Estudios epidemiológicos

Investigación en medicina del trabajo

CONTENIDO
1. Objetivos

2. Etapas de un estudio epidemiológico

3. Diseño de un estudio de investigación

en epidemiología

4. La pregunta de investigación

5. Formulación de los objetivos de estudio

6. Hipótesis de investigación en epidemiología

7. Muestra y tipos de muestra

Técnicas de muestreo probabilístico
Técnicas de muestreo no probabilístico
8. Métodos de obtención de datos
Observación
Entrevistas
Encuestas
Experimentación
9. Resumen

10. Bibliografía

Objetivos
Los objetivos propuestos en este tema son
• Conocer las distintas etapas de todo estudio
epidemiológico.
• Identificar qué aspectos se deben tener siempre
en cuenta a la hora de diseñar un estudio de
investigación.
• Aprender a hacer una pregunta de investigación.
• Diferenciar entre hipótesis nula e hipótesis
alternativa.
• Aprender qué es una muestra en investigación y
las técnicas más habituales para conseguirla.
• Diferenciar distintas herramientas utilizadas en
investigación para conseguir los datos de estudio.
• Identificar y prever posibles sesgos en el diseño de
investigación.
Etapas de un estudio
epidemiológico
Los estudios epidemiológicos son un conjunto de
actividades intelectuales y experimentales que intentar
relacionar ciertos efectos sobre la salud con sus
causas. Como en cualquier estudio científico se trata
de aplicar el método racional buscando dar respuesta
a una pregunta de investigación e intentando cometer
el mínimo número de errores posibles. Para conseguirlo
se sigue el método científico con el fin de identificar una
serie de etapas a desarrollar en cualquier investigación:
• Planificación: es la etapa más importante y, a su
vez, la más compleja. Antes de comenzar cualquier
estudio se debe tener muy claro qué se va estudiar,
cómo se hará y cómo se preverá o solucionarán los
posibles problemas que se encuentren durante la
investigación. Un buen diseño de investigación es
fundamental para hacer una investigación de calidad.
• Ejecución: en esta fase se pone en práctica todo
que se ha diseñado en la fase anterior. Se recoger
los datos que miden las variables de estudio y, que
después, servirán para dar respuesta a nuestra
investigación.
• Procesamiento y análisis de resultados: los datos
por sí mismos sirven de poco, hay que procesarlos
y analizarlos para que adquieran un significado
que pueda ser manejable y comprensible. Hoy en
día suelen utilizarse paquetes informáticos para
realizar las operaciones estadísticas necesarias
en cualquier estudio (por ejemplo, SPSS).
• Confección del informe final: la información recogida
y analizada debe plasmarse adecuadamente en forma
de artículo científico (lo más habitual), póster para
congreso, ponencia u otro tipo de formato. En el caso
