Acosador

Capítulo 1

Era una mañana fría recuerdo que al levantarme rápidamente pude sentir en el
ambiente el frio de una típica mañana de invierno, me senté a la orilla de la cama y al
rozar ambos pies en el suelo una sensación ligera paso completamente por todo mi
cuerpo haciendo que tuviese más frio que antes, me levante a duras penas para ir al
baño, cepillar mis dientes y lavar mi cara, arregle un poco mi cabello, estando lista
baje las escaleras en dirección a la sala para tomar un poco de jugo del refrigerador,
fui por un vaso en la alacena y luego me dirigí al refrigerador tomando la caja de jugo
de naranja y me serví un poco deje todo en su lugar al comenzar a beber sorbo por
sorbo note una pequeña nota azul pegada en la ventana la cual llamo totalmente mi
curiosidad, deje el vaso en la mesa de la cocina para ir a por la nota y de esa manera
tomarla, al voltearla no había nada más que dos palabras.

-Puedo verte.

Al principio sonreí vagamente pensando en que tal vez podría ser una broma el vecino
o algo por el estilo pues solía hacerme ese tipo de bromas muy seguido, fui
nuevamente hacia la mesa de la cocina dejando la pequeña nota en la mesa y luego
tomando el vaso para por fin terminar de beber, luego de terminar un pequeño frio
recorrió desde la cintura hasta la nuca recordando aquellas palabras de la nota lo cual
se sitio bastante raro, sin embargo ignore ese sentimiento y al pasar las horas ya
había terminado mis deberes y también el arreglo del hogar, las cosas comenzaban a
tornarse aburridas así que decidí ir a visitar a mi amigo Max, hace mucho que no le
veía, conozco a Max desde que éramos unos niños totalmente ingenuos e inocentes
aunque al crecer él se mudó a otro país y según escuche volvió para tomar unas
vacaciones y no he tenido el tiempo de visitarle, tengo su dirección pero quizás sea
que realmente no me animo a visitarle por miedo a que seguramente sea una persona
muy diferente, él era un chico bastante social y simpático pero era muy diferente a los
demás niños por ciertos aspectos que realmente lo diferenciaban de los demás, pero
bueno son puras ideas fantasiosas mías, fui a ducharme y ya totalmente arreglada
tome mi móvil y una pequeña bolsa para guardar alguna que otra cosa y lo más
importante las llaves así que saliendo de la casa cerré la puerta con llave y comencé a
caminar tranquilamente, decidí tomar el camino largo ese no era el problema, el
verdadero problema era lo solitario que era ese camino.

Al caminar llegando a mi punto recuerdo haber sentido una ligera sensación de que
me seguían voltee varias veces esperando encontrar a un perro o alguna persona pero
sin embargo no había nada, decidí ignorarlo y seguir caminando como si nada,
llegando a casa de Max respiraba con algo de pesadez debido a los nervios que esto
me causaba, me acerque a la puerta y toque dos veces esperando respuesta,
mientras lo hacía comencé a ver todo a mi alrededor todo movimiento que pasara era
analizado por mi aunque, ciertamente la casa del vecino llamo mi atención comencé a
prestarle más atención a esa casa fijándome mayormente en ventanas y aunque su
jardín llamaba atención a gritos por lo mal cuidado y abandonado que se veía la
pregunta realmente era ¿Hay alguien viviendo hay realmente? Comencé a buscar
movimientos, sonidos o sombras y al principio mis intentos fueron en vano hasta que vi
una figura en la planta alta en la ventana izquierda, parecía ser una figura masculina,
pero lo curioso era que mientras yo miraba parecía que él también sabía que le veía y
cuando el ambiente comenzaba a tornarse algo incomoda abrieron la puerta de un
jalón haciendo que sobresaltara sorpresivamente.

-Kate? Hola! Que haces aquí? –dijo Max bastante sonriente-

-Emm yo pensé que como volviste, pensé en venir a visitarte, además se estaba
tornando aburrido todo por mi casa –dije algo confundida sonriendo levemente para
corresponder su felicidad-

-Oh ya veo, pasa –dijo abriendo más la puerta mientras sonreía-

De esa forma entre y al entrar comencé a ver el pasillo que llegaba en dirección a
múltiples lugares, su casa era peculiar, llamaban mucho la atención los colores que
esta tenia, combinación de verdes opacos con lilas y celestes era toda una locura,
una locura bastante increíble llegando a la sala de estar me miro sonriendo satisfecho
como si mi reacción hubiese sido lo que buscaba al entrar, fue a por unas cosas y
pude ver una estantería llena de libros y enciclopedias tanto como diarios de mapas
entre otros, realmente empezaba a fascinarme su casa…

-Kate disculpa mi desorden, es solo que no he tenido el tiempo suficiente de limpiar –

dijo algo apenado-

-Oh no te preocupes comprendo –le sonreí levemente-

-Mmm que te parece si miramos alguna película o algo? –dijo pensativo y un tanto
confuso-

-Por mi está bien –sonreí un poco para calmar su confusión-

-Vale solo acompáñame iré a traer algo –dijo mientras se dirigía a las escaleras para
subir a su habitación-

Al principio pensé que su cuarto sería igual de increíble que todo lo que había visto
antes no resulto ser llamativa y extraña, más bien parecía ser común en su cierto
modo aunque parecía una habitación de un niño pequeño me pareció bastante bonita,
Max se dirigió hacia un cofre algo grande de color marrón opaco no parecía haber
nada interesante y mientras sacaba desde libros, hojas, papeles y alguna que otra
pluma o lapicero, sonrió al sacar un cuaderno de dibujo y luego una libreta azul,
común y bastante formal en apariencia no se parecía en nada con lo demás y
raramente fue lo que más llamó mi atención al instante algo en mi despertó la
curiosidad de querer leer aquella misteriosa y curiosa libreta sin embargo antes de que
pudiese decir algo o incluso tomarla el comenzó a guardar todo de forma revuelta

-Bien, vamos –dijo mientras cerraba el cofre-

-Uh… si está bien –le seguí-

-Oh cielos… Kate, podrías esperarme? Necesito comprar algo no tardo, está bien? –
dijo apurado esperando respuesta para simplemente salir corriendo-

-Claro ve –dije algo distraída del asunto-

Mientras Max salió solo comencé a caminar en círculos por toda la sala noté algunos
recuadros en el mueble de la televisión y otros por encima de un pequeño estante de
libros que tenía, todas eran fotos de lugares fuera de aquí, bosques, lagos etc.
Pasaron más o menos 15 minutos y el aún no regresaba comenzaba a aburrirme y de
pronto se me vino a la cabeza aquella libreta, pensé en ir y ver, aun no llegaba así que
podría hacerlo y aunque estaba decidida tarde aproximadamente de 5 a 10 minutos
para decidir, pasado ese tiempo tome el valor y subí llegando a su habitación, me dirigí
hacia su cama y cerca de su mesa de noche hay estaba la libreta, la tome y la tapa de
aquella libreta era fina y gruesa aprecie por unos segundos el azul marino que esta
poseía para abrirla y al principio la primer hoja estaba vacía pero la segunda solo traía
una advertencia bastante peculiar

-Para el lector del siguiente contenido

El contenido que a continuación leerás no es algo fácil de digerir a menos que en

realidad desees poseer su información más te vale afrontar las consecuencias luego,
pues a todo aquel que voltee la página se verá perjudicado por lo que luego pueda
pasar.

Sin embargo, es tu decisión

Antes de voltear la pagina….