas, la literatura es un fruto extrano. A veces se conoce de ella s6lo la cascara, de colores y texturas tentadoras. La cAscara es eso, una cubierta que oculta los verdaderos jugos, las babazas, almibares, asperezas y caldillos. Porque es adentro del fruto donde estan los amargores y dulzores que, en variedad de matices, despiertan los sentidos, inducen al goce, ensefian infinitos ca- minos con el sabor inigualable de los descubrimientos. Por eso es importante reflexionar sobre la escritura para chicos, sa pulpa sabrosa y nutricia que debiera medirse con los rismos paré- metros que la escritura para adultos. Coma escritura a secas. Y los li bros irigidosa a intancia, puestosen tela de juicio, tendrian quesuperar “4 antes que nada los andlisis mas exigentes de compromiso estetico, pa- ra que los chicos tengan la oportunidad de iniciarse en esa conmocion -a veces apenas un temblor y otras una sonrisa- que se experimenta al leer literatura, Un fruto es simbolo, como lo son también las partes que lo com- ponen: la cascara, la pulpa, la semilla. Podriamos ver la cdscara como la cubierta del libro, la pulpa como sus paginas, las semillas como pe- queios gérmenes que quedan en la mente de quien lee. Pero tal vez sea mejor tomario en tanto metafora de dos clases de literatura: de un lado, esa infinita cantidad de libros/cascara que apuestan a atraer con la superficie. Y en lugar aparte los otros, en los que por fugaces mo- mentos, es posible encontrar la belleza Es dificilsabersélo porla cscara sien un ruto sehallael gusto que se desea. Lo mismo sucede con los libros, y como adultos, para que no nos pase como al mezquino Alcalde de Hamelin que no confiaba en los valores del arte, debiéramos intensificar nuestro espiritu critico y se- parar lo verdadero de lo falso. Seria importante pensar a la literatura infantil como un sitio de resistencia, en donde el equilibrio de valores entra en la balanza junto al poder del imaginario. Estos valores se cuelan en las entrelineas de las historias, se deslizan entre los avatares de personajes tramando ac- ciones que ponen en marcha deseos, dolor, suefios, en fin la vida. Va- lores como la dignidad, la busqueda de la verdad, la valentia en la acep- tacion de circunstancias adversas, la solidaridad. Como el juego, esa extraordinaria vertiente creativa del ser humano, Sin embargo, un peligro late en el centro mismo de la produccién: abruman las novedades, muchas de ellas céscaras vacias que en canti- dad inimaginable se suceden sin dar tiempo a la lectura reposada EI mercado esta abarrotado de titulos, es verdad, y la tarea de ele- gir se complica para los mediadores naturales, maestros, padres, biblio- tecarios. Sin embargo, hay un parémetro que no debiera fallar: si un adulto encuentra que un libro destinado a los nifios le despierta el mis- mo entusiasmo que los textos @ él dirigidos, seguramente a los nifos les provocara idéntico asombro. La calidad estética es algo que se recono- ce, més alld del destinatario. La maravillosa melodia del flautista de Ha- melin, intencionalmente enfocada hacia los chicos, los atrajo con fuer- za iresistible, Pero antes, el flautist habia creado esa melodia Unica 15 Con el apoyo de esta metafora, es posible decir que quienes es- cfiben para los chicos y también quienes les proponen lecturas, debie- ran comprometer lo mejor de si, respetarlos, explorar todas las vias po- sibles, recuperar el poder evocador de la palabra, su musica, y no Subestimar el derecho del niio a recibir en profundidad los temas més variados. El creador lo logrard a veces y otras no, pero su actitud debe ser honesta y visceral. Lo mismo pasa con los mediadores. Hace poco mas de veinte afios, en un libro notable que la auto- ra argentina Griselda Gambaro titulé Conversaciones con chicos , se regisiraba un didlogo mantenido con Estela, de diez afios: {Qué animal te gustarfa ser? Am? Un le6n. Porque serla fuerte y asf nadie me podrla ha- cer nada. =2¥ como persona, quién podria hacerte algo? ~Como persona podrian matarme. Es fécil matar a una persona.” En el mundo de hoy, mucho mas que hace veinte afios, un chico puede sentir que es muy facil matar a una persona, Un mundo de violen- Ga extrema, que se despliega a raz6n de veinticuatro imagenes por se- undo para cualquier no sentado frente al televisor, gpuede atin acep- tarese otro despliegue, el de los suefosy los simbolos, queesla literatura? Qué significa, hoy, escribir para chicos? zy qué significa para los chicos leer? Debiéramos reflexionar sobre el desconcertante mundo de la in- fancia, a veces fuertemente ilurninado por la felicidad y otras, lamayoria, asediado por la incertidumbre. Ser chico es vivir en un terreno resbala- dizo, con més ignorancias que certezas. Por eso es tan grande la res- ponsabilidad que nos cabe a quienes participamos del circuito de! li- bro: escritores, editores,criticas, libreros, mediadores. Quien desee introducir la literatura en la escuela tendria que lo~ rar, al menos, algunas de las caracteristicas de nuestro simbélico flau- tista: seduccién, conocimiento, astucia 3 Gambaro, Griselda. Conversaciones con chicos, Buenos aires, 1¥ed., Timmerman Editors, 1977 {Por qué seducci6n?- en los hechos la batalla es desigual, ya que la sociedad declama una valoracién positiva de los libros y esto no se ve reflejado en la realidad, Por eso tentar a los chicos hasta despertar su interés dependerd, en una primera instancia, de las cualidades y el entusiasmo de quien proponga el ejercicio de lectura y escritura. El me- diador 0 coordinador de taller (docente, bibliotecario...) deberd ser él mismo un lector convicto y confeso, un modelo confiable y respetado. {Por qué conocimiento?: los criterios de seleccién tienen mucho peso a la hora de iniciar nuevos lectores. Encontrar libros adecuados para un determinado grupo, o para un momento especifico, es repe- tiren cierto modo laaccién del lautista que encontré esamelodia, laque atrastraba consigo a quien la escuchara. Tener criterio implica haber leido mucho, de todo, para grandes y para chicos, y elegir conociendo la diferencia que se esconde en el centro mismo del fruto, sin dejarse engajiar por la céscara, {Por qué astucia?: la normativa que rige en la escuela es, casi siem- pre, dificil de modificar. Sin embargo, un mediador idéneo encontra- 14 el modo de crear en ella un sitio de libertad en el que la lectura lle- ve naturalmente.ala expresién. Al buscar la complicidad en suscercanos aliados, los chicos, o en algin colega igualmente convencido de que leer literatura ayuda a ampliar el horizonte de sentimientos y sensacio- nes, al coordinador le sera posible instalar la modalidad de taller y le- gitimar un tiempo necesario dentro de la curricula Quien ha llevado adelante un taller sabe del importante vinculo que se establece en estos espacios. También ha comprobado que con- vencer a directivos 0 inspectores suele ser una tarea lenta pero no im- posible, que requiere de conviccién e ingenio. A la hora de definir po- sibles “evaluaciones” y “cuantificaciones”, tan caras a la planificacion escolar, habra que ejercitar la imaginacién para encontrar una via que no atente contra la libertad del taller, pero que al misrno tiempo per- mita su seguimiento Una cita de José Antonio Marina, “ 2Qué es lo que hace que un proyecto sea creador? En primer lugar, que sea libre"*, Par eso la in- dicacién de atender especialmente a las caracteristicas intrinsecas del 4. Marina, José Antonio. Teorfa dela inteligenciacreadora, Barcelona, Anagrama, 1993. v7 taller, ya que una rigida organizacién preexistente perturbaria su fun- cionamiento. Es importante tener en cuenta que madurar momentos de lec- tur y escritura con los chicos llevaré por caminos insospechados y sor- prendentes, no importa si esquivos a la hora de abarcar, de medi. Pe- ro la experiencia indica que no es imposible evaluar los procesos que se desencadenan, sise reflexiona sobre los modos adecuadosdehacerto. Para decirlo con palabras del mismo José Antonio Marina: "Dirigirla mo- tivacién, construir la propia libertad, levar habilmente la negociacion ‘con nuestras limitaciones, todo esto es inteligencia humana”. La lecci6n que el flautista nos deja es la de una confianza plena enel arte como vehiculo exoresivo. Privar de él a chicos y j6venes en la escuela seria perder una oportunidad irrecuperable. # Esa arcilla, la palabra Lapalabra taller mantiene vivo lo artesanal,laidea de que es po- sible trabajar el lenguaje como si fuera una arcilla A la vez, como se trata de escribir con palabras de las que cada uno se ha apropiado de distinta manera, palabras de las que el cuerpo puede hacerse eco, la ‘experiencia de escribir es la celebracién de la variedad de la vida y de lo inagotable de su significado. Enun taller de expresién se rompe el disefio homogeneizador, tra- icional en los procesos de ensefianza, para permitir el ingreso de dis- tintas edades, experiencias de vida, experiencias lectoras. El coordina- dor ofrece a su grupo libros de autores diversos, de disciplinas también diversas, ya que el punto de partida de la estimulacion a la escritura no es necesaria ni exclusivamente la palabra, resultando de gran riqueza la incorporacién de la plastica, musica, fotografia, cine u otras. En mu- chosespacios, resulta una oportunidad tnica para acercarse a materiales no convencionales a los que de otro modo no se accederia, Lo que se persigue es faciltar la exploracién del imaginario, la es- timulacion de la percepcion sensorial y de la memoria afectiva, a tra~ vés de juegos, obstaculos y condicionantes donde se ponga en juego la palabra. Un sitio donde manipular textos y desarmarlos para cons- ‘ruir con ellos, 0 a partir de ellos 0 contra ellos, otros textos. 18 El objetivo Ultimo del trabajo de taller es la vivencia de una pala- bra propia, una palabra que siendo de todos ( de todos y de uno es el lenguaje, social ya la vezindividual)se sientacomo propiay en tanto pro- pia, armada, desarmada, rota, modificada, descubierta, valorizada 0 revalorizada Por dénde empezar Esimportante pensar el lugar donde va adesarrollarse el taller. De- berd serlosuficientemente célido como para producirladistension, ytan abierto que permita transgresiones. Se trata de ofrecer un espacio dis- tinto, que estimule, cobije, afirme, sorprenda, provoque. La reunién en torno a una mesa, o simplemente en rueda senta- dos en el suelo, o dispersos en una habitacién casi vacia, instala ense- guida una modalidad de juego, en cierta forma un ritual En el centro, o uno mas en el circulo, el coordinador atrae, entu- siasma, anima. El vinculo se estrecha cada vez mas, porque el uso de la palabra viene cargado de lo que somos. Por eso, junto al cuidado en prepararel espacio, quien quia eligecon entusiasmo cada cosa cada tex- to que lleva. Esta puesto ahi, a la vista de todos, debe ganar la confian- za del grupo. Una mirada, un gesto de su parte que signifique rechazo, echaria abajo el delicaco equilibrio que se ha venido gestando desde el momento mismo en que la consigna se puso a disposicién de todas, {COmo manejar los tiempos, las relaciones que van establecién- dose entre los participantes, cmo mantenerlaatencion para quelaspa- labras propiasy lasde los otros puedan encontrarse, chocar, unirse, mez- clarse? Su etimologia lo dice: el taller es trabajo, es hacer, y su cuestion fundamentalestimular, considerar, cuidary alimentarel productodeese hacer. El coordinador propicia el crecimiento de los textos, aporta su experiencia en la bésqueda, descubre indicios, signos; pero no conde- na. Toda iniciacién es aprendizaje, todo aprendizaje un descubrimien- to tras otro. De nada sirve atarse a clasificaciones, rétulos 0 recetas. A cada momentose aprende junto.al grupo que losbordes estan para tras- pasarse, que no hay manuales que definan la escriture, que nada es se- Quro salvo el deseo de decir. 