El libro electrónico del Proyecto Gutenberg de Introducción a la

entomología: vol. Yo (de 4), por

William Kirby y William Spence

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Título: Introducción a la entomología: vol. Yo (de 4)

o elementos de la historia natural de los insectos

Autor: William Kirby

William Spence

Fecha de lanzamiento: 27 de agosto de 2013 [EBook n.º 43576]

Idioma: inglés

Codificación del juego de caracteres: ISO-8859-1

*** INICIO DE ESTE PROYECTO LIBRO ELECTRÓNICO DE GUTENBERG

INTRODUCCIÓN A LA ENTOMOLOGÍA, VOL I ***

Producida por Douglas L. Alley, III, Chris Curnow y el

Equipo de revisión distribuida en línea en http://www.pgdp.net
(Este archivo se produjo a partir de imágenes generosamente
disponible por The Internet Archive)
 Plato I

[Pg i]

UN

INTRODUCCIÓN
A

ENTOMOLOGÍA:
O

ELEMENTOS
DEL

HISTORIA NATURAL DE LOS INSECTOS :

CON PLATOS.

Por WILLIAM KIRBY, MAFR Y LS

RECTOR DE BARHAM,
Y

WILLIAM SPENCE, ESQ. FLS

EN CUATRO VOLÚMENES.

VOL. YO.

QUINTA EDICIÓN.
 LONDRES:

IMPRESO PARA

LONGMAN, REES, ORME, MARRÓN Y VERDE,

FILA DE PATERNOSTER.

1828.

[Pg ii]

LONDRES:
IMPRESO POR RICHARD TAYLOR,

CORTE DEL LEÓN ROJO, CALLE FLOTA.

[Pág. Iii]
 A
LA DERECHA HONORABLE

SIR JOSEPH BANKS, BARONET ;

UNO DE LOS CONSEJOS
DE PRIVACIDAD MÁS HONORABLES DE SU MAJESTAD ,
CABALLERO GRAN CRUZ DE LA ORDEN DEL BAÑO,
PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD REAL, ETC.
CUYA BIBLIOTECA Y
COMUNICACIONES PERSONALES INIGUALABLES
HAN SUMINISTRADO MUCHAS DE LAS MATERIAS MÁS INTERESANTES
QUE CONTIENE,

EL SIGUIENTE TRABAJO,
EN EL QUE se realiza un intento COPIAR
su ilustre Ejemplo,
señalando la conexión QUE EXISTE
ENTRE NATURAL SCIENCE y la agricultura,
y las artes,
es decir, con su permiso,
con gratitud INSCRITO
POR SU Obligado MOST

Y SIERVOS OBEDIENTES,
LOS AUTORES.

[Pg iv]
[Pg v]

ANUNCIO
A ESTA EDICIÓN.

Desde que se publicó la edición original de la presente obra, se ha producido

una alteración gradual y grande en la nomenclatura de los géneros, ocasionada
por la subdivisión de los antiguos según sus grupos naturales, y cada uno se
distingue como género o subgénero por su nombre peculiar. Estos nombres en
la presente edición, con el fin de seguir el ritmo del progreso de la ciencia, se
han adoptado en general y se han introducido algunos nuevos. El Índice
mejorado, que los compradores de las Ediciones anteriores pueden tener por
separado, señalará de qué géneros antiguos se han separado los nuevos.
[Pg vi]
[Pg vii]

