Está en la página 1de 8

Esquema de la Bendicion Nupcial

Celebrante: En el Nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén
La Gracia, el Amor y la Paz de parte de Dios Padre que nos dio a su Hijo para salvarnos
este con todas y todos ustedes.
Y con tu Espíritu.
Celebrante: Hermanos y hermanas nos hemos reunido para ser testigos del amor de N y N
que hoy piden la Bendición de Dios, nosotros que formamos parte de la Iglesia acogemos
con caridad su decisión e imploramos la gracia de Dios para que el proyecto de amor mutuo
que hoy emprenden sea iluminando por la luz del Espíritu Santo.
Todos y todas los aquí reunidos recibimos el día de nuestro bautismo recibimos el don de
ser hijos de Dios y llamarle Padre, la luz de la fe en Cristo Jesús y la fuerza del Espíritu
Santo

ORACION COLECTA
Celebrante: Dios Padre Todopoderoso, que enviaste a tu Hijo al mundo para establecer un
reino de justicia, de paz y de alegría en el Amor, concédenos ser promotores de esa nueva
forma de vida, con la que podamos construir un mundo mejor para todos y derrama tu
gracia sobre estos hijos tuyos N y N que se unen delante de Ti para que los hagas fuertes en
la mutua caridad.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Amén.
PRIMERA LECTURA
Del Primer Libro de Samuel
1Sam 18, 1-4
En acabando de hablar David a Saúl, el alma de Jonatán se apegó al alma de David, y le
amó Jonatán como a sí mismo. Le retuvo Saúl aquel día y no le permitió regresar a casa de
su padre.
Pero hizo Jonatán una alianza con David, pues le amaba como a sí mismo.
Se quitó Jonatán el manto que llevaba y se lo dio a David, su vestido y también su espada,
su arco y su cinturón.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL
Sal 133

R. ¡Qué bueno y que gusto que los hermanos convivan juntos!

Como ungüento fino en la cabeza


que va bajando por la barba,
que baja por la barba de Aarón
hasta la orla de sus vestidos.

R. ¡Qué bueno y que gusto que los hermanos convivan juntos!

Como el rocío que baja del Hermón


Sobre las cumbres de Sion
Allí da Yahvé su bendición
Y la vida para siempre.

R. ¡Que bueno y que gusto, que los hermanos convivan juntos!


SEGUNDA LECTURA
De la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corintios
1Cor 12, 31-13
Hermanos: Aspiren a los dones de Dios más excelentes. Voy a mostrarles el camino mejor
de todos. Aunque yo hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor,
no soy más que una campana que resuena o unos platillos que aturden. Aunque yo tuviera
el don de profecía y penetrara todos los misterios, aunque yo poseyera en grado sublime el
don de ciencia y mi fe fuera tan grande como para cambiar de sitio las montañas, si no
tengo amor nada soy. Aunque yo repartiera en limosnas todos mis bienes y aunque me
dejara quemar vivo, si no tengo amor, de nada me sirve.
El amor es comprensivo, el amor es servicial y no tiene envidia; el amor no es presumido ni
se envanece; no es grosero ni egoísta; no se irrita ni guarda rencor; no se alegra con la
injusticia, sino que se goza con la verdad. El amor disculpa sin límites, confía sin límites,
espera sin límites, soporta sin límites.
El amor dura por siempre.
Palabra de Dios.
ACLAMACION
¡Aleluya aleluya!
Un mandamiento nuevo les doy; que se amen los unos a los otros como yo los he amado
¡Aleluya aleluya!

