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1. Técnicas del modelo desde la Asociación libre – Dibujo libre.

La asociación libre es el método descrito por Sigmund Freud como la «regla


fundamental», constitutiva de la técnica psicoanalítica y que consiste en que el
analizado exprese, durante las sesiones del tratamiento, todas sus ocurrencias,
ideas, imágenes, emociones, pensamientos, recuerdos o sentimientos, tal cual
como se le presentan, sin ningún tipo de selección, ni estructuración del discurso,
sin restricción ni filtro, aun cuando el material le parezca incoherente, impúdico,
impertinente o desprovisto de interés.

Mientras que la instrucción que el paciente (o analizando) recibe es


sorprendentemente sencilla («hable de todo lo que se le ocurra, sin filtrar ni
seleccionar»), atenerse a la regla suele resultar algo bastante más complejo, que
requiere un cierto ejercicio y que establezca primeramente una relación de
confianza entre el analista y su paciente. No resulta muy fácil dar libre curso a las
asociaciones de ideas porque, por una parte, se trata de una práctica
desacostumbrada (en ningún otro espacio social se espera que las personas
hablen sin estructurar el discurso, prescindiendo además de seleccionar
cuidadosamente los contenidos) y, por otra, se trata de vencer fuertes resistencias
al análisis, conscientes e inconscientes.

En el caso de los niños, esta regla no tiene aplicación, principalmente porque no


estarían aún en condiciones de asociar libremente, al menos no a través del
discurso verbal. Por eso, en el psicoanálisis con niños, sobre todo con los más
pequeños, es la libre puesta en escena, a través del juego, lo que desempeña el
rol fundamental en cuanto a aportes de contenidos inconscientes para el análisis.
Respecto de este punto Melanie Klein y Anna Freud, dos psicoanalistas que
trabajaron especialmente en el área infantil, tenían visiones muy contrapuestas:
mientras la primera consideraba el juego un equivalente perfecto de la
asociación libre, la segunda discrepaba totalmente de este enfoque.1

El método de la asociación libre se ha usado también en contextos no clínicos y


extrapsicoanalíticos o en áreas que no tienen ninguna relación con lo
terapéutico.
Por ejemplo la conocida técnica de lluvia de ideas (Brainstorming) es una muestra
de ello. También existen aplicaciones y derivados de la técnica en tests de
selección de personal, en estudios de mercado o en técnicas de publicidad.
Por otra parte, la asociación libre constituye el fundamento de muchos tests
proyectivos de diagnóstico psicológico cuya respuesta no es estructurada, como
por ejemplo el test de Rorschach o el Test de Apercepción Temática (T.A.T).

2. Técnicas para interpretación de los mecanismos de defensa, Lapsus –


Actos fallidos y Catarsis.

ACTOS FALLIDOS

Sigmund Freud, dio nombre a este fenómeno cuya traducción literal de alemán a
español es la de acto fallido. También podemos referirnos a ellos bajo los nombres
de parapraxis o lapsus.

Ahora bien, ¿qué es esto que denominamos acto fallido? Ellos se producen
cuando decimos algo que, conscientemente, no teníamos intención de decir o
incluso la intención que expresamos es contraria a la que buscábamos
comunicar.

Desde el Psicoanálisis se entiende a estos fenómenos como una expresión de


deseos reprimidos, o (al producirse un olvido) un intento por evitar hacer
consciente algo que se reprimió.

ORIGEN

Podríamos decir que los actos fallidos son un engaño a la consciencia para dejar
traslucir, de forma encubierta, un deseo o intención reprimida. El inconsciente en
ellos burla la estructura del aparato psíquico, traspasando la censura y dejando
ver sus intenciones disfrazadas.

Por eso se manifiestan sin ser controlados por la propia voluntad del sujeto que,
conscientemente, busca alejar esos recuerdos de su memoria.

Los actos fallidos, para la teoría freudiana, implican un logro: permitiendo aflorar
en la consciencia pensamientos inconscientes, representan un camino que
marca cómo llegar a la causa del malestar de un paciente.

Siguiendo las pistas inconscientes, los psicoanalistas buscan curar, por eso toman
provecho de los actos fallidos para tratar a sus pacientes.
Tipos de actos fallidos

Los actos fallidos no se manifiestan de una única manera, sino en varias formas.
Algunas de ellas son los deslices verbales, gráficos, de compresión lectora o
auditiva, errores en la acción y los olvidos simbólicos.

Deslices verbales

A los que también se refiere como lapsus linguae, suceden cuando una persona
dice algo mientras que, en realidad, buscaba decir otra cosa. Esto se interpreta
como una verdad, una manifestación de un pensamiento inconsciente que
buscaba aflorar.

Por ejemplo, si un empleado en lugar de dirigirse a su empleador como jefe, lo


insulta, estamos frente a un desliz verbal que manifiesta los verdaderos
sentimientos de este trabajador a su superior.

Deslices gráficos

También conocidos como lapsus manus. Son actos fallidos que se producen en
manifestaciones gráficas como la escritura o el dibujo. Al igual que en el caso
anterior, implican un intento de un deseo inconsciente por aflorar, burlando la
censura.

Actos fallidos de comprensión lectora o auditiva

A diferencia de los otros dos deslices anteriores, estos suceden cuando leemos o
escuchamos algo equivocadamente. Suelen darse cuando enfrentamos
situaciones de estrés o tenemos un asunto muy presente en nuestra mente. Puede
también suceder un desliz en la audición en caso de creer oír algo cuando no se
nos dijo palabra alguna.

Equivocaciones en la acción

Tienen lugar cuando, con la intención de realizar una acción determinada, un


individuo termina por realizar otra totalmente distinta de manera inconsciente.
Sucedería por ejemplo si, en lugar de realizar una llamada laboral, llamamos a un
ser querido con el que hace mucho tiempo no hablábamos.
Olvidos simbólicos

También llamados lapsus memoriae. Se tratan de olvidos poco casuales en los


que no recordamos realizar algo que buscábamos evitar, o cuando evitamos
inconscientemente traer a nuestra mente algo que nos resultaría perturbador.

Freud, con el caso clínico de “Olvido de nombres propios”, narra un viaje en tren
en el que, buscando recordar el nombre del pintor Signorelli, venían a su mente
los nombres de los artistas Botticelli y Boltraffio.

En un análisis profundo de lo que le sucedió, él comprende que se trataba de un


intento de evitar recordar el suicidio de uno de sus pacientes relacionado con su
función sexual pues, por vivencias previas, el nombre Signorelli lo había asociado
a las palabras “sexualidad y muerte”. Al final resulta que, incluso los nombres de
Boticelli y Boltraffio también se vinculaban con el fallecimiento del paciente de
Freud, solo que de una forma menos evidente.

Extravíos

Según la teoría Psicoanalítica, extraviar un objeto puede implicar un intento por


no recordar una situación que nos perturba y, justamente, el objeto extraviado
nos remitiría a ella. Como el resto de los actos fallidos, son un intento de proteger
nuestra psiquis.

Conclusión

Como pudimos ver, los actos fallidos son un intento del inconsciente por burlar la
censura y dejar aflorar aquello que nos perturba de forma encubierta.

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