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Hola, que gusto estar aqui, y tener la oportunidad de compartir con ustedes algunas de las

ideas que me han ayudado a transformar mi manera de ver la vida.

Hoy voy a hablarles de un tema apasionante, El Sermón de la Montaña, que es este pasaje del
evangelio de Mateo, que alguna vez la mayoría de nosotros hemos escuchado, pero que casi
nadie lo ponemos en practica, por que lo mas seguro es que no lo comprendamos. A mi,
después de leer el libro del mismo nombre de Emmet Fox, me dio un perspectiva nueva y por
eso hoy quiero compartirla con ustedes.

El Sermón de la Montaña, da un sentido completamente nuevo de la vida y nos presenta unos


valores muy originales.

Antes de entrar de lleno en el tema, cabe mencionar que sin lugar a dudas, Jesus, es el
personaje mas trascendental en la historia de la humanidad. independientemente de lo que
para quien represente, Unos lo consideramos Dios, otros un profeta, otros simplemente un
gran hombre y quizá para algunos hasta un dolor de cabeza. Pero El partió la historia en dos;
su vida y su muerte, así como las enseñanzas que se le atribuyen, han in uenciado a la
humanidad mas que las de cualquier otra persona en el mundo.

Hoy veremos la importancia del mensaje de Jesús, que es un método práctico para el
desarrollo del alma, un método que podemos usar para reformar nuestra vida y nuestro
destino, de manera que podamos hacer de ellos lo que queramos.

Jesús nos explica la naturaleza de Dios y lo que es la naturaleza humana; nos habla del
sentido de la vida y de la muerte; nos enseña porque cometemos errores; porque enfermamos,
empobrecemos, envejecemos y lo que es mas importante, nos enseña como pueden ser
vencidos todos estos males y como podemos tener salud, felicidad y prosperidad verdaderas.

Si los cristianos conociéramos y practicáramos este mensaje, dejaríamos de ser víctimas de


las circunstancia para convertirnos en protagonistas responsables de nuestro destino.

Algo muy importante de las enseñanzas de Jesus, es que cada persona por equivocada que
esté, por lo impresa que esté en el pecado, tiene acceso a un Dios de misericordia paternal y
todopoderoso que nos perdona y nos da la fuerza para retomar el camino todas las veces que
sea necesario.

Una cosa que hemos hecho los hombres, no se porque, es disminuir a Dios y crear ideas
falsas de Él, lo humanizamos, y lo representamos como un rey que puede estar feliz o enojado
y que te puede dar premios o castigarte. Otra es que lo diminuimos y le decimos “Diosito” yo
creo que esto es por el hecho de que nos da miedo su poder, porque El poder de Dios, está
dentro de mí que he sido creado a su imagen y semejanza; pero, si yo creo que soy la imagen
y semejanza de Dios y El es poderoso, entonces, yo también soy poderoso; pero ese poder,
me hace responsable, y eso me asusta, entonces, mejor diminuyo a Dios y me disminuyo yo
también.
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Esto lo vemos claramente, con los milagros, a la gente nos incomodan los milagros, los que
creemos que Jesús hizo milagros, (porque hay de plano los que ni siquiera creen que eso haya
podido pasar) nos gusta pensar que los hizo Jesús y ya. O que los grandes santos los hicieron,
todo en el pasado. Pero yo no se si nos da miedo creer y que no se realicen, o nos asusta el
poder de Dios y mas nos asusta el poder de Dios en mi, pero la verdad es que los milagros
nos escandalizan y nos dan miedo. Yo creo que tiene mucho que ver con que nos da miedo
ser extraordinarios y salirnos de la manada. Y como no es mas comodo que los milagros no
sucedan, pues no suceden.

Es importante recalcar que el único que hace milagros es el Padre, pero Jesús hacia milagros
porque tenía la certeza del poder del Padre. Es importante que nosotros nos demos cuenta de
este poder y sepamos que por medio de la oración, podemos cambiar las cosas.

Una cosa muy importante a dejar en claro es que Jesús no hacía milagros para que vieran que
poderoso era, los hacía para probarnos a nosotros que también podemos hacerlos y librarnos
del pecado, de la enfermedad y las limitaciones.

