Está en la página 1de 7

OBJETIVO 2.

PROPORCIONAR SERVICIOS DE
ASISTENCIA SOCIAL Y DE
SALUD MENTAL INTEGRALES,
INTEGRADOS Y ADAPTABLES EN
ENTORNOS COMUNITARIOS
La planificación, organización y financiación de
los sistemas de salud es una tarea compleja
que requiere la participación de múltiples partes
interesadas y niveles administrativos.
Los gobiernos son responsables de establecer
arreglos institucionales, jurídicos, financieros y
de servicios apropiados para garantizar la
atención de las necesidades de salud mental de
la población.
La gobernanza también implica la
colaboración con organizaciones no
gubernamentales y la sociedad civil,
especialmente aquellas representativas de
personas con trastornos mentales y
discapacidades psicosociales, para formular
políticas y crear servicios de salud mental más
eficaces
Para los Estados Miembros, se proponen acciones como formular y actualizar políticas y
legislación relacionadas con la salud mental en todos los sectores pertinentes, asignar
presupuestos proporcionales a las necesidades de salud mental, involucrar a las partes
interesadas en la formulación y aplicación de políticas y fortalecer las organizaciones de
personas con trastornos mentales y discapacidades psicosociales.

Para la Secretaría, se proponen acciones como compilar conocimientos y prácticas óptimas


sobre políticas y legislación de salud mental, ofrecer apoyo técnico en planificación de
recursos, colaborar con partes interesadas a nivel internacional, regional y nacional, y
fortalecer y empoderar a las organizaciones de personas con trastornos mentales y
discapacidades psicosociales en la formulación de políticas.
El objetivo 2 es proporcionar servicios de asistencia social y de salud
mental integrales, integrados y adaptables en entornos comunitarios. Se
recomienda desarrollar servicios integrales de salud mental y asistencia
social de base comunitaria, integrar la asistencia de salud mental en
hospitales generales y atención primaria, promover la intervención
temprana y respetar los derechos humanos y la dignidad individual en la
prestación de servicios comunitarios de salud mental.
Se necesita un enfoque multisectorial donde los servicios apoyen a las personas en
diferentes etapas de la vida, facilitando su acceso a derechos humanos básicos como
el empleo, la vivienda y la educación. Se requiere una mayor participación de los
usuarios en la organización y evaluación de los servicios, así como una colaboración
con prestadores informales de atención. Es esencial que los servicios respondan a las
necesidades de grupos vulnerables y marginados, y que estén disponibles en
emergencias humanitarias. La exposición a eventos estresantes puede tener graves
consecuencias para la salud mental, por lo que se necesita un enfoque cuidadoso en la
caracterización diagnóstica y la provisión de apoyo adecuado. La disponibilidad de
profesionales sanitarios competentes y bien formados, así como la integración de la
salud mental en los servicios generales de salud, son fundamentales para mejorar los
resultados y prevenir los trastornos mentales.
Las acciones propuestas para los Estados Miembros incluyen la reorganización de los
servicios de salud mental para priorizar la asistencia en centros de salud no
especializados, así como la integración de servicios de atención física y mental.
También se propone mejorar la respuesta en emergencias humanitarias y reforzar la
formación del personal sanitario para ofrecer servicios de salud mental científicamente
contrastados. Además, se insta a corregir las desigualdades en el acceso a los
servicios. Por otro lado, las acciones para la Secretaría incluyen brindar asesoramiento
y apoyo técnico para la desinstitucionalización y reorganización de los servicios de
salud mental, así como extender las labores de tratamiento y prevención mediante
servicios comunitarios.
Se propone una atención integrada y adaptable para personas con trastornos mentales,
que incluya la reunión y difusión de datos científicos y prácticas óptimas para la
integración y coordinación multisectorial de la atención holística. Además, se ofrece
asesoramiento y pautas técnicas para abordar la salud mental en emergencias
humanitarias, la planificación de recursos y la corrección de desigualdades en los
servicios sociales y de salud mental. Para los asociados nacionales e internacionales,
se sugiere destinar fondos a la prestación directa de servicios comunitarios, contribuir a
la formación del personal de salud, y secundar iniciativas coordinadas para aplicar
programas de salud mental en situaciones de emergencia y post emergencia.

También podría gustarte