Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Implica trabajar en equipo con los equipos docentes, orientador y demás especialistas, y
contribuir a que las experiencias que se vayan integrando se conviertan en referencia de
proyectos autónomos de vida personal, académica y profesional.
Rellenar huecos
Lea el párrafo que aparece abajo y complete las palabras que faltan.
ayuda
La orientación educativa se considera como un proceso de a los alumnos y
planificación
alumnas, así como a los miembros de la comunidad educativa, abierta a la de
necesidades
actuaciones que den respuesta a las en todas las dimensiones, a atender a
diversidad prevenir
la de centros, de personas y de destinatarios, así como a dificultades y
rendimiento
solucionar problemas, además de ayudar al alumnado a optimizar el .
La acción tutorial y orientadora, no se realiza al margen de las áreas del currículo, sino
plenamente integrada e incorporada en ellas. Es verdad que esa acción incluye también
elementos que quizá no son estrictamente curriculares, por ejemplo, de organización y
dinámica del grupo-clase, de motivación para el aprendizaje, de negociación de roles y de
conflictos dentro del aula, de relaciones humanas en ella.
Pero estos mismos elementos se hallan al servicio del currículo, el cual constituye el marco
de toda la práctica docente, también, por tanto, de la acción tutorial y orientadora.
El tutor o tutora puede contribuir a que el alumnado tenga una autoevaluación positiva
“Enseñar a ser persona”, pero ¿de qué forma?:
• Proporcionando experiencias significativas.
• Por las respuestas y trato al alumnado.
• Por La manera de expresarse y manifestarse.
• Por el modo y grado en que los acepta, confía y apoya.
• Cuando muestra interés por cada uno.
• Cuando le acepta sinceramente y le comunica afecto.
• Cuando no reacciona negativa o despectivamente ante la aparición de dificultades.
• Cuando se le ayuda a encontrar u lugar en el grupo.
Actitudes y conductas
Las destrezas o habilidades sociales son modos de saber hacer en relación con los demás.
El maestro tutor o la maestra tutora, deberá conocer qué habilidades ha de tener un niño o
niña para establecer unas buenas relaciones sociales con sus iguales y con los adultos,
como:
• Saber escuchar (no interrumpir, prestar atención, manifestar que se entiende, hacer
preguntas).
• Compartir cosas.
• Participar y cooperar en actividades de grupo.
• Saber elogiar y aprobar lo que otros hacen y saber recibir elogios.
• Saber participar en una conversación.
Las conductas sociales del niño y la niña, se podrán evaluar a través de la observación
directa y de la información que los padres y madres aporten.
Evitar amenazas.
Hacer juicios positivos, evitar los negativos y las comparaciones, resaltando los
logros.
Con la acción tutorial, entendida ésta como actividad dentro de la función docente, se
pretende ayudar a los alumnos a optimizar el rendimiento; es, por tanto, factor de calidad y
de eficacia de la enseñanza. Implica trabajar en equipo con el resto de profesores, el
orientador y los especialistas de sector para contribuir a que las experiencias cada vez más
autónomas, a través de la atención individualizada a las necesidades educativas, la
preocupación por las circunstancias personales, el apoyo ante la toma de decisiones sobre
el futuro, la conexión con la familia y con el entorno, así como con el trato particular que se
establece entre el profesor y el alumno.
El tutor es un profesor que ha sido designado por la dirección del centro para ejercer la
función tutorial con el alumnado (individual y grupal), profesorado y familias.
Entendemos, por tanto, la acción tutorial como una actividad unida al proceso educativo
que pretende ayudar a los alumnos y alumnas a optimizar el rendimiento, a que aprendan
a dirigir su propia vida, a pensar, convivir y decidir por sí mismos. Debe ser personalizada,
integradora y equilibradora de desigualdades.
Realizando una revisión bibliográfica, se encuentra que son varios los autores que han
tratado de conceptualizar el término de tutoría, tales como:
Para García (2003), en Educación Infantil, tanto el orientador como el tutor son de vital
importancia. La tutoría en esta etapa no requiere un horario especial, ya que se encuentra
integrada en el desarrollo diario de la función docente.
