1.

Comienza con una idea

Todas las cosas comienzan con una idea, y tu
viñeta no va a ser menos. Como narrador de
historias, tu mejor herramienta es un cuaderno o
una libreta. De esa manera, cuando
una idea aparece en tu cabeza, puedes anotarla en
seguida. Y no te preocupes si tu idea aún no está
completamente realizada, porque no se sabe hacia
dónde te puede llevar.

2. Escribe un pequeño guión

No necesitas una historia rimbombante o
impactante para empezar. A veces lo más sencillo
es lo que más llega. Sin embargo, debes tener en
cuenta algunos aspectos que harán que comiences a
crear tu estilo personal.
-Conoce tu género
-Entiende los objetivos o desafíos de tu personaje
principal
-Crea un entorno creíble
-Incluye un comienzo, un nudo y un desenlace
(aunque no es imprescindible)

3. Planifica el diseño
La creación de los escenarios que acompañan a los
personajes es también muy importante a la hora de
dibujar una historia. Los diálogos en los entornos
adecuados darán credibilidad a tus viñetas, al igual
que las palabras que acompañan a os personajes.

4. Ponte a dibujar
Llegó el momento. Puedes usar algunas técnicas
que te pueden ayudar a perfeccionar los rasgos de
una cara, u otras técnicas para
dibujar paisajes ¡mucha suerte!