Luis-P.

Artola

El calentamiento global atenta contra el pingüino rey

El cambio climático amenaza la vida y alimentación del pingüino rey. Es la

conclusión a la que ha llegado un estudio publicado en la revista Nature
Climate Change en cuya investigación han participado expertos de las
Universidades de Estrasburgo y Oslo.

El “rey” de la Antártida sufre los cambios en su entorno

Es un hecho que la emisión de gases de efecto invernadero contribuye de

forma decisiva al cambio climático y este hecho no sólo afecta a la
humanidad sino a toda la vida en la Tierra. El pingüino rey ha pasado a ser
una de las especies más amenazadas por las modificaciones en el medio
ambiente ya que los cambios que enfrentan en el comportamiento de su
alimentación contribuirán a la desaparición de hasta un 70% de esta ave
del océano Antártico si no son capaces de encontrar nuevos hábitats para
tener las condiciones necesarias para su reproducción.

Y es que, uno de los efectos adversos del calentamiento global, es el

desplazamiento de la segunda especie más grande de pingüino hacia el
sur, lo que comporta la crianza de su descendencia lejos de su
alimentación principal, las colonias de peces y pulpos de los que se nutren.
De todas formas, a pesar de que la tendencia natural de los animales de
climas fríos es la de dirigirse hacia zonas más australes cuando sus
hábitats experimentan subidas de temperatura, el pingüino rey se

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comporta de manera diferente. Esto es porque esta especie se reproduce

y cría únicamente en las islas del océano Antártico libres de hielo, lo que
dificulta su movilidad en caso de necesidad de migración al tratarse de
ecosistemas altamente fragmentados.

El obligado desplazamiento al sur comprometerá su alimentación

Por tanto, si no se toma ninguna medida para limitar el calentamiento, la

especie podría desaparecer en un futuro próximo. No obstante, en un
estudio realizado en la Universidad de Ferrara, se ha podido conocer que
el pingüino rey logró sobrevivir a otros grandes cambios
medioambientales, lo que habla a favor de una enorme capacidad de la
especie de explorar de manera eficaz el océano Austral para localizar los
mejores refugios. De todas formas, el cambio climático no se lo pondrá
fácil a este pingüino ya que las alteraciones en sus condiciones de vida
harán necesarias migraciones más largas para encontrar comida.

Y es que, a pesar del Acuerdo del clima de París, nos quedaremos lejos de
cumplir el objetivo de limitar la subida de la temperatura del planeta entre
1,5 y 2 grados. De hecho, y sólo en nuestro país, el Gobierno sigue
fomentando y apoyando el uso del petróleo, el carbón y el gas, lo que
dificulta el desarrollo de las energías renovables.