UNIVERSIDAD DE ORIENTE

NÚCLEO DE ANZOÁTEGUI

EXTENSIÓN REGIÓN CENTRO SUR

DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA DE SISTEMAS

Ensayo

Profesora: Bachiller:

Sandra Marin Luis González Ci: 27.143.015

 Impacto de la Globalización en el Desarrollo de las Organizaciones

La globalización es un fenómeno que ha transformado el panorama económico,

político y cultural a nivel mundial en las últimas décadas. Este proceso de creciente
interconexión entre países y regiones ha tenido un profundo impacto en el desarrollo de las
organizaciones, tanto a nivel local como global.

Desde el punto de vista económico, la globalización ha brindado a las organizaciones

la posibilidad de acceder a mercados internacionales de manera más accesible. Las barreras
comerciales y las restricciones a la inversión extranjera se han ido reduciendo, permitiendo
que empresas de diferentes países compitan y colaboren entre sí en una escala global. Esta
apertura ha facilitado la expansión de las organizaciones hacia nuevos territorios, con la
posibilidad de alcanzar clientes y consumidores en todo el mundo. Como resultado, muchas
compañías han experimentado un crecimiento acelerado y han diversificado sus operaciones
para aprovechar las ventajas competitivas de diferentes regiones

En el ámbito político, la globalización ha impulsado la creación de organismos

internacionales y acuerdos comerciales regionales. Estas instituciones buscan establecer
reglas y normas para facilitar el comercio y la cooperación entre países. Sin embargo,
también han surgido tensiones y desafíos, ya que los intereses de los estados pueden entrar en
conflicto con las prioridades de las organizaciones globales. Las políticas comerciales y las
regulaciones pueden cambiar rápidamente, lo que requiere que las organizaciones sean ágiles
y adaptables para mantener su ventaja competitiva en un entorno político en constante
evolución..

Uno de los efectos más notables de la globalización en las organizaciones es la

apertura de nuevos mercados y oportunidades comerciales. Las fronteras se han vuelto cada
vez más permeables, permitiendo a las empresas expandir sus operaciones hacia mercados
internacionales. La libre circulación de bienes, servicios y capitales ha facilitado la creación
de cadenas de suministro globales, lo que ha llevado a una mayor eficiencia y competitividad
en muchas industrias. Las organizaciones que han sido capaces de adaptarse y aprovechar
estas oportunidades han experimentado un crecimiento significativo y una mayor influencia a
nivel mundial.
 Sin embargo, la globalización también ha presentado desafíos considerables para las
organizaciones. La competencia se ha vuelto más intensa, ya que las empresas de diferentes
partes del mundo compiten directamente entre sí. Esto ha llevado a una mayor presión para
innovar, reducir costos y mejorar la calidad de los productos y servicios. Las organizaciones
que no han logrado adaptarse a este entorno competitivo han enfrentado dificultades para
mantenerse a flote y han tenido que enfrentar cierres o reestructuraciones.

Además, la globalización ha dado lugar a una mayor interdependencia económica

entre países y regiones. Las crisis financieras, como la de 2008, han demostrado cómo los
problemas en una parte del mundo pueden tener efectos en cadena en otras áreas. Esto ha
llevado a un mayor riesgo e incertidumbre para las organizaciones, que deben estar
preparadas para afrontar turbulencias en los mercados globales.

El aspecto cultural de la globalización también ha dejado su huella en las

organizaciones. A medida que las comunicaciones y la tecnología han avanzado, las empresas
se han visto expuestas a una diversidad cultural más amplia. Esto ha llevado a una mayor
comprensión y aprecio por las diferencias culturales, pero también ha planteado desafíos en la
gestión de la diversidad y la inclusión dentro de las organizaciones. La habilidad de trabajar
en entornos multiculturales y de entender las preferencias y necesidades de clientes y
consumidores de diferentes culturas se ha vuelto esencial para el éxito de las empresas en el
ámbito global.

Por otro lado, la globalización también ha permitido la colaboración y el acceso a

talento diverso a nivel internacional. Las organizaciones pueden aprovechar la experiencia y
habilidades de profesionales de diferentes culturas y contextos, lo que puede conducir a la
generación de ideas innovadoras y la adopción de enfoques más inclusivos en la toma de
decisiones. Además, la posibilidad de operar en diferentes países ha permitido a las
organizaciones diversificar sus fuentes de ingresos, reduciendo su dependencia de un
mercado específico y aumentando su resiliencia ante las fluctuaciones económicas.

No obstante, la globalización también ha planteado desafíos éticos para las

organizaciones. La presión por maximizar ganancias y reducir costos puede conducir a
prácticas laborales explotadoras o a la degradación del medio ambiente. Las organizaciones
deben ser conscientes de su responsabilidad social y ambiental en este contexto global y
adoptar prácticas sostenibles y socialmente responsables.