El siempre aclamado y el nunca bien ponderado

Hace unos años atrás cuando los libros en formato digital eran toda una novedad, muchos de
nosotros, los amantes de los libros físicos, pensamos que sería el fin y que de ahí en adelante
tendríamos que conformarnos con leer desde nuestros celulares, tabletas, o computadoras.
Pero por contrario a lo se esperaba, en estos últimos años la venta de libros en formato papel
ha aumentado en comparación a los de formato digital según xxx desde el 2018 su
crecimiento ha sido exponencial. Varios han sido son los factores que han contribuido con
esto; la posesión, y coleccionismo, la perdurabilidad, “funcionamiento” sencillo y sobre todo
un libro en físico jamás te dejara porque su batería se haya agotado

A la mayoría les gusta el contacto con el papel y ni qué decir del aroma particular que
desprenden los libros, principalmente los más añosos, independiente de cual sea el contenido
de estos, este aroma particular e inconfundible, hace que se desarrolle apego, hacia ellos.
Además de esto, cabe mencionar que los dispositivos exclusivos para lectura como lo son por
ejemplo una Kindle, aunque ofrece una experiencia de lectura casi tan buena como si de un
libro físico se tratase, difícilmente pueden estar al alcance de todos debido a su alto costo.

Es cierto que leer en dispositivos tiene ventajas indiscutibles, como lo son la portabilidad, el
poco espacio que puede ocupar, y la cantidad de títulos que se puedan almacenar en sus MBs,
inclusive la lectura en dispositivos como el anteriormente nombrado ofrecen sugestiones para
tu próxima lectura, pero lo cierto es que nada se compara a una visita a la librería y descubrir
por uno mismo algunas de las tantas historia atrapantes que allí se guardan

Como si fuera poco lo dicho anteriormente, se sabe que la lectura en papel logra una
comprensión más constante que leer el texto en una pantalla, ya que esta última tiende a
desaparecer más rápido de la memoria.

Podrían seguir dando razones por las cuales un libro físico será siempre mejor que uno en
formato digital, pero considero que, más que pros o contras de cada uno de ellos, lo realmente
importante es que sin importar cuál sea la preferencia de cada uno, tomarse un tiempo en el
día, por más difícil que resulte para unos más que otros, y poder disfrutar de un algún clásico o
de alguna lectura recreativa que más apetezca a cada quien. ya que como bien decía R.R
Martin “Un lector vive mil vidas antes de morir. Aquel que nunca lee vive solo una”