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Frases y comentarios para intercambiar

--El Beduino y el hombre de ciencia en el desierto crees en Dios si no lo ves

Un beduino y un hombre de ciencia se encontraban en el desierto. El beduino, que era


un hombre sencillo y de fe, le preguntó al hombre de ciencia:
¿Crees en Dios?
El hombre de ciencia, que era un hombre educado y racional, respondió:
No, no creo en Dios. No hay pruebas científicas de su existencia.
El beduino se quedó pensativo por un momento. Luego, le dijo al hombre de ciencia:
¿Ves esas montañas allá a lo lejos?
El hombre de ciencia asintió.
¿Crees que esas montañas existen?
El hombre de ciencia respondió:
Sí, claro que creo que existen. Las puedo ver.
El beduino sonrió.
Yo también creo en Dios, aunque no lo pueda ver.
El hombre de ciencia no entendía.
¿Por qué crees en algo que no puedes ver?
El beduino respondió:
Porque sé que existe. Lo siento en mi corazón.
El hombre de ciencia se quedó sin palabras. No sabía qué decir.
Esta historia ilustra la diferencia entre la fe y la razón. La fe es la creencia en algo que
no se puede ver o probar. La razón es el proceso de razonamiento basado en la
evidencia.
El beduino cree en Dios porque lo siente en su corazón. Es una creencia basada en la fe.
El hombre de ciencia no cree en Dios porque no hay pruebas científicas de su
existencia. Es una creencia basada en la razón.
¿Cuál es la respuesta correcta? ¿La fe o la razón?
La respuesta depende de cada persona. Algunas personas prefieren creer en algo que no
pueden ver, mientras que otras prefieren creer solo en lo que pueden probar.
En el caso de la historia del beduino y el hombre de ciencia, no hay una respuesta
correcta o incorrecta. Ambas personas tienen derecho a creer lo que quieran.
Sin embargo, la historia nos invita a reflexionar sobre la naturaleza de la fe y la razón.
¿Es posible creer en algo que no se puede ver? ¿Es la razón la única forma de llegar a la
verdad?
Estas son preguntas que cada persona debe responder por sí misma.

--Daré a Dios 5 minutos ¿Crees que agotaras la paciencia de Dios?

--Yo soy el único que no cree en Dios… La princesa le dijo no eres el único…¿No
¿ también las cosas los animales, etc…
me comparas con las bestias no ellas no son imprudentes de jactarse de ello
--Dios no se le ve pero se siente como el cometa y el niño en las nubes

--Dios convirtió el agua en vino no lo creo…. Mire yo era borracho y Cristo cambio mi
vida… convirtió el alcohol en un carro una casas, etc…

El milagro de la conversión del agua en vino es un evento bíblico que se describe en el


Evangelio de Juan. En este pasaje, Jesús está invitado a una boda en Caná de Galilea.
Cuando el vino se acaba, Jesús ordena a los sirvientes que llenen las jarras con agua.
Cuando los sirvientes sirven el agua a los invitados, esta se convierte en vino.
Este milagro es interpretado de diferentes maneras por los cristianos. Algunos creen que
es un evento literal, mientras que otros creen que es una metáfora.
Si crees que el milagro es literal, es posible que no lo creas porque no has visto a Dios
convertir el agua en vino en persona. Sin embargo, es importante recordar que Dios es
un ser sobrenatural que puede hacer cosas que están más allá de nuestra comprensión.
Si crees que el milagro es una metáfora, es posible que no lo creas porque no has
experimentado un cambio tan radical en tu vida como el que describes. Sin embargo, es
importante recordar que Dios puede trabajar en nuestras vidas de muchas maneras,
incluso a través de eventos aparentemente simples.
En última instancia, la creencia en el milagro de la conversión del agua en vino es una
cuestión de fe. No hay pruebas científicas que lo respalden, pero para muchos cristianos
es un evento importante que demuestra el poder de Dios.
En cuanto a tu propia historia, es maravilloso escuchar que Cristo ha cambiado tu vida.
Es cierto que Dios puede usar los eventos de nuestra vida para transformarnos. En tu
caso, el alcohol pudo haber sido una fuerza destructiva en tu vida, pero Cristo pudo
convertirlo en algo positivo, como un carro o una casa.
Es importante recordar que Dios siempre está trabajando en nuestras vidas, incluso
cuando no lo vemos. Si estamos abiertos a su obra, podemos experimentar milagros en
nuestras propias vidas.