Dentro de Educación Infantil, para Arnaiz e Isus (1995), la acción tutorial debe
desarrollarse en los siguientes aspectos: integrando a la familia y al alumnado en el centro
docente, mejorando el desarrollo personal y la adaptación del alumno, así como,
optimizando, el proceso de enseñanza- aprendizaje de habilidades y destrezas que ayuden
al alumno a desenvolverse en el ámbito social.
Pregunta de Selección Múltiple
Además, para poder realizar la tutoría con las familias, los autores, determinan: por un
lado, favorecer el trasvase de información y por otro lado, la cooperación con las familias
dentro del centro educativo.
García (2003), establece que la tutoría en Educación Infantil, permite una intervención
adecuada, detectando posibles problemas en el progreso de los alumnos, permitiendo
así, una intervención adecuada, que permita realizar las adaptaciones curriculares
oportunas, así como, programas individuales, en función de las dificultades detectadas.
Los objetivos que toda labor tutorial debe conseguir, expuestos de forma general son:
La acción tutorial en Educación Infantil, según Lázaro (1997), debe solucionar las
necesidades educativas de los alumnos de forma preventiva, pero sin descuidar la parte
educativa. Este autor propone una serie de necesidades que deben ser atendidas, tales
como:
Bisquerra (1998) determina que la función del tutor es la vigilancia del progreso intelectual,
emocional, social y físico del alumno. Además, el tutor debe tener presente la realidad del
alumnado, apreciando el avance en el aprendizaje e informando a la familia.
El tutor será la persona encargada de realizar la evaluación, con la cooperación del resto
de profesionales. Dicha evaluación, se realiza en tres momentos del curso escolar.
En Educación Infantil se deben consolidar las destrezas sociales, hábitos saludables, así
como, la adquisición de responsabilidades. Se tratará con las familias la autonomía del
alumno, intentando que se fomente desde casa, para así, contribuir a un desarrollo más
completo del mismo (Bisquerra, 1998).
Desde la acción tutorial todas las actividades docentes se orientan hacia el desarrollo
integral del alumno. Para ello, el tutor dispone de diferentes técnicas, procedimientos e
instrumentos de aplicación individual o colectiva que se integran junto con otras actividades
grupales, como seminarios, evaluaciones socio-afectivas, etc.
Méndez (2002) propone unas pautas para que el tutor lleve a cabo unas actividades
cotidianas dentro del aula en colaboración con los padres, tales como: favorecer la
autonomía de los niños después del colegio, ayudar a los niños a responsabilizarse de su
material, crear hábitos y destrezas, fomentar la autonomía en hábitos de higiene,
alimentación y juego.
Pregunta de Elección Múltiple
Cuando hablamos de observar de forma continua los problemas que pueda tener el
niño, vinculados a la afectividad, ¿a qué necesidad educativa nos referimos según
Lázaro (1997)?
La coordinación perceptivo-motora
El Lenguaje y la comunicación
Cuando hablamos de ofrecer a los alumnos un lenguaje que les permita regular sus
conductas y sus decisiones, ¿a qué necesidad educativa nos referimos según
Lázaro (1997)?
La coordinación perceptivo-motora
El desarrollo emocional y socio-afectivo
El Lenguaje y la comunicación
Cuando hablamos de aquellas dificultades que tienen que ver con la exploración del
entorno cercano, así como, con la interacción con los demás, ¿a qué necesidad
educativa nos referimos según Lázaro (1997)?
La coordinación perceptivo-motora
El Lenguaje y la comunicación
La coordinación perceptivo-motora
El Lenguaje y la comunicación
Para Boza (2000), el tutor tiene unas funciones con las familias, tales como: contribuir a
una relación fluida, fomentar el diálogo entre la familia y la escuela, fomentar la
participación de los padres en actividades de apoyo y orientación de sus hijos, así como,
favorecer la información de todos aquellos asuntos que sean relevantes.
Las funciones generales de la tutoría son muy similares a las de la Orientación Educativa e
Intervención Psicopedagógica; destacamos las siguientes:
En relación con los alumnos y alumnas, las funciones más relevantes son:
• Fomentar y facilitar las relaciones de los profesores con las familias de los alumnos.
