Está en la página 1de 1

Carta de despedida

Hola María, espero que te encuentres bien.

Hemos pasado un buen tiempo separados a distancia y pues, de todo lo que ha pasado
últimamente me he visto en la decisión de darle un fin a la relación nuestra. Me duele mucho,
pero es lo mejor.

Debido a tu poca reciprocidad conmigo, quise e intenté entenderte, consolarte, estar para ti todo
el tiempo que me necesites, pero terminé abandonándome a mí mismo. Pensé que al poder
hablar contigo de manera clara y precisa podríamos llegar a un acuerdo de pareja pues ya la
relación se tornaba en decaída poco después de que te cambiaron de lugar en el trabajo, y
aunque muchas veces di la iniciativa para poder vernos, no llegamos a nada, tan solo desvíos por
parte tuya, solo quería poder verte y que podamos disfrutar de un día libre, mínimo 2 veces al
mes. De un día para otro cambio tu manera de tratarme y lo noté, quise arreglar las cosas, pero
no puedo interferir en lo que haces con tu vida.

Solo te pedí una cosa, y es que seas honesta conmigo, ¿recuerdas aquella vez que bajaste a
verme y dar una segunda oportunidad a la relación?, habíamos quedado en que, si uno de los
dos ya no siente nada por el otro o simplemente quiere tomar un camino diferente, hablarlo.
Pues ahora resulta que no pudiste cumplir con el acuerdo que propusiste, te pregunté aquella
vez si todavía sientes algo por mí y que si tu respuesta era un negativo yo lo aceptaría, pues yo
mismo te dije que nos queramos el uno al otro sin tratar de poseernos, ni tu ni yo somos dueños
de la vida del otro y que somos libres de elegir a la persona indicada y entregar nuestro amor,
no fuiste clara con tu respuesta y decidiste evadirlo.

Siempre evité las discusiones y peleas innecesarias, pues no hacía más que alejarnos. Soy
consciente de que también he tenido fallos, nadie es perfecto en esta vida, pero tenemos la
capacidad de poder mejorar y esa fue mi voluntad respecto a la relación. Desgraciadamente todo
esto terminó de una forma muy dramática, ojalá pudieras aprender a escuchar.

Nunca tuve la intención de traicionar lo nuestro y siempre te lo aclaré. Ahora me doy con la
sorpresa de que te contaron y sospechaste que yo andaba con otra persona lo cual no es cierto
y nunca sería capaz de hacerlo porque no forma parte de mis valores y desprecio rotundamente
ese tipo de acciones. A pesar de todo ello no consigo poder convencerte de que me creas, ya no
sé que hacer, estoy herido y aun así trato de estar de pie.

A veces lastimamos a otras personas y no nos damos cuenta, quisiera que pudieras entenderme,
no con la intención de que reiniciar todo sino para que trates mejor a la gente que te quiere de
verdad. Solo me preocupo por ti, pero ya no eres la misma mujer que conocí. Lamentablemente
no puedo sacarlo de mi mente todos esos recuerdos de los buenos momentos que pasamos,
eras esa mujer de la cual me enamoré profundamente.

Te agradezco por todo lo bonito que viví contigo, pues el algún momento de mi vida fuiste lo que
deseé. Ahora tengo que seguir mi camino sin ti.

Que te vaya bien y espero que las cosas puedan mejorar en tu vida, te quiero.

También podría gustarte