PREFACIO.
Una causa principal de la poca atención prestada a la entomología en este país,
ha sido sin duda el ridículo tan a menudo arrojado sobre la ciencia. El botánico,
amparado ahora por la sanción de la moda, como antes por la unión prescriptiva
de su estudio con la medicina, podrá dedicar sus horas a musgos y líquenes sin
reproche; pero en la mente de la mayoría de los hombres, tanto los eruditos
como los vulgares, la idea de la insignificancia de su búsqueda está tan
fuertemente asociada con la del diminuto tamaño de sus objetos, que
un entomólogo es sinónimo de todo lo inútil e infantil. Ahora, cuando se abren
tantos otros caminos hacia la fama y la distinción, cuando un hombre
simplemente tiene que declararse botánico, mineralogista o químico —
estudiante de literatura clásica o de economía política— para garantizar la
atención y el respeto, hay evidentemente no hay grandes atractivos que lo
conduzcan a una ciencia que en nueve de cada diez empresas con las que puede
asociar[Pág. Viii] para señalarlo solo como un objeto de lástima o desprecio.
Incluso si no tiene otro objetivo que la autogratificación, sin embargo, "el
estoico más severo de todos nosotros desea al menos que alguienentre en sus
puntos de vista y sentimientos, y lo confirme en la opinión que tiene de sí
mismo": pero ¿cómo puede busca simpatía en una búsqueda desconocida para
el mundo, excepto como indicativo de pequeñez de mente[1] ?
Sin embargo, tales son los encantos genuinos de esta rama del estudio de la
naturaleza, que aquí, así como en el continente, donde, de ser igualmente
despreciado, la Entomología ahora divide el imperio con su hermana Botánica,
este obstáculo no habría sido suficiente para disuadir números del estudio, si no
hubiera existido otro impedimento más poderoso: la falta de una Introducción
popular y completa a la ciencia. Mientras que los libros elementales sobre
botánica se han multiplicado entre nosotros sin fin y en todas sus formas, la
traducción de Curtis de las Fundamenta Entomologiæ , publicada en 1772;
Instituciones de entomología de Yeats , que apareció[Pág. Ix] el año siguiente; y
Genera Insectorum de Barbut , que salió a la luz en 1781 —los dosprimeros en
una forma demasiado poco atractiva y el segundo en una forma demasiado cara
para los lectores generales— son las únicas obras supuestamente dedicadas a
este objeto, de las que puede presumir el idioma inglés.
Convencidos de que este era el principal obstáculo para la difusión de la
entomología en Gran Bretaña, los autores del presente trabajo resolvieron hacer
lo que estuviera en su poder para eliminarla y presentar a sus compatriotas una
mina de placer, nueva, ilimitada e inagotable. y que, a juzgar por su propia
experiencia —formada en ningún campo de comparación contraído— pueden
recomendar que poseen ventajas y atractivos iguales a los que ofrecen la
mayoría de las otras ramas del aprendizaje humano.
La siguiente pregunta fue, de qué manera deberían intentar lograr esta intención.
Si se hubieran contentado con la primera sugerencia que se les presentó, y se
hubieran limitado a traducir una de las muchas Introducciones a la entomología
existentes en latín, alemán y francés, añadiendo sólo algunas mejoras obvias,
su tarea habría sido muy fácil; pero el más mínimo examen mostró que, al
proceder así, se habrían detenido muy lejos de la meta que deseaban alcanzar.
En el departamento técnico[Pg x] de la ciencia encontraron mucha confusión y
numerosos errores e imperfecciones: el mismo nombre a veces se aplicaba a
partes anatómicamente muy diferentes, y diferentes nombres a partes
esencialmente iguales, mientras que otras de importancia primordial carecían
de nombre en absoluto. Y con referencia a la anatomía y fisiología de los
insectos, no pudieron encontrar una generalización completa y precisa de los
diversos hechos relacionados con estos temas, esparcidos aquí y allá en las
páginas de los autores que los han estudiado.
Por lo tanto, resolvieron comenzar, en cierta medida, de novo: instituir una
revisión rigurosa de los términos empleados, haciendo las adiciones y mejoras
que parecieran ser necesarias; e intentar una descripción más completa y
conectada de los descubrimientos existentes respecto a los departamentos
anatómico y fisiológico de la ciencia que la que se ha dado hasta ahora al
mundo: y a estos dos puntos su plan al principio fue limitado.
Sin embargo, pronto se les ocurrió que sería de poca utilidad escribir un libro
que nadie quisiera leer; y que en la era actual del amor por la lectura ligera, no
podía haber muchas esperanzas de llevar a los estudiantes a las áridas
abstracciones de la ciencia, a menos que fueran conducidas a través de[Pg xi] el
atractivo portal de la economía y la historia natural de sus objetos. A este
departamento, por lo tanto, resolvieron dedicar la primera y más considerable
parte de su trabajo previsto, trayendo a un punto de vista, bajo distintos
encabezados, los descubrimientos más interesantes de Reaumur, De Geer,
Bonnet, Lyonet, los Hubers, etc. ., así como sus propias observaciones
individuales, relativas a las propiedades nocivas y beneficiosas de los insectos;
su afecto por sus crías; su comida y modos de obtenerla; sus habitaciones;
sociedades; &C. & c .: y fueron los más inducidos a adoptar este plan por la
consideración de que, aunque muchos de los hechos más sorprendentes se han
presentado antes al lector inglés, una gran proporción le son desconocidos; La
filosofía de la historia natural , y una declaradamente imperfecta en la Latreille
Histoire Naturelle des Crustacés et des Insectes ser exceptuado) nunca se ha
intentado en cualquier language.-De este modo todo el trabajo sería
estrictamente en el plano de la Filosofía Entomologica de
Fabricio, que sólo dan en mucha mayor medida a la Usconomia y Usus , y
anunciarlos en primer lugar en lugar de en el último.
Se adoptó la forma epistolar, no ciertamente a partir de la idea de que su estilo
fuera particularmente[Pg xii] adecuado a un modo de escritura tan difícil de
evitar tropezar con incongruencias: pero simplemente porque esta forma
admitía digresiones y alusiones requeridas en una obra popular, pero que
podrían haber parecido fuera de lugar en un tipo de composición más estricta;
porque es mejor adecuado para transmitir esas orientaciones prácticas, que en
algunas ramas del seguimiento el estudiante requiere; —y por último, porque
de esta forma, la objeción de hablar de modales y economía de los insectos antes
de entrar en la definición de los mismos y explicar los términos de la ciencia —
un curso retrógrado, que han elegido por su deseo de presentar primero el lado
más atractivo de la ciencia— es en gran medida, si no totalmente, obviado.
Tal es el plan que los autores trazaron para sí mismos, un plan que en la
ejecución han encontrado mucho más extenso de lo que habían calculado, que,
¿podrían haber previsto las pilas de volúmenes a través de las cuales les ha
supuesto el trabajo de vadeando, a menudo para recoger poco más que un solo
hecho -las numerosas investigaciones anatómicas y tecnológicas que ha
requerido- y la larga correspondencia, casi tan voluminosa como toda la obra,
inevitablemente hecha necesaria por la lejana residencia de las partes- se han
encogido[Pág. Xiii] de una empresa, cuya ganancia, si por casualidad hubiera
alguna, no se podría esperar que reembolsara ni siquiera el costo de los libros
requeridos en ella, y cuya fama debe necesariamente estar confinada a un
círculo muy limitado. Pero habiendo entrado en ella, perseveraron; y si tienen
éxito en su gran objetivo, el de hacer conversos entre sus compatriotas a un
estudio igualmente calculado para promover la gloria de Dios y el deleite y el
beneficio del hombre, no considerarán mal concedido el trabajo de las horas de
ocio de seis años. .
Y aquí puede ser apropiado observar que uno de sus primeros y favoritos
objetos ha sido dirigir la atención de sus lectores "desde la naturaleza hasta el
Dios de la naturaleza". Porque, cuando reflexionaron sobre el uso fatal que con
demasiada frecuencia se ha hecho de la Historia Natural, y que de las mismas
obras y maravillas de Dios, algunos filósofos, por una inexplicable perversión
del intelecto, han intentado derivar argumentos contra su ser y providencia, o
en contra de la religión revelada en las Sagradas Escrituras, concibieron que
podrían prestar algún servicio a los intereses más importantes de la humanidad,
mostrando cómo cada departamento de la ciencia que recomiendan ilustra las
grandes verdades de la religión y prueba que las doctrinas de la la Palabra de
Dios, en lugar de[Pg xiv] contradiciéndose, son confirmadas triunfalmente por
sus Obras.
"Ver todas las cosas en Dios" se ha contado como uno de los privilegios
peculiares de un estado futuro; y en esta vida presente, "ver a Dios en todas las
cosas", en el espejo de la creación para contemplar y adorar la gloria reflejada
del Creador, no es un logro insignificante; y posee esta ventaja, que así
santificamos nuestras búsquedas y, en lugar de amar a las criaturas por sí
mismas, nos dejamos llevar por el estudio de ellas y sus instintos al amor de
Aquel que las hizo y las dotó.
De su ejecución de la primera parte de su plan, en la que hay menos espacio
para la originalidad, solo es necesario que los autores digan que han hecho todo
lo posible para que sea lo más completo, interesante y útil posible. : pero es
necesario adentrarse un poco más en lo que se ha intentado en las partes
