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Síntesis del Libro del Profeta Oseas

Oseas vivió en el reino del norte de Israel, al cual él a veces llama Efraím o Jacob, la
historicidad se ubica cerca de doscientos años después de que ellos se separaron del
reino de Judá (Parte Sur).

Oseas fue llamado a hablar en nombre de Dios durante el reinado de uno de los peores
reyes de Israel; Jeroboam II. La nación fue descendiendo a un caos debido a su
prostitución, a su infidelidad (Idolatría), y en el año 722 el gran y malvado imperio Asirio
terminó traicionándolos, se abalanzó, y diezmó a Israel.
El libro del profeta Oseas contiene la predicación de cerca de 25 años que duró su
ministerio profético y es un libro con alto contenido poético, la cual podemos dividir en 3
secciones principales donde se puede enfatizar de la siguiente manera:

- El matrimonio de Oseas y Gomer


La parte inicial cuenta la historia del matrimonio dañado de Oseas a una mujer llamada
Gomer, quien ha cometido adulterio. No está del todo claro si Gomer durmió con otros
hombres antes o solo después de que se casaron. De todas formas, tuvieron 3 hijos y las
cosas se desbarataron, cabe resaltar que Dios instruyó a Oseas a nombrar a sus hijos
con nombres proféticos que hablaban del Juicio del Señor sobre Israel. A su primer hijo lo
nombró Yizreel (Dios dispersa) pues era una advertencia inminente de que Dios mismo
los dispersaría si no se arrepentían; a su segunda hija la nombró Lo-ruhamá (no
compadecida) pues Dios ya no se compadecerá de Israel; por último, a su tercer hijo le
puso por nombre Lo-amni (no son mi Pueblo) pues para Dios ellos no eran su pueblo y
para ellos Dios no era su Señor. Dios le dice a Oseas que todo esto, el matrimonio
dañado y arreglado y los niños, son todo un símbolo profético que cuenta la historia de la
relación de Dios con Israel. Es decir que Dios ha sido como un esposo fiel a Israel. El los
rescató de la esclavitud. El los trajo al monte Sinaí donde El selló un pacto con ellos. Él
les pidió que fueran fieles solo a Él. Luego guio a Israel a la tierra prometida. Ellos, sin
embargo, tomaron toda la abundancia que Él les dio y la dedicaron a la idolatría de Baal.

Frente a la infidelidad de Israel, Dios renueva su pacto con el pueblo de Israel.


Ahora bien, ante la conducta del pueblo de Israel, Dios tiene una razón legítima de
terminar el pacto y divorciarse de Israel. Dios, sin embargo, dice que va a buscar otra vez
a Israel y renovar el pacto con ellos, pues se mantiene la esperanza por una futura
restauración. Un día Israel se volverá a arrepentir y volverá a adorar a su Dios. Oseas
también dice que además Dios pondrá sobre ellos un nuevo rey mesiánico de la línea de
David quién traerá la bendición de Dios y será para todas las naciones lo compara con un
árbol frondoso.

En esta sección inicial, por tanto, el autor nos presenta las ideas principales del Libro de
Oseas. Israel se ha rebelado contra Dios, lo que va a traer consecuencias severas para el
Pueblo de Israel. Sin embargo, el amor y la piedad del pacto de Dios son más poderosos
que el pecado de Israel.

- Acusaciones, advertencias, piedad y esperanza


A partir de ahí, en las secciones que quedan del libro, la poesía de Oseas explora estos
temas en mayor profundidad. Encontramos ahora dos colecciones de sus acusaciones y
advertencias para Israel. Luego, cada una de estas es concluida por un muy
esperanzador poema acerca de la piedad de Dios y la esperanza para el futuro. En los
capítulos del 4 al 10, Oseas explora las causas y efectos de la infidelidad de Israel. Dice
numerosas veces que Israel carece de todo conocimiento o entendimiento de Dios. La
palabra hebrea para «conocer», la cual es Yadá, este “conocer” es más que solo una
actividad intelectual, el conocimiento debe incluir una relación personal para que el pueblo
lo conozca verdaderamente. Es la diferencia entre solo saber acerca de alguien y
realmente conocer a alguien.
Dios quiere que Israel lo conozca a Él de esta manera, y su relación sea así. Él quiere que
ellos experimenten su amor por ellos y se vuelva el tipo de conocimiento que transforme
sus corazones y vidas para que ellos lo amen también.

Mas acusaciones y advertencias


Dios les dice que todo se va a derrumbar en sus cabezas. Que en poco tiempo Asiria se
les volverá en contra y destrozarán sus tierras. En esta otra sección de advertencias,
Oseas les da una lección a través de una antigua historia Israelita para mostrarles como
esta familia ha sido infiel desde el principio.

Les menciona la mentira y traición del patriarca Jacob (recordemos Génesis 27 y 28).
Menciona la rebelión de Israel en el desierto (recordemos el libro de Números). Menciona
el nombramiento del corrupto rey Saúl, quien guio a su pueblo al pecado y al desastre (1
Samuel). Es la manera que utiliza Oseas para decirles, que «algunas cosas en esta
familia nunca cambian.» ¿Cuál es entonces la esperanza que tiene Oseas? En el capítulo
3 sabemos que Dios va a hacer algo para salvar y restaurar a su pueblo y eso es lo que
estos dos capítulos finales exploran. El capítulo 11 es muestra de ello pues el poema
describe a Dios como un padre amoroso que crio a su hijo Israel y que compartió todo con
él. Sin embargo, el hijo creció, se rebeló y se enfrentó a su papá, tomando ventaja de su
generosidad con lo que, en este poema, Dios queda destrozado al ver cómo ha sido
olvidado todo esto. Él naturalmente se enfada y le dice que todo esto va a traer severas
consecuencias. Sin embargo, al momento siguiente Él se encuentra con el corazón roto y
le dice que ha sido movido por su piedad y compasión y que va a perdonar al hijo que el
ama. Le dice: “cómo voy a dejarte Efraím? Mi corazón se agita dentro de mí. Toda mi
compasión es alborotada.”

De la misma manera, mientras Dios permitió que Israel fuera conquistado por Asiria,
sufriendo las consecuencias de su infidelidad, esa no es la última palabra de Dios.
Todavía hay esperanza y de eso es de lo que trata el último capítulo. Oseas llama a Israel
a arrepentirse y volver a su Dios. También sabe que esto no durará mucho porque nunca
ha pasado anteriormente.
Dios dice que un día el curará sus caprichos y los amará libremente. Dios sigue
describiendo este nuevo y curado Israel como un árbol exuberante que produce raíces
profundas y ramas anchas, y ofrece sombra y fruto a todas las naciones.
Síntesis del Libro del Profeta Amos

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