• Motivar a las familias para que participen en la dinámica del centro, implicándolas en
actividades del centro, como las de apoyo al aprendizaje de sus hijos y otras de tipo
formativo que puedan ser extraescolares.
• Informar, asesorar y orientar a las familias sobre aspectos relacionados con la
dinámica del centro, el aprendizaje y rendimiento de los hijos, su desarrollo
emocional, dificultades de aprendizaje y todo aquello que tenga relación con la
educación de los alumnos,
• Contribuir a la cooperación educativa entre el profesorado y los padres de los
alumnos.
Dos conceptos básicos se desprenden de la acción tutorial: todo profesor debe estar
implicado en la acción orientadora y tutorial y ésta debe incorporar en el marco curricular.
La Educación Infantil, como ya hemos visto, es una etapa educativa con identidad propia
que atiende a los niños desde el nacimiento hasta los seis años de edad con la finalidad de
contribuir a su desarrollo físico, afectivo, social e intelectual. La escolarización temprana se
considera un gran logro que incidirá positivamente en la mejora del rendimiento escolar
futuro.
La Educación Infantil contribuirá a desarrollar en los niños las capacidades que les
permitan:
Organización curricular
Los métodos de trabajo en ambos ciclos se basan en las experiencias, las actividades y
el juego, y se aplican en un ambiente de afecto y confianza, para potenciar la autoestima y
la integración social.
Las áreas de conocimiento del segundo ciclo de la Educación Infantil son las siguientes:
Estas áreas deben entenderse como ámbitos de actuación, como espacios de aprendizaje
de todo orden: de actitudes, procedimientos y conceptos que contribuirán al desarrollo de
los niños y facilitarán su interpretación del mundo, otorgándole significado y promoviendo
su participación activa en él.
Por su parte, los centros docentes son los encargados de desarrollar y completar los
contenidos educativos del primer ciclo de la Educación Infantil y el currículo del segundo
ciclo establecidos por las Administraciones educativas.
Pregunta Verdadero-Falso
Responde si la siguiente afirmación es verdadera o falsa.
Verdadero Falso
Metodología de trabajo
Como ya hemos visto, los métodos de trabajo en ambos ciclos se deben basar en las
experiencias, las actividades y el juego, y se deben aplicar en un ambiente de afecto y
confianza, para potenciar la autoestima y la integración social. Especialmente en el
segundo ciclo, que se desarrolla generalmente en centros docentes, se fomenta una
primera aproximación a la lectoescritura, a la iniciación en habilidades lógico-matemáticas,
a una lengua extranjera, al uso de las tecnologías de la información y de la comunicación,
y al conocimiento de los diferentes lenguajes artísticos como ya hemos indicado al abordar
sus contenidos.
Rellenar huecos
Lea el párrafo que aparece abajo y complete las palabras que faltan.
segundo
En el ciclo de Educación Infantil se fomenta una primera aproximación a
lectoescritura lengua extran
la , a la iniciación en habilidades lógico-matemáticas, a una , al uso de
las tecnologías de la información y de la comunicación, y al conocimiento de los diferentes
artísticos
lenguajes como ya hemos indicado al abordar sus contenidos.
Evaluación
La evaluación en este ciclo debe servir para identificar los aprendizajes adquiridos y el
ritmo y características de la evolución de cada niño. A estos efectos, se tomará como
referencia los criterios de evaluación de cada una de las áreas.
Los maestros que impartan el segundo ciclo de la Educación Infantil evaluarán, además de
los procesos de aprendizaje, su propia práctica educativa.
Modelos de intervención
Se sigue la propuesta de Bisquerra y Gonzalez (2010) por ser la más reciente, donde se
indica que el modelo clínico utiliza la entrevista como herramienta para realizar una
intervención directa e individualizada. Los destinatarios pueden ser el alumnado, el
profesorado y las familias. La decisión de solicitar ayuda parte del receptor. Se lleva a cabo
un diagnóstico, y se brinda un tratamiento y posterior seguimiento. Es una intervención
especializada, donde la máxima responsabilidad recae sobre el maestro- tutor.