19 eee eee + El disefio de un taller El trabajo de taller implica una concepcién particular de apren- dizaje, que le da sustento y comprende, entre otras cosas: 4 Tiempo de trabajo Se trata de un tiempo que todos conocen, respetan y esperan. 5 habitual convenir un encuentro por semana. Para un grupo de jove~ ines un lapso de hora y media o dos horas relo}, permite un buen fun- cionamiento. El tiempo recomendado se reduce con un grupa de chicos, y mucho més si se trata de nifios pequefios, aunque cada coordinador sabré encontrar la extension més propicia Més alld de cualquier particularidad, el taller debiera pensarse como una situacién regular y continua, claramente pactada entre co- ordinador y participantes. @ Espacio Un lugar célido, diferente aunque més no sea de un modo infi- mo, donde los participantes puedan mirarse a la cara, sentados en si- las o en el suelo, sobre almohadones o en el piso, como parte de un circulo 0, una vez dada la consigna, dispersos segin sus iniciativas per- sonales. & Clima Se busca crear un espacio abierto donde tengan cabida los cues- tionamientos, los desvios, lo imprexisible, y que suponga libertad de ac- cién para todos. Un sitio de distensi6n para escuchar y opinar, respetar el espacio y e! tiempo del otro, coincidlr, disenti y disfrutar. El clima es un factor definitorio de un taller, porque de &l dependen el grado de aper- turadelosparticipantes,elniveldesensibilizacién ylas posibilidades dedes- cubrimiento, de modo que se expandan lo emotive, la imaginacién, lo Idi dicoy que la consigna retina todo eso en un problema a resolver. 20 Coordinacién {Cémo despertar la codicia? Cémo elegir un estimulo, como sorprender, con qué elementos construir el entusiasmo que lleva a ca- da participante a buscar una respuesta a la consigna, Cualauier coor- dinador que tenga un caudal de lecturas y crea en lo que hace, podra ‘encontrar sus propias técnicas y cambiarlas cuando las circunstancias asi lo requieran. El rol del coordinador es més horizontal que vertical. No deberia pensarse a si mismo como tinico centro de atencion ni poseedor de to- do el conacimiento, sino como alguien que controla los tiempos sin ejercer autoritarismo, ayudando a ordenar. Si falta una organizacion que vertebre el espacio de trabajo se correrd el riesgo de sustituir lo expresivo por la invasion de necesida- des y problemas particulares. Pero a su vez, alguien demasiado atado a su propio plan no podré observar y capitalizar los desvios creativos queel aller propicia. Un gufa flexible, pero guta al fin, marcard los tiem= pos y las acciones y es justamente alll, en esa negociacidn, donde se ve cémo lleva a su grupo quien coordina. Cada coordinador llega al taller con su bagaje de lecturas y su vi- sionde laescritura, intentando acercarla mayor diversidad de libros, ele- mentos y técnicas, de modo que circulen lo conocido y lo nuevo, lo pre- visible y las sorpresas, la ruptura y el azar. De ahi la importancia de su formacién lectora porque se espera que sea un lector intenso, un ras- ‘reador de textos y materiales. #2 Participantes {Qué provocan las sugerencias del coordinador? Hay participantes que deciden aplicarlas al pie de la letra, otros las transgreden y entre ambos extremos se despliega una vatiada ga- ma de posibilidades. Pero el taller cobijard todas las manifestaciones que aparezcan en su seno y las convertira a su vez en nuevos estimu- los, posibles puntos de partida. Los integrantes de un taller se conocen por lo que en él suce- de, expresion de sus deseos, sensaciones o carencias, con un valor a emocional que no puede soslayarse. Se comparte intensamente lo pro- pio, en torno a una consign que provoca y convoca “# Momentos del trabajo Sibien en cada taller se organiza de manera diversa el espacio/tiem- po de acuerdo a objetivos de produccién ya intereses perseguidos, una se- cuendia ordenadora y frecuente (aunque de ningtin modo émnica) podria ser 4 Motivacién ‘Tiempo que el coordinador dispone para crear un climna que pro- vogue el deseo de expresarse, aportando diversos estimulos: mésica, imagenes, recuerdos, colores, textures, sensaciones, exploraciones con y en miltiples materias; lecturas por sobre todo. © Consigna Se trata de una suerte de deber Itidico, un escollo provocador que quien coordina ofrece alos participantes, paraqueestosloresuelvan en un tiempo previamente acordado. Una buena consigna es escueta, plantea un problema y provoca deseoderesolverlo. Quien lainventa quiere dificultarlasalida hacialocon- vencional (ef lugar comtn), enemigo principal de la libertad creadora. La consigna dispara ia escritura hacia recorridos no habituales en busca de lo particular, lo diferente, o diverso: ya no el lugar commun si- no el lugar propio, tema sobre el que volveremos mas adelante. Tiempo de escritura Es el destinado a la produccién en el espacio mismo del taller. Se pauta en busca de una escritura rapida, espontines, despreocupa- da de las exigencias pedagogicas y normativas. 2 7Cual es el tiempo necesario para una produccién de estas ca- racteristicas? Breve, para permitir la salida de lo mas intuitivo y de lo 4421050, facilitar la rdpida organizacion y porque la idea no es alcanzar resultados perfectossinasencillamente manjpular las palabrasen un tra- bajo inmediato, placentero, accesible a todos. {Diez minutos?, zquince minutos?, ¢media hora? La extensién de- pende del periil del taller, de la edad de los participantes, de la moda- lidad de la consigna, en fin, de muchas variables. A modo de orienta- cién podriamos acordar que en general ocupa entre un tercio y una cuarta parte del tiemnpo total de reunién. @ Lectura de las producciones Cada reunién se cietra con la lectura o muestra de las produc- ciones de los participantes. Con una regla de oro: nadie debiera irse sin tener la oportunidad de compartir lo que ha hecho pero a la vez de- penderd de la delicadeza del coordinador no forzar a hacerlo (quizés por timidez, o por no haber resuelto la consigna, hay quienes se resis- ten a mostrar sus textos) @ Cierre Un momento para compartir lo que ha sucedido: gcdmo se sin- tieron?, cqué les gusté y qué no en ese encuentro? Tal ver la lectura de un cuento breve o un poema los despida con la idea de que las pa- labras acompaiian mas alla del acto de escribir. 23 ee yoiselioned El taller y la escuela % Un espacio de expresion Es importante considerar e! taller con chicos y jévenes no tanto como literario (la palabra literatura siempre abruma) sino como un es- pacio de expresién. Por eso llamarlo mas modestamente taller de es- critura, tal vez responda mejor al objetivo que el coordinador persigue Seria deseable no pretender de los chicos productos artisticos que diferencien a unos pocos, sino buscar mas bien que todos partici- pen, cada uno dentro de sus posibilidades. Y ~aUn cuando alcanzaran resultados sorprendentes, cosa que de hecho muchas veces sucede— 1no rotularlos como artistas, porque para ser considerado y considerar- se tal es necesario una conciencia del hacer, un punto de maduracién muy dificil de encontrar en un chico. Esas rotulaciones suelen obturar nuevas busquedas en lugar de alentarlas, originando frustraciones si 1no se alcanzan los resultados que los adultos esperan Cémo instalarlo en la escuela Como todainstitucién, la escuela tiene su propia dinamicayalavez tantos requerimientos, que es un verdadero desafio encontrar en ella el tiempo y el espacio para llevar a cabo un taller de escritura. Nos referi- mos a un tiempo y un espacio desescolarizado a conquistar en el seno de la escuela. Una madalidad que no siente sus bases en el “deber™ si- no que apunte a la libertad del encuentro con las palabras. ZEs posible encontrar un espacio asi en la escuela? Si, enlamedida en que el docente coordinador sea un lector apa- sionado y un explorador de recursos, abierto siempre a lo imprevisto. 25, Se Umm Si, en la medida en que el taller se desescolarice y encuentre un disefio no formal, un espacio que no sea el aula y que, en caso deserlo, se transforme aunque mas no sea de un modo infimo. Tal vez ubicar los bancos de un modo diferente, o sentarnos en el suelo en toro a una pila de libros, o llevar e! taller al patio 0 al salén de usos miltiples o a la plaza més cercana... para romper la relaci6n tradi- cional de ensefianza-aptendizaje, y dejar entrar la diversidad, el des- vio y la divergencia ("la escritura es desvio", dice el poeta Néstor Per- longher) Si, cuando el docente encuentra el modo de seducir como aquel flautista del cuento citado. Loque marcala diferencia real entre eltallery elaula de disenio tra- dicional es la modalidad de trabajo y los objetivos que el coardinador se propone. Resumiendo: un taller debe por sobre todo ser una pro- puesta diferenciada de la clase de literatura y de la de lengua, un sitio de cteacién. Construirlo en la escuela requiere de fuerte conviccién, apertura e inventiva de parte del docente coordinador. También de un apoyo consistente y visible desde la gestién institucional ZEn qué se diferencia un taller de una clase de len- gua o de literatura? La diferencia basica entre un tallery una clase es que el taller tie- ne como objetivo la produccién. Cada encuentro debe cerrar en un producto (idea en germen, pequeno texto, bosquejo, borrador, ensa- ys verbales, que implican no s6lo recibir sino también dar al grupo), para que lo vivido en él no quede s6lo en el imaginario, El primer analisis que hace un coordinador se refiere a los desti- natarios, el contexto donde se inserta y para qué nacié ese taller en par- ticular, porque por algo nace esa necesidad. Hay que disefiar enton- cesel para qué, yel para quiénes, con el propésito de que las expectativas acuerden con lo que se va a recibir. 5 Cangi, Adtian. Néstor Periongher, Evita vive e outras prosas, Sao Paulo, Brasil = rminuras, 2001 26 Segunel contextoen quese aplicay deacuerdo alos objetivos que elcoordinador se plantee, el taller variard en niveles y necesidades, aun- que se mantenga la modalidad y la materia de trabajo “las palabras, la escritura~ sea la misma en todos los casos. No es lo mismo un taller pa- raalumnos que comienzan susestudios secundarios que para chicosque concurren voluntariamente a una biblioteca, por ejemplo. Seguin los destinatarios, cada taller tendré sus estrategias y su di- sefio, recordando siempre que se trata de un camino de busqueda, en el que la confianza esta puesta en la exploracién, en la ruptura de lo habitual mas alin que en los resultados que puedan alcanzarse. Unade laspremisasbasicases conseguir quel afuera quedeafue- ra, para que el espacio pertenezca en exclusividad a la creacién. Nitios, jovenes, chicas, varones: la diferencia no la hacen la edad ni e! sexo, s6lo las marcas personales con las que cada uno se expresa. Estimular entonces la produccion de textos, soslayando la co- rreccién normativa y poniendo el eje en la expansi6n del imaginario, de modo de diferenciar claramente el taller de la clase de lengua o la de literatura. ‘ Después de escribir En el caso de los jévenes se puede (s6lo se trata de una posibili- dad) revisar los textos producidos para guiar hacia reescrituras inten- tando que la herramienta- palabra exprese con mayor precisién lo que el pensamiento desea. Si el coordinador decide trabajar en este senti- do, deberé conocer lasreglas del oficio de escribir:su tarea serd compleja porque necesita respetar los contenidos y a la vez descubrir las mejo- res posibilidades formales. El taller se convertira as{ en un progresivo conocimiento de recursos técnicos, una toma de conciencia del oficio que no violente ni obture lo personal. Las sugerencias que haga el coordinador después de escuchar las produccianes serdn enriquecedoras, siempre que apunten a las ca~ racteristicas formales (por ejemplo: problemas en la sonoridad, acota- iones acerca de la estructura, apuntes para delinear un personaje, con- tundencia 0 no de un final, etc.), cuidando de no interferir en las ideas, sentimientos y apreciacion sobre las cosas, de quien escribe. ra ‘Aveces, el coordinador percibe que un texto podria extenderse yo sugiere, 0 acaso que el Angulo elegido no es el mas conveniente para esa historia, que quizés hay que ajustar o profundizar un final. 