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17
Y descendió con ellos, y se detuvo en un lugar llano, en compañía de sus
discípulos y de una gran multitud de gente de toda Judea, de Jerusalén y de la
costa de Tiro y de Sidón, que había venido para oírle, y para ser sanados de sus
enfermedades; 18 y los que habían sido atormentados de espíritus inmundos
eran sanados. 19 Y toda la gente procuraba tocarle, porque poder salía de él y
sanaba a todos.
Bienaventuranzas y ayes
Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los
20
21
Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados.
Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
22
Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os
aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa
del Hijo del Hombre. 23 Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro
galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas.
24
Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo.
¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. ¡Ay
25
26
¡Ay de ustedes cuando todos los elogien!
Dense cuenta de que los antepasados de esta gente trataron así a los falsos
profetas.
17
Y descendió con ellos, y se detuvo en un lugar llano, en compañía de sus
discípulos y de una gran multitud de gente de toda Judea, de Jerusalén y de la
costa de Tiro y de Sidón, que había venido para oírle, y para ser sanados de sus
enfermedades; 18 y los que habían sido atormentados de espíritus inmundos
eran sanados. 19 Y toda la gente procuraba tocarle, porque poder salía de él y
sanaba a todos.
Bienaventuranzas y ayes
Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los
20
¿Bienaventurado por ser pobre? Eso no tiene sentido, pero si vemos el contexto
el hombre pobre debe buscar en los demás lo que necesita. Ya que no puede
mantenerse por sí mismo. Cuando Jesús dice Bienaventurados vosotros los
pobres hace referencia a ser "pobre en espíritu" (lo podemos ver en mateo 5)
significa reconocer nuestra necesidad total de Dios. Cuando abandonamos la
arrogancia y dependemos por completo de Dios, encontramos la verdadera
riqueza espiritual y experimentamos la plenitud de Su Reino.
En otras palabras, somo pobres en espíritu cuando no nos valemos por nosotros
mismos, sino que dependemos de nuestro Padre celestial. Somos pobres de
espíritu cuando queremos más de Dios. Por eso somos bienaventurados cuando
tenemos esa necesidad de Dios, y le buscamos con toda nuestra fuerza.
El reino de Dios es para esos pobres que necesitan a Dios para vivir, para tener
una nueva vida. El reino de Dios es para los que no pueden vivir por su propia
voluntad, sino para los que viven por la voluntad perfecta de Dios.
21
Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados.
Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
En este versículo, Jesús habla de las bendiciones que recibirán aquellos que
sufren en la actualidad. Aquellos que tienen hambre serán saciados, y aquellos
que lloran experimentarán la alegría. Jesús está prometiendo consuelo y
recompensa para aquellos que sufren. Esto es reconfortante para aquellos que
están pasando por momentos difíciles. A menudo, cuando sufrimos, nos
enfocamos en el dolor y en la dificultad, perdiendo de vista la esperanza de que
las cosas mejorarán. Pero Jesús nos recuerda que el sufrimiento no es el final. Él
promete que aquellos que sufren ahora encontrarán alivio y recompensa. Pero
hay que ser perseverantes y muy pacientes en tiempos de sufrimiento, y es que
en esos momentos donde es muy tentador darse por vencido y perder la
esperanza, pero Jesús nos llama a seguir adelante y confiar en sus
promesas.
22
Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os
aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa
del Hijo del Hombre. 23 Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro
galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas.
Las Escrituras nos dicen que cuando servimos al Señor, seremos rechazados y
maltratados por muchas personas. Jesús mencionó que si el mundo nos odia es
porque lo odió mucho antes a él
Juan 15:18
18
Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a
vosotros.
Hebreos 12:2
2
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo
puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la
diestra del trono de Dios.
Recuerda que nuestra recompensa está en los cielos.
24
Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo.
¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. ¡Ay
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El mensaje detrás de este verso es que aquellos que buscan la voluntad de Dios
en lugar de las cosas del mundo experimentarán la verdadera felicidad y
satisfacción. En lugar de enfocarnos únicamente en nuestras finanzas y bienestar
personal, debemos trabajar en desarrollar nuestra relación con Dios.
26
¡Ay de ustedes cuando todos los elogien!
Dense cuenta de que los antepasados de esta gente trataron así a los falsos
profetas.
En la actualidad, vivimos en una sociedad que nos vende una imagen falsa por
medio de las redes sociales sobre cómo debemos ser, cómo debemos vestir,
qué debemos hacer y qué debemos decir. Muchos de nosotros,
inconscientemente, nos esforzamos por complacer a los demás y ser aceptados.
Pero lo que Jesús nos está diciendo es que debemos tener cuidado con este
enfoque, porque a largo plazo no es sostenible ni saludable.
Hoy pregúntate
¿he estado buscando la aprobación de los demás en lugar de hacer lo que es
correcto y verdadero?
Este versículo nos advierte sobre los peligros de seguir a los falsos
profetas. Cuanto más se centran en ganar la aprobación y la popularidad de las
personas, menos valiosas y genuinas serán sus enseñanzas y acciones. Por lo
tanto, debemos estar atentos con las voces que escuchamos y seguir solo
aquellas que están basadas en la verdad de la palabra de Dios.
Un falso profeta es una persona que difunde falsas enseñanzas o mensajes
mientras dice hablar la Palabra de Dios. En la Biblia, los falsos profetas también
hablaban en nombre de falsos dioses. Los falsos profetas ejercían su función
profética de forma ilegítima o con el propósito de engañar.
Debemos ser fieles a nuestros principios, incluso si esto significa que no siempre
seremos aceptados y valorados por el mundo. Debemos mantenernos firmes y
no caer en la presión social que nos hace perder nuestra esencia y apegarnos a
la verdad y al amor, evitando seguir a los falsos profetas.
Conclusión
Las bienaventuranzas son una hoja de ruta para vivir vidas santas y ser
bendición para otros reflejando el carácter de Cristo. Siguiendo estas
bienaventuranzas, nos convertimos en instrumentos de la gracia divina y
ayudamos a construir el Reino de Dios en la tierra.
Oración
Que estas palabras de Jesús guíen nuestra vida y nos inspiren a vivir en plenitud
y bendición.