El principio del fin Fernando Soto - 12 de agosto de 2018
Israel debía ser una bendición para el mundo y
hemos visto en estos capítulos que están divididos. En 208 años de historia tuvieron 38 reyes. 33 de esos reyes no agradaron a Dios. 5 de ellos honraron a Dios, 1 de cada 10. El pueblo se alejó de Dios poniendo su fe y afectos en otros dioses. Por lo tanto, Dios envió a sus mensajeros para decirles que están en el camino equivocado. Se les llama profetas. Ellos vinieron a sacudir a la gente por los hombros. 9 veces Dios envió a estos mensajeros, pero la gente cerró sus oídos y sus ojos. Ellos son como yo, como nosotros. FOTO 2- 2 Crónicas 36,15,16 El Señor, Dios de sus antepasados, con frecuencia les enviaba advertencias por medio de sus mensajeros. Pero ellos se burlaban de los mensajeros de Dios, tenían en poco sus palabras, y se mofaban de sus profetas. Por fin, el Señor desató su ira contra el pueblo, y ya no hubo remedio. Hablemos una vez más de la metáfora de la ira de Dios. Definimos la “ira de Dios” como las consecuencias que nos autoinflingimos por darle la espalda al fuego del amor de Dios. Experimentamos ese fuego como juicio. Les daré una buena ilustración: Amo entrañablemente a mis cuatro nietos que viven en Okinawa, pero se portan mal. 2
Cuando están de buenas son cariñosos, atentos y
obedientes, pero les gana su energía, y su desorden. Un día uno de ellos a pesar de mis advertencias acumuló puntos de desobediencia y lo tuve que disciplinar. El castigo consistió en estar una hora sentado quieto fuera del departamento. Puse el cronómetro del reloj y le advertí que por cada vez que me preguntara algo o se quejara o me preguntara la hora le aumentaría 15 minutos de castigo. Yo por mi parte saqué una silla y me senté a leer. Una hora de lectura para muchos sería un castigo, para mí es un deleite. En un momento miré a mi nieto y me dio pena, sentí compasión por él, estaba sufriendo el castigo, pero tenía frío. FOTO 3 Pensé en anular la disciplina pero no, le haría más daño eso que lo que yo quería que él aprendiera como consecuencia de su mal comportamiento. Pensé, “cuando yo me porto mal y sufro las consecuencias de mi mal proceder, Dios está ahí conmigo y se duele, pero sabe que tengo que pasar por la disciplina para aprender la lección”. Mi nieto se portó bien un par de… horas. Pero una cosa está entendiendo al igual que el pueblo de Israel, y a propósito, el segundo nombre de él Israel. Ambos tenían que aprender de la disciplina. A Elí se le advierte que no juegue en la calle y uno le dice que no lo haga, y lo sigue haciendo y piensa que es divertido y no obedece y uno ve que vienen los autos y es peligroso. Llegará el tiempo de 3
un grito y “te digo que no, no”, lo agarra por un
brazo, le dice palabras fuertes, usted lo mira en su cara, lo manda para la casa y a su pieza castigado. A veces una buena nalgada con cuchara de palo será efectiva. Los adultos sabemos más que ellos. Eso es lo que sucedió con los reinos del norte y del sur. Dios les advirtió una y otra vez y otra vez y por fin Dios dijo “tengo que hacer algo diferente, tengo que cambiar de táctica”. Dios aleja su protección del reino del norte y permite que esta superpotencia del norte, los asirios, los invada y deporten. Este imperio estaba conquistando todos los pueblos de ese tiempo. Asiria tenía un ejército de 180.000 soldados. Eso es un montón de gente. FOTO 4- Piensen en el Estadio Nacional: tiene capacidad de 48.000 personas. 4 estadios Nacionales llenos de soldados. A continuación, haz de cada persona un soldado y dales la tecnología de guerra más avanzada de la época, 180 mil de ellos, y luego suéltalos para que ataquen el reino del Norte para destruir esas 10 pequeñas tribus. Fue algo horrible. Los israelitas fueron esclavizados, se fueron al exilio. El Reino del Sur dice oh oh. 4 Estadios llenos de soldados allí mismo, en la zona. Llega un momento en que el niño dice "Mi mamá y mi papá son serios cuando me piden obediencia". Te voy a enseñar un vídeo que ilustra esta verdad en la cultura hispana. VIDEO LA CHANCLA 4
La chancla en la mano de Dios son los asirios en
este momento. Isaías 2,6-12 ese es el mensaje que Dios envió en ese momento: FOTO 5- Has abandonado a tu pueblo, a los descendientes de Jacob, porque están llenos de astrólogos de Oriente, de adivinos como entre los filisteos, y hacen tratos con extranjeros. Su tierra está llena de oro y plata, y sus tesoros son incalculables. En su tierra abundan los caballos, y sus carros de guerra son incontables. Su país está lleno de ídolos; el pueblo adora la obra de sus manos, lo que han hecho con sus propios dedos. Al hombre se le humilla, a la humanidad se le degrada. ¡Imposible que los perdones! ¡Métete en la roca, y escóndete en el polvo ante el terror del Señor y el esplendor de su majestad! Los ojos del altivo serán humillados y la arrogancia humana será doblegada. ¡En aquel día sólo el Señor será exaltado! Un día vendrá el Señor Todopoderoso contra todos los orgullosos y arrogantes, contra todos los altaneros, para humillarlos. 5