0 que al narrador no se le extrae todo el provecho, 0 no hay suficientes indicios de lo que le sucede al protagonista, 0 es necesario velar algu- na informacion demasiado visible 0... Los sefalamientos mencionados nunca se expresan en términos de bueno © malo, ni de subrayado o tachadura, sino en aportes que hagan crecer el texto en las posibilidades que éste en germen ya pre- senta. En un taller se complejzan las cuestiones relativas al uso de la lengua, respetando las diferentes miradas sobre hechos y cosas. * Escribir en la escuela* Esta historia en particular, que es de todos, tenia derecho a haceria mia porque es asi como la comparto con los otros, al escribir Mancuerme Duras Quisiera defender la necesidad de un espacio destinado a la escri- tura creativa en el seno dela escuela, Escribir en la escuela, como un ¢a- mino de busqueda hacia nuevos umbrales de percepcién y de comuni- cacién, Exploracién de cada uno en si mismo, para abrir a un mundo que es susceptible de ser leldo, narrado, compartido y modificado. Ruptura de la homogeneidad para provocar diferentes vinculos con la palabra Un espacio asi pensado seria liberador, particularmente en el se- no de la educacién sistematica, que en materia de palabras ha inclina- do la balanza sobre lo cognoscitivo y lo normativo. Arrimarfa un apren- dizaje de lo particular, de lo diverso, de lo emotivo, llevaria en fin a desarrollar ciertos aspectos de lo humano que también son suscepti 6 Marla Teresa Andruetto. A partir de una ponencia lea en el Congreso de Didc- tica de la Lengua, Universidad Nacional de Cordoba, 2001 28 bles de ser estimulados, trasmitidos, entrenados, como todo lo que tie- ne que ver con la sensibilidad de las personas, Si la escuela ha sido, con lo bueno y lo malo que eso acarrea, un lugar de homogeneizacién, el taller basarla sus estrategias en la ruptura de ese diserio hamogeneizador y dejaria entrar la heteroge- neidad, partiendo de la base del placer. Basicamente, lo que se bus- aes conducir a una valoracién y a una optimizacion de las posibili- dades de los participantes, en un intenso movimiento hacia adentro, para modificar ~de manera literal o figurada- lo rigido, romper lo es- tablecido y viceversa. Porque expresarse es producto de una tension entre la ruptura y lo convencional, una negociacion entre el deseo y las reglas. El lugar del docente seria ayudar a dar forma a lo mucho que se siente, a cavar en la norma un espacio propio mediante la puesta en Juego de ciertas herramientas, ciertas estrategias que guien hacia zo- nas no habituales de nosotros mismmos. Porque se escribe contra la len gua, contra lo linglisticamente correcto, también contra lo politica- mente correcto, se escribe violentando el lenguaje y violentandonos, buscando la salida de eso que somos en las rajas que se producen en- tre una palabra y otra. Tras aquello que, segin Octavio Paz, “entre una frase y otra, en esa grieta que no es silencio ni voz, aparece”. Setrata entonces de instalaren la escuela un lugar donde mirarsin prejuicios, donde tengan cabida lo personal y lo diferente, donde dar cuenta de lo que se mira, porque la escritura (como la lectuta) depen- de del mundo que se haya contemplado y de la forma en que se ha in- corporado la experiencia Un espacio destinado a buscar que lo conocido, lo oficial, lo que debe ser se esmerile y permita ver por debajo algun resplandor de eso que llamamos vida. La escritura es algo que se ensefia? ¢Asi se ensefaria a escribir? @Cuando hablamos de saber escribir, nos referimos sélo a las compe- tencias linguisticas? ¢O podemos sumar a ello otras competencias? eAceptariamos la idea de que saber escribir es también mirar intensa- ‘mente, conectarse con lo ms profunda de uno mismo? 7 Paz, Octavio. 6 mono gramético, Barcelona, Seix Baral, 1974, 29 Un lugar con estas caracteristicas estaria destinado a trabajar con las palabras, a buscar recursos para entrar en ese mundo, a problema~ tizamos con ellenguajeya que unescritores, en sentidoestricto, alguien que ha convertido a las palabras en su problema. Un espacio en la escuela que no parezca de la escuela, donde cir- cule literatura de diversos tipos y registros, y en el que se trasmita una ligaz6n pasional con los textos. Porque el material que se ofrece y el modo en que se ofrece dan cuenta de nuestra concepcién del mundo y.del hombre y del lugar que la literatura tiene en ese mundo y para esos hombres, “Escribo cuando quiero saber de mi", dice Saer* Existen en la escuela sitios para el conacimiento de las ciencias, las normas, la historia de la literatura, incluso de ciertas obras iterarias. Lo que me pregunto es sila escuela facilita que los chicos 0 los jévenes aprendan acerca de ellos mismos. Ese espacio de introspeccién privile- giado y de consecuente drenaje de emociones, fabulaciones y deseos puede construirse en un taller de escritura Claro que para que eso suceda, la escuela deber4 luchar contra el fantasma de la escolarizacién, contra la domesticacion de la litera~ tura, contra las demandas de utilidad y rendimiento, contra las selec- iones por tema, las clasificaciones por edades, los cuestionarios y re- slimenes, losmanuales, las antologias, elaprovechamiento de los textos, el deber ser, lo bueno y lo correcto. En sintesis, respetar a rajatabla el aparente sinsentido de un ta- lle, su gratuided, en un recorrido de constantes desaffos, descontro- lesy de riesgos porque, como dice Graciela Montes “lo que esta de- masiado vivo siempre es peligroso"®. Una de las funciones del acto creativo, acaso la mas importante, es la de defendernos contra diversas formas de presi6n, protegernos contralosabusos simib6licos del poder delos que somos objeto, dice Pie- tre Bourdieu. Frente ala homogeneizacién de los discursas, el taller nos 8 _Saer, Juan José. Conferencia en la Facultad de Filosofia de la Univesidad Nacional de Cordobe, 1996, 9. Montes, Graciela, bosque y el lobo. En Memarias del 27° Congreso IBBY, Carta~ ena de Indias, Colombia, 2000. 30 permite ser, al menos por un momento, una persona que piensa y sien- te de una manera Unica. Manera particular de expresarnos a la que to- dos tenemos derecho, no sélo aquellos individuos que la sociedad con- sidera, por diversas razones, artistas. Escribir entonces para recuperar la palabra y su universo pleno de significados: nombrar uno mismo el mundo, en vez de llamar a las cosas como las llaman todos. Diversidad de palabras, tan valiosa como la diversidad biologica, Me gustaria decirlo con la poeta uruguaya Circe Maia: "(ahora y aqui y mientras viva tiendo palabras- puentes hacia otros. Hacia otros ojos van y no son mias. No solamente mias: Las he tomado como he tomado el agua. Como tomé a leche de otro pecho, Vinieron de otras bocas y aprenderias fue un modo de aprender a pisar, a sostenerse.”"? Imaginar, fundar otros posibles aparentemente inutiles, es otra forma de pensar, de conocer. Un mado en el que se suspenden ciertas reglas, ciertas convenciones, ciertas referencias para que aparezcan aquellas impuestas por el proceso mismo de creacién La escritura es movimiento, camino, mano extendida hacia otro. No se trata de crear objetos bellos, se trata de buscar “una forma de penetrar en el mundo y encontrar el sitio que nos corresponde en él. Cualquier cualidad estética que pueda tener lo que hacemos, dice Paul Auster, no es més que el esfuerzo de librar esa batalla para entrar en el corazén de las cosas." He acompariado procesos de producci6n en grupos de edades y condiciones muy diversas, dentro y fuera de la instituci6n escuela y he visto el placer que produce en las personas el acto de fundar 10 Maia, Circe. Ei puente, Montevideo, Editorial de la revista Siete Poemas Hispanoa- mericanos, 1970. 11 Auster, Paul En revista Vox, af 1, NP3 - 4, Bahia Blanca, Argentina, 1997, 31 pequefos universos. ZA quién no le gusta aduefiarse de las pala- bras, someterlas a su capricho? La fabulacién es, ya se sabe, una exi- gencia del inconsciente. El viejo artficio de contarnos historias anos- otros mismosy alos demas va construyéndonos, da forma a nuestras experiencias y consolida nuestra identidad. Es la invencién de histo- fias lo que nos permite abstraemnos del mundo para encontrarle un sentido No parece descabellado entonces, entrenar a los mas chicos en «el vicio de fabular, creando para ello un espacio de intimidad y de li- bertad, que facilite el viaje a través de las palabras. Aventura de ir ha- ciael corazén del hombre, porque la escritura nos conduce a través del lenguaje, como si el lenguaje fuera -lo es~ un camino que nos llevara a nosotros mismos, {Seré posible ensefar eso en la escuela? Sé de sobra cudnto y cémo se le pide a la escuela que resuelva todos los problemas. Sin em- argo, no puedo dejar de pensar que esta posibilidad de nombrar en el sentido verdadero, jams se pondra en acto en muchas personas si no es a escuela quien facilita ese espacio. R Leyes Las consignas: algunas consideraciones Para qué sirve una consigna Una consigna es una incitacién a realizar sobre el lenguaje cier- tos forcejens, ciertas operaciones que intentan promover unos aspec- tos por sobre otros, tal vez no transitados con frecuencia. Proponer jue- ‘gossonoros, inventarapartirdeestimulosprecisos, agudizarlassentidos para describir lo indescriptible son facetas que permiten descubrir ap- titudes y explorar zonas desconocidas. Hay una tendencia natural a resolver la escritura con un minimo de esfuerzo. La consigna intenta romper eso, incomodar y desacomodar: pun- to de obturacién que bloquea una salida pare obligar a buscar otras, Co- mo sila posibilidad toda de escribir fuera una acequia y el coordinador pusiera una esclusa en algtin punto del trayecto para desviar el curso ha- bitual de la corriente y lograr que el participante riegue otros campos. Es un limite, un condicionamiento, une restriccién a la libertad de escribir fo que se quiera. Parece un contrasentido que en un taller de expresion, en lugar de der libertad para escribir lo que se desea, se pongan obstaculos. La eterna cuestién entre la libertad y los limites: al igual que el juego, la creacién tiene sus reglas, Las consignas pueden ser muy diversas. El coordinador las di- sefiaré a partir de ejercicios de otros coordinadares o de la bibliogra- fia sobre talleres ya existente (ver pag. 109), 0 aportara de su propia cosecha Casi todas se articulan en titima instancia en torno al desarrollo del imaginario