CHARLA DE SALUD – ABRIL 2023

AGOTAMIENTO POR CALOR VS. GOLPE DE CALOR

Cuando realizamos actividades al aire libre, expuestos a altas

temperaturas, en altura o en espacios confinados, se corre el
riesgo de que nuestro cuerpo no sea capaz de enfriarse a sí
mismo mediante la sudoración, debido a la gran pérdida de
líquidos y la deshidratación; esto puede derivar a que se
padezcan de enfermedades producidas por el calor, las cuales
incluyen: el agotamiento por calor y el golpe de calor.

Síntomas de Agotamiento por Calor:

• Aumento de la temperatura corporal • Taquicardia (corazón acelerado)

(menor a 40°C) • Boca seca y sed intensa
• Sudoración abundante • Náuseas y/o vómitos
• Sensación de calor sofocante • Debilidad y mareos
• Dolor de cabeza
Tratamiento:

Es importante el tratar de inmediato cuando se presenten los síntomas de un agotamiento por calor,
ya que, de no asistirlo a tiempo, se puede agravar. Se debe trasladar a la persona a un lugar más
fresco e hidratar con sales de rehidratación oral y agua, lentamente (a sorbos) y enfriar el cuerpo con
agua o compresas frías.

Síntomas de Golpe de Calor:

Cuando no se trata inmediatamente un agotamiento por calor, el

cuerpo alcanza una temperatura de más de 40°C, y los mecanismos
reguladores del cuerpo quedan superados y entran en shock, pueden
presentarse sintomatología similar a un agotamiento por calor, pero
más graves, acompañado de:

• Fiebre que supera los 40°C • Delirio

• Hiperventilación • Pérdida del conocimiento
• Desorientación • Coma

Tratamiento:

A una persona que padece un golpe de calor NO se le debe dar algo de tomar. Debe ser trasladado
a un lugar más fresco, y enfriar el cuerpo con agua, y/o colocarle compresas de hielo en el cuello, las
axilas y la ingle y llamar inmediatamente a los servicios de emergencia. Debe ser hidratado por vía
intravenosa y recibir el apoyo necesario si se presentan insuficiencias de órganos vitales del cuerpo.

La falta de hidratación es de las principales causas que provocan este tipo

de enfermedades producidas por el calor, por lo que es muy importante dotar
al organismo del agua necesaria, sin esperar a tener sed. Se debe tomar
500 ml de agua (aproximadamente 2-3 vasos) una o dos horas antes de
iniciar la actividad y entre 100 y 200 ml (1 vaso) durante el desarrollo de
esta, cada 30 minutos, de forma sistemática. Se deben reponer los
electrolitos mediante la ingesta de Sales de Rehidratación Oral
(SRO), 200 a 400 ml (1 a 2 vasos) al inicio y a mitad de la jornada diurna (aprox. 400 a 800 ml al día),
los momentos recomendados para tomarlos son después de la charla de seguridad (TBM) y
antes o después de almorzar.