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La UE abre una puerta para que el

campo pueda vender capturas de C02


Las organizaciones del sector esperan que se apruebe
pronto un marco regulatorio y que haya una segunda
renta para los agricultores que acudan a mercado de
emisiones

https://www.laverdad.es/murcia/ue-abre-puerta-campo-pueda-vender-capturas-
20240129004336-nt.html?vli=su-not-s-9&vca=1200-320-
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Manuel Buitrago

Lunes, 29 de enero 2024, 00:43

Los agricultores pueden obtener una segunda renta con la captación de CO2 en sus
plantaciones, una vía de ingresos que puede traducirse en 80 euros por tonelada, según
manifestó recientemente en Murcia el excomisario europeo de Acción por el Clima y la
Energía, Miguel Arias Cañete. Es una vía de negocio que se abre para la actividad
agrícola y que se desarrollará con fuerza los próximos años, ya que la Comisión
Europea está por la labor y trabaja actualmente para elaborar un marco normativo. El
sector agro regional apuesta por aprovechar esta oportunidad y propone incluso que se
abra un mercado específico para algunos productos, como los cítricos.

Arias Cañete destacó que la agricultura es el único sector que fija y secuestra CO2 a la
atmósfera, que actúa como sumidero de carbono, y que dicha función debe ser
retribuida, según prevé el protocolo europeo de La Granja a la Mesa. Para ello es
necesario que haya certificadores y modelos de medición fiables para actuar en el
mercado de emisiones. Existen experiencias piloto para un negocio en ciernes
estrechamente vinculado a las prácticas agrícolas sostenibles y regenerativas. Un doble
beneficio, en definitiva. La mitad de la superficie de la Región es tierra de cultivo
(566.000 hectáreas), con un 67% de secano.

El no laboreo de la tierra para evitar removerla y que se libere el CO2 retenido en el


suelo, así como la instalación de cubiertas vegetales en las calles que separan los árboles
son dos prácticas que contribuyen a la retención de carbono, explican el director general
de Ailimpo y el secretario general de UPA, José Antonio García y Marcos Alarcón,
respectivamente. Existe asimismo un proyecto pionero que lidera la Región de Murcia –
dirigido por la UMU y Coag– para generar compost orgánico con el fin de retener
carbono en suelos de secano, cuyos resultados se presentarán en Valencia, en marzo, en
la cumbre European Carbon Farming.
Certificar las captaciones

Marcos Alarcón no duda de que los agricultores pueden obtener una renta adicional en
el mercado de emisiones y subraya que la UE ya está preparando un marco normativo
para certificar las captaciones con criterios homogéneos, aunque apunta que no irá por
la vía de ayudas directas. «La fiabilidad de las mediciones no está contrastada», señala
en referencia a las empresas certificadoras privadas que ponen en el mercado de
emisiones el CO2 capturado. Estos pasan a unos comercializadores o agregadores que
venden esos derechos a grandes empresas que necesitan reducir sus balances de
carbono.

El compostaje con materia orgánica, el no laboreo y las cubiertas


vegetales son las principales medidas para retener carbono en el suelo

El dirigente de UPA señala que lo que más se aproxima ahora a esta figura son los
ecorregímenes de la PAC, en concreto aquellos que subvencionan al agricultor por la
instalación de cubiertas vegetales, aunque hay que justificar qué tipo de prácticas
agronómicas contribuyen a la captación de dióxido de carbono.

Alfonso Gálvez, secretario general de Asaja-Murcia, señala que su organización


participa en varios proyectos para las buenas prácticas en captura de CO2 y su
medición. «Los agricultores podrían estar beneficiándose de la venta de derechos, pero
ni el mercado de compensación de emisiones ni la certificación están regulados con
garantías, ni por la UE ni por el Gobierno de España. No entendemos cómo preocupan
tanto las emisiones y no se articula en beneficio del sector con la mayor capacidad de
absorción de CO2. Hay mucha hipocresía climática en las autoridades de la UE y sus
estados miembros», apostilla.