anatómica, fisiológica y técnica del trabajo.
En lo que respecta a la fisiología general y la anatomía interna de los insectos,
han hecho poco más que reunir y combinar las observaciones de los naturalistas
que se han ocupado de estas ramas de la ciencia: pero la anatomía externala
han examinado por sí mismos a lo largo de todo el proceso. clase, y confían,
no[Pág. Xv] sin que se arroje alguna luz nueva sobre el tema; particularmente
señalando y dando nombres a muchas partes nunca antes notadas.
En la Terminología , o lo que, para evitar la barbarie de una palabra compuesta
de latín y griego, rogarían por llamar la Orismología de la ciencia, se han
esforzado por introducir a lo largo de un mayor grado de precisión y concisión,
dividiéndola en general y Orismología parcial ; - bajo el encabezado anterior
definiendo términos relacionados
con Sustancia , Resistencia , Densidad , Proporción , Figura , Forma , Superfi
cies , (bajo las cuales se introducen Escultura , Vestimenta , Color , etc.)Margen
, Terminación , Incisión , Ramificación , División , Dirección , Si tuación ,
Conexión , Armas , etc. y bajo este último los que se relacionan con elcuerpo y
sus partes y miembros, considerados en sus grandes subdivisionesde Cabeza
, Tronco y Abdomen. En resumen, pueden basar su pretensión de aspirar al
menos a una mejora considerable en este departamento en el gran número de
términos nuevos y alteraciones de los antiguos que han introducido, sólo en
anatomía externa quedando poco menos de 150. Si fuera necesario Si alguien
pensara que han hecho demasiados cambios, le recordarían el consejo de
Bergman a Morveau, al reformar la nomenclatura de la Química, la [Pág. Xvi]
solidez que Dugald Stewart ha reconocido: " Ne faites grace à aucune
dénomination impropre. Ceux qui savent déjà, entendront toujours; ceux qui ne
savent pas encore, entendront plutôt " .
A lo largo de toda la publicación, siempre que se menciona algún hecho de
importancia que no depende de su propia autoridad, generalmente se hace
referencia a la fuente de donde se ha derivado; de modo que, si el trabajo no
tuviese otro valor, poseerá el de ahorrar muchos problemas a los futuros
indagadores, sirviendo de índice para orientarlos en sus investigaciones.
Los autores son perfectamente conscientes de que, a pesar de todos sus cuidados
y dolores, inevitablemente quedarán muchas imperfecciones en su trabajo. No
hay ciencia a la que el adagio Dies diem docet sea más aplicable que a la
Historia Natural. Diariamente se hacen nuevos descubrimientos, y es probable
que se hagan hasta el fin de los tiempos; de modo que quien se halaga a sí mismo
de que puede producir una obra perfecta en este departamento se sentirá
miserablemente decepcionado. Lo máximo que se puede esperar
razonablemente de los naturalistas es mantenerse al día con el progreso del
conocimiento, y los autores han hecho todo lo posible por lograrlo. Cada año
nuevo desde que tomaron el tema en la mano hasta el mismo momento en que
se enviaron las primeras hojas a la prensa, numerosas correcciones[Pg xvii] y se
han sugerido alteraciones; y así están convencidos de que sería si duplicaran el
período de demora prescrito por Horacio. Pero la poesía y la historia natural
están en una base diferente; y aunque un autor puede alegar pocas excusas para
dar sus versos al mundo mientras ve posible pulirlos hasta una excelencia
superior, el naturalista, si desea promover la extensión de su ciencia, debe
contentarse con someter sus interpretaciones a la público desfigurado por
numerosas imperfecciones.
En la carta de presentación se señalan varias de las ventajas que se derivan del
estudio de la Entomología; pero hay uno que, aunque no se pudo insistir en él
en ese lugar, es demasiado importante para pasarlo por alto sin previo aviso: su
valor en la educación de la juventud.
Todos los escritores modernos sobre este tema trascendental se unen para
recomendar en este punto de vista, Historia natural: y si "la cualidad de la
discriminación precisa, la percepción inmediata de semejanzas entre las
diversidades, y aún más la percepción rápida y precisa de la diversidad en medio
de las semejanzas" constituye una de las operaciones más importantes del
entendimiento; si es en verdad el fundamento de ideas claras, y la adquisición
de lo que realmente pueda llamarse conocimiento depende más materialmente
de la posesión de él: "- si" la mejor lógica es la que enseña[Pg xviii] no sólo están
vivos ellos mismos, sino que confieren animación a las hojas, frutos y flores
que habitan; que cada paseo ofrece para ver; y sobre las cuales pueden hacerse
nuevas observaciones sin fin.
Además de estas ventajas, ningún estudio ofrece una oportunidad más justa de
guiar a la mente joven por un sendero natural y agradable hacia las grandes
verdades de la religión, y de impresionarla con las ideas más vivas del poder, la
sabiduría y la bondad del Creador.
No es que se recomiende hacer niños[Pág. Xix] recolectores de insectos, ni que
los jóvenes, sin descuidar deberes y ocupaciones más importantes, deban
generalmente convertirse en entomólogos profesos; pero, si los primeros se
familiarizan con sus nombres, modales y economía, y los segundos se inician
en su clasificación, será un excelente método para fortalecer sus hábitos de
observación, atención y memoria, igual quizás, en este sentido, a cualquier otro
ejercicio mental: y luego, como el mayor Gyllenhal, que estudió Entomología
con Thunberg hacia 1770, y después de un intervalo de veinte años dedicado al
servicio de su país, reanudó su búsqueda favorita con todo el ardor de la
juventud, tædium vitæ tan a menudo inseparable de la renuncia a la vida activa,
pero de proporcionar un fondo inagotable de diversión inocente, un incentivo
para el ejercicio y, en consecuencia, ningún grado mínimo de salud y disfrute.
Algunos, que, con un autor ingenioso[2] , considera superfluos todos los
esfuerzos para mostrar la utilidad de la Historia Natural en referencia a los
propósitos comunes[Pág. Xx] de la vida, preguntando "si no basta con abrir una
fuente de diversión copiosa y barata, que tiende a armonizar la mente y elevarla
a dignas concepciones de la naturaleza y de su Autor? Si se puede ofrecer a un
hombre una bendición mayor que ¿felicidad a un ritmo fácil, sin mezcla de
mezcla degradante? ”- puede pensar que la seriedad mostrada en esta cabeza, y
el tiempo que se ha pasado en refutar objeciones, son innecesarios. Pero la
Entomología está en circunstancias tan peculiares que sin eliminar estos
obstáculos, no podría haber esperanza de ganar adeptos para la búsqueda. Plinio
sintió la necesidad de seguir este curso al comienzo de su libro que trata sobre
insectos, y originalmente se pidió uno similar para introducir el estudio incluso
en aquellos países donde la ciencia es ahora más honrada. En Francia, Reaumur,
en cada uno de los sucesivos volúmenes de su inmortal obra, consideró
imprescindible aprovechar toda oportunidad de demostrar que el estudio de los
insectos no es un entretenimiento frívolo ni desprovisto de utilidad, como lo
concebían sus compatriotas; y en Alemania Sulzer tuvo que recorrer el mismo
camino, diciéndonos, en prueba de la necesidad de este procedimiento, que al
mostrar sus obras sobre insectos con sus planchas a dos hombres muy sensibles,
uno lo elogió por emplear sus horas de ocio en la preparación de grabados. que
divertiría a los niños y los mantendría[Pág.Xxi] por picardía, y el otro admitió
que podrían proporcionar patrones muy bonitos para los delantales de las
damas. Y aunque en este país las cosas no están tan mal ahora como cuando se
intentó dejar de lado el testamento de LadyGlanville por motivos de locura, que
no se demostró más que por su afición porrecolectar insectos, y Ray tuvo que
aparecer en Exeter. en el juicio como testigode su cordura[3] , sin embargo, se
puede esperar nada menos que línea por línea para erradicar los prejuicios
profundamente arraigados que prevalecen sobre este tema. Las "viejas
impresiones", como bien ha observado Reaumur, "se borran con dificultad. Se
debilitan, parecen injustas incluso para quienes las sienten, en el momento en
que son atacadas por argumentos que son incontestables; pero al instante
siguiente las pruebas son olvidado, y la asociación perversa reanuda su imperio
".
Los autores no saben que alguna curiosidad se excitará por conocer qué parte
ha aportado al trabajo cada uno de ellos; pero si lo hubiera, es una curiosidad
que deben disculparse de gratificar. Unidos en los lazos de una amistad que, si
bien tienen que agradecer a la Entomología el haberla nacido, se funda en una
base más sólida que la mera comunidad de[Pg xxii] actividades científicas,
desean que, ya sea que la culpa o el elogio sea el destino de sus trabajos, se
otorgue conjuntamente. Todo lo que creen necesario afirmar es que la
composición de cada uno de los diferentes departamentos del trabajo se ha
dividido, en la medida de lo posible, entre ellos; que aunque la carta, o serie de
cartas, sobre un tema en particular, ha sido Por lo general, uno ha realizado
algunos de los hechos e ilustraciones, por lo general, los ha proporcionado el
otro, y hay algunos a los que han contribuido conjuntamente; y que, a lo largo
de todo, los hechos para los que no se cita ninguna otra autoridad, deben Se
considerará que descansa sobre la de uno u otro de los autores, pero no siempre
de él, quien, por alusiones locales, puede concebirse como el autor de la carta
en la que se presentan,

