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V

Autoritarismo y el caudillismo
durante el periodo 1844 a 1930

Etapas y respectivos periodos

Etapa 1865-1886

Durante esta etapa, se definieron los rasgos básicos del


caudillismo dominicano y algunos patrones de su actuación.
En esta fase, se establecieron las características
fundamentales del caudillismo en la República Dominicana.
Etapa 1886-1931

Esta segunda etapa se inició en 1886 y culminó en 1931,


cuando fue derrocado el último de los caudillos, el General
Desiderio Arias. A diferencia de la primera etapa, esta fase
no fue homogénea y experimentó varios reordenamientos.
Durante este período, se consolidó aún más la influencia de
los caudillos en la política dominicana.
Características políticas, sociales y militares

Políticas: Estas etapas, se caracterizaron por una serie de


regímenes autoritarios y líderes fuertes que ejercían un
control centralizado sobre las instituciones políticas. El poder
se concentraba en la figura del caudillo o dictador, y las
prácticas políticas no se basaban en la democracia
participativa, sino en un control autoritario del Estado.

Sociales: La sociedad dominicana experimentó


desigualdades significativas durante estas etapas. Los
regímenes autoritarios a menudo mantenían el poder a
través de la represión y el control de la información. Esto
llevó a la marginación de sectores de la población y al
fortalecimiento de las élites dominantes.

Militares: La influencia de las fuerzas armadas fue notable


en estas etapas. Los caudillos y dictadores a menudo
dependían del apoyo militar para mantener el poder. En
algunos casos, como el régimen de Rafael Trujillo, se
estableció un control militar fuerte y una policía secreta para
reforzar el control político.
Principales caudillos

Monción, fue un caudillo astuto y sigiloso, hizo revueltas en


actividades predilectas.

El general Desiderio Arias, que fue de los últimos en ser


derrotado.

Cipriano Bencosme, en este desaparecieron casi todos los


caudillos, menos este.

Ulises Heureaux: Heureaux fue una figura dominante


durante este período, ya que instauró una dictadura en la
República Dominicana.

El General Ramón Cáceres lideró el reordenamiento del


caudillismo y estableció un ejército moderno, siendo
apoyado por élites urbanas por su enfoque en la
construcción del Estado-nación en la República Dominicana.

General Horacio Vásquez fue un líder político dominicano


que participó en la política de la época y se retiró del
gobierno de Cáceres debido a desacuerdos con la Guardia
Republicana.

Céspedes traicionó a Demetrio Rodríguez, contribuyendo a


su muerte, siendo una figura clave en eventos históricos de
la época.
Zonas geográficas de predominio de los
principales caudillos

Ulises Heureaux: Ulises Heureaux estableció una dictadura y


tuvo influencia en varias partes del país, pero especialmente
en Santiago, donde designó a sanguinarios generales como
Perico Pekín. También influyó en Montecristi, donde designó
al general Benito Monción.

Ramon Cáceres: El general Ramón Cáceres ejerció el poder


central en la República Dominicana y promovió un gobierno
más moderno. Su influencia se extendió por todo el país,
contribuyendo a la desarticulación del caudillismo en varias
regiones.

Horacio Vásquez: El general Horacio Vásquez se destacó


como líder y caudillo en Moca, donde lideró la Guardia Juan Isidro Jimenes: Juan Isidro Jimenes tuvo una influencia
Nacional de Moca en 1886. Más tarde, se marchó al exilio, importante en la región de la Línea Noroeste, con énfasis en
lo que marcó el declive de su influencia. Montecristi. Fue respaldado por caudillos noroestanos y
defendió los intereses comerciales y aduanales de la región.

Demetrio Rodríguez: El general Demetrio Rodríguez, a pesar


de ser de Montecristi, destacó por su carácter atípico. Su
influencia se centró en su participación en diversas
aventuras militares y su carácter caballeresco. Fue un
caudillo de carácter valiente y apreciado por su cultura.

Jesús María Céspedes: Jesús María Céspedes traicionó a


Demetrio Rodríguez, lo que condujo a la muerte de este
último. Céspedes estaba alineado con el general Horacio
Vásquez.
Características del autoritarismo,
principales representantes

El autoritarismo en la República Dominicana, se ha


caracterizado por una serie de rasgos distintivos. En primer
lugar, implica una fuerte centralización del poder en manos
de líderes o grupos reducidos que ejercen un control
significativo sobre las instituciones gubernamentales y
militares. Esto resulta en una falta de participación
democrática, donde las elecciones pueden ser manipuladas y
la oposición reprimida. Además, los regímenes autoritarios a
menudo ejercen un control riguroso sobre la sociedad y los
medios de comunicación, limitando la libertad de expresión
Rafael Trujillo (1930-1961): Trujillo gobernó la República y censurando información. La represión política es común, y
Dominicana durante tres décadas con un régimen se utilizan tácticas como arrestos arbitrarios, detenciones y,
personalista caracterizado por la represión, la censura y la en casos extremos, la tortura para silenciar a la oposición.
violencia política. Fue asesinado en 1961. Además, los líderes autoritarios tienden a mantenerse en el

Joaquín Balaguer (1966-1978): Balaguer fue otro líder


autoritario dominicano que ocupó la presidencia en
múltiples ocasiones y se caracterizó por mantener el control
político y restringir la oposición, incluso en elecciones
controvertidas.

Ulises Heureaux (1882-1883, 1887-1889, 1889-1899):


Conocido como "Lilís", Heureaux gobernó en varios períodos
y mantuvo un control firme sobre el país centralizando el
poder. Fue asesinado en 1899.

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