Historia del Cooperativismo.

Los lazos que unen a estos diferentes tipos de cooperativas son un conjunto de 7
principios básicos que se han mantenido de una forma u otra durante más de 175
años. Detrás de estos principios hay una historia. Una historia sobre grandes
necesidades, ayuda mutua y esfuerzo democrático. Esa historia es la historia de
los pioneros de Rochdale. En realidad, su nombre completo es Rochdale Society
of Epochal Pioneers, un grupo de 28 hombres que se unieron en 1844. La mayoría
de ellos eran comerciantes especializados en la región de Lancashire en
Inglaterra. Al menos la mitad de ellos eran tejedores que hasta entonces se
ganaban la vida con su oficio. Pero una vez que comenzó la mecanización del
trabajo como resultado de la revolución industrial, la mayoría de los trabajadores
especializados se vieron sumidos en la pobreza como resultado de la pérdida de
su trabajo. Ante estas dificultades, este pequeño grupo decidió unirse para abrir su
propia tienda y venderse mutuamente alimentos que de otra manera no podrían
pagar. Cada uno de ellos logró ahorrar y ganó una libra esterlina en la época para
invertir juntos y luego abrir su propia tienda el 21 de diciembre de 1844. Ahora
bien, este grupo había intentado cooperar antes y fracasó. Lo que aprendieron de
esta experiencia fue que era una buena idea proponer algunos principios clave
para guiar su esfuerzo y que podrían ser el ingrediente secreto para que su nuevo
negocio tuviera éxito. Para el 1900, el movimiento cooperativo había llegado a
más de 1.400 cooperativas que cubrían prácticamente todas las partes de
Inglaterra. Los mismos principios han sobrevivido para convertirse en una parte
esencial de prácticamente todos los movimientos cooperativos del mundo desde
entonces. Hoy en día, continúan definiendo el qué y el por qué de las
cooperativas. Así que aquí están, y aquí están sus principios que repasaremos
brevemente. Libre adhesión. Las cooperativas están abiertas a todos y a todos los
que puedan hacer uso de la cooperativa y estén dispuestos a aceptar cualquier
responsabilidad que respalde la membresía, independientemente de la raza,
religión, género o circunstancias económicas. Número dos. Control democrático
de los miembros. Solo los miembros y/o los miembros electos toman las
decisiones que rigen la cooperativa. Estas decisiones se basan en el
consentimiento de un miembro o en un voto. Participación económica de los
miembros. Los socios contribuyen de forma agitada y controlan el capital de la
cooperativa. El acuerdo es que al menos parte de ese capital se mantiene común
entre los propietarios. Autonomía e independencia. Las cooperativas son
autónomas, autónomas y autogestionadas controladas por sus miembros.
Educación, capacitación e información. Esto garantiza que las decisiones
democráticas sean decisiones informadas y que los miembros y sus
representantes tengan la información y los conocimientos necesarios para
garantizar el éxito de la cooperativa. Cooperación entre cooperativas. Este
principio es un punto importante para que las cooperativas puedan trabajar, crecer
y asociarse para satisfacer mejor las necesidades de la comunidad. Y finalmente,
la preocupación por la comunidad. Las cooperativas y sus miembros están
comprometidos a trabajar para el desarrollo sostenible de sus comunidades.