en una (0 en varias) zonas sobre las que el lenguaje opera: 33 | la memoria la transqresion, el juego y el azar la estimulacién sensorial la organizacién de! discurso La memoria Las consignas que tratan de despertar la memoria en chicos y j6- venes, son propuestas que van tras los ecos de un recuerdo. Arrojan na o unas palabras al estanque de la memoria, como lo hacia Gianni Rodari en aque ejercicio de la Gramatica de la Fantasfa que él llamé La piedta en el estanque’® Cada palabra contiene su historia, se ha cargado de significados y evoca en cada persona sentimientos y sensaciones Unicos. Asi es co- mo se vuelven propias. # La transgresién, el juego y el azar La vinculacién entre juego y creaciony juego y escritura es inten- say jugar con el lengua, animarse a faltarle el respeto, es el punto de partida. Las consignas de este tipo se enhebran sobre la idea de desar- mar palabras 0 frases 0 textos o imagenes 0... para armar con ellos otras palabras o frases o textos o imagenes. Desde el collage hasta el destajido, pasando por las creaciones colectivas, estos eercicios pro- ponen tomar lo hecho por otros (ya sean artistas consagrados 0 com- pafieros de taller) y manipularlo para crear un nuevo texto. La estimulacién sensorial Son consignas que se proponen afinar la capacidad de percep- cién de cada uno, La lectura es casi siempre un recurso infalible para 12 Rodari, Gianni, Gramatice de la fantasia, Barcelona, Ferrin Pelisa, Editor, 1979, 34 crear un clima que estimule el deseo de escribir. En esa apertura, los ecos del imaginario de los otros se filtran, expanden y transforman, dando lugar a la creacién. Hay textos que contienen elementos mas propicios que otros y quien coordina debe revisar sus lecturas para ar- marse de una bibliografia al respecto. También es posible sugerir la modificacion de los elementos da- dos: partir de un comienzo, un titulo o un final, o incluir ciertas frases dan al mismo tiempo Ia oportunidad de empezar a escribir y el desafio de introducirse en un mundo ajeno. Estos ejercicios ofrecen dificultades en el contenido y en la for- ma, De tal manera, quien escribe intenta adaptar su propio imaginario al ajeno, sin dejar de respetar ciertos datos y puntos de vista. La organizaci6n del discurso Asi como hay una baterfa de ejercicios para estimular el imagi- nario, recuperar el recuerdo o romper can loestablecido, hay otros que propician la organizaci6n del caos creativo. A través de ellos puede des- ubrirse que las historias se desarrollan de acuerdo a un orden (por ejem- plo principio/medio/ fin), que hay causas que provocan determinados efectos (como la progresién de secuencias en un relato), que las histo- rigs suceden en un tiempo y en un espacio, que ciertos detalles vuel- ven crefble una situacién (enfocar una particularidad del personaje: ves- timenta, aspecto, modo de hablar, lo hace més real), etc Cuando se trata de textos posticos, es posible irtras ritmos y mii- sicas (algunas lineas tienen la misma terminacién sonora que otras y asi se percibe la rima, por ejemplo), o reorganizar con una légica re- cién descubierta la sintaxis tradicional. 35 kee yeyicul fees Bateria de ejercicios + Consideraciones generales Las consignas de trabajo que se detallan a continuacion han si- do probadas con diferentes grupos y tipos de personas. Se apoyan en intenciones sostenidas en busca de ciertos resultados. Hay ejerci- cios que apuntan basicamente al juego con las palabras, y otros a la memoria, solo por dar algunos ejemplos. Pero no se trata de rasgos excluyentes, ya que un ejercicio acaso estimule al mismo tiempo ejes diversos. Para lograrla expresién creativael coordinador se vale, muchas ve- ces, de una combinacién entre diferentes factores y es asi como la de- nominada zona a explorar puede incluir tanto la expansi6n del imagi- nario como la organizacién del discurso o el despertar de los sentidos. Y todo recurso es valido siempre que el coordinador sepa de antema- no lo que ofrece, lo que quiere despertar en los participantes, y por supuesto- lo que desearia obtener. La indicacion de destinatarios ha sido intencionadamente gene- ral (6e indica para chicos, chicos 0 j6venes, etc.), puesto que conside- ramos que es el coordinador quien sabra elegit lo que més convenga a su grupo. En cuanto a los materiales y motivaci6n, las sugerencias varian seguin las condiciones en que el taller se realiza y las que el coordina dor tiene En algunos ejercicios hemos transcripto producciones (0 frag- mentos de ellas) de participantes de nuestros talleres, para mostrar re~ sultados posibles. Las referencias biblioarétficas de esta seccién pueden encontrarse en pag. 103. 7 mamma * El banquete Ejercicio pensado a partir del relato de una experiencia de intervencién urbana en Cérdoba, realizada por el grupo Urbomaquia, {que puso una masa en ef centro de la ciudad con platos que contenian lineas de poemas de Leén Felipe y en la que en lugar de tenedores habia marcadores gruesos con fos que los paseantes podian anotar fo que quisieran. © Zona a explorar. la memoria, [a estimulaci6n sensorial. © Dirigida a: nifios mayores, jévenes (cuidando la eleccién de los textos y las caracteristicas del grupo). Ejercicio ideal para empezar un taller. © Materiales ‘*Tantos poermas como participantes haya. Sdlo a modo de su- gerencia, proponemos desde los consagrados (Pablo Neruda, Juan Gel- man, Oliverio Girondo, Nicanor Parra, Gonzalez Tufién, José Emilio Pa- checo, Joaquin Giannuzzi, Alejandra Pizamik, Jacobo Regen, Olga Orozco entre tantos otros) hasta nombres mas recientes o de circula- cion mas restringida (Glauce Baldovin, Maria Negroni, Alejandro ‘Schmidt, Leonidas Lamborghini, Edith Vera, Liliana Lukin, Maria del Car- men Colombo, Diana Bellessi, entre muchos otros), sin dejar de explo- rar en poetas muy jévenes que pueden consultarse en ciertos sitios de internet (ver Bibliografia). No hemos diferenciado bibliografia poética para chicos por considerar que la poesia es una sola, y que la Sensibilidad de cada coordinador le permitira elegir los textos més apropiados para su grupo. ‘* Tantos platos (incluso descartables) como participantes haya ‘& Motivacién: preparar el espacio de trabajo como una mesa ten- dida. Y sobre ella los platos, uno por participante. Arriba de cada plato se coloca un texto escrito en un papel doblado en cuatro. Cada partici 38 Pante/comensal saboreara su texto primero en soledad y luego invitaré con él a otro. No extender esta actividad més de quince minutos, © Consigna: escribir a partir de una linea del texto/alimento que estaba en el plato. Con “tu risa me hace libre/me pone alas” de Miguel Hemandez, CR. 13 afios, escribid: Tu risa me pone alas Ahuyenta dolores, Jtusiones perdidas Y¥ me trae locuras, besos y caricias. Completa mi vida Y fa llena de alegria. Tu risa me saca de mi carce! Esa de barrotes de gordura, acné y esperanza. Tu risa me encarcela Pero en una carcel de luz Donde los barrotes son pequeftos sonidos ..los sonidos de tu risa. # Traduccién imaginaria © Zona a explorar. el juego y el azar, la organizacién del discurso. Dirigido a: chicos 0 jovenes, © Material necesario: un texto escrito en otra lengua, preferente- mente oriental, cuya grafia sea en si misma un dibujo sobre el papel (ver ejemplo de pag. 41) © Motivacién: al mostrar el texto, y antes de entregar una copia a cada participante, se dira que encierra un secreto a descubrir por 39 — los integrantes del grupo, y se invitara a traducirlo, Se hard hincapié en que pueden ayudarse observando la repeticién de signos 0 de pa- labras enteras. Esmuy importante la actitud del coordinador: invitadora, provo- cativa, lanzando la propuesta en tono de desaffo, sugiriendo una di- version posible. En nuestro caso, se utilizaron fotocopias de un libro de lectura de Armenia, cuyo dibujo se incluye. También es posible hacer listados con nombres cientificos de plantas 0 de remedios y presentarios como poeras encontrados en un baiil antiguo. © Consigna: traducir el texto fotocopiado al pie de la letra (palabra por palabra en el caso de adolescentes, més libre si se trata de chicos) Tras la lectura general, el coordinador develaré el secreto. Enel texto armenio, por ejemplo, aceptamos que no conociamos ese idio- may que eran validas todas las traducciones obtenidas por los partici- pantes, como un juego. El texto que sigue fue escrito a partir de una lista de nombres clentificos: Armarga pulguita pica azucena Pudre liana hermosa Publicidad estalla, mueren serviciales, Marchita elegante. Neptuno y agata desconocen adversarios Sinfonia siria, melosa, Fontanales inmemoriales. Familia unida, lanzada granada. Hombre nativo, sudoroso, Es ira, expira Semilla regordeta, vive conmigo. Ciudad, balancea menuda Tu flamante artritis. LA. 17 aftos, (fragmento). Op fp Puqucope hp jupompuph. = A op wfugpup ween fe pak op bu, gull RPE unesn b, Povquenpne Beubu pkug wlnp hme wate Yon qury Saiffe ee Ypuk = = Puqacopy uypad fous, huajpo wie queues ig achkey me ouhe Ghetighty ke kelbighy mumgbee he fownchtpe = Yetag pymy— Ye qeuvfuwes Pagacapps Veamproug gmp gipkyad gmp Heute Yip Poh wqguun gpeyagh fps hnng Peeps wae Pach ig Yneghey 6 Loney — he Supgee Pugener — Midp foe og make yuping mcifiny byay mp imusful fe qanuuyfoue glequigfin — Yam fe mult, — hy foggy Pwquenper— uncon Y pulewr bw pha mun fp. mule ayupanualer's shits — Ma phitic ules he froufls— Y pub qeqeagble— bE umm E gumdus Pugunnpoe Pkwy foup megs = 8B, gE, umn gh pub — foougp hp papel Puquenpgs — ERE ums sh pulp, nijplale mice how dg mbar —— t—~tS * Pie de pagina © Zona a explorar. la memoria, la transgresién, el juego y el azer. © Dirigido a: chicos y j6venes (el texto central variar4 segtin el gru- po, aqui se ha pensado en un poema que gusta mucho a los jove- nes). © Materiales: calzados diversos, ‘© Motivacién: colocar en el suelo de un espacio vacio (0 sobre una mesa) zapatos, chinelas, sandalias y zapatillas, nuevos 0 viejos. Puede que no sea una pila, sino s6lo dos o tres zapatos de color y ti- po diferentes. Hacer que los chicos caminen en torno a ese centro, Siel lugar 0 la circunstancia fueranincémodos para eso, hacerlos cerrarlosojasy que desde sus sillas se imaginen carninando en torno a un centro formado por una pila de zapatos tan distintos Mientras caminan, 0 imaginan que caminan, el coordinador los hace salir imaginariamente de la habitacién hacia afuera, hacia la ca- sa de cada uno, hacia el campo. O hacia un sitio largamente visitado, mirandose los pies hasta que encuentren otros pies. Leer finalmente un poema. A modo de sugerencia, transcribimos uno de Eduardo Dalter, tomado de su libro Aguas Vivas. ‘Amis zapatos remendados yo los quiero; mis zapatos con cartén debajo y nylon debajo para que no entre el agua dea lluvia niel agua de cuando baldean las veredas. Mis zapatos himedos y tibios de miy con polvo de camino, mi camino. 42 Descansando ahora, debajo del mueble ~pueden verlos-, y mirando gozosos cémo escribo Teclinado en la cama todo esto y cémo abracé hace un momento al Caribe hondo y voraz de Aimé Césaire y SaintJohn Perse. Zapatos, zapatos excedidos de mf hasta deformarse, cuartearse yagujerearse. Pero listos y hermanos. y comprendiendo, pareciera, cual es la estrella fugaz y cual es ésta. ¥ vamos, yo adentro de ellos en la parte que les toca. Denostados, sin embargo, torpemente, por una mujer, ciega mujer, abandonada mujer, sola mujer. Dejadme cruzar la calle, poesia, poesia de los salones, las rondas, los concilios, que vengo de galope yo con miss zapatos! Epuaroo DALTER © Consigna: escribir una descripci6n 0 un pequeno relato que ten- 98 por centro unos pies, unos zapatos. 