Universidad Tecnológica de México

Comunicación oral y escrita

Entregable 2
 INTRODUCCIÓN
En este ensayo decidí abordar el tema de la ruta del Tren Maya, he escuchado la controversia
que ha causado y decidí investigar sobre el tema para contar con una postura propia.
Primero investigué la información proporcionada por el Gobierno de México y me pude dar
cuenta que esta “maquillada para que se vea bonita” es decir, exponen grandemente los
números y beneficios y minimizan el impacto y daño ambiental.
Después hice mi búsqueda sobre el impacto ambiental y encontré muy buena información en la
página de “Greenpeace” México, la cual utiliza la confrontación pacífica y creativa para exponer
los problemas ambientales globales y desarrollar soluciones para un futuro verde y pacífico.
Greenpeace expone muchos de los daños que el Tren Maya está causando en el medio
ambiente, como lo es la afectación de las fuentes de agua dulce.
 EL TREN MAYA

CRECIMIENTO ECONÓMICO

El Tren Maya es una inversión de 139.100 millones de pesos. Se espera que tenga un impacto
económico total de 148.700 millones de pesos y ganancias de productividad de 33.000 millones
de pesos.

El Tren Maya se espera que cree más de 380 mil empleos directos y miles más en
oportunidades indirectas para el comercio, la gastronomía, el entretenimiento, entre otros.

También se pretende que aproveche el potencial turístico para generar derrama económica en
los estados que forman parte del proyecto.

El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (FONATUR) de México y la Secretaría de la Defensa

Nacional (SEDENA) administran los 1.525 kilómetros de ferrocarril de velocidad media. Sus
siete vías férreas atraviesan cinco estados (Chiapas, Tabasco, Yucatán, Campeche y Quintana
Roo) y 2,87 millones de hectáreas de selva en la península de Yucatán.

El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador afirma que el desarrollo inmobiliario, la
agricultura industrial y el turismo en las regiones indígenas y rurales sacarán de la pobreza al
sureste de México, el lugar que desde hace mucho tiempo ha sido abandonado por el gobierno
federal. Pero organizaciones como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA),
Greenpeace México y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) están en contra de
FONATUR por lanzar la construcción sin Manifestaciones de Impacto Ambiental adecuadas,
violar los derechos de las comunidades indígenas y amenazar el diverso patrimonio biocultural
del país
El gobierno de México está construyendo lo que ha denominado “el Tren Maya” en la península
de Yucatán, y sólo por mencionar una de las áreas de construcción, haré referencia el tramo 4,
que va de Izamal a Cancún el cual estaba programado para terminarse en el mes de Julio de
2023.

Según el Gobierno de México la construcción del tramo 4 generó 13 mil empleos, en su

mayoría personas de la región.

El tramo 4, el único de doble vía, del Tren Maya, cuenta con una longitud de 240 kilómetros y
tiene estipulado contar con tres estaciones: Chichén Itzá, Valladolid y Cancún, y 2 paraderos.

El Tren Maya tiene la finalidad de conectar las principales zonas turísticas de la península de
Yucatán y una vez terminado, generará una importante derrama económica, derivada del
incremento del turismo, según declaraciones del Gobierno del Estado.

También elevará la conectividad de la región así como facilitará la movilidad de carga y

pasajeros, especialmente las personas que viven y trabajan en los centros turísticos de la
región.
IMPACTO AMBIENTAL

El Proyecto de Desarrollo “Tren Maya” se ha enfrentado con asociaciones de la sociedad civil,

organizaciones ambientales internacionales y el propio sistema judicial del país desde comenzó
el proyecto en junio de 2020. Tres años y 10 millones de árboles talados después, la
construcción del Tren Maya se está dando en medio de batallas judiciales no resueltas y el
desacuerdo internacional.