Al reconocer sus obligaciones con sus amigos, el primer lugar se lo debe

a SIMON WILKIN , Esq. de Costessey, cerca de Norwich, a cuya generosidad
están en deuda con casi todas las láminas que ilustran y adornan la obra; la
mayoría de los cuales han sido dibujados y grabados por su artista, el señor
JOHN CURTIS , cuyo íntimo conocimiento del tema le ha permitido[Pg xxiii] dar
a las cifras una precisión que no podrían haber recibido de alguien menos
familiarizado con la ciencia. El lector tampoco está menos obligado a la
generosidad del señor Wilkin que los autores, quienes, si los dibujos, etc. debían
pagarse, necesariamente se contentaron con dar un número mucho menor.
Para ALEXANDER MACLEAY , Esq. tienen obligaciones particulares, por el
cálido interés que siempre ha tenido en la obra, los juiciosos consejos que ha
dado en muchas ocasiones, el libre acceso con el que ha complacido a los
autores a su incomparable gabinete y biblioteca bien guardada, y las numerosas
otras atenciones y adaptaciones con las que les ha ayudado materialmente en su
progreso.
A los otros amigos que amablemente les han ayudado en esta empresa de alguna
manera, piden aquí que les den su mejor agradecimiento.

[Pág. Xxiv]

CONTENIDO DEL VOL. YO.

 Letra

YO. Introductorio,

II. Objeciones respondidas,

III. Metamorfosis de insectos,

IV. Lesiones directas causadas por insectos,

V. Lesiones indirectas causadas por insectos.

1. Lesiones a nuestra propiedad animal viviente,

VI. Continuaron las lesiones indirectas.

2. Lesiones a nuestra propiedad vegetal viva,

VII. Continuó el mismo tema. Los estragos de las langostas,

VIII. Lesiones indirectas concluidas.

3. Lesiones a nuestra propiedad muerta, ya sean animales o vegetales,

IX. Beneficios indirectos derivados de insectos,

X. Beneficios directos derivados de insectos,

XI. Afecto de los insectos por sus crías,

XII. Comida de insectos,

XIII. El mismo tema continuó,

XIX. Habitaciones de insectos.

1. De insectos solitarios,

XX. Continuaron las habitaciones de insectos.

2. De los insectos en la sociedad,

[Pg 1]
 UNA INTRODUCCIÓN A LA ENTOMOLOGÍA.

LETRA I.
ESTIMADO SEÑOR ,

No puedo sorprenderme de que una mente activa como la suya experimente un

grado no pequeño de tedio en una situación tan alejada, como representa su
nueva residencia, del "bullicio de los hombres". Ciertamente, nada puede
compensar la falta de una sociedad agradable; pero como su caso a este respecto
no admite más remedio que la paciencia, me alegro de que desee volver su
atención a alguna actividad que pueda divertirle en los intervalos de estudio más
severo y suplir en parte el vacío del que se queja. No me siento un poco halagado
de que desee que se le informe qué clase de los tres reinos de la naturaleza es,
en mi opinión, más probable que responda a su propósito; al mismo tiempo
insinuando que se siente inclinado a dar preferencia a la entomología, siempre
que se puedan obviar satisfactoriamente algunas objeciones,
[Pg 2]