Jesús nos demuestra la Verdad, la inegable realidad de que todo (el mundo, el cuerpo, la vida,
la lluvia, todo) está sujeto al pensamiento del hombre y que él puede dominarlo cuando
adquiere consciencia de ello.

Y aqui volvemos a lo mismo de la imagen y semejanza. Dios es creador, nosotros como sus
hijos, somos cocreadores y todo se crea a partir de un pensamiento. Por eso, los
pensamientos que a lo largo del día, ocupan nuestra mente, forjan nuestro destino, hacia lo
bueno o lo malo. Está en nosotros elegir la clase de pensamientos que albergamos.

Jesucristo, enseñó la Verdad, pero mas que nada la encarnó en su propia persona o, sea, la
demostró. Algunos de nosotros podemos comprender esta verdad, pero lo que demostramos
es muy diferente. Aceptar la verdad es el primer paso, pero hay que demostrar esta verdad
hasta la victoria

Algo muy importante de mencionar es que cada vez que superamos algo, por medio de la
oración, prestamos una ayuda a toda la raza humana. Jesús al vencer todas la limitaciones a
las que la humanidad vive sujeta, llevo a cabo una obra de valor único e incalculable y por eso
lo llamamos el Salvador del mundo.
Mateo 5
El Sermón del monte: Las bienaventuranzas
1Al ver la multitud, Jesús subió al monte y se sentó. Sus discípulos se le
acercaron,
2y él tomó la palabra y comenzó a enseñarles, diciendo:
3«Dichosos los que tienen espíritu de pobres,

porque de ellos es el reino de los cielos.


4»Dichosos los que sufren,

porque serán consolados.


5»Dichosos los mansos,

porque heredarán la tierra prometida.


6»Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia,

porque serán satisfechos.


7»Dichosos los compasivos,

porque Dios tendrá compasión de ellos.


8»Dichosos los de corazón limpio,

porque verán a Dios.


9»Dichosos los que trabajan por la paz,

porque Dios los llamará hijos suyos.


10»Dichosos los perseguidos por hacer lo que es justo,

porque de ellos es el reino de los cielos.


11»Dichosos ustedes, cuando la gente los insulte y los maltrate, y cuando

por causa mía los ataquen con toda clase de mentiras.


12Alégrense, estén contentos, porque van a recibir un gran premio en el

cielo; pues así también persiguieron a los profetas que vivieron antes que
ustedes.

Casi todos los que sabemos algo de Biblia hemos escuchado las bienaventuranzas,
y muchos que se las saben de memoria, pero casi nadie las comprende y las
consideramos con un camino hacia una perfección teórica, inalcanzable.

Jesús enseño principios generales que tienen que ver con estados mentales,
porque, cuando se piensa con rectitud la conducta es recta, pero con el
pensamiento es torcido, nada sale bien.

Jesús no quiere dar una lista de normas que el no cumplir nos convierta en
pecadores, porque si nos sentimos pecadores, por no cumplir las normas,
actuaremos como condenados, el mas bien quiere librarnos de poner nuestra
confianza en cosas externas para salvarnos. El nos quiere llevar a una actitud
mental totalmente nueva y esto es lo que son las Bienaventuranzas

Pues empecemos, primera bienaventuranza:


“Dichosos los que tienen espíritu de pobres,
porque de ellos es el reino de los cielos.”

Ser pobre de espíritu significa haber renunciado a toda idea preconcebida para
buscar a Dios de todo corazón. El pobre de espíritu es aquel que está dispuesto a
dejar todo lo que le represente un obstáculo para seguir a Dios; como puede ser su
modo de pensar, sus ideas, su manera de vivir, etc.