de los artículos científicos estos den seguir una serie
de apartados y reglas que establecen cada una de las
revistas científicas de publicación.
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• Publicación de resultados: una investigación
carece de importancia si los resultados y
conclusiones a las que ha llegado el autor no se
ponen en conocimiento del resto de investigadores.
Diseño de un estudio
de investigación en
epidemiología
Un diseño de investigación es un plan global de investigación
que intenta dar de manera clara y no ambigua respuestas a
las preguntas planteadas en la investigación. Es la estrategia
que sigue el investigador para obtener la información
necesaria y, así, conseguir respuestas sobre el estudio que
plantea. Para ello se deben definir muy bien los métodos
y las técnicas de forma que tengan coherencia lógica y
permitan manejar el problema de estudio eficientemente.
Uno de los objetivos clave de todo diseño de investigación
es conseguir un estudio con el mínimo sesgo de datos y con
el menor margen de error, lo cual aumentará la confianza de
la información recogida. Todo diseño de investigación debe
responder a las siguientes preguntas:
• ¿Qué se quiere estudiar? El investigador debe dejar
claro cuál es el problema detectado y cuál es el
objeto de estudio.
• ¿Cómo se quiere estudiar? Se debe dejar clara la
metodología utilizada durante la investigación:
herramientas de recolección de datos, herramientas
para analizar los datos, tipo de estudio que va a
realizar, etc.
• ¿Qué objetivos se van a marcar? Tanto principales
como secundarios. Es fundamental operativizar los
objetivos de forma que sean alcanzables mediante
la investigación que se está diseñando.
• ¿Dónde se va a realizar? Conocer el lugar y sus
características ayudará a conocer y comprender la
población de estudio.
• ¿A quién se va a estudiar? Una vez definida la
población se debe conocer cómo se obtiene la
muestra que hará operativa la investigación.
• ¿Cuándo se va a estudiar? Es muy importante
situar temporalmente una investigación, saber
cuándo empieza el estudio y cuándo terminará,
conocer qué se va a hacer en cada momento, etc.
Esto ayuda a planificar mejor las tareas.
• ¿Qué problemas se pueden encontrar? Si se sabe
de antemano qué problemas o situaciones pueden
encontrarse durante la investigación y se decide
con anterioridad las soluciones a adoptar ante
las situaciones se evitarán problemas y sesgos
por improvisación. De esta forma la investigación
tendrá menos probabilidad de error.
• ¿Qué recursos se necesitan? Es fundamental
conocer los recursos (materiales, económicos
y personales) para saber si se puede llevar a
cabo la investigación o conocer el alcance de la
investigación que se hará.