La humanidad en general, sin exceptuar incluso a los filósofos, tiende a

magnificar, a menudo más allá de su mérito, la ciencia o la actividad a la que se
ha vuelto adicta, y a despreciar cualquier que parezca competir con su favorito:
como los temidos campeones de romance, cada uno se cree obligado a tomar el
campo contra todos los que no se suscribirán a la incomparable belleza y los
logros de su propia Dulcinea. En tal conflicto por la preeminenciano conozco
ninguna ciencia que, en este país, haya salido peor que la entomología: sus
campeones hasta ahora han sido tan pocos, y sus esfuerzos taninfructuosos, que
todas sus hermanas rivales han sido exaltadas por encima de ella: y Creo que
apenas hay una rama de la historia natural que haya tenido menos admiradores
británicos. Mientras que la botánica se jacta de innumerables, ella, aunque
tampoco es inferior en belleza, la simetría, o la gracia, ha recibido el homenaje
de un tren muy esbelto. Por lo tanto, dado que los méritos de la entomología han
sido tan poco reconocidos, no lo consideraráinjusto si defiendo la causa de esta
damisela angustiada y me esfuerzo por lograr su restauración a sus justos
derechos, privilegios y rango.
Las cosas que son universalmente obvias y fáciles de examinar, ya que son las
primeras que caen bajo nuestra atención, también lo son más comúnmente las
que primero sentimos una inclinación a estudiar; mientras que, por el contrario,
las cosas que deben buscarse para ser vistas, y que cuando se buscan evitan la
aproximación y la mirada inquisitiva del hombre, son a menudo las últimas a
las que dirige su atención. El reino vegetal se encuentra en la situación anterior.
Flora con mano liberal ha esparcido a nuestro alrededor sus encantadoras
producciones; ellos en todas partes se encuentran[Pg 3] y seducirnos,
encantarnos por su belleza, deleitarnos con su fragancia e interesarnos tanto por
su sumisión a nuestros lujos y comodidades, como por elapoyo y el bienestar
necesarios de nuestra vida. Las bestias, pájaros y peces también, en uno u otro
de estos aspectos, atraen nuestra atención; pero los insectos, insectos infelices,
están tan lejos de atraernos, que estamos acostumbrados a aborrecerlos desde
nuestra niñez. El primer conocimiento que obtenemos de ellos es como
torturadores; Por lo general, quienes nos rodean nos las señalan como criaturas
feas, inmundas y nocivas; y todo el mundo de los insectos, las mariposas tal vez
y algunos otros con la excepción, están consagrados por una prohibición
universal a la proscripción y la execración, ya que sólo son aptas para ser
pisoteadas y aplastadas: de modo que a menudo, antes de que podamos
persuadirnos de estudiarlas,
Otro motivo principal que ha contribuido a mantener la Entomología en
segundo plano surge del diminuto tamaño de los objetos de los que trata. Al
estar entre las producciones más diminutas de la naturaleza, no captan tan
fácilmente la atención del observador; y cuando lo hacen, la humanidad en
general es tan apta para estimar el valor y la importancia de las cosas por su
volumen, que debido a que generalmente las medimos por los duodecimales de
una pulgada en lugar de por el pie o por el metro, los insectos se consideran
demasiado insignificantes. partes de la creación, y de muy poca importancia
para su bienestar general, para hacerlas dignas de una atención o estudio serio.
Me esforzaré por demostrar en el curso de nuestra futura correspondenciaqué
pequeño fundamento hay para tales prejuicios y conceptos erróneos; mi
objetivo ahora, como el campeón[Pg 4] y defensora de la entomología, es
señalarle sus ventajas comparativas y quitar el velo que hasta ahora ha ocultado
esos atractivos, y esa gracia y belleza, que la hacen merecedora de la misma
admiración, al menos, con sus ramas hermanas de la historia natural.
Al estimar el valor comparativo del estudio de cualquier departamento de esta
rama de la ciencia, debemos contrastarlo con otros en cuanto al rango que tienen
sus objetos en la escala del ser; la diversión y la instrucción que el estudiante
puede obtener de ella; y su utilidad para la sociedad en general. Con respecto a
la utilidad pública, quizás se permita que el estudio de cada uno de los tres
reinos se mantenga casi en pie de igualdad; Por tanto, no entraré en ese tema
hasta que llegue a considerar la cuestión Cui bono? y señalar los usos de la
entomología, pero me limitaré ahora a las dos primeras de estas circunstancias.
En cuanto al rango, debo reclamar para el entomólogo cierto grado de
precedencia sobre el mineralogista y el botánico. El reino mineral, cuyosobjetos
no están organizados ni son sensibles, se sitúa ciertamente al pie de la
escala. A continuación, por encima de este, está el vegetal, cuyas hermosas
tribus, aunque no están dotadas de sensaciones, están organizadas. En el último
y más alto lugar ocupa el mundo animal, formado por seres tanto organizados
como sensibles. A esta escala de precedencia la gran luminaria moderna de la
Historia Natural, a pesar de que la Botánica fue siempre su actividad favorita,
ha dado su sanción, reconociendo en el prefacio de su Fauna Suecica , que
aunque el reino vegetal es más noble que el mineral, sin embargo el animal es
más excelente que la verdura. Ahora bien, es un axioma indiscutible, debería
pensar,[Pg 5] que cuanto más exaltado el objeto, más excelente es el estudio. Sin
embargo, con esta observación, de ninguna manera se pensaría que depreciaría
o desaprobaría el estudio de las plantas o de los minerales. Todas las obras de
nuestro Creador son grandes y dignas de nuestra atención e investigación, tanto
las más bajas en la escala como las más altas, las más diminutas y débiles, así
como las que superan en magnitud y poder. Tampoco deben aquellos cuya
inclinación o genio les lleva a un departamento, decir a los que prefieren otro -
"no te necesitamos" - para cada uno en su lugar, difundiendo el conocimiento
de sus obras y añadiendo al acervo de anteriores descubrimientos, contribuye a
promover la gloria del Gran Arquitecto del universo y el bien de sus criaturas.
No es mi deseo reivindicar mi ciencia favorita más de lo que el derecho le
pertenece; por lo tanto, cuando la cuestión se refiere al rango, debo conceder a
las órdenes superiores de animales, me refiero a peces, anfibios, aves y
cuadrúpedos, su debida prioridad y precedencia. Sólo observaré aquí que
pueden existir circunstancias que compensen el rango y tiendan a hacer más
deseable el estudio de un orden inferior de seres que el de uno superior: cuando,
por ejemplo, los objetos del estudio superior no deben ser llegar o conservar sin
gran dificultad y gasto; cuando son pocos en número; o, cuando ya están bien
comprobados y conocidos: circunstancias que atañen al estudio de aquellos
animales que preceden a los insectos, mientras que no atacan al estudio de los
insectos mismos.
Con respecto a la diversión y la instrucción del estudiante, mucho sin duda
puede derivarse de cualquiera de las ciencias a las que se alude: pero la
Entomología ciertamente no es[Pág. 6] detrás de cualquiera de sus hermanas en
estos aspectos; y si le gustan las novedades y está ansioso por hacer nuevos
descubrimientos, ella le abrirá un campo más amplio para ellos que la botánica
o las ramas superiores de la zoología.
Un nuevo animal o planta vertebrado rara vez se encuentra, incluso por aquellos
que tienen tiempo libre y oportunidad para investigaciones extensas; pero si
recolecta insectos, encontrará, por limitada que sea la mansión en la que puede
dedicarse a su juego, que sus esfuerzos a menudo se ven recompensados con la
captura de alguna rareza indescriptible o rara en la actualidad que no poseen
otros entomólogos, porque rara vez he visto un gabinete tan pobre como para
no poseer un espécimen único. No, aunque haya buscado en todos los lugares
de su vecindario este año, haya removido cada piedra, haya sacudido cada
arbusto o árbol y haya pescado todos los estanques, no habrá agotado sus
producciones de insectos. Haz lo mismo otro y otro, y nuevos tesoros seguirán
enriqueciendo tu gabinete. Si sale de su propia vecindad para una excursión
entomológica, sus perspectivas de éxito aumentan aún más; e incluso si está
confinado a su posada con mal tiempo, las ventanas de su apartamento, como a
menudo he experimentado, aumentarán sus existencias. Si un chaparrón
repentino le obliga en cualquier momento a buscar refugio bajo un árbol, su