Y como ejemplo de esto tenemos la patética historia del joven rico, que tuvo la
oportunidad de su vida y no la aprovecho porque no se pudo deshacer de las cosas.
Y no estamos hablando de las cosas materiales, esas no son buenas ni malas,
estamos hablando de que el tenía su corazón esclavizado a estas cosas, pero
pueden ser cosas, rencores, relaciones, hábitos, ideologías, etc. El pobre de espíritu
es aquel que sabe donde está su riqueza, en el Reino de los Cielos, y es capaz de
quitarse todo lo que lo separa de este. Y hay otra cita biblica que nos ilustra esto:
Así que no se preocupen, preguntándose: "¿Qué vamos a comer?" o "¿Qué vamos a beber?"
o "¿Con qué vamos a vestirnos?"
32Todas estas cosas son las que preocupan a los paganos, pero ustedes tienen un Padre

celestial que ya sabe que las necesitan.


33Por lo tanto, pongan toda su atención en el reino de los cielos y en hacer lo que es justo

ante Dios, y recibirán también todas estas cosas.


Mateo, 6-31-33

Y volvemos una y otra vez a ver como Dios, se manifiesta a los sencillos, no a los
grandes clérigos, no a los eruditos y a los doctorados y masters, a los sencillos, que
no es lo mismo que a los que no tienen dinero, (tenemos el ejemplo de los reyes
magos) a los que reconocen que lo mas importante en la vida es estar en el Reino
de los Cielos y como ellos lo anhelan y son capaces de darlo todo por conseguirlo,
pues para ellos es.

»Dichosos los que sufren,


porque serán consolados.

Antes que nada, aqui cabe mencionar que Dios no nos quiere sufriendo, ni nos manda la
penas, ni pruebas ni castigos. La voluntad de Dios es que tengamos una vida plena, feliz,
exitosa y lo expresó en su palabra cuando dijo: “He venido para que tenga vida y la tengan en
abundancia” Juan 10-10 Pero a veces el sufrimiento es “útil” porque nos hace voltear la vista
hacia Dios. Cosa que no hubiéramos hecho si todo estuviera bien.

Todos los seres humanos llegaremos a descubrir la verdad que es en Dios, y se dará cuenta al
tener contacto con El, que El es la fuente de todo bien y que al conocerlo te libreras para
siempre de las limitaciones de nuestro mundo tridimensional -El pecado, la enfermedad y la
muerte-

No quiero decir con esto que es necesario una desgracia para conocer a Dios, siempre
podemos elegir si lo conocemos, las buenas o por las malas.
Pero desgraciadamente normalmente empezamos a rezar cuando el enfermo ya está
desahuciado, cuando estamos arruinados económicamente, Y es entonces, cuando nos
echamos el clavado para adentro, digo yo, cuando descubrimos nuestro poder de hijos de
Dios.
Cuando comprendemos que nuestro cuerpo es verdadera encarnación de la Vida Divina, llega
la salud; cuando descubrimos que El Poder Divino es en realidad la fuente de todo los bienes
(o sea que Dios nos da todo) es cuando podemos manifestar prosperidad.

Lo podriamos poner para que nos quede mas claro, de la manera siguiente, Dichosos los que
en sus penas buscan el consuelo de Dios, porque lo encontraran.

Aquí también es importante recalcar que si los que son prósperos reconociera a Dios como la
fuente de todo lo que tienen y oraran regularmente acerca de este punto, jamás batallarían por
pobreza o escaches y al mismo tiempo que sepamos que debemos emplear bien los recursos
no para acumularlos sino reconociendo que es a Dios a quien le pertenece todo. y esto se
aplica a todos los aspectos de la vida. Salud, relaciones interpersonales, Volvemos al
principio… Busca primero el Reino de Dios.

Y otra cosa mas que se me viene a la cabeza en este punto, el drama. Aunque los que lloren
serán consolados, analizamos a las cosas que les damos poder a nuestras vidas y bajemos el
volumen, varias rayitas al drama en nuestra vida, les prometo que es muy liberador.

»Dichosos los mansos,


porque heredarán la tierra prometida.

A simple vista esta bienaventurada parece no tener sentido y si observamos el


mundo podríamos pensar que mas bien es al revés. (El que no tranza no avanza)
por eso, los cristianos a lo largo de la historia la han pasado por alto en la practica,
sintiendo que las cosas deberían de ser así, pero a la hora de la verdad, no lo son.
Pues bien, necesitamos tomas conciencia de que Jesús hablaba en serio, que
pensaba lo que decía, que no nos estaba contando cuentos bonitos de un mundo
ideal.
Llega el momento en nuestra conciencia en el que debemos de entender que honrar
a Jesus de los labios para afuera, decir que el evangelio es la VERDAD y jactarnos
de ser cristianos para después no poner en práctica sus enseñanzas es debilidad e
hipocresía.

