KARLITA: Hola chicos, hoy tengo que arreglar la moto de la hermana Yulissa, pero no sé

cómo hacerlo, hasta ahora solo he arreglado carros en el taller mecánico de Don
tuercas… Ah, permítanme presentarme, mi nombre es Karlita Sánchez y soy la asistente
del Don Tuercas.
EL TUERCAS: (aparece Tuercas) Qué haces Karlita, ya arreglaste la moto de Doña Yulissa ,
mira que va a venir a recogerla por la tarde, ¿o tienes alguna duda?, ¿necesitas que te
ayude en algo?
KARLITA: ¿Dudas?, no, es papayita, yo puedo hacerlo sola, no te preocupes Tuercas.
EL TUERCAS: Ah bueno, regreso por la tarde, tengo que ir a comprar unas herramientas.
KARLITA: Está bien, vaya tranquilo.
LETRETO: (Horas después)
KARLITA: (Entra mirando a los niños), ¿qué hago niños?, ¿le digo que no la pude
arreglar?, era que le pida su ayuda, don Tuercas es el experto y sabe arreglar todo tipo de
carros y motos. Pero nunca es tarde para pedir ayuda a quien conoce más que yo, ¿niños
le pido ayuda?
(se acerca a Don Tuercas)
Tuercas, Tuercas.
EL TUERCAS: ¿Qué pasó Karlita? ¿Dónde está la moto?
KARLITA: Tengo vergüenza, ummmm. Lo que pasa es que tenía mucha vergüenza de
pedirte ayuda porque no había arreglado motos antes y en lugar de pedirte ayuda, dije
yo que yo podía sola, pero intenté e intenté y no pude sola.
EL TUERCAS: Karlita pero debías tener confianza en mí, yo estoy para apoyarte y
enseñarte cuando algo no sabes, yo te puedo ayudar siempre. Bien, ahora vamos a
arreglar esa moto que nos queda una hora, anda alistando las cosas. (Karlita se va).
Saben chicos, esto me hace recordar que a veces nos podemos encontrar en momentos
difíciles en los que creemos que estamos solos y no podemos vencer los problemas, pero
con la ayuda de Dios y su poder todo siempre se puede solucionar, es cuestión de pedirle
a Dios en oración que nos ayude y él siempre estará dispuesto a escucharnos y
ayudarnos, recuerda que no es con tus fuerzas sino con las de Dios.