atención se verá atraída, y se aliviará el tedio de su estación, donde el botánico
no podía esperar encontrar ni siquiera un nuevo liquen o musgo, por la aparición
de varios insectos, conducidos allí quizás por la misma causa que tú, que no has
observado antes. Si usted, como confío en usted, siente el deseo de prestar
atención a los modales y la economía de los insectos, y ambiciona hacer
descubrimientos en esta parte de la ciencia entomológica, puedo asegurarle, por
mi larga experiencia, como he experimentado a menudo, se sumará a su stock.
Si un chaparrón repentino le obliga en cualquier momento a buscar refugio bajo
un árbol, su atención se verá atraída, y se aliviará el tedio de su estación, donde
el botánico no podía esperar encontrar ni siquiera un nuevo liquen o musgo, por
la aparición de varios insectos, conducidos allí quizás por la misma causa que
tú, que no has observado antes. Si usted, como confío en usted, siente el deseo
de prestar atención a los modales y la economía de los insectos, y ambiciona
hacer descubrimientos en esta parte de la ciencia entomológica, puedo
asegurarle, por mi larga experiencia, como he experimentado a menudo, se
sumará a su stock. Si un chaparrón repentino le obliga en cualquier momento a
buscar refugio bajo un árbol, su atención se veráatraída, y se aliviará el tedio de
su estación, donde el botánico no podía esperarencontrar ni siquiera un nuevo
liquen o musgo, por la aparición de varios insectos, conducidos allí quizás por
la misma causa que tú, que no has observado antes. Si usted, como confío en
usted, siente el deseo de prestar atención a los modales y la economía de los
insectos, y ambiciona hacer descubrimientos en esta parte de la ciencia
entomológica, puedo asegurarle, por mi larga experiencia, por la aparición de
varios insectos, conducidos allí quizáspor la misma causa que tú, que no has
observado antes. Si usted, como confío en usted, siente el deseo de prestar
atención a los modales y la economía de los insectos, y ambiciona hacer
descubrimientos en esta parte de la ciencia entomológica, puedo asegurarle, por
mi larga experiencia, por la aparición de varios insectos, conducidos allí quizás
por la misma causa que tú, que no has observado antes. Si usted, como confío
en usted, siente el deseo de prestar atención a los modales y la economía de los
insectos, y ambiciona hacer descubrimientos en esta parte de la ciencia
entomológica, puedo asegurarle, por mi larga experiencia,[Pg 7] que aquí
encontrarás un fondo inagotable de novedades. Durante más de veinte años he
dirigido mi atención a ellos, y durante la mayor parte de mis paseos de verano
mis ojos se han dedicado a observar sus caminos; sin embargo, puedo decir con
verdad, que lejos de haberagotado el tema, en los últimos seis meses he sido
testigo de hechos más interesantes respecto a su historia que en muchos años
anteriores. Seguir solo a
los insectos que frecuentan su propio jardín, desde su primer estado hasta el
último, y rastrear todos sus procedimientos, proporcionaría una diversión
interesante para el resto de su vida, y al final dejaría mucho por hacer. su
sucesor; porque donde conocemos a fondo la historia de un insecto, hay cientos
acerca de los cuales hemos averiguado poco además del simple hecho de su
existencia.
Pero muchas otras fuentes de placer e información se abrirán a usted, no
inferiores a las que puede proporcionar cualquier otra ciencia, cuando entre más
profundamente en el estudio. Los insectos, de hecho, parecen haber sido las
producciones favoritas de la naturaleza, en las que, para manifestar su poder y
habilidad, ha combinado y concentrado casi todo lo que es hermoso y elegante,
interesante y seductor, o curioso y singular, en todas las demás clases y orden
de sus hijos. A estas, sus preciadas miniaturas, les ha dado el toque más delicado
y el acabado más alto de su lápiz. Números que ha armado con una malla
reluciente, que refleja un brillo como el de los metales bruñidos. [4] ; en otros,
ilumina el resplandor deslumbrante de las gemas pulidas [5] . Algunos los ha
engalanado con lo que parece[Pág. 8] como gotas líquidas, o placas de oro y
plata[6] ; o con escamas o pelo, que imitan el color y emiten el rayo de los mismos
metales preciosos[7] . Algunos exhiben un exterior rudo, como piedras en su
estado natal[8] , mientras que otros representan su rostro liso y brillante después
de haber sido sometidos a la herramienta del pulidor: otros, nuevamente, como
tantos Atlas pigmeos que llevan sobre sus espaldas un microcosmos, por las
elevaciones y depresiones accidentadas y diversas de su corteza tuberculada,
presente a los ojos del espectador no una imitación inapropiada de la superficie
desigual de la tierra, ahora horrible con rocas deformadas, cordilleras y
precipicios, ahora hinchándose en colinas y montañas, y ahora hundiéndose
en valles, cañadas y precipicioscuevas[9] ; mientras que no pocos están
cubiertos de espinas ramificadas, que lafantasía puede formar en un bosque de
árboles[10] .
¡Qué números compiten con la encantadora descendencia de Flora en varias
bellezas! algunos en la delicadeza y variedad de sus colores, colores no como
los de las flores evanescentes y fugitivas, sino fijos y duraderos, que sobreviven
a su tema y lo adornan tanto después de la muerte como cuando estabavivo;
otros, nuevamente, en el veteado y textura de sus alas; y otros en el rico plumón
algodonoso que los viste. De hecho, la naturaleza ha llevado en ellos su arte
mimético a tal perfección, que tú dirías:[Pág. 9] al contemplar algunos insectos,
que habían robado a los árboles sus hojas para formarse alas artificiales, tan
exactamente se parecen a ellos en su forma, sustancia y estructura vascular;
algunos representan hojas verdes, y otros aquellos que están secos y
marchitos[11] . No, a veces este mimetismo es tan exquisito que confundirías a
todo el insecto con una porción de la ramificación de un árbol.[12] . Ninguna
belleza insignificante en algunas plantas surge de las estríasy la puntuación de
sus tallos y hojas, y un adorno similar distingue de manera
llamativa a numerosos insectos, que también imitan con una variedad
multiforme, como puede verse particularmente en las orugas de muchas
especies de la tribu de las mariposas ( Papilionidæ ), las espinas y espinas que
se dan como una armadura Noli me tangere a varias producciones vegetales.
En los peces las escamas lúcidas de variada tonalidad que los recubren y
defienden son universalmente admiradas y estimadas por su peculiarornamento;
pero coloque el ala de una mariposa bajo un microscopio, esa avenida hacia
glorias invisibles en nuevos mundos, y descubrirá que la naturaleza ha dotado a
las más numerosas de las tribus de insectos con el mismo privilegio,
multiplicando en ellas las formas[13] , y diversificando la coloración de este tipo
de ropa más allá de todo paralelo. Los matices ricos y aterciopeladosdel plumaje
de las aves no son superiores a lo que el observador curioso puede descubrir en
una variedad de lepidópteros ; y esos ojos multicolores que engalanan tan
gloriosamente la cola del pavo real son imitados con éxito por uno de nuestros
más comunes[Pág. 10] mariposas[14] . Se cree que las plumas sonpeculiares de las
aves; pero los insectos suelen imitarlos en sus antenas[15] , alas[16] , e incluso a
veces en la cobertura de sus cuerpos.[17] . — Admiramos conrazón los abrigos de
los cuadrúpedos, ya sea que tengan la piel cubierta de pelo,o de lana, o de pieles;
sin embargo, tal vez no sean conscientes de que una granvariedad de insectos
están vestidos con todos estos tipos de cabello, pero infinitamente más finos y
de textura más sedosa, más brillantes y delicados en color, y con más matices
de lo que cualquier otro animal puede pretender.
En variedad, los insectos ciertamente superan a cualquier otra clase de seres
animados. La naturaleza, en su talante juguetón, al pintarlos, a veces imita las
nubes del cielo; en otros, el curso serpenteante de los ríos de la tierra, o las
ondulaciones de sus aguas: muchos están veteados como hermosos mármoles;
otros tienen la apariencia de una túnica de la mejor red arrojada sobre ellos;
algunas las blasfema con insignias heráldicas, dándolas para llevar en los
campos sable-azur-vert-gules-argent yo, fesses-barras-curvas-cruces- medias
lunas-estrellas, e incluso animales[18] . En muchos, tomando su regla y brújula,