• ¿Qué permisos se necesitan? Como mínimo,
siempre que los objetos de investigación son
personas, se necesitará el permiso del Comité de
Ética de Investigación correspondiente. Además,
en función del tipo de herramienta utilizada o
cómo se obtengan los datos podrá ser necesario
un consentimiento informado.
Además de tener claro todo esto será fundamental que
el investigador exponga adecuadamente tres aspectos:
• La pregunta de investigación y/o la hipótesis de
trabajo.
• El marco teórico en el que se encuadra la investigación.
Es necesario conocer qué se ha estudiado con
anterioridad, cómo se ha hecho, qué resultados se
han obtenido, etc. Esto puede ayudar a orientar la
investigación, prever problemas, buscar alternativas,
plantear hipótesis distintas, etc. Toda investigación
debe de estar fundamentada científicamente.
• Justificación del tema. Toda investigación debe
responder a un problema concreto observado y/o
documentado. Los estudios tratan de despejar
dudas sobre el conocimiento existente o crear
espacios de conocimiento nuevos.
Pregunta de investigación
La tarea de plantear la pregunta de investigación no
siempre es fácil ya que ha de servir de guía a toda la
investigación. Todo lo que se hará después será para
tratar de responder esa pregunta. Existen diversas
formas de afrontar la elaboración de una pregunta de
investigación. Una de las más utilizadas en investigación
son los criterios PICO:
• P (population; paciente o problema): es la definición
del objeto de estudio con unas características
que delimitan la búsqueda de información. Por
ejemplo: personas mayores de 65 años, personas
con diabetes tipo II, etc.
• I (intervention; intervención): el manejo o
intervención terapéutica, preventiva, diagnóstica
o de pronóstico que se realiza en el estudio. Por
ejemplo: reciben terapia cognitiva y/o toman un
fármaco determinado.
• C (comparison; comparación): no siempre es
necesario este apartado, pero cuando consta hace
referencia a otra intervención alternativa con la
que se compararán los resultados. Por ejemplo:
personas que no toman la medicación, personas
que realizan otro tipo de terapias, etc.
• O (outcomes; resultados): consecuencias de
interés después de la intervención, es decir, el
resultado esperado. Por ejemplo: que tengan mejor
calidad de vida, que tengan menos sintomatología,
que sobrevivan más tiempo, etc.
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Un ejemplo de pregunta de investigación siguiendo
estos criterios sería: en adolescentes de 15 a 20 años
(P), ¿el consumo de cocaína (I) aumenta el riesgo de
sufrir episodios psicóticos (O) frente a aquellos que no
consumen (C)?
Las preguntas además pueden ser generales o
específicas, pero siempre han de ser comprobables
empíricamente y deben de estar basadas en evidencia
científica. Normalmente una pregunta general se
descompone después en preguntas específicas que
forman los objetivos principales y secundarios.
Formulación de los
objetivos de estudio
Un objetivo de investigación es un enunciado claro y
preciso que sirve para concretar y especificar las tareas
del investigador. Pueden ser de tres tipos:
• Descriptivos: si busca describir y/o analizar las
características de un fenómeno.
• Correlacionales: si analiza las relaciones entre
diferentes variables que intervienen en el fenómeno.
• Causales: si pretende explicar la relación de
causalidad entre un factor (o varios) y el fenómeno.
Además, en todo estudio se plantean dos tipos de
objetivos:
• Principal o primario: es el objetivo que pretende dar
respuesta a la pregunta de investigación. Es la meta
que se pretende alcanzar con la investigación.
• Secundarios: son aquellos objetivos más específicos
que se alcanzarían para poder responder al objetivo
principal. Responderían a las sub-preguntas que
pueden surgir de la pregunta de investigación.
También se deben conocer cómo se deben redactar
los objetivos de cualquier estudio para que estén bien
planteados:
• No deben emitir ningún juicio de valor.
• Se expresan siempre con un verbo en infinitivo
(conocer, descubrir, medir, identificar, examinar,
comprobar, describir, verificar, identificar, etc).
• No incluir el método o procedimiento que se
realiza en la investigación. Por ejemplo, no se debe
plantear como objetivo: conocer la frecuencia del
síndrome del cuidador en cuidadores formales de
pacientes con Alzheimer mediante la escala de
Zarit. Los métodos se explicarán más adelante,
pero nunca en los objetivos.
• No incluir las acciones asistenciales que se van
a realizar. Por ejemplo: medir la evolución de los
pacientes con Alzheimer 3 veces durante un mes.
• No redactar los objetivos de tal forma que parezcan
los fines que se pretenden con el estudio. Por ejemplo:
realizar una investigación que reduzca la incidencia de
Parkinson en los pacientes de una población.