El limón quiere su propio plan

El director general de Ailimpo, José Antonio García, explica que, hasta ahora, «la
agricultura está excluida como secuestradora de CO2 en el llamado mercado regulado,
pero existe una última comunicación de la Comisión Europea, de hace un mes, que abre
una puerta». Apunta que otra opción son los mercados voluntarios, en la cual están
trabajando.

UPA, Asaja, Coag y Ailimpo coinciden en que la fijación de CO2 será una
nueva fuente de ingresos para los agricultores

«Estoy convencido de que dentro de poco el agricultor obtendrá una doble renta: una
por la venta de los limones y otra por la venta de los derechos de crédito asociados a sus
limoneros. Ojo, por el mero hecho de ser productor no se es titular de derechos de
crédito en un mercado voluntario serio o de alta calidad. Hay que cumplir el principio
de adicionalidad, es decir, ser capaz de demostrar que se hacen prácticas de cultivo que
permiten secuestrar más CO2. Por esa razón, uno de los proyectos estrella de Ailimpo
es fomentar la agricultura regenerativa, que es un conjunto de prácticas que mejoran la
calidad del suelo, su retención de agua, su biodiversidad y, en última instancia, permiten
que el suelo secuestre más CO2», añade García.

Considera que esa doble renta «vendrá pronto, ya que nuestros clientes, como los
supermercados, tienen que compensar sus emisiones, y lo coherente es que compren
créditos de CO2 que estén asociados a su cadena de suministro. En definitiva, hay una
gran oportunidad si se hace de forma seria y profesional». Ailimpo apuesta por «una
acción disruptiva para crear ofertas de crédito de CO2 y fomentar un mercado
voluntario específico para los cítricos». Para ello, cuenta con «un bosque de 14 millones
de limoneros para el secuestro de CO2 a largo plazo», indica García.

A diferencia de las especies de secano y de cultivos permanentes de almendro, olivo,


cítricos y frutales, las producciones hortícolas tienen menos oportunidad porque se
consideran emisoras de CO2.

1. La Región lidera un proyecto para 'cultivar' y retener carbono en suelos de


secano

«La Región de Murcia se ha convertido en un referente para la adaptación al cambio


climático de los cultivos de secano y para la fijación de CO2; está perfectamente
preparada», señala Francisco Gil, de Coag, que pone como ejemplo el esparto como
gran captador de carbono. «Nos hemos adelantado al Pacto Verde Europeo. Por fin se
ha abierto un debate sobre las compensaciones, ya que falta regulación». Gil se refiere
al proyecto Life AmdryC4 que su organización agraria ha desarrollado en los últimos
años con la catedrática de Edafología y Química Agrícola de la Universidad de Murcia,
María José Martínez, el cual se considera pionero a nivel europeo y se ha convertido en
una fuente de consulta para otros países y organismos, así como para la propia política
de la CE. El trabajo, financiado por Bruselas, se expondrá en marzo en la cumbre
European Carbon Farming.

El proyecto colabora en pos de la neutralidad climática en el año 2050, y con la


Iniciativa 4 por 1000 para aumentar el carbono orgánico del suelo. Promueve la
mitigación del cambio climático a través del gran potencial de los suelos agrícolas como
sumideros de carbono, especialmente de secano. También busca combatir la
desertificación y la erosión; así como fijar población en el entorno rural.

«Objetivos superados»

El proyecto se ha desarrollado en cuatro zonas de la Región: Xiquena y Nogalte


(Lorca), El Moralejo (Caravaca) y Corvera. En ellos se han realizado siete ciclos
completos de compostaje en una planta prototipo, con un total de 694 toneladas de
materia orgánica tratada para cultivar y retener CO2.

Se estima que la aportación de carbono al suelo de todas las fincas para la mitigación
del cambio climático es de 1.781 toneladas de CO2 con un valor global de 80.145 euros
durante el periodo de ejecución del proyecto. La tasa media de CO2 secuestrada ha sido
de 27 toneladas por hectárea, con un valor de 1.214 euros. «Los objetivos del proyecto
se han superado con creces en todas las fincas», señala el informe.

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