43 —— © Ejemplo de produccién: Cuando me di vuelta Estaba escondido Volvl a mirarlo ¥ estaba opaco, lejos. Cuando caminaba Con los ojos liquidos Lo encontré tierra, viento, espina Y fue mio Y fue luz por un segundo. JS. 17 afios # Entrelineas © Zona a explorar: el juego y el azar, la organizacién del dis- curso, © Dirigido a: chicos 0 jovenes (segin el texto elegido). © Materiales: varias copias de un mismo poema (en este caso se eli- gio Cultivo una rosa blanca de José Marti, pensado para un grupo de jovenes, y La gallina, la jabd, para los mas chiquitos) Consigna: transformar el texto ofrecido en uno mucho mas ex- tenso, escribiendo ( u oralmente en el caso de los mas chicos) todo lo que se les ocurra en los lugares donde figura el signo barra (/). Cultivo una rosa blanca/ En julio como en enero! Para el amigo sincero! Que me da su mano franca Y para el cruel que me arrancal El corazén con que vivo! Cardo ni ortiga cultivol Cultivo fa rosa blanca. La gallina, la jabs La gallina, fa jabs puso un huevo en su nil, puso uno, puso dos, puso tres, puso cuatro, puso cinco, puso seis, ‘puso siete, puso ocho. Gudrdame este bizcocho ara mafiana a las ocho. "8 & Marcas urbanas fe eee eee eee © Zona a explorar. la transgresi6n, el juego y el azar Dirigido a: chicos 0 jovenes (seguin el texto base, en nuestro ca- so y para un grupo de adolescentes, la Oraci6n por Marilyn Monroe, de Ernesto Cardenal). ‘© Materiales: seleccién de frases publicitarias, marcas de productos, jingles, etc. © Motivacion: lectura de! poema citado. 13 Foldorico cubano. Tomado de: Santos Gracia, Caridad y Correa Cajigal, Sonia, Cuando de jugar se trata, Juegos Infantiles, La Habena, Ed, Cientifico-Técnica, 2000) 45 ————— © Consigna: pedir que empiecen a escribir lo que se les ocurra. In- terrumpirlos cada tanto con una frase publicitaria, jingle, marca de pro- ducto 0 referencia urbana, que estén obligados a incorporar en ese mismo momento. © Ejemplo de produccién Estaba pensando en vos, en tu sonrisa de Coca Cola es sentir de verdad, esa que nunca desaparece.... A veces creo que es hipécrita porque veo tus ojos tristes, te parecés a mi hermanito cuando no le compran sus play-mébil 2Qué te pasa? No sé. Tu timidez e5 como el muro de Berlin entre vos y yo, irrompible @ imposible de traspaser. ‘Ni siquiera puedo llegar a ser una amiga para siempre amiga porque vos le tenés miedo a la amistad. C.R.,13 aftos # Cuatro nombres y una historia © Zona a explorar: la organizacién del discurso, el juego y el azar. © Dirigido a: chicos y jévenes (sequin los nombres elegidos). ‘© Materiales: nombres de personajes de un libro (o nombres suge- rentes y extrafios inventados por el coordinador). En este caso elegi- mos cuatro nombres de los libros fnterland de David Wapner (para ha- cer un taller con jévenes) y de Nabuco, etc. de Ema Wolf (para nifios). 46 a © Motivaci6n: se leen al grupo fragmentos de una de las obras ci- tadas, elegidos a fin de crear suspenso e intriga. © Consigna: 2) (para adolescentes): escribir una nartacion donde intervengan personajes llamados: Rossano di Rosso El sensible Jan Las mellizas Wolf Kristobal 1b) (para chicos): relacionar en una historia los siquientes perso- najes: El senior Wo Nabuco El Escamoso Mecha ® La mesa de la abuela © Zona a explorar: la memoria, © Dirigido a: j6venes. © Materiales: estimulo visual que tenga que ver con el objeto me- sa. Puede ser una mesa real que no se identifique con la escuela o con e| Abita donde este se desarrolla, llevada al espacio de taller. © Motivacion: en nuestro caso utilizamos una fotografia de La me- sade Victor Grippo, obra realizada por este plastico argentino en 1978, en la que convergen imagen y estas palabras que siguen (las que lel- mos al grupo): a7 — UU Sobre esta tabla, hermana de infinitas otras construidas por ef hombre, lugar de unién, de reflexién, de trabajo, se partié el pan cuando lo hubo, los nifios hicieron sus deberes, se llord, se leyeron libros, se compartieron alegrias. Fue mesa de sastre, de planchadora, de carpintero.. Aqui se rompieron y arreglaron relojes. Se derramé el agua; y también el vino. No faltaron manchas de tinta, que se limpiaron proliiamente para poder amasar la harina, Esta mesa fue tal vez testigo de algunos dibujos, de algunos poemas, de algun intento metafisico que acompané a la realidad. Esta tabla, igual que otras... El coordinador recordard una mesa que estuvo presente en su vi- da. Y pedird a los integrantes del grupo que traigan cada uno, en for- ma oral, una mesa que por alguna raz6n recuerdan, © Consigna: escribir algo que tenga que ver con esa mesa recordada con otras mesas posibles. * La frontera invisible © Zona a explorar. la organizacién del discurso, la transgresion. © Dirigido a: jovenes. © Materiales: algun texto breve en donde se trasponga el limite en- tre lo real y lo fantdstico. En nuestro caso elegimos para un grupo de jOvenes un texto breve de Marcial Souto. © Motivacién: leer el texto 48 Para bajar a un pozo de estrellas Marciat Souro Elementos necesarios: Un espejo; un sitio descubierto (puede ser una azotea); una noche os- cura y estrellada Instrucciones: 1. Se toma el espejo y se sube a la azotea. 2. Se pone el espejo en el suelo, baca arriba 3. Se tiende uno al lado del espejo 4, Se acerca la cabeza al espejo, pero no demasiado: sélo lo suficien- te para ver las estrellas alla en ol fondo. 5, Se mira con atencion la mas cercana, hasta poder calcular con exac- titud 2 qué distancia esté; luego se cierran los ojos. 6. Se lleva despacio un pie hacia esa estrella: después de tocarla hay que asegurarse de que se ha asentado bien el pie. 7. Asiéndose con una mano del borde del pozo, se busca con el otro pie una nueva estrella, yse la pisa con firmeza. 8, Se busca con la mano libre otra estrella y se la encierra con la palma 9. Se suelta entonces la boca del pozo y se busca con esa mano una estrella més. Al encontraria y sujetaria, se mueve el pie que habia pisado la primera. Asi, descolgandose de estrella en estrella, se con- tinda hasta llegar al fondo del pozo. 10.Para salir del pozo, se tapa el espejo con la mano y se abren los ojos © Consigna: escribir nstrucciones para pasar a través del espejo (tra- tando de respetar el modelo anterior en su forma). % El otro lado del mundo © Zona a explorar: la transgresion, la organizacion del discurso. © Dirigido a: chicos y j6venes. 49 © Materiales: textos en los que el paso del plano real al imaginario se produzca sin apelar alugares comunes dela literatura (tales comio sue- fios). A modo de sugerencia, para j6venes: La mujer alada de Adela Basch; Axolot! de Julio Cortazar. Para chicos: De! atro lado de! mundo de Laura Devetach, Los espejitos de Michel Butor, £/ mar preferido de Jos piratas de Ricardo Mario. © Motivacién: leer el cuento elegido, estimular los comentarios acer- ca dela relacion entre realidad y fantasia (provocar un torbellino de ideas) 9 Consigna: a} (para jévenes):construir una historia en la que se produzca una ruptura con el mundo cotidiano, ) (para chicos): inventar un modo de llegar rapidamente al otro lado del mundo o responder a la pregunta: gcémo salir del aula sin que la sefiorita se dé cuenta? % Transformaciones © Zona a explorar: la organizacién del discurso, el juego y el azar. © Dirigido a: chicos 0 jévenes, depende del texto motivador. © Material: un poema que contenga niicleos narrativos 0 un texto narrativo con elementos poéticos. © Motivacién:escribiren la pizarra o en un papel afiche, con letra cla- ra, un fragmento de poema u otro texto adecuado. Pongamos por caso: Hasta ahora Hasta ahora yo he sido Bastante cuidadoso 50 | Bastante solemne y grave He respetado el apellido gris La demacrada faz de la familia Hasta ahora Hasta hoy que he llenado A mi tio la boca de papeles mojados Micuet Baawer'# ° Se trajo en el corazén Un pez de! mar de la China A veces se ve cruzar diminuto por sus ojos No olvida siendo marino Los bares y las naranjas Mira el agua. Feoenico Garcia Lonca’® © Consigna:desarrollar una historia en baseal ntcleo narrativo del poerna (si lo elegido es un texto narrativo, extraer palabras y armar un poema). © Ejemplo de produccion: Se trajo en el corazén una gran pena a su regreso de China, Vi- no como apagado...con su barquito habia ido hasta alli en bus- cade aturdimiento y escapismo, porque en la ultima época ha- bfa vivido muy tenso, sobre el filo. En China esperaba encontrar mujeres y algunos para(sos artificiales. Las tres primeras semanas cumplié con sus planes, pero luego en- 14 En: Nueva poesia de América, seleccién de Alberto M. Perrone, CEAL, Col, Biblio~ teca Bésica Universal, Buenos Aires, 1970. 15 Garcia Lorca, Federico, en Antotogia poética, seleccién de Guillermo de Torre y Ra {el Albert, Buenos Aires, "Ed, Ed, Losads, 1973, 51 elm contréalgoquelo marcaria paratodala vida. Unpez del marde la Chi- ‘na que semejeba una quimera de la época de las Seis Dinastias, una porcelana purpura, verde, amarilayroja, vina. Demasestadecirque se enamoré del animal a primera vista. El pez le respondi favo- rablemente. Vivieron tres hermosas jornadas 2 full, donde el pez mostr6 toda su simpatia y su tetnura. Pero abruptamente, al cuarto dia, el pez murié de un ataque de caspa. A nuestro héroe se le rom- pié el corazén, pero luego pensé en embalsamarlo y pintarlo para Que no perdiera su fluorescencia y pegarro en la puerta del bafio. A\ salir de su habitaci6n, el jueves catorce, cudl no seria su amar- ga sorpresa al encontrar el barco desierto y los huesos del ama- do junto a una nota que rezaba: Chau Guardé en una caja, regalo de cumpleafos, los restos del al- morzado y decidié regresar pensando con despecho en la fideli- dad de su siviente Lotengoacé, en|a piecita del fondo, todoel dia sentado, lorando, con los huesos de un pez chino, miréndolos con ternura. A ve- cesse ve cruzarpor su mejila una légrima. Diminuto por sus oj0s, el brillo de la amargura olvida, siendo marino, la resignacién y el coraje, Los bares y las naranjas también entran en su olvido. Y con fatil esperanza de encontrar otro pez que reponga su amor chino, siempre mira el agua. EA. 14.ahos ® Normas IRAM* de escritura © Zonaa explorer. la transgresién, organizacién del discurso, el jue~ go yel azar. © Dirigido a: chicos 0 jovenes. 16 Normas IRAM: especificaciones ténicas normatizadas 52 ‘© Motivacién: disponer sobre la mesa un cartel que diga: Pliego de condiciones para construir un suefio Dar una somera descripcion de lo que es un Pliego de condicio- nes real (por ejemplo uno para construir una escuela, con espe- cificaciones técnicas, estudio de costos, etcétera). © Consigna: desarrollar el enunciado del cartel, respetando la for- ma de un Pliego de condiciones. * El reino del revés © Zona a explorar: la transgresién, el juego y el azar, la organiza- cién del discirso. © Dirigido a: chicos 0 jévenes. ‘8 Materiales: el cuento El otro lado de Alejandro Aura, el poe- ma/cancién El reino del revés de M.E,Walsh 0 la grabacion menos di- fundida Erase una vez... de Juan Goytisolo, y explicar la hipétesis fan- ‘astica que proponia Gianni Rodari en Gramdtica de la fantasia (ver bibliogratia en pag. 110), © Consigna: En el caso de utilizar el primero de los libros men- cionados, elegir una de las siguientes preguntas y desarrollar la res- puesta ¢Queé pasaria si un rey se volviera sirviente? Qué pasaria si un sirviente se volviera rey? 2Qué pasaria si tu maestra se volviera alumna? 