Tenemos que encarar que las penas que encara el mundo se deben a que vivimos
opuestamente a lo que enseñó Jesus.

Cuando comprendemos la enseñanza de Jesús, descubrimos, que no solo es


verdadera, sino la mas practicable de todas las doctrinas.
Esta Bienaventuranza es la Llave de la Vida, Es el mensaje de Jesús. reducido a una
sola frase.

En esta frase, heredar la tierra se refiere en tener la facultad de ordenar nuestra


vida en condiciones de armonía y éxito positivo. Se refiere desde la salud corporal
hasta el mas mínimo detalle de nuestros asuntos personales. y la manera de
gobernar la condiciones de nuestra vida será nada menos que siendo manso.

Hoy en dia, generalmente un persona masa es débil, sin valor y sin respeto a si
misma, probalemente hipócrita y ruin al mismo tiempo. Entonces, si nos dicen que
tenemos que ser mansos, decimos bueno ahí nos vemos a otra cosa mariposas.

Pero en la Biblia, la palabra mansedumbre quiere dar a entender una actitud mental
que ninguna otra palabra describe con exactitud.

Mansedumbre, es una combinación de mente abierta, de fe en Dios y de la


seguridad de que la voluntad de Dios en nosotros, es siempre vital e interesante,
que trae gozo a la existencia y muy superior a lo que nosotros pudiéramos
imaginar. Este estado mental nos hace permitir que la voluntad de Dios se
manifiesta de la forma que ls Sabiduría Divina lo considere mejor, y no como yo
escoja o quiera.

En pocas palabras, es poner la vida, pero de verdad en manos de Dios.

6»Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia,


porque serán saciados.

Aquí probablemente los voy a sacar de onda, como cuando lo leí yo por primera vez este
concepto, y empecemos por de nir humanamente que es justicia. El diccionario dice, que
justicia es el principio moral que inclina a obrar y juzgar respetando la verdad y dando a cada
uno lo que le corresponde. Hasta aqui vamos mas o menos bien, pero, que es la verdad?,
quien sabe exactamente que le corresponde a quien? y aqui es donde humanamente también,
se comienza a complicar el asunto y pues tenemos mucho ejemplos de lo que que para los
humanos es equivocadamente la justicia.
La Liga de la Justicia, los superheroes que se la pasan propinando golpes a los villanos.
El tribunal de Justicia. justicia para todos, Hacerse justicia con su propia mano, etc. Y pues yo
creo que la mayoría pensamos que justicia es, el que la hace la paga.

En esta ocasión, vamos a ver a la justicia, no solo como rectitud de conducta, sino con el
pensamiento recto en cada aspecto de la vida. Entre mas nos metemos al Sermón de la
Montaña, vamos descubriendo que las cosas exteriores, no son si no la expresión de nuestros
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pensamientos y creencias internas. (Bolas!) Nosotors no podemos ejercer acción directa sobre
las cosas exteriores, porque estas son consecuencia de lo que ocurre dentro de nuestro
corazón y nuestro pensamiento.
El creer que podemos seguir pensando mal y actuando mal y que como quiera las cosas
pueden estar bien es lo que constituye todas las desgracias humanas, (enfermedades,
pecado, pobreza, guerras, desastres naturales y hasta la misma muerte,) Pero esto mas bien
funciona así, lo que llevamos en nuestra mente es la causa determinante de nuestra
experiencia. Si queremos que las circunstancias que nos rodean sean armoniosas y
felices, tenemos que convertir nuestros pensamientos en armoniosos y felices.
Si queremos salud, tenemos que tener pensamientos de paz, de gozo de buena voluntad para
los demás, porque los pensamientos negativos son la principal causa de las enfermedades.
Si queremos riqueza, debemos de tener pensamientos de prosperidad.
Si queremos relaciones plenas, nuestros pensamientos tienen que re ejar amor y buena
voluntad.
Como lo dice san Pablo: “Todas las cosas trabajan para el bien de aquellos que aman el bien”.
Ahora bien, aunque la teoría se oye bastante lógica y fácil, en la practica es complicada la
lucha para mantener el recto pensar , porque los hábitos del pensamientos son los mas
difíciles de romper.
Solo con vigilancia activa y constante podemos dirigir nuestros pensamientos.
El pensamiento es lo mas rápido que existe, puedo recorrer todas las distancias en un
instante, ver mi vida pasada e imaginar la futura.
“Rueda mi mente no se detiene…”
No nos desalentemos si al querer emprender el camino al recto pensar dos desviamos
frecuentemente, mas bien pidamos a Dios que nos de Sabiduría que y perseverancia en la
oración. Hagamos contante mente un inventario mental y veamos si no tenemos en algún
rinconcito un pensamiento torcido.

