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LECTURA BÍBLICA

Nos disponemos a la escucha atenta de la lectura del santo evangelio de


San Mateo capítulo 28, versículos del 17 al 20.
"17. Cuando vieron a Jesús, se postraron ante él, aunque algunos todavía
dudaban. 18.Jesús se acercó y les habló así: «Me ha sido dada toda
autoridad en el Cielo y en la tierra. 19.Vayan, pues, y hagan que todos los
pueblos sean mis discípulos. Bautícenlos en el Nombre del Padre y del
Hijo y del Espíritu Santo, 20.y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he
encomendado a ustedes. Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin de
la historia.»"
REFLEXION:
Hoy ante la imagen bendita del Señor de los Milagros, que es el mismo
Jesús, el Hijo de Dios que murió en la cruz, para que cada uno de nosotros
tengamos vida en abundancia, tenemos que reconocer su amor y
misericordia en el evangelio de Mateo, donde les dice a sus discípulos “Me
ha sido dada toda autoridad en el Cielo y en la tierra”, esta frase, nos
confirma la autoridad de Jesús que ha Resucitado, ha vencido a la muerte
al pecado. Por ello envía a sus discípulos de ayer y de hoy a una triple
misión:
La primera: “Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis
discípulos”, nos pide anunciar a Jesús a todos los no conocen, su amor,
misericordia, obras y enseñanzas.
La segunda: “Bautícenlos en el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo”, el que crea y se convierta, debe de ser bautizado, como Jesús lo
hizo en el río Jordán. Ser bautizado en el nombre del Santísima Trinidad,
para ser Hijos de Dios, templos del Espíritu Santo.
La Tercera: “Enséñenles a cumplir todo lo que yo les he encomendado a
ustedes”, es decir, vivir según las enseñanzas del evangelio y voluntad de
Dios, Padre Eterno.
La triple misión de ser discípulos para llevar almas a Cristo, requiere no
sólo de decir yo creo, sino de la voluntad y del compromiso de ser
predicadores y evangelizadores que den testimonio coherente con
palabras, gestos y acciones de las obras maravillosas que ha realizado en
nuestras vidas y en la de nuestros semejantes.
Que el Espíritu Santo nos conceda los dones que necesitamos para ser sus
discípulos y misioneros.
PETICIONES: Confiando en el amor y misericordia del Señor de los
Milagros, le presentamos nuestras suplicas
1. Por todos los enfermos del mundo, en especial por los de nuestra zona
para que el Señor de los Milagros los mire con ternura y su misericordia
se derrame en ellos, liberando todas las ataduras que han generado sus
dolencias; sanándolos corporal, emocional y espiritualmente.
Roguemos al Señor de los Milagros
Rpta: Te los pedimos Señor de los Milagros

2. Para que el Señor de los Milagros en este recorrido procesional, nos


ilumine y ayude a acoger nuestra misión de ser sus discípulos y
misioneros que demos testimonio coherente con nuestras vidas y así se
vaya desterrando toda clase de violencia que genera muerte y
sufrimiento.
Roguemos al Señor de los Milagros
Rpta: Te los pedimos Señor de los Milagros

3. Por todos los niños abortados, abandonados, maltratados, para que,


fijando nuestra mirada en la imagen del Señor de los Milagros,
comprendamos que somos creados por amor, para dar amor y todo acto
contrario, en especial contra los niños, no responden al plan de Dios y
así como la sangre de Abel que fue asesinado por su hermano Caín,
clamó la justicia de Dios, todo acto de violencia clama justicia. Que Dios
justo juez, haga justicia en el mundo.
Roguemos al Señor de los Milagros
Rpta: Te los pedimos Señor de los Milagros

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