--Vaca negra come pasto verde y da leche blanca, dios es todo poderoso, pero hay algo
que no puede hacer… y es agradar a toda la gente… unos piden agua otros no la quieren

La frase "Vaca negra come pasto verde y da leche blanca, dios es todo poderoso, pero
hay algo que no puede hacer… y es agradar a toda la gente… uno spiden agua otros no
la quieren" es una metáfora que sugiere que es imposible complacer a todos.
La vaca negra es una imagen de algo que es diferente y único. El pasto verde es una
imagen de algo que es abundante y nutritivo. La leche blanca es una imagen de algo que
es puro y saludable.
Al comparar a Dios con una vaca negra, la frase sugiere que Dios es un ser perfecto y
completo. Sin embargo, también sugiere que Dios no puede complacer a todos.
La frase también sugiere que las personas son diferentes y tienen diferentes necesidades
y deseos. Lo que una persona quiere, otra persona puede no querer. Esto puede hacer
que sea difícil complacer a todos.
En última instancia, la frase es una invitación a la humildad. Nos recuerda que no
podemos controlar las opiniones o acciones de los demás. Solo podemos controlar
nuestras propias acciones y pensamientos.
Aquí hay algunas ideas sobre cómo la frase "Vaca negra come pasto verde y da leche
blanca, dios es todo poderoso, pero hay algo que no puede hacer… y es agradar a toda
la gente… uno spiden agua otros no la quieren" podría aplicarse a la vida cotidiana:
 Cuando intentamos complacer a todos, a menudo nos decepcionamos. Es mejor
concentrarnos en complacernos a nosotros mismos y a las personas que nos
importan.
 No podemos controlar lo que piensan o hacen los demás. Solo podemos
controlar nuestra propia reacción a sus acciones.
 Es importante ser tolerante con las diferencias. No todos tienen las mismas
opiniones o necesidades.
En última instancia, la frase es una invitación a aceptar la realidad de que no podemos
complacer a todos.

--Tía de Oscar Wilde Fiesta y ninguna invitación no llego ningun invitado… al poco
tiempo murio y nunca mando las invitaciones “La gente no responde porque no es
invitada”
La historia de la tía de Oscar Wilde es una historia trágica y conmovedora. Es una
historia sobre la importancia de la comunicación y la conexión humana.
En la historia, la tía de Oscar Wilde decide organizar una fiesta. Sin embargo, en lugar
de enviar invitaciones, decide esperar a que las personas vengan a su casa. Esto es un
error, ya que las personas no saben que hay una fiesta y, por lo tanto, no pueden asistir.
Al final, la tía de Oscar Wilde muere sin haber enviado ninguna invitación. Esto es una
tragedia, ya que ella quería celebrar su vida con sus seres queridos.
La historia tiene varias lecciones importantes. Una lección es que la comunicación es
esencial. Si queremos que la gente venga a nuestra fiesta, debemos invitarlos. Otra
lección es que la conexión humana es importante. Necesitamos sentirnos conectados
con los demás para sentirnos felices y realizados.
La frase "La gente no responde porque no es invitada" es una forma de expresar la
importancia de la comunicación. Si no comunicamos nuestros deseos, es poco probable
que los demás los satisfagan.
En el caso de la tía de Oscar Wilde, ella no comunicó su deseo de celebrar su vida con
sus seres queridos. Por lo tanto, sus seres queridos no pudieron asistir a su fiesta.
Esta historia es una advertencia sobre los peligros de la falta de comunicación. Si no
comunicamos nuestros deseos, es posible que no los cumplamos.
Aquí hay algunas cosas que podemos aprender de la historia de la tía de Oscar Wilde:
 La comunicación es esencial. Si queremos que la gente venga a nuestra fiesta,
debemos invitarlos.
 La conexión humana es importante. Necesitamos sentirnos conectados con los
demás para sentirnos felices y realizados.
 No debemos dar por sentado que los demás saben lo que queremos. Debemos
comunicar nuestros deseos claramente.
Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo. (Beethoven)

La frase "Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo" es una invitación a la


reflexión y a la acción. Nos invita a pensar en el impacto de nuestras palabras y a
usarlas de manera constructiva.
En un mundo lleno de ruido, es importante saber cuándo hablar y cuándo callar. Las
palabras pueden ser poderosas, y pueden usarse para construir o para destruir. Cuando
hablamos, debemos hacerlo con la intención de mejorar el mundo que nos rodea.
Esta frase también nos invita a ser más conscientes de nuestro propio discurso.
¿Estamos diciendo cosas que son edificantes y positivas? ¿Estamos usando nuestras
palabras para ayudar a los demás?
Si queremos que el mundo sea un lugar mejor, debemos empezar por nosotros mismos.
Debemos usar nuestras palabras de manera responsable y con la intención de mejorar el
mundo que nos rodea.
Aquí hay algunas ideas sobre cómo podemos aplicar la frase "Nunca rompas el silencio
si no es para mejorarlo" en nuestra vida cotidiana:
 Piensa antes de hablar. No digas nada que no puedas decir con amabilidad y
respeto.
 Evita hablar de los demás a sus espaldas. Si tienes algo que decir, dilo
directamente a la persona involucrada.
 Usa tus palabras para construir relaciones. Sé amable, comprensivo y compasivo
con los demás.
 Expresa tu gratitud. Dile a las personas que te importan lo que significan para ti.
 Ofrece palabras de aliento. Haz saber a las personas que crees en ellas y que las
apoyas.
Al usar nuestras palabras de manera responsable, podemos ayudar a crear un mundo
más amable, comprensivo y compasivo.

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