53 # iA inventar se ha dicho! © Zona a explorar- el juego y el azar, la organizaci6n del discurso. © Dirigido a: chicos 0 j6venes (depende de los titulos ofrecidos) © Materiales: carteles con titulos de libros (cada coordinador ma- nejaré su propio bagaje de lecturas, tratando de mezclar ttulos que su- gieranhumor, suspenso, aventuras, es decir que proporcionenalgin in- grediente de interés) © Motivacion: elegir (mediante algin juego de coincidencias) pa- rejas que trabajaran la consigna. Una vez elegidas, disponer carteles con t{tulos de libros (ver abajo titulos para grupo de chicos) en el cen- tro del grupo, en cantidad suficiente como para que sobren dos 0 tres, Cada pareja tomard su titulo. @ Consigna: 2) inventar entre dos un argumento para un libro que se llama- r4comoelcartelseleccionado (ver bibliografia), respetando su desarrollo en principio, medio y final. Los vecinos mueren en las novelas Irulana y el ogronte La gallina de los huevos duros De barrio somos La noche de los ruidos I cazador oculto Candido Griemen en el arca El princioe de Blancanieves EI dueno de los animales (Alf... ! La sefora Planchita Pahicaplapa El regreso de los Alagatos Botella al mar Seis veces Lucas La felicidad de los ogros ‘Nunca seré un superhéroe Un mar muy mojado © Postproduccién: cada pareja leera su argument y luego se pon- drén a votacién, para elegir la historia que mas les interese. De ser po- sible, se dispondra del iro original que responde al titulo ganador, pa- ra que los chicos puedan leerio. b)escribir a partir de diversos titulos motivadores recortados de diarios y revistas. A modo de ejemplo Los mufiecos invaden el centro de Cérdoba Espectacular fuga en Francia Volar por primera vez Artistas del budin inglés %& Sacate el antifaz. © Zonaaexplorar:la memoria, la organizaci6n del discurso, latrans- agresion © Dirigido a: j6venes ‘& Materiales: Cuento Conducta en los velorios de Julio Cortézar"” (perteneciente al libro Historias de Cronopios y de fama). © Motivacién: lectura del cuenta citado. 17 Cortézar, Julio. En: Historias de cronopios y de famas, Buenos Aires, Ediciones Mi- notauro, 1969. 55 © Consigna:imaginar Conductaen....(ejemplos: sala de espera del con- sultoriodeldentista, un cumpleaios, unareunién delospadresdel curso pa- ra preparar el viaje de estudios, etc) y relatar desde un tono humoristico. + ZY qué pasa después? © Zona a explorar. ja memoria, la organizacion del discurso, el jue- goy elazar ‘9 Dirigido a:ninoso jévenes (depende delas frasesusadas ena con- signa) © Materiales: frases en las que se deposite algo inquietante, una palabra extrafa, una accién fuera de contexto, una duda. © Motivacién: mostrar carteles con las frases elegidas 0 copiarlas en la pizarrra. © Consigna: elegir una frase para iniciar una historia o un poema. © Bjemplo de produccién “Escapé, aquella noche.” “Las cigarras, de nuevo, las cigarras.” "2Y ella, qué te dijo?” " Cierto dia, el hombre del sombrero negro desaparecié" “La abeja se acercaba peligrosamente” " {Qué asco!” ® Los mundos invisibles @ Zona a explorar: la transgresién, el juego y el azar, la organiza~ cién del discurso, 56 © Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: lectura de fragmentos de libros que ofrezcan unaidea demundos diferentes (Ejemplos para nifios: Lagorgonetaenelpantano sarampionoso de Raquel Piaggio, Los chichirica del charco de la jicara de Julia Calzadilla Nafiez, Nicolodo viaja al Pafs de la Cocina de Gra- ciela Montes. Ejemplos para adolescentes: E/ misterio del planeta mu- tante de Eduardo Abel Giménez, Los dias del venado de Liliana Bodoc, CCrénicas Marcianas de Ray Bradbury, Alicia en el pais de las maravillas de Lewis Carroll). © Consigna: imaginar un planeta absurdo, extrafio o imposible y describirlo, con o sin habitantes. © Ejemplo de produccién A vos que vivis en Tristina donde todo el mundo esta triste, a vos que vivis en Tristina te digo que no te pongas triste porque a pesar de fa lluvia constante, la felicidad existe den- tro tuyo. Sélo buscale. A vos que vivis en Tristina te digo te quiero. CR 12 ats. © Repetir los pasos de la propuesta anterior, dirigiendo las lectu- rashacia los animales o seresimaginarios (Sugerencias para nifios: Qué animales de Ema Wolf; La serpenta de Onelio Jorge Cardozo, De Uni- cornios e hipogrifos de Sandra Siemens, E/ peludorrinco de Graciela Pérez Aguilar. Para adolescentes: Libro de los Seres Imaginarios de Jorge Luis Borges, Dragon de Gustavo Roldén, Unicornis de Michel Green) y proponer que imaginen un animal absurdo, extrafio o im- posible y lo describan, 57 — ® Sin anestesia © Zona a explorar: organizacién del discurso. © Dirigido a: j6venes. © Estimulaci6n: leer fragmentos de libros que contengan descrip- ciones muy adjetivadas (Platero y yo de Juan Ramén Jiménez, por ejem- plo) y hacer que lo copien sin adietivos. © Reflexionar sobre el original y la version desnuda, comparando las posibilidades expresivas de uno y otra. ** Se me hace agua la boca © Zona a explorar. la memoria afectiva. Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: galletitas saladas y dulces, gajos de narania, delimén, ‘trozos de manzanas u otras frutas, caramelos de menta, ramas de hier- bas aromaticas, etc. Con jovenes puede incluirse también un termo con café, elementos para tomar mate, etc. © Motivacién: se prepara una gran bandeja con los alimentos des- criptos, antes de que el grupo ingrese. Una vez que se acomoden, pa- sar la bandeja en ronda, que cada uno elja el gusto a probar o a oler. Recordar qué comida les gusta més, qué cosas ricas cocina la abuela (0 abuelo, o madre, etc.) y cémo se hacen. @ Consigna 2) recordar 0 inventar la receta de esa comida especial b)una vez com © Ejemplo de produccién Magia, era pura magia. Todos peleando y jugando, en dos ollas sé encogia una pila de duraznos. Nada por aqui, nada por alls, ‘s6lo duraznos y aziicar que durmiendo en la heladera aparecen banados en almibar. £1 fuego desde la manana lame el piso de fa olla. La impaciencia crece en fa familia. Después de intermina- bles horas, un olor tine la casa, un puftados de pequerios sobre Jasilla se contonea porver los colores bailando en la paila. Una len- {gua se quema por besar la cuchara de madera. Un hilera de fras- cos que se distrazan de vitraux, el mundo se ve hermoso a través de ellos. LD. 16 anos El baul de la abuela © Zona a explorar: memoria, organizacion del relato, el juego y el azar, la transgresion. ‘© Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: una maquina de fotos (mejor si es antigua), varias fo- tos que también pueden ser antiguas (en lo posible instantaneas que muestren diversas situaciones). © Motivacion: para jovenes, acompafamos con lectura de textos que de algtin mado remitan a fotografias 0 poemas que semejen des- cripciones de fotos. Todos los participantes se sientan en torno a un centro lleno de fotos viejas. Laméquina pasaré de mano en mano, y cada uno mirard por el visor y describiré oralmente, en forma breve, como es la foto toma- da al grupo. Después cada participante elige una fotografia de las que estan en el centro, 59 :_ | © Consigna: imaginar y escribir la historia que hay detrés de la fo- to elegida, 0 de un fragmento de la misma, o de alguno de los foto- grafiados. @ Para chicos, todos los participantes se sientan en torno a una ca- ja llena de fotos. Después se agrupan de a parejas, eligen una de las fotos de la caja. imaginan la historia de esos personajes 0 de alguno de ellos, a partir de las siguientes preguntas: eQuiénes son? {Como se llaman? @D6nde viven? dEn qué trabajan? ZA dénde se fueron? Qué les pas6 en ese jugar? {Como terminé todo? © Consigna: escribir los rasgos principales de alguno de esos per- sonajesy su historia @ Ejemplo de produccién Vivia en el décimo piso. Raul era musico y lo habla sido desde que tenfa memoria. Con su aire de soledad y su saxofon a cues tas recorria los bares y las cantinas de la zona para ganarse el pan. Lagente lo observaba cuando se sentaba, extrario, en algun rin~ én poco iluminado del bar. Con su boina negra, sus anteojos . ‘oscurosy su barba algo crecida, sacaba entonces su brillante sa- xof6n para ejecutar alguna melodia més extrafia ain, invaria- ble y profundamente triste. Luego recogia las ganancias con su boina, las contaba, las guardaba en el bolsillo de su viejo aco y se marchaba internandose en una zona que parecia tra~ garselo. LG. 15 afos, fragmento 60 *® Mesa de lecturas |" © Zonaa explorar. memoria afectiva, azar, organizacion del discurso, Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: lioros de cuentos o de poesia en cantidad mayor ala de los asistentes. @ Motivacion: 1. El coordinador coloca cada libro sobre la mesa, lee el titulo, autor, y trata de despertar la codicia lectora creando el cima con algun bre- ve comentario, ola lectura de fragmentos 2. Se invita a los participantes a elegir un libro y leer durante algunos minutos, indicdndose quees posible cambiarel texto por otro queha- ya quedado sobre la mesa 3. Se pide que eliian un par de versos 0 una frase y la copien. © Consigna: escribir un texto (poesia 0 prosa) a partir de la frase tomada como epigrafe Mesa de lecturas Il ® Zona a explorar: organizacion del discurso, el juego y el azar. & Destinatarios: chicos 0 jévenes, depende de los textos. © Materiales: varios libros de cuento. @ Motivacion: servirlos cuentos, dar diez minutos de lectura y re- tirar los libros atin cuando no los hayan terminado (y protesten). 18 A partir de un difundido ejerccio de Teresa Pagnotta, 61 Anotar luego en el pizarrén algunos comienzos de historias. © Consigna: seguir esas historias hasta encontrarles un final ‘Amodo de sugerencia, estos inicios: “antes de ser como fue después, Juan Sebastian era muy distin- to..." (Patricia Suarez, E! Dormilén). "Cuando yoera todavia muy pequefia no conociaamiabuelo muy bien del todo...” (Christine Néstlinger, El abueo misterioso) "Yo soy la mayor. Me llamo Juliana. Naci un dia nueve del mes nueve, de...” (Yolanda Reyes, Los arios terribles) + Habia una ve: © Zona a explorar: organizaci6n del relato. © Destinatarios: chicos 0 jovenes. ‘© Materiales: cuentos de maravilla, © Motivacién. lectura de inicios de varios cuentos clésicos. Se re- parten copias de £! caballo de Chuang Tzu (ver Postdata, pag. 89). © Consignat escribir un texto gue transcurra en-un pais lejano, manteniendo los momentos narrativos (inicio, desarrollo, fin). G Ejemplo de produccién Santa Clara La vide empez6 con una oveja y Santa Clara comenz6 a existir cuando el universo todo era un ovillo. Fue entonces cuando un sseflor que era un gran artesano comenz6 a tejer. Asi, de una mis- ma hebra, surgié primero un hombre de angora y més tarde una 7 hermosa mujer punto arroz. No tardaron en enamorarse y jun- tos procrearon al resto de la gente en crochet. Todos juntos bai- Jaron e hilaron Santa Clara. En Santa Clara casi todos eran de lana; sdlo una pequeria elite era de hilos de seda. Tados eran hermanos, sin embargo los pun- toatrés eran marginados. Vivian detrés de la montafia y nadie se dignaba a mirarlos a los ojos. Un dia desolasfiiante llegaron a la ciudad los hombres de tela. Ve- tian dispuestos a hacer la guerra y asi lo hicieron. Avanzaron sin piedad por elvalle destejiendo todoa su paso yllegaron ala montana donde los puntoatras los esperaban, armadios hasta las dientes. Después de una lucha encarnizada, de los hombres de tela slo quedan jirones y de las puntoatras, una