Dios no puede pretender que esto no es gran
cosa. Usted puede ser capaz de fingir que todo está bien. Yo puedo fingir que todo está bien. Pero Dios no puede hacer eso. Isaías dice que Dios hará bajar al orgulloso de su arrogancia. Eso me da miedo porque yo soy una persona orgullosa. Dios siempre hará bajar a los que se suben en su orgullo. Si usted se siente humilde en estos momentos debe estar agradecido. Si es humilde ahora Dios le levantará ese día. ¿Cómo cree que Dios está tratando de llamar su atención? Si Isaías le enviara una whatsapp de parte de Dios, ¿qué diría? Tenemos que estar atentos al mensaje de Dios. No podemos ignorar a Dios. Puede ser que usted esté demasiado ocupado y no tenga tiempo para Dios. Puede ser que su matrimonio sea mediocre y usted se ha conformado con eso. Puede ser que no está honrando a Dios con su dinero y ha sido bendecido tanto por el Señor y el dinero no lo usa para su gloria y usted está pensando en lo que va a hacer con su dinero, con su tiempo. Su actividad sexual ¿está honrando a Dios y a otras personas? ¿Está buscando escapar de sus problemas con las drogas, el alcohol u otras cosas químicas? 6
¿Está permitiendo que las semillas de la ira, la
amargura, los celos y la envidia se planten en su corazón y algo feo está creciendo allí y no está haciendo nada al respecto, ya que siente algo bueno de todos modos? Isaías está aquí y dice, ¡despierte! FOTO 6- La historia del capítulo 16: 180.000 soldados llenos de testosterona listos para invadir Jerusalén. Ezequías es el rey de Judá, uno de los buenos. Quitó a los ídolos y permitió que la bendición de Dios viniera sobre ellos, y luego los asirios vienen a tocar la puerta y dicen “tenemos broncas con ustedes y son los siguientes en la lista”. El pueblo de Jerusalén se llenó de temor. ¿No estaría usted aterrorizado también? Ezequías respira profundamente y le dice a la gente que no panda el cúnico, que mantenga sus posiciones. Recuerden a Dios, él nos va a ayudar (Ezequías no tenía idea cómo lo haría) . FOTO 7- El rey de Asiria era Senaquerib. Él trata de intimidarlos. Él trae un traductor en hebreo: 2 Reyes 18,19 —Díganle a Ezequías que así dice el gran rey, el rey de Asiria: “¿En qué se basa tu confianza? Ahora bien, tú confías en Egipto, ¡ese bastón de caña astillada, que traspasa la mano y hiere al que se apoya en él! Porque eso es el faraón, el rey de Egipto, para todos los que en él confían. En 26 le dicen al enemigo: no hable con nosotros de esa manera en público. 7
Pero el comandante en jefe respondió:
—¿Acaso mi señor me envió a decirles estas cosas sólo a ti y a tu señor, y no a los que están sentados en el muro? ¡Si tanto ellos como ustedes tendrán que comerse su excremento y beberse su orina! Se burlan de ellos. Dicho esto, el comandante en jefe se puso de pie y a voz en cuello gritó en hebreo:—¡Oigan las palabras del gran rey, el rey de Asiria! Los enemigos están flexionando sus músculos, están listos para chutear el penal, anotar el gol y abrazarse.se encuentra en la zona de anotación. ¿Acaso alguno de los dioses de las naciones pudo librar a su país de las manos del rey de Asiria? Ezequías usa en 2 Cron 32,7-8 el mismo lenguaje de Josué. «¡Cobren ánimo y ármense de valor! No se asusten ni se acobarden ante el rey de Asiria y su numeroso ejército, porque nosotros contamos con alguien que es más poderoso. Él se apoya en la fuerza humana, mientras que nosotros contamos con el Señor nuestro Dios, quien nos brinda su ayuda y pelea nuestras batallas.» Espero que usted crea que Dios lo puede hacer. Para algunos de nosotros hay un ejército esperando por nosotros allá afuera, flexionando sus brazos. Quizás decimos que es demasiado difícil, hemos ido demasiado lejos para que Dios nos redima, es demasiado tarde, ni siquiera Dios puede salvar mi 8
matrimonio, ni siquiera Dios puede rescatarme de
