En primer lugar, buenas noches directivos, docentes, queridos compañeros, familiares e
invitados. Nos encontramos esta noche reunidos aquí, para celebrar el fin de una etapa muy importante en nuestras vidas, la secundaria; que para muchos de nosotros fue en un inicio todo un desafío, ya que a la hora de considerar la inscripción parecía que tres años serian eternos, que no lo podríamos lograr, por el trabajo, por los hijos, los horarios que nos dificultarían los estudios, la interminable y terrible época de pandemia y muchas otras cosas, pero logramos demostrarnos a nosotros mismos que pudimos con todas esas adversidades, encontramos la fuerza para darnos cuenta de que si podemos, que merecemos una vida mucho mejor, mucho más completa y feliz y así logramos alcanzar esta meta. Con la ayuda y el apoyo incondicional que nos brindaron en la escuela descubrimos múltiples opciones para construir nuestros futuros y hoy podemos pensar en ellas con facilidad, con entusiasmo e inspiración. Descubrimos muchas herramientas, carreras o profesiones que nos gustaría ejercer, negocios que nos gustaría construir, así como también nos dimos cuenta de que no somos las mismas personas que ingresaron ese primer día con confusión al establecimiento, que hoy somos más fuertes. De más está el enorme agradecimiento a nuestras familias y amigos, que estuvieron en cada momento brindándonos su apoyo incondicional. A los profesores, preceptores y directivos por cada hermoso momento vivido en el CENMA, por el acompañamiento y las oportunidades, por cada capacitación, cada festejo, cada viaje, cada anécdota, y el cariño inmenso que cada uno le pone a su profesión para hacer de esta experiencia algo hermoso y alentador. A mis compañeros, agradecerles por cada risa, cada ayuda y por cada coca que hemos compartido; solo puedo decirles que deseo lo mejor de la vida para cada uno de ustedes, que sigan con ese hermoso entusiasmo y voluntad este camino que se llama vida, nunca dejen de crecer, de cultivarse, de poner a prueba sus habilidades, y de desafiarse a ustedes mismos, persigan sus sueños con confianza, paciencia y valor; vivan con inmenso amor cada momento, no paren de progresar, de aprender, sean los mejores en todo lo que hagan y disfruten cada día como si fuera el ultimo. Sigan brillando que la vida es abundante y hermosa. Sin duda recordaremos estos 3 años con mucha nostalgia y alegría por los momentos vividos, pero como dicen, esto no es un adiós, sino, un ¡Hasta pronto!. Para finalizar este discurso, he citado un poema especial del autor Alfredo D´Souza: ‘’Baila, como si nadie te viera, Ama, como si nunca te hubieran lastimado, Canta, como si nadie te escuchara, Trabaja, como si no necesitaras dinero, Vive, como si tuvieras el cielo en la tierra.’’ Alfredo D’Souza.