Sin embargo según GREENPEACE a partir de 2023, las comunidades y las organizaciones de
la sociedad civil han presentado más de 50 amparos contra los siete tramos con el fin de frenar
la construcción. Refiriéndose a que la ruta del tren pasará a través de 20 áreas naturales
protegidas en el segundo bosque tropical más grande de América Latina, la Selva Maya,
amenazando así con causar daños potencialmente irreversibles a los ecosistemas regionales y
las fuentes de agua dulce del país.

El tramo cinco, que va desde Cancún hasta Tulúm y atraviesa delicados ecosistemas de
cuevas y selvas, ha sido un punto de conflicto para tales batallas legales.

Algunas organizaciones ambientalistas como Cenotes Urbanos y Greenpeace están alertando

que el suelo kárstico de la región, lleno de huecos y compuesto de caliza blanda que se
disuelve en el agua, colapsarán bajo el peso del tren de velocidad de 120 km/h a 160 km/h.

Inclusive, Grupo México, una de las principales agencias de construcción del tramo cinco, citó
la “inviabilidad técnica” de construir de manera segura la sección del tren antes de la fecha
límite y se retiró del proyecto en 2023.

También existe una amenaza contra el agua limpia para más de 1,8 millones de ciudadanos de
Quintana Roo y la mayor reserva de agua dulce de México en una región que ya enfrenta
sequías.
El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) admitió que la construcción entre
Playa del Carmen y Tulúm podría tener críticos impactos por la posibilidad de el colapso de los
sistemas de cuevas, las alteraciones en el flujo de agua y las amenazas potenciales a la salud
de las poblaciones de jaguares, que están en peligro de extinción, como posibles efectos de la
construcción.

Y según Guillermo DChristy espeólogo y consultor de calidad de agua de Playa del Carmen, la
gran pregunta es: ¿qué va a pasar con al menos nueve mil pilas dentro del acuífero en suelo
kárstico?.

En 2023, FONATUR alteró la ruta del tren, elevando 42 kilómetros de vías por encima de los
frágiles ecosistemas subterráneos, pero aún no ha proporcionado manifestaciones de impacto
ambiental que examinen los efectos de embutir pilotes de concreto y metal a través del acuífero
poco profundo.
Como he podido darme cuenta a pesar de ser un proyecto ambicioso y que proporcione rutas
alternas de transportación, así como espacios turísticos, el impacto en el medio ambiente por la
afectación de la flora y la fauna tanto como las posibilidades de accidentes debido al tipo de
suelo, considero que no ha sido buena idea la construcción de la ruta del Tren Maya, se ha
sacrificado mucho hasta ahora y la inversión ha sido muy grande, probablemente se logre
recuperar, pero causando un daño irreversible al medio ambiente.
 CONCLUSIÓN

Desde mi punto de vista no ha sido una decisión sabia el construir la ruta del Tren Maya, si bien
es cierto, el daño al medio ambiente ya se ha hecho, ahora solo falta esperar que los
pronósticos en cuestión de turismo y transportación se cumplan y esperar que no se den
accidentes debido al tipo de suelo que existe en la zona 5.

Se prevé plantar 50.000 hectáreas de árboles frutales a lo largo de la ruta del Tren Maya para
que los visitantes puedan consumir sus productos.

Si bien es cierto son bastantes árboles los que se plantarán, no se comparan con los 10
millones de árboles talados, también el daño ocasionado a la flora y fauna, así como a las
fuentes de agua dulce encontradas en el trayecto de la ruta.
 REFERENCIAS

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https://www.gob.mx/banobras/articulos/obras-y-su-impacto-social-tren-maya?tab=#:~:text=El%20Tren
%20Maya%20conectar%C3%A1%20las,movilidad%20de%20carga%20y%20pasajeros%2C

https://www.greenpeace.org/mexico/blog/52843/un-tren-sin-frenos-impactos-ambientales-
desconocidos-del-tren-maya-siguen-generando-controversia/

https://trenmayaa.com/noticias/impacto-economico-del-tren-maya/