Por otro lado, el modelo de programa tiene otras fases: el análisis del contexto para
detectar dificultades, establecer pautas de actuación, programar acciones, la realización de
las mimas y la evaluación del programa. Es un modelo apto para emplear con las familias y
poder tratar temas importantes sobre su hijo. Un ejemplo dentro de la Educación Infantil
serían las “Escuelas de Padres y Madres”.
Por otro lado, el modelo de consulta determina, que la acción debe realizarse entre
profesionales de diversos campos. Las fases de este modelo son: en un primer momento,
informar y aclarar el tipo de programa a desempeñar, a continuación, se establece el
programa que se va a llevar a cabo, después se realizará dicho programa. Una vez
realizado, se evaluará; y, para finalizar, se darán propuestas de mejora al consultante. En
Educación Infantil, este modelo, es elaborado por los Equipos de Atención Temprana, los
cuales, coordinan las acciones a llevar a cabo, para ofrecer una atención adecuada al
alumnado.
El modelo mixto surge de una fusión de los anteriores modelos. Para Bisquerra y Álvarez
(2010), estos modelos son una guía, donde el orientador actúa tanto de forma indirecta
como de forma grupal, aunque a veces es precisa una atención individual, así como,
proactiva, destinada a prevenir y desarrollar capacidades y habilidades.
5.2. Instrumentos y técnicas
Existen diversos agentes implicados en el desarrollo de la acción tutorial dentro de
Educación Infantil. Para Álvarez (1996), los profesores (tutores), los orientadores, bien
sean de centro o de sector, los alumnos y los padres son los agentes implicados en la
acción tutorial. Además de no olvidar al AMPA y otros agentes socio- comunitarios como
pueden ser asociaciones, ONG´s o instituciones públicas cercanas al centro docente.
Los tutores son los ejes de la coordinación de la acción tutorial dentro de un grupo-clase,
dicha tarea es colaborativa por el resto de la plantilla docente. Para ello, debe partir de un
análisis de la realidad, que ayude al alumnado al entendimiento de la sociedad en la que
deberá desenvolverse. El tutor no se encuentra solo en esta tarea, ya que el orientador le
asesorará, colaborará con él y le ayudará, así como, al resto de la plantilla de profesores.
El principal beneficiario de la acción tutorial es el alumno, pero sin olvidar la participación
de la familia, ya que su colaboración es de vital importancia. Gracias a sus aportaciones y
cooperaciones se consigue la eficiencia de las pautas que se determinen llevar a cabo, en
conjunto con el orientador y los profesores del centro educativo.
Para Álvarez (1996), existen una serie de agentes implicados en el desarrollo de la acción
tutorial, tales como: profesores- tutores, resto de profesorado, orientador, los alumnos y la
familia. Pero sin olvidar al consejo escolar, a los responsables de la dirección del centro
educativo y a la comisión de coordinación pedagógica.
La acción tutorial puede llevarse a cabo bien de forma individual o grupal con los alumnos
y con sus familias.
Relación personal
Esta relación personal no tiene por qué ser terapéutica, sino que también ha de tener un
carácter preventivo y de cambio. No resulta nada fácil desarrollar esa relación personal
porque entraña serias dificultades tanto para el tutor, como para el propio alumno, como
para la familia. El tutor ha de tener una serie de cualidades y actitudes:
Por otro lado, no se puede olvidar el marco institucional, ya que puede influir positiva o
negativamente en dicha relación. Se trata de una intervención especializada y
personalizada, donde las características y preparación técnica del tutor juegan un papel
muy relevante (Ivey, 1994; Long, 1996). Este modelo de atención personalizada, tutoría, se
concreta en la entrevista, como medio más adecuado para afrontar la intervención directa e
individualizada.
Veamos algunas de las técnicas más significativas que nos van a permitir obtener
información sobre el alumnado y su proceso de aprendizaje:
La observación
Registro anecdótico:
Listas de control:
Escalas de observación:
Pautas de observación:
Observador externo:
La observación es realizada por otro agente educativo (profesor/a del centro, orientador/a,
investigador/a,...), evitando así la subjetividad del profesor/a del aula que se encuentra
inmerso en la propia situación observada ya que su visión de los hechos, sin estar
deformada, si puede estar limitada. El registro de la situación puede realizarse por medio
de notas de campo, a través de narraciones o utilizando otros instrumentos como la
grabación en audio o vídeo.