• No utilizar palabras inadecuadas, ambiguas o
coloquiales a la hora de definir un objetivo. Por
ejemplo: conocer si un fármaco mejora la sensación
de “malagana” en pacientes con vértigos.
Hipótesis de investigación en
epidemiología
Una hipótesis trata de explicar cómo cree o espera el
investigador que se comporten las variables durante
el estudio. La hipótesis deberá ser comprobada
estadísticamente con los resultados del estudio. Por ello
se hablan de dos tipos de hipótesis incompatibles entre sí:
• Hipótesis nula (H0): indica que el parámetro que
se ha medido es igual a un valor hipotético. Suele
ser una afirmación basada en análisis previos o
conocimiento especializado, pero se demuestra
que la diferencia entre el valor real del parámetro y,
su valor hipotético, es nula (o debida al azar).
• Hipótesis alternativa (H1): es la hipótesis contraria e
indica que el parámetro que se ha medido difiere (es
mayor o menor) que el valor hipotético de la hipótesis
nula. Esto es lo que el investigador cree que es cierto o
que quiere demostrar con su investigación.
Es más fácil entenderlo a través de un sencillo ejemplo.
Se quiere demostrar que las bolsas de patatas que
venden no pesan 5 kilos, la manera de contrastar la
información sería por medio de las siguientes hipótesis:
• H0: pesan 5 kilos.
• H1: pesan distinto a 5 kilos (pueden pesar más o
pueden pesar menos).
Muestra y tipos de muestreo
La epidemiología estudia los eventos de salud en las
poblaciones, pero en la mayoría de los casos el investigador
no puede estudiar a todos los miembros de una población,
por lo que debe elegir una muestra: subconjunto o parte de
la población en que se llevará a cabo la investigación, al que
se aplicará el estudio y en el que se realizarán las medidas.
Una vez que se establecen unos criterios de inclusión y
exclusión para alcanzar a la población diana del estudio se
debe elegir la técnica de muestreo.
Técnicas de muestreo
probabilístico
Se basan en el principio de equiprobabilidad, lo cual implica
que todos los individuos de la población tienen la misma
probabilidad de formar parte de la muestra de estudio. Son
los más recomendables y hay de diferentes tipos:
• Muestreo aleatorio simple: se eligen al azar a los
participantes y se le asigna un número a cada individuo
de la población. Se seleccionan aleatoriamente a
tantos sujetos como sean necesarios para la muestra
(esto se hace mediante programas informáticos,
sacando bolas de una bolsa, etc).
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• Muestreo aleatorio sistemático: igual que en el caso
anterior se enumeran a los individuos de la población,
pero en lugar de seleccionar al azar a los participantes
se seleccionan cada décimo caso, por ejemplo, se
seleccionarán aquellas personas que ingresan los días
pares del mes, las personas que tengan un número par
en la enumeración anterior, etc.
• Muestreo aleatorio estratificado: consiste
en determinar los estratos que conforman la
población de estudio (los subgrupos de unidades
de análisis que difieren en las características que
van a ser analizadas). Se puede dividir en estratos
por profesión, por sexo, por estado civil, etc. Se
trata de que todos los estratos de interés estén
bien representados en la muestra. Después, en
cada estrato, mediante muestreo aleatorio simple
se eligen a los participantes de la muestra.
• Muestreo aleatorio por conglomerados: se eligen de
forma aleatoria ciertos barrios o conglomerados para
luego elegir unidades más pequeñas como calles y,
finalmente, otras más pequeñas como consultorios,
hogares, etc. Después se pasará la herramienta de
medida seleccionada a todos esos individuos.
Técnicas de muestreo no
probabilístico
Se enfoca en identificar qué estudios no puede llevarse a
cabo una selección de la muestra de forma probabilística.
En este caso se seleccionará a los sujetos utilizando
ciertos criterios y, los tipos más frecuentes, son:
• Muestreo por cuotas o accidental: el investigador
se fija un número de participantes y selecciona a
los primeros que cumplen unas condiciones, por
ejemplo, personas mayores de 65 años, de sexo
femenino y con diabetes tipo II.
• Muestreo intencional: el investigador selecciona
solamente los casos característicos de una
determinada población, de forma que la muestra
estará compuesta solamente por esos casos.
• Muestreo por conveniencia: en este caso el
investigador seleccionará a los participantes de
forma directa e intencionalmente de entre los grupos
a los que tenga acceso y que quieran participar.
• Muestreo por bola de nieve: una vez que se han
localizado a unos individuos que cumplen los criterios
que requiere el estudio, éstos sirven para reclutar a
otros y estos otros a otros más, etc. Así hasta que se
consigue la muestra deseada, por ejemplo, se suelen
utilizar estos métodos cuando estudiamos ciertos
colectivos: asociaciones de enfermos, LGTBI, etc.
• Muestreo discrecional: en este caso, el investigador
selecciona a los participantes por lo que considera
qué pueden aportar a la investigación.

