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RELEVANTE
ASUNTO:
¿La decisión del juez de familia de rechazar la demanda de alimentos,
regulación de visitas, custodia y cuidado personal del menor, presentada
por el defensor de familia a partir del incumplimiento de la regulación de
visitas de la madre, argumentando falta de competencia, vulnera el derecho
al debido proceso de la accionante?
Tesis:
«Pronto advierte la Corte, que lo opugnado se avalará, pues en efecto, el
“rechazo de la demanda” incoada por el Defensor de Familia del Centro
Zonal Suroriental del I.C.B.F. desconoce las reglas consagradas en la ley
para esa actuación.
1.1. Si bien al tenor del artículo 90 del Código General del Proceso el Juez
está autorizado para “rechazar la demanda por falta de competencia”, que
fue la causal aducida por el fallador atacado, lo cierto es que las razones en
que la sustentó nada tienen que ver con tal circunstancia.
Ello, porque la ausencia de “competencia” sólo se configura, cuando
conforme a las pautas establecidas en ese estatuto para la distribución de
los pleitos entre las autoridades que integran la especialidad civil y de
familia de la jurisdicción ordinaria, el juez no tiene facultades para dirimir el
caso. Y en ese sentido, es claro que al tenor de los numerales 3 y 7 del
artículo 21 de dicha Codificación, el Juzgado Décimo de Familia de Medellín
le incumbe asumir el conflicto que se sometió a su conocimiento.
2.- Por otra parte, tampoco había lugar a retornar las diligencias a dicho
organismo, para que se abstuviera de “fijar obligaciones” y sólo expidiera
“acta de no acuerdo”, so pretexto que las cuestiones invocadas en la
“demanda” fueron solventadas en otros decursos, por lo siguiente:
Además, por prescripción del numeral 2° del art. 82 de la Ley 1098 de 2006,
al “Defensor de Familia” le corresponde “adoptar las medidas de
restablecimiento (…) para detener la violación o amenaza de los derechos de
los niños, las niñas o los adolescentes”.
"Y es que, dígase una vez más, no hay manera de concebir con sana lógica
que el “hecho” de que el “Comisario o Defensor de Familia” omitan “señalar
cuota provisional” se erija en motivo suficiente para impedir el impulso de la
“acción judicial” que justamente busca zanjar provisoria y/o definitivamente
el conflicto. Aceptar tal cosa sería tanto como sostener que si la pugna no se
resuelve momentáneamente en la etapa “administrativa” el interesado
tampoco puede provocar la solución en la “jurisdiccional”, lo que obviamente
no refleja un ejercicio intelectivo racional ni, por tanto, respetuoso de los
privilegios esenciales de los niños, niñas y adolescentes" (CSJ STC16649-
2019).
[...]
3.- Finalmente, debe decirse, que todo lo anterior descarta los argumentos
del censor, pues está clara la vía de hecho en que incurrió el Juzgado
Décimo de Familia de Medellín, que el defecto lesiona los intereses de su
hijo, quien es “sujeto de especial protección”, que la ayuda se abre paso no
por las afirmaciones de su contradictora, ni mucho menos por su calidad de
“madre o mujer”, sino porque se comprobó un desafuero que amerita ser
conjurado por esta senda.
Tesis:
«(...) que en la “demanda” el Defensor de Familia, se refiera a “fijación de
visitas, custodia y alimentos”, y no a “revisión”, es irrelevante, de cara a los
“requisitos” contemplados en el artículo 80 del Código General del Proceso.