pelusa J. M. 18 afios, fragmento. ‘ Cartero si en tu cartera carta viniera” @ Zona a explorar. memoria, organizacién del discurso. © Dirigido a: adolescentes. © Materiales: libros construidos sobre la base de cartas, cartas apor- tadas por el coordinador, viejas cartas de familia, seccién consultorio sentimental de revistas del corazon, e-mails aportados por las partici- pantes, 0 cualquier otra variante del género epistolar. © Motivacién: en nuestro caso, se leyé una seleccién de cartas ex- ‘traidas del libro Amores para armar, de Liliana Viola. © Consigna: desarrollar una historia a través de una o varias cartas, para mandar por correo o mensajes a enviar por e-mail. 19 Primer verso de un poema de Jorge Vacos Lescano, 63 —— © © Postproduccién: comentar entre todos las caracteristicas del tono epistolar, las posibilidades que ofrece, sus diferencias con el email, etcétera # Otras opciones para intercambiar mensajes © Con jévenes: trabajar de a pares con definicién de roles previa (soldadoypadre de compariero muerto; adolescente/fhermana menor; padre/ija que vive lejos) © Con chicos: dividirlos en grupos de a dos y pedir que A escriba una carta a By B se la conteste. Postproduccién: comentar cémo estan escritas las cartas, % Coproduccién a @ Zona a explorar: la organizacion del discurso, el juego y el azar, la transgresién © Dirigido a: adolescentes. ‘© Materiales: letras de canciones de diversos géneros. ‘© Motivacion: colocar sobre la mesa textos de canciones nuevas y Viejas con nivel poético, desde Los Redonditos de Ricota y Charlie Gar- cla @ Atzhualpa Yupanqul. Invitarlos a leerlas. Consigna: incluir alguna letra de cancion en un texto, como leit motiv, fragmento cantado o recordado por un personaje, etcé- tera. 6a # La yapa Repetir el mismo procedimiento anterior pero en lugar de can- ciones, colocar textos con propagandas televisivas y radiales de diver- sas épocas, con una consigna similar a la ya expuesta. Es posible pedirles en un encuentro anterior que miren tele- vision y anoten frases publicitarias, jingles, marcas de productos, etc,, tales como Ala limpia mas blanco, Cola Colaes sentirde verdad, etc El coordinador recoge los papelitos, los mezcla y los reparte. © Consigna: escribir en grupo un texto en donde figuren esas fra- ses que les tocaron. # _iQuées un acréstico? © Zona a explorar: el juego y el azar, la organizacion del discurso. & Dirigido a: chicos 0 jovenes. © Motivacién: elegir una palabra y escribirla de forma vertical. Por ejemplo: mabronorn © Consigna: 2) a partir de cada letra escribir la primera palabra que se les ocurra, ‘b) usando la misma palabra, proponer que en cada linea com pleten una frase, 0) definirel gusto del chocolate usando cada letra como comienzo del linea. Generar otras propuestas con el material obtenido. i escribir al muse: © Zona a explorar. la percepcién sensorial Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: laminas 0 postales con repraducciones de pinturas. Sino se dispone de ellas, se sugiere hacer fotocopias en color de ilus- traciones para libros infantiles de buen nivel estético, ovsitar realmente algdn museo o galeria de arte. © Motivacién:las éminas pasan de unamanoa otra, se contemplan, tal vez el coordinador sugiere algtin detalle en especial para observar. Si a alguno esa pintura le dice algo, se la queda. © Consigna: escribir una historia a partir de la imagen Juegos de palabras | © Zona a explorar: la incorporacién del juego y del azar, la trans- gresion, Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: carteles con palabras largascortadasen dos (por ejem- plo: MUR/MULLO) © Motivacion: leer poemas de autores que inventaron palabras (a modo de ejemplo: Olivero Girondo, Jacques Prévert, Vicente Huidobro, Xavier Villaurrutia, etc.) © Consigna: elegir cartones e inventar con los fragmentos nuevas palabras e incluirias en un poema. © Ejemplo de produccién Miles de cielos vuelan en seco ‘Murmurucumba lasuliralda Comen sus vidas y piden el vuelto Murmurucumba lasuliralda Visten con poco y se cortan ef pelo Murmurucumba lasuliralda Cuecen fas habas y yo no las pruebo. LD. 17 afios 4 Juegos de palabras Il © Consigna: incluir en un texto una palabra en sentido figurado (por ejemplo: medio) o una palabra utilizada con distintos sentidos © Ejemplo de produccién Media hora después Con medio corazén de papel Que se deshacia en suspiros secos La calle gris mediaba Entre mi y mi pasado partido por e! medio o7 ero ya era tarde Entonces me dirigi como siempre ‘A.comprar medio kilo de pan. LBA. 15 afios Juegos de palabras Ill © Consigna: a partir de la lectura del poema inventario de Jacques prevart (en este caso lefdo.ajovenes) o Con esta moneda me voy acom- ver, de Maria Elena Walsh (para chicos) pedir que escriban un inven- prc (de su habitacion, mochila, aula, etc.) o que hagan una lista de lo que desearian comprar © Ejemplo de produccion na habitacion en desorden descomunal Un cenicero atestado de colilas La pintura de mi amor sin causas Elvacio relleno de desvarios Las hordas de la boca poética La vide y la muerte I cara de Washington que sonrie en un délar ‘Que se quema. El futuro Los rios de llanto Los almacenes que me venden el triunfo Los vendidos que intentan que me venda 1a paz de tu mirada que provoca guerra en mis entrafas Un estudio impuesto La cara de Washington en un délar que ya no se quema Un hombre que dice ser mi padre Una mujer que dice ser mi madre Un ser contenido que dice ser yo Alguien que crea amor Ahora son mis suefios los que se queman en un délar. Unamor sin ti, amor Un rifle de caramelo Una pluma con cartucho Experiencias por vivir Experiencias ya vividas Falta de experiencia Burdos consejos humanos La esencia de mis suefios que flotan en el aire, perseguidos por el humo negro que deja e! délar quemado. E.Ch. 17 afios Yo tenia. © Zona a explorar: la memoria. © Dirigido a: adolescentes. @ Materiales: cuento La pelota Lapelota Cuando yo tenia ocho aftos pasé una larga temporada con mi abuelaen una casita pobre. Un tarde le pedi muchas veces una pe- lota de varios colores que yo vela a cada momento en el alma- én. Al principio mi abuela me dijo que no podia comprarmela, y que no la cargoseara: después me amenaz6 con pegarme; pe- 6 70 ro al rato y desde la puerta de la casita -pronto para correr- yo le volvia pedir que me comprara la pelota. Pasaron unos instan- tes y cuando ella se levanto de la maquina donde cosia, yo salt corriendo, Sin embargo ella no me persigui6: empez0 a revolver un badl ya sacar trapos. Cuando me di cuenta de que queria ha~ cer una pelota de trapo, me vino mucho fastidio. Jamas esa pe- Iota seria como la del almacén. Mientras ella la forraba y le daba puntadas me decfa que no podia comprar la otra y que no habia ms remedio que conformarse con ésta. Lo malo era que ella me decia que la de trapo seria més linda: era eso lo que me hacia ra- biar. Cuando la estaba terminando, vi cémo ella la redondeaba, ‘uve un instante de sorpresa ysin querer hice una sonrisa; peroen- seguida me volvia encaprichar. Al tirarla contra el patio el trapo blanco del forro se ensucié de tierra: yo la sacudia y a pelota per- diala forma: me daba angustia de verla tan fea; aquellonoerauna pelota; yo tenia la ilusion de la otra y empecé a rabiar de nuevo. Después de haberle dado las mas furiosas patadas me encontré con que la pelota hacia movimientos por su cuenta; tomaba di- recciones ¢ iba a lugares que no eran los que yo imaginaba: te- nla caprichos que me hacian pensar que ella tampoco tendria ga- nas de que yo jugara con ella. A veces se achataba y corria con una dificultad ridicula; de prontoparecia queiba a parar, pero des- pués resolvia dar dos o tres vueltas més. En una de las veces que le pegué con todas mis fuerzas, no tomé direccién ninguna y qued6 dando vueltas a una velocidad vertiginosa. Quise que eso se repitiera pero no lo consegui. Cuando me cansé, se me ocu- rrié que aquel era un juego muy bobo: casi todo el trabajo lo te- nia que hacer yo: pegarle a la pelota era lindo, pero después uno se cansaba de ira buscarla a cada momento. Entonces la aban- doné en la mitad de! patio. Después volvi a pensar en la del al- macén y a pedirle a mi abuela que me la comprara. Ella volvi6 a negarmela, pero me mandé a comprar dulce de membrillo (cuan- do era dia de fiesta 0 estabamos tristes, comprabamos dulce de membrillo). En el almacén no quise mirar la otra, aunque sentia que ella me miraba a mi con sus colores fuertes. Después que nos comimos el dulce yo empecé de nuevo a desear la pelota que mi abuela me habia quitado, pero cuando me la dio y jugué de nuevo me aburti muy pronto. Entonces decial ponerla en el por- t6n y cuando pasara uno por la calle tirarle un pelotazo. Esperé sentado encima de ella. No pasé nadie. Al rato me paré para se- guir jugando y al mirarla la encontré més ridicula que nunca: ha- bia quedado chata como una torta. Al principio me hizo gracia y me la ponfa en la cabeza. La tiraba al suelo para sentir el ruido sordo que hacia al caer contra el piso de tierray por tiltimo la ha- da corer de costado como si fuera una rueda, Cuando me volvi6 el cansancio y la angustia le fui a decir a mi abuela que aquello no era una pelota, que era una torta y que si ella no me compraba la del almacén yo me moriria de tristeza. Ella se empez6 a reir y a hacer saltar su gran barriga. Entonces yo puse mi cabeza en su abdomen y sin sacarla de alli me senté en unasillaque miabuela me errimé. Labarrigaera como una gran pelota caliente que subia y bajaba con la respiracién. Y después yo me fui quedando dormido, ‘FeusBeRTO HERNANDEZ? © Motivacién: leer el texto, Proponer que cada uno escriba en cin- co minutos un listado de objetos de la nifiez o un listado de recuerdos agradables y desagradables. Enumerarlos por escrito, muy brevemen- te. Leerlos en voz alta para el grupo. © Consigna: elegir uno de los objetos 0 uno de los recuerdos y des- arrollarlo en un texto, # Erase que se era. © Zona a explorar: la transgresién, la organizacion del discurso. 8 Dirigido a: j6venes. 20 Hernandez, Felisberto. En: El cocodhilo y otros cuentos, Buenos Altes, CEAL, 1971 n @ Materiales: cuentos infantiles breves, seleccionados para atrapar a los lectores adolescentes. © Motivacion: leer cuentos de autores actuales, transgresores, con humor acido, como Ema Wolf, Horacio Clemente, Luis Maria Pescetti, Gustavo Roldén. Observar las caracteristicas de estilo. © Consigna:escribir un texto que pueda gustarles a los mas chicos. # iSoy una maquina! © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresién, la organiza~ cién del discurso. © Dirigido a: chicos 0 jovenes. © Motivacion: se pide que escriban raépidamente sustantivos y adjetivos hasta completar una pagina (encolumnados). Hacer otra pé- gina con verbos. © Consigna: combinar entre las colurnnas varios conjuntos no I6- gicos y desarrollar un texto. + No, noyno © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresién, la organiza- cién del discurso, la memoria © Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Motivacién: recordar en grupa los "no" corrientes en la escuela (gr- tar, empujar, etc, etc). Para jovenes, se sugiere leer Camello declaradoinde- seableo Vietato introdurre in biciclette de Historias de cronopios y de famas de Julio Cortazar (ver indice, o cualquier otro texto que narre prohibiciones. © Consigna: construir un texto con oraciones que empiezan con la palabra No. % Confesiones inesperadas © Zona a explorar: la memoria, la organizacién del relato. © Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Materiales: poner sobre la mesa cartelitos con némeros 0 escri- birlos en la pizarra. Que algunos sean facilmente reconocibles como afios. Proponerles que elijan varios y que los ordenen como sise trata- ra de un diario intimo: por afio, por dia, por hora. © Motivacién:lectura de fragmentos de un libro con formato de dia- rio Intimo, A modo de ejemplo, se cita E/ diario de un gato asesino de Anne Fine. © Consigna: inventar un personaje que escriba algunas paginas de un diario, segin las fechas elegidas # Increible pero real © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresién, la organiza~ cién del discurso. © Dirigido a: jovenes. 