dibuja con precisión cifras matemáticas; puntos, líneas, ángulos, triángulos[19] ,
cuadrados y círculos. En otros retrata, con mano mística, lo que parecen
símbolos jeroglíficos, o los inscribe con los caracteres y letras de variosidiomas,
a menudo muy correctamente formados.[20] ; y, lo que es más extraordinario, ha
registrado[Pág. 11] en otras cifras que se corresponden con varias fechas de la
era cristiana[21] .
Tampoco la naturaleza ha sido prodigiosa sólo en la ropa y el ornamento de
estas tribus privilegiadas; en otros aspectos, ha sido igualmente despiadada con
sus favores. A algunos les ha dado aletas como las de los peces, o un pico
parecido al de los pájaros[22] ; para otros cuernos, casi las contrapartes de los de
varios cuadrúpedos. El toro[23] , el ciervo[24] , el rinoceronte[25] , e incluso el
unicornio hasta ahora buscado en vano[26] , tienen a este respecto muchos
representantes entre los insectos. Uno está armado con colmillos similares a los
del elefante.[27] ; otro está erizado de espinas, como el puercoespín y el
puercoespín con púas[28] ; un tercero es un armadillo en miniatura; las patas
traseras desproporcionadas del canguro dan un aspecto más grotesco a un
cuarto[29] ; y la cabeza amenazante de la serpiente se encuentra en un quinto[30]
. Sin embargo, sería interminable producir todos los casos que ocurrende tales
imitaciones; y sólo señalaré que, en términos generales, estos brazos e
instrumentos en estructura y acabado superan con creces a los que se parecen.
Pero además, los insectos no solo imitan, de una manera infinitamente variada,
todo lo que hay en la naturaleza, sino que también pueden [Pág. 12] con muy
poca violencia ser considerado como un símbolo de seres fuera de y por encima
de la naturaleza. La mariposa, adornada con todas las bellezas y todas las
gracias, llevada por alas radiantes a través de los campos del éter y extrayendo
el néctar de cada flor, nos da una idea de los benditos habitantes de los mundos
más felices, de los ángeles y de los espíritus de los justos. llegó a su estado de
perfección. Una vez más, otros insectos parecen emblemáticos de una clase
diferente de seres sobrenaturales: cuando contemplamos algunos tremendos por
los numerosos cuernos y espinas que se proyectan en horrenda disposición
desde su cabeza u hombros; otros por sus mandíbulas amenazantes de espantosa
longitud y armados con crueles colmillos. : cuando observamos el tono lúgubre
y el aire demoníaco que distingue a los demás, las guaridas de oscuridad en las
que viven, la impureza de su comida, sus hábitos depredadores y su crueldad,[31]
.
Ciertamente, la vista de un armario de insectos bien almacenado traerá ante todo
espectador que no esté familiarizado con ellos, formas en una variedad infinita,
que antes no hubiera pensado que pudieran existir en la naturaleza, sin que se
parezcan en nada a los otros departamentos del reino animal. exhibir, y
excediendo incluso las ficciones más salvajes de la imaginación más fértil.
Además de prototipos de belleza y simetría, allí en miniatura[Pág. 13]
divertirse contemplando (porque las criaturas más horribles, cuando se las priva
del poder de dañar, se convierten en fuentes de interés y objetos de curiosidad),
para usar las palabras de nuestro gran poeta,
... todas las cosas prodigiosasAbominable, indecible y peorQue las fábulas han
fingido o el miedo concebido,Gorgonas, Hidras y Quimeras terribles.
Pero los placeres de un estudiante de la ciencia a la que deseo presentarles, están
lejos de limitarse a los que resultan de un examen de la forma exterior y la
decoración de los insectos: pues, ¿podrían estos, por infinitos que parezcan,
agotarse? , o, por maravillosos que sean, pierden su interés, pero pueden abrirse
nuevas fuentes, exuberantes en diversión e instrucción, que proporcionarán un
fondo casi infinito para que su curiosidad aproveche. La sorprendente
peculiaridad y variedad de estructura que exhiben en sus instrumentos de
nutrición, movimiento y oviposición; en sus órganos de sensación, generación
y las grandes fuentes de vitalidad, de hecho, todo su sistema, anatómicamente
considerado, te abrirá un mundo de maravillas con las que no te saciarás
pronto,[32] ! "Pero incluso esto no te llevará al final de tus placeres: debes dejar
a los muertos para visitar a los vivos; debes contemplar insectos cuando están
llenos de vida y actividad, dedicados a sus diversos empleos, practicando sus
diversas artes , perseguir[Pág. 14] sus amores y la preparación de moradas para
su progenie: debes notar la puesta y la clase de sus huevos; sus maravillosas
metamorfosis; sus instintos, ya sean solitarios o gregarios; y los otros milagros
de su historia, todo lo cual les abrirá una mina de diversión e instrucción más
rica, lo digo sin vacilar, que cualquier otro departamento de Historia Natural
puede proporcionar. Una enumeración minuciosa de estos detalles estaría fuera
de lugar aquí, y sólo prevendría lo que se detallará más ampliamente a
continuación; pero una mirada rápida a muy pocos de los más notables puede
servir de estímulo para excitar su curiosidad e inducirle a entrar con mayor
entusiasmo en el amplio campo al que le conduciré.
El señor de la creación se enorgullece de enumerar las diversas artes y máquinas
útiles que han dado a luz, sin darse cuenta de que "El que enseña al hombre el
conocimiento" ha instruido a estos despreciados insectos para que se anticipen
a él en muchos de ellos. Los constructores de Babel sin duda pensaron que su
invención de convertir la tierra en piedra artificial era un descubrimiento muy
feliz.[33] ; todavía una pequeña abeja[34] había practicado este arte, utilizando de
hecho un proceso diferente, a pequeña escala, y las hormigas blancas a gran
escala, desde que comenzó el mundo. El hombre piensa que no tiene rival como
arquitecto y que sus edificios no tienen paralelo entre las obras de las órdenes
inferiores de animales. Sería de otra opinión si se fijara en la historia de los
insectos: descubriría que muchos de ellos han sido arquitectos desde tiempos
inmemoriales; que tienen[Pág. 15] tenían sus casas divididas en varios
departamentos y contenían escaleras, arcos gigantes, cúpulas, columnatas y
similares; es más, que incluso excavan túneles tan inmensos, en comparación
con su propio tamaño, que son doce veces más grandes que el proyectado por
el Sr. Dodd para ser llevado bajo el Támesis en Gravesend.[35] . La bella dama
moderna, que se enorgullece del brillo y la belleza de las cortinas escarlata que
adornan las majestuosas paredes de su salón, o las alfombras que cubren su piso,
imaginando que nunca antes se había visto nada tan rico y espléndido, y
compadeciéndose Sus antepasados vulgares, que estaban condenados a
blanquearse y precipitarse antiestéticos, ignora todo el tiempo que antes de que
ella o sus antepasados existieran, e incluso antes de que se descubriera el tinte
tirio, un pequeño insecto había sabido cómo colgar el paredes de su celda con
un tapiz de un escarlata más brillante que cualquiera de sus habitaciones pueden
exhibir[36] ; y que otros tejen diariamente alfombras de seda, tanto en tejido como
en textura infinitamente superior a las que tanto admira. Ningún adorno
femenino es más preciado y costoso que el encaje, cuya invención y fabricación
parece ser el derecho exclusivo del sexo más suave. Pero incluso aquí han sido
anticipados por estas pequeñas y laboriosas criaturas, que a menudo defienden
su crisálida indefensa, con una cubierta de encaje de lo más singular, y tan bella
como singular.[37] . Otras artes han sido igualmente anticuadas por estas
criaturas. ¡Qué gran importancia se concede a la invención del papel! Durante
cerca de seis mil años, uno de nuestros[Pág. 16] los insectos más comunes ha
sabido hacerla y aplicarla a sus propósitos[38] ; e incluso cartón, superior en
sustancia y pulimento a cualquiera que podamos producir, es fabricado por
otro[39] . Imaginamos que nada menos que el intelecto humano puede ser igual a
la construcción de una campana de buceo o una bomba de aire; sin embargo,
una araña tiene el hábito diario de usar uno, y, lo que es más, uno exactamente
similar en principio a el nuestro, pero más ingeniosamente elaborado; por medio
del cual ella reside sin mojar en el seno del agua, y obtiene los suministros
necesarios de aire por un proceso mucho más simple que nuestros cubos
