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PUBLICO MILITAR

EJÉRCITO ARGENTINO
Regimiento Infantería Mecanizado 8

COMODORO RIVADAVIA, de mayo de 2005

INSTRUCCIÓN DE: Cuadros

MATERIA: Educación Ético Espiritual y Social

TEMA: "Batalla de Pichincha"

CLASE DE TRABAJO: De Gabinete Subof Pr HUGO JOSE PERALTA

DADO POR: J RI Mec 8 "Grl O' HIGGINS"

TIEMPO CONCEDIDO: 15 días

DESARROLLO

Aquellos hombres con las armas de la patria lograron afianzar nuestra Independencia, trepando los
Andes y bajando a tierras de Chile y Perú, no en son de conquista, sino de libertad.

Pero la empresa aún no estaba concluida. El General Bolívar solicitó auxilios para proseguir la
campaña de Quito; El LIBERTADOR GENERAL JOSÉ DE SAN MARTÍN ordena "Es indispensable que
sin perdida de tiempo el Coronel Santa Cruz integre una división con los Coroneles Olazábal y Lavalle y se
incorporen a las tropas bolivarianas.

Así, con la naturalidad de quien realiza una empresa fácil definió el Padre de la Patria su notable
hazaña.

La noche del 23 de mayo de 1822, al emprender su marcha, la copiosa lluvia que se desprendió no
amedrentó a los batallones de la libertad. El grupo seguía lentamente una senda escabrosa para trepar por la
falda del volcán Pichincha.

La estrategia era llegar a retaguardia e interceptar a los realistas su comunicación con Pasto.

Clareaba en la cumbre; su vanguardia coronaba ya las alturas. El coraje brillaba en los semblantes de
los granaderos de los Andes, poseídos de la bravura de su jefe, y deseosos de hacerle sentir al enemigo el
peso de sus sables.

El combate comenzó con una ofensiva contenida por el Coronel Olazábal que ordeno formar en
batalla, poner sable en mano y cargar con firmeza oponiendo así una barrera impenetrable por mas de una
hora.

Los realistas intentan flanquear la izquierda del ejército libertador, aprovechando la espesura del
bosque que los protege; pero es en vano su suerte esta sellada. Llega al campo de combate el propio general
Sucre con los batallones de Yahuachi y Piura, deseosos que sus bayonetas abran el sepulcro de los tiranos. El
combate encarnizado dura tres horas. Las Fuerzas españolas comienzan a rendir sus armas.

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Los Granaderos dispersan la caballería enemiga; la resistencia intenta retirarse en desorden para caer
luego prisioneros de guerra.

La victoria espero a la división libertadora con los laureles del triunfo sobre las faldas del Pichincha,
y juntos dieron su sangre por un mismo sueño: la libertad de Ecuador.

Camaradas: la batalla de Pichincha consagro el extraordinario esfuerzo de un ejercito patriota,


guiado por la genialidad del libertador, que fue por sobre todo, hombre de una causa: la causa de la Patria.

La Banda Militar de nuestro histórico Regimiento tiene el orgullo de portar su nombre.

Hoy nosotros, herederos directos de su gloria, en nuestra Patagonia que sabe de agitados vientos y
crudos inviernos, tenemos la responsabilidad de librar una Pichincha en cada instante de nuestras vidas.

Elevemos el pensamiento y roguemos que el ejemplo del Santo de la espada sea la fuente inspiradora
para la preparación de nuestra batalla diaria, y nos guié con la convicción de los fuertes y con altivez propia
de un soldado, sin ambiciones mezquinas, y sepamos entregar nuestra alma en la victoria o en la derrota,
pero siempre por el camino del honor.

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FONDO:

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