Cuando este año nos designaron los cursos siempre lo visualicé como un nuevo desafío, un nuevo grupo,

nuevo año, nuevas personalidades, logros y dificultades.

Así comenzó este ciclo, con la seño Inés diciéndome: ¡Son maravillosos! Y dándome indicaciones y
recomendaciones, como hacemos siempre las maestras al recibir un nuevo grupo.
Cada uno, me conquistó con sus particularidades. Por eso, en esta oportunidad, les quiero regalar algunas de
ellas.

Bauti Aguirre: Dulce y perseverante.

Agus: madura y dedicada.
Brisa: generosa y colaboradora
Isabella: dulce y amigable
Fran: trabajador y respetuoso
Sofí Castaño: respetuosa y aplicada
Gonza: dulce y compañero
Sofí coronel: respetuosa y valiente
Ailen: Cariñosa y sincera
Bauti Encina: constante y dedicado
Santi: trabajador y generoso
Alma: cariñosa y aplicada
Elías: sincero y perseverante
Abi: constante y amigable
Arelí: independiente y sincera
Yami: observadora y capaz
Valentina: amable y capaz
Leonel: respetuoso y maduro
Tizi: hábil y responsable
Araceli: paciente y compañera
Bruno Ragno: independiente y respetuoso
Luana: divertida y capaz
Joaquin José: trabajador y divertido
Joaquín Maximiliano: perseverante y respetuoso
Bruno Rodriguez: solidario y amigable
Lucio: aplicado y prolijo
Cristian: dulce y compañero
Lautaro: sincero y responsable
Priscila: cariñosa y aplicada
Zoe: dulce y perseverante
Morena: creativa y extrovertida

Por último, les digo, no cambien esas cualidades y sean felices, que, ¡¡lo mejor… está por venir!!
No cambien estas hermosas cualidades y sean felices, que… ¡Lo mejor está por comenzar!