Diario de clase:
Al escribirlo día a día refleja una reflexión y da significado a los hechos sucedidos, además,
permite revisar la propia acción docente.
Tarea
Una vez realices la tarea, envía el documento a través de la plataforma en formato PDF de
la forma establecida para ello. El archivo se nombrará siguiendo las siguientes pautas:
Apellido1_Apellido2_Nombre_DGEI05_Tarea
Asegúrate que el nombre no contenga la letra ñ, tildes ni caracteres especiales. Así por
ejemplo, la alumna Begoña Sánchez Mañas para esta unidad debería nombrar la tarea
como:
Sanchez_Manas_Begona_DGEI05_Tarea
Ten en cuenta la fecha límite de entrega. Siguiendo los criterios generales de evaluación
no se aceptarán envíos ni reenvíos posteriores a esta fecha.
Intercambios orales con alumnos y alumnas
Técnicas sociométricas
Las distintas relaciones que se establecen entre el alumnado dentro del grupo clase y la
posición que en el mismo ocupan los individuos, es el objeto de estudio de la sociometría.
Es de gran importancia para el tutor/a conocer las afinidades y rechazos, las aceptaciones
y oposiciones, para favorecer en definitiva la marcha del grupo y el desarrollo personal de
cada uno de sus integrantes.
Cuestionarios sociométricos:
Son un instrumento muy eficaz para conocer la estructura informal del grupo clase. Los
sujetos demuestran sus preferencias o rechazo hacia los compañeros y compañeras de
clase, respondiendo a un cuestionario en el que se les plantean estas cuestiones. Así
quedan patentes, además de las afinidades y rechazos, las indiferencias y los subgrupos
que están constituidos en el aula.
Los datos que se obtienen, se recogen en la matriz sociométrica (tabla de doble entrada) y
se representan en el sociograma de grupo (una forma de presentación gráfica de los
resultados que nos permite obtener información no visible a simple vista).
Según la opinión de algunos autores, el conocimiento de las relaciones del grupo no está
completo si no se obtiene también la información de cómo el propio sujeto cree estar
posicionado ante el grupo.
Para ello se procede de igual manera que con el cuestionario sociométrico pero pidiendo a
cada sujeto que intente acertar quién lo ha elegido, rechazado, la representación gráfica de
los resultados se realiza del mismo modo que con el cuestionario sociométrico.
Se trata de una variante del cuestionario sociométrico para comprender cómo se sienten
los alumnos y alumnas con relación a sus compañeros de clase.
Las reuniones de aula, las tutorías, las fiestas escolares, etc., son ámbitos en los que
existe una comunicación de las familias y/o del alumnado con el profesorado, y en los que
se encuentra el espacio ideal para fomentar los vínculos entre los miembros de la
comunidad educativa. La participación de las familias es imprescindible en el proceso de
aprendizaje de los alumnos y alumnas.
Las reuniones con los padres y las madres persiguen informar sobre la evolución del curso
y/o tratar algún tema relacionado con una situación especial planteada en la clase:
excursiones, conflictos grupales, etc. Dependiendo del momento y tema a tratar, las
reuniones a mantener pueden ser individuales o grupales.
Las reuniones habituales con las familias suelen ser al menos tres por curso escolar:
una al comienzo para presentar las características generales del curso académico, otra al
final, para dar cuenta de lo realizado y la o las intermedias, para seguir la evolución del
grupo clase.
Lázaro y Asensi (1987) presentan a los tutores/as una serie de sugerencias prácticas para
las entrevistas con los padres:
Saludo y acogida:
Fase final:
Los instrumentos para la evaluación formativa son aquéllos que cada docente considera
más adecuados para obtener la información sobre el proceso de enseñanza y de
aprendizaje que necesita. Que la evaluación sea formativa no depende del instrumento que
se haya utilizado sino del uso que se haga de la información obtenida.