Hay alguien a quien no hayamos perdonado todavía.


Tenemos algún odio politico
Envidia personal o profesional
Estamos abatidos por alguna pena sentimental, algún anhelo inútil o imposible?
-como hijos de Dios, sepamos, que ninguna cosa buena está fuera de nuestro alcance.
Tenemos remordimiento por faltas pasadas. Eso es orgullo espiritual y falta de con anza en la
misericordia de Dios.

Dichosos los compasivos,


porque Dios tendrá compasión de ellos.

Pues la que oimos normalmente es, “bienaventurados los misericordiosos, porque ellos
alcanzarán misericordia”, pero en mi biblia dice así, dichosos… y se me hizo super claro.
Y pues como quiera quiero volver a la palabra misericordia para que nos quede muy clara esta
bienaventuranza. Aquí no hay mucho que explicar porque la palabra misericordia es lo que es
y pues ya conocemos las obras de misericordia que son:
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Corporales Espiriruales

• Dar de comer al hambriento. • Enseñar al que no sabe.


• Dar de beber al sediento. • Dar buen consejo al que lo necesita.
• Vestir al desnudo. • Corregir al que se equivoca. ...
• Visitar a los encarcelados. • Perdonar las injurias. ...
• Proteger a las personas sin hogar. • Consolar al triste. ...
• Visitar a los enfermos. • Sufrir con paciencia los defectos de
los demás. ...
• Enterrar a los muertos. • Orar por vivos y difuntos.

y pues podríamos hacer otro programa para profundizar en ellas, aquí lo único que me gustaría
enfatizar, es que si es bueno ser misericordioso, pero es importante que seamos mentalmente
misericordiosos. Las buenas acciones que no van acompañadas de pensamientos bondadoso
son pura hipocresía que no dan provecho al dador ni al que las recibe. Y por otra parte es muy
importante ser compasivos cuando juzgamos a nuestros hermanos cuando pensamos que han
cometido un error. Porque un buen pensamiento bendice al que lo da y al que lo recibe y
cuando una persona está en desgracia, necesita de los buenos pensamientos de los demás
para levantarse.

Además, el mismo trato que damos a otros, lo recibiremos después y liberando a otros de
peso de nuestra condena hacemos posible absolvernos todos.

8»Dichosos los de corazón limpio,


porque verán a Dios.

Empezando por la promesa que se nos hace en esta bienaventuranza, diremos que Dios no
tiene forma corporal así es que no se puede ver físicamente. Si lo pudiéramos ver sicamente
seria porque es un ser limitado, entonces ya no sería Dios. ver aquí se re ere a la capacidad
de concebir la verdura naturaleza de Dios.

El cielo no es un lugar en el rmamento, no está rodeando ahora mismo, pero como nos falta
la percepción espiritual no podemos percibirlo, no podemos experimentarlo. El Cielo es el
nombre religioso que signi ca la presencia de Dios.