73 © Motivacién: leer con ellos la Historia de la andariega del agua, que viajé rio adentro y noche arriba, del libro Las palabras andantes de Eduardo Galeano. © Consigna: escribir una historia con un personaje fantastico que se defina por una pasion © Ejemplo de produccion Sal6n, péjaros y ventanas En medio del safén lustroso yo inventaba péjaros. Las hacia azu- les. Un dla descubri que afuera rodaba el sol. Entonces abri las ven- tanas y entraron las tajadas de calor doredo. Algunos pajaros se es- caparon. Emigraron tal vezaotros salones. Uegaron nuevos péjaros. Hizo frio y tuve que cerrar las ventanas. Mis péjaros quedaron prisioneros. Afuera, de. ratos rodaba el sol, de a ratos hacia fro. Alo primero yo abria las ventanas. A lo segundo las cerraba. Mi vida se convirtié en un abrir y cerrar de ventanas, y sobre todo ‘en un volar de péjaros y pajaros y pajaros. Todos azules, algunos inventados. M.C.de0., 18 afios & Reciclado © Zona a explorar: la organizaci6n del discurso, el juego y el azar, la transgresin, Dirigido a: chicos 0 jévenes (ejercicio grupal) ‘© Materiales: poemas diversos copiados sobre cartulina © Motivacién: lectura de poemas. i © Consigna: cortar el poema recibido palabra por palabra, luego poner en un recipiente o una bolsita los recortes, mezclar bien y des- parramarlos sobre una superficie lisa. Con esas palabras armar un po- ema (se pueden dejar algunas sin utilizar, pero no incluir las que no esten alll). A modo de sugerencia, uno de los poemas que ofrecimos. El tomate es un rojo almohadén de seda Lo ponen en ia mesa, se queda. Lo ponen en el plato, se queda. Rojo. Rojo. De seda Se queda. Eoirs Vera! El habito hace al monje © Zona a explorar: memoria, juego y azar, organizacién del relato. © Dirigido a: jovenes. ‘© Motivaci6n: lectura de El reparto de los suenios en Flores (texto incluido en Crdnicas del angel gris, de Alejandro Dalia). ‘© Consigna: elegir uno de esos suefios y describir cémo se imagi- 1na cada uno al personaje que lo soni. 21 Vera, Edith. La casa azul, Garabato Ediciones, Cérdoba, 2001 5 — © Postproduccién: comparar los personajes y que cada autor de- fienda al suyo. + &Como era que era? © Zona a explorar: la percepcién sensorial, la organizacién del dis- curso, la memoria. © Destinatarios: chicos o jovenes. © Motivacion: anunciar que es muy importante la precisi6n en es- te ejercicio, porque en gran medida depende de ella Consigna: describir una naranja (0 un huevo, o una ventana, ©...) para un extraterrestre que nunca ha visto tal objeto. © Postproduccién: al leer los textos se observan las dificultades pa- ra encontrar las palabras precisas (no se conocen, muchas veces, los nombres técnicos necesarios), Suelen presentarse situaciones muy di- vertidas, de las que el coordinador podré extraer nuevas propuestas. Me hago la pelicula © Zona a explorar: la organizacién del discurso. © Destinatarios: chicos 0 jovenes. © Materiales:el coordinador armara una cinta con un guién musical so- bre la base de efectos sonoros (hay en el mercado discos esto Hollywood con llantos de bebé, pasos, disparos, autos arrancando, pero igual se consi- ‘guen efectos aclecuados grabando secuencias de diferentes ruidos en casa). 76 i . F © Motivacién: en completo silencio, hacer ofr la cinta, © Consigna:escribir un texto quese correspond con los sonidos del casete. % Fantasma, ven a mi © Zonaaexplorar-lamemoria, ja organizacion del discurso, latrans- gresion. © Dirigido a: chicos 0 jovenes. © Materiales: dependersn de las lecturas previas y del medio. @ Motivaci6n: sies zona rural, tratar de que los participantes apor- ten sus propios relatos. Si es zona urbana, investigar si conacen histo- rias de fantasmas y sino, leer alguna. A modo de sugerencia E! pueblo de mala muerte de Beatriz Actis. @ Consigna: escribir sobre una leyenda, una creencia, 0 una su- perstici6n. © Postproduccién: reflexionar sobre las diferencias entree! lenguaje escrito y el oral. © Zona explorar:el juego y del azar, la organizacién del discurso, 22 Verso del poeta Conrado Naleé Roxlo. 7 Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Motivaci6n: leer a poetas que juegan con las sonoridades (a modo de sugerencia: Oliverio Girondo, Vicente Huidobro, Nicolas Guillén, Maria Elena Walsh, Luis Pales Matos, Cecilia Meireles, Ho- mero Expésito).. © Consigna: inventar algtin juego sonoro e incluirlo en un texto. # Resucitando exquisitos cadaveres* © Zona a explorar:€l juego y del azar. © Dirigido a: chicos 0 jévenes. © Consigna: cada integrante escribe dos lineas de lo que se lo ocu- rre primero, y dobla la hoja ocultando la primera. Se la pasa a otro, quien repite la operacion, y asi hasta acabar con todos los participan- tes. Luego de leer el texto resultante, se decide entre todos el titulo, * Casi perro ‘© Zonaaexplorar: memoria, percepcion sensorial, organizacién del discurso. © Dirigido a: chicos. © Material: el libro Aventuras y desventuras de Casiperro del hambre 23 Variacion de aquel experimento surrealsta que se lamé El cadaver exquisit. 78. de Graciela Montes, yunao varias fotografias(orecortes de revistas) con perros de distinto tipo + © Motivacién: se lee un fragmento del libro elegido, acaso la fra- se primera del libro de Montes. “Si mi madre hubiese tenido dos tetas mas, mis desdichas no habrian siquiera comenzad Luego se muestran largamente las imagenes, que pueden pasar de mano en mano. © Consigna: escribir como si fueran uno de esos perros de las fo- togratias. * Aver quién escribe mas rapido © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresién, la organiza- ién del discurso. Dirigido a: chicos o jévenes. © Materiales: cuentos 0 poemas, musica. © Motivacién: el coordinador elige un cuento © poema que le gus- te especialmente. Lo lee. Cierra el libro y pone una masica de fondo (es preferible que sea instrumental y tenga buen ritmo). © Consigna: escribir lo que se les ocurra sin parar, hasta que la mu- sica termine. 24 Nota: con chicos muy pequefios puede hacerse un ejercicio similar partir del le bbro Mochito de Nelly Canepari (edicién de la autora, précticamente agotado sal- vo en bibliotecas) 79 Erase que era . © Zona a explorar: organizacién del discurso, el juego y el azar © Destinatarios: chicos 0 jévenes. © Motivaci6n: leer 0 contar un cuento de hadas. Anotar en el pi- zattén algunos elementos de esos cuentos y hacer con ellos pequefios {grupos (los mas interesantes contienen una combinacién de persona~ jes, objetos y lugares). Por ejemplo: Princesa Principe Anillo gro Bruja Bosque Castillo imén . © Consigna: escribir (0 contar) una historia donde se incluyan esos elementos. . * Puro bla, bla, bla. © Zona a explorar: organizacion del discurso, memoria. © Dirigido a: chicos 0 jovenes. © Motivacion: leer un texto que incluya dislogos (por e|. Efoso que 100 lo era de Frank Tashlin o Paseo con alifunto de Javier Villafane). Pro poner opciones varias de construccién de dislogos (escribirlas en el piza~ rrén 0 en carteles). A modo de ejemplo, para el primero de los casos: ) E1.Oso del cuento habla con una maestra. b) La maestra habla con el Oso del cuento. ©) El Oso del cuento habla con la directora del colegio. ) La directora del colegio habla con el Oso del cuento, 2) Elos0 del cuento habla conmigo, f) Yo hablo con el Oso del cuento. © Consigna: elegir una de esas posibilidades y escribir un dislogo. Puede realzarse también distribuyendo losrolesdea dos, dar un tiem- po para intercambiar opiniones y pedir luego que leven el diaiogo al papel. El regreso de las metéforas muertas © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresién, la organiza- ion de! discurso. © Dirigido a: chicos 0 jovenes. © Materiales: lstas de lugares comunes usados entre chicos 0 j6- vvenes (0 escuchados a los mayores. El coordinador seleccionara los que a su juicio sean los de uso mas frecuente en su grupo). Por ejemplo Cortala de una vez Qué copado Estd de la nuca Soy una tumba Este chico me saca canas verdles ‘Me robé el corazén Cuando le clavé la mirada Borate del mapa ‘© Consigna: elegir de la lista uno de esos lugares comunes y ha- cerse preguntas sobre el sentido ltera/dela expresion. Por ejemplo: ¢qué le pasa a alguien que corta (a alguien) de una vez?, .cémo quedaré una persona que esta copada?, cy al que se borra de! mapa?, 20 al que le salen canas verdes?, 0 se convierte en una tumba?), etc. Desarro- llar la respuesta por escrito, en textos breves 81 4 Mapas comprados y recetas caseras @ Zona a explorar: la organizacién de! discurso, el juego y el azar. Dirigido a: chicos o jévenes. ‘© Materiales: carteles previamente confeccionadosporelcoordinador. @ Motivaci6n: leer poemas varios de Zoo Loco de Maria Elena Walsh o de Disparatario de Elsa Borneman. Disponer sobre la mesa los siguientes carteles (o uno de ellos) Mapa del Pais del Nomeacuerdo Reglamento para viajar en calesita Catdlogo para una exposicién de gatos © Consigna: elegir un cartel y desarrollarlo en una historia, Proponer que todos copien los carteles, y que luego traten de in- ventar en sus casas historias con los que no eligieron ese dia Yo vivi en una ciudad extraiia llamad Eudora, 13552, Quiramir, Q3.t, Uscumatanga, Aleteia. © Zona a explorar: el juego y el azar, la transgresi6n, la organiza- cién del discurso. © Dirigido a: chicos o jovenes, dependerd de los nombres elegidos © Materiales: carteles con nombres de ciudades. También pueden escribirse en el pizarrén. 82 © Motivacién: hacer entre todos una lluvia de ideas sobre las co- sas que hay en esas ciudades raras. El coordinador anota en el pizarron los elementos més inquie- tantes, 0 con mas posibilidades de generar historias, para que queden a la vista de todos. © Consigna: describir la ciudad rara elegida. Esta consigna puede desarrollarse en forma individual o en grupos. Para terminar, leer por ejemplo La nifa que ilumind la noche de Ray Bradbury. @ Gjemplo de produccién Piindental esta vacia, después de muchos afios estd vacia. Uno a uno sus habitantes se fueron, Deshojada, marchita, descansa gris en fas montafias del oeste. No he sabido can exactitud por qué a abandonaron....(....la vide alll, ademas de tranquila, era sencilla y pura, transparente, Pero un dla, en hileras oscuras como culebras, 'se alej6, cada vez mas hasta no quedar nada. Tal vez sombras.. LF. 14 aftos ‘@ Marche un culebron © Zona a explorar: la organizacién del discurso, la transgresion, ® Dirigido a: adolescentes. © Motivacién: leer un cuentocon elementos contrapuestos, gran estimulo visual y posibilidades de didlogo (Por ejemplo, Pardbola de! Trueque de Juan José Arreola). Disponer la formacién de grupos. Ex- plicar técnicas basicas para escribir un guién de telenovela, Recor- dar, entre todos, las puntos fundamentales en el desarrollo de la tra- ma elegida.

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