alternos[40] —y la oruga de una polilla sabe imitar a la otra, produciendo un
vacío, cuando es necesario para sus fines, sin pistón más que su propio cuerpo[41]
. Si pensamos con asombro en las ciudades populosas que han empleado la labor
unida del hombre durante muchas épocas para llevarlas a su máxima extensión,
¿qué diremos de las hormigas blancas, que solo requieren unos pocos meses
para construir una metrópoli capaz de contener ¿Un número infinitamente
mayor de habitantes que incluso la imperial Nínive, Babilonia, Roma o Pekín,
en todo su esplendor?
El hecho de que los insectos se nos hubieran adelantado en nuestras invenciones
debería instarnos a prestarles más atención a ellos y a sus formas de lo que lo
hemos hecho hasta ahora, ya que no es en absoluto improbable que el resultado
sean muchos indicios útiles para la mejora de nuestro artes y manufacturas, y
tal vez por algunos descubrimientos beneficiosos. El pintor, por tanto,
probablemente podría estar provisto de pigmentos más brillantes, el tintorero
con tintes más delicados y[Pág. 17] el artesano con un nuevo y mejoradoconjunto
de herramientas. En este último aspecto, los insectos merecen especialatención.
Todas sus operaciones se realizan con admirable precisión y destreza; y aunque
no suelen variar el modo, ese modo es siempre el mejor quese puede concebir
para alcanzar el fin que se busca. Los instrumentos también con los que están
provistos no son menos maravillosos y variados que las operaciones mismas.
Tienen sus sierras, limas, barrenas, barrenas, cuchillos, lancetas, tijeras y
fórceps, con muchos otros instrumentos similares; varios de los cuales actúan
en más de una capacidad, y con un movimiento complejo y alterno al que aún
no hemos alcanzado en el uso de nuestras herramientas. El hecho tampoco es
tan extraordinario como puede parecer a primera vista, ya que "el sabio de
corazón y maravilloso en el trabajo" es el inventor y fabricantedel aparato de
insectos; que puede considerarse como un conjunto de patrones en miniatura
dibujados para nuestro uso por una mano Divina. A continuación,les daré una
descripción más detallada de algunos de los más sorprendentes de estos
instrumentos; y si estudias los insectos desde este punto de vista, recibirásuna
buena recompensa por todo el trabajo y la atención que les dedicas.
Pero una especie de instrucción más importante que cualquiera de las
enumeradas hasta ahora puede derivarse de las búsquedas entomológicas. Si
prestamos atención a la historia y las costumbres de los insectos, nos
proporcionarán muchas lecciones útiles de ética, y de ellas podremos aprender
a mejorarnos en diversas virtudes. De hecho, tenemos la autoridad inspirada de
los más sabios de la humanidad para estudiarlos en este punto de vista, ya que
él mismo escribió un tratado sobre ellos, y envía a su perezoso a uno para recibir
una lección de sabiduría.[42] .[Pág. 18] Y si valoramos la diligencia y la
laboriosidad infatigable; juicio, prudencia y previsión; economía y frugalidad;
si consideramos la modestia y la timidez como adornos femeninos; si
reverenciamos el afecto de los padres, de todas estas y muchas más virtudes, los
insectos, en sus diversos instintos, exhiben varios ejemplos sorprendentes,
como verán en el curso de nuestra correspondencia.
Con respecto a la instrucción religiosa, los insectos están lejos de ser rentables;
de hecho, desde este punto de vista, la entomología parece poseer ventajas
peculiares sobre cualquier otra rama de la historia natural. En los animales más
grandes, aunque admiramos el arte y la sabiduría consumados que se
manifiestan en su estructura, y adoramos ese poder y bondad Todopoderoso
que, mediante una maravillosa maquinaria, se mantiene enmovimiento por la
constante acción y reacción de los grandes poderes positivosy negativos de la
naturaleza. La naturaleza, mantiene en plena vigencia las circulaciones
necesarias para la vida, la percepción y el disfrute; sin embargo, como parece
que no hay desproporción entre los objetos y las diferentes operaciones que se
llevan a cabo en ellos, y vemos que ofrecen suficiente espacio para el juego de
sus sistemas, no experimentamos las mismas sensaciones de asombro y
asombro que nos asaltan cuando contemplamos operaciones similares llevadas
a cabo sin interrupción en animales apenas visibles a simple vista. Que las
criaturas, que en la escala del ser están próximasa las no entidades, deberían ser
elaboradas con tanto arte y artificio, tienen tal número de partes tanto internas
como externas, todas tan altamente acabadas ycada una tan bien calculada para
responder a su fin. ; que deberían incluir en esta forma evanescente tal variedad
de órganos de percepción e instrumentos de movimiento, excediendo en número
y peculiaridad de estructura a los tener tal cantidad de partes tanto internas como
externas, todas tan bien acabadas y cada una tan bien calculada para responder
a su fin; que deberían incluir en estaforma evanescente tal variedad de órganos
de percepción e instrumentos de movimiento, excediendo en número y
peculiaridad de estructura a los tener talcantidad de partes tanto internas como
externas, todas tan bien acabadas y cadauna tan bien calculada para responder a
su fin; que deberían incluir en esta forma evanescente tal variedad de órganos
de percepción e instrumentos de movimiento, excediendo en número y
peculiaridad de estructura a los[Pág.19] de otros animales; que sus sistemas
nervioso y respiratorio deberían ser tan complejos, sus vasos secretores y
digestivos tan variados y singulares, sus partes de generación tan claramente
desarrolladas, y que estos mínimos de la
naturaleza deberían estar dotados de instintos en muchos casos superiores
a todos nuestros presumidos poderes de intelecto — verdaderamente estas
maravillas y milagros declaran a todo aquel que atiende el tema: "La mano
que nos hizo es divina". Somos la obra de un Ser infinito en poder,
sabiduría y bondad.
Pero ninguna doctrina religiosa está más firmemente establecida por la
historiade los insectos que la de una Providencia supervisora. Que de las
innumerables especies de estos seres, muchos de ellos más allá de la
concepción frágiles y expuestos a peligros y enemigos sin fin, ningún
eslabón debe perderse de la cadena, sino que todos deben mantenerse en
esas proporciones relativas necesarias para el bien general del sistema; que
si una especie por un tiempo prepondera y en lugar de preservar parece
destruir, al mismo tiempo se deben proporcionar contra-controles para
reducirla dentro de sus debidos límites; y además, que las operaciones de
los insectos deben ser dirigidas y anuladas de tal manera que efectúen los
propósitos para los cuales fueron creados y nunca excedan su cometido:
nada puede proporcionar una prueba más fuerte que ésta,que una mano
invisible sostiene las riendas, ahora permitiendo que uno prevalezca y
ahora otro, como mejor promoverá ciertos fines sabios; y diciendoa cada
uno: "Hasta aquí vendrás y no más".
Tan complejo es este sistema mundano, y tan incesante el conflicto entre
sus componentes, una observación que es válida particularmente con
respecto a losinsectos, que si en lugar de estar bajo tal control se dejara
en manos de[Pág.20] la agencia del azar ciego, el conjunto inevitablemente
pronto se trastornaráy se arruinará. Los insectos, en verdad, son un libro en
el que quien lee bajo lasimpresiones adecuadas no puede evitar mirar desde
el efecto a la causa, y reconocer su poder eterno y su divinidad así
maravillosamente exhibidos e irrefutablemente demostrados: y quien
contempla estas obras con los ojos del cuerpo , debe ser ciego si no puede,
y perverso si no quiere, con los ojos del alma contemplar en toda su gloria
al Obrero Todopoderoso, y sentirse dispuesto, con todos los poderes de su
naturaleza, a alabar y magnificar
"Él primero, él postrero, él en medio, él sin fin".
Y ahora, habiéndote conducido al vestíbulo de un templo augusto, que en
su santuario más íntimo exhibe consagrados en gloria los símbolos de la
Divina Presencia, te invito a entrar y a dar lengua a los Aleluyas, que cada
criatura en su lugar, trabajando su voluntad con todas sus facultades, se
derrama sobre su gran Creador: pero primero debo esforzarme por
eliminar, como confío en que lo haré eficazmente, esas objeciones al
estudio de estos seres interesantes a losque aludí al principio de esta carta
, y este será el objetivo de mi próximo discurso.
Yo soy, etc.