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El rey Alfonso X de Castilla concede una exención de impuestos a la ciudad de Pancorvo. Los judíos de la ciudad solían pagar 77 maravedíes en impuestos junto con los cristianos, pero ahora pagarán por separado. Debido a que los judíos ya no contribuyen con los cristianos, el rey exime a Pancorvo del pago de esos 77 maravedíes en el impuesto de la martiniega cada año.
El rey Alfonso X de Castilla concede una exención de impuestos a la ciudad de Pancorvo. Los judíos de la ciudad solían pagar 77 maravedíes en impuestos junto con los cristianos, pero ahora pagarán por separado. Debido a que los judíos ya no contribuyen con los cristianos, el rey exime a Pancorvo del pago de esos 77 maravedíes en el impuesto de la martiniega cada año.
El rey Alfonso X de Castilla concede una exención de impuestos a la ciudad de Pancorvo. Los judíos de la ciudad solían pagar 77 maravedíes en impuestos junto con los cristianos, pero ahora pagarán por separado. Debido a que los judíos ya no contribuyen con los cristianos, el rey exime a Pancorvo del pago de esos 77 maravedíes en el impuesto de la martiniega cada año.
Don Alffonso, por la gracia de Dios, rrey de Castilla, de Toledo, de León, de
Gallizia, de Córdoua, de Murçia, de / Jahén e del Algarue, al conceio de Pancoruo, salut e gracia. Porque entendemos que era más a nuestro sseruicio e a uuestra pro que los christia/3nos pechássedes en uuestro cabo los pechos e los derechos que ouiéssedes a dar a nos o aquellos que la tierra touiessen de nos, et otrossí / los judíos, los pechos que nos ouiessen a dar, que nos los diessen a so parte, touiemos por bien de uos apartar que pechássedes / los christianos a vna parte e los judíos a otra. Et otrossí, porque nos enbiastes mostrar que, ante que nos apartássemos los judíos / 6 que pechassen a so cabo, que uos ayudauan e pechauan conuusco todos los derechos, e los pechos que a nos dáuades que los pecháuades / uos e que se uos fazían mucho de conplir, e enbiástesnos pedir merçet que uos bayxássemos de los pechos aquella parte que los judíos / solían pechar conuusco, et mandamos a don Sancho, abbat de Ouarenes, que sopiesse uerdat en christianos e en judíos quanto era; / 9 et él sópolo en uerdat assí como nos mandamos, et falló que montaua al anno el pecho que los judíos pechauan conuusco setenta / e siete maravedís. Onde nos, por fazeruos bien e merçet, quitámosuos pora siempre estos setenta e siete maravedís de la cabeça del pecho / de la martiniega que nos auedes a dar cada anno. Et mandamos e deffendemos a todos aquellos que Pancoruo touieren de nos /12 o de los rreys que fueren después de nos que non uos demanden estos setenta e siete maravedís. Et mandamos a uos, el conceio, que / non los dedes. Et otrossí mandamos e deffendemos a los cogedores que cogieren la martiniega de Pancoruo que non uos deman/den nin uos peyndren nin uos afiquen por ellos, e non fagan end ál, si non, aquel que lo fiziesse, al cuerpo e a quanto que ouiesse, nos tor/15naríamos por ello. Dada en Seuilla, el rrey la mandó, sábbado, veynte e dos días andados de março, en era de mill / e trezientos e dos annos. Yo, Johán Pérez de Berlanga, arcediagno de Berberigo, la fiz escreuir.