Representatividad de la muestra
Un ideal es que todos los estudios tengan muestras
representativas, es decir, muestras cuyos resultados
puedan generalizarse y extrapolarse a la población
a la que pertenecen. Las técnicas de muestreo
probabilístico, a priori, tienen más posibilidades de ser
representativas, mientras que las técnicas de muestreo
no probabilístico, aunque no sirven para generalizar
los resultados, también tratan de obtener muestras
lo más representativas posibles. Aparte de la técnica
de muestreo, un requisito para que una muestra sea
representativa es el tamaño muestral, es decir, el número
de participantes en el estudio. Muestras muy pequeñas
no permitirán garantizar que los resultados se puedan
generalizar, mientras que muestras demasiado amplias
no serían operativas. Por ello, se debe aprender a calcular
el tamaño de la muestra. Si no se conoce el tamaño de
la población, por ejemplo, si se quiere saber a cuántas
personas se debe estudiar para conocer la prevalencia
del Alzheimer) se utilizar la siguiente fórmula: (Figura 1)
• n es el tamaño de la muestra.
• Za es la seguridad o confianza. Normalmente se utiliza
el 95 % por lo que se utiliza como valor 1,96. Si la
seguridad fuera del 99 % la cifra a utilizar sería 2,58.
• p es la proporción esperada. Es una idea aproximada
del parámetro que se quiere medir. Esta idea se
obtiene mediante la revisión de la bibliografía
existente o a través de estudios piloto. Si no se tiene
idea de la proporción a utilizar se usaría el valor 0,5
que maximiza el tamaño muestral. Si se asume que
la proporción es cercana al 5 % el valor sería 0,05.
• q es 1 – p, por lo que sería 1 – 0,05.
• d es la precisión. Si se estima un 3 % se tendría un
valor de 0,03.
Si se conoce el tamaño de la muestra —si por ejemplo se
quiere conocer a cuántas personas tengo que estudiar
para estimar la prevalencia del Alzheimer de una
población de 10 000 personas— se aplicaría la siguiente
ecuación: (Figura 2)
• n es el tamaño de la muestra.
• Za es la seguridad o confianza. Normalmente un 95
% se considera como válido (1,96).
• p es la proporción esperada (0,5 si no se conoce la
proporción).
• q es 1 – p, por lo que sería 1 – 0,5.
• d es la precisión. Si se desea un 2 %, sería 0,02.
Métodos de obtención de datos
Una vez que se tiene la hipótesis, los objetivos y se sabe
el tamaño de la muestra necesaria es fundamental tener
claro las técnicas de recolección de datos que se pueden
extraer desde diferentes fuentes de información:
• Primaria: cuando se recoge la información
directamente de la muestra que se va a estudiar.
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Figura 1. Fórmula.
Figura 2. Ecuación.
• Secundaria: cuando la información se obtiene
de forma indirecta a través de bases de datos,
estadísticas oficiales, medios de comunicación, etc.
A continuación se explican algunos de los métodos más
habituales en epidemiología.
Observación
Es una técnica en la que el investigador registra de
forma visual el hecho de estudio. Para ello es básico que
realice el registro de lo que observa según un esquema
previsto con antelación. Existen dos formas de realizar
la observación:
• Observación participante: el investigador se
involucra directamente con los sujetos de
investigación para recopilar los datos.
• Observación no participante: el investigador no
tiene ninguna relación con la muestra participante.
Entrevistas
Es una técnica en la que los datos se recogen mediante
una comunicación interpersonal entre el investigador
y los sujetos de estudio (muestra). Pueden realizarse
de forma personal, por teléfono o por correo. Tienen
la ventaja de ser eficaces a la hora de profundizar en
el tema de estudio de forma que permita aclarar la
pregunta de investigación y que se pueden adaptar a
cualquier sujeto; sin embargo, requieren mucho más
presupuesto (tanto en tiempo como en coste), los datos
obtenidos no siempre son fáciles de operativizar y se
requiere formación por parte del entrevistador.
Encuestas
Las encuestas son una herramienta en la que aparecen
una serie de preguntas normalizadas para conseguir
los datos de la muestra. Es uno de los métodos más
utilizados en investigación. Pueden ser rellenados por
el entrevistador o por el propio sujeto. Entre las ventajas
se destaca que son más económicos (tanto en tiempo
como en coste), pueden abarcar a una muestra más
amplia y pueden conservar el anonimato de la persona
(por lo que las respuestas pueden ser más sinceras).