El Cielo es el reino del Espíritu, allí no hay vejez, ni decadencia, ni discordia; es el reino del
Eterno Bien. Y sin embargo, a nuestros ojos todo está decayendo, deteriorándose, oreciendo
para marchitarse, naciendo para morir.
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Dios no ha creado íntegros, pero nos hemos buscado muchas limitaciones, y ahora, es nuestra
tarea superar esas limitaciones para poder llegar a ver la cosas como en realidad son. Esto es
lo que signi ca ver a Dios. Ver a Dios es comprender la Verdad, una experiencia que nos
trae la libertad in nita y la felicidad perfecta.

En esta bienaventuranza Jesús nos dice como podremos lograr esto y vemos, que pureza, es
el reconocimiento de Dios cono la única Causa verdadera y el único Poder verdadero que
existe, y aquí una vez mas reiteramos que este es el secreto por el que podríamos escarpar de
toda enfermedad, desgracia y limitación.

podríamos parafrasear esta Bienaventuraza así:

“Bienvaenturados los que reconocen a Dios como la única Causa verdadera, la única
Presencia y el único Poder real, con palabras y acciones en todo rincón de la vida y del
espíritu; no teniendo ninguna reserva para El, sino armonizando su voluntad con la voluntad de
El _porque ellos vencerán todas la limitaciones de espacio, tiempo y materia y estarán
conscientes y gozarán para siempre de la Presencia de Dios_.

Y no basta que aceptemos la Verdad en la mente consciente, es necesario que la aceptemos


con el corazón, o sea con la mente subconsciente para que nos pueda transformar la Vida.

9»Dichosos los que trabajan por la paz,


porque Dios los llamará hijos suyos.

En esta bienaventuranza, una vez mas tenemos que meternos mas allá de lo super cial y ver
que se nos quiere decir. A veces pensamos en la paz como algo que tenemos que alcanzar,
que está afuera, pensamos que la paz, es ausencia de guerra, pero la paz verdadera, se
construye dentro y la única manera de alcanzar esta paz es la oración. Y volvemos al principio
donde decíamos que ya cuando está todo perdido, entonces si volteamos a la oración. y es
muy común que la gente que no conoce el poder de la oración, se le sugiere la oración como
remedio pues te ve como perdedor.
Pero la oración, es el único medio para renovar nuestra comunión con Dios. La oración es la
única cosa capaz de cambiarnos el carácter. Aunque es un cambio muy sutil y al principio casi
imperceptible, es imposible orar sin que nos hagamos diferentes en algún grado.
Si tomaremos verdadera consciencia de la Presencia de Dios, tendríamos un cambio radical,
como en la historia de las grandes conversiones.
Ahora ¿que es oración? Oración es toda forma de comunicarnos con Dios, (actualidad.
mindfulness, hooponopono, meditación, etc.)
invocación, a rmación, platica, meditación y contemplación.
Cuando la oración es e caz, La Presencia De Dios se mani esta en nosotros y ese es el
secreto de nuestra curación y la de otros también. Pero para lograr esto es necesario alcanzar
cierto grado de paz mental o serenidad. La serenidad es el gran vehículo de la Presencia de
Dios. Esta serenidad se obtiene por la oración y por la acción de perdonar a los demás y a uno
mismo. Es esta tranquilidad de al alma a la que se re ere Jesús con la palabra paz.
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27»Lesdejo la paz. Les doy mi paz, pero no se la doy como la dan los
que son del mundo. No se angustien ni tengan miedo.

Los pací cos de los que habla esta Bienaventuranza, son lo que realizan esta paz verdadera
en sus propias almas, los que superan las di cultades y limitaciones y llegan a ser
verdaderamente hijos de Dios.

Una vez que comprendemos y experimentamos el poder de la oración, somos capaces de


sanar muchas disputas y ganar muchas batallas de manera de nitiva y a veces sin pronunciar
una sola palabra. Como diría mi abuelita, “déjale las cosas a Dios” y algunos te dicen: ay si
muy cómodo. Nada cómodo, perdonar, nada cómodo quedarte callado cuando lo que quieres
es que tu “chicharrón truene”, serenarte cuando quieres tirarte a la histeria, etc etc Pero hay
que visualizar a la paz como Don supremo, por el que se tiene que trabajar. Dios nos la da,
pero nos tenemos que luchar por ella.
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