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Este nuestro señor cura La casa del señor cura La casa del señor cura
ojalá viva cien años, no tiene más que una cama, nunca se vio como ahora:
que toca bien las campanas si en la cama duerme el cura ventana sobre ventana,
y da buenos aguinaldos. ¿dónde coño duerme el ama? y el corredor a la moda.
Las monjas del convento Las monjas en el coro Llévala, galán pa adentro,
me llaman loca, dicen cantando: que ya la tienes por tuya,
pues me gusta el pandero entre tantas hermanas tres veces dijo que sí
más que la toca. no hay ni un hermano. delante del señor cura.
Los cojones del cura Los cojones del cura Los curas y los frailes
de Villalpando van por el río, y los laureles,
los llevan cuatro bueyes y el cura va diciendo: como no tienen fruto,
y van sudando. ¡cojones míos! siempre están verdes.
Los curas y taberneros Los frailes de San Francisco, Mañana salgo de caza
son de la misma opinión: cuando no tienen qué hacer, con el morral del alcalde,
cuantos más bautizos hacen, se descosen los remiendos el hurón del señor cura
más pesetas pal cajón. y los vuelven a coser. y la perra de tu madre.
Por las eras arriba Sal, casada, de la iglesia, Salga, señor cura, salga,
va el cura al trote detente en el empedrado, con esa capa de flores
corriendo tras el ama y dale los buenos días a casar la niña blanca,
que va al galope. al cura que te ha casado. que viene con sus amores.
Salga, señor cura, salga, Salga, salga, señor cura, Salga, señor cura, salga,
con esa capa floreada con los libros del casar, salga de la sacristía,
a casar a estos dos novios que los saca pocas veces que está la novia caliente
que vienen de gente honrada. y se van a apolillar. y se está quedando fría.
Señor cura, no me riña Señor cura, señor cura, Señor cura. señor cura,
porque le rondo la esquina, le voy a matar el gallo, que fuistes madre de Cristo,
si no quiere que la ronde que no tengo las gallinas confesor, virgen y mártir,
eche fuera a la sobrina. pa que las monte a caballo y ahora sois Señor Obispo.
Si los curas comieran Tanto cura, tanto obispo, Un fraile de San Francisco
piedras del río tanta monja, tanto fraile, del campanario cayó,
no estarían tan gordos tanta mujer sin marido, San Francisco hizo un milagro
los muy jodíos. y tantos hijos sin padre. y del suelo no pasó.
Venga, señor cura, venga, Vivan los señores novios Yo tuve una novia Carmen
que en casa tengo trabajo, y el cura que los casó, y otra que Carmen se llama,
que se ha caído mi abuelo el padrino y la madrina, voy a poner un convento
y está mi abuela debajo. los envitados y yo. de monjas carmelitanas.