Las bienaventuranzas
Lectura bíblica: Mateo 5: 1-12
Texto para memorizar: Gozaos en aquel
día, y alegraos, porque he aquí vuestro galardón
es grande en los cielos; porque así hacían sus
padres con los profetas (Lucas 6:23).
.
Lección bíblica:
1. Bienaventurados los pobres de
espíritu, porque de ellos es el reino de
los cielos: Dios nos ama cuando somos
humildes y no nos creemos más
importantes que los demás. El reino de
los cielos es como un lugar mágico lleno
de amor.
2. Bienaventurados los que lloran,
porque ellos recibirán consolación:
Cuando estamos tristes, Dios nos abraza
y nos hace sentir mejor. También
podemos consolar a nuestros amigos
cuando ellos están tristes.
3. Bienaventurados los mansos, porque
ellos heredarán la tierra: Ser mansos
significa ser amables y no pelear. Dios
nos promete que compartiremos la tierra
y viviremos en paz.
4. Bienaventurados los que tienen
hambre y sed de justicia, porque ellos
serán saciados: Dios nos quiere justos y
buenos. Cuando buscamos hacer lo
correcto, Él nos cuida y nos da lo que
necesitamos.
5. Bienaventurados los misericordiosos,
porque ellos alcanzarán misericordia:
Dios nos perdona cuando hacemos algo
mal. También debemos perdonar a otros
cuando nos hacen daño, así seremos como
Jesús.
6. Bienaventurados los limpios de corazón,
porque ellos verán a Dios: Cuando somos
sinceros y buenos en nuestro corazón,
podemos sentir a Dios cerca y ver Su amor
en todo.
7. Bienaventurados los que padecen
persecución por causa de la justicia, porque
de ellos es el reino de los cielos: A veces,
hacer lo correcto es difícil, pero Dios nos ama por
eso. Nos promete un lugar especial en el reino de
los cielos.
8. Bienaventurados sois cuando por mi causa
os insulten y os persigan, y digan toda clase
de mal contra vosotros, mintiendo: Jesús nos
dice que no debemos tener miedo de hacer lo
correcto, incluso si algunos no están de acuerdo.
Él nos ama y nos cuida siempre.
Ladrillos de misericordia
Escoge seis bienaventuranzas que más te gustaron para formar una pirámide que promueva lo aprendido en clases
y así construir un mundo donde las personas sientan la presencia del Reino de Dios.