En su contra, el investigador depende de que la persona
responda con sinceridad o haya pensado bien la
respuesta, no pueden comprenderse los significados
del objeto de estudio fuera de esas preguntas, son
impersonales, el sujeto puede no entender alguna
pregunta y hay preguntas que pueden no ser contestas
(por lo que podemos perder información).
Experimentación
En este caso, el investigador diseña un experimento en
el cual se modificarán ciertas variables con el objetivo
de ver la respuesta sobre los sujetos de investigación o
el hecho de estudio.
Normalmente, en estos casos, existen 2 grupos
diferenciados: en uno se modifica la variable (se realiza
una intervención o se prueba un determinado fármaco,
por ejemplo) y en el otro no se modifica (es el grupo
control del estudio). Así pueden observar si existen
diferencias significativas que permiten establecer
relaciones de causalidad.
Características de los
instrumentos utilizados
Existen dos características básicas que deberían cumplir
todos los instrumentos utilizados en investigación:
• Confiabilidad: es la capacidad que tiene un instrumento
de obtener los mismos resultados al aplicarse en dos
momentos distintos sobre los mismos sujetos. Esto
significa que las mediciones que hace la herramienta
coinciden con la realidad estudiada.
• Validez: es el grado en que una herramienta mide
aquella variable que queremos medir.
Para esto, lo ideal es utilizar siempre escalas
o herramientas que estén validadas para la
población de estudio. Es decir, instrumentos que
garantizan que miden de forma precisa aquello
que es objeto de estudio. Cuando la herramienta
es de elaboración propia, debería de someterse a
algún proceso de validación para demostrar que
sirve para medir la variable, si no, los resultados
podrían no ser válidos.
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Resumen
A continuación se presenta el resumen de los aspectos
más importantes que conforman este tema
• Los estudios epidemiológicos son el conjunto de
actividades (experimentales e intelectuales) que
intentan buscar las relaciones de ciertos efectos
sobre la salud con sus causas. A la hora de realizar
cualquier estudio se tendrán en cuenta varias
etapas: planificación, ejecución, procesamiento/
análisis de los resultados, confecciones del
informe final y publicación de los resultados.
• El diseño de investigación en un plan global que
intenta explicar de forma clara cómo se va a
realizar el estudio para dar respuesta a la pregunta
de investigación. Es fundamental realizar un buen
diseño de investigación para que el estudio sea de
calidad.
• Una de las estrategias a la hora de plantear una
buena pregunta de investigación es seguir los
criterios PICO: paciente/problema, intervención,
comparación y resultados (outcomes).
• En toda investigación hay que dejar claros los
distintos objetivos. Se dividirán en primarios y
secundarios en función de su alcance.
• Se debe diferenciar entre hipótesis nula e hipótesis
alternativa. La hipótesis nula es aquella en la que
el valor que se ha medido y el valor hipotético son
iguales. La hipótesis alternativa es aquella que el
investigador cree que demostrará y en la que el
parámetro que se ha medido será distinto del valor
hipotético. Ambas hipótesis son incompatibles.
• Una muestra es un subconjunto de la población en
la que el investigador va a realizar la investigación
(es una forma de hacer operativa la investigación,
sobre todo cuando la población es muy grande.
Existen técnicas probabilísticas en las que todas
las personas de la población tienen las mismas
posibilidades de participar en el estudio y, técnicas
no probabilísticas, en las que los investigadores
seleccionan la muestra siguiendo otros criterios.
• Se debe intentar que las muestras sean siempre
representativas para poder generalizar nuestros
resultados. Para ello, es fundamental calcular el
tamaño muestral necesario.
• Existen distintos tipos de obtención de datos, entre
los que destacan: la observación (participante y
no participante), las entrevistas, las encuestas
y la experimentación. Es importante que las
herramientas de medida sean confiables y válidas.

Bibliografía
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