esta tentación, de este fuerte sentimiento, Dios no puede componer mi vida. FOTO 8- Mire lo que hace Ezequías. 2 Cron 32.20 El rey Ezequías y el profeta Isaías hijo de Amoz clamaron al cielo en oración. ¿Cuándo fue la última vez que clamó usted al cielo en desesperación? ¿Le han visto sus hijos de rodillas y llorando al Señor? ¿Cuándo fue la última vez que se postró ante el Señor en profunda humillación y súplica? ¿Cuándo fue la última vez que usted oró con lágrimas en los ojos para que Dios bendiga su familia, o a esta congregación? Probablemente muchas veces usted ha visto un ejército fuera de esta iglesia lista para destruirla. Probablemente en este momento usted tiene un ejército esperando por usted. Cuando usted tiene un ejército fuera de su puerta esto es lo que tienes que hacer: ¡clamar en oración al cielo! FOTO 9- Resultado: 32,21 Entonces el Señor envió un ángel para que exterminara a todos los soldados y a los jefes y capitanes del campamento del rey de Asiria, y éste tuvo que volver avergonzado a su país. A 180 mil soldados les fue como al diablo con San Miguel. The end, se acabó el juego, no hay lucha, no hay batalla, nada, pasemos la página. ¿Y qué onda con el ejército que está esperándote? 9
22 Así salvó el Señor a Ezequías y a los habitantes
de Jerusalén de la mano de Senaquerib, rey de Asiria, y de todos sus enemigos, y les dio paz en todas sus fronteras. El Señor cuidará de mí por todos lados si yo confío en él. Y lo mismo hará por usted. En tus afanes y en tu dolor, Dios cuidará de ti, Vive amparado en su inmenso amor, Dios cuidará de ti. Dios cuidará de ti y por doquier contigo irá, Dios cuidará de ti nada te faltará. La vida que Dios bendice es la vida que clama a él y confía en él. La vida que Dios bendice es una de pureza. FOTO 10- 29.3 En el mes primero del primer año de su reinado, Ezequías mandó que se abrieran las puertas del templo del Señor, y las reparó. Enero 2024: Usted tiene que limpiarse para Dios. Usted tiene que volver a abrir la puerta. A veces la puerta de nuestro corazón está cerrada, tenemos que volver a abrir la puerta y llegar a ser santos para él. ¿Qué necesitamos eliminar? Nos lavamos las manos antes de sentarnos a comer. Confesión de pecados antes de la comunión. Así mismos estamos en nuestra propia norma de pureza: tenemos gusanos en nuestro corazón, bichos 10
en nuestra cabeza, tenemos polvo en nuestras
mentes y nuestros estándares son más bajos que los de la FDA y necesitamos ser lavados con la Palabra de Dios para que nuestras mentes se puedan establecer en las cosas de arriba, así que podamos decirle que sí a Jesús. Que él nos levante. FOTO 11- Isaías 1,18 »Vengan, pongamos las cosas en claro —dice el Señor—. ¿Son sus pecados como escarlata? ¡Quedarán blancos como la nieve! ¿Son rojos como la púrpura? ¡Quedarán como la lana! Las manchas no son permanentes. La pureza es posible. 1 Juan 1.8-9 Si afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no tenemos la verdad. Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. Confesar significa decir: Veo lo que tú ves. Dios va a hacer algo hermoso de su vida. Se abrirá la puerta del templo. Isaías lo vio… Jesucristo puede hacer eso con nosotros ahora.
FOTO 12- COMUNIÓN
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Confesemos ahora nuestros pecados: Dios de
misericordia… Dios de misericordia, confesamos que hemos pecado contra ti por pensamiento, palabra y obra. En lo que hemos hecho y en lo que hemos dejado sin hacer. No te hemos amado con todo el corazón; no hemos amado a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Sincera y humildemente nos arrepentimos de todos nuestros pecados. Por los méritos de tu Hijo Jesucristo, ten piedad de nosotros y perdónanos. Así tu voluntad será nuestra alegría y andaremos por tus caminos para la gloria de tu nombre. Amén.
Credo de los Apóstoles
Creo en Dios Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor. Fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo y nació de María virgen. Padeció bajo el poder de Poncio Pilato. Fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió al lugar de los muertos. 12
Al tercer día resucitó, subió al cielo,
y está sentado a la diestra de Dios Padre. de donde vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia cristiana, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección del cuerpo, y la vida eterna. Amén.
Dios, en su fiel amor, perdona los pecados de
todos los que humildemente se lo piden. Por lo tanto, pronuncio sobre ustedes, esta verdad, en el nombre de Jesús: Sus pecados son perdonados.
Confesemos juntos nuestra fe. Creo en Dios Padre
Todopoderoso…
La paz
Esta es la mesa del Señor, no es la mesa de la
iglesia, sino la mesa del Señor. Se ha preparado para aquellos que lo aman y para quienes quieren amarlo más. Vengan los que tienen fe y vengan los que tienen poca fe. Vengan los que asisten con frecuencia y vengan los que no han venido mucho. 13
Vengan aquellos que han caminado con el Señor
y vengan aquellos que han fallado en su caminar. Es el Señor quien los invita. Es su voluntad que aquellos que lo quieran se encuentren con él en esta mesa. Vengan a buscar el cuerpo de Cristo entregado por ustedes y la sangre de Cristo derramada por ustedes, luego vuelvan a sus asientos para que, unidos como iglesia, comamos y bebamos todos juntos en memoria del Señor.