Una estrategia muy adecuada para la evaluación formativa consiste en el análisis de las
producciones de los alumnos/as, pero esto choca con el inconveniente de que exige más
tiempo que el necesario para asignar una nota. Por ese motivo hay que buscar estrategias
que, sin renunciar a la realización de una evaluación que forme, simplifiquen esta labor y la
hagan viable en la práctica.
La coordinación del proceso de evaluación
Una de las funciones del tutor/a es la coordinación del proceso de evaluación de los
alumnos y alumnas que tiene a su cargo. A él corresponde coordinar las reuniones de
evaluación. Estas reuniones deben servir verdaderamente para unificar criterios tanto en
lo relacionado con la orientación escolar como personal del alumnado.
Los objetivos de las reuniones de evaluación pueden ser, entre otros, los siguientes:
• Profundizar en el conocimiento del grupo y reflexionar sobre los factores que están
influyendo en su evolución.
• Unificar criterios de actuación en cuanto a estrategias de evaluación formativa e
instrumentos de evaluación que se emplearán, así como respecto de lo que se
espera de los alumnos sobre el cumplimiento de las normas de convivencia y de
comportamiento en clase.
• Proponer soluciones a las dificultades que vayan apareciendo en el grupo-clase a lo
largo del curso escolar.
• Adoptar acuerdos sobre las medidas de apoyo y recuperación para los alumnos/as
con dificultades de aprendizaje.
• Evaluar el proceso educativo de cada alumno/a, en las diferentes áreas curriculares,
conforme a los criterios establecidos para el Ciclo en el Proyecto Curricular del
Centro.
Cada centro deberá elaborar dicho plan, según las directrices establecidas por su Equipo
Técnico de Coordinación Pedagógica y con la colaboración y asesoramiento del orientador
u orientadora de referencia del mismo. El proceso de elaboración de este documento debe
ser consensuado y participativo, de forma que en el mismo tengan voz los distintos
miembros de la comunidad educativa en base a su análisis sobre las necesidades y
prioridades de cada centro.
Contenidos
• Autoestima y autoconcepto.
• Educación emocional.
• Habilidades y competencias sociales.
• Educación afectiva y sexual.
• Alimentación saludable, ejercicio físico y evitación del sedentarismo.
• Higiene personal y cuidado bucodental
• Coeducación y educación para la igualdad
• Educación medioambiental y educación para el consumo…
• Autoconocimiento.
• Conocimiento del mundo del trabajo.
• Conocimiento del sistema educativo.
• Iniciación a la toma de decisiones y al trabajo en equipo…
Metodología
Asimismo, es preciso realizar una evaluación final o sumativa, que evalúe todo el
programa o cada una de las partes que lo componen, lo que nos permitirá utilizar los
resultados como análisis inicial para la implementación de la fase siguiente o de programas
futuros. Entre los procedimientos e instrumentos de evaluación a utilizar,
destacamos:
• Reuniones de tutores.
• Reuniones de Equipos Docentes y Equipos de Ciclo.
• Entrevistas con las familias.
• Cuestionarios de evaluación para todos los agentes implicados en la
implementación del programa.
• Análisis de los resultados escolares del alumnado.
• Memoria de Final de Curso del centro.
Pregunta Verdadero-Falso
Verdadero Falso
Correcto
El alumnado con necesidades educativas especiales es aquél que requiere, por un periodo
de su escolarización o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y
atenciones educativas específicas derivadas de discapacidad física, psíquica o sensorial,
o bien de trastornos graves de conducta.
Coordinación
• Equipos docentes
• Tutores
• Orientador/a
El Plan de Orientación y Acción Tutorial debería dar cabida al establecimiento de una serie
de procedimientos, cauces, estrategias generales e instrumentos, que permitan estrechar
la comunicación con las familias y su colaboración en la labor educativa del centro,
entre ellas:
• Reuniones colectivas
• Compromisos de convivencia
• Compromisos educativos
• Registro de entrevistas
• Medidas de participación
• Etc.
• Reuniones de coordinación
• Cuestionarios
• Análisis de resultados escolares y pruebas de diagnóstico
• Entrevistas
• Análisis del clima de convivencia
• Memorias finales
El tutor/a
Todo maestro o maestra implicado/a en la acción tutorial, haya sido o no, designado/a
tutor/a de un grupo de alumnos/as.
