CONTRATO DE CÍRCULOS DE AHORRO

El sistema del contrato de ahorro previo para fines determinados implica contribuciones
periódicas de suscriptores para adquirir un bien específico. Una vez se cumplen las
condiciones acordadas, como sorteos o licitaciones, el bien se entrega al suscriptor. La
empresa establece el número necesario de participantes mediante cláusulas
contractuales. En términos legales, se debate si este contrato es un intercambio, dado
que una parte aporta dinero con la expectativa de recibir un bien como contraprestación.
SISTEMA DE AHORRO
El sistema de ahorro ofrece una perspectiva que destaca una finalidad comercial que va
más allá del contrato mismo, justificando así la formación y operación de una red. Los
suscriptores forman parte de grupos organizados por la empresa, cuyos fondos son
gestionados por esta última.
Existen dos tipos de sistemas: uno que busca la asignación de bienes o servicios y otro
cuya meta es obtener un préstamo en efectivo. La ventaja clave del sistema de ahorro
radica en que la empresa recibe pagos antes de entregar el bien, lo que altera el ciclo
económico de manera significativa. Esto reduce los riesgos al ajustar la producción a
pedidos ya confirmados, minimizando la posibilidad de una sobreproducción.
RÉGIMEN JURÍDICO
El régimen jurídico de este sistema se apoya en la protección del equilibrio entre las
prestaciones, aplicando normativas del Código Civil que abordan el abuso del derecho,
la lesión y la excesiva onerosidad sobreviniente. Estas normas buscan asegurar que las
partes involucradas mantengan un equilibrio justo en sus compromisos y transacciones.
OBLIGACIONES DE LAS PARTES:
DEL SUSCRIPTOR
1. El suscriptor se obliga a pagar periódicamente a la administradora una suma de
dinero representativa del valor del bien.
2. Firma un contrato de garantía prendaria sobre el bien, un contrato de seguro de vida,
un contrato de seguro del bien.
3. Colabora al sostenimiento del grupo a través del pago de un fondo de morosidades.
4. Permanecer en el grupo hasta el cumplimiento del término de su constitución y su
conclusión por vencimiento del plan de cuotas.
DE LA SOCIEDAD ADMINISTRADORA
1. El organizador se obliga a entregar el bien en las condiciones pactadas una vez que el
suscriptor las reúne mediante licitación o sorteo.
2. Recaudar el ahorro que el suscriptor deposita a los fines del cumplimiento del
contrato, e integrarlo a la masa del grupo.
3. Administrar con prudencia los bienes cuyo depósito se les encomienda.
4. Realizar los sorteos y licitaciones, y adjudicar el bien objeto del contrato a los
beneficiados.
5. Deber de informar todas las cuestiones relativas al contrato.
6. Abstenerse de modificar las condiciones contractuales o de cumplimiento del
contrato, durante su vigencia.
CLAUSULAS ABUSIVAS:
Cuando un contrato se establece a través de cláusulas generales y existe una adhesión
sin posibilidad real de negociación, se debe interpretar de manera favorable para la parte
adherente, declarando como abusivas aquellas cláusulas que contravengan la buena fe y
el ejercicio regular de los derechos.
Los contratos deben ser redactados en el idioma nacional y en condiciones equitativas
para ambas partes. En el marco legislativo actual, este tipo de contrato puede calificarse
como un contrato de consumo cuando el adquirente lo celebra para su uso final. Esto
significa que se aplicarán normativas específicas de protección al consumidor en caso
de que se identifiquen cláusulas abusivas o prácticas comerciales desleales.
Por lo tanto regirán las clausulas correspondientes de la ley del consumidor:
ARTICULO 37. — Interpretación. Sin perjuicio de la validez del contrato, se tendrán
por no convenidas:
a) Las cláusulas que desnaturalicen las obligaciones o limiten la responsabilidad por
daños;
b) Las cláusulas que importen renuncia o restricción de los derechos del consumidor o
amplíen los derechos de la otra parte;
c) Las cláusulas que contengan cualquier precepto que imponga la inversión de la carga
de la prueba en perjuicio del consumidor.
La interpretación del contrato se inclina hacia el beneficio del consumidor. En
situaciones donde haya incertidumbre sobre las obligaciones, se considerará aquella que
sea menos perjudicial para él.
Cuando el oferente no cumple con el deber de buena fe durante la etapa previa o en la
celebración del contrato, o infringe normativas de información o competencia leal, el
consumidor tiene derecho a exigir la nulidad total o parcial del contrato o de ciertas
cláusulas. Si el juez declara la nulidad parcial, simultáneamente procederá a
complementar el contrato si es necesario.
Ahora, cuando una empresa adquiere bienes mediante un sistema de ahorro para
integrarlos en su proceso productivo, el contrato puede ser de adhesión, pero no se
considera un contrato de consumo. En ambos casos, ya sea de consumo o de adquisición
para producción, se puede cuestionar el abuso de las cláusulas presentes en el contrato,
incluso si cuentan con autorización de la autoridad de aplicación, sin que esta
aprobación impida su impugnación.
Referencias:
AA. 2022. Contrato de Círculos de ahorro - Concepto y Características. studocu.
(Disponible en: https://www.studocu.com/ec/document/universidad-central-del-
ecuador/legislacion/contrato-de-circulos-de-ahorro-concepto-y-caracteristicas/22261528
. Recuperado el: 28/12/2023).