EVANGELIO
Del Santo Evangelio según San Juan
Jn 17, 18-26
En aquel tiempo Jesús dijo: Padre tú me enviaste al mundo, también los he enviado al
mundo.
Y por ellos yo me santifico á mí mismo, para que también ellos sean santificados en verdad.
Más no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la
palabra de ellos.
Para que todos sean una cosa; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean
en nosotros una cosa: para que el mundo crea que tú me enviaste.
Y yo, la gloria que me diste les he dado; para que sean una cosa, como también nosotros
somos una cosa.
Yo en ellos, y tú en mí, para que sean consumadamente una cosa; que el mundo conozca
que tú me enviaste, y que los has amado, como también á mí me has amado.
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, ellos estén también conmigo;
para que vean mi gloria que me has dado: por cuanto me has amado desde antes de la
creación del mundo.
Padre justo, el mundo no te ha conocido, mas yo te he conocido; y éstos han conocido que
tú me enviaste;
Y yo les he manifestado tu nombre, y manifestaré lo aún; para que el amor con que me has
amado, esté en ellos, y yo en ellos.
Palabra del Señor.
(Terminada la lectura del Evangelio el Celebrante realiza una reflexión en torno a los
textos proclamados y al concluir la reflexión se seguirá con la Bendición de la pareja)
RITO DE LA BENDICION DE LA UNION CONYUGAL
Celebrante: Estamos aquí para que Dios garantice con su gracia su voluntad de unir sus
vidas ante la Iglesia y la comunidad cristiana ahora reunida. Cristo bendice su amor, y él,
que los consagró un día con el Bautismo, los enriquece hoy y les da fuerza para que se
guarden mutuo respeto y fidelidad y puedan cumplir las demás obligaciones de la vida
conyugal..
(Los Contrayentes se dan las manos)
VOTOS CONYUGALES
Yo, N, te recibo a ti, N, como esposa y me entrego a ti y prometo serte fiel en la
prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte
todos los días de mi vida.
Yo, N, te recibo a ti, N, como esposa y me entrego a ti y prometo serte fiel en la
prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte
todos los días de mi vida.
Oración

Dios todopoderoso, que fuiste antes que el tiempo y serás


Celebrante:
por todos los tiempos, que te rebajaste a visitar a los hombres a
través del seno de la Madre de Dios y Virgen María, envía a tu
Santo Espíritu a estas tus hijas N y N, que se amen una a la otra,
así como David y Jonathan, como los santos mártires Sergio y
Baco, así como Cosme y Damián y como las Santas Felicitas y
Perpetua no solo por amor carnal, sino por la fe y el amor del
Espíritu Santo; que todos los días de su vida permanezcan en el
amor.
Por Jesucristo, nuestro señor. Amén

BENDICION DE LA SAL Y ENTREGA DE LOS ANILLOS


(Si se ve conveniente pastoralmente se coloca en un lugar apropiado y visible una piscina
con agua y un recipiente con granos de sal, después de que se bendiga la sal, cada uno de
los presentes pasara a dar su bendición a los anillos de los contrayentes que estarán
colocados en el agua, terminado este gesto se entregara a cada contrayente el anillo uno
del otro y proseguirán con la entrega de los anillos)
BENDICION DE LA SAL
Celebrante: Te pedimos humildemente,
Dios todopoderoso,
que te dignes bendecir esta sal,
del mismo modo que mandaste al profeta Eliseo
que la arrojase al agua
para remediar su esterilidad.
Concédenos, Señor,
que allí donde se derrame esta mezcla de sal y agua,
sea ahuyentado el poder del enemigo
y nos proteja siempre
la presencia del Espíritu Santo.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

(Si hay rito de la bendición con sal se procede, si no; se omite lo anterior y se procede con
la entrega de los anillos)
ENTREGA DE LOS ANILLOS

Celebrante: El Señor bendiga estos anillos


que se entregaran uno al otro
en señal de amor y de fidelidad.
Amén.

N, recibe este anillo,


en señal de mi amor y fidelidad a ti.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

N, recibe este anillo,


en señal de mi amor y fidelidad a ti.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

(Los padrinos colocan el lazo que se retirara hasta finalizar la oración de Padre Nuestro.)

Bendición Nupcial

+Padre celestial creador de todo cuanto existe y fuente del Amor, que nos has hecho a tu
imagen y semejanza;

+Señor nuestro Jesucristo, enviado al mundo para nuestra salvación, que nos dejaste a tus
seguidores el mandato de amarnos como tú nos has amado;

+Espíritu Santo dador de vida, que llenas de tu fuerza y sabiduría a cuantos te buscan, y
unes lo que está disperso;
+ Dios nuestro que consideraste a tus santos mártires Sergio y Baco y a tus santas mártires
Felicitas y Perpetua dignos de permanecer unidos hasta la muerte.

BEN+DICE Y CONSAGRA EL AMOR DE ESTAS HIJAS TUYOS N Y N

Únelas en la carne y más aún en el Espíritu, dándoles paz de mente y corazón, para que
superen todas las adversidades de la vida, se amen el uno al otro sin miedo ni medida y
permanezcan juntos hasta el último día de su existencia.
Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén

Celebrante: Como hijos de un mismo Padre nos dirigimos al el con la oración que Cristo
nos enseñó:
Padre Nuestro…
Como Hijos de Dios nos damos el saludo de paz…
(Despues de darse el saludo de la paz se invita a la asamblea a concluir la celebración de
la siguiene manera)
Ya participamos de esta liturgia donde celebramos el Amor, en el nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Podemos ir en paz..
Demos gracias a Dios

También podría gustarte