Según establece el currículo oficial, la docencia no tiene por objeto sólo conocimientos y
procedimientos, sino también valores, normas y actitudes; tiene por objeto, en definitiva, el
pleno desarrollo personal del alumnado, un desarrollo que implica, por parte del
profesorado, el ejercicio de la función tutorial.
El tutor es el profesor asignado por el director y el jefe de estudios del centro para,
principalmente, orientar y guiar a sus alumnos en el proceso de aprendizaje durante uno o
varios cursos escolares. No obstante, sus labores también engloban el trabajo directo con
las familias de los alumnos, el cuadro de profesores y el orientador escolar. Esto le confiere
un papel de suma importancia en el contexto educativo.
Funciones
La meta principal del tutor de una clase es asegurarse de que los alumnos sacan el mayor
provecho de las enseñanzas que van a recibir durante el curso para alcanzar los objetivos
educativos requeridos. Para ello les ofrecerá siempre su apoyo y asesoramiento en ese
proceso de aprendizaje y les hará partícipes de la vida dentro del centro.
• Conocer el historial académico de cada uno de sus alumnos/as, así como sus
intereses, puntos fuertes y débiles como estudiantes y los rasgos más significativos
de su personalidad.
• Ayudar a que todos los alumnos se integren en el grupo de clase y se adapten.
• Orientar en el proceso de aprendizaje.
• En el caso de alumnos con dificultades de aprendizaje y con necesidades
especiales, el tutor también participará de manera directa en el programa de
intervención educativa y supervisará que estos obtienen los resultados esperados.
• Trabajar en el desarrollo personal y madurativo de sus alumnos, en la adquisición
de valores sociales y su buena convivencia en el centro escolar.
• Fomentará la participación en actividades programadas para todo el centro escolar.
• Facilitar la integración del alumnado en su grupo-clase y en el conjunto de la
dinámica escolar.
• Contribuir a la personalización de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
• Llevar a cabo un seguimiento para detectar las dificultades y las necesidades
especiales para dar una respuesta educativa adecuada.
• Fomentar el desarrollo de actitudes participativas en su entorno sociocultural y
natural.
• Favorecer en el alumno y alumna el conocimiento y aceptación de sí mismo, así
como la autoestima.
• Contribuir al establecimiento de relaciones fluidas con los padres y las madres, que
faciliten la conexión entre el centro y las familias.
• Implicar a los padres y madres en actividades de apoyo al aprendizaje y orientación
de sus hijos/as.
• Informar a los padres y madres de todos aquellos asuntos que afecten a la
educación de sus hijos e hijas.
• Mediar en posibles situaciones de conflicto entre alumnos/as y profesores/as e
informar debidamente a las familias.
• Comunicar a las familias todo lo referente a sus hijos dentro del centro (programa
del curso, objetivos, normas del centro…) a través de reuniones grupales.
• Organizar entrevistas personales con los padres de los estudiantes para informar
de su rendimiento académico y comportamiento.
• Orientar y facilitar los recursos y/o materiales didácticos necesarios a la familia
en el caso de que su hijo necesite trabajar aquellas áreas de aprendizaje donde
muestra más dificultades.
La tutoría en Infantil es entendida más que en ninguna otra etapa como parte del proceso
educativo global que ocurre en el centro educativo, y por tanto comparte con este
finalidades y objetivos. De este modo, la tutoría ha de contribuir al logro de los objetivos
generales de la etapa de infantil y de los objetivos que el centro haya marcado en su
Proyecto Educativo. La E.I. posee un importante carácter preventivo y compensador.
En este sentido, las funciones del tutor están encaminadas hacia la atención
individualizada del alumno en colaboración y coordinación de las familias.
Actividades de tutoría
Son éstas algunas actividades que el tutor o tutora de un grupo clase puede realizar a lo
largo del año:
Asimismo, para que el tutor/a pueda cumplir sus funciones y realizar la programación de
actividades, necesita:
Toda la comunidad educativa debe participar en la concreción del modelo de acción tutorial
y se implique según su nivel de responsabilidad.